Professional Documents
Culture Documents
1
Amores de Lagartija
más que solo una ráfaga fría o una ráfaga caliente, según sea la temporada del año, se
Sobre el sillón está sentada y con los brazos extendidos sobre la recargadera una bella
mujer, que parece no estar haciendo nada o quizás haciéndolo todo. En su mano trae un
cono de papel que en su interior contiene agua y pareciera beber besando el cono del que
resalta un espiral que ella misma pintó con tinta negra. Su mirada se extravía tratando de
abarcarlo todo simultáneamente, su pupila está tan abierta que su ojo entero se pierde al
caer en un inmenso agujero negro que ese sí termina cubriendo todo a su alrededor. Con
su mirada pasa lo mismo; parece que se dirige hacia mí, pero también a través de mí, y a
mis lados y lo que está enfrente y detrás, es mas, ve tanto lo que hay a mi alrededor que
soy la besucona y que aunque como algunas palomillas y alacranes cuando encuentro,
llevándolo al patio, donde hay tierra, árboles de frutas, unos pollos y unos patos, que
aunque la hacen parecer una casa en medio de un pueblo campesino, es en realidad una
2
Amores de Lagartija
Soy una lagartija que mis antecesores llegaron aquí ocultos en una mudanza de
personas que llegaron de la costa y habitaron esta casa. Soy una lagartija besucona cuya
panza es tan transparente que se puede observar lo que como durante el tiempo que tarde
en digerir. Eso lo sé no porque lo haya visto, porque ni siquiera me he visto, sino porque
la he escuchado a ella, Josefina, hablar de mí como una bendición que llegó a su vida.
Y aprendió al comprender
Y comprendió al pensar
Y pensó al militar
Y militó al crecer.
Tararaaa ra ra raa
La veo rascarse la cabeza, repasar la letra de la canción con sus labios pero en
silencio y con los ojos mirando hacia arriba como pensando, analizando. Sus ojos se
hacían pequeños y con sus dedos acariciaba su labios como tratando de tener una
con una inquietud tan real y profunda que me hacía estremecerme, como si la
- ¡A la chingada, ni que fuera importante!- dijo con un sonido mas alto y convencido
y tomo el control remoto de un pequeño aparato de sonido que funciona con una
3
Amores de Lagartija
Ella no lo sabe, pero hace tiempo que vivimos como marido y mujer, desde que
un día llegó a vivir en esta casa y me alimentó por primera vez con sus paradojas y sus
pensamientos que me mantienen vivo. Ella piensa que mi alimento deben ser esos bichos
e ignora que no dejo de observarla fijamente con mis ojos, mirando esos laberintos que
viven en su cabeza y que solo yo percibo. Es desde entonces que aunque ella no esté
Supongo que alguien que hace eso solo puede ser una esposa a la que debo amar.
Justo en este momento puedo ver sus largas filas de pensamientos que formados
uno tras otro comienzan a desfilar en su consciente. Algunos de ellos los devoro al darme
cuenta de su existencia y para disimular trago una palomilla que volaba cerca de mí.
pensamientos que me sirven para saber más de ella y recordar momentos pasados que
hemos compartido hasta llegar a lo que somos hoy; es decir una feliz pareja.
4
Amores de Lagartija
contra las puertas que se encuentran medio abiertas, la veo atenta pero relajada y recostada
sobre su sillón mientras hojea varios periódicos y con un marca- textos va subrayando los
“Los transgénicos debilitan el sistema inmunológico de las ratas en que fue probado,
5
Amores de Lagartija
“La empresa agrícola Singenta, es comprada por la empres farmacéutica Astra Seneca,
“Cochabamba, Bolivia libra la primer guerra social por el agua en el siglo 21”
La miro intrigada sobre las notas que subraya, aparentemente aisladas y a la vez
siguen una lógica o una secuencia que Pina está tratando de descubrir. Pero ¿Qué es lo
que busca? Es como si buscara entender una enfermedad a partir de los síntomas aislados
que sufre un paciente vivo, partir del reconocimiento de que existe un funcionamiento
Eso me recuerda una historia, aclarando que como es normal, no todos nuestros
recuerdos son buenos, hay otros que aun me cuesta trabajo traer a mi mente por ser tan
peligrosos y difíciles de procesar. Para ello les voy a contar uno que quizás refleje alguna
6
Amores de Lagartija
Mmmm que linda se ve estirando sus brazos por el respaldo del sillón, mientras
enciende un cigarrillo y como sintiendo un gran regocijo en ese sillonsote viejo apoyado
en una pared de ladrillos que poco le falta para caerse, pero que al menos ayuda a que no
se metan los pollos que viven en el jardín, pues tan solo mide un metro de alto. Quizás es
por eso que siempre tiene tanto polvo ese sillón. Lo importante es esa bella silueta que se
da vueltas y se gira y habla y tiene forma de fuego; es decir, ese pensamiento que como
el humo del cigarro sube hacia la luz de un foco que ella no deja de mirar.
¡Ah de veras! la historia de cómo llegamos hasta este momento mi esposa humana
Josefina, es una mujer hermosa, muy bella y feliz, de hecho siempre había sido
feliz, aunque hoy más que nunca. Ella estudió la carrera de periodismo, le encanta tomar
fotografías y recorrer el país conociendo los pueblos del campo y la ciudad, sus dolores,
Todo comenzó hace un par de años, cuando recién llegaron Josefina y su anterior
esposo a esta casa. Todos aquí mirábamos a la pareja como un potencial banquete de
creen que salimos a comer cuando en realidad los observamos y aunque nos miran a los
indiferencia.
7
Amores de Lagartija
algunos años, un día que aunque ya pasó se repite infinitamente en los tiempos pasados y
futuros, en distintas fechas y momentos de la historia que escribieron los que aun no
nacen. Ese día llegaron Arthur, su esposo y ella con un paliacate cubriendo su cabeza,
bien abrigada, con su falda larga y ajustada a su cuerpo y dos bolsas de plástico colgadas
en las manos. Cuando entró ella por delante, escuché, miré y sentí unas profundas palabras
que contenían infinitas palabras que nunca escuche antes, y eso que esta casa tiene como
100 años desde que fue construida y han pasado por aquí una infinidad de personas.
Cuando me percaté que a esas palabras las acompañaba un pensamiento que era
súbitamente que las vibraciones de mi movimiento hicieron una ola en el ambiente que
crecía exponencialmente hasta provocar un espasmo casi imperceptible pero que por
dentro hace estremecerse a cada célula de su cuerpo, o sea de Pina, cuyo movimiento
submarina en el océano índico. Ella, por supuesto no se dio cuenta de todo eso.
De inmediato me percaté que ese complejo mensaje era posible gracias al lenguaje
que emanaba de su boca, pues en estos barrios de la ciudad de Iguala los lenguajes hacen
conceptos que no existen en las palabras occidentalizadas y que más bien evocan a
8
Amores de Lagartija
pesar de toda una vida de vivir en la ciudad y que seguía siendo espejo de múltiples
de tierra, de su mirada mensajera. Todo esto a pesar del esfuerzo de sus padres por que
Sin embargo, su lengua usual era el español citadino, con sus argots, modismos y
que la esencia profunda del pensamiento presente en el viento, en los rayos del sol, en
una gota cayendo de la llave de agua y que golpea día y noche una cazuela. Vivir de
otro pensamiento presente en la palomilla que devoro, aunque no siempre, pero la audacia
Cuando ella me miró por vez primera pegado en la pared pasó algo que nunca
antes, me sostuvo la mirada y estoy convencido que justo entonces entendió que estaba
—Arthur, con esto te vas a sentir mejor, ven te acompañaré para que te acuestes
un rato en el petate-
9
Amores de Lagartija
Mmmm Arthur, es todo un caso, recuerdo cuando escuché por primera vez su
nombre, que entonces no lo sabía pero de inmediato supe que se trataba de su compañero.
Imaginé que entraría un hombre alto y robusto, güero y hablando en inglés, pues en algún
momento de mi historia conocí uno, que era un ebrio vagabundo pero que vivía en esta
casa; esa es otra historia que terminó mal, muuuy mal y al mismo tiempo muy bien. De
hecho a veces pienso que tengo mucho de ese vagabundo (al que por cierto le decían el
hippie) o que él tiene mucho de mí y que esa sensación es más importante de lo que creo,
El caso es que mi sorpresa fue que percibí otro pensamiento como el de Pina, y
por la puerta entró un hombre con una camisa ensangrentada, caminando muy débil como
y paciencia. Le limpiaba las heridas con una serenidad que me impresionaba, pues el
El pensamiento de Arthur pertenecía a otra lengua pero con sus mismo sueños,
con sus mismas formas y con su misma rebeldía aunque más ardiente. Vi también que de
me la despegó a mí.
Y hablando de historias que contienen otras historias, cuando miré ese morral
deshilachado pude ver los infinitos mensajes que contiene, las historias que cuentan esos
10
Amores de Lagartija
El viento sopló, haciendo que los hilos del morral de Arthur se agitaran de un lado
para otro, llevando el viento un pensamiento, una historia hacia mi lengua, que justo
entonces había sacado a gran velocidad, movimiento que Pina sintió y súbitamente giró
su cabeza hacia mí. Supe entonces, mientras masticaba un insecto que atrapé, que Arthur
lo tiene desde que nació, aunque su madre se lo dio cuando tuvo 14 para que echara las
semillas de maíz que sembrarían en el cuamil. Tarea que era colectiva aunque nunca
completa por la ausencia de su padre que se fue a los Estados Unidos desde que su madre
estaba embarazada de él, por lo que nunca lo conoció personalmente más que por cartas,
fotos y una llamada anual; hasta que el año pasado murió en Irak en un intento por
conseguir estar de forma legal en aquel país tras 20 años de trabajo explotador, aceptando
El morral fue un obsequio que su padre en vida le mandó de Estados Unidos poco
maleante de Los Ángeles por 50 dólares y los pagó por la alegría porque le concedieron
De hecho, Influenciado por su nueva vida le puso Arthur, aunque el color de la tierra esté
Así entendí la razón del porqué un hombre con raíces indígenas porte un nombre
deshilachado morral.
11
Amores de Lagartija
Con dificultades por vivir en la ciudad, no dejaban de atender las tradiciones religiosas
que les daban sentido, y que ese día ensangrentado por las heridas de bala de Arthur,
cobraban especial sentido, por una razón que no entiendo, pero que intuyo.
penetraban en sus heridas y en el fondo miraba balas y odio. Hasta que mi concentración
fue reventada por la voz presurosa de Arthur, que parecía olvidar su malestar.
—Hay que acomodarnos pronto, hay que tener las ofrendas y el toro.
Dijo Arthur esperando pacientemente a que Pina termine de limpiar unos libros viejos
que pertenecían a su padre Jacinto y que hablan sobre la historia de sus tierras y las luchas
— ¿Ya sabes que a la gente de mi pueblo le quieren quitar la tierra para instalar una
—SÍ, te digo que nos va a llevar la chingada si no hacemos algo, al rato llegan los
compas pa´ platicar qué ondas con la marcha, aunque lo que está pasando ahorita allá
afuera es mas urgente y terrible, pues narcos que se dicen policías o policías que se dicen
narcos están disparando contra estudiantes normalistas que sueñan con que la educación
detrás de ella, que en realidad miraba fijamente la llama de la vela, que a su vez estaba
justo enfrente de un espejo pequeño en el que ella se reflejaba mientras se peina y que me
12
Amores de Lagartija
permitía mirarla de frente y sin darse cuenta ella también me miraba a los ojos, pero nunca
se imaginó que esa manchita en el espejo, opacada por la luminosidad de la vela es una
Con una tranquilidad que encerraba una profunda rabia y miedo por lo que sucedía
mas allá de las puertas de esta casa, donde habían estudiantes que estaban siendo
generaba una escalada interminable de dignidad que en su conjunto hacían una ola de
rebeldía que como un golpe de viento la hacían voltear el rostro hacia la vela y gracias al
espejo también a mí, para después voltear lentamente hacia a Arthur y le dijo:
sagrados en esos cerros, en esas cañadas, en esos llanos. Ya vez como le hicieron con los
empresa minera de la plata y el oro en el mundo, me dijo el Agus que lo vio en Internet,
ya ves que allí en el albergue tienen eso; así me lo explico todo, dice que quieren matar a
los campesinos de la comunidad, que están ahí desde hace muchos años y que además no
entienden la relación sagrada con el abuelo fuego, con la madre tierra, con el viento, las
plantas y los animales- Replicó Arthur alzando mas la voz, mientras yo digería con dolor
y tristeza miré como rodaba por su rostro una lágrima que cayó al suelo, produciendo un
estruendoso duelo espiritual, pues además de ser una convicción personal la de luchar por
defender sus derechos, también tenía un especial cariño con el el pueblo de Pina.
