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El pensamiento salvaje por CLAUDE Lévi-Strauss . ~ Fonbo DE Cuttura EcostMica MEXICO-ARGENTINA-BRASIL-COLOMBIA-CHILEESPANA ESTADOS UNIDOS DE AMERICA-GUATEMALA -PERU-VENEZUELA, Primera edicin en francés, 1962 Primera ediién enespafol (ECE, México), 1964 Primera reimpresiin(FCE,Colombia), 1997 Titulo orginal: La pensée sauvage (© 1962, Librairie Plon, Paris D.R.© 1964,Foxpo pe Cuctura Bconcnaca DIR © 1988, Foxpo pe Curmura Ecovowica S.A. De CY. (Carretera Pieacho-Ajusc0 227; 14200 México, D.F. DIR. © 1997, Foxoo px Cuunuma Econsnaca 1D (Carrera 16 No, 80-18, antaféde Bogots, D.C, Colombia ISBN 958-38-0054-6 Impreso en Colombia No hay nada como lo salvaje, los campos sony la gente de" provincia para cali + fone stn autos en todo los sentido: tabi. ‘anno Hegam del Pensamieno a! Teche, nt ‘enti las come comple H, de Balzac, Le Cabinet des antiques PRELOGO sre lio forma vn tod, pero lx phobledias que eh ee diacyten guardan una etrecha relalgp, <0 lop ‘que cxaminamos tds répidamente en una abt deen temente tiulads Le tolémime avjoudind (POE. Pari 1962). Sin pretender exigtle al lector-qae' aa pers cece lew hace to, Uicwaccilodyamacetea cate se corte, el olor, Tn darera y otron exaceres. de ia'mima clase” Docenar'y doceras de peces Y te conthat poe nombres dstntvon, y se 1 conoce tambien. por sus caracteritics Props Sus costimbres ls diferenclas.sexuales eh el feno de cada date... (mith, p.180) Habitantes de una regién desértica de la California del Sur, en la que hoy logran subsistir solamente unas ccuantas familias de blancos, varios miles de indios cox 1 También, 4g clases de hongos comestibles (oe. ety ast) y em plano teenoldgico, go tipor de flechas dif ences (Ud PP 265-268). 8 LA GIENGIA DE LO CONGRETO hhuilla no Hegaban a agotar los recursos naturales; vivian fen Ia abundancia. Pues, en este tervtorio aparente mente dejado de la’ mano de Dios, conoctan no menos de 6) plantas alimenticiss y otras 28, de propiedades narcétieas, etimulantes 0 medicinales. (Barrows). Un Solo informante seminola identifica 250 especies y vax Fiedades vegetales (Sturtevant). Se han contado 350 plantas conocidas por los indios hopi, y mas de 500 Por los navajos. El léxico botinico de tos. subanu ue viven en cl sur de las Filipinas, sobrepasa de til terminos. (Frake) el de los hanunéo se acerca a Jos 20002 ‘Trabajando con un solo informante det Gabén, Sillans ha publicado recientemente un reper- torio etno-botinico de cerca de 8 000 términos, repar tidos entre las lenguas o dlalectos de 12 0 15 tibus adyacentes. (Walker y Sillans) Los resultados, inéditos fen su mayor parte, que han objenido Marcel Griawle J sus colaboradores en el Sudin, prometen ser igual ate impresionant ‘extremada familiarizacién con el medio biolég ‘o, la apasionada atencién que le prestan, los conoci: Imientos exactos a 4 vinculados, a menudo han im. preionado 4 on inveigadres, por cuanto denotan Zetitudes y preocupaciones que distinguen a los indige: hhas de sus visitantes Blancos) Entre los indios tewa de Nuevo México: Se observan las diffenciss menvdas.. venen nombres para Gesignaf>a. todas las especies de tonne a en aha bin ee If dierend vb y, entre fos im individu que no hublee reeibido en- frenamiento seria incapar de. diunguilas. En Serdad, no babria ninguna dificultad en traduelr tr tratado. Ge bordnica a la Tengua ceva. (Rob bins, Harrington y Free Marvecd, pp. 9, 12) 2 Vea, infra, pps a8, #8 LA GIENCIA DE LO CONCRETO 9 En un relato apenas novelado, E. Smith Bowen ha narrado amenamente su confusién cuando, desde su Tegeda a una tribu africana, quiso comenzar por apren- der la lengua: a sus informantes les parecié lo mis natural del mundo, en la etapa elemental de su enseBan- ‘m reunit un gran nimero de expecimencs botinieos que iban nombrando a medida que se los presen aban, pero que Ja investigadora era incapaz de iden- tifiear, no tanto por raz6n de su naturalera exéticn, como porque ella. jams se habia interesado en las Fiquezas y Ia diversidad de) mundo vegetal, en tanto aque Tor indigenas daban por supuesta tal curiosidad. Serene nen eS Serta genie pea ere ees ra See Pelee ir | gems ace, eee fugar en el que cals planta, siveste © So ge eeneyeat cheesy en tao en dee Sido, ene que cas hombre, mujer 7 nie Tonvee centensves de especex, Winguno de ellos Geert jamie que soy incspar, aunque quewé- Gale, ee aber tanto’ como on. (mith Bowen, p22) Totsmente dierent ct rien den sec lisa, autor de wna monografiaen Ia que des de 300 expeccs 0 varedads de. planias medicinal © tixieas, utliadas por algunas poblaciones de la Ro desia del Norte: » LA CIENCIA DE LO CONGRETO Me ba sorprendido siempre la diligencia con que lor habitentes de Bslovale y de la regione Necnas acepaban, hablar de su remedion y de ts venenor Les balagaba el interés de que daba fucstras yo. por sat’ mésodos’ Conslderaban Suesras convetsaciones como un iitereambio de informaciones ence colegat 0 querian acer galt desu suber? Coalquiera que bays podido Serle rani de su acti, mune. se haclan de togar. Me acuerdo de um condenado viejo lucha sigue me tala bratadas de hojor seas, Ge rales 3, an par are to pion 2Qué era, Herbolario 0. brojo? ‘Nomea_pude pe fear" en ste” mistrio, pero compruo” on pesar que no poseeré munch su clench de Ia el fologia atvicansy su habilided para cuidar a sos Seals eee a ceretinioee ion ys talentor habrin formedo. una” willsiana Zombinaciim. (Gilges,p. 20) Al citar un extracto de sus cuademas de viaje, Conklin ha tratado de ilostrar este contacto {ntimo ‘entré el hombre y el medio, que el indigena impone perpetusmente al eindlogo: ‘A, 0600 yijo una Havin tiger, Langha. partinos de Parina en diveain de Biull.” En ‘rasa, Langa me pid. que cotara varias ban dla de corcenas, de 10 por 80 cnt, del drbol anzpla hii (Abii roe (Rob) Be pa preenatnon de “ie ‘sangjucs. Frotande on rs ner del cone smn oo 9 Ello ae. produds una ‘apace dents de twlor tora que era un magnifico. repelente. En camino, cerea de Aypud Langta te detuvo de om, Randa btn bere pe carrigo una pequesa tawog hugan bulabaled WBuehner™ Uricfole R. IA CIENCIA DE 10 CONCRETO. wt ey gue, sein ne ip, I sii de ceo. Siapar’s un jabell’ Algunon intantes mis Erde, y eaminabamos ripidamente, se detuvo de peal since ara rane epee rae terrese (fil de Gecuber ajo In vette in que I cobra) amada djemiiyam (Epibo- fun rome (@ Dan) an) lant empleds fom combodir migiarence a tor inecro. para {or de lot culivos En Binli, Langba se tomd el tidedo. de no echar a perder lo que habla re ‘opido,urgando en su moral de pslma rena ora sacar pu, eal apagada y tabehu (Nicotine baci 1), que queria ofecer-a. la gente. de Binli a cambio de otros ingredientes para mas- far. Despues dena dizeuion acerca. de" 1os ‘meron respeciven de las varedades locales de Betekpimienta(eiper belle L), Langba obtuvo Berm par ctr cxtacan de Daa. Upomocs ator {L) Poin) que pertenecian a dot format sepettias diferent y tings con Tes nom. Tres de hamutt tnaseang y Ramu fupaw.«- Yen nado de cme, rare 29 ican ferea de 75 cre. de largo, de cada vatiedad, que ‘Similan. on el exter del allo, yas env: ‘ino cadence ly grandes bo ra aging wba caltvado (Misa sepientum com: rea’ (Bio) ‘Teodro) pars que comervaen fi fated hasta meta gaa a LanghaEn amino, mattiamos tllos de tabu inane, ex ice de cata de audit (Secharum fiinareon Th) nor detuvimor uma ver para recoger algunas bate meee de arene (ec ec 1), otra ve, pata tecoger y comer los frutos, ie: Tojntel rea veces, de algunos maton Ge ucnay.(Antidensa brani (L) Spreng). Lie fgamal'a Muri a medindon 41a tarde. lo fitge de necro camine la mayor parte del tiempo la hablamos pasado. dicutiendo acer de tor cambioe en Ia Yegetacinoeutidos en le Atma decenae anos (Conklin, 1, pp. 1317), ee 4y—_1AGHENGIA DE Lo concnsTo Te saber, y lon medion Hingdisicos de que dispone, sblexiende tambien a In morfologt La lengua tora lien trminon dsintan para cada Pare, © ca, del Serpo de lt aves ) de fox manifros (Henderson y Hortigton, p 8). La deseipcion morfoligiea de lt hoje de Ales ode plane, cuenta con coarenta termine, y bay quince términcs disinon que comer ponden a ba diferentes pares de una plate de tai ara desir lan arta corstiutias y la prope andes de ln vegetal los hanundo denen ms de 180 ‘Ginnos, que convotan las categoria en foncén de Jet cole enue ls plants *ydiseuten entre ellos Ste de centre de arco gue ey dings menudo coresponden « propcaadessignficativay, thao medicine cote alimentcae™ (Conklin, Zp. 9. To pioatibo, entre Ios tals @ han eontado iis de (0 plantas can sombre, "no tenen solamente un o> Dociniento fabuloo de sis plantas y de sus modos de ulimcién; emplean mee 100 trminos para de Sibir soe pares aspetos caracersican”” (R. B. Fox pa) Ts claro que wn saber desallado tan sistemética- ment porte ter Tenn an lo ela Prdctia.) Despues de haber su bs viquera y Faecsién de lon conocimsenton eaolgins ybocnicos ‘Be los Indios del norete de los Estados Unidos y del Canadé:" montagnais, naskapi, micmac, malecite, pe robacot, el etndlogo que los ha estudiado mejor not dice ra de exper, por Jo que repecta a ls contumbres de la cam mayer, de la ue provie fen e alimento y las matsries primar dela in Ginn lndigens.” No- oy sorprendente..- gue el Caandor pondbico de Maine’ porn un mejor co Socio pracico de lt costumbre y el rae ter dal alee que el soblogo mis expeto. Pero undo aprecimos en so justo valor el culdado LA GIENCIA DE LO CONCRETO s que_han puesto los indios ent observar y siste- fatlzar lot hechos clentificos que hacen xeladiéa on las formas inferiores de 1x vida animal, ha Ge permitirsenos mostrar alguna sorpresa. Toda a clase, de reptiles... no. ofrece nin- agin interés econémleo para estos indios; no con- mene cane de fat srpiente, nt de fos bata. os, y no utilizan ninguna parte de sus, restos salvo en casos muy raros, para Ja confeccién de amuletos ‘contra Ta enfermedad ola brujerla. (Speck, 1, p. 273) ¥ sin embargo, como lo ha mostrado Speck, los in- ios del noreste han forjado una verdadera herpetolo- ‘32, con términos distintos para cada género de repeiles '¥ otros mis reservados para las especies © las varie- Gades. ‘Los productos naturales utilizades por lot pueblos siberianos con fines medicinales ilustran, por su defi sein precisa y el valor espectico que se les presta, el cexidado, el ingenio, la atencién al detalle, 1a preocu- paciin por las distinciones que han debide poner en ica los olservadores y los teéricos en lat tocieda- \des de esta clase: arafias y gusonos blancos que se twagan itelmene y yakutos, para la esterilidad) : grasa de escarabajo negro. (osetos, contra hidrofobia); cucara- ha aplasiada, hiel de gallina (rusos de Surgut, contra abcesos y hernias); gusanos rojos macerados.(yakutos, contra el reumatismo); hiel de lucio (buriatos, enfer. ‘medades de los ojos); locha, cangrejo de rio, que se teagan vivos (rusos. de Siberia, contra la epilepsia y ‘todas las enfermedades): toque con un pico de pljaro ‘arpintero, sangre de pijaro carpincero, insufladon na- sal de polvo de pijaro earpintero momificado, huevo fiagsdo del pijaro Aukcha (yakutos, contra el dolor de dientes, contra las exeréfulss, las enfermedades de Jos caballos y la tuberculosis, respectivamente) ; sangre 44 LA GHENCIA DE. 10 CONCRETO de perdi, suri de caballo (oirote, contra ls hernias Y tts verugas); caldo de plehin (buratos, contra Ia Xo); polte de pans trturadas del pljaro leg 0 ie es eer pers So) inge dvecado colgado al culo” (ror del Alt, cor tre a febne); intlacin de age. procedente de un artimbano colgado del nido del pljaro remiz (iets, fenfermedades de lot oft). Para’ mencionar solzmente Slo buriston y limitandonos ak ow, Ia carne de te pose see varleadesterapeories ditntan, ta sangre 5. [Pram 8, ef cerebro 12, la bil 17, el pelo 2. Tam. Wit del ox, los Kalar recogen los exerémentos dros como pledra, ab finaliar la hibernaci, para cara el tsteimiento. (Zeleni, pp. 470) En un estudio de Tob se encontrark tn Fepetori.igualmente ¥ico eo: THespondiente 2 una tibia africana. \/ De tales ejemplos, que podriamos encontrar en todss las regiones del mundo se podria infers de buen grado due bas eopecies aimaes y segetalcs no s0n conocidas is que porque son ‘utiles, sino que se las dedara ‘tiles 9 ineresantes porque primero se la conoce. Be objetaré que tal clencia no puede ser eficar ms ‘que en el plano de lo prictico. Pero, da In casual a de que su objetivo primero no es de orden préc tico. Corresponde' a exigencias intelectuales ances, © fener, de satfncer necesidade HI verdadero problema no estriba en saber si el con taco de un pico de péjsro cixpintero cura las enfer medades de los dienter, sino Ia de si es posible que dade un cierto punto de vista el pico del. pajaro caupintero ¥ el diemte del hombre *vayan juntos” (on frutncia cuya {rmla terapeutica no constitaye mis {que tna aplicaciim hipotética, entee otras) Y. por im termedio de estor agrupamientos de cosis y de sexes, Jntoducie un comienzo de orden en el universo; pu TA CIENCIA DE LO CONCRETO 5 Ja dlasificacién, cualquiera que sea, posee una virtwd propia por relacién a la inexistencia de Ia clasificacion. Como ba escrito un tesrico modemo de la taxonomia: {Los subiossoportan Ia duda y el fracaso porque no ex queda mis remedio que hacerlo. Pero. el ‘desorden es lo nico que no_puieden ni deben to icra. Todo el objeto de In clencia pura es evar 4's punto mis alto, mis conscient, la rede Gibn. He exe’ modo tabticn de perebit, que ha ‘ometirado en un plano inferior jy verosiniimente inconacient, con lox orfgenes manos le Ta vida. En algunos’ casos, podremos preguntarnos sia ‘ise de orden que fr sido forjacls ex un cardter ‘objetivo de Tos fenémenos oun artifcio creado por el sabio. ‘Este problema se_plantes sin ce SS, on mri de conomia nial Sn bargo, el postulado fundamental de la eiencia es (ue ls natoralers misma esd ovdenads... Ea 30 puree tcénla, la cenca se reduce a un’ poner en Srden,y..~ ai & Verdad que la sistemvia consiste fen tal poner en orden, os teminos de sistem ticay de iencia tedrca podin ser consderades Snénimos. (Simpson, p. 8) ‘Ahora bien, esta exigencia de orden se encuentra en Ja base del pensamiento que Mamamos primitive, pero sélo por cuanto se encuentra en Ia base de todo pen- ‘samicnto: pues enfocindolas desde tas propiedatles co- ‘mimes ¢s Como encontramos acceso mAs ficilmente a las formas de pensamiento que nos parecen muy ex: trafas sada cosa sagrada debe estar en su lugar", obser= ‘vaba con profundided un pensador indigena (Fletcher 2, p. 84). Inclusive, podriamos decir que es esto lo que Ia hace sagrada, puesto que al suprimirla, sunque sea en al pensamiento, el orden entero del universo queda- ia destruido; asi pues, contribuye a mantenerlo all 6 LA GIENCIA DE LO CONGRETO focupar el lugar que Te corresponde. Lor refinamientos Gel ritual, que pueden parecer ociosos cuando se les examina superficialmente, 0 desde fuera, 1 explican por Ia preocupacién de lo que podriames lamar una "mlero-perecuacién": no dejar escapar 2. ningin ser, objeto 0 aspecto, a fin de asignarle un lugar en el seno e-una dase. A este respecto, la ceremonia del hako, de los indios pawnee, es particularmente reveladora ‘an ‘lo porque ha sido bien analizado. La invocacién que acompafa al cruce de una corriente de agua se divide fn varias pares, que corvesponden respectivamente al ‘momento en que los viajeros meten Jos ples en el agua, fen que los desplazan, en que el agua recubre completa: mente sus pies) Ia invocacién al viento separa los ‘momentos en que el frescor es percibido solamente so- bre las partes mojadas del cuerpo, luego aqui, despues alls, y por ultimo sobre toda Ia epidermis: “solamente fentonces podemos avanzar con seguridad” (id., pp. 77- 78). Como lo expliea exactamente el informador, “de- hemor dirigir wna ‘incantacién' expecial a cada coma que encontramos, pues Tirawa, el espirita supremo, re- fide en todas Ist cass, y todo, lo que encontrames. mientras vames de camino, puede socorrernos... Se nos ba ensefado a prestar atencién a todo lo que vemos” (id, pp. 7881). Esta preocupacién por Ja observacin total y de ine ventario sittematico de las relaciones y de los vineulos puede culminar, a veces, en resultados de buen aspecto entfico: tal es el caso de los indios blackfoor, que Giagnosticaban Ia proximidad de la primavera segin el estado de desarrollo del feto de bisonte extraldo del vientre de Ia hembra muerta en la eam. Sin embargo, no podemos aislar estos aciertos de tantos otros. parallos Ge Ia misma dlase que la. ciencia decara_ilusorios. Pero ¢no seri que el pensamiento migico, esa “gigan- tesca variacién sobre el tema del principio de causalie LA CIENCIA DE LO CONCRETO dad", declan Hubert y, Mauss (2, p. 61), se distingue ‘menos de Ia ciencia por Ia ignorancia 0 el desdén del determinismo, que por una exigencia de determinismo ‘més imperiosa y mds intransigemte, y que la ciencia puede, a todo lo mis, considerar irrazonable y preci pltada? Considerasa como stema