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  • Antropología Del Dialogo - Gennaro Cicchese Capitulo 01 PDF

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    Gennaro Cicchese Hacia el “entre” de la interculturalidad Tal cri “ocoto Primer din: pst de 2011 reduc ein: i Ter Zane (©2011, Hatori dad Nace “crewcindadnuevnctgat Ison spe. 95056-2607 ‘Queda echa depo gon mare ley 11728 "Powter Argentine Arsrpstga del digo” ein PROLOGO ‘Ante el individualismo competitivo que easacteriza a la modemidad tardia, se ha dado, tanto en la cultura como en la rellexi6a flosstia, una reaccién vuperadore, a saber, el surgicaien- {fo de la problemética de le altered, In comunidad de comunica ‘iim, dislogo, la donacién y la comunién. Fil6sofos como Franz Rosenzweig, Martin Buber, Emmanuel Levinas, Jurgen Habermas, aul Ricoets, Jean-Lue Marion llevan a concepto no una mera nostalgia de algo que falta a la sociedad actual, sino experiencias tadicalmente humanas y relidades emergentes que estin surgien- do, Elibro que estoy prologanco cansttaye un Fico testimonio de ello; asf amplia y corona una obsa anterior del mismo autor I per ‘ors dellaliro. Amtropologia e toria della altenta (Los ttinerarios ‘del otro. Antropolopla e bistoria de la altridad), Roma, Citta Nuova, 1999, “El estilo es a la vex descriptivo y reflexvo, de acuerdo al méto- do fenomenol6gico, en confrontacién con numerosos autores, que Ayudan a enriquecet la exposicion. Uno de los muchos aciertos de lz obra consiste en que, siguiendo a Fieidegger, pone la fuente del Tenguaje en el silencio, el cual es tambien ratz y condicion del dialogo, porque éste implica la etenta escuchs del otro, dindole lugar en Ia propia interioridad, en reiprocainterrelacién. Como lo dice el autor, se pone asi en juego una mutua spropiscion expro ‘piante, que responde ala actual crisis de la palabra, convertida no Dpocas veces en chichar La obra se erructara en cine pares, qe coresponden la sprosiacion sceiva de neo sdexabrimentor™ te todo, Eien fg logo lnm yn ate vias persnalias, ela intortoridad cay oa care esl epro- Brig, Enaimente dela comundedy la comonion dl notoron Ne parece ortinalypromeredr cl veplante del eonocnien- to personal del otro ome. persona. Para tecomprendedo, Gcchese sca ls consecuencias fosfcas de a alrmecion de fe Seren dels ibitacion de Cristo Rensctado en medio de lot Sues, seat la expone Giuseppe Zanght en un nivel tel6gico, pe "can presencia iene cad tna de las itsionidaes y {eS hacecomunicaner en une a intertidal Sup en la didy dstncion (pp. 100s}, de mado que dl pensar oinide con ‘in dare eascsimemte pore aconece em comunisn con el oto “al enfogue cat como pidendo nucvos pasos, qizés en une texcer cra: Boer e hace necesaro, porn ado, tllexionat mas ‘Excidmente las medaconerontolpean antopolopca 9 aro. Scolds barn mis rigor el pants por oro scale Toda ss fecundasconsecuencas, Sep mi opimign, ext trea se ‘elaciona con Ia cvestiéndel ceo, que Plantes Maron sigue ‘lorentvamente a Lévinasy a Recatdo dean Victor para pensar in comenion de nooto, la que elautor da presente obra oot ‘to (ug en at pp. 5,118), poo sin conectrinexpicvoment con in even anterior Estimo que em profundaacion eigueceia tint ls consiraciones de Zanght sobre el "pensar donandoel pensar” com Ine de nuts autor sobre ln spropacin-desapro- Plante en muta comunin Sin embarg, espero que los ectore ean movides por a pre sente dba no flame spenar de otro med, sno bre todo, {iro que ella enscha acerca del sence, 'didlogo ue de el dace la tacion rciprows is nveriondad comparige yl come Aida del nosotros, seg eke miswo pensamiento. Juan Carlos Scannone SL Ter, Main, El eer 9 lle del dl Comer On mae prin? Congo tome de wala fesse ‘Stein, pp. a0 ‘ A mis sobrinos, Nicolay Tito, para que, aprendiondo a dialog, sayan al encuentro de los dreds, en pa INTRODUCCION Gunes perones imvoan ldiblogo limitando ns expecta ver ‘Soo lon dem scepton tu propio punto de nit Eurdentement, ‘toes cite cl