La miseria politizada

La política es un tema que provoca diversas reacciones dependiendo de la

experiencia o las ideas que cada uno tiene sobre el tema. Para los que se
encuentran en una situación económica saludable, les puede parecer una realidad
en la que se sabe que su participación tiene poder, aunque no sabe cuánto, pero
tiene una idea sobre la democracia que se ejerce en México. Para este sector de la
población en la que se encuentra menos de la mitad del país, la democracia tiene
un sentido parecido; todos los ciudadanos son iguales por lo que tienen los mismos
derechos, como tener una nacionalidad, un nombre, educación y el derecho de voto.
(Cerroni, 2003)

Para la otra mitad la democracia no es tan sencilla de asimilar, y menos ejercer. La

cultura de la democracia debe ser aprendida y enseñada en las instituciones de
gobierno. En la práctica, el sistema educativo del país no es capaz o no tiene el
interés de crear una sociedad que ponga la política como eje central para la real
participación de los ciudadanos. Para ello, las oportunidades deben ser las mismas
para todos con el fin de llegar a una democracia más auténtica .

La política tiene su origen en la antigua Grecia. “Deriva del adjetivo pólis (politikós),
que se refiere a todo lo relacionado a la ciudad, es decir, ciudadano, civil, publico, y
por lo tanto, sociable y social…sobre la naturaleza, funciones y partes del estado, y
sobre las diferentes formas de gobierno, principalmente con el significado de arte o
ciencia de gobierno, es decir, de reflexión sobre las cosas de la ciudad” (Bobbio,
2003)

Somos del lugar en que crecemos y no de donde nacemos. Esta concepción del
sujeto como alguien que se hace y no que nace, es tan real como cruel para más
de 55 millones de mexicanos que se encuentran y se han desarrollado en situación
de pobreza. En relación a las estadísticas proporcionadas por el Concejo Nacional
de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVA), en el 2016 la pobreza

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bajo de 46.2% del año 2014 a 43.6%, a esto hay que agregar a la población que se
encuentra en extrema pobreza, la cual paso del 9.5% del 2014 a 7.6% en el 2016.
(Economista, 2017)

Sumando la pobreza y la pobreza extrema, para el 2014 un 55.7%, un total de 66

millones 783,000, y para el 2016 un 51.2%, más de 62 millones 783,000 de la
población se encontraba en una situación que no les permite cumplir con las
necesidades básicas de ellos y de su familia (Político, 2017). Una familia integrada
por mamá, papá y dos niños tiene que dar alimento, una casa, ropa, luz, gas, agua,
educación a los menores, así como cualquier gasto que se tenga que pagar, algo
que con la economía y el elevado costo de vida para los salarios que se manejan
no nos permite hacer con la seguridad y la solvencia que se espera en un país como
México. (Forbes, 2017)

La realidad socioeconómica de nuestro país es escandalosa. Uno de los países que

se encuentra entre los más ricos, que tiene al que fue el hombre más rico del mundo
y que cuenta con una de las reservas de petróleo más importante de américa latina
y del mundo, tiene a más de la mitad de la población en pobreza, y no parece que
la situación vaya a cambiar. Y es que en una situación así, los padres de familia
tienen que elegir entre comer o mandar a los hijos a la escuela, lo cual explica el
porqué de la marginación en que se encuentran las comunidades que se dedican a
la agricultura, en donde el presupuesto apenas hace su aparición. (Atitudfem, 2018)

La educación superior, tan necesaria en estas zonas, es un lujo que solo el 18.6%
de la población se puede dar. Las instituciones públicas no tienen el presupuesto
necesario para atender a la población, además de la corrupción que existe para su
ingreso, llegando a costar para carreras como la medicina más de 100 mil pesos en
un trámite “por debajo del agua”. Y siguiendo con las estadísticas, el Instituto
Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indicaba en el 2015 que de los 15 años
en adelante 53.5% de la población cuenta con educación básica; 21.7% con
educación media superior y 18.6% con educación superior. Se ha pensado que una

