Professional Documents
Culture Documents
términos
GLOSARIO
Abandono: Acción consistente en dejar de proporcionar a las niñas o niños, bajo patria
potestad, custodia o tutela, los medios necesarios para su supervivencia y desarrollo integral,
sin perjuicio de lo previsto en otras leyes. (Ley de Albergues Públicos y Privados para Niñas y
Niños del Distrito Federal, Artículo 3)
Agresividad: Para la educación para la paz y los derechos humanos la agresividad es innata,
mientras que la violencia es aprendida. La agresividad se define como la fuerza que permite la
propia afirmación y que puede vincularse con la asertividad, la fuerza vital o el instinto de
supervivencia. Esta fuerza vital es canalizada e inculcada por los diferentes medios de
socialización, como la familia, la escuela, los medios de comunicación y el entorno social. La
agresividad puede canalizarse de formas diferentes, ya sea como fuerza para destruir a los
seres humanos o violencia, y como fuerza constructiva o noviolencia. La acción noviolenta es
esa agresividad empleada de manera constructiva para transformar y mejorar las condiciones
de vida. Otra forma de canalizar la agresividad sería su anulación: el conformismo, la apatía o
la sumisión. (Sembremos derechos y compromisos para cosechar la paz, 2011, 70)
Debido Proceso: Derecho humano, civil y político, que consiste en el conjunto de garantías
procesales que protegen al individuo sometido a un procedimiento judicial. Proviene del
artículo séptimo de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, así
como de las enmiendas cuarta a séptima de la Constitución Estadounidense de 1776,
adoptadas en 1791. El derecho al debido proceso se encuentra reconocido principalmente en
la DUDH, artículos 8 (derecho a un recurso efectivo), 10 (derecho a ser oído por un Tribunal
independiente e imparcial) y 11 (principio de presunción de inocencia), en el PIDCP, artículos
14 (garantías judiciales), 15 (principio de retroactividad de la ley penal) y 26 (principio de
igualdad ante la ley), y en la CADH, artículos 8 (garantías judiciales), 9 (principio de legalidad
y retroactividad), 10 (derecho a la indemnización) y 25 (protección judicial). Las disposiciones
relativas al derecho al debido proceso legal –tanto del PIDCP como de la CADH– crean una
obligación positiva en los Estados Parte de mantener la infraestructura institucional necesaria
para una adecuada administración de justicia, así como promulgar e implementar una
legislación que garantice que los procedimientos sean, en sí mismos, justos y equitativos. El
Comité de Derechos Humanos de la ONU en su Observación General Número 13 relativa a la
interpretación y alcance del derecho al debido proceso, particularmente en el PIDCP, señaló
que: “[…] la finalidad de todas estas disposiciones es garantizar la adecuada administración
de justicia y, a tal efecto, afirmar una serie de derechos individuales, como la igualdad ante los
tribunales y cortes de justicia y el derecho a ser oído públicamente con las debidas garantías
por un Tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por ley […].“ (Anaya M.A.,
2006, 46)
Deber: Situación en la cual una persona tiene que dar, hacer, o no hacer algo según la moral
que posee un acto de alguien, es decir, es una necesidad de actuar para respetar las propias
exigencias morales y formas de pensamiento. Esto no implica que sea una Ley, es un
compromiso y obligación ética y moral con nosotros mismos, por ser necesario para conseguir
un fin o varios. (Documento de trabajo, 2013)
Derechos a la protección: Estos derechos incluyen la protección contra todo tipo de malos
tratos, abandono, explotación y crueldad, e incluso el derecho a una protección especial en
tiempos de guerra y protección contra los abusos del sistema de justicia criminal.
Delito: es una conducta que sí daña gravemente la propiedad, las posesiones, la salud o la
integridad de las personas o de la comunidad. Son responsables de un delito la persona o las
personas que lo cometen y/o los autores intelectuales. Se castiga con multa y/o privación de la
libertad de 60 años o más. El Ministerio Público y la Policía Ministerial son quienes tienen la
obligación de investigar los delitos. Al poder judicial le toca juzgar y sancionar esas conductas.