verdera diloge St cole verdederment, fe (eigen perce del didloge ox une exigenca de somidad EL Eiloge cx entoncer,ponere sof mismo en eusion remunca 2 ‘maim para abrise a nas camino propucto por efor. R Canrmsren En el mundo de hoy no es fil hablar de dislogo. A la dfcul- tad conereta de encontrare, et decir, de encontrar una relacion humana “ala par” con los demas, se agregan los miedos persona les, que los eventos dela globalzacién, del tezorismo internacio pal y del af Uamado “enirentamiento de civliaciones” produc ron en el mundo contemporaneo. El miedo del otra/de los otros ~scan éstos individuos, hom- bbre-mujer, pueblos, culeurs, rligiones diferentes~ amenaza con leterminar negativamente todas las rlaciones huranas ‘Verdaderamente, el encuentro con los otros, mediante los vise y los fenémenos aetuales de la movilzacién de grandes ‘masas, los intercambios econémicos y culturales los grandes acon. {ecimientos deportivos, ete, deberia volvemos mas flexibles y abiertos. Pero cl temor de la “diversidad” y de la “pérdide de identidad” endurece los aimos y cierra 4 los individuos en el loealismo y en el eosamno personals. Que estd sucediendo en nuestro mundo? 2Qué estd suce diendo en nuestra culturas? ¢Qué sucede en nuestras personas? ° Los estudiosos de ciencias humanas hicieron amplias invest gaaciones y comprobaron que en la rapides y luidez de los proce fos en acto, y en la fuerte influencia del monde de lor medios ‘masivos de comunicaciGn —la "red comprendida ests a causa del debilizamiento estructural del individuo. Los mites entee vida real y vida virtual son cada vez més tenur, al punto de termina en patologias. “A esto se agrega una ulterior consideracién antropolégica. El hombre contemporéneo prvilegis el aspecto exterior en desme: dro del *hombce interior, el mundo fisico respecto del metalsi- ‘co, en una continua fuga de si mismo y del propio centro, hesta el cambio de su misma naturaleza de hombre, igada a la *pérdida del silencio, como privacién de interioridad e incapacidad de ceseucha, Esta pérdida es, probablemente, una de las causas mis, Importances de la desorientacin del hombre contemporin. 12Cémo hace un ser humano, proyectado en el vivir siempre “fuera des, para descubrir st verdadero yo? Sino vuelve 4 entra, si no wuelve a sus propiasraices, se encuentra expuesto Ccontinuamente. De agua bisqueda de cultivar el "yo" con medi tacion y actividades New Age ola prictica de religiones orientale Pero justamente este querer recuperar la identidad personal a ‘menudo desmesurada~ genera, de manera narcsisa, el cuto del ye, “Ia danza por el yo dorado" Una oleada de individualism esté envolviendo al mundo, El sislamiento y la fragilidad del individuo, que derivan de esto, podelan quizkt encontrar respuesta en esa “ganas de comuni- ad”, fenémeno bastante difundido entre los seres humanos. Pero testo a menudo significa identificarse con un grupo contra otros fgrupos, lo cual vuelve « proponer modelos ya visto, que no reste. ‘ven los problemas, sino que lamentablemente crean otros nuevos, De agut la nevesidad de ir mas allé de los vio modelos y volver @ pensar las relaciones humanas yendo al encuentro del ‘tro, al encuentro de un “ti” personal que todos los dias pasa a ‘mi lado, ela luz de ese gran regalo -vocacién y tarea ofrecica alos “humanos" que se llama dialogo. Se intenté ir al corazén de Ia cuestién para responder 4 la pregunta fundamental: ges posible el dilogo a nivel ancropolégi 10 co? Es deci, ain antes de hablar de dislogo cultural, politico, Jncerreligioso, etc, cexisten caractersticas humanas innatas para poder cormunicarse, expresarse y encontrarse con los demas? ‘Para realizar este trabajo hemos hecho conflur en elibro una serie de investigaciones flosélias, teoldgicas, antropolégicas y calturales que nos ocupan hace muchos af! ‘De ellat emerge que en determinados momentos histéricos, sleunas caractristicas humanes cacn en el alvida, ereando eviden {es desequilibrios en