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DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA

FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES Y ADMINISTRATIVAS

ESCUELA PROFESIONAL DE CONTABILIDAD

‘‘EL INFIERNO EN LA BIBLIA’’

CENTRO ULADECH HUARAZ

AUTORA:

APARICIO VELASQUEZ, Mónica Aurora.

DOCENTE TUTOR:

Mg. GONZALES ZAPATA, Jesús

NOVIEMBRE – 2015
ÍNDICE GENERAL

1.-INTRODUCCIÓN:

2.-DESARROLLO:

CAPITULO I:

I.I: La biblia en el catecismo

I.II: Definición del infierno

CAPITULO II:

II.I: ¿Qué dice la biblia sobre el infierno?

II.II: El pecado es una falta contra la razón

CAPITULO III:

III.I: ¿Qué enseño Jesús sobre el infierno?

III.II: Curación de un ciego de nacimiento (Juan 9, 1-12).

4.-CONCLUSIÓN:

5.-BIBLIOGRAFÍA:
1.- INTRODUCCIÓN

Hoy en día vivimos en un mundo distorsionado por el pecado, donde cada uno piensa

de una manera distinta, y cree que siempre tiene la razón sin tener en cuenta las fuertes bases

de la palabra de Dios, no es raro ya ver como se mal interpretan algunos pasajes de la Biblia y

como estas personas fuerzan un texto bíblico para acomodarlo a sus creencias personales, ya

sea por beneficio o por ignorancia.

El interés del tema es ayudarle a usted a desaprender el error y reemplazarlo con

verdad. Aquel individuo que acepta las ideas distorsionadas. Sin embargo, un entendimiento

apropiado debe estar basado en las sanas verdades de la Biblia. Por otra parte en relación con

el comportamiento que asumen los seres humanos en la práctica de sus pecados, en tales

como la honestidad, la humildad y sobre todo la Palabra de Dios.

Es por ello que opte tomar la siguiente pregunta: ¿De qué valdría pasar la eternidad

en el infierno? Sorprendentemente Jesucristo dijo en Marcos 8:36-37, "¿De qué aprovechará

al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiera su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre

por su alma?” Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito,

para que todo aquél que en él cree, no se pierda, mas tenga Vida Eterna."

La presente monografía se justifica en la ampliación y enriquecimiento de

conocimientos sobre el tema; al mismo tiempo nos ayudara a reflexionar y poder actuar de

manera coherente frente a nuestros propios pecados, lo que permitirá fortalecer nuestra

práctica profesional de contabilidad. Teniendo en cuenta que Los salvados no van al cielo y

que el hombre no posee un alma inmortal.


2.-DESARROLLO:

OBJETIVOS:

1. Identificar la relación- entre el pecado y los males.

2. Reconocer la realidad frente al mundo del mal.

Muchas veces tratamos de comprender el porqué de las desgracias humanas y cuál es la

intención de Dios sobre ellas. No entendemos el significado del odio y todos los malos

sentimientos, debido a que el hombre busca la felicidad.

CAPITULO I

I.I: La biblia en el catecismo

"Quien no ama permanece en la muerte. Todo el que aborrece a su hermano es un

asesino; y sabéis que ningún asesino tiene vida eterna permanente en él" (1 Jn3, 14-15). Morir

en pecado mortal sin estar arrepentido ni acoger el amor misericordioso de Dios, significa

permanecer separados de Él para siempre por nuestra propia y libre elección. Este estado de

autoexclusión definitiva de la comunión con Dios y con los bienaventurados es lo que se

designa con la palabra "infierno".

I.II: Definición del infierno

Por mi parte dar exactamente una respuesta concisa, pero como todo adolescente oyó

hablar acerca del tema como ejemplo tengo a un ser querido mi abuelito me detallo, que el
significado de la palabra infierno es el lugar donde aquellos después de la muerte, son

torturadas eternamente claro esta son las almas de los pecadores que pecaron en la Tierra.

Muchos autores han abordado la existencia y apariencia del infierno en sus obras

literarias entre ello tenemos a Dante Alighieri en su libro ‘‘La Divina Comedia’’, represento

el infierno con rincones tales como un rio de sangre que hierve y que se convierte en el

destino de todas aquellas personas que han cometido algún crimen.

CAPITULO II

II.I: ¿Qué dice la biblia sobre el infierno?