(Manual para Promotoras y Promotores Juveniles en Derechos Humanos, 2009, 33)
Falta administrativa: es una conducta que altera el orden público que, de ninguna manera,
daña gravemente la propiedad, la salud o las posesiones de las personas. Las faltas
administrativas están contempladas en los reglamentos de policía y buen gobierno de los
municipios. Pueden ser castigadas con un arresto que no sobrepasa 36 horas y/o con una
multa (la autoridad tiene la obligación de entregar un recibo por el monto de ella). Los cuerpos
policíacos auxiliares, de seguridad o protección son los responsables de velar por la seguridad
pública. Siempre deberá de existir alguna autoridad encargada de calificar la falta de acuerdo
al reglamento vigente. (Manual para Promotoras y Promotores Juveniles en Derechos
Humanos, 2009, 33)
Interés superior del niño o niña. El principio del interés superior del niño o niña refiere al
conjunto de acciones y procesos tendientes a garantizar un desarrollo integral y una vida
digna, así como las condiciones materiales y afectivas que les permitan vivir plenamente y
alcanzar el máximo de bienestar posible.
(El principio del interés superior de la niñez. Red por los Derechos de la Infancia México).
Justicia: Virtud política que se predica de las sociedades, relaciones o decisiones bien
ordenadas o proporcionadas; y servicio público de solución de conflictos y asignación de
recursos escasos o disputados mediante la interpretación razonada y razonable de la ley por
los jueces y tribunales del Estado. El vocablo proviene del latín IUS, que significa derecho. En
el primer sentido, desde Aristóteles, se considera que la justicia debe ser la principal
característica de las sociedades bien ordenadas, para lo cual se distingue entre la justicia
conmutativa o judicial, que gobierna los intercambios cotidianos entre los individuos dentro del
marco de la ley, y la justicia distributiva o socioeconómica, que regula la repartición de los
bienes y valores apreciados por la sociedad y sus miembros, como los recursos naturales y
las riquezas, los derechos y los deberes, las responsabilidades y las oportunidades, las
recompensas y los castigos. En el segundo sentido, la justicia como aplicación del derecho en
los casos concretos es una de las funciones estratégicas del Estado Moderno desde los
albores del constitucionalismo y a ella se confían cada vez más tanto la protección de las
libertades de los ciudadanos como la preservación del orden público interno, Para el derecho
Internacional de los Derechos Humanos, la noción de justicia material entraña los llamados
derechos de la víctima, a saber: el derecho a la verdad y a la memoria, el derecho a la justicia
propiamente tal o al castigo y el derecho a la reparación. (Valencia, Hernando, 2003, 249)
Migrantes: Desde una perspectiva genérica, la palabra denota el desplazamiento de
personas o poblaciones de una localidad a otra, dentro o fuera de su país de origen. En lo
particular, existen problemas para hacer una definición única, debido, de manera principal, a la
diversidad de causas y elementos que se dan en cada tipo de migración. Los documentos
internacionales de derechos humanos prestan principal atención a aquellas migraciones que
se originan por alguna situación en la que se ven vulnerados los derechos humanos o bien,
que pueden representar un peligro inminente de violación a estos derechos –
independientemente de que sean causadas por el efecto humano o natural–. También, el
Derecho Internacional de los Derechos Humanos tiene particular interés en aquellas
migraciones en las que, por las circunstancias en las que se originan, mantienen a los
migrantes en una situación de constante vulnerabilidad, debido, entre otras cosas, a que no
viven en sus Estados de origen y a las dificultades que afrontan a causa de las diferencias de
idioma, costumbres y culturas, así como las dificultades económicas y sociales y los
obstáculos para el regreso a sus Estados de origen de los migrantes que no poseen
documentos o que se encuentran en una situación irregular. (Anaya M.A., 2006, 92)
Niño o niña, concepto de: Niño o niña es toda persona menor de 18 años.