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sociedad con un bajo índice de analfabetas es un país desarrollado, cuando lo que
se tiene es mano de obra capaz de escribir con faltas de ortografía, de sumar y
restar, pero no es capaz de desarrollar la industria y la técnica que nuestra época
necesita, apoyando discursos gubernamentales que nos dices incapaces de
explotar nuestra riqueza en el mar profundo. (INEGI, 2018)

Para tratar estos problemas el gobierno ha creado programas para el desarrollo

social, como Liconsa, el Seguro Popular o Prospera, programas que en el caso de
Liconsa se ha visto los beneficios por la producción de leche en polvo fortificada y
que permite evitar la desnutrición infantil. Pasa lo contrario con programas como
Prospera el cual no ha tenido los resultados esperados y que se le acusa de tener
a los beneficiarios como mantenidos

“Sin embargo, en el caso de México, las transferencias económicas (como los

subsidios del programa Progresa) no han tenido mucho impacto porque con ellas el
país sólo ha alcanzado 0.448 puntos contra 0.499 puntos registrados antes de
dichas transferencias, es decir apenas una reducción de 0.051 puntos.”
(Vanguardia, 2017)

Traduciendo, la mayoría de la población en México es ignorante y pobre, campo

fértil para conseguir votos en masa si se sabe manejar. El PRI lo ha hecho en las
ultimas décadas de la mano de la televisión gratuita y los medios de comunicación
masivos, pero principalmente con la televisión. La televisión es uno de esos
aparatos que no puede faltar en ninguna casa e incluso en zonas consideradas de
extrema pobreza es común encontrar casas con la antena de servicio satelizar. Si
a esto le agregamos otras maneras de gastar tiempo y dinero como internet,
celulares, el alcohol, o las fiestas de pueblo, tenemos una población enajenada y
hedonista que palia sus frustraciones en estos vicios. (Forum, 2017)

Esta población no tiene la posibilidad de idealizar, de imaginar una sociedad en la

que sus necesidades básicas sean solventadas y se tenga la posibilidad de buscar

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su deseo en la vida. Sartori en su libro “La democracia en 30 lecciones” señala que
para que una sociedad sea democrática su población debe tener esta posibilidad
observar la realidad e idealizar algo mejor que ella. En la política ocurre algo similar,
es necesaria la unión entre el idealismo y el pragmatismo ya que todo candidato o
partido tiene una idea de la historia del país y hacia donde se quiere dirigir, pero
también necesita llevarlo a cabo y trabajar sobre la marcha en los problemas y los
cambios que se presenten desde una visión empírico-pragmático.

La clásica división entre idealistas y materialistas sirve para análisis el quehacer

político. Para tomar una decisión se necesita reflexionar, lo cual lleva
necesariamente el seguimiento de las noticias, hacer lecturas sobre economía,
teoría sobre la política y la democracia, o ciencia política, para ellos es necesario
mantenerse informado y saber buscar información fidedigna. Es necesario conocer
a los partidos políticos, su filosofía, su corriente ideológica, sus antecesores, a sus
candidatos y sus propuestas, porque, aunque ya existen las llamadas candidaturas
independientes, no se puede combatir todavía el poder y el presupuesto que tienen
los partidos de antaño.

Considerando la manera en que partidos como el PRI gasta su presupuesto en

promover a sus candidatos, no se puede pensar que un candidato independiente
pueda competir bajo las mismas reglas. La maquinaria con que cuenta el PRI le ha
permitido conocer a sus gobernados; saber de qué manera les pueden llegar, pero
principalmente los mantienen en las mismas condiciones de miseria.

