You are on page 1of 15

Los Mundos de Brana

«A través de la emoción uno puede


llegar a apasionarse por el conocimiento
científico». Clara Janés

Efectos de la corriente eléctrica en el cuerpo humano (II): La edad de la gran potencia


Publicado el 25/11/2014

A partir de la segunda mitad del siglo XIX, el desarrollo de máquinas eléctricas (dínamos y alternadores) capaces
de convertir la energía mecánica en eléctrica permitió trabajar con unos niveles de potencia muy altos,
inimaginables con anterioridad. Rápidamente, la energía eléctrica fue introduciéndose en la industria, en las
comunicaciones, en el alumbrado y en usos domésticos, lo que puso de relieve la necesidad de estudiar los peligros
que podía representar para los seres vivos y de desarrollar prácticas y normativas que garantizasen la seguridad de
los usuarios. De estos temas trataremos en lo que sigue.

Magnitudes eléctricas
En electrotecnia se precisan varias magnitudes fundamentales para caracterizar correctamente un circuito
eléctrico y sus propiedades. Sin entrar a profundizar en todas ellas, expondremos los aspectos principales del tema
que nos ocupa en base a las tres más conocidas por el público en general: la tensión, la intensidad y la resistencia .

La tensión, también llamada “diferencia de potencial” y más familiarmente “voltaje” está relacionada con la
capacidad de trabajo que puede realizar una carga eléctrica. Usando un símil hidráulico, sería la presión del agua,
debida a una bomba o a una diferencia de nivel. La unidad se denomina Voltio (V) y, para tener unas referencias,
cabe decir que una pila o batería tiene una tensión entre 1 voltio y unas decenas de voltios, la red de alimentación
doméstica opera a 230/400 V y una línea aérea de transmisión funciona entre 11.000 y 400.000 voltios.

La intensidad es la cantidad de electricidad “carga eléctrica” que circula a través de un conductor por unidad
de tiempo. En hidráulica sería el caudal, los m3 por segundo que pasan por una tubería. La unidad se llama
Amperio (A) y, a título de ejemplo, podemos decir que una estufa eléctrica doméstica consume unos 4 a 8
amperios. Hay que destacar la expresión que circula porque respecto a la intensidad es frecuente cometer el
error de hablar de “un enchufe, un interruptor, etc. de 10 A”. Pues bien, la intensidad real en aplicaciones
domésticas puede estar entre 0 A -si no hay nada conectado- hasta millares de amperios si el aparato conectado es
defectuoso o presenta un cortocircuito. La cifra que se indica en el propio dispositivo es la máxima intensidad
aplicable, de modo permanente, a efectos de calentamiento del mismo, no la intensidad real en
cualquier momento.

La resistencia es la medida del grado de dificultad que ofrece un cuerpo para que la corriente eléctrica circule
por él. En hidráulica sería equivalente a la dificultad de paso del agua por una tubería según su diámetro y su
longitud. La unidad es el Ohmio (Ω) que se define como la resistencia que permite el paso de 1 A bajo una
diferencia de potencial de 1 V. Para hablar con propiedad, deberíamos referirnos al concepto más general de
impedancia (especialmente en corriente alterna) pero la naturaleza esencialmente resistiva del cuerpo humano
permite la simplificación realizada.

Las tres magnitudes no son independientes entre sí. Se considera que la resistencia no es una magnitud
fundamental, sino que se calcula a partir de la tensión e intensidad mediante la conocida Ley de Ohm:

R (Ω )= E(volt)/I(A)

Al igual que un grifo permite variar el caudal de agua que pasa por una tubería, también es posible que la
resistencia eléctrica varíe de un cuerpo humano a otro, y dependa de las superficies de contacto, del estado de
humedad de la piel y de otras circunstancias. Esto debe tenerse muy en cuenta al considerar las posibles
consecuencias de una descarga eléctrica.