las relacionesinterpersonales. Nuestra Epoca ‘no ests exenta, Si queremos restablecer un nucvo equilibrio, tene ‘os que encaminaznos sobre las buellas de estas cuaidades hum nas olvidadas, Por eo, en los cinco expituls del libro, nos hemos dedicado asedescubrir el silencio, el dilogo, la relacin, a interiorided y la Comunidad. Consideramos estos temas como "pilares" de la viven- ia interpersonal, para volver a pensar las relaciones bumanas y el fencuentzo con los dems. ‘Vaya mi agradecimiento a todos mis estudiantes, que en las Jecciones universitarias crearon el clima propicio de escucha para ayudar a pari las ideas contenidas en este libro, Una referencia especial merece la Prof. Susana Nuin, que me dio fimo y me sortuvo en este trabajo, y junto con ella, a Prof, ‘Annamaria Carolla, Prof. Maria Teresa Cassaniello y la Dra Claudia Caneva, que amorosamente leyeron el boreador,ofreciéa dome preciosas sugerencias. ‘A todos los que leeran este libro, les deseo un provechoso encuentro con los demas, en la hucla del didlogo, ea, Rrcoe. Homa, (2000) 2002" ¢ con Gil- BRENA, Ident ¢ reltone. Per ‘Shanta dle Menage acl Teles Se Tent Pav 209 Captrutol HACIA EL DESCUBRIMIENTO DEL SILENCIO No tenemor mds que mirn a mucto alrededor ef mundo que nor todos pa renga terble medida ef sence ha dsaparcdo'y Tip ken en domi ne ay, lelmor suena vx me Afueay ater dentro: ye gue id iter de gues ue ell eb amped foo fo onnaio de serch esrb en sna intron product de pal ‘rar que tle por anu no sel fuera Sole Litt Steno ve puede realmente ccucar R Guat En et ceptulo, partiondo desde un sbordsesemllégco es deg desde lec de los “igne" intcaatemos debi la stuncign del leno exeolvidado® por la sociedad los rae i cml Scan no Improtane ci hecho de que nuestra invenigacisn comiznce por d silencio. Quien tiene miedo de hacer sleneio, de che dene miedo de pensar Y penaresfustamente d prince paso pare acader el Conoeimlents de co, de oe dems y 4 Ee eunic digo. La Elowotia de echo, coat Sapling Sl ensamicao, poe ayadamos a descr dimeniones hamanas dade o decisidn, pucde volver « pensar con core lo 72 petted una eve prpsi yr dena ko El seni cin dda, ung dimensigncopsutea del bom bre, Surecopesaton hoy, ela clinaion de do" se mpone Bs {como una necesidad inevitable. Nuestra tess es que Ia dimensi6a del alvido "fisico" del silencio “Ia falta del silencio y el adveni ‘miento del sonido o del ruido~ remite a un més profundo alvido mmetafisico", en el interior de la misme subjetividad humana, En In dimensién interior del hombee, de hecho, nos parece que ests gn sto una grave pérdida de humanidad con una consecuente En el panorama cultural contemporsineo se puede relevar una recuperacién de esta tematicn, Se trata de una vecdadera y propia “nostalgia” del silencio. Ala luz de tal exigencia comenzaremoe Ia reflexién para una interpretacion antropoldgica del silencio, 1- CONTAMINAGION ATMOSFERICA Y CONTAMINACION DE RUIDO ‘Uno de los mayores dramas del hombre contemporénco es el haber construido uh mundo que ya no ext a su medida, y que lo sprieta, da tas dia,en una mors sin liv, Los males del mundo dbo, delos ques medios maives de comunicaion dan cuen tacas todos lo da, etn al delane de nuestros ojos desoien- tados einerédaos:radioactivdad erecente, dafos «la exoafera, Sobrepoblacign, ucbanizacin desenrenada,.Parccen miticos ‘monstrosinvencbles que se mukplcan, se ruperponcn ys ali ‘mentan mutuainente, asumiendo dimensiones desmmesurada, pl ‘Paces en acto una cootaminacién grave y sin limites, que aharea cielo y tera, hombres y costs, Como ung abe tone, 208 Guia el sire que reapramos y nor sofoca, Bs una fori de conta ‘inacin que desde el cel fic desciende hata as profundida ‘Ses metaticas dl hombre “Hay wa contaminactn que todot conacemot y tenemos: conrompe lis aguas, emvenena la tier, despuebla or mares el sire; corea la respnacininguict, opone al mundo claro de la Ineturatezaequelvelado de le forete industrial aleja la mirada te a verdad del