13
Amores de Lagartija
Pina no dejaba de dar vueltas y mirar una vieja fotografía que tenía de cuando era
una niña de 7 años, la acariciaba como viendo si la vieja impresión se desvanecía pero
eso no pasó. Seguía tallando mas en lo que parecía un defecto de la fotografía, como otra
mancha negra. Se acercó la fotografía a la cara y se dio cuenta que en la pared, muy cerca
de ella había una lagartija besucona, como yo. Como extrañada me miró y siguió viendo
la fotografía.
perdió del reflejo, ella lo vio todo y creo que estuvo consciente de lo que haría cuando me
percaté de su reacción al darse cuenta que me acerqué caminando por la pared hasta la
parte más cercana a los pies de Arthur donde cayó su lágrima. Me miró y me sonrió, y
recargó una pala en la pared muy cerca de mí, que me ayudó a bajar más cómodamente
hasta la lágrima que estaba sobre el suelo; a las besuconas no nos gusta caminar en el
piso.
Llegué hasta donde estaba la lágrima sin dejar de pensar en la bella Pina y de
inmediato sentí una compleja ráfaga que me costó trabajo agarrar y controlar antes de
poderla devorar. Cuando lo hice me di cuenta de los abismos infinitos que fueron dando
forma a esa lágrima hasta hacer un pensamiento etéreo presente en los sentimientos y
pensamientos de Arthur, como una fotografía actual que permite analizar y explorar la
realidad planteada por cada universo de su mente, pero de una manera viva, dinámica e
impredecible.
14
Amores de Lagartija
|Mi interés era mucho, pues debía saber más de donde provienen estos niveles de
pensamientos, además claro del especial interés de conocer más sobre las múltiples
realidades que rodean a esta bella mujer con la que cada vez era mayor el tiempo y el
espacio compartido.
Probé con mi lengua de lagartija esa lágrima y pude ver un abismo de injusticias,
de ataques a su dignidad como ser viviente, y pude ver un coraje profundo y explosivo,
que me hizo correr rápidamente a un lugar más seguro para digerir todo esto, y soportar
—Caraja lagartija casi la piso. Dijo Arthur al ver que salí corriendo debajo de su
zapato. —
Recuerdo que cuando escuché eso, estaba en un profundo estado de alerta, pues
los pensamientos que devoraba sin cesar me agobiaban y sin embargo no podía dejar de
devorarlo, era como si al engullir una gota de agua salada como la que estoy justo ahora
digiriendo, esta se convirtiera en un sumidero en forma de hoyo negro que traga todo a
su alrededor hasta devorarme completamente a mí, que se admite que soy su depredador.
otra y que no solo debía tomar con cuidado esos pensamiento o terminarían por
—Déjala, ya sabes que a mí me gusta que esta lagartija este en la casa, dicen que
15
Amores de Lagartija
AMORES DE LAGARTIJA
Desde el primer día Pina y yo tuvimos un acercamiento muy fuerte que comenzó
con un intenso intercambio de miradas, hoy es mucho más que eso, aunque no sea cierto
que como arañas, como ella piensa. La perdono porque sé que en el fondo no le interesa
lo que coma sino la relación que mantenemos y que va más allá de todo.
sentimientos que aunque ella aun no lograba distinguir, ya estaban presentes en cada gesto
que me dirigía, incluso en una ocasión mientras yo me paseaba por un árbol, en cuya rama
Pina colgaba un objeto esférico que rellenó de agua con azúcar para que se acercaran los
probar un poco de esa agua endulzada que cayó al suelo justo cuando un colibrí bebía
Ya no era el agua salada de la lágrima de Arthur que hablaba de las más profundas
sistémico. En esta ocasión era el agua endulzada alimento de un colibrí que bebe de un
recipiente de plástico, pero lo hizo después de haber visitado las flores de los árboles de
naranjo que estaban en ese jardín del patio de la casa, bebiendo el dulce néctar de las
flores con su alargado y delgado pico. Me impresiona el profundo intercambio que ocurre
entre el ave y los árboles de naranja, pues estos requieren del incansable trabajo de
quienes lleven el polen de una flor a otra, para así poder seguir teniendo frutos, nuevas
16
Amores de Lagartija
semillas y por lo tanto vida para su especie. Ese trabajo lo hace, mientras se alimenta, el
colibrí, que hoy me deja conocer esos antiguos acuerdos que hacen una economía sagrada,
cola, al no entender entonces que es lo que había pasado, ¿porqué si existe una estructura
sagrada de economía que viene desde los más antiguos patrones que dan sentido a las
esencias de la vida, existe también una economía putrefacta que destruye esos mismos
de una lágrima de Arthur y él una gota de agua dulce que cae el pico de un colibrí me
anunciaban ese día a lo que me enfrentaría con esta singular pareja que mas allá de mi
voluntad se habían convertido en una parte importante de mí, no solo por alimentarme de
las complejidades gestadas en sus pensamientos, sino por la relación personalísima entre
posible que exista eso que a todas luces es todo lo contrario a las fuerzas sagradas que
llaman los huicholes el “Yurámeka”. Esto, es todo lo contrario a la fuerza oscura contra
destrucción.
17
Amores de Lagartija
Cuando juntos vimos, sin precisamente entender todo esto, por encima de nuestros
ojos había un sudor frío y un rostro pálido, que para colmo mío, es decir de la besucona
que era, como todos los intercambios previos de pensamientos, el resultado simple de la
copulación que acababa de tener lugar, a partir de lo que curiosamente hizo sonoro ese
triángulo.
Con la mirada fija en su cámara digital, Pina observa la fotografía que acaba de
tomar al colibrí, recorre las demás fotografías que están en su aparato, recorre una por
indignación que llenan sus ojos de insólitas mareas que la ponían al borde de un llanto
rabioso.
Caminé por la rama del árbol de guayabo, era tan delgada que incluso con mi peso de
es lo que ponía así a mi amada esposa. En la pantalla de la cámara pude ver las imágenes
que en su trabajo ella había captado, eran marchas de cientos de personas, con mantas y
pancartas con leyendas tan variadas que las hacían parecer un catálogo de múltiples
levantamientos sectoriales, los electricistas con una lucha sindical de miles de personas,
curioso porque no peleaban por mejoras laborales, sino por el trabajo de todos ellos al ser
también por su propia existencia. Eran los estudiantes que luchaban por que la educación
siguiera siendo pública, laica, gratuita y para todos. Eran los homosexuales peleando por
el derecho a ser y pensar como ellos quieran, a ser diferentes. Eran los pueblos que,
18
Amores de Lagartija
-Todos ellos son parte de sectores tan distintos que realizan sus luchas por separado,
que no existen ligas naturales para su comunicación, pero que sin embargo parecieran ser
todos ellos parte de un solo plan - Dijo Pina a Arthur con una voz tan baja que quizás él
no alcanzó a escuchar o bien, tan solo escuchó pero no mencionó palabra alguna.
Volvió a tomar su cámara y en esta ocasión la dirigió a mí, cerró un ojo y con la mano
derecha enfocaba la lente, mientras presionaba una y otra vez el disparador. Después no
miró las fotografías que había tomado sino que se me acercó mientras extendió su mano
para acariciarme. Noté su impresión al ver que lo había logrado sin que yo saliera
solo cerraba los ojos ante la presión de sus manos y con sus caricias me trasmitía sus
pensamientos que nuevamente alimentaban nuestra relación que cada día se hacía más
Sectores aislados uno de otro son como células que cada una de ellas tiene su propio
comportamiento independiente, con una relación azarosa y caótica respecto a los demás
sectores. Sin embargo, pareciera que hay algo que no las mira así, pues mientras se
territoriales, se construye una sola realidad integral, donde se van ensamblando las
condiciones que necesitan los dueños de un poder económico y político que representan
19
Amores de Lagartija
más las caricias de Pina mi esposa humana, me sacudí de su mano y corrí por la misma
rama por la que había llegado hasta ahí, hasta que me puse atrás de unas frondosas hojas
que me permitieron ocultarme para tratar de digerir lo que estaba recibiendo de este
tormentoso amor, que sea como sea, yo había decido sobre llevar. Pero así es el amor, no
siempre es sencillo.
Quiere decir que desde abajo, desde los pueblos que se organizan y generan nuevas
desde arriba hasta abajo, creando patrones auto-organizativos que son capaces de generar
una sola realidad en la que los ataques supuestamente sectoriales son auténticamente un
autómata para el que no existe el caos y el azar entre dichos atentados contra la dignidad
Ese supuesto caos, en el que luchan estos pueblos, sindicatos, ecologistas, estudiantes,
eso que no sé qué es, pero que tiene la capacidad de integrar todos los procesos de despojo
que es uno solo; poderoso e inteligente, tanto para hacer de todas sus perversidades un
20
Amores de Lagartija
partir del máximo caos entre los sectores de la sociedad, esos mismos que hoy se agrupan
en sectores en lucha y que vistos desde los ojos de los de arriba que se traducen en un
perfecto y armónico orden visible solo para ellos, a los que llama movimiento social, los
LA PRIMA BRIGIDA
Aquel día recibió la inesperada visita de su prima Brígida, a la que recibió con un
abrazo después de varios años de no verse. Ella está en la ciudad para cuidar a su suegra
que está internada en el centro médico, la habían traído unos días antes cuando se cayó al
pisar sobre una corcholata, que al pisarla y tallarse con el piso produjo un zumbido tan
agudo y molesto, que le provocó un escalofrío que recorrió su cuerpo, partiendo desde el
corazón de la suegra de Brígida, y avanzando hacia arriba y hacia abajo, hasta tocar sus
oídos y sus rodillas, cuando perdió el equilibrio. Bueno, eso es lo que contó la prima.
Con una evidente alegría de platicar con Pina, Brígida le contó también lo que le
aquejaba, como que en su pueblo no hay que comer, aunque en el mes de junio sembraron
como es costumbre, pero ese año no llovió, una sequía sin precedentes retraso tanto las
lluvias que el maíz en las barrancas no pudo crecer y la sed de las tierra se convirtió en
¿Qué tenía que ver aquella nota de periódico que Pina había leído en la que decían
21
Amores de Lagartija
mas de mil personas estaban acampadas impidiendo el trabajo de la maquinaria con estos
desórdenes climáticos?
inmediata, tuvieron eco en las palabras que salieron de la boca de Pina, pues ella percibió
de producción que necesitan los poderosos hijos de puta, porque si sus ansias de
con una insistencia profunda, directo hasta lo más oscuro de mis oscuros ojos.
Con pasos lentos camino despacio por la pared, tratando de alcanzar una pequeña
cucaracha que está muy cerca. Pina me mira como sabiendo mi instinto natural por
devorar todo cuanto pase por su mente; una sonrisa tímida y llena de confesiones me sigue
mientras me desplazo.
Pina, no había siquiera dejado una mochila que traía. La puso recargada en la pared y
22
Amores de Lagartija
sobre el piso de cemento. De su mochila sacó un galón lleno de agua y la miré beber como
si no lo hubiese hecho desde hace un par de días. Fue tan abrupto su trago que al momento
de bajar la botella salpicó un chorro justo al rincón en el que me encontraba que hasta
Fue como si esa agua que me bañaba el rostro me mostrara una profunda realidad
que a la propia gota de agua hacía sufrir, era como si la hubieran contaminado con un
cochambre oscuro pestilente, pero no venía de la gota, sino que era una contaminación
que venía de algo mucho muy profundo, que había alterado los equilibrios ancestrales de
de Pina refiriéndose a esos mismos “equilibrios” que son devastados. Es quizás que algo
en verdad está pasando, algo en verdad está cambiando en niveles infinitamente grandes
o infinitamente pequeños.
--¡Aaaaaaaaaaahh! Se escuchó salir de la boca de Brígida al darse cuenta que por poco
me pisa, claro que la sorpresa fue igual de espantosa para mí. Ella gritó no porque me
fuera a hacer daño, sino por lo inesperado de ver a esa pálida y traslúcida lagartija en un
Aún exaltado por la sorpresa de escuchar a Brígida así de asustada me escondí tras
describir lo que estaba viendo en la gota de agua que seguía humedeciendo mi piel de
lagartija.
23
Amores de Lagartija
Cerré los ojos y supe que debía compartirlo con Pina para que ella me ayudara a
entender lo que estaba encerrando esa agua que trae consigo la realidad que vive Brígida
en su comunidad.