Partiendo de lo anterior, las posibilidades de que la pobreza se reduzca son

limitadas y obstaculizadas por el propio sistema, el cual pretender educar con el
objetivo de crear ciudadanos con la capacidad de interferir de manera positiva y
propositiva en la toma de decisiones del Estado, pero en la realidad los resultados
no reflejan el presupuesto designado o los beneficios de la reforma educativa. Hay
que pensar que el problema de la democracia y la educación tienen que ir de la
mano con la economía y la corrupción.

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Programas como prospera pretender resolver problemas de los sectores
vulnerables a través de apoyo económico mensual, platicas y talleres, y el seguro
popular, pero como se ha señalado con anterioridad estos programas tienen
muchas incongruencias, como buscar solucionar el desempleo regalando dinero sin
buscar la sustentabilidad de la población de raíz. A juzgar por los resultados, esta
clase de programas han servido para la compra de votos por el partido en el poder.

Tomando un concepto de política más pragmático, la política es poder concebido a

un representante que pretende gobernar por y para los ciudadanos, los cuales le
dieron su voto y con ellos parte de su poder y voz. Los ciudadanos tienen un cierto
poder el cual para ser parte de la nación se concede al estado que como sistema
mantiene el orden y administra los bienes públicos con el fin de solucionar y ser juez
de los conflictos entre los ciudadanos o con el mismo estado.

A manera conclusión, la “democracia” en México llega a ser la manera en que un

partido político se ha podido mantener en el poder teniendo a mas de la mitad de la
población en pobreza y creando programas de beneficencia social. Fernando
Savater lo ha dicho “la miseria y la ignorancia son los grandes enemigos de la
democracia”. (Portal, 2012)

Es un círculo vicioso de una mala manera de hacer política, ya que mantener a una
sociedad en la ignorancia y en la pobreza provoca que el desarrollo económico se
mantenga en los mismos números. Se puede ver esto como un proceso parasitario,
en el que un organismo, en este caso la población, trabaja y mantiene a una minoría
que se encuentra en el poder y que le roba los recursos para que al final ambos
mueran. ¿Sera posible que los gobiernos que vengan se den cuenta que el poder
no está en los spots y la millonaria campaña publicitaria sino en los ciudadanos con
toda su subjetividad?

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Referencias
Cerroni, U. (2003). Introducción al Pensamiento Político. Ciudad de México: Siglo XXI.
Coneval. (2016). Coneval. Obtenido de
http://www.coneval.org.mx/Medicion/Paginas/Pobreza_2008-2016.aspx
Atitudfem. (29 de Enero de 2018). Atitudfem. Obtenido de
http://www.actitudfem.com/hogar/mamas/educacion/estadisticas-de-educacion-
en-mexico
Bobbio, N. (2003). Teoría General de la Política. Madrid: Trotta.
Economista, E. (17 de Septiembre de 2017). El Economista. Obtenido de
https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Pobreza-y-pobreza-extrema-
20170919-0013.html
Forbes. (9 de Enero de 2017). Forbes. Obtenido de https://www.forbes.com.mx/la-
pobreza-sera-una-constante-para-57-millones-en-2017/
Forum, W. E. (15 de Septiembre de 2017). World Economic Forum. Obtenido de
https://www.weforum.org/es/agenda/2017/09/el-preocupante-nivel-educativo-
en-mexico
INEGI. (24 de Enero de 2018). INEGI. Obtenido de
http://www3.inegi.org.mx/sistemas/temas/default.aspx?s=est&c=19004
Político, A. (30 de Agosto de 2017). Animal Político. Obtenido de
http://www.animalpolitico.com/2017/08/pobreza-mexico-redujo-coneval/
Portal, M. (30 de Octubre de 2012). Montevideo Portal. Obtenido de
http://www.montevideo.com.uy/Tiempo-libre/Conferencia-de-Savater-uc182980
Vanguardia. (18 de Septiembre de 2017). Vanguardia. Obtenido de
https://www.vanguardia.com.mx/articulo/niveles-de-pobreza-en-mexico-
creceran-en-2017-y-2018-ceesp