tempo, dele extacionery de los ato, aja de “ 1s mirada el discurso de los celos que narran la gloria de Dios ‘del da que babla de el con otro da dela noche que trac not. Giasa la noche. De est, materia.) Bor lo tanto en seguida ‘oidente, ore contaminacon,esirtul, que se reconoce cuanto ‘nds nat adentramor om ls fren petficada y escucharr0s las acer alteradae om ela lat noticias de ga y de droga, sugeren- far de dolor y de violencia, wrifizo de novedades morales, brotests sin fie sobre lo poco 9 sobre lo mucho. Voces despro- Dorcionadas entre xy en relaibn com lor cielo, los dias, ls [on Ex na contaminacion de la rate humana” Asistimos eas impotentes a este fenémeno que toca nuestras safces,senos a hecho de perder cada dia mis muestra manidad Examos tana prisionados por la mores de los males que aolan el plan tn nado pore lo dey contain del mando ie fos propone, es mis, noe propina hedonism, consumismo, ero {ismo, tan dczoricntados delante de nuestro inciero destino, ue hho podemos hacer més que sbandonammos al ujo de las cosas, ‘Enobrdecemnos con el ruido, con el clamor, y no pensar mis. ‘Setiene In sensacin de que el hombre contemporaine inten ta, en algin modo, exoresar esa angustia difundida por todes lade de a cual teme toda minima manfestaion. x tal estado de Cosas tambicn el guido puede aparccer como liberador “El ruido ex bienvenido porque sapera la nstintiva advertencis del peliva que exté on nosotros Ouientene miedo desi mism, busca ‘ional ruidorery ror extrepitoios,paraechar alos demo ‘tian (Lot prition re serian para este fn de grits, mica, lambores, juegos articles epiquteos, ec) El raid infunde wh ‘ontdo do seguridad. como la malitud, por exo re lo ama 16 ‘Hone el tomor de conratari, aque nsintioamente se perae la ‘magia de talisman que del oman. El aio nos protege de pono- Sor rfleiones,desinse fas sueion inguitants, 0s aseuioa que Gitamos todos juntos y bacemor wn bochince tal que mingno Stand agredomas, El rade tam inet, ton prepotentertente real que toda el retto se excl como un pido fantaima Nos FAT fe nganament, em Nuon mani I, 2 8, p. 3 (Boia). (NET: no pubic sn csp 5 ahora el esfuerao de dei hacer cualier cor porgue elo el ‘ive obra por le potenca de rete indole taidad™ Este aniisis de Carl Jung, que se remonta al lejano 1957, pare- ce vilido todavia hoy, ¥ se revela muy profundo y profético. El psicdlogo suizo observa agudamente: "El muido ademés no es més ape ung dels males de muestra gpocs aunque ta vere mas ek lente. Los demés son el graméfono, Ia radio y dlkimamente la ‘eletéreatelevisign'™” Desde el tiempo de Jung a hoy, el problema del ruido se age dizé notablemente y asume dimensiones macrorcSpicas 4 catsa del superpoder de los medios masivos de comunicacion y de st fective daminio sobre el hombre contemporineo’. El ruido do: ‘mina en los insistentes mensajes alos que estamos cotidianamente {expuestos como a radiaciones, sin tregua, através de las maltiples “notieias” de los medios masivos. [Est fuera de nuestro alcance desarrollar un andliss detalls ta sobre la relacién entre los medios masivos y el nuido. Sin ‘embargo nos parece necesario subrayar que esta en acto, partie: do desde el "Norte del mundo”, una forma de contaminacién de ruido”, que llena todo espacio fisico y mental, blogues Ia creatividad’y la fantasia, y proyecta al hombre contemporineo hnacia una vida puramente exterior, superficial, tendiendo a masi Bearlo y alienatio, 2. RUIDO ACUSTICO ¥ RUIDO VERBAL El fenémeno del ruido no queda en la superficie, sino que tiende a penetra hasta la races de nuestra civiizacisn: “El ruido. 5G. ime, Riper © mater. 