(CDN, Artículo 1)
Niñez, derechos de la: Las niñas y los niños son titulares de derechos, como todas las
personas. Los derechos son facultades o reivindicaciones reconocidas a un sujeto por normas
jurídicas, morales o consuetudinarias, que le permiten llevar a cabo o manifestar una
determinada voluntad o exigir que otras personas se conduzcan de alguna forma o se
abstengan de un comportamiento determinado. Los derechos subjetivos propiamente dichos
son los intereses reconocidos por una norma legal, para cuya tutela el titular puede recurrir al
juez. Con pocas excepciones, el niño y niña no pueden hacer valer sus propios derechos ante
el juez. (Ansolabehere, Karina. et. al., 2009, 232)
Noviolencia: El concepto de noviolencia está muy ligado al de paz positiva, aunque intente ir
todavía más allá. La noviolencia plantea una forma de vida, una forma de lucha política y un
modelo de sociedad, presentando como punto fundamental la búsqueda de la coherencia
entre los medios y los fines para conseguirlos mediante el aprendizaje de la resolución
noviolenta de los conflictos. Paco Cascón Soriano insiste en que el término noviolencia no
debe escribirse como dos palabras separadas sino como una sola, con el fin de dotarlo de un
sentido positivo y alejarlo de las concepciones negativas. Una persona puede estar en contra
de la violencia y, sin embargo, no ser noviolenta. El planteamiento noviolento implica actividad
y compromiso transformador por hacer valer la justicia; implica también trabajar individual y
colectivamente en descubrir formas de cambio social noviolentas, como es la resolución de
conflictos. (Sembremos derechos y compromisos para cosechar la paz, 2011, 70)
Ombudsman: Palabra de origen sueco, que significa defensor o representante del pueblo,
quien se encargaba de vigilar las actuaciones de los servidores público y no tenía vínculos
con el Rey. En 1809, aparece la figura de ombudsman en la Constitución Sueca y al año
siguiente se nombra el primer Ombudsman, quien se encargará de velar por los derechos
generales e individuales y vigilará las actuaciones de los jueces y funcionarios para que
cumplan las leyes. Ésta institución ha sido retomada por varios países del mundo y lo han
denominado: Comisionado Parlamentario (Canadá, Reino Unido), Mediatur (Francia),
Defensoría del Pueblo (España), Procuraduría de los Derechos Humanos (Guatemala) y
Comisión Nacional de los Derechos Humanos (México). (Glosario de Derechos Humanos,
2010, 54)
Participación infantil: Con base en el artículo 12 de la CDN, los Estados Partes garantizarán
al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión
libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las
opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño y niña. Con tal fin, se dará en
particular al niño oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento judicial o
administrativo que afecte al niño, ya sea directamente o por medio de un representante o de
un órgano apropiado, en consonancia con las normas de procedimiento de la ley nacional.
(CDN, Artículo 12)
Sentencia: Resolución dictada por un juez u órgano judicial o administrativo que resuelve el
fondo de un asunto que le es planteado. Normalmente, la sentencia da fin al proceso (este
tipo de resoluciones en materia laboral son denominadas “laudos“). Las sentencias tienen
carácter obligatorio para las partes involucradas en el proceso y dependerá de la jerarquía del
órgano que la emite si es o no posible objetarla ante una instancia superior. Es importante
resaltar que la interpretación e integración de las normas jurídicas que se hace a través de las
sentencias puede llegar a ser de obligatoria ampliación para los mismos órganos del Poder
Judicial. Normalmente, las sentencias contienen los siguientes elementos: a) datos de las
partes y del juez o Tribunal que la dicta; b) relación sucinta de los hechos y las cuestiones
planteadas durante el proceso; c) valoración de las pruebas ofrecidas; d) consideraciones de
derecho (fundamentación y motivación) y e) resolución de los puntos sujetos a consideración
del juez o Tribunal (fijando en su caso el término en que debe cumplirse).