Caminé hasta estar en el techo justo sobre la cabeza de Pina, Desde ahí deje caer
en su cabeza un poco de esa agua mezclada con un poco de mi saliva a su cabeza. Es una
cantidad de líquido tan pequeña que fácilmente puede estar tan ancho como un hilo de
telaraña y tan largo como un grano de lentejas, por lo que es prácticamente invisible para
documentando lo peor, lo más sucio de la embestida integral contra los pueblos ejercida
por los poderosos, que incluso la pone constantemente en grave peligro, pero le explica
que la realidad solo se puede entender desde los que son capaces de ver de manera
Por supuesto, me inquieté pues pareciera que Pina pretendiera probar lo que en mi
entender había quedado incompleto o quizás errado. Justo en ese momento ella gira su
cabeza y me mira con una sonrisa extraña, como burlándose de mí. Yo, atento me sereno
24
Amores de Lagartija
—Pina continúa —desde los niveles más globales se van definiendo patrones de orden,
que definen como deberá ser la alimentación del mundo, que definen en que trabajarán y
cuanto ganarán, que definen incluso las convicciones espirituales, sociales y políticas más
básicas a través de los medios de comunicación, van creando sistemas ordenados que
ordenan a su vez los patrones de funcionamiento interno en dimensiones amplias del cono
nórtico.
reordenados, estos otros no son necesariamente geográficos, sino sectoriales, son por
ejemplo el espacio del ataque a los trabajadores, ordenado a los estándares de explotación
25
Amores de Lagartija
Un sistema que pretende ser absoluto y que tiende sus ramales hacia niveles
transversales cada vez más inferiores dentro de la gran estructura nórtica. Las extiende
menos que sea de las clases sociales elegibles para ellos, impone formas y programas
educativos que preparan a los niños y jóvenes para ser más útiles a la gran estructura
--Eso quiere decir que por lo tanto, son ellos los pueblos los que son capaces de
Pina, sin sonreír y completamente seria invitó a su prima a descansar en un petate que
tenía disponible, pues se sentía cansada y al siguiente día debería salir de viaje a cubrir
26
Amores de Lagartija
varios eventos en el sur del país, pero siempre con el corazón impaciente por regresar a
casa y poder seguirme viendo. Claro que no se lo cuenta a la prima porque no le gusta
Recuerdo que aquel fue un tiempo de muchos viajes, la miraba llegar e irse de un
momento a otro, no estaba mas que apenas unas cuantas horas antes de volver a salir, cada
vez que regresaba lo hacía cargando nuevas historias que recogía en la conglomeración
En esos niveles que son espejos se reflejaron realidades sociales que configuraban
explotación, combinadas en un solo pensamiento que contiene la visión de Pina desde las
Combinado con su vida cotidiana, Pina hacia de la lucha el tema que amenizaba y
infinitos patrones que presentaban entre sí, desde los huracanes nacidos en el perverso
plan de un gobierno capitalista para obtener el control geopolítico de una región, que
través del caos, como la tierra que se erosiona por las faldas de una montaña produce
deslaves que sepultan viviendas y personas, destruyendo todo a su paso, la tierra cae y
busca lograr su estabilidad en algún fértil valle. Así el capital mundial busca estabilizar
formal y la ilegal. Todos esos poderes buscan, como la avalancha de tierra que baja de la
montaña para estabilizarse, el mundo material se nubla con una realidad que construye
28
Amores de Lagartija
Simula ser como el huracán que con fuerza se crea en el océano producto del no orden de
los patrones climáticos, desestabilizados y corrompidos por obra de ese gran autómata.
fundamentales, que logra incluso convencer a muchos de dejar la naturaleza, ese contacto
con la madre Tierra y vivir en las ciudades, donde se olvida que la tierra respira, donde
todo es un mundo artificial, ficticio, pero que logra convencer que es el verdadero y con
quienes se resisten, suele llegar y tomarlos por la fuerza, secuestrarlo en sus entrañas y al
fin de cuentas las siguientes generaciones no recordaran nada de lo que fueron, de lo que
son —pensaba Pina mientras tenía su mirada perdida y comía poco a poco unas papas
Justo entonces, Arthur llegó por detrás y comenzó a besar el cuello de Pina mientras
acariciaba y besaba sus hombros, haciendo a un lado los tirantes de la blusa de dormir
que trae puesta Pina. Ella cierra los ojos y acaricia con su mano el cabello de Arthur
inclinando hacia atrás su cabeza para recargarse en él. De inmediato ya estaban acostados
momento apasionado que no terminaría ahí, sino que se dejaron llevar por el placer del
intercambio carnal.
Sin embargo, aun en esos momentos Pina no dejaba de pensar en esos patrones que
29
Amores de Lagartija
respirar, que lo hace tan libre que si el aire estuviera teñido se apreciaría con claridad un
remolino de viento que se mete girando rápidamente a la boca de pina y que contiene,
para mi sorpresa una perversa historia, Pina no sabe al momento de respirar que ese aire
entendimiento.
Aunque parezca imposible, ella aun trae en sus manos su bolsa de papas fritas, la cual
deja caer en medio de suspiros y discretos gemidos. Ella vuelve a respirar profundamente
y el remolino de viento se vuelve a formar para entrar entre sus labios cálidos que casi
podrían purificarlo. En un segundo mi hermosa Pina cierra los ojos y en instantes todo
vuelve a comenzar y a terminar en cuanto lee la envoltura que había dejado caer y que
decía “Esta empresa ayuda a que tengas un aire limpio”, enseguida el costo del producto.
esta ocasión parece ser diferente, ese oxígeno que ella ha respirado, producto de la
fotosíntesis de las plantas y árboles que habitan el patio de esta casa, alguien lo ha vendido
sobre la pared hasta ponerme muy cerca de ella. Mi respiración de lagartija es agitada
mientras espero pacientemente a que ella haya terminado de aspirar en este respiro que
profunda. Atento espero y en cuanto el viento que sale por su nariz golpea mi rostro,
30
Amores de Lagartija
Ese día me sentí borracho o intoxicado con ese aire, que de inmediato me reveló
que todo empezó con el programa un programa llamado Pago por Servicios Ambientales,
que muchos científicos humanos defienden como una alternativa para mantener en buenas
condiciones un bosque que produce agua, biodiversidad, oxígeno y que además mitiga
El gobierno entregó a los pueblos indígenas que habitan esas zonas boscosas una
Banco Mundial y este a su vez lo convertía en la economía que fluctúa de manera caótica
Servicios Ambientales.
Dichos bonos fueron después comprados por una empresa que vende alimentos
chatarra, de esa manera la empresa no dejara de contaminar, sino que podrá emitir una
—“papas fritas” -.
chatarra que varios minutos antes había tirado al piso en un impulso por rodear mi cuerpo
31
Amores de Lagartija
La respuesta la encontré rápidamente al entender que la empresa para cumplir con las
que además capitaliza poniendo leyendas en sus productos que dicen “empresa verde”.
Es decir, ahora entiendo que aunque quien está pagando por este aire es precisamente
la propia Pina, que aspira nuevamente el aire que ya veíamos contaminado hacia ella.
En ese entonces, con sus papas en la otra mano, ella está pagando a través del
costo de venta, una cantidad por el “servicio” que nos da este oxígeno, es decir respirar.
Hasta me hizo toser semejante certeza que acababa de adquirir, entendiendo el por
qué contiene tanto sufrimiento ese remolino que entra y sale por la nariz de Pina. Hasta
De manera instantánea, como siempre cuando los infinitos cálculos del universo
que mantenemos esta hermosa mujer y yo. Esta vez la que tosió sin poder detenerse fue
Obviamente ese llanto terminó con la apasionada escena que estaban construyendo los
32
Amores de Lagartija
abrupta, cuando Pina tomo a su marido por los hombros y lo apartó, haciéndolo a un lado
ella no pudo dejar de llorar, ni siquiera para contestar lo que le estaban preguntando.
Arthur se agarro la cabeza con ambas manos y se agachó, justo en ese momento
su mirada se cruzó fijamente con la mía, me miro como nunca y observe mucho coraje
hacia mí, como si presintiera que en ese momento habían mas factores presentes en ese
TRIÁNGULOS DE TRIÁNGULOS
La noche trascurrió sin más contacto entre ellos que la cercanía de la cama, del
amaneció Pina ya estaba en la cocina preparando quien sabe qué cosa, pero que se veía
poco apetecible, cuando tomó en sus manos un cono de papel que estaba sobre la mesa y
quizás para evitarse la fatiga de ir y tomar un vaso, en ese cono se sirvió agua y la bebía
lentamente, mientras observaba las gotas de agua que comenzaban a caer del cielo y que
aun, por lo que seguramente iría a picar a Pina que era su única presa posible. Seguía
33
Amores de Lagartija
lengua, lo atrapé y no lo tragué. Yo no como zancudos, más bien fue para impregnarlo de
Observé durante algunos segundos el vuelo un poco mareado del animal, parecía
que mi saliva lo había emborrachado y por un momento me preocupó que bajo esas
pues avanzaríamos con un planteamiento muy importante que es necesario concluir. Justo
cambió.
Como queriendo calmar la tensión con su esposa, que ya era más mía que suya,
Arthur llegó hasta ella y la abrazó, él caminaba sin camisa por el calor que hacía en esa
temporada del año, pero el zancudo ebrio no alcanzó a percatarse de que se atravesaba en
su camino y lo picó en la espalda. Sentí como me recorrió un aire frío al no saber qué
él la miró fijamente, quizás como nunca lo había hecho; su mirada llegaba hasta lo más
apretó mientras acariciaba su espalda presionando sus dedos y sus uñas como si quisiera
34
Amores de Lagartija
— ¿Sabes Pina? si es cierto eso de que las hormigas Leptótorax tienen en sus patas
pequeños que son nocivos para sus hongueras, y esos organismos mucho muy pequeños
nosotros--.
-- Si Pina, es como si fuese ese cono de papel que tienes en las manos, y nosotros
estuviéramos en la boca del cono, o quizás en un nivel mas adentro que se van
consolidando, no lo sé, pero que mas abajo de ese mismo cono estuviera un depredado
nuestro que fuera la hormiga y más abajo, quizá en la punta estuvieran esas bacterias,
pero que después se convierten en nuestros depredadores, como si esa punta del cono de
repente se abriera y regresara a devorar la boca del cono y así descender hasta ir
devorando cada uno de los demás niveles hasta llegar otra vez a la punta.. Pero no sé qué
35
Amores de Lagartija
después de tantas tensiones, como reconstruyendo esos hilos que los habían tenido cada
Arthur la abrazó tan fuerte que se amortiguaba el frío que arreció con mayor fuerza
ante la intensa lluvia que no dejaba de caer y cada vez se hacía más fuerte. Se mantuvieron
tan juntos que desde donde yo estaba no parecía ser dos cuerpos sino uno solo, que
parecían además disfrutar la brisa de agua que les alcanzaba a acariciar desde la tormenta
que sonaba con fuerza en el techo de lámina. No solo se cubrían del frío sino que se
acariciaban con amor y atracción física, como si nada hubiese pasado, como si lo que los
alejaba se hubiese esfumado o escurrido con el agua que corre con fuerza en la tierra del
patio.
36
Amores de Lagartija
Me quedé perplejo por lo que acababa de atestiguar, por ver el efecto que había
tenido la histórica equivocación del zancudo ebrio por mi saliva, es como si ella se
hubiese sentido atraída por Arthur pero no por él, o al menos no solo por él, sino por las
claves universales que salieron de su boca en forma de palabras. Como si Pina hubiese
Pina, cansada y con una apariencia que reflejaba una evidente fatiga, se sentó
sobre el sillón empolvado, estiro sus brazos sobre el respaldo, la poca ropa que traía y que
perdida que permanecía fija en el techo sin enfocar a ningún lado, que la digestión de los
especie de hormigas, había pasado de ser una simple plática poco común, a ser un patrón
que sale del pensamiento que lo crea para ocupar espacios terrenales y que estaban
Se puso de pié y regresó a la cocina, donde casi se quema lo que tenía en la cazuela
con aceite caliente. De ella sacó un pescado frito, cuyo olor me comenzó a inquietar pues
nunca antes lo había conocido. Se sentó mirando con atención el animal que estaba a
punto de comer, cuando me di cuenta que por estar atento a los movimientos de Pina, no
me percaté que Arthur estaba vigilándome de cerca, que se había dado cuenta que ella no
estaba mostrando exactamente amor hacia él, sino hacia mí, lo cual parecía no solo
37
Amores de Lagartija
Me di cuenta en su profunda mirada que no solo entendió eso sino parecía darse
cuenta que lo que yo estaba digiriendo no eran los insectos que aparentaba, sino los
y mente.
Arthur decidió no quedarse con los brazos cruzados y de una manera casi infantil
tratar de impresionar a Pina para hacerla sentir que es a él a quien ella ama, engañándose
a sí mismo para ignorar que los nuevos conceptos que estaba manejando no venían de él
sino del zancudo que lo había picado y cuya roncha aun estaba rosada y generándole
—Es como un pez grande que se come a uno más pequeño, y ese más pequeño a
otros más pequeños y luego todos son devorados por uno mucho más grande y este por
otro y otro cada vez más grande, con la diferencia de que en este caso es al revés, el pez
chico saca de si el pez mas grande, lo descome (lo contrario de comer), y así
Aunque acertado, hasta me pareció cómico el intento de Arthur, pues aun no había
comprendido que no sería de esa manera como podría hacerme a un lado de sus vidas,
sino que eso solamente lograba hacerme más fuerte ante los ojos de su esposa, que es mi
mujer. Después de eso ya no pudo hacer nada en mi contra tras su fallido intento de hacer
pensar a Pina que fue él quien hacía de la realidad un espiral para su deleite, pero en su
rostro se veía una rabia inmensa, que no disimuló al tomar un tenedor y tratar de
encajármelo por la espalda, lo cual no logró porque Pina al percatarse le aventó con fuerza
la mano.
