LA ANALOGÍA DEL SER

LA ANALOGÍA DEL SER

Hoy se conoce generalmente como analogía a

la propiedad de un concepto que, al aplicarse
a distintos entes o regiones del ser,
experimenta un esencial cambio semántico,
sin que por ello pierda la unidad de su
contenido..
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Todo ser,
trátese de un objeto material,
de un fenómeno
o de una idea,

es parecido a otro y, al mismo tiempo, es

distinto de él.
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DEFINICIONES:
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a). Se llama Unívoco al concepto que puede

atribuirse de una manera absolutamente
idéntica a todos los sujetos en los que se está
realizando;

por ejemplo, al decir hombre, se dice

absolutamente en el mismo sentido a todos los
individuos de la especie humana.
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b). El término Equívoco, en cambio, se aplica en

un sentido totalmente diferente para cada uno
de los sujetos en los que está realizado;

Por ejemplo, al decir Firuláis el perro, se refiere

al mejor amigo del hombre; pero el Perro, o
Can, habla de una constelación celeste.

El Equívoco no es jamás un concepto, sino un

nombre que oculta conceptos simplemente
distintos.
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c). La expresión latina «analogía entis»

(literalmente: analogía del ente, pero

generalmente traducida por analogía del ser)

significa: Todo lo que participa del ser, pero de

modo distinto, de suerte que nuestro
conocimiento de lo que es, se expresa cada vez
por un distinto decir es.
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d). Exclusión de la univosidad:

El género y la especie, son nociones unívocas

porque no se diferencian con las de sus
inferiores.

El ser no puede ser unívoco porque no se dice de

sus inferiores en un sentido absolutamente
idéntico.
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e). Exclusión de la equivosidad:

El ser no es tampoco un término equívoco, es un

concepto auténtico, posee cierta unidad relativa
resultante de que el concepto de ser expresa,
en forma universal, algo de común a todos los
seres diversos.

La misma naturaleza de las cosas existe en lo

real como singular, y en el concepto objetivo
como universal.
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El ser es análogo:

La analogía del ser resulta de la doble exclusión

de la univocidad y de la equivocidad.

El concepto de ser es una noción que se aplica a

seres diversos en un sentido a la vez diverso y
relativamente el mismo.
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El ser es análogo:

Un mismo término se predica análogamente de

dos realidades cuando se atribuye a cada una
de ellas de manera en parte igual y en parte
diversa.

Es lo que sucede con el ente; se le llama ente a

todo lo que «es», pero no se refiere a todo de
la misma forma.
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El ser es análogo:

Por ejemplo: Si ente se atribuye a Dios y a las

criaturas de modo análogo, es porque entre el
Creador y lo creado se da cierta semejanza
unida a una no menos clara desemejanza:

Dios y las criaturas son (semejanza), pero Dios

es por esencia, mientras que las criaturas son
por participación (desemejanza).
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a) Unidad imperfecta de la noción de ser:

La unidad de la noción de ser es la de una

esencia real abstracta que contiene realmente
en acto y de una manera confusa, toda la
diversidad esencial de los seres con la que este
concepto se identifica;
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a) Unidad imperfecta de la noción de ser:

O sea que la noción de ser, aunque incluye

vagamente una idea de diversidad, en cierto
modo hace abstracción de ella. Esta unidad de
la noción de ser es, pues, imperfecta, informe y
confusa.
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b) Analogía de proporcionalidad:

Es la analogía que resulta de la similitud que

cosas esencialmente diversas tienen entre sí en
razón de su relación a la existencia.

La unidad de la noción de ser es propiamente

una unidad de proporción o semejanza.
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b) Analogía de proporcionalidad:

Ejemplo:

Esencia de la sustancia = Esencia del accidente

Ser de la sustancia Ser del accidente.
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b) Analogía de proporcionalidad:

Entonces, el ser es una noción análoga, en

cuanto significa una semejanza de relaciones
entre la esencia y la existencia de los inferiores
del ser.
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c) Analogía de atribución:

Si se compara la sustancia y el accidente desde

el punto de vista del esse existencial, se dirá
que sólo la sustancia posee primaria y
propiamente la existencia . . .
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c) Analogía de atribución:

. . . mientras que el ser se atribuye sólo

secundariamente o por atribución a los
accidentes de la sustancia, a los cuales
conviene existir en un sujeto.
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c) Analogía de atribución:

Entonces, el ser (esse) no sólo es atribuido

analógicamente a lo que se llama sus inferiores,
sino que también lo es a sus propios principios
constitutivos: el acto y la potencia.
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Reyes Fernández Lobato

Jesús Figueroa Lucero

Bibliografía:
Régis Jolivet, Tratado de Filosofía III, Metafísica, Ediciones Carlos
Lohlé, 5ta. Edición, págs. 184 -186.

Tomás Alviva, Luis Clavell, Tomás Melendo, Metafísica, EUNSA,

Pamplona, 1993, págs. 161 – 162.