de flotti:naturl Ss Go ral een mp ental fa degree cs rsltade dela beajei: qe opera ee or a ero ae Sone tome tm ull 6 fc ing pa to cee iasitermites 0 6 contrac uti meningitis cerebro: sapien’ anda arsurttque eed Sin os efemetnd mv augue cone Uaiesirareeerserrat shearer Bia del granero, dela enfermedad I brojeria ee ee ee ee See ea eae rc ae poe eee Seemte pe a gee Gerace at nis cuaegeces etait cutrenuseces spain Soweto ors ies eeinie tax dare eet ase Peete eee Taeecicr ae: Ce ee eee (OES wee eg ny ser croaiied ca pinay ay coe Sones wocelee (Ee Petcark Ts pp. 4189) Por tanto, entre magia y cfencia Ia primera diferen- cia serfs, desde este punto de vista, que wna postula un determinismo global e integral, en tanto que Ia otra ‘opera distinguiendo niveles, algunos de los cuales, s0- Tamente, admiten formas de determinismo que se con- sideran inaplicables a otros niveles. Pero, 2no podrlamos 8 LA GIENGIA DE Lo CONCRETO. ir un poco més lejos y considerar al rigor y a la pre sién de que dan testimonio el pensamiento magico y las précticas rituales, como si tradujeran una aprehensién inconsciente de la verdad del determinismo, en cuanto ‘modo de existencia de los fenémenos cientificos, de ma neta que el determinismo seria globalmente sospechado Yy pueito en juego antes de ser conceido y respetado? Los Titos y las creenciss migicar se nos manifestarian en: tonces como otras tantas expresiones de un acto de fe fen una ciencia que estaba todavia por nacer. Y lo que « mis: no solamente, por su naturaleza, ‘estas anticipaciones pueden 4 veces verse coronadas pot cl éxito, sino que también pueden anticipar doblemen- te; anticiparse ala ciencia misma, y a métodos o resulta dos que Ia ciencia no asimilard’ sino en una etapa avanada de'sa desarrollo, sie verdad que el hombre se enfrent6 primero a lo mds dificil: In sstematizacion, al nivel de lor datos sensibles, a los que la ciencia du ante largo tiempo volvié la espalda y a los que co- amienza ahora, solamente, a reintegrar en su perspectiva. En Ia historia del pensamiento cientific, este efecto de anticipacién #e produjo por Jo demés en varias oca- siones: como lo ha mostrado Simpson (pp. 8489), con ayula de un ejemplo tomado de la biologia del. si- ‘glo xix, resulta que —como Ia explicacién clentifi Corresponde siempre al descubrimiento de un “ordena- miento"— todo intento de este tipo, aun cuando csté inspirado por principios que no sean ciemtitice, puede encontrar verdaderos ordens previsible sf se admite que, por definicién, el nimero elas estructuras es finito: 1a “puesta. en estructura’ poveeria entonces una eficacia inerinseca, cualesquiera {que sean los principios y los métodos en que se inspira, La quimiea moderna reduce Ia variedad de los sabo- ret y de lot perfumes a cinco elementos diversamemte ‘combinados: carbono, hidrégeno, oxigeno, szufre y ni: LA GIENGIA DE LO CONCRETO » tuégena Trarando cuadros de presencia y de ausencia, ‘stimando dosificaciones y umbrales,lega a darnes cuen- ta y raén de diferencias y desemejanzas entre cualida- des que antaio habria expulsado fuera de su dominio por considerarlas “secundarias". Pero estos paralelos y ‘Stas distinciones no sorprenden al sentimiento esttico: ‘mis bien, 1o enriquecen y lo aclaran, fundando asocia- cones que ya se sospechan, y de las cuales se comprende Inejor por qué, ya en qué condiciones, un ejercicio asiduo e Ia sola intuicién habria permitide descubritlas ya; i, que el humo del tabaco pueda ser, para una Jégica de Ia sensacién, Ia interseccién de dos grupos: uno de Tos cuales comprenderia uambién la carne a la parrilla y In tostada cortera del pan (que estin, como 4, com- uestos de nitréyeno; y el otro, del que forman. parte €1 queso, Ja cervern ¥ a hiel en raain de la presencia del diacetilo). La ccrera silvestre, Ia canela, a yainilla ¥ 1 vino de jerez forman un grupo, no sélo sensible, ‘ino inteligible, porque todos contienen aldehidos, en tanto que los olores semejantes del t€ del Canada (wintergreen) de la lavanda y del plitano se expli- can por la presencia de csteres. La intuicion por af fola incitard a agrupar a la cebolla, el ajo, la col, el nnabo, el rabano y 1a mostaza, aunque la botnica sepa- re a las lilidceas de las cruciferas, Comprobando el testimonio de Ia sensibilidad, la quimica demuestra que cextas familias, extrafias entre si, se emparientan en otro plano: todas oculian amfre (K., W). Un filésofo pri mitivo o un poeta habria podido realizar estos reagru- ppamientos intpirindase en consideraciones ajenas a la quimica, 0 a cualquier otra forma de ciencia: la litera: tra etnogrifica nos revela un cierto niimero de los ‘mismos, euyo valor empirico y estético no e menor. Ahora bien, «50 no es, solamente, el efecto de un fre- resi atociativo, que a veces habré de tener éxito por ‘un puro azar. Mejor inspirado que en el pasaje ante: se LA GIENCIA DE 10 concrEro Giada en el qe nos oece eta interpretcsn,Simpion pare ee tern ete pntcer necead comin al ane a a cence y que, por con a exoromi, gue eel poner em orden por Troce um iinente alr eatin (oe P-). Eotonce se vrprende uno menos de que el en- Sao esto, abandonado.a sus solos fuerms, pueda Seine ef corint' txtonocia"y-au sapee-a Slgunos de sus resueado. Sin ebago, no retortamoe 11s tes wlga (pot fo de is uaailtte en a penpects ated enh Gos Coloe), seg Ia coal a agin sera una fora tna y fates de b Gene porque noe petted 8 ts tedio de comprender el pensamento mdgic, spre {enitsmos redusila 4 un'momento, o& 0ba capa de In eyolucin tdenicn elena. Sombra que mt en Engst cies, Ta mogla ey en on ido, com ‘ono 4, tan aabada y coherente, en 1s inmate lida, como els aSlido 2 que solamente ha prece fide Fi penramieno magico o em comien, un ‘stor, una inicio, Ia parte de un todo que todavia fo ac ha realizado; forma un stema bien acaado Intependeme, en relacion con et, de ee oto stems aque convituird Ie Geni, avo la analogs formal gue Ei cinprientay'qoe hace del primero tna waete de fxpreson merits dea segunda Por ant, em et de eponer magia y len, tela mejor ealocalt par ISancne, com doe modes de fonociniento. desis fn cuanto 2 los resladon tdricor y pric (puen, desde ete punto de vita, cs verdad que a lencia lene this éxito gue a magn, sungoe a maga prefigure ¢ TE lencla eh el sentido de que tambien sia acetal fun secs), pete no por la cle de operiioner mex: Els que anda soponen, y que diflren menor eo vont a ln nares que ch funciona clase Se fenomenos eles que espn. LA GIENGIA DE LO CONCRETO 2 Estas relaciones se derivan, en efecto, de las condi clones objetivas en que aparecieron el conocimiento rmigico y el conocimiento clentifico. La historia de este Ultimo ex demasiado breve como para que estemos bien informados a su respecto; pero el que el origen de la iencia moderna se remonte solamente a algunos siglo, plantea un problema sobre el cual los etnSlogos no han reflexionado suficientemente; el nombre de pare- doja neolitica le convendria perfectamente. Es en el neolitico cvando se confirma el dominio, por parte del hombre, de las grandes artes de Ia civil Zacién: cerdmica, tejido, agricultura y domesticacion de animales, Nadie, hoy en diz, se atreveria a explicar es tas inmensas conguistas mediante 1a acumulacién for tite de una serie de hallargos realizados al azar, 0 revelados por el especeiculo pasivamente regisrado de algunos fenémenos naturales Cada una de estas ténicas supone siglos de ob- servacién activa y metédiea, de hipévesis atrevidas y ontroladas, para rechararlas 0 para comprobarlas por fntermedio de experiencias incansablemente repetidas. ‘Observando la rapider con la que plantas originarias dal Nuevo Murdo se aclimataron en las Filipinas, y fueron adoptadas y nombradas por Jos indigenas que, fen muchos casos, parecen haber redescubierto inclusive ‘sus usos medicinales,rigurosamente paralelos a los que eran tradicionales en México, un bidlogo interpreta el fendmevo de la manera siguiente: ‘2 Se ha tratado de saber Jo que passia’sl el mineral de cobre se hublese mercado accidentalmente a. un fog6n: fexperiencias maliples y variadas han establcido que no pasaria nada. El procedimlento mds simple al que se haya Tiegado ‘para obtener metal fundido cansice en calentar intenetmente mmalaquita finamente pulverimda on una copa de arella cubierta con una vaija Invertida. Este solo resultado aprisiona ya al azar en el recinto del fogin de ‘igtn allarero eepecnlta em cerdmica vidriada (Coghlan) Miia ni _-LAGIENGIA DE LO CONcRETO Las plantas cuyas bojat 0 tallor tienen uns borage cen comdnane os be Fit nas conta lon paecimiento el emago. Toda planta Imvoic ie gies amo. ark fen cd rpidamente probada Porque la ma Fla de ls poblacones de les Filipinas hacen cope {anemente experiencia com lat plantas, aprenden Hpitamente conocer en funetin de at Fite de 0 propia calla, los empleos’ponbls fe Tas plants Importadan’ (Rs Fox: pps 22 tis) Para tranformar a yea silvestre en planta culiva 4a, una bos salvaje en animal domestica, hacer apa reter en la na o en la ot propiedades alimenticas © tecolégist que, ciginamente,staban_ por com pleto auientes 0 apenas sie. podian scypechar pera hacer de ura srclls inewable, de fal desmoronantien- to, expusta a pulveriane o 2 raja, una vanja de bro Slide y que no dejeccapar el agua (pero. alo a ‘ondicién de haber determinado, ence una multitud de Imnteriasorginics © inogdnieas In que mejor se prev tara a servir de depraante, ssf como <1 combustible convenient, la temperatura y el tempo de coccén, el srado de oxidacion fica); para elaborar as tecnias, 3 menudo prolongadss y complejs, que permiten cal tivar sin tera, o bien in agua cmbinegrenos 0 races ‘Gries en alimenton 0 todavia mi, ution eta tox dad para ta cay, la guerra, al ital, no. nor quepa la ‘menor duds de que se requriS una acttud mental ver diaderamente cites, uta cutioddad aidua Y perpe tuamente depiena, in gusto del conocimiento por el placer de conocer, pues sma peje fscién tolamen- te de las obseracionesy de es experiendis (de las que 65 neceario suponer que estnieroninmprads, primer Y sobre todo, por Ia afin al saber) podian dar revul {ads pricticos ¢ inmeditamente wimablen Y haga | | | | | | | LA GIENCIA DELO CONCRETO 5 mos a.un lado a Ia metalurgia del bronce y cel hice, Bde los meales preciows, y aun cl simple trabajo dl cobre naiivo por el simple procedimiento del marl ‘que precedicron a Ia metalurgis en varios milenion y todos los cuales exigen ya una competencia técnica muy considerable. EI hombre del nealitco ode la proto. Istria ex, pues el beredero de una larga taticiéa dentiica: sin embargo, si el epirta que To inspird 2 ilo mismo que a todos sus antepassdos, hubiete sido fexactamente el mismo que el-de los mpdernos, zcémo ppodriamos comprender que se haya detemido, y que va- ios milenioy de extancamiento se intecslen, como un Gescarsilo, entre 12 revolucidn neolien y Ta dene Contemporinca? La paradoja no admite més que una folocon: la de que’ exten dow mod ditintn de Pensamiento cientfce, que tanto el uno como el ou8 son funcién, no de etapas desiguales de desarrollo del Sspiriat humano, sino de los dos nivelesextrtégion en ue Ia naturalesa se deja atacar por el conocimiento entific: uno de ellos aproximatvamence ajustado al Ge Ta pereepcién y Ja imaginacion y el oto. despls ado; como si las telacones necesriss, que constituyen fl abjcto de toda ciencia —sea neoilica 0 moderns, pudiesen alcanzarse por dos vias diferentes una de fellas muy cercana a Ia intuicién sensible y Tn otra mis alejada. Toda casfcaciin es superior al caox, y aun_una lasifcacin al nivel de lis propiedades senaibles c tuna etapa hacia un orden racional. Si-se pide csitt Grr una coleccidn de frutos varias en cuerpos relat vamente mis pesados y relativamente mis lvians, serd Jegitimo comenzar por separar las peas de las mai* zanas, aunque Ta forma, el color y el ssbor earezcan a ‘elacion con el peso y el volumen: pero porque las mis aguas, de entre las marzanas, son mis ticles de di finguir de las menos gruesas, que cuando las manzanas SLA GENCIA DE Lo coNcRETO Fermanecon mexeladas com fran de aepect dierent Fite ejemplo non permite ver yu ques man al nivel Se 1a pevepeion ete, ts Gulla tee 80 veto. For ovr pare, y aunque no haya conexin necenla entee tas cuadades senile y In propiedaden existe por lo menos una reacon de hecho eh gran ndmero Ercan y ln genealiacon de eta rac, aunque to ent fundads tu In tat, pode ser dora fro ‘expo una opercion fractaoes, tei y prictcamene ter Tocas os juges ties no an andiente 9 amargox 7 ts vetproce eo ext cevdacers aim embargo Te aturaton ead heeha de tal manera que es mis hur tho, pa el pennento para la accion proceder tomo st na equivalence que ste a sentiieo sco coresponde ‘ambien a ura realidad objedre Sin que nos correspond aqut el sverigiat por qué & Probuble que pets datas de algin erdter note bie forma, color olor, sbran al ebsereador To que Perramos lamar un "derecho de prospu' el de Plea cage abla sn cae ee Piedad: igusimenee singeare, pero ocutas Admir fc Ie rcacom etre os dor ten lin rion sen Ir que un grano en forma de diente preserve contra Tar mordedarar de serpent, que tm jogo amar tex tin ‘spaiico pare lo tratornot ile, ec) lene Inls valor prolonsiment, que Ia inifrencia'a toda Coneién: puesta dsiicaion, aunque sea heteréita Paver savapuanda Ta equem yle iversidad del Tovenaroy al dendr qve"hay. que tener en cwenia toto, facta la consid ona "meworls” ‘Ators bin es um hecho qoe mets de et fdole potian conduct a deenninador rexltados que eran Inapensbles para que cl hombre pudioe aiaar 8 Ia Tule deide ot fiance, Lejs be ae como 4.6 tuo se pretend, la ora de una “ioncion bu Bort que le vache In eps la rid, tn mos LA CIENCIA DE LO CONGRETO s 4 los ritos ofrecen como su valor principal el preservar fasta nuestra época, en forma residual, modos de ob- servacién y de reflexién que estuvieron (j siguen estan ddolo sin duda) exactamente adaptadot a descubrimien- 425 de un cierto tipo: los que autorizaba la naturaleza, 2 ‘pantie de la organiza y de la explotacion reflexiva dei mundo sensible en cuanto sensible. Esta ciencia de Jo concrcto tenia que estar, por esencia, limitada a ‘ouos resultados que los prometidos a las ciencias exnc- fas naturales, pero no fue menos cientifica, y sus resul- fados no fueron menos realex. Obtenidor diez mil afios antes que los otros, siguen siendo el sustrato de nuestra civilizacion. For lo demds, mfsine ene nosotros umd fafa de ae fivided que, en el plan téenico, nor permite muy bien fenctbir lo que pudo sr, en ci plano de la specs: iin, na cienla'a Ia que prefers lamat “primera” fit que primiva: & la que cominmente se dei Gon el vriing de Bicolage™ En wu serido aniguny et eb Briley we aplca af jgo de plot y de bila, Bla cama ya be equiacén, pro siempre part coca on ueiento ncideme: el de la pelo que rebels e at perro que dvegn, el del caballo que apart’ de In inea recta pata vitr un obseeilo. Y, en nuentton Shs cotter = ol que wabsja con, dnow, ut Tiraido medios denindor por compsricion con oi del Iombre de are. Ahora bin, lo propio dl pentmlento aio es expreirse con syila dem repertoro capa * os ttre Pricer brielageybrclear en a ace ii que les dal sor, bo tenes ain esc EL bvtolar cs que srs sin plan prey con ned y Pscrimicnssspatadx dt uncles ome oe opera com Slee frm ano yo dss con tragnencs de obraxcon roe ms come Ul te ee fe La letra del eto aeliradsuicnemetee seee see einen) yo TAGIENCIN DE 10 CoNcRETO tompsiin es hetereiay que) aunque ampli-no Stone estimates un tbingo, recs que ae sti, enlqaea que se a tarea gue se asgne no iene rintaoo del que ec manox De ERs se motte como unt sere de briolage inten lo que expla fat rlaconer que se otervan entre lo doe. Ziomo Al ricolage en el plano tec, 1 retlexém snes puede alcear en of plano ttletal rel dor branes e imprevisos, Reciprocament, « menudo wyaaterendo el cricter mitopoto el brio Secs en el plano del are, Hamada “bru” 0 “Inge Boor cx ta-brgubecure famiia Ta gone de Tarcto‘Cheral en las decracione de Georges Melis ran eh fs innortalinds por Is Grandes husones de ‘ickens pero nmplridas sn dada peimero. por Ia ob Actin det “caso” cabsrbane de wor Wenimick, on su puene Tevaoo en misistra, scan qUe Sckbe? a ar mueve, y so hvercclo de serduras y feplnon grec a coal fv ocupantes podrian sostener Tito, ee ter necro. "ele Te pena shondat en Is compari, porque not permite netec mejor a ly rencone rele ene Tos por de conodmicno cnt soe mon in “dat Tl bnicolowr reaps de jeatr on gran nizer9 4 trees divesicaig, pero, «diferencia del ingen fo. ao aubordina ninguna Ge lia sa obtenion de Ducts prims y de insrumentr coectido 7 bie Sides 2 imide desu poyeco: univeno iste ena esd cerrado la foyin de juego es empre Inde aeglily con “lo que no tenga’, dace Gn conjurto, cada instante fn, de tsrumentos 7 de mmriae, betcrélte adem, porque la compo Taba dal conjino no eth en elacign eon el proyeso del momestay i, pot Jo. Gems, con ang oye to puncte, sno ue es of reledo contingent de TACCIENGIA DE 10 CONCRETO 7 Tas ecasiones