Por mandato constitucional, a fin de no dejar en estado de indefensión a las partes
interesadas y evitar discrecionalidad y arbitrariedad en la resolución, las sentencias deben
estar fundadas y motivadas, es decir, deberán citar con precisión las normas jurídicas
conforme a las que se resolvió el asunto, expresando las razones por las cuales dichas
normas resultan aplicables. Dependiendo del órgano que las emita y el asunto tramitado en el
proceso, las sentencias pueden: declarar la nulidad, ilegalidad o inconstitucionalidad de un
acto o norma jurídica; reconocer la validez de determinados actos; determinar responsabilidad
de particulares o autoridades públicas; declarar la existencia de un derecho subjetivo,
etcétera. (Anaya M.A., 2006, 125)
Servidor Público: Es la persona que desempeña un empleo, cargo o comisión subordinada al
Estado, en cualquiera de sus tres Poderes, independientemente de la naturaleza de la
reacción laboral que lo ligue con el área a la cual presta sus servicios, obligada a apegar su
conducta a los principios de legalidad, lealtad, honradez, imparcialidad y eficiencia. (Manual
para Promotoras y Promotores Juveniles en Derechos Humanos, 2009, 33)
iv) Adhesión. Tendrá efectos de consentimiento para obligarse al tratado si el tratado así lo
establece o los sujetos así lo acuerdan. Se demuestra la voluntad del sujeto hasta que se
realiza el intercambio de los instrumentos por parte de los sujetos parte del tratado, el depósito
del instrumento con el depositario, o la notificación a los sujetos parte del tratado o al
depositario del mismo. (Anaya M.A., 2006, 143)
Violencia: Si la paz es definida como justicia social y como bienestar, la violencia es todo lo
que impide a las personas autorrealizarse como seres humanos y satisfacer sus necesidades
básicas e intereses. En otras palabras, la violencia es lo que frena u obstruye el desarrollo, la
democracia y la vigencia de los derechos humanos. De esta manera la violencia no se reduce
a la guerra o al uso de la fuerza, sino que es algo mucho más amplio. A partir del concepto de
paz positiva se clasifica a la violencia en tres categorías: la directa, la cultural y la estructural.
La violencia directa es la que comúnmente se considera como tal, se reconoce con facilidad y
generalmente se la reprueba. Son todos los actos de fuerza y de presión que se ejercen
abierta y directamente contra las personas; incluyen desde luego las guerras o conflictos
bélicos, pero también los actos de represión, tortura, golpes y demás tipos de maltrato. La
violencia directa se aplica de manera concreta a una o un grupo de personas o a un
ecosistema. La violencia psicológica –como los maltratos verbales, la indiferencia y los
insultos– también se consideran formas de violencia directa. La violencia estructural puede
pasar inadvertida porque no se observa directamente sino a través de sus consecuencias.
Este tipo de violencia radica en la estructura social, así como en las relaciones entre las
personas y entre los grupos derivadas de ésta. Se traduce en necesidades no satisfechas y se
refiere a los tipos de organización social en los que los usos e instituciones permiten o facilitan
la explotación de las clases menos favorecidas y que derivan, por las reacciones así
provocadas, en la explosión de conflictos y en la violencia directa. está edificada dentro de la
estructura, y se manifiesta como un poder desigual y, consiguientemente, como oportunidades
de vida distintas. Los recursos están desigualmente distribuidos.
La violencia cultural es la suma total de todos los mitos, de glorias y traumas, y demás, que
sirven para justificar la violencia directa. Se traduce en valores y actitudes; son aquellas ideas,
mitos, ritos y costumbres que pretenden dar argumentos para estructurar la sociedad con
discursos legitimadores que sustentan la violencia directa y la estructural, así como reprimir
las respuestas de quienes las sufren; algunos ejemplos son los siguientes: machismo, roles de
género, estereotipos, racismo, xenofobia, discriminación, entre muchos otros.
Ambos tipos de violencia –cultural y estructural– comúnmente no son percibidas como tales
debido a que se les considera como formas “normales” o “naturales” de interacción, y juntas
sientan las bases para la expresión y el ejercicio de la violencia directa. (Sembremos derechos
y compromisos para cosechar la paz, 2011, 69)
Vulnerabilizados, grupos en situación de: Son aquellos grupos de personas que sufren de
modo permanente o particularmente grave una situación de discriminación, desigualdad y/o
intolerancia debido a circunstancias tales como raza, color, sexo, religión, situación
económica, opinión y preferencias de cualquier índole.
Las personas que forman parte de estos grupos no son vulnerables per se o en sí mismas;
son vulnerables porque los gobiernos y/o las sociedades las ha puesto en situación de
vulnerabilidad debido a prejuicios, discriminación o a la falta de políticas públicas adecuadas
que garanticen una igualdad social.
El Diagnóstico sobre la situación de los derechos humanos en México, menciona como grupos
en situación de vulnerabilidad a los siguientes: mujeres (en ciertas circunstancias), niñez,
adultos mayores, desplazados internos, refugiados, migrantes, personas con enfermedad
mental, personas con VIH/sida, personas con preferencia sexual y de género distinta a la
heterosexual. (Anaya M.A., 2006, 149)
Referencias: