You are on page 1of 2

2017

Pensando los principios Tributarios


Constitucionales de Proporcionalidad
y Equidad

Wilbert Geovany Alonzo Graniel


Universidad del Sur Campus Cancun
28-9-2017
PENSANDO LOS PRINCIPIOS TRIBUTARIOS CONSTITUCIONALES DE
PROPORCIONALIDAD Y EQUIDAD

En las dos teorías principales que se presenta son muy precisas y aceptables los razonamientos
principales del Artículo 31 Fracción IV. En la teoría del beneficio, el pagar por lo que se recibe, es
totalmente justo e inapelable pero la realidad de hoy dista mucho de esa teoría, mostrando con
cinismo e impunidad los grandes saqueos a las arcas de los estados por parte de nuestros
gobernantes, con el único anhelo de que se continúen agregando candados administrativos para
poder regular estas arbitrariedades y sancionarlas de manera precisa, completa y con todo el rigor
de la ley por la misma naturaleza de confianza depositada en ellos.
Por otro lado, la capacidad contributiva nos manifiesta que las contribuciones deben ser en razón de
la riqueza manifestada, pero en una cultura carente de conciencia contributiva y falta de
responsabilidad social, dónde los contribuyentes tienen la idea de que no es correcto pagar nada de
impuestos, recurriendo a la evasión fiscal, argumentando que el dinero no es aplicado de manera
correcta en el beneficio de la sociedad, consecuencia de la introducción a la nueva era digital (redes
sociales), dónde es muy común ver los malos manejos, arbitrariedades, excesos y demás de
nuestros gobernantes.
Todo eso nos pone en una posición complicada, teniendo como resultado un dilema. En el cual
debemos decidir entre hacer lo correcto o no, mediante la veracidad de la riqueza manifestada ante
las autoridades tributarias, por esa razón los estados presentan tantos cambios en conseguir la
mejor manera de buscar las aportaciones de los contribuyentes.
Decir que existe una correcta apreciación de capacidad contributiva en el país sería equivoco y
sustentable, tomando como ejemplo a una persona asalariada que tiene deducciones autorizadas
muy limitadas y casi imposibles de lograr, aunada a un nivel de educación muy por debajo de lo
normal, es increíble y absurdo ver la propaganda hacendaría de beneficios fiscales para las
personas físicas (asalariados), dónde te muestran una maravilla de beneficios que al final se reducen
a nada, por exceso de requisitos que cumplir para poderlos hacerlos deducibles, si tomamos el
ejemplo de las colegiaturas de los familiares de línea directa(hijos y esposa o esposo), teniendo
como norma general que los hijos sigan valiéndose del sustento de los padres para concluir sus
estudios de nivel profesional o universitarios y que se muden a otras ciudades en busca de mejores
niveles académicos, ante una deducibilidad hasta nivel preparatoria, cuando es obvio que los
mayores gastos se generan durante la educación universitaria.
La realidad es que se siguen teniendo preferencias tributarias a diferentes grupos sociales
burocráticos a pesar de estar en pleno siglo XX, y que esto impide el impulso a una economía
basada en equidad de capacidad contributiva.

You might also like