que se le hun ofrecdo de renovar ‘eniguecer sur exntencias, 0 de conservarlas con esd de consrucciones y de destrueiones ante El conjunto de lov medion del bricoleur v0 30 fponie defini, por lo tanto, por un proyecto o que ix, por lo dems, como en el exo del ingeniero, fexistencia de cantor conjuntor mtrumentales como fgncon de proyectos, por lo menos en tora); +e deft Se solamente por st insumentalidad, 0 dicho de otra manera y pars ecplear el Lenguaje del Dricoew, por ue lm clementos se recogen 0 conseran en razdn de Principio de que “de ako habrin de servir’ Tales Erementon por tant, estin pariculatizados ames: forsufcience como para que ol bricoleur no tenga nec tidad del equipo del saber de todo fs cuerpos admi- iuratnos; pero no tanto como para que cada elemento fea comirefido. aun empleo precio y detrminado. {Gads clemento representa un conjunto de elacioney, + Tn vez concrets y virtuales20n operadors, pero wilt tables con vst 4 operaciones cislexuiera en el sen0 eum Spo, ‘Be ta misma-maners, lor clementor de la reflexion imiien se situa siempre a mitad de camino entre pro Yeoncepton Seria imposble extract los prime for de Ia situaciin concrets en que aparecieron, en Tanto que el rear a ls segundos engiia que el pen- Sainiento pues, provisionsimentc, poncr sus proyee fos entre perémesis. Ahora bien, existe un intermediario fntte la tnagen yl concepio: ese sgoo, puesto que Siempre tele puede definix, de la manera iniiada por Saunurea propésito de esa categoria pertcular que for tan los signos linge, como un lao entre una imagen yun concepto, que, en ia unign ast reliada, dlempeta ropectivamente ior papeles de signiticante y a ae ‘el signo es un ser concreto, pero ——— * LA CIENCIA DE £0 CONCRETO {Fie parece al concepto por su poder referencil: el tno Yel otto no se relacionan exclusivamente a ellos mis- moe, sino que pueden sustitir s algo que no son clos. Sin embargo, el concepto posee a exe respecto tuna capacidad iimitada, en tanto que la del signo es limitada. La diferencia y 1a semejanra se pueden obser- vvar bien en el ejemplo del bricolewr. Contemplémoslo tn aceidn: exctado por aw proyecto, «primers ac tddn prictica es sin embargo, retrospectiva: debe vol- verse hacia un conjunto ye constituido, compuesto de hherramientas y de materiales: acer, 0 rehacer, el ine ventario; por kino y sobre todo, establecer con tune suerte de didlogo, para Iiacer un repertorio, antes de elegir entre ells de las respuestas posibles que el fonjunto puede ofrecer al problema que él le plantes, Todos estos objetos heterélitos que constituyen su te- Soro! son intcrrogados por él para comprender To que Gada uno de ellos. podria contribuyendo de tal manera a definir un eonjunto por realizar, pero Gue, Finalmente, no diferird del conjunto instrumental iis que por la disposiciin interna de las partes) Este ‘euko de encino puede ser cufia para remediar In insu ficiencia de un tablén de abeto o bien pedestal, 1o que permitiria sacar a relucir el grano y el pulimento de la Vieja madera, En un caso serd extensidn, en cl otro ma- terla, Pero estas posibilidades estin siempre limitadas por Ia historia particular de cada pieza, 0 por lo qui Subsiste en ella de predeverminado, debido al uso or ginal para el que fue concebida o por Ins adapraciones Que bz sufrilo con vistas a otros empleos. Como las tinidades constitutivas del mito,, cuyascombinaciones posibles son limitadas por el hecho de que s¢ han t- Iado en prétamo al lenguaje, en el que poseen ya un entido que restringe la libertad de maniobra, los cle “Tesoro de idest”, dicen admltablemente dé 1a ma: sia Hubert y Mauss (2, p. 136) LA CIENCIA DE LO CONCRETO 2 smentos que colecciona y utiliza el bricoleur estén “pre: Constrchndoe” (LéviStrauss, 5, p. 85). Por otra parte, Ja decision depende de la posibilidad de permutar otro clemenco err Ja funcién vacante, hasta tal punto que ada cleccién acarreard una teorganizacién completa de Ta estructura, que nunca seré aquella que {ue vagumente sonads, ni aquella otra que se pudiera haber preferida con ver de ella. ‘Sin duds, el ingeniero interroga también, puesto que 4a existencia de un “interlocutor” es resultado, para él de que sus mecios, su poder ¥ sus conocimientos, jams Son ilimitados, y porque, en esta forma negativa, tro pies con una resistencia con la que tiene, indispenss- blemente, que sransigir. Se sentiria uno tentado a decir ‘que interroga al universo, en canto que el bricoleur se Girige a una coleccién de residuos de obras humanas, f decir, a un subconjunto de la cultura. Por fo de fis, la toria de Ia informacién nos muestra cbmno es posible, ya menudo stil, reducir as acciones del fsico una suerte de diilogo con la naturalera, lo cual ate fpuarla Ia distincién que tratamos de trazar. Sin em- argo, subsistrd siempre una diferencia, aun si se tiene. fen cuenta el hecho de que el sabio nunca disloga con Ta naturaleza pura, sino con un determinado estado, de la relacin entre 12 naturalem y Ia cultura, detini ble por el periodo de la historia en el que vive, la Givillzacién que ex la suya y los medios materiales de ‘que dispone, Al igual que et bricoleur, en presencia de una tarea dada, no puede hacer lo que Je dé la gana; también Gl tendr4 que comenzar por inventaiar fun conjunto presecerminado de conocimientos teéri €0s y pricticos, de medios téenieos, que restringen las solucioncs posibles. “Ask pus, la diferencia no e tan sbsoluta como nos veriamos tentados a imaginirnosla; no obstante sigue siendo real, en 1a medida en que, por relacién a esas LA CIENCIA DE LO CONCRETO: onstriciones que resumen un estado de civilizcién, el ingenicro trata siempre de abrirse un pataje y de si tare més alié, en tanto que el bricoleur, de grado 0 por fuerr, permanece més acd, lo que es otra manera de decir que el primero opera por medio de conceptos y dl segundo por medio de signos. Sobre el eje de la posicion entre naturaleza y cultura, los conjuntos de {que se valen estin perceptiblemente dislocadas. En efec- 0, por lo menos una de las maneras en que el signo © opone al concepto consiste en que el segundo quie- re ser integralmente transparente a la realidad, en tanto ue el primero acepia, y aun exige, que un determinade fasgo de humanidad esté incorporado a esta realidad. Segin la expresién vigorost y dificilmente tcaducble de Peince: It addresses somebody. ‘Asi pues, podria decirse que tanto el sabio como el bricolewr estan al acecho de mensajam pero, para ol bri- olewr, se trata de mensajes en cierta manera pretras- Imitides y a los cuales colecciona: como esos ebdigos comerciales que, condensando como condensan Ta expe- riencia pasada de la profesién permiten acer frente, econémicamente, a todas las situaciones nuevas (a con dicién, sin embargo, de que pertenercan ala misma clase que las antiguas); mientras que el hombre de ‘iencia, y2 sea ingeniero, ya sea fsico, cuenta siempre el olro mensaje, que podria serle arrancada un interlocutor, a pesar de su resistencia a declarar acerca de cuetiones cuyas respuestas no han sido repetidas de lantemano, De tal manera, el toncepto se nos manifiesta ‘como el que realex In apertura del conjunto con el que se trabaja, y la significacién como Ta que realiza su te- forganizacién: no la extiende nila renueva, y se limita a obtener el grupo de sus transformaciones ‘La imagen no puode ser idea, pero puede desempe far el papel de signo, 0, mis exactamente, cohabitar on a idea en un signo; si la idea no se encuentra IA CIENCIA DELO CONCRETO 4 todavia alli, reapetar su lugar futuro y hacer aparceer, eatvamente, tus contornos. Ta imagen exh tijd, figeda de manera unwoea al acto de concienda que Ia feompafn, pero el sign In imagen que se ha tornado Significame! si carecen todavia de comprehersdn, cs ‘ein de relaconessimulténest y tebieamenteiimita as con ottor sees del mismo tipo lo que cx el priv legio det concepto~ son ya permttabie, es decir, pueden “mantener relsiones sicedvas con otvoe sees, sunque fn mimero Finitalo,y, como se ha visto, @ condicén 4 formar siempre un sbtema en el que Ura modifi ‘eid que afecte 2 un elemento intrearé antomiticn ‘mente todor los dems: en ete plan, ia extersin y Tn comprehensin de los Wgicor no existen. como. dot Seeecter duties Y. chaplenettatioy tino crn Gra eslidad soldara. De tal manera, se comprende que el Densamiento mitico, aunque ese envicado em lt ii ene, pueda ser geteraliador, y por tant. cenifico: fambien-et opera a foerm de anslogin y de paralelos, sun si como en cl caso del bricologr, sim ceaciones se redveen siempre a un ordenamiento. nuevo de clemen- fos coya natursera no se. ve maifieads segin que figuren en ef conjumo instrumental en Ts dixporcin final (que, slvo por lo que toea a la disposicign in: terna,forman siempre el mismo objeto): we dita que fos universes mitolovias tin detinadon a ser desman felados apenin formed, para qe micron univeros razcan de sus fragmentos". (Boas 1, p. 18). Esta pro fonda observaciin se olvida de tener’ en cuenta, sin embargo, que, en esta inetsante reconstruccién con ayu Gls Us nia sterile, ton leaps fine antigen Jos que habrin de devempetar el pepel de medio le gnfiados se tcean en sgnificanes, a la inven Tata (Grmbla, que podria servir de definiciin para Ghbricolege ros cxplict que, para Ia relletin mite, In toralidad elon medion disponibles debe ser ambien 4: LAGIENGIA DE 10 CONCRETO implictamenteinventatinda © concebids,pare'que pac atdefinine un reultado que ser sempre una compo- nena enwe la stractor del conjunto instrumental. In uel proyecto Una ver realeadoy exe sltimo estas por tame, inevablemente @ilocado por rlaion a ln [Rend incl (por lo demi, simple eaquema), eee to que los errata han nombrado felmente “szat cbjstvo". Bevo hay mas: la poesia del briclage le iene ambi, y some todo, devqve no s Kimita a rex Tro ejseuer tom to hemes mostedo Ya, sino también por medio de tas es” contando, por intermetio de Te eleccién fe efectia entre. ponbes limiadon,elcardeter ta ia desu ator. Sir lograr totalmente su proyecto, ULbricolew pone siempre algo de él mimo, Dest ete punuo de vista también, la teesin mi tice se non maniietn coma una forma intelectual. del Brizolage, La cencin, pr enero, ha consruido 3po- Sendore en is distingon de lo contingente y elo Tettorion que. tambien Is del acnterimiento y de In eqwuctors, Las cusidades que, nel momento de a cimnt, hal suas evn preiumente aul us Tomo no formarom parte en manera sigura te la expe ffencla vida, eran exteriors 3, por as deco, exe fara fos acontecimientow exe cy el sentido de la noc Te Guaidades primeras. Ahora bien Io propio del. pen- aoe een dat bcos 4 plano pe comic en caborar conjuntos eauctrados, 10 Sectamente con otros confunton esructurados® sino lindo resduoy restos de xcontecnienton ode nd andy dria wn Ingles 0, en putol sobre y £1 pentamento mftico esific conjuntot estructurados por medio de un conjunto eatructurade, que et el lene fusjer pero no se apadera al nivel de la estructura: con Gruye sor palacor eoldgicos con los cicombros de un ntiguo deere social TA GIENGIA DE LO CONGRETO s | gronos,testimonios {sles de la historia de tin individvo de una sociedad. En un sentido, por lo tanto, la re Jasin entre la dincronia y la sincronia ha sido inverti- | da: el persamiento mitico, ese bricoleur, elabora es ‘eracturas disponiendo acontecimientos, 0 mis bien ‘Fesiduos de acontecimicntos* en tanto que la ciencia, en morcha” por el simple hecho de que sc instaura, ‘ema, en forma de acontecimientos, sus medios. y sus (Fetuliados, gracias a las extructuras que fabrica sin tre- ua y que son sus hipétesis y sus ceoris. Pero no nos 1 novae trata de dos etapas, 0 de do fases, de He evolucidn del saber, pues las dos acciones son: igual» ‘mente vélidas. La fica y 1a quimica aspiran ya a tor- cnarse de mucvo cualitativas,¢s decir, a explicar también fas cualidades sagundas que, una ver que sean explica- das, volyerdn a convertine en medios de explicaciéns y uizls la biologin marca el paso mientras espera que 52 ealice esto, pata poder, 2 su vez, explicar Ia vida. Por Su parte, el pensamiento mitico no es solamente prisio- fnero de acomtecimientos y de experiencias que dispone J redispone incansablemente para descubrirles un sen- do: es tambien liberador, por la. protesta que eleva ceontra el nosentide, con el eval la'ciencia se habia esignado, al principio, a wransigit. erie aie ‘Las consideraciones anteriores, en varias ocasiones, han rondo el problema del arte, y quizis podriamos indi- ‘ear brevemente cémo, en esta perspectiva, el arte se fnserta, a mitad de camino, entre-el_conocimiento Gentifico y el pensimicnto mitico 0 migico; pues todo €l mundo sabe que el artista, a la ver, tiene algo det Sabio y del bricolewr: con medios artesanales, confee~ ‘ion Um objeto material que es al mismo tiempo ob- jeto de conocimiento, Hemos distinguido al sabio del © Pricalage opera también con cualidades "segunda": vlase el término expafol “de segunda mano”, de ocasin, 46 TAGIENGIA DE Lo CONCRETO Iricoleur por as funciones inverts que, en ct orden Invtramental y fina, asgnan al scontecimiento 7-2 la tstructara, tno de eli haciendo scontecimientos (are iar el mundo) por medio de oxructaras'y el otro fsuructurs. por medio. de acontecimientos (6rmug {erecta en esta form jane, pero que nuciro and Tir debe permite matin). Contemplemor ahora ite retro de mujer pinto por Close, preganttmonas por las razon ce In profendsima enociin etéien he enscta inexplcablemente, al parce, Hd reprodve ga ilo por bilo y en un cxcrupslos trompetoe! de una gorguera de’ encaje (Cin) TH ejemplo de Clovet no ct escgido al ar: puss es abidg que le gumtaba.pintar 3 tamafo menor que 1 patorly sus cadror eon, pr, como tos jrdines faponese, lor auton em minintra.y los barcor en as Berlin, lo que en lengunje de bricoteur se lama “m0- elo veducido". Abora bien, se planes Ia cosiém de Shersi el modelo reducdo, que et tambien Ia "obra Inert” del compar, no ofece siempre y por do- {Ger el tipo mimo de Ta obra de arte” Pues parece Seitjue todo modelo reduido tiene una vocaién ete fica hide dénde saan eta virtud comtamte, #1 n0 fu dimensiones pins 0. la invers, que Ta ine tensa tayoria de la obras de arte son también mo- {clos redudon. Podria-ceense que este carder obe- dece, en primer lugar, 2 uns preocupaciim por econo- Inver. materiaks y medion, ¢ ivocsr en apoyo de oa Interpretacén obris iniscustemente sti, aunque tmonumentales Es precvo entenderse acerca de las de finitones ls pinturas dela Capilla Sista sun Imodelo reduido, 2 despecho desis dimensiones ime ponents puesto que el tema que iustran es el del Fade los Gempos! Lo mismo ocurce con el xinboi tno camico de los monuments religiont. Por otra ane, pooriamos preguntarnon 3 <1 ceca extéien di LA CIENCIA DE LO CONGRETO s 5, de una extatua ecuestre de tamatio mis grande Gue el natural, proviene de que agranda aun hombre basta sleansar lis dimensiones de un pefion, y no de gue reduce lo que e primero, de lejos, percibido come fun pefién, a las proporciones de un hombre. Por ul timo, aun el “tamafio natural” supone al modelo re- cide, puesto que Ia transposicion grifica 0. plistica spore siempre la renuncia a determinadas dimensio- hes del objeto; en pinturs, el volumen; los colores, los lores, Ins impresiones tictles hasta en la escultura: 4, en los dos casos, In dimensién temporal, puesto que Gi todo de la obra figurada es aprehendido en el ins Entonces, zqué virtud acompaia. a la reduecién, ya sea de excala 0 yx sex que afecte a las propiedades? AL parecer, es resultado de una suerte de inversién del del conocimiento: para conocer al objeto real 1 su totalidad, propendemos siempre @ obrar a partir de sus partes, La resistencia que nos opone se supera ividiéndola. La reduecién de escala invierte sta. si fmuacidn: siendo més pequefia, Ia totalidad det objeto hhos parece menes formidable: por el hecho de haber sido cuantitaivamente disminuida, nos parece que se hha simplificado cualitativamente. para decirlo con mds exactitud, esta transposicién cuantitativa acrecienta ¥ diversifica nuestro potier sobre un homélogo de la com; a través de @, esta tltima puede ser agarrads, sopesada en Ia mano, aprehendida de una sola mirada, La mufieca de Ia nifia no 6 un adversario, un rival (6 siquiera un interlocutor: en ella y por ella, Ia perso- nna se trueca en sujeto. A la inversa de Io que ocurre ‘iando tratamos de conocer a una cosa o a un'ser-de talla real, en el modelo reducido el conocimiento det todo precede al de Tas partes. Y aun si esto es una ilusién, Ia raz6n del procedimiento es la de crear o la de mantener esta ilvsién, que satisface a la inteligen- ® LA CIENCIA DE 10 CONCRFTO cia y-a Is eensibilidad com um placer que, fandindonos solamente en esto, puede Mamarse ya. estético. asia ahora no hemos considerado mis que In escar Inj In cual, como seabames de ver, supone una relscién dlaléctica entre magnitud —es decir, cantidad— y.cua- lidad. Pero el modelo reducido posee un atributo sr plementario: es algo construido, man