Concepto de aprendizaje

Es el proceso fisiológico por medio del cual el sujeto construye sus estructuras
mentales (conocimientos, habilidades, valores y actitudes) que le permiten ponerse
en contacto con el medio que lo rodea.

Un aprendizaje parte de la transmisión de información, con la ayuda de los sentidos

y mediante su coordinación generan acciones concretas que nos hacen entender la
función que realiza. Para ello se necesita conocer la estructura y función del cerebro
es decir conocer que pensamientos, saberes e interpretaciones permanecen
activos.
En los lóbulos frontales se encuentra el pensamiento consciente, que es
responsable del lenguaje y otras funciones como la atención.

El lóbulo parietal es encargado de recibir e interpretar la información

somatosensorial como temperatura, presión, dolor, auxiliar en el procesamiento de
los sonidos de palabras.
En el lóbulo occipital se interpreta y recuerda información visual, y en los lóbulos
temporales localizados en la parte lateral de las orejas son encargados de
interpretar y recordar la información auditiva.
Las regiones que controlan el oído, vista, tacto, gusto, olfato se transforman como
a consecuencia del uso, cuando el dedo toca una cuerda este estimulo sensorial
activa neuronas en el cortex sensomotor del lado opuesto además de un nivel alto
de actividad refuerza las conexiones entre los grupos de neuronas exitadas y si un
adulto empieza a tocar el violín también cambia su cortex sesomotor se ha
demostrado que se necesitan apenas cinco días para que las áreas sensorial y
motor se modifiquen y se adapten a la nueva actividad, aunque si dejamos de tocar
durante mucho tiempo perdemos flexibilidad y conexiones sinápticas.

Nuestro cerebro es moldeable, tiene la capacidad de cambiar y adaptarse en función

del entorno y de nuestras experiencias y puede además reorganizar funciones.

El cerebro es lo suficientemente flexible, plástico e inteligente para analizar

cualquier información precisa que se le envié.

En el cerebro existen millones de células llamadas neuronas, ellas se interconectan

mediante impulsos eléctricos, cada impulso es pensamiento y memoria, cuando
escuchamos, vemos, tocamos, olemos, y saboreamos algo, lo convierte en impulsos
eléctricos dentro del cerebro.

El cerebro es capaz de aprender porque las conexiones entre las células nerviosas
(neuronas) son permanentes, el cerebro va actualizando las conexiones
constantemente, las neuronas crean continuamente enlaces que van originando
nuevas conexiones, a este proceso se le llama sinapsis.

Unas moléculas llamadas neurotransmisores hacen un puente entre los axones,

permitiendo que el impulso continúe a lo largo de la cadena, las nuevas conexiones
forman una nueva memoria, aprendemos al establecer nuevas conexiones entre las
neuronas cerebrales a través de la repetición, entre más grande sea el refuerzo hay
más posibilidad de que se quede grabado en la memoria.

Cuando más adelante se presenta un estímulo de ese recuerdo, se activará esa

misma conexión nerviosa en el cerebro y se recordará la respuesta.

Se ha demostrado que la capacidad de nuestro cerebro, ocupa un periodo de tiempo

de más o menos tres meses de práctica de algo que queramos aprender, para que
lo dominemos, con ello nuestro cerebro aumenta su tamaño en el área
correspondiente a lo que se ejercite, pero si se deja de ejercitar, esa parte de nuestro
cerebro regresa a su forma normal.

Aunque en la niñez sea la mejor etapa para establecer millones de nuevas

conexiones, en la edad adulta también es posible aprender gracias a la Plasticidad
Cerebral, ya que con ejercicios se puede estimular a la sinapsis.