Efectos de la electricidad sobre el cuerpo humano


Cuando alguna parte o partes del cuerpo humano entran en contacto con dos puntos u objetos entre los que existe
una diferencia de potencial (voltaje), se establece el paso de una corriente eléctrica a través del cuerpo que puede
producir efectos muy diversos, desde un leve cosquilleo hasta la muerte, pasando por contracciones musculares,
dificultades o paro respiratorio, caídas, quemaduras, fibrilación ventricular y paro cardíaco. Esto se conoce como
choque eléctrico.

El choque eléctrico puede producirse al tocar elementos sometidos a tensión, como cables o barras metálicas
desnudas (contacto directo), u objetos, normalmente inofensivos, cuya tensión se debe a fallos y defectos de
aislamiento (contacto indirecto).
Esquema de red trifásica

Para poder comprender el proceso es necesario puntualizar que la red de distribución en baja tensión -la que entra
en nuestros domicilios, oficinas, locales comerciales, etc.- es trifásica y el neutro está conectado a tierra.

A partir del esquema anterior puede inferirse que si una persona entra en contacto con una de las fases L1, L2, L3
y tiene los pies apoyados en el suelo (o toca alguna masa metálica, tubería, etc. que haga buen contacto con tierra)
se cerrará el circuito estableciéndose una corriente que atravesará su cuerpo, produciéndole el choque. Lo mismo
ocurrirá si toca la carcasa metálica de algún aparato que presente defectos de aislamiento.

Los factores que determinan la severidad de las lesiones son:

El tipo de corriente, continua (pilas y baterías) o alterna (red eléctrica).

En general, la corriente alterna de baja frecuencia (50 – 60 Hz) que se distribuye a través de la red puede llegar a
ser hasta 3 o 5 veces más peligrosa que la continua. Puesto que se trata del tipo de corriente al que habitualmente
estamos expuestos en viviendas, locales, comercios, oficinas, etc., nos centraremos en los riesgos que lleva
asociados la alterna.

La intensidad y el tiempo.

En general, cuanto mayor es la intensidad y/o el tiempo en que circula corriente por nuestro cuerpo, más graves
son las consecuencias. La tabla siguiente muestra los efectos generados en función de la intensidad y el tiempo de
exposición, en un adulto de más de 50 kg de peso, suponiendo que los puntos de contacto son dos extremidades.
Las definiciones de los términos empleados son:

Umbral de percepción: Valor mínimo de intensidad que provoca una sensación en una persona.

Umbral de reacción: Corriente mínima que produce una contracción muscular.

Umbral de no soltar: Valor máximo de la intensidad para el cual una persona puede soltarse de unos
electrodos que provocan el paso de la corriente. En corriente alterna se considera que este valor es de 10 mA, para
cualquier tiempo de exposición.

Umbral de fibrilación ventricular: Valor mínimo de la intensidad que puede originar fibrilación ventricular.
Decrece sustancialmente cuando la duración del paso de corriente se prolonga más allá de un ciclo cardíaco. Es la
causa principal de muerte por accidentes eléctricos.

La tensión y la resistencia

La tensión (voltaje) no es peligrosa en sí misma, pero, de acuerdo con la ley de Ohm, ocasiona el paso de una
corriente cuyos efectos ya se han descrito y cuya magnitud depende, además, de la resistencia.

La tensión de contacto, que es la existente en el punto de contacto antes de que éste se produzca, es fácil de
estimar o calcular. En el caso de instalaciones de baja tensión (domésticas o industriales), en Europa suele ser de
230 V si el contacto es entre fase y neutro (o entre fase y tierra), que es el caso más frecuente, y de 400 V si se
tocan dos fases simultáneamente.

El problema reside en determinar el valor de la resistencia, ya que ésta, en el caso del cuerpo humano no sólo
depende de condiciones externas o ambientales (grado de humedad de la piel, presión de contacto, estado de la
epidermis y zona de contacto, etc.) sino también del valor de la tensión. Por tanto, podríamos decir que la
corriente depende doblemente de la tensión estableciéndose entre ambas una relación directamente proporcional
a través de la ley de Ohm, y una dependencia con la resistencia, que figura en el denominador de dicha ley.
Tomando como referencia la resistencia de una mano a la otra en condiciones de piel seca, una corriente alterna a
frecuencia de la red (50 Hz) y una superficie de contacto de 50 a 100 cm2, la NTP 400 del Instituto Nacional de
Seguridad e Higiene en el Trabajo establece los siguientes valores para la resistencia (más propiamente
impedancia) del cuerpo humano.

Según puede verse, en el caso de una red doméstica a 230 V, el 5% de la población tendría una resistencia inferior
o igual a 1000 Ω, el 50% no superaría los 1350 Ω y el 95% tendría un valor igual o menor que 2125 Ω. Obviamente
el peor caso corresponde a los 1000 Ω, que darían lugar al paso de una corriente de 230 mA cuyas consecuencias
podrían ser fatales.

El recorrido de la corriente

La gravedad de un accidente depende del camino de la corriente a través del cuerpo. Una trayectoria larga, en
principio, presentará mayor resistencia dejando pasar menos intensidad pero si atraviesa órganos vitales como el
corazón, los pulmones, el hígado, etc., puede provocar lesiones mucho más graves. Los recorridos más peligrosos
son los que afectan a la cabeza (daños cerebrales) o al tórax (parada cardiorrespiratoria).

Los valores de intensidad y tiempo reflejados en la “Tabla de Efectos Fisiológicos” corresponden a un trayecto
“mano izquierda – dos pies”. Para otros caminos debe aplicarse un coeficiente de corrección F llamado “factor
de corriente de corazón” que permite calcular la equivalencia del riesgo de las corrientes que atraviesan el
cuerpo siguiendo otros recorridos.

La intensidad equivalente viene dada por la fórmula:

Ieq = Iref/F
siendo Iref la intensidad correspondiente al trayecto mano izquierda – dos pies y F el factor de corriente de
corazón

Corriente de corazón “F”

Protección frente a Riesgos Eléctricos


El tema de la protección frente a riesgos eléctricos es complejo y propio de especialistas a causa de la gran
cantidad de variables y circunstancias a tener en cuenta. Por ello, además de recomendar grandes dosis de
prudencia y sentido común nos limitaremos a destacar la importancia de tres elementos que obligatoriamente
deben formar parte de la acometida para que la instalación pueda ser autorizada.

El Interruptor de Control de Potencia. (ICP)

El ICP es el elemento que debe cortar el paso de corriente si esta excede de un determinado valor que depende de
la potencia total instalada. Consiste en un interruptor automático que interrumpirá el paso de corriente en el caso
de grandes intensidades como las generadas en un cortocircuito (disparo magnético) o para sobrecargas
moderadas (disparo térmico). La actuación magnética se hace por medio de un electroimán que permite un corte
de corriente muy rápido (típicamente 20 – 30 ms) mientras que la protección térmica se efectúa con una lámina
bimetálica por efecto Joule y su tiempo de disparo es inversamente proporcional al cuadrado de la intensidad (de
segundos a minutos).

ICP bipolar
Se trata de un elemento esencial de seguridad para evitar incendios y otros accidentes, que debe mantenerse en
perfectas condiciones y no bloquearse ni sustituirse por otro de mayor calibre si se desconecta con frecuencia. En
este caso se tendrá que consultar a un experto y/o a la compañía suministradora

El Interruptor Diferencial (ID)

El interruptor diferencial, a menudo llamado simplemente diferencial, tiene la misión de desconectar la


alimentación de todos los elementos receptores que siguen al interruptor, al detectar una fuga de corriente a tierra
de una intensidad superior a la nominal de 30 mA. Además, debido a la influencia del tiempo y la corriente en los
efectos fisiológicos, debe hacerlo con un retardo inferior a 0,2 s para la intensidad nominal y 0,1 s para una
intensidad doble. Su correcto funcionamiento es esencial por lo que jamás debe ser eliminado o bloqueado de
alguna manera. Al contrario, se dispone reglamentariamente de un botón de prueba que debe accionarse
periódicamente para comprobar su buen estado.

Interruptor diferencial bipolar


La presencia del interruptor diferencial no exime de la vigilancia y mantenimiento de la instalación eléctrica
porque, entre otras cosas, al detectar la corriente que va a tierra protege de los contactos más frecuentes,
entre una fase y tierra (contacto con los pies), pero no salvaguarda en absoluto del contacto simultáneo con dos
fases (líneas y receptores industriales) ya que en este caso no deriva a tierra corriente alguna.

La Toma de Tierra

La toma de tierra es fundamental para evitar los accidentes por contacto indirecto y puede consistir en una placa
de cobre enterrada o en unas jabalinas clavadas en el suelo. La toma debe conectarse a un cable que, recorriendo
toda la instalación, se conecta, a su vez a las carcasas o puntos de conexión de todos los receptores, ya sean fijos o
móviles. En caso de una pérdida de aislamiento, la corriente de fuga pasa por él y, debido a la baja resistencia de la
toma de tierra, la tensión de contacto en caso de tocar el aparato es muy baja. Si la corriente excede los 30 mA, el
interruptor diferencial actúa y corta el suministro a todas las líneas afectadas. En caso de fallo total de aislamiento
se produce un cortocircuito directo entre una fase y tierra que además de provocar la intervención del interruptor
diferencial, causa la intervención inmediata del ICP debido al elevado valor de la intensidad de cortocircuito.

Toma de tierra mediante jabalina

BIBLIOGRAFÍA / REFERENCIAS
Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (2002). Ministerio de Industria, Energía y Turismo

NTP 400: Corriente eléctrica: efectos al atravesar el organismo humano. Ministerio de Trabajo y
Asuntos Sociales

NTP 437: Aspectos particulares de los efectos de la corriente eléctrica(I). Ministerio de Trabajo y
Asuntos Sociales
Share this:

     
12

Me gusta

A 4 blogueros les gusta esto.

Relacionado

Y la luz azul se hizo - Premio Nobel de Física Blas Cabrera, físico, humanista y profesor John Bardeen, un genio olvidado (versión
2014 En "Cultura científica" extendida del platito de @buhardilla)
En "Electrónica" En "Electrónica"

Acerca de Laura Morrón Ruiz de Gordejuela


Licenciada en Física por la Universidad de Barcelona y máster en Ingeniería y Gestión de las energías renovables por IL3. Tras
años dedicada a la protección radiológica, he encontrado un empleo como directora y editora de Next Door Publishers, que aúna
mi pasión por la divulgación científica y la literatura. Aparte de esta labor, también ejerzo de divulgadora científica en mi blog
«Los Mundos de Brana» —premiado en la VI edición del Concurso de Divulgación Científica del CPAN—, en el podcast «Crecer
soñando ciencia» y en las plataformas «Naukas» y «Hablando de Ciencia». He colaborado en el blog «Desayuno con fotones» y
los podcasts de ciencia «La Buhardilla 2.0» y «Pa ciència, la nostra». Soy socia de ADCMurcia, Cienciaterapia y ARP-SAPC. En
2015 tuve el honor de ser galardonada con el premio Tesla de divulgación científica de «Naukas».
Ver todas las entradas por Laura Morrón Ruiz de Gordejuela →

Esta entrada fue publicada en Electrónica y etiquetada Biología, Electrónica. Guarda el enlace permanente.

24 respuestas a Efectos de la corriente eléctrica en el cuerpo humano (II): La edad de la


gran potencia

la mala vida dijo:


07/12/2014 en 8:39 am

Hola, Soy ingeniero eléctrico y debo felicitarte por el artículo; por el rigor con el que está hecho y por estar excelentemente
documentado. Y sobre todo por la parte de protección a las personas y la explicación del choque eléctrico.
Responder

Laura Morrón dijo:


09/12/2014 en 8:57 am

Que un ingeniero eléctrico me felicite por este artículo me hace muchísima ilusión, muchísima.
Un besazo muy muy fuerte.
Responder

orlando dijo:
18/03/2018 en 1:47 pm

buenos dias me llamo orlando,


quisiera saber esplicitamente si la electricidad atraviesa el corazon que daños haria y cual seria el tratamiento
a seguir, muchas gracias quedo atento

Laura Morrón Ruiz de Gordejuela dijo:


20/03/2018 en 12:00 pm
Buenos días Orlando,
Siento mucho no poder ayudarte. Yo soy física y no conozco con exactitud los daños que sufriría el corazón
y mucho menos me aventuraría a hablar de un tratamiento.
Lo único que te puedo mandar es un enlace que me ha facilitado Sergio Palacios. Para escribir su libro
‘Einstein versus Predator’ se documentó sobre el tema:
http://www.insht.es/InshtWeb/Contenidos/Documentacion/FichasTecnicas/NTP/Ficheros/301a400/ntp_400.
Preguntaré a más personas por si pueden aportarme más información.
Espero que te sean útiles.

Un abrazo,
Laura

Victor dijo:
24/09/2015 en 4:56 pm

Mis felicitaciones,excelente documentación,claros los conceptos y mas sobre las protecciones de las personas.- Soy técnico
electromecánico y me manejo en el campo de las instalaciones industriales e inmuebles.-
Responder

Laura Morrón dijo:


24/09/2015 en 4:59 pm

Muchas gracias por tus palabras,


Un beso,
Laura
Responder

maria dijo:
04/10/2015 en 10:43 pm

hola
Responder

eduardo dijo:
16/10/2015 en 1:08 pm

Quisiera puntualizar que el primer elemento de seguridad señalado en el texto no se le denomina ICP sino interruptor
magnetotérmico. Realmente se denomina ICP, interruptor de control de potencia, al dispositivo que se instala en el cuadro
de la instalación interior, para no sobrepasar la potencia contratada con la compañía comercializadora de la electricidad,
pero éste no tiene una función propiamente de seguridad, aunque si debe estar dimensionado adecuadamente con la
intensidad admisible de los conductores eléctricos instalados.
Por otra parte, hay que apuntar que este tipo de elementos no son instalados en la acometida, sino en la llamada instalación
interior, o en la instalación de enlace para el caso de la protección por puesta a tierra.
Ingeniero industrial.
Responder

Laura Morrón dijo:


17/10/2015 en 6:30 pm

En primer lugar quiero agradecerte que hayas leído el artículo así como las observaciones que formulas en tu
escrito. Con respecto a estas últimas, debo comenzar con una consideración general. El tema de la entrada son los
efectos de la corriente eléctrica sobre el cuerpo humano y en ellos se centran las explicaciones, pero al tratarse de
un escrito de divulgación, pensado para personas no especialistas, he añadido algunos conceptos esenciales de
electrotecnia. También he incluido la descripción de los elementos de protección más básicos a los que tiene
acceso el usuario común, empleando la nomenclatura que creo que más puede sonarle.

Con respecto al Interruptor de Control de Potencia -así es como suelen denominarlo los instaladores- como
apuntas, es una variante de interruptor magnetotérmico que además limita la potencia disponible (pero sigue
protegiendo frente a cortocircuitos y sobrecargas) y debe elegirse de un calibre adecuado a la potencia contratada y
a las características de la red a proteger. En realidad, como bien sabes por tu titulación, tanto el Interruptor
General Automático (IGA), como el ICP y los PIAs son variantes de aplicación del dispositivo genérico que es el
magnetotérmico.