100 lator,» cur dA. Velo © M.A, Masel, Trg, 982, cE Mt, La enon dele nel Pose ins ei nla maces melange ate pce, nels odee ‘mae Ca Neer Ron. 886, 76 NE ne pnt en sail 5, Para una profandinacin en el tema cf C. Saetni, La grande sor I mando come ile, i, 5%, ses, Horo sen Teton Foti, Latte, Roa Bat (1997) 1999 3a, Loma she gud ‘leone ¢ pope Mondo Nike, 286, 16 modeme,es parte inegrane de la “civiizecisa” modema, que Cert prevalentcmente oncnada hacia a extended yl spe Slalidad,y que aborcce toda reflencn: Lr un mal que ene tales re Caan oe ngs r Cart Jung ya consataba los sesgs de est situacn, pres sian lat eres consecuencns dl ride: el aturdimienoy a pati a “destruceiOn de lus capacidades de concenracion”e ‘otamientonerfow con relatvar osicodcpendencass es dct {Aaholtvngullzsates y otter venenor™ que embrutecn al hombre y lo relven exclave? ‘eamentablement, nos habitwamar al sid “como nos habi tuance aun consumo esmesurado de lcohal’-y para muchos el tudo se vucle le rtm doe de ou extenca El ruido acincco, medio on decibel os miximos nvees cn las dicoteca, ent centro de las grandes ciudades 0 en low ‘SCropucton, en el ajereo coudang 0 en clinteior de mucstas ‘sar donde radio prebadores «todo volumen hacen de pato™ Sexes en pate temblen na forma de containacion, A pomera wists pede aparece mis ben band) frente tor males mi prves, eto podemossubextimatin, Toda no conocemos sus conse Eton fare TLimémonos por un momento al fenénieno musical, hoy tanto:mas populat y difuadido en stpliosextrston de nicsta fociedad.Pareiera que nade pues considerase ya al margen mica de cal po ee dere y propio ‘aburo indcciniudo” de mane, puraments Consult, en ina clzaion "ot la cal no hay Tugnt part los Sonos, sino aslo para los raids, ine chart ea alse termina con el se nemtablemente no eseichadore"s Tn ctr stuscion tric Ia eacuche mua privada del nece- sario silencio se ute “un simple rlleno de agesto tempo ex tency, de mies strdafrs domeésic, de too mvesto hasta Ta presencia contante de enteramor sonore sn pas, donde © ES Time iin, Batsna, be dimension p 7 2 Bem p77 S.M Babar Le dines p36 ” «silencio es sbolido constantemente y sobrepasado) es indudable ‘mente una de las grandes calamidades de nuestra época y es quiza ‘causa, hoy no todavia bien definible, de dafiosestticos y éticos"™ ‘Una dimensién mas sutil y subalterna de contaminacién, que se agrega al raido actstico, es ee ruido que se insinda dentzo de Is palabra misma y ls arraca, Ya al final de los aioe cuarenta, el poeta y pensador suizo Max Picard, en el libro Die Welt det Sehcigen, esc gins de gran ntensidad sobre el fenémeno En el pardgrafo sobre "El ruido dea palabra” l desarralla un cuidadoso andlisis fenomenol6gico, En ol centro de esta rellexién testé Is constatacién del decaimiento de la palabra a causa de una “SeparaciSn” constmada con el mundo del silencio “Hoy a palabra ya no surge del silencio por we act del espirita (que da sentido ala palabra 9 junto con ella al lento, io que Shage de otra palabra, del sowido de ore palabra, y no vuelve ed al silencio no termina madsen el iloncio, sno om otro Som cdo verbal ys pierde com e propio rida [«} La palabra ya no ‘xite como eipirt,sno solamente come sonido, acstca- “Las consecuencias de esta crisis son l decaimiento del esp to a materia, a simple “rumor verbal", que Pleard define *vaclo Sonoro gue icc el vaio sn sonido y que “mia con a Ep esta situacin el hombre ess en peligro y “corre el riesgo ‘en cada instante de anularse™, como sucede ya en exe proceso de ‘mlstificacin de la noticia através de los medios masivos de coma! Ga Gasp Dania, esteem’, If Cari dle Se, 23 de mar de 19a) 93a on pbs pa. 3 RE ond a te Coma Min 1 i ements nde vr pean ee oun Le Bae ‘Seow (EN 207, nse incense MG Prd pp 3. SCG ead iy nn ato et ae 20) 2) 18 nicacién en los cuales el ruida toma el dominio sobee el sujeto hombre y sobre cada objeto: “Hoy ~escrbe Picard~ todo cami cLobjeto no suscita mas ru alrededor de sf, como una vez, sino ‘que el ruido es primar y “va en busca” del objeto. Ruido y obj (o ya no se distinguen entre ellos, movimiento y ebjeto tansitan fenun dnico rumor 3. METROPOLIS, © BIEN EL OLVIDO DEL SILENCIO Paseando por las calles de una gran ciudad, Roma o Pars, ‘Tokio © New York, Bombay 0 Dakar, Buenos Aires o Ciudad de México, no hay diferencia, asistimos a un