mede , lo que Smt echo mun Porno 20 ena ane proyeccidn, un homélogo pasivo del objeto. Conscituye tuna verdadera experiencia sobre el objeto. Ahora bien, fen Ia medida en que el modelo es artificial, se torna posible comprender imo esti hecho, y esta aprehen sién del medo de fabricseién aporta una dimensién suplementaria a su ser; ademis ~lo hemos visto @ pro- pita del Bricolage, pero el ejemplo de las “maneras” ‘de los pintores, nos muestra que esto es verdad tam bbign del arte— el problema lleva consigo siempre varias soluciones. Como la eleccién de una solucién,acarrea ‘una modificacion del resultado a que nos babria com- + ucido otra solucién es, por lo tanto, el cuatro general dde estas permutaciones cl que se encuentra virtalmen- te dado, al mismo tiempo que la solucién particular ofrecida a Ja. mirada del espectador, transformado por esto —aun sin que 4 se dé cuenta en agente, En vireud de Ja sola contemplacién, el espectador, si nos std permitido decirlo, entra en posesién de otras mo: dalidades posibles de la misma obra, y de las cuales se siente confusamente el creador con mayor raz6n que ‘el propio creador, que las ha abandonado al exeluiras ide 44 creacién; y estar modalidades forman otras tantas erspectivas suplementarias, abiertss sobre Ia obra ac tualizada, es deci, realizada. O dicho de otra manera, Ja virtud inurinseea del modelo reducido es 1a de que ‘compensa la renuncia a Jas dimensiones sensibles con Ia adquisicién de dimensiones inteligibles, ‘Retornemos ahora a la gorguera de encaje, en el cus LA GIENGIA DE LO CONCRETO ® ro de Clouct. Todo lo que acabamos de decir se le splic, pats, para representala en forma de proveceién fm tm expacio de propiedades en el que las dimensio- Set semables son ‘nds pequetay, 7. meen’ mumeroeas gue las del objeto, ha sido necesario obrar de mancra fiméirica ¢ inverse a como lo hubiere hecho Is. cien bse hubiese propucsto, pucr tal ex su funcién, pro. ucir ~en ver de reproducir— no slo un nuevo. punto ge eneaje en Ingar de um punto ya eonocida, sino tam bien un verdadero encaje en vex de un encaje figurado, En efecto, In ciencia fhubisse trabajado en cicala real, ‘pero por intermedio de Ia invencién de un oficio, en fnto que el arte wabaja 2 escala reducide, teniendo ‘como fin una imagen homéloga del objet. La. primera “Scividad pervenece lorem de 14 metonimia, susti- faye 2 un ser por otro ser, @ un efecto por au causa, fn taito que la segunda pertenece al orden de Ia me: ‘ors. YY to no cs todo, Pues, si es verdad que la relaciin des priocidad entre extractura y acontecimiento se amr tifiena de manera simetrica e inversa en la ciencia fn €l bricolagenes havo que, desde este punto de vit fembién, clare ocupa’ una posicién intermediaria. ‘Aun si lo figuracién de una gorguera de encnje en ‘modelo reducido supone, como lo hemos mostrado, wn conodimiento interno de su morfologia y de su téenica e fabricscién (y. si se hubiese tratado de uma repre- fentacién homana © aniwal, habriames dichor de la fnatomia y de las posturss), no ae reduce a un dia- Pam os una limina de tecnologia: realiza la sintess de citar propicdades intrinsecas y de las que provic: fren de un contexto espacial y temporal. #1 resultado final ex Ia. gorgucra de encaje, tal cual os absolute. mente, pero también tal como, en el mismo insane te, su apariencia se ve afectada por la perspectiva fen que se presents, que pone en evidencia algunas a |LA CIENCIA DE LO CONCRETO. partes y oculta otras, cuya existencia continia, por Tanto, influyendo en el resto: por el contraste entre su blancura y los colores de las otras piezas del vestido, Gl rellejo del cuello nacarado que rodea y el del cielo @e un diay de un momento; tl, también, porque significa como adorno banal o de aparato, llevado, nue vo 0 usado, recientemente planchado 0 arrugato, por tuna ‘mujer del pueblo © por una reina, de la que Ia fisonomia confirma, invalida o califica su condicion, en tun ‘medio, una sociedad, una regién del mundo, un periodo de Ia historia... A mitad de camino siempre entre el esquema y la anécdota, el genio del pintor omiste en unir un conocimienio interno y extern, tun ser yun devenir; en producir, con su pincel, un ‘objeto que no existe, como objeto y que, sin embargo, Sabe crearlo sobre #0 tela: sinters exactamente equil- brada de una o de varias estructuras artificiales y max turales y de sino o de varios acontecimientos, naws tales y sociales, La emocién estéica proviene de esta unig’ instituida en el. seno de una cosa creat por fl hombre, y por tanta, también, virtualmente por el fspectador, que descubre su posibilidad a través de Ia fobra de arte, entre el orden de la estructura y el orden ‘del aconteciniento, Ente andliss incita a hacer varias observaciones. En primer lugar, permite comprender mejor por qué los faitos se nos pretentan simultineamente, como sistemas Ge relaciones sbstractas y como objetor de contemplar tin extéica: en efecto, el acto creador que engendra fal mito es simétrico e inverso a aquel que encontramos en el origen de la obra de arte, En cste-tiltimo- mento de Ja estructura en los dos casos. Sin embargo, ninguna forma dle arte mercceria este nombre si ddejine captar en sv totalidad por las contingencias ex: twinsecas, ya sean la de la oeasién o la de Ia destina- cin; pues la obra deacenderia.entoneces al rango dé icono."(euplementario del modelo) 0 de instrumento (omplementario de la'materia trabajada). Aun el arte ‘mas sabio, si not conmueve, no sleanza este resulta- ido mis que a condiciin de detener a tiempo esta disipa- ‘ign de la contingencia en provecho del pretexto, y de incorporatla a In bra, confiriéndole a esta tltima la lignidad de un objeto absoluto. Silos artes arcaicos, log artes primitivos, y los periodes “primitives” de Tos artes sabios, son los tinicos que no envejecen, lo deben, 2 esta consigracin del accidemte al servicio de la eje- ‘cucién, por tanto al empleo, que tran de hacer inte- fal, del dato bruto como materia empiriea de una sig: acto? 1 Prosiguicndo este anlisis, podriamos defini la pinnura tno figurativa por dos earacteres. Uno, que tiene en comin fen In pintura. de caballete, consiste en un rechazo Ge la centingencia de destinadn: el coadro no esta pra un empleo particular, EL oto caracter, propio de pintura no figurativa, consist en una explotacon me’ ica de ls contingencis “de ejecueion, que se. pretend fonvertir em el pretexto o en la gcason externa del cuatro 1 pinara no figurative opta “manera” 2 guia de“ pretende dar una represntacién conereta de as Condiciones formales de toda pintura. De esto resulta, px radojcaments, que Ia pintura no figurativa no crea, como To cree, obray tan reales —si no mds come los objetor et" mundo fisico, sno imitaciones reallstas de modelos Inerintenter. Ex na creel de pintura académica, en 12 (que cada anita te afana en representar ls manera como, fjecutara ous euadros si, por casalidad, lor pintae. LA GIENGIA DE LO CONCRETO Pa “Por iilkimo, hay qye afiadir que el equilibrio entre “eezuctura y acomtedimiento, necesidad y contingencia, Geerioridad y exterioridad, es un equilibrio. precario, Genstantemente amenazado por las tracciones que © fen un gentida o en el otto, segim las fluctua: “Gones de la moda, del estilo y de las condiciones socia- a generales, Desde este punto de vista, el impresior ‘pismo y el cubismo se nos aparecem menos como dos ‘Gzapas sucerivas del desarvollo de Ia pintura que como Gos empresas cémplices, aunque no hayan nacido. en tn unt, chron conven prt Pos Jongar, mediante deformaciones complementarias, un ‘gordo de expresién cuya existencia misma (hoy nos dar ‘os cuenta de ¢sto mejor) estaba gravemente amena- Gada. La boga intermitence de los “collages”, macida Gn el momento en que el artesanado expiraba, podria po ser, por su parte, mis que una transposicion det Bricolage al terseno de los fines contemplativos. Por Gltimo, el hincapié- hecho en_el aspecto acontecimental puede también disociane segiin los momentos, subrax Fondo més, a expensas de la estructura (entiéndase: la Enructura de igual nivel, pues no esté excluido que el aspecto estructural se restablezca en otra parte y en fun nuevo plano), unas veces, [a temporalidad social feomo a fines del siglo xv con Greuze, 0 con el rex Jismo socialista), y otras veces la temporslidad natu. ‘al, y aun mettoroldgica (en el impresionismo) - Si, en el plano expeculativo, el pensamiento mitico no ‘earece de analogia con el bricolage en el plano. précti+ fo, y si la creacién artistica se coloca a igual distancia Entre estas dos formas de actividad y Ia cencta, el juego ¥ el tito oftecen entre si relaciones del mismo tipo. Todo juego se detine por el conjunto de sus reglas, que Tiacen posible wn nimero pricticemente ilimitado ide partidos; pero el rito, que también se “juega”, se s6 LA GIENGIA DE LO CONCRETO emeja més bien’ a una partida privilegiads, excopida YJ consereads de entre tolas las posibles porque s6lo Ena se obtiene,en ‘um determinado tipo de equilibrio fentre los dos campos La transposicgn es féemente Yerficble en el cao de los gabukwgama de Noeva Guinea, que han aprendido a jugar furbol, pero que joenan, varios die seguidos,eantos partidos como sean Iecesrios para que se equilbren exactamente los par tides perdidos 7 ganador por cada bando (Read, P- 429}, lo cual ex tater a/un juego como un rito. Se puede decir otro tanto de lov juegos = que se entregaban los indiot fox, en ocasién de las cetemonias de ndopciio cay fin era sustituir un pariente muerto por otto vivo, y de permitir, ai, Ia partida definitive Eel alma del difunto® Lot rtos funerarios de lox fox, fn clecto, parecen estar inpirados por la gran preocw- pecién de Geshacere de lon muertos, y de impedir que Bios no se venguen en lor vivos de la amargura y de lon pesnes que sienten por no encontrare ya entre lon La filsotiaindigens toma, pues, dedididamente, fl partido de los vivos! “la muere es dura; més duro todaviaves pes”. EI origen de Ia muerte se remonta a Ia destruccn, por las potencae sobrenaturales, del mis joven de dot Frermanos miticos que detempenan el papel de heroes faulturales entre todas las trbus algonguinas, Pero ne fra todavia delinitiva: fue el mayor el que la convirtid fn definitiva al recbazsr,.no obstante su pesar, Ia pe tien del fantaama, que queria volver & ocupar su Tgar entre los vivos. Segin este ejemplo, los hombres eben tare mes até Jos muss oe voy rin comprender a &tos que no han perdido nada Thode, pues retbirin regularmente offendas de tabaco J de alimentos, en cambio, 4 cspera de ellos que, 2 eulo de compensacién de exta muerte, cuya realidad 8 Vease, infra, ps 286 LA CIENCIA DE LO CONCRETO 7 a los vivos, y del pesar que les causan_por -deceso,¢llos les garanticen una larga existencia, ves 'y algo que comer: “fen lo sucesivo, son los muer- Jos que traen Ja abundancia, comenta el informador na, “ellos {los indios) deben engatusarlos (coax 3) com este fin". (Michelson, 1, pp. 359407). “Ahorn bien, los ritos de adopeion, que son indis- ‘pensables para decidir al alma del muerto a que se ‘Saya definitivamente al més alla, donde habra de des: ‘exxpefiar su papel de espiritw protector, van acompa: Gados normalmente de competencias deportivas, de jue- ‘ger de destrera ode azar, entre bandos constituidos ‘fonforme a una division ad hoc en dos mitades: Tokan, “Ge um lado y Kicko, del otro; y se dice expresamente, ‘en varias ocasiones, que cl jueze opone a los vivos y ‘$ los muertos, como si, antes dle desembarazarse deti- “nitivamente de él, los vives ofreciesen al difunto el ‘eensvelo de un iiltimo partido. Pero, de esta asimetsia de principio entre los dos campos, se desprende auto- ‘iiticamente que el desenlace esta determinado de an- He aqut toque psaba cuando jugaban a la 2. Bel hombre’ (el difuno) por quien se tokanagi ganabar rida. Los Kickoagi no. dian ginar. Fiesta tenfs lugar por una mje kieko, Tos Kickesgi ganaban, y eran los {oranagi ler’ que no’ pout ganar’ Mtichelson, as) ¥en efecto, geudl es In realidad? Fn el gran juego Dioldgico y social que se desarrolla perpetuamente en- ‘te los vives 7 los muertos, et claro que los tinicos que ‘ganan son los primeros. Pero —y toda ki mitologta ‘norteamericana lo confirma de una manera simbsliea (que innumerables mitos pintan como real), ganar en a LA CIENCIA DE LO CONGRETO el juego es “matar” al adversario. AL preserbir sem pre el triunfo del bando de Jos muertos, se les daa %tos, por tanto, Ia ilusién de que son los verdaderos ivientes, y que sus adversarios estin muertos puesto ‘que ls han “matado". So capa de jugar con los mucr- fo, se lor engaia y se los ata. La estructura formal de lo que, a primera vista, podrfa parecer que era una ‘competencia deportiva, es en todos sus detalles seme jane a la de un puro rival, tal como. el mitawit-o 1 midewiwim de las mismas poblaciones algonquinas, fen el que los nebfitos se hacen matar simbélicamente por lor muertos cuyo papel desemperiun los iniciados E fin de obtener wn suplemento de vida veal a costs de una muerte simulada. En los dos casos, la muerte ‘es wsurpada, pero sélo para ser engaiiada. Entonces, el juego se nos. manifiesta. como. disytne tivo: culmina en In ereacion de una. separaci6n, dife- rencial entre jugadores individuales o entre bandos, {que al principio nada designaba como desiguales: Sin ‘embargo, al fin de Ta partida, se distinguiran en gana- ores y perdedores. De manera siméarica inversa, ritual es conjuntivo, pes instituye una unién (podria: fos decir aqui que wna comunién) ©, en todo" caso tuna relacién organica, entre dos grupos (que xe com Tunden, en el limite, no con el personaje del oficiam te, y el otro con In colectividad de los fiele), y que fstaban disociados al comienzo. En el ciso de} juego Ta simetsinesté, por Jo tanto, preordenada; y es este tural, puesto que se deriva del principio de que las reglas son las mitmas para los dos campos. La aslme- tia, es engendrads; se deriva inevitablemente de ta ontingencia de los acontecimientos, depensian.éstos de a intencidn, del azar, 0 del talento, En el caso. det lanl 6 1o/conuarl: se eabece ns viet pe concebida y postilada entre profano y sagrado, fieles Y oficiante, mucrior y_vivos, sniciados to iniciados, LA GIENCIA DE LO CONCRETO » 'y el “juego! consiste en hacer pasar @ todos los pantes al lado del bando ganador, por medio fscontecimientos cuya naturaleza y ordenamiento tie fun cardeter verdaderamente estructural. Como la ca aunque aqui, todavia, ya sea en el plano re. _ Ja sea en el plano prictco), el juego produce jentos a partir de una estructura: se com- fentonces, que Ios juezos de competencia prov ‘nuestras sociedades industriales; en tanto que ritos y los mitos, a la manora del bricolage (que ev tmismas rociedacies industiales. ya no toleran, sino hobby 0 pasitiempo), deseomponen y recom: ‘anjuntos acontecimentales (en el plane pst ‘guico, socioshiswérico © técnica) y se valen como de tantas.piezas indestructibles, con vistas a ordena- extructurales que habrin de hacer Ins veces, “gkternadamente, de fines y de medios. Il, LA LOGICA DE:LAS GLASIFICACIONES TOTEMICAS Sin BUDA, hay algo paradbjico et 12 idea de una Iogich ‘enyos términos consisten en sobras y pedazos, vestigios de proceios psicoldgicos o hiswricos y, en cuanto tales, desprovistos de mecesidad. Quien dice Logica, dice ins- tauracidn de reliciones mecesarias; pero ecdmo se ex tablecerian tales relaciones entre términos que nada ha destinado a que cumplan esta funcién? Las propos cones no pueden encadenarse de manera rigurosa més ‘que si sus términos han sido previamente definidos sin ‘equivoco. gEn las piginas anteriores, no. nos hemos asignado la imposible tarea de descubrir las condicior nies de una necesidad a posterior? Pero, en. primer lugar, esas cobras y esos pedazos no se muestran como tales mis que ante los ojos de Ia historia que Jos ha producido, y no desde el punto de vista de la logica 4 Ia que sirven, Solamente por relaciéa al contenido podemtos proclamarlos heterdditos, pues, por Jo que toca a la forma, existe entre ellos una analogia, que et ejemplo del bricolage ha permitido defini: esta analo- fia consisce en Ia incorporaciSh, a su forma misma, de lana determinada dosis de contenido, que e aproxima- tivamente igual para todos, Las imagenes significantes ‘del mito, los materiales del bricoleur, son clementos de> finibles mediante un doble “aiterio: har servido, como palabras de un discurso que la reflexién mitica “des ‘monta” a Ja manera del Bricoleur que arregla tos en {granes de un viejo despertador desmontado; y pueden Yodavia servir para el mismo vs, 0 para un wo dife- rrente, por poco que los desvie uno de su funcién primera. fo TAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 61 segundo lugar, ni tas imigenes del mito, ni los el bricoteur provienen del devenir puro. “tion, que piece breerles fle. cuando Tos ob- Crecente de si wits erp To pea ‘nat, ciando formaban parte de ots conjun- faietetes, 9 To que es mas lo poscen todavia, en ‘medida