Así pues, el término empleado ha sido elegido conscientemente para ser más familiar al lector. Entiendo no haber
cometido ningún error conceptual por cuanto el REAL DECRETO 842/2002, de 2 de agosto, por el que se aprueba
el Reglamento electrotécnico para baja tensión. BOE nº 224 18/09/2004 incluye la ITC-BT-01 (Terminología) en
cuya página 12 se establece la siguiente definición:
“INTERRUPTOR DE CONTROL DE POTENCIA Y MAGNETOTERMICO
Aparato de conexión que integra todos los dispositivos necesarios para asegurar de forma coordinada:
– Mando
– Protección contra sobrecargas
– Protección contra cortocircuitos “
Como puedes observar, la definición es común para los ICPs y para los magnetotérmicos.

En cuanto al término “acometida” se usa, en sentido amplio, de acuerdo con la segunda acepción que la RAE
establece en su diccionario:

acometida

1. f. acometimiento (ǁ acción de acometer).


2. f. Instalación por la que se deriva hacia un edificio u otro lugar parte del fluido que circula por una
conducción principal. Acometida eléctrica.

Puede que no resulte rigurosamente técnica la licencia lingüística tomada, pero creo que se entiende y, por otra
parte, llegar al detalle de mencionar la(s) Caja(s) General(es) de Protección (CGP) o unidades equivalentes y las
instalaciones de enlace me parece fuera del alcance, extensión y propósito del artículo.

Finalmente desearía hacer hincapié en el hecho de que el empleo de cualquiera de los tipos de interruptores
mencionados es absolutamente irrelevante en cuanto a los efectos de la corriente sobre el cuerpo humano, ya que
su intensidad nominal de apertura es muy superior a las corrientes de defecto que se consideran. Si se han
incluido dichos interruptores ha sido exclusivamente para dar una panorámica más completa del sistema de
protección que contempla la legislación, sin entrar en detalles propios de expertos.

Gracias de nuevo por tu colaboración y un cordial saludo.


Responder

Waleska dijo:
01/06/2016 en 7:09 am

Como estudiante en formación …. Ingeniero en Prevención de Riesgos me ayudo mucho logre entender mucho más que en
clases Muchas Gracias….
Responder

Laura Morrón dijo:


01/06/2016 en 11:51 am
No sabes cuánto me alegra leer esto.
Un beso fuerte,
Laura
Responder

jtomckowiack dijo:
18/06/2016 en 12:18 pm

Estimada Laura
Agradezco la información entregada pues me parece didáctica y a mi juicio suma en conocimientos al respecto. Si me
encantaría puntualizar que las tablas utilizadas en relación a los efectos de las variables eléctricas son de las normas IEC y me
queda la duda si esa normativa es tan real. Los reportes de origen de esta norma no me parecen del todo concluyentes.
Responder

Laura Morrón dijo:


23/06/2016 en 7:11 pm

Buenas noches,
En relación con las tablas que figuran en la entrada, debo decirte que son de elaboración propia, obviamente
basadas en fuentes acreditadas y solventes. La cantidad de información disponible relacionada con el tema me ha
obligado a sintetizar y seleccionar los datos recogidos de diversos documentos entre los que destacan:

• Normativa Oficial:

Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión (2002). Ministerio de Industria, Energía y Turismo

UNE-IEC/TS 60479-1:2007

Efectos de la corriente sobre el hombre y los animales domésticos. Parte 1: Aspectos generales. (IEC/TS 60479-
1:2005 + Corrigendum 1:2006)

NTP 400: Corriente eléctrica: efectos al atravesar el organismo humano. Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
” En esta NTP nos vamos a referir a la publicación más reciente, la norma CEI 479-11994 tratando con especial
interés la «fibrilación ventricular», que constituye la causa esencial de los accidentes mortales debidos a la
electricidad.”

NTP 437: Aspectos particulares de los efectos de la corriente eléctrica(I). Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales

Cabe destacar que las NPT (Norma Técnica de Prevención) son recomendaciones que solo obligan en aquellos
aspectos recogidos en normas de rango superior. No obstante proporcionan mucha información útil y merecen ser
tenidas en cuenta. La NP 400 está muy relacionada con la norma IEC-479.

• Instrucciones Técnicas Complementarias

ITC_BT_24 describe las medidas destinadas a asegurar la protección de las personas y animales domésticos
contra los choques eléctricos.

• Publicaciones

Seguridad eléctrica: efectos de la corriente eléctrica sobre el cuerpo humano (Tabla II)
M. Villarrubia
Facultad de Física. Universidad de Barcelona
Guía de Seguridad de los Laboratorios de la Universidad de Alcalá. Apéndice 1
Universidad de Alcalá

Respecto a las normas IEC/CEI, la normativa legal en la CE obliga a la utilización de las normas armonizadas EN-,
y las que cada país pueda adoptar sin contravenir la legislación común (en España, las UNE) . No obstante cabe
decir que muchas de las EN- y UNE- son prácticamente idénticas a las elaboradas en su momento por la Comisión
Electrotécnica Internacional.
Espero haberte ayudado.
Un abrazo,
Laura
Responder

Diego dijo:
18/11/2016 en 1:33 pm

muy buen articulo,empleaste un lenguaje como para todo tipo de lector, Seguí asi , me gusto mucho.

Doctor en Fisica.
Responder

Laura Morrón dijo:


18/11/2016 en 4:35 pm

No sabes cuánto se agradecen comentarios como este.


Un besazo,
Laura
Responder

carlos dijo:
25/12/2016 en 7:04 am

es bueno o malo dejar que pase la corriente por el cuerpo en 110v


Responder

irvingparra dijo:
07/02/2017 en 5:29 pm

¿Qué tal?
¿Podría indicarme si existen reportes acerca de la resistencia que presentan distintos animales y en qué sitio puedo
encontrarlos, por favor? Por ejemplo, estoy buscando de ratas de la cepa Wistar y ratones de distintas cepas.
Muchas gracias de antemano.
Responder

Laura Morrón dijo:


10/02/2017 en 9:38 pm

Hola, lo siento muchísimo pero no sé de la existencia de estos datos.


Responder
fabio e. dijo:
08/09/2017 en 11:36 pm

felicitaciones y quisiera que me sacaras de esta duda:


Qué es más peligroso? 1 voltio y 230 amperios de corriente o 230 voltios y 1 amperios de corriente.
Responder

Laura Morrón dijo:


10/10/2017 en 1:49 pm

Es más peligroso 1 voltio y 230 amperios.


Responder

franck dijo:
04/03/2018 en 11:38 pm

Debo felicitarte porque gracias a ti entendi mejor los conceptos de electricidad que me ayuda muchisimo, gracias a las
comparaciones que hacías con la hidráulica.
Responder

Laura Morrón Ruiz de Gordejuela dijo:


10/03/2018 en 11:44 am

¡No sabes cuánto me alegra Franck! Un abrazo


Responder

Francisco Javier dijo:


31/03/2018 en 1:57 pm

Mis mas sinceras Felicitaciones por tan valioso articulo!!!!! Extraordinario! Soy Supervisor de Seguridad Industrial, Higiene
Ocupacional y Ambiente y necesitaba reforzar para una presentación los efectos dañinos de la electricidad en el ser humano!
Felicidades!!!
Responder

Laura Morrón Ruiz de Gordejuela dijo:


03/04/2018 en 11:29 am

Muchísimas gracias. Me alegra enormemente haberte podido ayudar.


Un beso
Responder

Los Mundos de Brana

You might also like