Capítulo 15 Como ya hemos notado, el espíritu y el alma de una persona no creyente

vuelan al infierno al momento de su muerte, este es un lugar de juicio consciente. El alma en

el infierno habla como persona, tiene ojos, oídos, dedos, lengua y memoria. Hay un completo

conocimiento de las condiciones allá.

Según (I Pedro 1:16) y debe juzgar el pecado. Si permitiera entrar el pecado en el cielo,

destruiría todo lo que Dios ha hecho en rescate de la humanidad. El hombre hace su elección

durante el tiempo de su vida. Al momento de la muerte el hombre ha determinado su destino

eterno. No hay purgatorio o lugar intermedio. La Biblia claramente enseña que hay sólo dos

lugares. “E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna”

II.II: El pecado es una falta contra la razón


La verdad, la conciencia recta; es faltar al amor verdadero para con Dios y para con el

prójimo.

El pecado es una ofensa a Dios: "Contra ti, contra ti solo he pecado, lo malo a tus ojos

cometí" (Sal 51,6). En la Pasión, la misericordia de Cristo vence al pecado. En ella, es donde

éste manifiesta mejor su violencia y su multiplicidad: incredulidad, rechazo y burlas, con ello

nos da a entender que no importe lo que puedan decir los demás si tenemos fe el resto no

importa y ello se convierte secretamente en la fuente de la que brotará inagotable el perdón de

nuestros pecados.

CAPITULO III

III.I: ¿Qué enseño Jesús sobre el infierno?

Jesús dijo: “Si lo que ves con tu ojo te hace desobedecer a Dios, mejor sácatelo. Es

mejor que entres al reino de Dios con un solo ojo, que tener los dos ojos y ser echado al

infierno, donde hay gusanos que nunca mueren, y donde el fuego nunca se apaga”. “Y en el

infierno alzó sus ojos, estando en tormentos. . .” Lucas 16:23

III.II: Curación de un ciego de nacimiento (Juan 9, 1-12).

Al pasar, Jesús vio a un hombre que era ciego de nacimiento. Sus discípulos le

preguntaron: «Maestro, ¿quién ha pecado para que esté ciego: él o sus padres?»

Jesús respondió: «Esta cosa no es por haber pecado él o sus padres, sino para que unas

obras de Dios se hagan en él, y en forma clarísima. Mientras es de día tenemos que hacer la
obra del que me ha enviado; porque vendrá la noche, cuando nadie puede trabajar. Mientras

estoy en el mundo, soy la luz del mundo.»

La pregunta que le hacen los discípulos supone que ellos también participaban de la

opinión general que los judíos tenían sobre las desgracias que sucedían en una persona. Esas

desgracias se consideraban como castigo por los pecados propios que esa persona había

cometido, o como castigo por los pecados de sus padres que recaía sobre sus hijos.

CONCLUSIÓN:

Terminada la presente monografía se pudo concluir que muchas veces, a solas o en

compañía, nos preguntamos acerca de discutas existenciales y también acerca de la muerte el

infierno e incluso llamado lugar de tormento donde el fuego nunca se apaga, y el gusano no

muere donde están siendo atormentados todos los que mueren sin Cristo, donde arden por los

siglos de los siglos.

“El infierno no es el tormento eterno; es la elección final e irrevocable de un proceder

que se opone de forma tan absoluta a Dios, que lleva irremediablemente a la inexistencia

total”. Es verdad, nadie dijo que morir fuera algo lindo o deseable. Pero retomando la fe,

afirmo que Cristo tampoco. Él no quería morir pero sabía que iba a resucitar al tercer día.

También sabía que debía cumplir con la voluntad del Padre. Y le doy paso a Dios. Mis dudas

a Él y les digo: ADELANTE.

De esto modo tendremos una visión mucho más Amplia y la oportunidad de optar por

un camino mejor y crear nuevas ideas sin miedo a creer en Dios. Teniendo en cuenta que Dios
nos la echará la mano claro que sí pero no siempre dependeremos de ÉL, ni mucho menos de

SATANÁS, tener fe es la palabra y que mejor optar por nuevas oportunidades sin pecado

alguno y la gracia de una vida fiel.

BIBLIOGRAFÍA:
(1 Jn3, 1.-1. (Segunda parte). CATECISMO DE LA IGLESIA CATOLICA.

http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p123a12_sp.html.

Fenase, J.-M. (2001). Infierno, infiernos. Vocabulario de Teología Bíblica.

Barcelona (España): Biblioteca Herder. pp. 423_425.

Kelly, M. (1991). El infierno en la biblia. A los Espiritus Encarcelados .

Barcelona: CLIE.

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