que no ton materiales brates, sino productos Tabajados:terminos del lengusje o, en el caso del jg términos de un sistema tccnolégico, expre- Condensadas, por tanto, de relaciones necesaias tas que, de maneras divers, las consriceioncs har tir el eco sobre cada uno de sus niveles de uti ‘Su necesidad fo @ simple y univoca: existe, To tanto, como la invariancis, de orden seméntico vette, que caractriza al grupo de tat transforms. ‘Gones 2 las que se presan, y de las que hemos visto “gue no eran imide. Mpsta Valea opera, un poco,» la manera del caleidos ‘copio instramento que contiene también sobras y tro foe por medio de Ios cuss se realizan ordenamientos ‘qulturales. Los fragmentos provienen de un proceso de ompimiento y de destruccon, en s{rusmo concingen- Je pero a reserva de que sus productos ofteean entre algunas homologs: deal, "de. vivacldad’ de ‘color, de transparencia, No tienen ser propio, por re Tecibn lor objetor manfacturados que pronueiaban fon "discurio” del que han pusedo a ser los excombros indefinibles, pero, en otra telacibn, eben poseerlo en ‘eantided soficiente para participar Wtilinente en la for- “ucidn de un ser'de una nueva clase: cate ser conse ‘en ordenamiemtos en los que, en virwd del juego de Ibs cspejon los reflejr cquivalen a objeton, decir ‘en los que los signos aleinzan el rango de cous sig pifcada estos ovdenomientos realizan posibles, cuyo tnimero, aunque sea muy elevado, de tolos modos no G ilimitado, puesto que es fancién de las dsposiciones (TAS GLASIFICAGIONES ToTEMICAS de Jos equilibrios realizables entre cuerpos cuyo mil nero mismo €s finito: por ultimo y sobre todo, estos ndenamientos, engendrados por el enewentro de. acon: tecimicntos contingentes (el giro que del instrumento hhace el observador) y de una ley (la que preside a ts construction del caleidoscopio, que comesponde al ele- mento invariance de los coustrefimientos de que ha blibemos hace un momento), proyecta modelos de ine teligibilitad de alguna manera provisionales, puesto que ‘ada ordenamiento se puede expresar en forma de re- liciones rigurosas entre sus partes, y-que estas relacio- nies no tienen mis contenido que el ordenamiento ‘mismo, al cual, en la experiencia del observador, no) onesponde ningin objeto (aunque pueda ser que, por ‘ste incermedio, algunas estructuras objetivas se revelen, fantes de su soporte emplrico, domo, por ejemplo, las e los cxisteles de nieve o de algunos tipos de radiow Tarios y de diatomaceas, al observador que no las bays visto nunca todavia. Concebisnos, pues, que tal Jogica concreta sea posible. Resta, ahora, definir sus caracteres y la manera en que se manifiestan en ol transcurso de la observacién etno- ‘geifica, Esta tims los capta en un doble aspecto, afec- tivo € intelectual. “Los seres que el pensamiento indigena carga de nificaciin se_perciben como si ofrecieran com el hom be tun determinado parentesco. Los ojibnea creen en, tun niverso de seres sobrensturales: Pero, a llamar sobrenaturales a estos seres, se"filuex un. poco LAS GLASIFIGACIONES TOTEMICAS re, 2 Solldege Vinge aurea (Segin Bull. Torrey Botanical ‘clut) de todo, se trata de animales miticos, caya. identifi cacién podsfa parecer indul, © inclusive imposible. Y, sin embargo, de sta identificacisn depende toda Ja interpretacion del ritual. Por relacién a la cara de Aguilas, no se puede sacar nada de los osos; pero en Jo tocante Jos glotoncs —que los canadienses Uls- man carcajous, adaptacién de una palabra india que significa “mal caréeier"— ya no ocurte lo mismo, puee ‘ocupan en cl folklore un lugar muy particular; animal engufiador en la mitologia de los algonquinos del noreste, el glotén es un arimal odiado y temido, tanto por los esquimales de la bahia de Hudson como por fos athapaskan occidensales y por las tibus conteras de LAS CLASIFIGACIONES TOYEMICAS 8 Alaska y de a Columbia Britinica. Reuniendo las in- formaciones relativas a todas estas poblacioncs, se ob} tiene la, misma, explicacin que: In recogida indepen ientemente por un gedgrato contemporineo de boes {e los tramperos: “el glotdn es casi el tinica miembro de la familia de tos mustelinos que no puede ser cogido en una tramps, Se divierte en robar, no solamente las eapturas, sino también Jas trampas del cazador. Este Lslimo no se deshace de él més que con el fel". (Brow illetie: p. 155.) Ahora bien, los hidawsa cazan las agui. las ocultindose en. fosas; el dguila es atraida por wi ‘echo colocado encima, y cuando el ave se posa. para agarrarlo, el cazador la atrapa con sos manos desnuda’, Ext téenica ofrece, pues, un caricter paraddjico: el hhombre et Ia trampa, pero para desempefar este papel, tiene que descender a una fora, e decir, asumir In po. sicidn del. animal cogido en una trampa, ex ala yer, cazador y pieza de caza. De todos los animales, el glotén © €l tinico que sabe superar esta situacién ‘contradic: foria: no sélo wo teme nada a las trampas que le pre: paran, sino que rivaliza con el trampero al robarle sus esas, y a veces también sus trampas. Si este comienzo de interpretacién es enacto, se dex prende de 4 que ta importancia ritual de la cara de Aguilas que practican los hidatsa obedeee, por lo menos en parte, al empleo de fosas, es decir, a'la adopein, por el cazador, de una posicén singularmente baja (en tide propio, y, como acabamos de ver, también en el figurado), para capturar una piesa euya posicion es 1a més celta, objetivamente hablando (el dguila vuela alto). y también, desde cl punto de vista mitico (en el que el aguila ocupa el punto ms alto en Ia jerarquia de las aves). EL andlisis del ritual veriica, en vodos sus detalles, sta ipétesis de_un dualismo entre una presa celeste yum cazador eténico, que evoca tambien 1a més vigo- te LAS CLASIMIcACIONES ToTEMICAS rosa opotcii concebibe, en el: domino de Ia cazay en Torma de la raion entre lo alto y lo bajo. La ext crdinaria complicaciin de lov tos que preceden, scone altar) concliyed by cars de dmullat x pes ta contre: parte de la posicin excepeionsl ocipada por eta en Eseno cle tna tipolagia lien, que hace doella la ‘opeedéucconeetard Une speracife maxima: ente cl exrador ¥ su pica ’AT sto less alaran lgunoe puster'cxcuros 4c ritual sobre todo el aleance y Ie sgnilicacion de fo mltos'eantidon saranie:laerpedicpnes deca «que se refleren a heroes culuursles capacer de watnfor Iharee en flecas, y macitron de Ia cara con arco: doble imente inadecuadox, por ta ras6n, para desempeia el papel, de. cebo. para la caza_de gulls, bajo su apa: Fiendla animal d& gato salvaje y de mapche, En efecto, ta cara con arco, lectn ala regidn del espacio sitiada inmediatamente por encima del suelo, es dec, el cielo tment trio o- medio: cl caador y In pieva se juntan nel espacio: invermediaro, en tanto que la cata de ‘guilas lor desune al asignares eplocaciones opuestis: el cara en Uerrajlaiearaleetasaal erptten Otro aepecto singular de Ia casa de Aguilas es que ts mje rent inten, ene dee sy cintiaiamsente alas ercencias.rdctcamense tak Wal cect ia pusbbe caniorey Unecepetea ia hidaisamismos por lo que se refiere a cualquers otra amacque no sex la de las dguilan Exe detalle 4 ade fy tambida, 2 a loa de lo que acabamos de decir, 2 tiene en” cuenta. que.cn Ia caza de. aguilss conce Dida como a reduccion de una separaci6n maxima ety tte earadory pice, Ia mediacon’ se cfecula, en el plano tdenteo, por el intermedio del cebo, pedazo de carne © Poqueto. animal caado, por tanto, cuerpo sangulno- Tento que babri de sufrs una répida putrefaccon. Una az primaria, “da que obtiene cl eebo). eondilona LAS GLASIFIGAGIONES TOTEMICAS una caza secundaria: una es sangrienta (por medio del arco y las flechas), y Ia otra no. (las dguilae se estran: gularin sin efusién de sangre); una de ellas, que con- siste en la conjuncién cercana del carador y de la pieza, proporciona el término mediador de una conjuncion tan Femota que se presenta, primero, como una disyuncién insuperable, salvo, precisamente, por medio de la san- se. En tal sistema, as reglas femeninas adquieren una triple determinaci6n positiva: desde un punto de vita iricamente formal, siendo una caza lo contrario de Ja otra, el papel que se atribuye a las reglas se invierte e igual manera: maleficas en un caso. (por exceso de similicud), se tornan benéfieas en el otro caso (en el ‘que su sentido metalérico se duplica con un sentido metonimico, pesto que evocan al cebo como sangre ‘orrupcion orginica, y puesto que el cebo es una pat te del sistema). Desde el panto de vista téenico, el ‘cuerpo sangriento, que-no tarda en convertirse en cae rrofia, contiguo durante horse o aun dias al cazador viviente, es el medio de la presa, y es significative que ‘el-mismo término indigena designe el abrazo amoroxo yy el cebo para él ave. Por iktimo, en el plano serine fico, Ia manchz, por o menos en el pensamiento de Jos indios de In Amériea del Norte, consiste en una conjuncién demasiado estrecha de dos términos que es: aban destinados a permanecer, cada uno de ellos, en ‘estado “puro”. Si, en In caza cercana, las reglas feme- ninas corren siempre el riesgo de introducir tun exceso de conjuncién, acarreando, por redundancia, 1s satura- cién de Ta relacién primitiva y newnalizando su virtwd dindmica, en Ta caza Tejana ocurre Jo contrario: la con juneidn 5 deficiente y el tinico medio de poner reme- dio a su debilidad consiste en admitir 1a maneha, que aparcceré como feriodicidad sobre el eje de las suce: Hones, © como eorrupeién sobre al ej¢ dela simulta 8) LAS CLASIFICGACIONES ToTeMICAS Come estos dos ejes corresponcen, uno a la mitolo- ‘lt de Ia agriculeura, y otro, a la mitologia de In eaza, por medio de esta interpretacién se Mega a un sistenna de referencia global, que permite percibir homologias entre temis cuyos desarrollos no oftecen, 2 primera vis- ta, relacién alguna. Ahora bien, en el caso de la caza de dguilas, este resultado ¢s muy importante, porque ‘existe, con formas divers (pero siempre. fuertemente impregnadas de ritual), sobre casi toda Ia extensién del continente amerieano y en pueblos de culvuras di ferentes, cazadores los unos, agticultores los otros. La funcién, modesta, pero positiva, atribuida a 1a mancha centre los hidatsa, os mandan 'y los pawnee (con vax rlantes interpretables, por lo demis, en funcidm de la ‘organitacién social de cada tribu), puede entonces tra- fare como un ciso particular den conjunto mds vasto, del que otro caso particular est ilustrado por el ‘mito de los indiot pucblo, del hombre comprometide ‘e0 matrimonio con una muchaeha-éguila, mito que tte lor indioe pueblo est4vinculado 2 oo: el de Ia noviaantasma (‘eorpse girl’, “ghost-wife”) en el que Ia mancha potee una funeidn fuerte (novia-caddver, en ‘vez de mujer indispuesta), pero negativa (pues acarrea Ja muerte del cazador, en vex de su éxito), porque, se ‘in las indios pueblo (y como Io explican los mitos). ‘mo hay que hacer sangrar a os conejos que constivuyen cl objeto por excelencia de la cara ritual, en tanto que, pata los hidatsa, hay que hocerlor sangvar para que pue- ddan servir de medio a la caza ritual por excelencia: 1a ‘ear de dguilas, Las cuales bo deben sangrar. En efecto, Jos indios pueblo capeuran. a las siguiles, las rian, pero. no las matan, y algunos grupos se abstienen inclusive ‘completamente, por medio de olvidarse de alimentar alas aves, y dejarlas morir de hambre. Para volver brevemente a los hidasso, se plantean ‘otros. problemas, que tienen que ver con el papel mir LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 85 tieo que se hace desemipefiar al glotén, en una reyidn (que est4 en Jos limites del area mayor de difusién, mis septentrional, de esta especie animal! Mencionamos fxte punto para subrayar que problemas de orden his- tbrico y geogritico, Jo mismo que semintica y estructu- ral, estén ligados 2 la identifieacién exacta de un animal que cumple una funcién mitica: Gulo tuseus, Esta identificacion repereute profundamente sobre Ia interpretacidn de mitos procedentes de poblaciones tan alejadas del habitat del giotén como’ los indios pueblo, © aun, en el corazén de Ia América tropical, los.sherente del Brasil central, que poseen igualmente el mito de la viafantasma. Pero no insinuamos que todos eston smitos hayan sido tomados, 4 pes de distancia consi erables, a una cultura septentrional: el problema po- dela plantearse solamente en lo tocante 3 lor hidatsa, puesto que el glotén figura explicitamente en sus mi fox. En los otros casos, nos Timitaremor a comprobar ‘que estructuras légicas anfloges pueden construire por 4 Masta donde se remontan sus tradiclones, lor hidasa patecen haber vivid en diversor punter del ertado de Dakota det Norte En cuanto al glosda “et una eepecie crcumpolar de oe Dosjues septentsionales de Jos dos continentes Ep la Ame Hea del Norte, 56 Je encontraba antano desde el limite del Domgue, a1 norte, hasta Ia Nucea Inglatera, y el Estado de ‘Nueva York, al ur, y en las Montafas Rocrat hasta el tado de Colorado. Por ultimo, en la Sica Nevada, hasta monte Whitney en California". (Nebon. p. x8) El glotn comin se encontraba “desde el Ocfano Arteo, y ta bahia te Baffin, en el norte, y desde el Pacfian basa et ties basta Ia zona fronteriza del norese de. lot Ex Unidos: Wisconsin, Michigan, Minnesota, Dakota del Nor te: y, em las Montaftas Rocoas hasta ler estador de Utah ¥ 4© Colorado”. (Anthony, pp. 111 #8) Espectesverosimil ‘nente sinénimas se han senalado en las montafiat de Call fomia yen Fort Union, Dakota éel Norte (id). 85 LAS CLASIFIGAGIONES ToTEMICAS medio de recurios de léxico diferentes. Los elementos no son constantes, slo lo son tas relaciones. Exe hima’ observcién conduce al examen. de ota difeahad. No basa con identifier, com preci, cada Shimal, cada planta, pdr, cuerpo cst © fendmeno Sata) evocadon en Ton mites 7 e ritual —tareas mle piss pars las que sama ver cath prepara el etndgrafo= Sino que hay que saber también qué papel les atbuye da ‘olsrs cel eno de an seria de sigan. fre Cero cela dilator Ix squess la nara ei traci edge y dee me ttencién prolongada y Yepetda, cjrcico siduo de (o- owsheloraido loge cgpcioeishaecreels tmctdico de las deyeriones de los animales pata cono- rats hibioralinenticon ce. De todos exon detales fmenudos, pacentemente acumuladot en el ranean de siglot yfielmente tasiidos e-una generacion 1s ott solamente algunos ee conserva para atgoae al drimal o a ln planta une fancién sigaficante enw Sima: Ahora Ein, ex preci aber cul, pes, de una Sociedad a la otra y por lo que toa 3 la'misma expe: Sie estas relacones no ton constants Len Than » Woo dayak del mar Od sr de"Borneo, scan promgles interpreando el canio'y el vuelo de hin Espoces deer El canto preipitado del aren: Aaj creado (led lps galerictlrus Cursier), evo, dicen, cl ehiaporoteo de Is rans sugua pcs. v0. fablemente ef exto de la tora el geo de alarm de th togén (Ulorpactes didi “Temminck), comparad fos estetrer de umn anil doglldo, presala una tnona cua en tanto que el gta de alors de Sea ainormis Teaminck w dice que dsprende, como fon rapara los mals epiriis quo aceban a los cu tives porgue se pares al mt que hace el raspado de ttn cothilo, Ouro togén (arpctes devnucelt Ten LAS eLASINIGACIONES ToTEMICAS sinc) presgh por su “ris” el dito de las expedcio ter comerciales y por a copecic de cilavina de color ‘ojp brillant, evora el prewigio pineal 2 3s gue fru viceroy aoe viajes lejoes Hs caro que lr mismos detalles podsfan ‘aber re ibid sigilealnes diterenes,y que otf rages ticioea dss misma’ ayes” pitan haber eo prefeidos en vstcde eon, Hl estes adiinaoro clige folamentesigunos range dative, le prt una silken atBerasny ye Umitrn siete-ave:cuyaloe Gn not sorprende en razén de ws inigificania, Peo, srbitcrio al mipelGeslontémianns el aatems sc tran eta dd tected peas carne tere solamente aes cer contumbres se pram flr mente aun simbolime snopomérficn,¥ son, tices de difreniar las sina de Tat otras por medio. de re {os combinables entre a para fojar mensajes mis cone Flier (Freema).Sncetsbarge, abla cucnta-de Ia Fiqueray de la divereidad del material en brat del qe 26lo alguns elements, de entre tanios.pesbley on liza por el stema, nose puede dda de que un Bumero considerable de siemos de fx mim else hae Item otvectl ua coherecia tal, y que nioguno ea redetinado. ser elegido por todas Ins soca Pain as tice ncn ae poem bifccin inne: su stnicacion co" postin, farina heetasyachcoteto cata por parte, por otra party de la etractura del sistema en Ehgue babe de igure Esa acta select. s-maniiea ya’ alive ded Sesaad Ea igang rchipneasiniebs et ie que “pica con el pico's yl pijao carpmtero Eee teeariics pumtineanctiercone wr pat bajo un temmina genic que expr el bul bh vexipiiar is enlbctinnla/clrvecocia Por tnt += pln en Jos ecto en] etd lana, mle 8 LAS GLASIFICACIONES ToTexteAs en su forma de erislida o de adulto. El nombre de ta alondra hace elacién a su expol6n alagado, en tanto ‘que el inglés prefiere fijare en las plumss protebe: antes eu cabera. ("Hornedlark’). (Relehar, f, ple ‘nas 