Lenémeno que toms cada ver més consistencia: cs el alvido del silencio, Advertimos {que el silencio se dilaye y domina el ruidor “La gran ciudad parece una inmonsa reserva de ruido El ruido 0 fabrica.en la Gudad ni ms ni menos que como un producto ‘cualquiera, 9 e5 acuomulado para reier, idependiontomente del objeto del que devioa,almaconado on la ciudad donde ‘emana sobre los hombres 9 sobre lar corat™ Pareciera casi como si nosotros respitirames el svido y el ruido, a su vez, nos absorbiera y “nos respirara”. El hombre con. ‘temporinco se apita afanado entre sus esiras, como una marion: tw en las manos del ruido. En esta situacion toda la metsopolis aparece como una “forificacién contra el slencio"® y las casas como "fortines ctigides conta el silenc EI silencio permanece fuera de los muros, adormecido y cexcluido, Elfendmeno del olvido dal silencio es ms bien evidente y-nos parece mucho mas revelador de una situacion que podria- ‘os defini "planetaria", desde el momento en que no esta limita “We Rien om 15 Tne 9.232. 19. idem, p73 9 da slo al Occidente, sino que extiende sus confines a todas partes del mundo mediante un proyecto que quisiera mostarse humano, pero que resulta despiadadamente“deshumano", de urbanizaion csentrenada yaa concentracion demogrific, La metropolis ex el resukado de exe proceso iniciado ca Eacgpn 7 depots del Mado, qv oy di Int toda e ind, explorando spun esta cra" post ind trial” en situaciones limite, com graves consecucncles para Is poblacign para la humanidad de los hombres. La stacion, yt Drecara en certos aspects (droga, miseria, prostitulén, ce) se ‘nearing hacia una mayor degradacion y “deshumanizacon® ‘Pasando en automovl por las grandes cudades se dene “la sensacign de atrvesar un inmenso dicionario”™. Alrededor de nosotros tfc, rida, radi teleisores, peo tabi teflon ‘in vial y carteles publicitarios, omnipresentes. Estos son fruto de esto nando paranchin= que dea hace decenos os imide con os de palabra: “Essamos eicundados por palabras adonde vayamot: palabrar susurradas a media vox expresadas on vot alia 0 gradat com ia: palabras babladas, rectudas 0 contadas palabras sobre ct ‘us, libros, sobre mos o en el ilo; palabras om meepler sonidos, colores 0 formas, palabras para ser oes, elds, vistas ° mirada palabras que van 9 tienen, se mucven lentamente, ‘lanzan, satan 0 se agtan.;Palabras, palabras! Ellas constitu yen lr paredes, of iro y el teco ‘de nuctraexitencia™™ tas palabras son lo que nos arrance dl silencio yl rlegsn sl olvido, porque no son palabras aeatias, que realize la com hicaci y la comunion entre les hombres, sino que "no son mas {gue palabras": palabras vata, vanas, alo palabras, Son los enge- Sosos mensajes de un mundo consummistsy narcissta que nos tienta con sus seductores espejismos: “Usame, tomame, bébeme, audorame, tScame, bsame, ducrme connigg"™, Ra Hm | RL Noun, Senile, pep Lined pti ce be Ca Non, Raa 198, p 39 (NAT to pn tad 20 Pivaiet 4, LA CRISIS DE LA PALABRA Y EL, OLVIDO DEL OLVIDO Bl olvido del silencio tiene como matiz préetico una “esis de Ia palabra”, por lo que la palabra, que ya no esté anclads al slen- co, pietde 8 Fanci “La palabra mo comumic mds, ya no alimentala comunity so crea la comunidad: en consecuencis, ya no sporta vida. La palabra ya no oftece una bare digna de confianas sobre la cual li personas puedan moverse baci el encuentro la sna de la otra y constr la sociedad. La crisis de Ia palabra, siendo criss histérica y cultural, no queda limitada a un campo dl saber humano, ino que embiste {odo el hombre y st sctuar comunieativo, También la teolopta y la fenscianza teol6pica, que deberlaconstiuir la profundizacion y la ‘comunicacién del misterio revelado por la Palabra divina, corren riesgo de ser embestidos por este viento de criss. A este props Sto hay una pagina iluminadora de Nouwen que transeribimos por entero "Concentrémonos un instante en la ensetanzateolégica

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