1011) Cuando emprendié el exudio de ts manera en que Jos hanundo ile las ile Filipinas clasifian ls. clo. res, Conklin se vio al prinipio dexonccrado por con- fusiones y contradiccones sparen‘, sin embargo, Ga dsaparectan en cuanto te fe pedia al tnformador que Aetinera, no miesirae aadst, sino oposiciones, inter nas entre parejas contrastads. Habis pos, un stem Coherent, pero exteltiea no pola resaltar en los ter ‘inos de nueso propio stems, que utiliza dow ees del valor y ef del cromatismo. Todos low equivecos se desvanedeton cuando te comprendié que el stem hamundo tiene iguslmente dow ties pero definidos de otra manera: lating los colores, por una. part, eh Felitvamente clos yrelatvamente oicuros,y por otra parte, segin que sean tabicwles en ly plants freseat oven las plantas secaas Ton indigenas, de tal modo, wen como’ verde cl color tmrron reludente dem trozo de bambi que acaba de ser Crtado,siendo que nosotros Io veriamor como rojo si twvitsemon que dae fiir en os térnos de Ia onic ene lo colores Tojo y verde que se encuentra enue Is hanuage. (Com iin, 2) De igual manera, animales muy emparentados pus den aparecerfrecuentemente enc felkire. aunque Con Signlicaciones diferentes El pjaro carpinero.y sus Congéners se allan en exe caso, Si el pero epa twoncos despert el interés de lov austeaizbos es como Jo ha mosiralo RadelifeBrown (2), porque frcwents Jos huceor de lot drbotes; pero los fds de las prade vas de ta América del Norte prestan.atencon “a un Aetalle por completo diferente: el pajso carpinero de LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 8 ‘cabeza roja se cree que esté protegido de las aves de pre- s@ porque nuncs se encuentran sus vestigios. (School. raft) Un poco mas al sur, los pawnee del alto Missouri establecen una relacién (como Jos antiguas ‘romanos, al parecer) entre el pijaro carpintero, y la tempestad y Ja tormenta. (Flewcher, 2), eh tanto que los osagos asocian este pijaro con €l sol y las estrellas. (La Flex che). Pero, para los iban de Borneo, que mencionamos hace un momento, una variedad de pijaro carpintero (Bbuhipicus rubiginosus Swainson) reeibe un papel srw bilico en razén de su canto “tiunfal” y del carde- ter de advertencia solemne atribuido a su grito. Sin duda, no se trata exactamente de las mismas aves, pero 1 cjemplo permice comprender mejor cémo poblacio- nes diferentes podtrian utiliar.en su simbolismo al mise mo animal, [undindose en earacteres carentes de rela- cid entre si: habitat, asociacién meteorotdgica, grito, ftc.; el animal vivo @ el animal muerto. Aun, cad etalle seria imerpretable de diferentes manerat, Los indios del sudoeste de los Estados Unidos, que viven de Ia agricultura, consideran al cuervo, sobre todo, ‘como un saqueador de los huertos: en tanto que los ios de Ia costa noroeste del Pacifico, que son exclu ivamente pescadores y cazadores, ven en. el mismo pi jaro a un comedor de carrofia y, por tanto, de excte- mento. La carga semintica de Corvus es diferente en Tos dos casos: sea vegetal, sea animal: y de tivalidad com el hombre en a similitud, 0 de antagonismo en ‘una conducta inversa. ‘La abeja es un animal rotémico, Jo mismo en Africa (que en Australia, Pero, entre los nuer, se trata de un totem secundario asociado a Ia serpiente pitén, porque las dos especies tienen el cuerpo marcado de manera semejante, E] que tiene a la serpiente pitén por totem se abstiene pucs, de matar a las abejas y de comer su. miel. Una asocacién de la misma clase existe entre @ _ascxasmcscioxts Tor#ess Te Bormign role ya cobs, pagel nombre de el tines space: eopimente "a pods” rane Sank 2p. Tiffen mde compleje ol pson sero ace topene i nunaln e Kbeey See arare ar nel nae fie eeanicor ey ona rar ene ieelrichceary larva nana atl alana ocak cress STpar tio, ee re recone machen y Dea eating chi iy de rome ies joes Santa compte anes sone pregmrrans queer atresia SSitean Ercan at pa ee eee ipa esta epee Sins cgropes jut lv antzaeey ho ceo Stewie earl) ee nt dee rs, Scare Ware enemy ne Tota dengue be quar coapricba Inespectacovts(nigena Lat neces, Moquen cet pind tds icrys ees acohaal oe ase clan eee coe eae Serge dese one ait dennado otto” “la Sebi goa dasha una etre roahatedl ercenwll ager (aie conerrangale, ac fese rai), dine te ln ter (obs. dere ey Se eieecigraia ia room Sovcnteicied andere sical sucunmrerapeiarpencieceay a as geal ee eee ‘Sir a ign conto, a an lr top Sonltok piste starsicseserrart ail tm conto enopiicesuetemene rie pata ae Tenor dee algongsinos eae, ya des LAS CLASIFIGACIONES TOTEMICAS gt vecinos winnebago, sugicre una clasifiacién en cinco categorias que corresponden respectivamente @ la tierra, al agua, al mundo subacutico, al cielo. atmosférica al cielo empireo. Las diffcultades comienzan cuando se quiere asignar un lugar a cada clan, Los menomini contaban unos 50, las cusles se siente uno tentado a ‘repartir en euadrdpedos de la tiera firme (lobo, perro, iervo), cuadripedos de los lugares hiimedos (alce, 2, marta, castor, pecan) aves “terrestres” (Aguilas, ‘gavilanes, cuervos, corneja), aves acusticas (grulla, garza real, pato, gallineta), por diltimo los animales ctduicon- Pero esta categoria es especialmente rebelde, puesto ‘que muchos de los animales por clssficar (ovo, tortugs, Puerco espin) podrian también colocarse en otra parte, Las diffcultades serian mas grandes todavia por lo que respecta a todas los términos restantes. Australia ofrece problemas del mismo tipo. Después de Frazer; Durkheim y Mauss han meditado sobre las lasficaciones totales de algunas tribus como los worjo- baluk, que inhuman 2 sus muertos orientdndolos en tuna direccién particular a cada clan (véase la figura de Ja pagina siguiente). ‘Ademés de que las informaciones son, sin duda, frag- mentarias, no se pueden observar més que esbozos de ‘organizacion, que, por Jo demas, no oirecen este ex ricer més que para el observador, puesto que el con- texto etnogrifico —que seria el tinico que permitiria interpretarlos~ fala casi por completo: la cacitta blan- S Entre los winnebago y otras tibus sioux. come lot algonquines cenrales, se enctentta una clasificcion em cin. (©. grupos: animales tervestres, animales celestes, animales et cielo empireo, animales acuiticos y animales sub- aculticos, Entre. los winncbago, el avetrueno. pertenece al cielo emplreo: el agulla, el gavilin, In paloma, al celo Atmonfércy el oso y el Yobo aU tierra: ox peces aga, fl geno de lat aguas 31 mundo sulacusticn”” (Radin, 2, 186) ge _ LAS CLASIFICACIONES ToTEMICAS ca, “diurna’ es vecina del sol, y 1a cxeatia negra, que fe le opone casi diametralmente, es vecina de los tu- Derculog, vegetles “ctGnicos", aun cuando se hallan sobre el mismo eje que a gruta que también es "exdnica’ Las serpientes estén sobre un eje, los seres “marinas pelicano, mar, viento cilido, parecen estar también agrupades siguiendo un eje. Pero, zeste viento cilide ede tierra 0 de msr? Lo ignoramos, y come ocurre tan a menudo, la respuesta 2 un programa etnogréfico se encuentra e1y manos del gedgrafo y del meteor6logo, cexando no en las del botinico, el roilogo 0 el geo logo... La verdad es que el principio de una clasficacion no 4e postula jamdr slo 1a indagacién, emnogrifica, es decir, In experiencia, puede descubritlo a posteriori El ejemplo de Tos owigos. que son sioux meridionales, es revelador porque ss clailicaciones ofsecen um earicter fistemdtico, por lo menos en apariencia, Lox osagos re © Tomamos agai, de nuevo, algunas piginas de un texto estinado 3 as Melenges Alexandre Koyre. LAS CLASIFIGAGIONES TOTEMICAS gg Parten a los seres ya las cosas en tres categorias, respec: tivamente asocindas al cielo (sl, estrella, grulla, cucrpos celestes, noche, constelacion de las Pléyades, etc), al agua, (mejillon, tortuga, Typha latifolia (an junco), niebla, peces, etc), y ala tierra firme (090, negro y Blanco; puma, puereo espin, ciervo, Aguila, etc). LA Posicién del dguila seria incomprensible, si no cono- idsemes Ia marcha del pensamiento de los osagon que asocia al dguila con el xeldmpago, al relimpigo con el fucgo, al fuego con el carbs y al carb con la tierra: asi pues, como uno de los “amos del corbin el iguila es un animal “de tierra”. De igual manera, y sin que nada pueda indicarlo de antemano, et pelicano des: cmpetia un. papel simboico en razén de la edad avanzada a a que llega, y el metal a causa de su durem. Un animal desprovisto de utilidad prictica se inyoca a me. ‘nudo en los rts: Ia tortuga que tiene la cola en forma de dientes de sierra. Su importancia seria inimeligible para siempre, sino supiésemes, por otra parte, que él ‘imero 15 posee para los osagos tin valor mitica. Fl sol que se levanta tiende 18 rayos, que se reparten en un grupo de 6 y um-grupo de 7, que corresponden respec: fivamente al. lado iquierdo y al lado derecho, 4 Ia lierra y al cielo, al verano y al invierno. Ahora bien, Jas incentaciones de 1a cola de esta especie de tortuga s¢ dice que son en mimero de 6 0 de 7 segiin los caso, 1 pecho del animal representa, pues, Ia béveda celeste, y la linea gris que lo atraviess Ta via dete. No seria menos dificil predecir Ia funcién pansimbélica ai Duida al alee, cuyo cuerpo es una verdadera imago mundi: sus pelos representan la hierba, sus perniles las colinas, sus flancos tas Vanuras, sa espina dorsal el re- lieve, sw cuello los valles, sus cuernos la red hidrogr fica por entero... (La Flesche, passim). Por Jo tanto, algimas interpretaciones de los osagos son restituibles; la rain de esto es Ia de que se di ot LAS CLASIMEACioNsS “roreMIcAs nea’ propésito de ello de na enorme’ documen- bn reanida por La Flesch, que ert hijo de un jee maha, parcalarmente resptuino de woo Toe cle feos recomdos pore penamlen Indigens. Pero Ls Alidcatades son insuperster én el exo de wha tba taal extingulda, como los creek, antafo diididon en fmis de 50 clanestomios y matrlineses, nombrados tobre too con nombres de animales, pero también con fos de algunas plantas, fendmenot meteorolgicos (0 lo, vients), gelogcon (al) © anattmico (pelos del pub). cor dance exaban sprupats en fats, Is ales cen tnien dda en do ropes co rrespondiener quick a lo animales texreres'y 2 los Bnimalesacreos,sungue eto no se desprenda’ de st dksignacon como "gentes de’ otra lengua y "Blancs", @ coma "rol" “buincor Pero, por gue kn totems Se'dgtinguen en "tice" y en “iobrinot” (al com los Hop dtinguen tow totem en “hermanos de madre” por tine parte, “padre, “madre” o-ssbuela” por ot par te):? por que, bie todo habids eoene de ta aE 1, Nc ama ems nora ge tecape la_poscién principal, siendo el labo. por elem pio! el "Wo" del tuo, ye gato ava, el del gran feng Narada “pantera” en el sur de los Estados Uni Gos? Por que ef clan del caiman etd asocado al del pave (ino tomo podria ser, en su caldad de pone Ente de hueson)y cl del mapsehe al dan de Ia papa? 4 Se ha sugerido una interpretacion de una diac anilogs "eo na (riba attcants "Dior el pate Je os Spins del ate més importantes, y 2s eepFtos menores Serdice-que_ son Jo hijor de sis hijos y por tanto de so Tinaje, Be os expitus ttémicon, se ice a menido. que ton fe hijo de ts hijo) pot tanto exrafon su naj To gue, pert los puch es” una_svanera_ de oleae mas hao tolvia en la jeramula elas fart copies (Gemma Pricad, 2p 9) LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 95, En el pensamiento de los creck el lado de los “blancos”™ es el de Ia par, pero el investigador obtiene explicacio- nies de una desesperante variedad: el viento (nombre de un clan "blanco" tae el buen tempo, ex decir, el tiempo “apacible"; el oso y el lobo son animales que siempre estan atentos y por Io tanto se entregan a las obras pacificas, etc. (Swanton, 1.) Las dificultades ilustradas por estos ejemplos son de dos tipos, extrinsecas o intrinsecas. Las primeras son fl resultado de la ignorancia en que not encontrames a propésito de las observaciones ~reales 0 imaginarias— de ios hechos, © de los principios, que inspiran las clasificaciones. Los indios tlingit dicen que el gusano de la madera es “limpio y astuto" y que la nutria terres: tre “tiene horror al olor de Ins deyecciones humana”, (Laguna, pp: 177, 188) Los hpi erefan que los buhos ejercen una influencia favorable sobre los melocotone: ros (Stephen, pp. 78, 91, 109; Voth. 1 p. $7). Si 0s atributos hubiesen de comarse en cuenta para asig: nnar a és0s animales un lugar en la clasifieacion de los, seres y de las cosas, podrlames buscar indefinidamente Ih dave, a no ser que el azar not proporcionase sus ‘menudas pero valiossimas indicaciones. Los indics ojie bbwa de 12 isla Parry poseen, entre otros “totems”, el guila y la ardilla. Felizmente, una glosa indigena ex- plica que estos animales intervienen como simbolo de los arboles que frecuentan respectivamente: el abeto- iewta (Tiuge canadensis) y el cedro (Thuja occiden- talis). (Jenness, 2). Por tanto, el interés de los ojibwa por Ja ardilla es de hecho un interés dirigide a un abol; y carece de relacién con el que los asmat de la Nava Guinea prodigan, tambien a ard, pero por Los lores y las ardillas son grandes comedores de frutos... los hombres que salen a cazar cabe- as se slenten préximes a elles y los Maman sus 98 LAS CLASIFICACIONES "ToT #ENNICAS hhermanos.... (en: rax6n del). paralelismo entre el cuerpo buitano y un érbol, entre Ia eabera hu: mana y su fruto.'(Zegwaard, p. 1034.) La misma ardilla eat probibida a las mujeres embs randat por los fang del Gabln, en virtud de conside: raciones de otro orden: este animal se relugia cm las cavidades de los troncos de rbol y Ta foura madre, que consumiera su carne, comteria al riesgo de que el {eto imitase al animal ye rehusase a evacuar el hex EL mismo raronamienco se aplicaria bastante bien a las comadiejes y a los tejones que viven en madrigueras; Sin embargo, los indion hopi siguen una lines de rele: xion invert consideran ue Ia carne de estos animales favorable al pari por razin de su capacidad de fexeavar en el suelo un camino para escapar cuando son perseguidos por el cuador: ayudan pues, a que el nifo ecscienda ripidamente": yen cohseevenesa. tambien se les puede inwocar para que csiga la Ihwia. (Voth, 1, psn) Una incantencién ritual de los onagos socia de mae nera enigmitica una flor (Lacineria pycnostachya) Ils mada en inglés “blazing star’, una planta alimenti 5-¥ no solamente Ia ardila: “el peligro mis temible que ‘amenaza a lar mujeres embarazadae proviene de los anita. Jer que viven © que se capturan en lor agujeroe —ya tea e Ios daboles 0 de ia tierra. Se puede hablar, a ete fespecto, de un verdadero horror vetul. Si la mijer co- ‘miese un animal de este tipo, el nifo podria quédarse tam. bign en ew azujeo, “em el vientre, y entonces habria que ciperar Un parto dificil. De igual manera, durante exe Periedo, os padres no deben tratar de reirar nidos de Datos de lor huccot de lee Arboles y ino’ de mis cmplea- fos, que habla dejado embarazida a una. mujer, se neq® ‘eategericamente a confecionarme un modelo de hoyera de mandiocs, <0 pretevto de que era una cosa ahecada”, (esmann. p30) LAS GLASIFICACIONES TOTEMICAS gg el maiz, y un mamifero: 1 bisonte, (La Fleche, 2, - 279) Las razones de esta asociacién serian incom prensibies, si otra fuente no revelase. independiente: ‘mente que los omaha, parientes préximos de los ost gos, cazaban el bisonte durante el verano, hasta que Ih “blazing star" florecia en las Uanuras; sablan enton: ‘ces que el maiz estaba maduro y regresaban a la aldea ara Ia cosccha. (Fortune, 2, pp. 1819) Las dificultades intrinsecas son de otra naturalens No provienen de nuestra ignorancia de lor caracteres objetivamente retenides por el pensamiento indigena, para establecer una conexién entre dos o mis términat, sino de la naturaleza polivalente de légieas que apelin simultineamente a varios tipos formales de vinculacio: nies. Los luapula de la, Rodesia septentrional ejempli+ fican bien este aspecto. Sus canes, que Hevan nombres animales, vegetales o de objeios manufacturados, no son “totémicos" en el sentido que habitualmente se da a este término: pero, como entre los bemba y los ambo, razones de burla los unen de dos en dos en far ign de una logica que, desde el punto de vista en que nos colocamos, presenta el mismo interés. En efecto, hemos mostrado en un trabajo precedente, y continua: ‘mos estableciendo aqui, que el. pretendido totemisme no €s sino un caso particular del problema general de lag clasficaciones, y un ejemplo entre otros del papel frecuentemente atribuido a. términos expecifico, para elaborar una dlsificacién social. Estén en relacion de burla o broma, entre Ios uae pula, Jos clanes siguientes: leopardo y cabra, porque él tuno se come al otro; hongo y cermitera, porque el uno rece sobre la otra: papilla y cabra, porque e pref ‘ble tomar la papilla acompafiada con carne; elefante y arcilly, porque en otro tiempo las mujeres, en vex de hhacer las vasijas, arrancaban del suelo las huellas de Jas patas de clefante, y utiliaban estas formas animales a 8 —_LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS tmanera de recipientes a ermitera,y In serpiente 0 la Fiesta, porque la hierba erece bien ally pergue laser pene ae oculta en ell; el hero. y todos 1s lanes Efnimales" porque los mata. Razonamientos del mismo tipo permiten definir una jerarguia de lov clanes: el Iippando es superior a ln cobra, el hiero a Js anima- Tey Tn luvin a herr, porgve lo herrumbra; adem, A'dan deta Thuvia cs superior 2 todor los dems Porque, sin Huis, lor snimales moriian’ de hambre J de sed, seria del todo imposible preparar 1a papilla Teombre' de clas), vain” (nombres declan), etcéera ei 1 gram mimeo de con sideraciones diferente el valor y las modalidades de tmplco de sus plantas mediinales: la planta cece al Tado de una planta medicinal més importante: una de fn partes se parcee a una parte del cuerpo human olor de ta planta es "como eh debido™ (0 el taco, 8 el sabor); ln planta colorea el agua "como es de flows a planta ets stociada 2 tn animal, (como su iment, © por contacto, © por comunidad de abl tat)! be sido tevelada, por Tor dies, alguien ha en- tthdo el uso. 0 la bm recopido cerca de un dchol fendido. por un rayo; cor una determinada enferme dad, por tanto et buena tambien pare una enfermedad Andioga o que afecte al mismo érgano. (Leighton p. 58) En lor nomres de plantas de lo hanundo, los terminot dllerenciaes 4 refieren a lot dominios siguientes: for tm dela hoja, color habitat, alla, dimension, sexo, tipo fe crecimiento, hutsped Babitul, epoca de crecimiento, sor olen. Conk, 2. 181) Tato ejemplos complcian lor que preceden mostran- do que tales gies trabajan_smtdneamente sobre varios eje, Lat relacones que establecen entre los ter Ininen, ls mis de Is veces estén fndadas en a cons auided (erplente y temiters, entre tos Tuapula, lo LAS CLASIFIGAGIONES TOTEMICAS gp ‘mismo que entre los toreya de la India del Sur? o sobre Ja semejanra (bormiga roja y. cobra, semejantes por el “color” segin los nuer). Desde este punto de vista, no se distinguen formalmente de otra taxonomias, ain moderns, en los que contiguidad y semejanza. desem pefian siempre un papel fundamental: 1a contigiidad, ara descubrir cosas que, “desde un punto de vista structural, lo mismo que funcional, pertenecen... all ‘mismo sistema”; y Ia semejanza, que nd exige la parti cipacién en un sistema y se funda solamente en la posesién comiin de uno 0 de varios caracteres, por Cosas que todas ellas, son “o amarillas, 0 lisas, 0 tla: das, o inclusive de dier pies de alto". (Simpson, pp. $4.) Pero, en los ejemplos que hemos examinado, inter fenen otros tipos de relaciones. Las relaciones pueden ser, en efecto, sensibles, (marcas corporales de la abeja y de la serpiente pitén); 0 inteligibles (funci6n fabri ‘adora como rasgo comin a la abeja y al earpintero) 1 mismo animal, la abeja, funciona, valga la expresion, en dos cultures a niveles de abstraccién diferentes. La relaci6n puede ser iqualmente cercana o lejana, sinerd: nica o diacrénica.(relacién entre ardilla y cedro. por tuna parte, . por otra parte, entre alfarero y huella| del elefante), estética (papilla y eabra) 0 dindmica (el hierro mata a los animales, 1a Huvia “mata” al hie ro; la floracién de una planta significa que es tiempo de regresar a la aldea), ete. Es probable que el niimero, Ia naturalera y la “calc dad” de estos hechos I6gicos no sean los mismos sega 9 “Los miembros det clan de Ia serpleme sinden eulto 42 los hormigueros. porque sirven dev morada alas ter. pieniex" (Turion, vol VI, p. 176) De igual manera, en Nueva Guinea: “algunos tpot‘de plantas a como sur pa: risltos animales y vegetales, se considera que pertenesen| Sen ke nun matic y tte”, Wie el. pm) 100 _LAS CLASIFIGACIONES TOTEMICAS Is culturas, y que’se podria clasficar a éstas en mis ricas yen ies pobres, segim las propiedades. formales, de los si cdificar sus estructuras de dlasificacin. menos dotados, en relacién con cas de varias dimensiones, cuyo inventario, anilisis € interpretaciém exigirian una tiqueza de informaciones feunogrificas y generales que 2 menudo no se poseen. Hasta ahora, hemos evoeado dos tipos de dificultades propias de las Iogieas “totémicas”. En primer lugar, ‘gnoramos, las mis de las veces, de qué plantas 0 de qué animales se trata exactamente: hemos visto, en efee- to, que una identifieacién vaga no basta, pues las ob servaciones indigenas son tan precios y tan matizadas aque el lugar atribuido 2 cada término en el sistema ‘orresponde a menudo 2-un detalle morfoldgico 0 aun comportamiento, definible solamente al nivel de la vx riedad o de la Subvariedad. Los esquimales de Dorset exculplan efigies de animales en trozos de marfil det igrueio de wna eabera de cerilla, con tal exactitud que, 4l examinarlas al microscopio, lor aodlogor distinguen Jas variedades de una misma especie: por ejemplo, et somormujo comin y el somormujo de cuello rojo. (Car enter) En segundo lugar; cada’ especie, variedad 9. sub- variedsd, puede cumplir un niimero considerable de funciones diferentes cn sistemas simbdlicos, en los que alguna funciones solamente les son efectivamente aig. radas. No conocemos la gema de estas posibilidades, y, para determinar Tas selecciones, Kay que referirse no S610 al conjunto de datos etnogréficos, sino también 2 Infortaciones procedentes de otras fuentes: 200163 ‘, otinica, geogrifica, cte. Cuando las informaciones suficientes —lo que rara ver ocurre— se compra ba que awn culturas vecinas construyen sistemas total LAS CLASIFICACIONES TOTENICAS 104 mente diferentes con elementos que, superficialmente, pparecen ser idénticos o muy semejantes. Si las pobla- iones de la América del Norte pueden considerar al 401, segin los casos, como un “padre” y un bienhechor, ‘0 como un monstrvo cantbal avido de carne y de sane gre humanas, equ diversidad de interpretaciones no hhabremos de esperar, cuando se trata de seres tan. par tculares como son los de una subvariedad de planta 0 de aver Como ejemplo de recurrencia de una estructura de opesicién muy sencilla, pero con inversidm de las cargas seminticas, compararemos el simbolismo de los colores entre os Iuvale de Kodesia, y en algunas tribus aus tralianas del noreste de Ia provincia meridional, en que los miembros de la mitad matrilineal del difunte se peinan con ocre rojo y se acercan al cadaver, en tan- to que los de la otra mitad se peinan con arcilla blanca yy se mantienen alejados. Los tuvale utiliza también ticrras roja y blanca, pero, entre cllox la arcilla.y la Iharina blancas sirven para las oftendas destinadas a los espiritus ancestrales; sc las sustituye por la arcilla roja fen ocasién de los ritos de pubertad, porque es et color de la vida y de la procreacién. (C. M. N. White, 4, pp. 4647).2° Por tanto, si en os dos casos el Ylanco corresponde a la situacién “nosmarcada", el rojo&-por Jo cromético de la oposicién— estd asociado ya sea a Ia muerte, ya sea ala Vida. Tgualm el distito. de Forrest River, los miembros de la gene racién del difunto se peinan con blanco y negro y se mantienen alejados del cadiver, en tanto que los de las otras generaciones no se peinany se acercan al cadiver, A carga semintica igual, por consiguiente, 1a oposicién: blanco /rojo estin sustitwidas por una opo- sicida: blanco + negro/®. En ver de que, como en €l 39 Como en China, donde el blanco ex el color del duelo, y el rojo el del matrimonio, ton LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS ‘aso precedente, los valores del blanco y del rojo estén invertidos, el valor del blanco (aqui asociado al negro, olor no Gromitien) permanece constante, y es el con: tenido del polo opuesto el que se invierte, pasando del rojo, “supersojo", a la ausencia total de color. Por ‘timo, otra, tribu, australiana,-lon bard, constrayen au simbolismo por medio de Ia oposicién: ‘negro/roje. El negro. es el color de duclo para Ins generaciones de ango par (abuelo, Ego, nieto), el blanco, para las generaciones de rango impar (padre, hijo) (Elkin, 2, PP. 298299), es decir aquellas a las cuales no esté as: mmilada Ja generacién del sujevo. Una oposicin entre dos términcs desigualmente marcados: muerte y vida entre Jos luvale, “su” muerte y "mi" mucrte en Aux tralia, se expresi, entonges, mediante pares de elemen: tos extraides de una misma cadena simbélica: ausencia Ge color, negro, blanco, negro + blanco, rojo (como pre: sencia suprema de-color), etc ‘Ahora bien, se. yuelve.a encontrar entre los indios fox Ja misma opesicién fundamental, pero transpucsta del orden de los colores al de las sonoridades: mien- tras se desarvolla Ia ceremonia de inhumacién, lor que entierran al muetto hablan entre si, pero. los dems no dicen palabra. (Michelson, J, p. 411}. La oposicién ‘entre palabra y muder, ruido y silencio, corresponde, por tanto, 2 Ja existente entre color y ausencia de co- Jor, 0 entre dos cromatismos de grado desigual.. Estas dobservaciones mos parecen hacer justia a todas las teorias que invocan a “arquetipos” o a un “inconsciente colectivo", Sélo las formes pueden ser comunes, pera, no los contenidos. Si existen contenidos comunes, 1a arin debe busearse, ya sca del lado de las propiedades ‘objecivas de algunos seres naturales o artificiales, ya sea del lado de la difusion y de la recepcidn, es decir, en Jos dos casos, fuera del espiritu. ‘Oura dificultad tiene que ver con Ia complicacién LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 10 natural de las Iégicas concreias, para Tas cuales el he- cho de Ia vineulzcién es mis ceencial que Ja natura- Teza de: las vinculaciones; en el plano formal, valga la expresion, echan mano de todo. De esto se sigue que, ante dos términos dades en conexién, nunea podemos postular 1a naturaleza formal de ésta. Como los térmi+ os, Jas relaciones entre los términos deben abordare indireetamente y, en cierta forma, por la banda. La linglistia estructural tropieza hoy en dia con esta dif cultad, aunque en un campo diferente, porque tambien ella se funda en una Iogica coalitativa: coge pares ‘de oposiciones formadas de fonemas, pero el espiritu de ‘etda oposicidn cs en gran medida. hipotética: en la e1apa preliminar, e¢ dificil, para defininlo, evitar un determinado impresionismo, y varias soluciones del mis: mo problema son posibles durante largo tiempo. Una de las mas. grandes dificultades de 1 Linguistica es tauctural, que s6lo ha superado imperfeccamente, obede- ‘cea que a reduccidn que realiza gracias 2 la nocién de ‘opasicion.binaria, debe_pagarse al precio de una ci versidad de naturaleza, insidiosamente reconstivuida en provecho de cada oposicién: disminuida en un plano, el mimera de las dimensiones se restablece en otro. Sin embergo, podria ser que en lugar de una dificultad de método, troperdramos con un limite inherente a la naturale de algunas operaciones intelectuales, cuya debilidad, al mismo tiempo que su fuer, consistria fen poder ser Iogicas permaneciendo, al mismo tiempo, arraigadas en 1a cualidad. Hay que considerar por separade un iilime tipo de difieultad que concierne mie particularmente las cae sificaciones Hamadas “totémicas” en sentido amplio. decir, aquellas que son, no's6lo concebidas, sino vividas. Cada’ ver que son denominados algunos grupos socia Tes, el sistema concepwwal formado por estas denomina- ve LAS GLASIFICAGIONES ToTeMICAS Giones se halla, por asl deco, entregado a lox capri thor de wna evolucién demogeien que posce ss lees propas, pero que es contingente por retacon a el En ecto, el sitet cs dno en Ia seroni em tani que Ia evolucém demogrdtca se deenvuelve en la dco las 0 sex, dos determin, cada uno de los cuales opera por'mtcoenta y sn preocopare por el tf ste confit entre sneroniay diacronia existe tam bien en ef plano lingusica. "Es probable que ln caraceres etructrals de una lengua cambien a Ia Poblacion que la tim, antto muy vasa, se torna Progrsvamente mis pequcia: yer claro que tna lene fun desparae con fr hombrts que la hablan, No fbsante, el lzo entre sincroniay iaconia no et tk flo, em primer Tage, porque todo ly ejetor pata terse valen (ormala que ripidamente se tomar fl ssc tomara uno elcotlado de Indicar caso conceto)- Y desputs y sobre todo, porque In eaructura de Ta Jengua etd Teluivamente proterida por a uncibn pb tha, que es Ia de auegurar ba comunicalon: a lengua no ty pus, sensible la infiuenca de los cambloe de Mogridcor més que dentro de algunos Minis, en Invmedida cn que tu funcéa no se ve compromedda: Paro ot shtemas conceptoale que extdiames qu no son (0 n0 son mia que mibsdiriemente) ‘hedion 4 comunicar: som roclion de pemar, aaividad copes Condiciones ton macho menos etritas Uno se hace fomprender o nos pero uno Pensa mis © meney Bien. El orden del ponstmiento comporta grados. y un me: dio de pensar puede degentrar nem en mation ae recordar. Esto explica que lr etrucurs snerént tas de los sinemae lsnadontotGnico sean en exrem0 Salnerabler a lor efector de 1a diacronia: un medio Hemoléenico opera con menoresgaston que un medio de reflexion insect, el al, a su ve, ch menos ex fente que'un medio de comunicacin, LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS 105 Hstremos este punto con un ejemplo apenas ima- ginario, Trétese de una cribu antafo dividida en 3 lanes, cada uno de los cuales Tevaba el nombre de un animal, simbélico de un elemento natural: - ea ome com sin) oa y Supongames que In evolucién demogrifica ha prove: cado Ia extincion del clan del oso y Ia proliteracién del de Ta tortuga, el cual estd, por consiguiente, esein- ‘ido en dos subclanes que, ulteriormente, han legado al status de clan, La estructura antigua’ desaparecerd ‘completamente y coderd su lugar 2 wna estructura del tipo: est, — forage tile roe wie No existiendo étra informacion, seré vano buscar el plan inicial detrds de esta nueva estructura; inclusive 6 posible que todo plan, consciente o inconsciente- mente percibido, haya desaparecico completamente det pensamiento indigena, y que después de este trastorno, log tres nombres del clan no sobrevivan més que como, etiquetas tradicionalmente aceptadas, desprovistas de significacién en el plano cosmolégien. Este resultado ce probablemente muy frecuente, y explica que un sie tema subyacente pueda ser, a veces, postulado de dere- cho, aunque sea imposibleyrestituirlo de hecho. Pero menudo, también, las cosas ocurrirén de otra manera En una primera hipdtesisyel sistema inicial podré so: brevivir, en Ia forma mutilada de una oposicidn binaria 106 _LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS centre el ciclo y el agua. Otra solucién seria resultado. del hecho de que habia tres términes al comien20, y de (que tres términos subsisten al final; sin embargo, Jos trea primetos terminos expresaban ‘una triparticign ire ictible, en tanto gue los otros tres son resultado de dos dicotomias sucesivas, primero entre el cielo y el agua, Yy despuds encre amarillo y gris. Que esta oposicién de colores reciba un sentido simbéliéa por ejemplo bajo Ja relacién del dia y de la noche y tendremos, ya. no tuna, sino dos oposiciones binarias: cielo[agua, y dla] noche, es decir, un sistema de cuatro cérminos. ‘Veroos, pues, que la evolucién demogréfica puede hacer exallar a la estructura, pero que, si Ta orientacién ‘estructural resiste al choque; dispone, a cada trastorno, dle varios medios para restableeer un sistema, si no idén- tico al sistema anterior, por lo menos formalmence del rismo tipo. Ahora bien, esto no es todo: pues no be- ‘mos corsiderado hasta ahora mis que una dimension del sistema, y éste tiene siempre varias, que no son igualmente vulnerables a 10s cambios demogriticos. To- memos de nuevo el ejemplo dexde el comienzo. Cuando inuestra sociedad teérica se hallaba en la etapa de los tres clementos, esta triparticién. no. funcionaba sola mente en el plano de los nombres de canes: el sis. tema descansaba sobre mitot de creacion y de origen, € impregnaba todo el ritual. Aun si la base demografica te viene abajo, este tastorno no repercute instancinea mente sobre todos los planos. Los mites y los rites cambiarin, pero con un cierto retardo, y como si estu viesen dotados de un remanente que preservard en ellos, durante un tiempo, toda o parte de Ia orientacién pei- mitiva. Por tanto, a través de ellos, éta permanecerd loperante indirectamente para mantener Las nuevas solu ‘Gones estructurales en Ia linea aproximativa de la es fructura anterior. Si suponemos un momento inicial (cuya nocién 5 totalmente teérica) en el que el con: LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS oy junto de to siemas haya extado exactamente ajustad, tate conjunto reaccionard a todo cambio. que afecte Primero, a tna de sut_porey como una miquinn de Fred:backs aujeada (en lat dos acepciones del ter mino) por su ammonia anterior, orientard al Srgano escompucno en el and de un equa que sera por lo menos, una componenda entre cl etado antigua Fel deorden intrelacdo. dede fuera ‘Tanto a conesponden como no, ale realidad hist fica nv tradihonesIegendnias de Jon gos mesa ave el pemamieneo indigena ha podido consider in tcrpetaciones de ete tio, fundada en Ia hes te tim sepulcion‘erceual del deven hiadego, Chan: olor ancottos emergicron de las profundidades de Invite les estaba didn en don groper, uno paclico) vegetariano, y asociado al lado teqacrda, a ‘10 elicon, carnivoro, stoi al Ido detecho Lon desi grupes rnoldcon lane y cambiar. eure 00 respectivon alimentos En el coro de sis migraconcy, {sos grupos encontraron a otro, Seon, que te Auta fxcusivamente de caro, con el el legaron a unine {Gada uno de Tos tes grupos comprendia priniivamen: te dane, lo que suata un toul de 21. A pesar de fea simetria tiparta, el stems extabn descqulibado, Pcs. que lor recién igs pevenecian tambien. al fado dela guerra, y babia 14 danes de umn lado y 7 cae eee €l equllrio entre el Jado de Ia guera y el lado Ge la parse redjo el némero de fo canes de uno de lee rupos guerreros a5, y el del otro a 2 Desde entone fx lo camparientos de low cogs deforma. relat 4 cuya entrada te abre al ete, comprenden canes de Ts par que ocopan la mitad norte, 4H iejuerda de is entrada, 77 anes de Ia guerra que ocupan Ia itd sur, 4 ln derecha de la entrada. (J. 0. Doney, 1, 2) Ta leyenda invoca ast un doble venir; uno, pur: 408 LAS CLASIFICAGIONES ToTEMICAS ‘mente structural, que pas de un sistema dualista a un sistema tripartita, con retorno al dualismo anterior; fl otro, a Ia ver estructural e histérico, que consiste fen la anulacién de un trastorno de Ja estructura primi- iva, Fesultance de acontecimientes histéricas 0 conce- ides como si Io fueran: migraciones, guerra, alianza. Ahora bien, Ja organizacién social de los osagos, tal ‘como puclo ser observada en el siglo xr, integraba de hecho los dos aspectos: aunque comportaban el mismo riimero de elanes, el Iado de la paz y el de In guerra ‘estaban en desequilibria, puesto que uno era puramente’ "cielo", en tanto que el otro lamado también de “la tierra", comprendia dos grupos de clanes respectivamen- te stockidor a la tierra firme y al agua. El sistema era, ‘pues, simultineamente histérieo y estructural; binario Y ternario; simétrico y asimétrico: estable y sin conse- fuir su propésivo de serio. ‘Ante una dificultad del mismo tipo, nuestros contem- porineos reaccionan de otra manera. Prucha de ello, ‘eta comprobacién de desacuerdo que pone fina un reciente coloquio: Rertrand de Jowvene!: —Sefor Priowret, squ- slera uated terininar didéndolo. en unas” pocas Para at : Roger Priouret! —Me parece que nos hemos er- oncrado, de hecho, aie dos tele por completo puesta Raymond Aron yuelve a considerar Ja tesis de ‘andre: Siegfried. Para André Sietried. hay en Francia ‘or scttuder_ potas fondamentales, Nuestro pais unas vece! «s orleaists, y otra 8 onapardta, Orleanista ‘cuando deja en manos de for dipuiados el cuidado. de los asunton pit tices ‘Bomepartista cuando. acepta’ el poder oa, yan 1p dean ec a farota como la e871 ona guerra. que st prolongs como Inde Argel, Frenca cabin de 1LAS GLASIFIGACIONDS TOTEMICAS 10 sesitd, 8 dece, pat’ del bomsparismo al orea ‘amo, como en fai, 0 del eckanismo al bons. Partai, como el 18 de mayo de 1088, Personalente, por lp contaroy yo ere que el cami scan, i que sea caalaene Tndepen dene del wemperaninto polltco trancls est fdo sos travtornor que oindatralisng seanea Ele wocledad. Bro pataelo hits cl que te me viene 4 las mente A Ta primera Yevluc Sion industrial corresponde ct golf de ttado del Eide didembre. de IBbl, a le segunds, el golpe undo del 18 de mayo de 100 To ou pe Inbras tn trator de las condiciones de I ho. ducdn y del consimo parece inconciliable® en isn. Sl epineh prtament 9a = reso pfs aca Ya forma del poder attri fio que cofreyonde a'mt temperament, es dear aT poder personal. (Sedeis p20), Es probable que a los osagos, estos Ulos tipos de opo- sicidn (uno sinerénico, otro dizerénico) hubieven ser- ‘vido de punto de partida; en ver de pretender elegir centre ellos, los habrfan admitido en pie de igualdad, ‘buscando a la vez elaborar un esquema tnica que le permitiera integear el punto de vista de la estructura y el del acontecimiento. Gonsideraciones del mismo orden podrlan explicar- nnos, sin duda, de manera harto satisfactoria para la inteligencia, Ia curiosa dosificacién de divergencia y hhomologtas que caracteriza a la estructura social de las cinco naciones iroquesas y, en wna escala histrica y eogréfica mis vasia, Las semejanras y las diferencias de que dan testimonio los algonquinos del este de los Extados Unidos. En las sociedades de clanes unilineales ¥ exogtimicos, el sistema de los nombres de Jos clanes se halla casi siempre a mitad del camino encre el orden y el desorden; lo que, al parecer, sélo podria explicar la accién conjugada de dos tendencias: una de origen sno TAS GLASIFICACIONES TOTHMICAS demogrtic, que: Neva a la desoganiac, ots: de ingpiracién tellexiva, que eva la Teorganizacion con forme a una norma To mls semejante posible a estado ejemplo de Tos indica pucblo, cuyas aldeas one iy iene el epee ts mes del qe © sospecha que podria ser el mismo para todox, pon de rete el fendmeno. Al compl las flor FBaciones lavas bop, nuh eres y anoan, Rrocber Greys antato que podia demottar “que un’ eauema ley pectic! Ur rpunanin int ara bt indioe pieblo”, aunque cada aldea mo ofrexca ms que tina htrscion prea y deforma. ste cindro (pH) Cofnke en unit curoctors de 12 pares de cane: sr lene de caxabel pantera; cersoanilop: clabam gr Tig nubematr; lagartotierras conejotabaco; "mostra talaje™ (Stonia)gillo svete; kacehing_ (curve Jove: pinodlama): ledncoyote: un grupo de 4 clans (Cechnan, dguilepae) ; ejincans ‘unjueseconcha © coral. (Kroeber, 1, pp. 187140) Bia Ingenio tentaiva de rewltair un '“plén. mae tro” a sido eritcada por Egan con fundamento. en formacones mis mumcrossy menos. amabigust que aquelas de Int que podla diponer Krosber en 1915: 1616, fecha a ta que ee remoncam sus observaciones Pero se le podiia opones a Kracbr ote argumento de orden pejudiil: ycdmo podria haber sobrevivida an plan mnestro a las evolucones demograic diverge tes de cada ales? Ateniéndoncr as tnormariones publicadas por el propio Xrocber, comparemos la dir {eibucidn de Los clanen de Zu (1650 babitanies em 1018) y eu don aldeas hopi de Ia primera mes, cxyo 2utor ha mulipliado la cla de poblacin por cinco Gresutado: 1610) 4 fin de hacer as lb confrom- facta: LAS CLASIFICAGIONES TOTEMICAS 114 Rt (watpiyschureuty Sol, iguila, pavo a0 - Comin 490 ts Mate, rama 195 25 Comadzeja, oF0 195 160 Gralla 100 mada Coyote B & Mostaza, gallo silvestre 69 235 ‘Tabaco 45 185 Gervo, antilope 20 5 Serpiente de caxcabel nada 0 Lagatto, tierra mda M5 (Glan desconocido) 10 ada Tora. io iio. Si se traza la cura de distribucidn de los clanes zu colocindolos en orden demogrifico decreciente, y si sobreponemos la curva de los clanes hopi de la primera ‘mesa, se comprueba que las evoluciones. demogréficas son divergentes'y que la comparacién no deberia per- ‘mitir,tebricamente, reconstruir un plan comin (Fig. 3). En estas condiciones, y aun admitiendo que Ta re. construccién de Kroeber violenta In experiencia on algunos puntos, no ¢s menos notable que tantos ele ‘mentos comunes y de vinculaciones sistemicicas subsis- ten en las diferentes organizaciones locales, Jo que supone, en el plano de la reflexién intelectual, un i= {gor, una tenacidad, una fidelidad a tas distinciones y a las opesiciones, de los que en el plano prictico, wn botdnieo ha recogido pruebas igualmente convincentes: En México, he trabajado sobre todo con cam pesinos de extraecidn completa o parcialmente et Fopea. Aun lor que tenlan aspecto de indigenar preferiam hablar espafiol y no se consideraban in- 12 LAS CLASIFICACIONES TOTENICAS ey pevionos por clon Tass se7 eo NR Fic. : Distribucidn de la pobleciin por clanes en Zu entre Tos hopi de le primera mesa. dim, He encontrado dense 1 mina cane de acion en Guatemala, pero all he al Efmbien con Indios que habian conserado su a tf Kenge 9 a tara ona par Meat exaban, en cuanto a por eecciona: fiis"de_manera mucho. mar erica que en el {Guo de sus vecinos de lengua espaila. Sus plan- tacioncs hublan permanecido tan autentieas como to furron, en los Estados Unidos, las plantaco. mia le mar en la gran epoca de los concursos Sgricola, cuando lor aguicaltores 86 entregaban, nos nds suites refinam lento, a mantener una tiiformiid que tenis mucha amportames en ia ompetcncia. El hecho era notable, en raedm de LAS CLASIFICAGIONES TOTEMIGAS 11g 4a extrema yarnblidad del_mair guatemalteo ce seer» em a om al eal bibrida: basta com que un nse trae pe pa inet ieee cae Para que toda I conecha remit mera. Silo na elecciin meticuloss de las mazoreas de simiente Yel demrraigo de ta plantas que se dervian del lipo pueden permite conser una varedad pura 1 les condiciones Y sin embargo, en Mex fo, en Guatemala y en nuestro. propio sidoeste Ie'scwacin es lar silt donde Ian vies calturas indigenss ban testido mejor el mair ha conser: rade major homogeneidad dentro’ de lov Vanites de la varedad, Milo at ade, cid ma colciin fe granos de imal, recogidos en un pusblo toda. ‘a's primivos los mags de Asam a toe que Zigunos findlogos desciben diciendo que ve tn: aentran todavis en la edad de pltirs’ por todo fo que respects a ln vida cotidians. Cat tbe cuts very vriedades de mn que deren unas de otras de'manera tajente y, sn embargo, fn eno de adn varicdd cau oy ree iss de-una planta 2 otra. ¥ lo que’s mis, mas anedades ae ete Tas orgies, en talivadas, no’ s6lo por familias diferentes, sino or tbs dilerentes,y en reglones,igualmente Aiferemes. Era neessrto un apego fandtico aun {ipo ideal para comervar ton poray stay varie. ladey,siendo que se tramitian 0. adquirian. de familia'a familia, de tribu a tsibu. Por tanto, parece ser inexacto afirmar, como se hace tan'@ eh es Guendran entre los pueblos més primitives. Exae famenie, ocurre lo Gontrario. Phet son sobre todo Jon indigenss ‘recuentemente vision Tos ‘que viven cefea de las grandes vias de comunicacon Ye fas ciadades y cuya-culeora tradicional se hh deterorado mis gravement, Tot que han dado arigen a ia ereencia de que los pcos primiivs 14 _LAS CLASIFICACIONES TOTEMICAS son horticultores descuidados. (Anderson, pp. 218- 219) Andon Hs ag de anes nprsnants a preocupacon por lat separaconesdiferenciales, que ine wae atcivded copiien y « Ie reflexia imtelec Reade Yor que lamiamor primitives. Por su caricter formal por la “press” que hace sobre toda sbere de feomtenidon, ext preocupacion explica que as instia- ‘once indigenas pueda, sumqoe también ells se vean Srresradas en un flnjo de temporalidad, mantenerse Aisancia coostante de la contngendia historia y de 1a Snmutsbilidad de un dan, y nsvegar, valga Ia cxpre= fon, en a coriente de intligibilidad. Siempre 2 ‘ditanca aroma de Carbs y de Sala diacronia finaonia, acontecimiento y estructura, etétics gr ta, naturnlesa 90 ha podido oculereles mis que a ‘Queues pretendla delinicla solamente por un aspect. Bue ef sbourdo. profundo de la pricicas y de las Gqeencias primitivs, procamado por Frazer su val diciin tspeiom por’ evidencas de un pretendide fentido comin, invocadp por Malinowski, hay lugar pura toda una cee y para toda une flsotia, IIL. LOS SISTEMAS DE TRANSFORMACIONES Como acabamos de ver, las Idgicas practicoteéricas que rigen la vida y cl pensimiento de las sociedades Hama ddas primitivas estin movidas por Ia exigencia de lat separaciones diferenciales, Esta exigencia, manificsta ya fen Tos mitos fundadores de las instituciones totémicas (LéviStrauss, 6, pp. 2728 y 3087), aparece también en el plano de Ia actividad técnica, dvida de resulta: dos marcados por el sello de la permanencia y de Ia discontinuidad. Ahora bien, lo que importa tanto en 1 plano de la seflexién intelectwal como en el plano prictico, es la evidencia de las separaciones, mucho més que su contenido; forman, una vex que existen, un sit. (ema utlizable a la manera de un enrejillado que se aplica, para descifrarlo, sobre un texto al que su in tcligibilidad primera de Ia apariencia de un flujo indie. ‘into, y en el cual el enrejillado permite introducir cor- tes y contrastes, es decir, las condiciones formales de un mensaje significante. E1 ejemplo teérico que. hemot discutido en el capitulo precedente muestra eémo un sistema cualquiera de separaciones diferenciales —en cuanto ofrece el cardcter de sistema permite organi tar una materia sociolégica “trabajada” por la evolu ibn histérica y demogratica, y que consiste, pues, en luna serie teéricamente ilimitada de contenidos dife- EL principio Idgioo es el de poder oponer siempre ‘términos, que un empobrecimiento previo de la total dad empirica permite concebir como si fueran distintos. Cémo oponer es, por relacién a esta exigencia primera, ‘una cuestién importante, pero cuya consideracién viene después. Dicho de otra manera, lot sistemas de deno- ‘minacién y de clasificaci6n, coménmente Hamados wocé ‘micos, sacan su valor operatorio de st cardcter formal: 15 LOS SISTEMAS DE ‘TRANSFORMACIONES ton cédigos, capaces de transmitir mensajes traducibles en Jos términos de otros cédigos y de expresar en st propio sistema los mensajes recibidos por el canal de ofdigos diferentes. El error de los etndlogos clasicos ha consistido en querer reificar eta forma, ligarla a un contenido determinado, siendo que se presenta al obscr- yador como un método para asimilar toda suerte de contenidos. Lejos de ser una institucidn auténoma, det nible por caracteres intrinsecos, el totemiamo o lo que pretence ser totemismo, corresponde algunas modali- dades arbitrariamente aisladat de un sistema formal ‘uya funcién es la de garantizar la convertitilidad ideal de los diferentes niveles de Ia realidad social. Como Durkheim parece haberlo entrevisto a veces, et en una “rocio-égica” donde reside el fundamento de Ix socio: logis. (LéviStrauss, 4, p. 86; 6, p. 187) En el segundo volumen de Totemism and Exogemy, Frazer se interesé.particularmente en formas simples de las creencias totémicas, observadas en 1a Melanesia por Codrington y por Rivers. Greyé reconocer en elas formas primitivas, que serian el origen del totemismo ‘concepcional australiano del que, segun él, se derivarian todos los demés tipos.,En Tas Nuevas-Fidbridas (Auro- ra). y en las islas Banks (Mota), algunos individuos creen que su existencia extd ligada a Ia de una plant de un animal, 0 de un objeto, Iamados atei 0 temaniss cn las islas Banks, y munu en Aurora; el sentido de rmumu, ¥ quizis también el de atai, 8 aproximadamente el de'un alma (Fig. 4). Segiin Codrington, un indigena de Mota, descubre tu femaniu por una visién, 0 eon Ja ayuda de técnica ivinatorias. Pero, en Aurora es Ja futura madre la que se imagina que un coco, un fruto del drbol del an, o cualquier otro objeto, esté ligado misteriosamen: {eal nifo, que seria una suerte de eco ce dicho objeto. Rivers ha encontrado las mismas creencias en Mote, 1LOS SISTEMAS DE TRANSFORMACIONES 147 donde muchas personas observan prohibiciones alimen- ticias porque cida una cree ser un animal o un fruto, ‘encontrado u observado por su madre mientras estaba ‘embarazada, En tal easo, Ia mujer lleva In planta, el fruto o el animal a la aldea, en donde se inforzna del sentido del incidente. Se le explica que dara nacimiento un niflo que se pareceré a la cosa, o que sera es cosa misma. Entonees ella vuelve a colocar esa com en el lugar en que la enconted, y, sf se trata de un animal, le construye un refugio con piedras: lo visita cada dia y lo alimenta. Cuando el animal desaparece, porque ha penetrado en el cuerpo de la mujer, de donde volvers a salir en forma de nif. So pena de enfermedad 0 de muerte, ¢l nifio no po dra consumir Ia planta 0 el animal con el que se le ha identificado. Si se trata de un fruto no comestible, el Arbol que 1o produce ni siquiera podra ser tocado, Se asemeja la ingestign o el contacto & una suerte de auto- anibalismo; la relacién entre el hombre y cl objeto 3 tan intima que el primero pose Tas caractersticas del segundo: segiin los casos, el nifto serd débil ¢ indo- Jente como 1a anguila y la serpiente de agua, colé- rico como el cangrejo ermitafio, suave y amable como 1a lagartija, aturdido, preeipitado ¢ irrazonable como la rata, o bien tendré un vientre gordo que recuerde Ia for- ama de una manzana silvestre, etcétera. Estas equivalen- cias se encuentran también en Motlav (nombre de una parte de la isla Saddle; entre un individuo por una parte, y, por la otra, una planta, un animal o un objeto, no es general: afecta solamente a algunas personas, Tampoco es hereditaria y no lleva consigo prohibiciones exogimicas entre hom: bores y mujeres que el azar habria asociado a seres de Ta misma especie. (Frazer, vol. 11, pp. 8183, pp. 8991 [citando a Rivers), y vol. IV, pp. 28687.) Fraser ve, en estas creenciss, el origen y la explica i$ LOS SISTEMAS DE TRANSFORNACIONES NUEVA GUINEA Fic, 4. Mapa parcial de la Melonesia centro de documentacién acerca de. Oceania de fa Exuela Practica de_Altos Estudios,

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