38
Amores de Lagartija
Al ver que su amada Pina me estaba defendiendo, celoso y hasta colorado estalló
cuando Pina tomó con ese mismo tenedor que ya le había arrebatado, un trozo de pescado
y lo puso en el piso para que yo lo comiera, en un claro y amoroso intento por compartirme
—Que, ¿te la vas a pasar apapachando a esa pinche lagartija? —Grito Arthur
Pina sorprendida de lo insólito del arranque de celos de Arthur motivado por una
lagartija levantó los hombros en señal de irónico extrañamiento, aunque por dentro sabía
que algo mas allá de la relación normal se estaba construyendo entre ella una chica
hermosa, casada y humana con una lagartija sin escamas, con bolas en sus dedos y con
Cuando Arthur me vió con ella sobre la cama volvió a estallar tomando a Pina
por los cabellos y arrastrándola hasta afuera del cuarto donde le puso una golpiza. La
de casa.
39
Amores de Lagartija
Pina me miró y vi caer una lágrima que justo cayó sobre mí espalda, y el dolor fue
inmenso, marcando un momento íntimo sin precedentes entre nosotros, pues sabíamos
que algo se estaba desplomando allá afuera y acá adentro de la casa, y más adentro aun,
en las venas adoloridas de esta mujer. Ella sentada sobre la cama observó a la lagartija, o
sea yo, descender por la pared hasta la cama donde ella se encuentra.
pidiendo perdón de rodillas a Pina por la forma como lo había tratado, prometiendo no
volverlo a hacer.
Arthur se tomo con las manos la cabeza, y la miró con un gesto lleno de
desesperación y en ese momento salió de la casa no sin antes azotar con todas sus fuerzas
la vieja puerta de madera que con trabajos dividía la calle del interior de la casa.
Ya no tuvo mucho tiempo para ganarse otra vez el cariño y la confianza de ella
que para ese entonces no solo se habían derrumbado, sino que se convertían
persona que conozco así, el hippie al que visitaba con frecuencia una mujer que era su
40
Amores de Lagartija
vecina. El Hippie era el gringo que vivió antes en esta casa, hasta que un día, en medio
de una agonía comió de la planta que había estado desde antes de que él estuviera en esta
casa junto al sillón. Hoy ahí sigue la planta, pero nunca supe que fue lo que lo cambió, si
la agonía que sufría por unas heridas que traía y que sangraban sin cesar mientras su
pareja que entonces supe que era la vecina de al lado, intentaba curarlo o si algún efecto
No la comió por gusto sino por el dolor que le generaban las curaciones que
todavía le hacía su pareja. Sus gestos me causaban gracia y si alguien me hubiese mirado
(estoy seguro de que no o muchos secretos se hubiesen debelado antes de tiempo), seguro
hubiera notado mi risa, de hecho aunque nunca estuve seguro si lo notó o nó, no sé porque
pero Francisca como se llamaba la vecina, tomó una cámara vieja de rollo revelable en
blanco y negro y me tomó una fotografía que de inmediato olvidó por la emergencia que
En aquella ocasión el gringo le debió la vida a su pareja, que era una mujer alta y delgada
a quien escuchaba nombrar como Francisca, con la que frecuentemente se iba a pasar
algunos días en la casa de al lado. Su relación fue graciosa, de hecho durante mucho
tiempo no la conoció más que por el sonido de su voz y por las complejas pláticas llenas
de paradojas que tenían a través de la tambaleante barda que separa a ambos patios. No
sé que es lo que hacía el hippie, pero después de ese día en cuanto se recuperó de las
graves heridas gustaba de desdoblar el papel de los conos en lo que solía beber agua para
escribir no se que cosas. Nunca comprendí porque lo hacía sobre el papel de un cono y
no sobre una libreta, que mientras lo conocí me confirmaba que ese tipo era muy, muy
41
Amores de Lagartija
-- es necesario que crezcamos como personas y como pueblos del mundo, desde abajo,
solo así aprenderemos, aprenderemos bien que en los poderosos no podemos confiar,
pues las masacres son un reflejo recursivo de un gran monstruo que nos confunde para
que no lo detectemos--
42
Amores de Lagartija
Regresando al asunto de la tórrida relación entre Pina y Arthur; desde ese día en
que lo corrió las cosas fueron diferentes, me di cuenta en sus pensamientos que su
situación con Arthur estaba cambiando aspectos esenciales de ella, pero no para mal sino
todo lo contrario, ella se miraba más libre en sus determinaciones, es como si hubiese
despertado una parte de ella que estaba dormida durante mucho tiempo.
No solo eso, sino que en verdad algo había cambiado desde muy dentro de ella,
tanto que si se lo hubiese dicho, si ella hubiese sabido de lo que yo me di cuenta, seguirían
juntos, no se hubieran separado y ella no sería para mí. Fue una omisión muy importante
pensamientos que habían en ellos que ya estaban en lo más profundo de su ser, tanto que
en una ocasión, después de que sus diferencias los había llevado a una pelea motivada
por los característicos celos de Arthur, presencie una escena difícil, cuando ella lloraba
Como si nada hubiese pasado ambos se fueron a dormir y me sorprendí al ver que
aún con lo que estaba sucediendo se acostaron en la misma cama, se cobijaron con la
misma cobija trataron de hacer como que no pasaba nada. Sus pensamientos se fueron
diluyendo en formas emergentes de conciencia que poco apoco fueron haciendo invisibles
los últimos rasgos que los hacían parecer aun personas despiertas, pronto sus gestos eran
diferentes, o indiferentes, que se yo. Arthur acostumbraba descansar con los ojos medio
43
Amores de Lagartija
abiertos, nunca supe porque y suponía que prefería estar atento para no perder detalle de
costumbres guerrilleras.
Ambos dormían sin saber que algo sumamente profundo estaba sucediendo, en
Arthur parecía que el piquete del mosquito había dejado en él algo que no había logrado
algo nuevo, algo capaz de transformarlo en niveles cuánticos invisibles a simple vista.
y de imágenes que se contienen así mismas de manera infinita, el cono había dejado de
ser un análisis abstracto para convertirse en una figura dinámica, que parecía tener vida
propia, eran conos que los veían y los sentían de una manera casi real en cada uno de los
niveles, desde lo más global donde todo es producto de un enorme caos que se auto
Justo en ese momento se comenzaba a combinar y actuar sobre otros niveles, hasta que
iban llegando a la punta de un cono que emergía. En ese punto se miraban ellos mismos,
44
Amores de Lagartija
otros pensamientos y sentimientos, hasta descubrir y sobre todo aprender nuevas formas
Recuerdo que en mi rostro solo resaltaban dos bolas que son mis ojos de lagartijas
cerrados por unos párpados gruesos y fríos, mientras seguía atento a aquel épico viaje por
del cono ya estaba en los niveles más íntimos y desconocidos y no solo eso, sino que los
estaba transformando, cambiando desde niveles cuánticos, aunque en los niveles más
Físicamente, ambos cuerpos tendidos sobre la cama tapados apenas con una
cuando la complejidad de los factores y patrones de los que están siendo testigos habían
alcanzado tal caos y tal desorden que parecía que habría una gran explosión; hasta que la
respiración y con un sudor helado que hacía buena combinación con su rostro pálido como
abiertos tenían una respiración agitada, como si los aventaran con fuerza, ambos se
miraron el uno al otro directamente a los ojos, sin mediar nada mas su atención se fijó en
el otro, en el centro del iris de sus ojos, en el centro oscuro de su mirada y poco a poco se
45
Amores de Lagartija
miraron el uno al otro ambos ojos simultáneamente, después el rostro completo y aunque
sus rostros eran de las mismas personas, era absolutamente claro que algo muy profundo
ni a hablarse. Pina tomó su bolsa y salió de la casa caminando de prisa como si fuese a
Con el paso de los días me di cuenta de que lo que había sucedido esa noche no
solo fue un sueño, sino que realmente su vidas estaban dando un inesperado giro que les
cambiaría el destino, pues su comunicación era como la de dos extraños, y su cama pronto
dejó de ser colectiva; pues Arthur desde ese mismo día sacó una cobija deshilachada y
El distanciamiento entre ellos fue creciendo al grado de que ni la palabra se dirigían, hasta
que él o ella podían pasar varios días sin llegara a dormir a casa ante la indiferencia del
otro. El problema era más complicado que una decepción entre la pareja, es más bien que
su cónyuge ya no existía, aquella noche había dejado de existir y desaparecido entre los
procesos caóticos al interior de cada uno que tocaron fibras absolutamente sensibles e
íntimas de cada uno de ellos. Ese o esa que estaba en casa eran ya simplemente extraños.
Un día Arthur no regresó más y mi amada Pina con una frialdad impresionante tan
solo escuchaba los rumores callejeros de que andaba con una y con otra mujer. A ella
46
Amores de Lagartija
desesperación de saber que él, del que se enamoró estaba perdido en remolinos caóticos
consciente también de que no solo había sido la suerte de Arthur sino también la suya,
que no era ya la persona que era antes de irse a acostar, pero tampoco sabía con certeza
Entendió que efectivamente estaba extraviada, que había perdido el sentido que la
mantenía centrada y que algo debía ser distinto antes de que pudiera sanarse a sí misma.
Es eso lo que a veces me pregunto, si debí o nó decírselo a Pina antes, para que
ella hubiese sabido que todo fue por la saliva que había infectado al zancudo, que lo
Pero pues como dicen, el fin justifica los medios y ahora el destino me estaba poniendo a
Después, Pina dedicó su tiempo a pensar, a estar sola, en ratos conmigo, en ratos
no me dirige la mirada, pero siempre tratando de sostener una sonrisa tímida que parece
más un gesto de tristeza. Todas las noches ponía una vela y rezaba, meditaba, hablaba
con el fuego mientras ponía sus manos cerca de la llama. Eso yo lo miraba desde un hueco
que se hace entre una piedra grande y el suelo, para así cuidar una discreción oportuna y
Ella comenzó a darse cuenta que necesitaba luchar, primeramente por curarse a sí
misma, demostrarse que no necesita el yugo de un esposo machista, por mas idealista y
47
Amores de Lagartija
luchador que este sea; entendió lo que sucedía, sintió paz en su alma y en asumir su amor
—Es el colmo —continúa— Hay 200 mil soldados de Estados Unidos tratando de
mantener la seguridad en Haití, después de un terremoto que dejo varios miles de muertos
como si todo ese imperialismo y auto denominación como los salvadores del mundo no
Ella en su papel de periodista gustaba de viajar buscando las historias por contar. Pasó de
hacer las notas culturales a cubrir las fuentes políticas y de movimientos sociales.
De todo esto me daba cuenta porque siempre antes de salir a trabajar dejaba una veladora,
en la que ponía y encomendaba sus pasos. Al principio consiguió unas que le duraban
apenas un día, después unas que le costaban un poco más pero que le duraban dos días y
medio que usaba cuando iba a salir de viaje a hacer algún reportaje pues tenía el propósito
El problema empezó cuando tenía que salir durante mas días, por lo que tuvo que comprar
unos sirios enormes que olían como a aceite quemado pero que al menos duraban hasta
48
Amores de Lagartija
mantenía atento los pensamientos que eran la base de nuestra relación. Ella siempre
Seguía entusiasmada y quizás hasta obsesionada con entender lo que le había pasado
aquella noche en que cambió desde lo más profundo patrones que la configuraban, lo
El cono de papel fue la imagen más recurrente en su cabeza, mientras se dedicó como
lugares donde tenían lugar profundas injusticias, descarados improperios del poder y
despojos históricos. Sus escritos simulaban laberintos fractales y jugaban hasta con los
métodos periodísticos de la pirámide invertida, en donde la punta del triángulo era menos
Pero luego resultaba que los asuntos aparentemente menos importantes resultaban ser los
que generaban los grandes cambios en las historias periodísticas y la punta del triángulo,
los detalles, resultaban ser más relevantes y trascendentales que el propio titular de la
cuyo reflejo multiplicado era, en algún nivel, el que describía Pina en las páginas del
49
Amores de Lagartija
No entendía qué es lo que buscaba, como si quisiera encontrar el orden luminoso en medio
del oscuro caos, como queriendo llenar aquel cono de papel con niveles lógicos y
la punta del cono que es capaz de estar en niveles más amplios que la propia boca del
cono.
OSTULA
Es aquella comunidad que había visitado, poblada por indígenas Nahuas de Santa
María Ostula en la costa de Michoacán, donde el amor por la tierra llevó a este digno
pueblo a pelear ante monstruos emergentes, sanguinarios y crueles. Que eran tan
sus dioses, acuerdos familiares y comunales, llegaron hasta a un paraje que tenía el
antiguo nombre de Xayakalan que quiere decir “el lugar de las máscaras”. Ese día se
contaban por cientos, después por miles los hombres, mujeres y niños que por acuerdo de
su asamblea general llegaban a recuperar lo que sus antepasados les habían encomendado
cuidar que son esas tierras sagradas, que colindan con playas del océano pacífico.
50
Amores de Lagartija
pero ese mismo día con caras de demonios que solo muestran los ojos por las capuchas
que portan comenzaron a dispar armas de alto poder en contra de los cientos de indígenas
que se habían concentrado. De manera como milagrosa, las balas no tocaron a los
comuneros y una sola tocó la cabeza de un indígena, un potente misil calibre nueve
milímetros que inexplicablemente le rebotó, haciéndole una herida que sanó rápidamente.
Los sicarios ese día cayeron ante la determinación de la comunidad; sin duda un
día complicado e histórico. Todo marchaba bien, sin embargo frente a ellos había abierto
los ojos un enorme espectro que abarcaba todo el ambiente y lo hacía fétido, aunque la
alegría de los comuneros era tal que sofocaba cualquier intento de mirarlo y de olerlo.
legal de empuñar los fusiles y defenderse a sí mismos, lo que hacía más que evidente que
habían desafiado los oscuros intereses que había sobre esas fértiles tierras que tenía la
comunidad.
Pues detrás de lo que era un conflicto agrario producto de la ineficiencia del propio
sagradas de la costa nahua y al tráfico ilegal de armas de alto poder y drogas que entraban
desde sofisticados submarinos provenientes de otros países. Todo por cierto auspiciado,
51
Amores de Lagartija
Esto, sin embargo, no les importaba a los indígenas nahuas, cuyo único objetivo
era la protección de su madre La Tierra, dadora de vida y garante del futuro para los
jóvenes, niños y los que todavía no nacían. La alegría era enorme, tanto que no dudaban
Habían pasado unos cuantos meses, en los que la colectividad se fue haciendo
cada vez más fuerte y las decisiones respondían al llamado del universo de mantener el
equilibrio que daba sentido a cada día de esos pueblos que convivían con el océano de
donde proviene todo origen y toda vida, pero en medio de la alegría se venía gestando
lugar de las máscaras. Mientras tanto el gobierno traidor decía que daría solución al
conflicto territorial pagando a los invasores un premio monetario por su delito de despojar
Los vivos siguieron cayendo y los muertos siguieron hablando y gritaban que eso
que el Estado pretendía hacer parecer una guerra entre bandas de delincuentes, era en
52
Amores de Lagartija
la comunidad. Además era espejo de la situación en todo el país que ya contaba por 80
Como si nada tuviera que ver y sin que nadie lo dijera, se estaba gestando una
embestida cruel contra la comunidad, operada por los cuerpos policiacos, militares y
paramilitares, cada uno con sus propias lógicas y realidades que pretendían hacer creer
que eran reflejo de la realidad política, económica y social que debíamos aceptar sin
cuestionar.
confrontadas entre sí, pero que se hacían un solo cuerpo operando junto con un Estado
mi amada Pina generaba las paradoja estimulantes que nos mantenían vivos, pero que
Todas esas paradojas crecían en ciclos infinitos y era obvio que cada día serían
mayores, alcanzando los órdenes globales menos aparentes. Recuerdo aquel día en que
53
Amores de Lagartija
Pina llegó con un nudo en la garganta luego de enterarse de que policías federales,
nuevo para todos es que esos operativos estaban siendo coordinados por agentes
estadounidenses que portaban chalecos con las cifras de la Agencia Antidrogas del
encontraban susceptibles, producto de los operativos orquestados por las fuerzas del
Estado.
Pensaba la hermosa Pina, como esperando que la respuesta le cayera digerida del cielo o
si no pues ya de menos del pensamiento despierto de una lagartija pegada en una esquina
de la fría casa, hacia la que ella mantenía un profundo sentimiento amoroso que nos unía
Respuestas… cuando las buscamos no las hayamos, sino que estas llegaron conforme
fue avanzando este caminar por la historia del pueblo Nahua. Los órganos del Estado no
tardaron en hacer propuestas para que los campesinos regresaran la tierra que habían
consensos suficientes decidieron emprender una consulta interna para que fuera una
54
Amores de Lagartija
decisión tomada por todos los que deben participar, que son los albaceas de las futuras
Lo que parecía una negociación conciliadora por parte del gobierno federal se
convirtió rápidamente en una presión sin precedentes, mientras avanzaron las reuniones
fueron cayendo los líderes morales y autoridades comunitarias en turno, bajo condiciones
cada vez más violentas, al más puro estilo del narcotráfico sanguinario; cayeron los
comandantes de la policía comunitaria y cuando faltaba solamente una reunión para que
temor profundo.
A todo esto el Estado respondía: “Pues ya decídanse para que todo esto se acabe”.
Lo decía con tal cinismo que parecía no importarle que la última reunión de la consulta
violencia que azotaba a la comunidad y que había terminado por debilitarla a tal grado
la mala.
del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad que encabezaba el poeta Javier Sicilia,
interna. En aquel momento los cálculos políticos de todo el país era que no habría forma
55
Amores de Lagartija
de que no se realizara la reunión esperada y de esa manera poder dar el paso que hacía
falta para fijar su postura frente a las ofertas que estaba realizando el Gobierno Federal.
En ese camioncito, viajaba Don Trino, quien era una de las reservas morales más
incluso frente a las instancias civiles y militares del país, que un Grupo paramilitar
amenazado en un intento por disputar el legítimo liderazgo de Don Trino y que era garante
del respeto a las zonas recuperadas, incluso que intentaba contener por encargo de su
Antes de llegar al sitio donde 800 comuneros aguardaban para recibir a la caravana
del Movimiento por la Paz, fueron emboscados por un grupo de encapuchados, quienes
secuestraron el vehículo con sus tripulantes a bordo. Los tiraron sobre el suelo durante
una hora mientras los obligaban a ser testigos de la tortura y sersenación de una oreja de
Trino.
A todos los dejaron ir con la muerte en la cabeza pero con la esperanza de salir vivos
Ese día lo que parecía un conjunto de coincidencias, hacían del caos y el azar el
precisas, que responden a las acciones aisladas de la policía federal, dos bandas de la
56
Amores de Lagartija
Era como si Pina compartiera esos recuerdos dolorosos con migo con un objetivo, que
era no solo recordar lo que había sucedido, sino tratar de encontrar en el entendimiento
de los patrones complejos que habían concurrido en ese momento de la muerte de Trino,
Un caos que se auto organiza, en un cono fractal de múltiples niveles en el que fuerzas
armónicas que configuran a su vez las intensiones últimas. Un orden emergente que tiene
Como aquellos cientos de desplazados, que debieron dejar la tierra que aman por
resguardar su propia vida, incomunicados entre sí por el miedo mismo que se agudizó y
se convirtió en terror tras la muerte de Trino, también de los miles que sin saberlo se
necesidad de cara gentil que habían operado los gobiernos formales. Se sacaron miles de
57
Amores de Lagartija
de avanzada. Manipulaban los precios de las papayas y limones por la extorsión sobre los
campesinos. Es decir, una vez destruidos los tejidos internos, destruida la realidad,
Como flores que nacen del burbujeo del agua, que emerge de repente, brota y desaparece
desordenada y caótica de todos los desplazados, víctimas de mil maneras, para consolidar
un nuevo otro orden posible, sustentado en la certeza de que el enemigo es uno, que
siempre se haría pasar por su amigo para después traicionarlos, aprendieron que era el
Los desplazados se juntaron y con el pueblo hicieron un gran movimiento regional que
armados tomaron los pueblos donde se encontraba el epicentro de lo que eran las dos
supuestas bandas.
-¡Todos son los mismos!- descubrieron los grupos de autodefensa, que con sorpresa
entendieron que la supuesta guerra fue siempre una mentira, todo fue un atentado cruel
perverso.
58
Amores de Lagartija
En tratar de entender porque se enmascara una guerra en las que hay tantos miles
de muertos, Pina se daba cuenta que solo desde la visión completa de los pueblos es
posible contemplar esas realidades de manera simultánea, ver al monstruo desde las
culturas ancestrales, que viven en realidad por un venado que salta y que corre sembrando
sabidurías antiguas.
El otro día la escuche platicando con doña Pancha, que es una señora grande, muy
un orificio que hay en un muro de concreto como a 60 centímetros del suelo. Pero la
verdad es que Pina nunca ha visto a Pancha de Asís, que llevaba curiosamente el mismo
desde que llegó a vivir en esta casa, solo ha intercambiado palabras a través de la barda
mientras Pancha lava la ropa ajena, la que es de los terratenientes, casiquez y políticos de
la región.
ella llegaron con un profundo dolor que los llevó a salirse de su comunidad en Cedral,
San Luis Potosí, en el altiplano de la zona semidesértica y donde ha pasado la mayor parte
de su vida; territorio que quiere tanto y que nunca hubiese querido salir de ahí.
de que unos policías judiciales, o al menos eso les dijeron que eran, los “levantaran” en
Cedral y al hijo Juan Antonio lo encontraron golpeado unos kilómetros adentro del
59
Amores de Lagartija
— ¿Porque les hicieron eso? — preguntó Pina, con una voz temblorosa que
Ella contestó:
las nubes” y otra que decía “La lluvia es sagrada, si la acaban nos acaban a todos”. Dos
paredes, una enfrente de la otra, cuando llegaron los supuestos agentes y les dijeron:
—Haber hijos de la chingada, tenemos un hoyo para echar a los culeros como
ustedes.-
Les pusieron unas esposas en las manos- continuó- los golpearon en la panza y los
subieron a una de las dos camionetas sin placas que traían. Cuando llegué desesperada y
les pregunté que quienes son y porque se los llevan me contestaron solo que eran “agentes
federales”. En ese momento me apure a ir a la casa y avisar a mi tía, con la que crecimos
y que sabía que tenía un ahorro aunque pequeño, si me serviría para darle a los del
ministerio público.
—Lo que no nos esperábamos es que nos contestaron que ahí no llevaron a ningún
Sixto, como se llama mi hermano y así lo negó la policía, el ejército, la clínica de salud,
el hospital que está en San Luis, y hasta la novia que no es su esposa lo negó. Desde ese
día decimos que mi hermano está desaparecido y que el gobierno debe regresárnoslo vivo.
60
Amores de Lagartija
A Pancha se le llenaron de lágrimas los ojos, y supe que el mayor dolor no era su
hermano, en sus ojos se dibujaba una mazorca de maíz y toda su familia, y su tierra y sus
dioses. Y en ello veía el dolor que sentía por ver vulnerado lo sagrado, lo que trasciende
las fronteras de lo evidente, y su dolor era tan profundo que era capaz de crear olas de
confusas paradojas.
Mientras escuchaba a Pancha, una mosca voló y se paró en la nariz de Pina, quien de
Camino por la pared cuidándome solo de los pedazos de pintura reseca que se
desprende de ella, sigo hasta alcanzar la telaraña que cuelga en la esquina de la habitación,
ahí me acerco hasta donde está atrapada la mosca que desde la nariz voló hasta ahí
De hecho mientras se quedaba pensativa giraba con sus manos un cono de papel y
pensaba que parecía mentira que una política venida desde los gobernantes, que se
estructura de estructuras que es ese cono, se ha materializado en estos niveles que ocupan
una dimensión mucho mas inferior, mucho más íntima, dentro de la misma estructura
de Pancha.
61
Amores de Lagartija
Por una parte en uno de los niveles que integran los cortes transversales al gran cono,
son conscientes del grado de interconexión entre su realidad y las realidades superiores
que al final de cuentas responden a lo que se les indica desde niveles multidimensionales
mucho mayores. Mientras que más abajo y de manera simultánea, ocurre que se
nunca sueltan los casi invisibles hilos que los conectan con los diversos niveles de
dimensiones fractales. Veo con claridad esos hilos que se pueden apreciar en el espejo en
que se convierte el humo del cigarro que se consume sin que Pina lo fumara, por estar
Esos hilos se convierten en los patrones fundamentales de los símbolos que unen los
convierten también en patrones que definen los aspectos más finos de la configuración
interna de cada una de las partes y de los símbolos más pequeños que a su vez unen las
diferentes partes del sistema ahora emergente dentro de cada uno de los niveles.
Esos patrones hacen del caos inducido por el orden perpetuo, autoritario y fallido, un
sistema armónico y funcional a las condiciones existentes. Uno solo, ordenado pero
colosales.
62
Amores de Lagartija
de su muerte, antes de que la araña que habita estas paredes venga por ella. Esa certeza
de que se acerca el momento de su fin, siempre tiene un efecto benéfico para mí, como
lagartija que se alimenta de pensamientos sin principio ni final, pues comienzan a soltar
existencia.
Ese era justo el momento en que debía aprovechar, antes de que la araña capulina que
vive aquí se acerque, pues claramente al igual que yo está leyendo también el último
aliento de la mosca y cada vez se acerca más y más. Sé que deberé alejarme rápidamente
como una señal de respeto y cumplimiento de los acuerdos antiguos que tenemos. Es en
funcionamiento de las relaciones internas que hacen a cada uno de los niveles fractales
un autómata.
- Porque no te pasas a mi casa, sales de tu casa a la calle y una vez afuera ya sabes que es
la puerta de al lado donde estoy- Dijo Pina a Pancha quien enseguida contestó que si,
como si le hubiese ganado la idea de verse después de este tiempo en que esa vieja pared
63
Amores de Lagartija
Entró Pancha, caminó despacio por el pasillo de la entrada mirando las paredes de un
lado, de otro, el techo, miraba el piso. Caminó despacio y se detuvo a la mitad de la sala
y me llamó la atención que se detuvo a la mitad de la sala y miró el viejo retrato del hippie,
el gringo que vivió aquí antes que Arthur y Pina. Que por estar en blanco y negro y ser lo
suficientemente grotesca por las barbas y cabello largo tieso y sucio que la hacía parecer
una postal de Woodstock no han querido quitarla. La tocó con su mano y la acarició como
si algo especial la hubiese unido al hippie y continuó mirando la casa como quien se
reencuentra con un paisaje familiar pero que no ha visto desde hace tiempo.
Cuando se miraron se saludaron y se dieron un abrazo, pues a pesar de ser la primera vez
que se veían físicamente eran en realidad viejas conocidas y en medio del abrazo solo
resaltaba el álbum viejo de fotografías que Pancha traía bajo el brazo, del que salía una
Ambas se sentaron en un par de sillas junto a la mesa y Pancha seguía contando su vida
en el altiplano Potosino donde aunque ya no vivía por la persecución que sufrió, mantenía
Pina continuaba volteando a ver las fotografías que Pancha tenía en su mano y que cubría
con una revista barata de espectáculos. Aunque no las mostraba a Pina, por alguna razón,
supuse que eran de aquella región en la que la lluvia es el rehén de los llamados Poca
Luz, que eran los agroindustriales que por sus oscuros intereses económicos inhibían la
lluvia, pero aun así había una, esa que salía del álbum que mantenía en especial recelo.
64
Amores de Lagartija
Justo afuera de la casa comenzaba a llover nuevamente como pocas veces lo hace, con
una tarde de colores, adornada con los diferentes tonos que regalaba el Sol antes de
meterse. Digo como pocas veces porque en esta ocasión contenían una semejanza
impresionante con los atardeceres retratados en el álbum que Pancha traía en su mano;
eran fotografías de palmas cuyas hojas puntiagudas se asemejaban con los sombreros
emplumados de los Wixaritari, que año con año caminan por esos terrenos sagrados para
recrear la vida del mundo. Eso lo sé porque no pude evitar espiar y ver lo que ella
escondía.
Ellos guardan una relación antigua y sagrada con este territorio, que para ellos, contienen
los secretos más ancestrales de los equilibrios del universo. Eso que es, en mi humilde
del orden emergido del caos. De los patrones armónicos que surgen de la combinación de
En eso Pancha comenzó a contar a Pina que justo hacía unos años, en el 2009, se habían
juntado en ese lugar los tres centros ceremoniales principales de la comunidad Wixárika
de Tuapurie para hacer esos antiguos rituales que solo ellos conocen, lugar donde fueron
rituales en los que los pasos de los antepasados a los que nombran también deidades son
uno solo con los numerosos peregrinos de los Centros Ceremoniales, es decir son dioses
colectivos.
las deidades a nombre de todos los presentes, les quitaron las cabezas de híkuri, planta
65
Amores de Lagartija
sagrada que colectan y que contiene la sabiduría ancestral del hermano mayor kauyumari,
el venado sagrado.
Atenta, bebiendo café que con el clima frío hacia visible el vapor que salía incesante de
la taza sostenida en su mano, Pina ponía atención mientras compartía un cigarro hecho de
Pancha continuó.
- Hubieras visto Pina, esa ves el cabrón del Director de Seguridad Pública del municipio se
creía bien altanero, primero se burlaba del susto que les había sacado. Decía que los
huicholes se creían dueños de estos terrenos y que por eso se alegraba de haber hecho lo
que hizo, pronto le bajó de huevos el pendejo cuando sus policías se comenzaron a morir
y su valentía se convirtió en miedo de haber ofendido a los dioses que quizá a el mismo
lo mantienen con vida, hasta que fue a la comunidad de Tuapurie en Jalisco a pedir perdón
a los dioses-.
Aquel día, mientras nadie me miraba me acerqué a una de las fotos que estaban mal
pegadas en el álbum de Pancha y con una gran audacia mordí un pedazo de ese papel; no
porque me guste comer papel, sino porque quería digerir eso que no era evidente en esas
gobernadoras y sangre de drago, de una rata de campo frita en aceite, de jóvenes jugando
66
Amores de Lagartija
Lo que me encontraba eran una serie de factores que configuraron la situación, le dieron
nuevamente no tenían nada que ver entre sí. Todo comenzó cuando los gobiernos
modificaron las leyes para llevar a que la propiedad colectiva de la tierra dejara de ser de
tierra. De tras de los funcionarios estaban como zorros asechando un gallinero las
empresas agroindustriales, mafias del narcotráfico y mineras, todos ansiosos porque los
hambrientos del desierto vendieran a bajos precios miles de hectáreas que sirvieran a sus
intereses.
Las bombas en el cielo que describía Pancha y que había costado la desaparición de sus
familiares, había acabado con la economía campesina de la región, era el lugar del país
que presentaba una mayor migración y en ese contexto las empresas comenzaron a
y puesta en planes de supuesto desarrollo que ligan a su vez con tratados internacionales
de comercio.
Para el pueblo Wixárika, este antiguo lugar es el sitio donde nació y sigue naciendo el
Sol, y justo en esa zona localizada sobre la sierra de Catorce, una empresa canadiense
emprendió un proyecto minero al que nombra “La Luz”, mientras que en el bajío, donde
denominaron “Universo”.
67
Amores de Lagartija
Pina, se rascó la cabeza como sintiendo una gran frustración de escuchar toda esta
provocados que no permiten la lluvia, represión por parte de grupos paramilitares ligados
a bandas internacionales del narcotráfico sostenidas por toda la estructura podrida de los
gobiernos, mismos que han sido omisos y corruptos desde su raíz en los partidos políticos
aparentemente distintos.
Todos y cada uno por su parte, en aparente desconexión resulta que son piezas de un solo
rompecabezas. ¿A que están jugando estos cabrones? A poco creen que no encontraremos
el orden emergente del caótico azar que nos ponen en frente y que los hace responsables
de todo.
hasta los huesos, al entender ese orden emergente que verbalizaba con una hermosa voz
mi amada Pina, configurándose otro perverso autómata capitalista, emanado desde ese
uno mismo y que en ese territorio sagrado pretenden derrumbar los pilares sagrados que
68
Amores de Lagartija
sostienen al mundo y que son a su vez una semilla universal de conciencia para millones
espontáneamente Pina en una pequeña libreta en la que plasma sus apuntes periodísticos.
Pancha no dejaba de mirar por toda la casa, todas las esquinas, las paredes, hasta que fijó
su mirada en mí, que permanecía atento y pagado en la pared. Cuando Pina se dio cuenta
-jajajaja- rió pina mientas le aclaraba –claro que no Pancha, es una lagartija besucona-
En seguida supe que lo que Pancha pretendía era saber más de lo que ella misma hacía
evidente, como si sospechara que hay algo que no se ha dicho y que existe, un patrón, un
ciclo, una verdad que encierra esta relación nuestra y que ella hubiese aprendido hacía
tiempo y que tenía que ver quizás, solo quizás con el hippie y hasta con la fotografía que
con recelo guardaba en medio de su álbum, que estaba suelta y hasta abajo del mismo.
mecanismos en los que una estructura nórtica se proyecta con precisión en los diferentes
69
Amores de Lagartija
niveles que se representan en el cono multidimensional, era eso lo que en realidad ocurría
En eso, como con prisa Pancha tomó su álbum y dijo a Pina que había dejado los frijoles
en la lumbre y que debía correr a verlos. Con la premura, debajo del sillón quedó tirada
la fotografía que estaba suelta en el álbum, de lo cual no se percató ninguna de las dos
mujeres
DIGIRIENDO LO INFINITO
Recuerdo aquel día en el que Arthur y Pina aun eran pareja y discutían por esto mismo,
el le decía que no se podían sumar las naranjas y las manzanas, con lo cual yo nunca
estuve de acuerdo y que seguramente es uno de los aspectos que me producían mas
molestias con la postura de ese marido ficticio que tenía mi mujer, eso era una aberración
pues no solo si se podían sumar, sino que formaban un frutero a todas vistas real.
Lo mismo sucedía con esas realidades que llegaban hasta la casa de Pina y que
tomaban la forma de una plática, de una canción de una marcha, de una pelea callejera,
de una lluvia ácida, de un polo derritiéndose, de una represión, de 50 personas sin cabeza,
Son múltiples realidades que quizás entre ellos no tienen conciencia de los
profundos vínculos que los unen y los hacen coincidir, quizás es porque son tan invisibles
que ni siquiera parecen reales, son en realidad vínculos inexistentes hasta el momento en
que una inesperada propiedad emergente los hace uno solo, los hace un síntoma integral
70
Amores de Lagartija
multidimensional, llega y toca un pequeño punto en lo más profundo del corazón y del
espíritu, que puede ser un espíritu individual o un espíritu colectivo, que puede abarcar a
una familia, pero también a una comunidad, a un pueblo, a una urbe, a un país, a un
mundo, a un universo.
Y ella ahí, tan inconsciente de que ese sentimiento profundo es en efecto parte
Tan inconsciente de que las penas sufridas y la rabia acumulada hecha dignidad
se había convertido en una esperanza que surge del dolor más profundo.
Pina sigue con cuidado las palabras de Pancha que no deja de lavar su ropa en el
patio contiguo, dejando de hacer sus labores por sentarse sobre una piedra, se agacha y
agarra la cabeza y no puede contener su llanto ante la historia que le cuenta Pancha. Me
71
Amores de Lagartija
Mira sus pies descalzos en el suelo y se percata de que a un lado de ellos yace
con tinta negra. Con el dedo gordo del pie derecho lo mueve y hace a un lado la tierra que
lo cubría, dándose cuenta de que se trata del cono en el que había tomado agua cuando
antes el viento se lo arrebató y que representaba esa misma estructura que estaba
redescubriendo.
En el suelo, entre la tierra, me desplazo como la lagartija besucona que soy hasta
llegar a un lado de sus enterregados pies. Ella con una delicada y desconfiada mirada veía
mis movimientos alrededor del enterregado y roto papel en forma de cono. Lo tocaba con
mis manos de lagartija como queriendo escribir sobre el arrugado y sucio papel en forma
de cono el conjunto de paradojas que hacen entre todas un gran espiral. No lo logro porque
soy solo una lagartija, pero tengo la certeza de que en el momento en el que yo mismo
sea parte de la paradoja, en ese cono se nacerán infinitas palabras escritas, que reten y
desobedezcan las reglas literarias que prohíben juzgar o describir la realidad y se hagan
porque pero nuestras miradas coincidían en ese cono de papel maltrecho, como si en ese
pareja, como personas, y más aún, como si estuviésemos justo en ese punto, en la punta
del cono de papel que estaba materializando un concepto multidimensional que describe
72
Amores de Lagartija
la punta del cono. Un escalofrío estremecedor recorría mi cuerpo de lagartija y eso que
soy de sangre fría, pero tenía la determinación de no dejar que se me escapara este
nivel desconocido para ella y para mí, pero quizás no para la estructura nórtica, en la que
este momento es un nivel en ella, un nivel que no es cualquiera, pues es cuando el cono
llegó a un punto no planeado, justo la punta del cono, cuando se acabaron los niveles
Nuestra relación se tiñó de esas cosas que ayudan a entender el cono neoliberal de
arriba a abajo, hasta que llega a la punta del cono y es cuando todo en esta casa cambió,
dignidad y rebeldía, desde su condición de mujer, periodista y sobre todo ser humano,
aunque esté enamorada de una lagartija. El seguimiento como espectadora que había
nueva Pina. En ese momento es cuando comienza la militancia, cuando se cura de todas
sus penas físicas, mentales y espirituales, mientras tanto, ella escucha el cantar de los
pájaros y se estira en el sillón, consciente de que en las calles la sociedad está encabezando
capaz de comprender el tamaño del fenómeno que tenía frente sus ojos, de entender que
el conjunto de los factores que componen cada una de la larga lista de tragedias personales
73
Amores de Lagartija
y subpersonales, pero que también son colectivas y universales, son un espejo de un solo
Todo ese conjunto de acciones y reacciones que hacen posible las situaciones de
hacían parecer que la muerte rondaba cada centímetro de este lugar, llenando de miedo el
corazón de todos.
Eso era lo que en los ojos de Pina se reflejaba con una oscura profundidad, o una
profunda oscuridad, que se yo, pero sin duda era eso lo que había en su mirada. De eso
muerte cruel, triste y sobre todo viva, muy viva, tanto que deslumbraba los pasillos de
EL AUTOMATA GLOBAL
Es un nuevo ser que invade este espacio sagrado, que descansa en la paciencia que
tenemos como marido y mujer el uno al otro y ambos juntos al universo, a sus formas y
sus ciclos, que nos hablan y nos alimentan en cada una de las inmensas sensaciones de
infinita angustia causada por incesantes paradojas, que no son descriptibles con simples
inexistentes en la mayoría de las lenguas que siguen construyendo y siendo espejo de las
culturas de este mundo y que a la vez todas sucumben ante la presencia aplastante y de
este nuevo ser, que parece pensar por sí mismo, tomar sus propias decisiones siempre
apegadas a la maldad absoluta y con capacidad de regir con vara de hierro a todas las
74
Amores de Lagartija
Recuerdo aquel angustiante día, cuando la mire llegar, estaba triste, su mirada
reflejaba la angustia de una madre que ha perdido a un hijo, la de un padre que nunca más
volvió a ver a sus hijos, tras la supervivencia de todos ellos y la muerte de él. Aspiré fuerte
mente hasta que pude respirar su respiración, que se tambaleaba entre ser un reflejo
lejano y cercano, cuando veía en cada partícula de gases la destrucción de los equilibrios
universales, que como siempre estaba afectando a los más pobres. Eran gritos de dolor
que venían de uno de los países más pobres del mundo, Haití, que trataba de recuperarse
de un terremoto que le había arrancado la vida a más de 100 mil personas. La gente se
Los tejidos sociales fueron destruidos, un país completo está sumergido en el caos
y se enchina mi piel de lagartija cuando se enchina la piel de una seductora chica en Pina,
al darnos cuenta al mismo tiempo que toda esa muerte y todo ese dolor es un síntoma más
del desequilibrio universal causado por ese mal que hemos estado tratando de sobrevivir,
Son sin embargo, encuentros amorosos y placenteros una vez que pasa por nuestras
75
Amores de Lagartija
El cono cuya punta marcaba un final y un principio estaba en cada rincón de una
sociedad dolida y rabiosa, en la mujer indígena que fue esterilizada de manera forzosa,
en su dolor al ver morir a sus hijos por una enfermedad curable y al saber que su
germoplasma ya fue mapeado para ser patentado por empresas transnacionales. Estaba en
el aire sagrado que fue privatizado y contaminado, en la tierra madre, el agua y las
semillas, en las familias que no tienen qué llevarse a la boca mientras se desperdician
puede confiar en los que ostentan el poder a costa del sufrimiento colectivo y que aun así
Son los sectores de toda la sociedad agrupados de manera natural al asumirse como
parte de un gran pueblo hecho de muchos pueblos, los que le dan vida a esa punta del
dignidad.
76
Amores de Lagartija
Pina encendió la radio y se extrañó de que en esa frecuencia en la que nunca hay
ninguna estación, ese día había un claro y nítido sonido con música de protesta que
en la necia duda vigente de qué es lo que le tocaba a ella, en una realidad que ya no podía
ocultarse.
En la radio sonaba una canción que la hermosa Pina, escuchaba reflexiva e indecisa
de su destino como mujer y como una mujer ciudadana de este mudo, la melodía era
interpretada por una cantante argentina llamada Mercedes Sosa y pude notar que la hacía
Y aprendió al comprender
Y comprendió al pensar
Y pensó al militar
Y militó al crecer.
Todo ese dolor que sentía se convirtió en determinación que le dieron fuerzas que
salieron desde lo más profundo de su interior y puso atención con su oído a la guerra que
estaba ocurriendo más allá de las puertas de su casa. Escuchó explosiones de bombas
molotov, de cohetones de esos que se usan para celebrar en las ferias y de los que salen
las alturas, sino en los escudos de los policías antimotines que estaban atacando con gases
77
Amores de Lagartija
lacrimógenos a los amigos, a los vecinos a los no amigos y a los no vecinos, que ya eran
Como para ese entonces seguía lastimada por una patada que dio sin querer a la
piedra del patio y no podía ir a la calle tan fácilmente, decidió tomar una cazuela de
frijoles, unas tortillas y hacer muchos tacos que fue poniendo en una canasta, sin saber
siquiera exactamente a quien se los daría. Poco tiempo tardo en lo que unos jóvenes con
agua, mientras al mismo tiempo trataban de convencer a Pina de algo de lo que ya estaba
dando en las calles. Las causas eran obvias, es decir ir minando ese gran sistema que
estaba tendiendo un manto de muerte sobre la humanidad completa, o al menos así lo veía
hacía falta nada. Aun que llegara cansada por la noche siempre me abría las puertas de su
pensamiento para saber todo lo que de su mente había salido y entrado. Al ella sentir la
hacían cerrar los ojos por la intensidad de las sensaciones que recorrían su cuerpo de
viceversa.
78
Amores de Lagartija
quedaba tirado junto a una bocina arrumbada que me brindaba seguridad e intimidad para
Perdón por contarles los detalles, pero es necesario porque justo esos
pensamientos emergentes de la fusión de sus pensamientos con los míos, mas las
eran conclusiones nuevas. Que nos permitían a ambos saber la estructura de lo que estaba
pasando y que de una manera u otra la había conducido a entender el sistema externo todo
cautivo de ella.
la punta del cono, en que el capitalismo atenta contra lo más sensible de una persona y
que es capaz de cambiarlo en lo interior. Pero me asusta ver que no solo es al nivel de una
persona, sino a niveles mucho más pequeños, tanto que llegan al nivel del ADN que es la
Es decir esa punta del cono puede ser tan pequeña que puede alterar niveles sub
atómicos, cuyas implicaciones pueden ser globales. Como lo son los experimentos
realizados por el biotecnólogo Craig Venter para tratar de bajar la temperatura del océano,
ocasionado por el cambio climático global con algas genéticamente modificadas, por
79
Amores de Lagartija
Ese día decidí dejar por la paz eso, pues el amor debe tener su momento y su
espacio. Debo recordar que nuestra relación se construye cada día en esos momentos de
conclusiones fractales. Sin embargo a ella le pasaba lo mismo, pues tampoco podía dejar
de pensar en lo nuestro, en las paradojas que dan sentido al gran amor que tenemos. Pero
en esa ocasión lo hacía angustiándose cocinando un dulce que a ella le gustaba mucho y
cuyo olor era tan fuerte que alcanzaba mi nariz aun que me encontrara lejos de ella, de
hecho yo creo que esa era una gran diferencia que existía entre nosotros porque yo no
soportaba aquella revoltura agridulce a la que llamaba acitrón y que me causaba nauseas.
Ese día Pina estaba pensando en lo que representaba esas luchas en las que estaba
metida y las que conocía por voz de sus amigos y conocidos. No solo por lo que
representaba cada una por separado, sino porque seguía tratando de ver los patrones entre
Me miraba angustiada por tratar de entenderlo, pero esos mismos patrones eran
bien conocidos por ella; de hecho estaba tan concentrada que de repente sufrió un sobre
salto cuando llegó su prima Brígida por sorpresa y le tocó el hombro. Pegó un brinco y
segundo y pude mostrarle algunas imágenes que pudieran servirle para poder encontrar
esos patrones de lo que estaba viendo representado en el gran cono que estaba logrando
encontrar en el proceso de trasformación del mundo del que estaba siendo testigo y parte.
80
Amores de Lagartija
TRIANGULO DE SIERPINSKY
De sus dulces labios salió la idea que quería compartir con ella, aunque Brígida
pensara que en realidad Pina se lo estaba diciendo a ella, por ser la única persona que
que a veces nos divertíamos cuando éramos niñas que era como un gancho de los que se
—Me he dado cuenta que algo parecido está sucediendo y me tranquiliza, lo que
pasa es que esa estructura a la que llamo capitalismo nos está atacando, usando una
estrategia en la que es igual en su naturaleza mas grande, que en los sistemas más
pequeños que se van formando en cada una de las escalas en las que opera, hasta que toca
y destruye las fibras más sensibles de la naturaleza humana. Pienso que entre esos niveles
final de cuentas es algo que ocurre dentro de varias escalas y entre ellas.
— ¿Y qué tiene que ver con el gancho aquel?— preguntó desconcertada Brígida—
81
Amores de Lagartija
—Lo que pasa es que ese triángulo me recordó mucho al triángulo de Sierpinski,
que es una figura geométrica en forma de triángulo que se divide a su vez en tres
triángulos más pequeños, y cada uno de los triángulos más pequeños se dividen a su vez
en tres cada uno y así van haciéndose más pequeños hasta que se vuelven prácticamente
Pina tomó un papel y comenzó a dibujar una figura justo como la estaba platicando
y justo como yo la había estado imaginando, era aquella figura clásica de geometría fractal
Sin embargo cuando pensé que conocía perfectamente el análisis de esa figura Pina me
con el dedo el dibujo que está haciendo, fíjate como los triángulos negros que son los que
se van dividiendo van desapareciendo poco a poco hasta que el gran triángulo inicial
prácticamente desaparece disuelto entre todos los triángulos más pequeños que van
emergiendo.
82
Amores de Lagartija
Pegado a la pared como acostumbro estar me desplacé rápidamente para poder ver
con más claridad eso que Pina estaba explicando y me di cuenta que tenía razón.
cubriendo todos los espacios hasta que sofocan y hacen desaparecer el gran triángulo
inicial.
— ¡Si! respondió sin dudarlo Pina, porque los triángulos que se van dividiendo a
su vez en infinitas iteraciones, que tienen una forma invertida y que son dibujados por la
tinta negra de mi pluma y pretenden llenar todo de obscuridad, van dando lugar a
83
Amores de Lagartija
luminosos triángulos que van llenando todo pero en sentido inverso, del fondo invisible
los relámpagos son el escenario dominante; de ellas emergió una lágrima que rodó por la
cara y después por su cuello, porque la pura sensación de ese triángulo de triángulos,
liberación; justo en una etapa en la que las fuerzas obscuras habían sido cubiertas por las
conciencias transformadas de todos los triángulos, que son a su vez personas, familias,
por los poderosos. Son espíritus, barrios, iglesias, colonias, ciudades, que juntos plantean
nuevos paradigmas representados en los triángulos de Pina por los triángulos emergentes
y luminosos, que terminan por abarcar y cubrir los triángulos desintegradores hasta
hacerlos desaparecer.
A que mi amada esposa, hasta parece mentira que después de un camino que ella
misma eligió como opción de vida, ya no solo es testigo silencioso de los cambios
profundos que estaban pasando en el universo y que parten de los cambios profundos que
ocurrían en cada uno de los individuos esté llegando al entendimiento sistémico que
estaba buscando y que pone nuestra relación en climax, justo cuando nuestro matrimonio
está en uno de sus mejores momentos. Es tanto mi regocijo que me dieron ganas de
84
Amores de Lagartija
discreto para que Brígida no se diera cuenta de lo que estaba ocurriendo. Logre estar tan
cerca de su oído que mi aliento de lagartija logró ser escuchado por ella. Cuando estuve
—Si los triángulos que se van formando y que van cubriendo todos espacios hasta
inundar el primer triángulo, que es donde se gesta el sistema completo, que es el perverso
autómata global, esos triángulos que crecen en sentido inverso deben terminar por
procesos autónomos de los pueblos rebasan al orden impuesto para crear un nuevo
mundo, uno donde quepan todos los mundos. Donde los cálculos del monstruo global no
alcanzaron a prever o detener el crecimiento de ese nuevo mundo posible, que parte solo
Como si mis palabras hubiesen sido una oportunidad de renovarse para Pina, de
sacudirse de sus miedos e indecisiones, me miró con una hermosa y pura sonrisa para
—Que estamos haciendo aquí, tomó en una servilleta los tacos que quedaban
sobre la mesa y la jaló hacia la puerta de la calle. Brígida también convencida la siguió
de prisa, pero ella agarró un aerosol de pintura que estaba arrumbado en la cocina para
85
Amores de Lagartija
Ese día fue el inicio de una actitud combativa, silenciosa que se convirtió en la
agenda cotidiana de todos los días, que se combinaron necesariamente con su trabajo
incondicional.
Mientras Pina estaba en la calle gritando, —la madre tierra está viva, está viva, si
se muere ella nos morimos todos— el ejército portando armas que nunca había visto esa
sociedad asustada, con capuchas que los hacen confundirse con los narco-paramilitares,
que para esas alturas ya nadie sabía quién es uno u otro y que han sembrado un terror sin
con vida de todos los desaparecidos por el gobierno mafioso. Ese día uno de los heridos
resultó ser Arthur que, lejos de las prioridades afectivas de Pina, seguían siendo uno solo
en la lucha.
86
Amores de Lagartija
Cuando ella estaba huyendo de esa plaza pública, como si los azares mas caóticos
del universo se hubiesen puesto de acuerdo para ordenarse de manera emergente en ese
preciso momento, casi tropezó con Arthur mal herido, tirado sobre el piso, ensangrentado
y casi inconsciente.
Dentro de ella un viento frío recorrió cada rincón, un escalofrío que partía desde
lo profundo de su corazón, que le enchinaba la piel al ver a Arthur que aunque hacía
tiempo que habían dejado de ser pareja, de inmediato lo tomo con las fuerzas que pudo y
lo arrastró hasta un sitio donde pudo tomar un taxi al que le pidió que la llevara a su casa.
El taxista aunque nunca hubiese aceptado llevar a una persona herida de bala a una casa
particular, ese día aceptó por ver lo que estaba sucediendo y por indignación personal
ante la represión brutal que estaba presenciando. Fue así que sorprendido los miré llegar,
ella bañada en sangre por irlo abrazando y el por sus propias heridas.
Aquel día entendí que entre ellos dos no se había muerto lo que los mantenía
unidos, que eran lazos profundamente ligados a los más antiguos equilibrios universales,
que resultaban ser más potentes que la saliva envenenada con laberintos y que contaminó
a aquel zancudo.
Son tejidos que hoy desde lo más profundo de millones de personas en todo el
país estaban brillando con una luz propia, que en medio de la oscuridad parecían una
telaraña cuyos finos hilos resplandecían del color de las brasas ardientes del fogón que
mantiene caliente la olla con café en la cocina de Pina; una telaraña que crece, que se va
haciendo cada vez más y más compleja y más grande, tanto que es capaz de reparar las
87
Amores de Lagartija
profundas heridas en los corazones y los espíritus que son individuales y colectivos,
reconstruyendo así los acuerdos primigenios entre los primeros antepasados que
encendieron las velas de la vida de cuya flama nace la telaraña que configura el tejido que
lo sana todo y que hoy se manifiesta en la dignidad de los pueblos allá afuera y que no
deja de brillar como no deja de brillar el universo, con velas encendidas en las casa de
miles de personas.
Pina tomo entre sus brazos a Arthur cuya mirada se pierde entre la agonía que no
por ser ajena o extraña es inconsciente e indiferente. Las lágrimas de la bella chica se
tornaron de color rosado al correr por su mejilla llena de sangre producto de las caricias
a Arthur, esas misma lágrimas que se convertían en un sollozo profundo, que nos lleva a
no saber si es de día o de noche, si hace frío o si hace calor, solo es un sollozo que se
proyecta en cada una de las moléculas de materia que hay en esta habitación, en la fría
siempre, pero en esta ocasión con un brillo que nunca antes había visto. Su mirada se
por primera ocasión fue obvio que él sabía perfectamente lo que soy yo en su vida y en la
de su amada Pina. Mi impresión se desbordaba al darme cuenta que él sabe que yo sé, y
yo sé que él sabe de esta relación compleja que nos hacían coincidir en este momento tan
comprometedor.
EL ATENTADO
88
Amores de Lagartija
donde, sacó de la bolsa trasera del pantalón un cuchillo de tipo militar. Yo temblaba
mientras atento observaba como lo apretó con una mano y sin mediar nada me lo ensartó
en la espalda y con claridad sentí como desgarraba mis entrañas; mi vida se acababa ahí.
Poco tiempo tuve para seguir asimilando mi propia agonía, cuando sacó
rápidamente el cuchillo, que abrió un espacio de unas décimas de segundo en los que
pensé que detendría ese ataque de Arthur, cuando nuevamente lo ensartó sobre mis patas
Recuerdo que ese día impactado por los infinitos significados y fundamentos
de Arthur.
de mi pecho para después clavarlo con fuerza, pero con mucha más delicadeza que la
ocasión anterior y a pesar de su propia y ensangrentada agonía, producto del balazo que
había recibido en la marcha de apenas hacía veinte minutos que en realidad parecían una
eternidad, tomó mi corazón y lo sacó con dos dedos, lo arrancó de mi pecho y lo comió
mientras aun latía. Aunque parezca imposible fui consciente de todo eso.
Completamente aturdida, con unas gasas y agua oxigenada en las manos, Pina
miraba sin siquiera poder decir o hacer nada, como si no pudiese siquiera moverse o
cabeza de un lado a otro y se arrojó hacia lo que ahora ya no es uno sino dos cuerpos, uno
89
Amores de Lagartija
moribundo y el otro que soy la lagartija besucona ya sin corazón, para tratar de detener
esa carnicería.
cuchillo con el que acababa de quitar mi corazón, y de inmediato lo puso sobre las brazas
que ardían en el fogón. Mi sangre que bañaba el cuchillo se quemó y alimentó al fuego
que de inmediato ardió con fuerza hasta alcanzar los pedazos de leña que aun no se habían
movimientos evocaban a las telarañas que se forman por los lazos que se tienden desde
el centro de los equilibrios universales a Arthur, a mí, a Pina y a las millones de personas
que están en las calles reivindicando que la Tierra, nuestra madre, tiene derechos y estos
deben ser defendidos por todos sus hijos. Todos esos lazos tan complejos que se hacen
cuya vida se extingue en constantes espasmos, toma el cuchillo caliente con unos trapos
y saca la bala del pecho de Arthur. Cuando de repente se detiene a la mitad de la operación
En mi creciente agonía, que ya no era mía pues ni corazón tenía, vi con claridad
que la telaraña luminosa que no deja de crecer y nacer simultáneamente empezó a tener
espejo dentro de Pina, que de inmediato comenzó a mimetizarse con la fiesta de serpientes
90
Amores de Lagartija
de luces de colores que era esa telaraña. Dentro de Pina comenzó a haber una renovación
hacían nuevos niveles que absorben y hacen disolverse los de la gran estructura nórtica,
así dentro de ella se iban gestando patrones autómatas que fueron cubriendo todo en su
interior, en los mas infinitos detalles que a su vez encontraban un espejo fidedigno en la
del triángulo de Sierpinski, que a su vez refleja la construcción del cono multidimensional
Siento como desde lo más profundo de cada célula algo emerge y trasciende los niveles
organismo. Siento como si me transformara junto con ella, pues todo cambia físicamente
a raíz de los cambios más fundamentales que estaba experimentando en ese momento.
EL REENCUENTRO
Como si los ciclos interminables a nuestro alrededor no fueran solo una novela,
cuando sus pupilas se llenaron de cambios profundos como una onda expansiva desde en
medio de su oscuro centro, se siguieron expandiendo hasta que la ola renovadora fue
cubriéndola toda, su rostro nuevamente era distinto, tan distinto que era el que era antes
de aquel cambio que la marcó a ella y a Arthur. A diferencia de aquel momento, en esta
Arthur, tomo con violencia mis restos mutilados moribundos y ensarto sus dientes en
91
Amores de Lagartija
Aun sentía como trituró mi cráneo hasta que no quedó nada de él, arrebatando súbitamente
mi vida.
—Eres tu Arthur, te veo y sé que eres tú, —Me dijo Pina mientras me acariciaba el
rostro—
Antes de que Pina respondiera, tome la palabra y le dije: me siento bien, me siento un
poco adolorido pero bien. Estoy perfectamente consciente y veo mis heridas y mi cuerpo
bañado en sangre, la hermosa Pina me hace sentir calientito, por estar junto a ella en sus
brazos.
Siento como si estos difíciles momentos hubiesen sanado todas las enfermedades de
nuestra relación, como si el ataque que sufrí me hiciera más cercano a ella, ese ataque que
sufrí por … ¿cómo se llama? no lo recuerdo, pero ese ataque que me hizo estar
Ella me mira, me sonríe mientras limpia sus heridas, ya no soy yo y me percato que
estoy lejos con mi cuerpo de lagartija mutilado, como a dos metros de donde se encuentra
ella. ¿Qué paso? ¿Porque pensé que me acariciaba? Si ella no deja de acariciar a Arthur.
92
Amores de Lagartija
Aturdido por lo que sucede, escucho como afuera re tiembla la calle ante las
explosiones de los gases lacrimógenos y de las granadas que avienta alguien que ya ni se
sabe quién es, que pueden ser los narco paramilitares y escuadrones de la muerte que
trabajan para el gobierno o cualquier grupo armado del propio Estado, como policías y
mantener una lucha civil y pacífica, sugieren la autodefensa como la única forma de evitar
la violencia de los poderes fácticos y su Estado que dice gobernar este país.
Me siento débil, las fuerzas se me alejan rápidamente, Pina me abraza y unos cuantos
clínicamente muerto pero consciente en aun con mi cuerpo despedazado que yace a un
lado de ahí. No lo puedo creer pero puedo verme ahí agonizando, puedo ver como la vida
Separada del resto del cuerpo, la lagartija abre la boca y la muerte se comienza a
Tardé en reaccionar, me sacudo la cabeza y me doy cuenta de que ella me mira a los
93
Amores de Lagartija
Pensé nuevamente, aunque se convirtió en una pregunta sin importancia ante el cansancio,
que me hacía no poder mantenerme en pié, que me hace recargarme sobre Pina que me
aprieta más hacia ella, dando un par de pasos pequeños y forzados hacia atrás por el propio
peso de mi cuerpo desplomándose hacia ella, cuando de repente no sé nada, no veo nada.
Después logré levantar la cabeza, pero poco me duró el gusto pues de inmediato
recibí un tremendo golpe de un rozón del pesado cuerpo de Arthur cayendo como si fuese
un costal lleno de arena justo a un lado de mí, no entiendo que le ocurre y solo veo a Pina
que desesperada se arroja sobre él. La desesperación parecía haberla afectado pues ni
siquiera se acordó de los cursos de primeros auxilios que había tomado hace un par de
En ese momento me volteó a ver y con su mano me junto para tenerme más cerca,
En mi interior sentí como se fueron transformando las ecuaciones que dan sentido a cada
una de las secuencias de ADN, a los acuerdos primigenios de los antepasados y que tienen
lugar dentro de mí, en las células que conforman mi sangre y que se reflejaban en el iris
de mi ojo.
el mundo, frente a mí descubro un espejo, alcanzo a ver con precisión solo el centro de
mis oscuras pupilas manchadas con sangre por las heridas que he sufrido, después mi
vista sigue aclarándose y alcanzo a ver un ojo completo, después los dos, y poco a poco
94
Amores de Lagartija
se fue descubriendo un rostro. Ese soy yo, con las huellas de las heridas que son prueba
de mi supervivencia.
Las fuerzas regresan a mi cuerpo y me siento con trabajos en el sillón, junto a mí,
mi hermosa esposa Pina que limpia mis heridas con agua oxigenada, acaricia mi rostro y
Ella y yo sabemos que nos unen lazos antiguos, que nuestro matrimonio es sólido
y solo pasando las revueltas que construyen una revolución social, conformaremos una
familia. Espero que eso pase cuando se consoliden los gobiernos autónomos en las
conforman una unidad capaz de construir alternativas que destruyen implícitamente todas
nórtica.
ella, está la figura de una lagartija besucona, que se mueve despacio como siguiendo los
95
Amores de Lagartija
obsequia una sonrisa que más bien parece un pacto de vida, como si ella supiera algo que
yo no y que tiene que ver con la relación existente entre ese animal y ella.
De hecho me da la impresión que entre ellos dos hay una comunicación que yo no
Soy Arthur su esposo humano y no entiendo porque debe ver con mas agrado a
ese pinche animal que a mí, o al menos eso le diré para que no sospeche lo que en
Arthurs, de hippies o de Panchas, mostrándoles que hay otras formas, otros caminos, otros
hasta que me duele —sabes, a veces pienso que solo me utilizas para no sé qué.
- Aaaaagh- yo le contesto ante la acción hostil de Pina — ¿pero por qué no dejas
de ver con esos ojos a la cabrona lagartija que no deja de seguirte?— se le queda viendo
a mi morral como si algo se le hubiera perdido- y tomo una ramita de una planta que se
encuentra junto al sillón para morderla y aminorar el dolor– Que sabor tan extraño- es
96
Amores de Lagartija
poemas y de rezos. Morral que me había regalado mi padre en los Estados Unidos.
En el piso, debajo del sillón miro una fotografía, creo que es la que había dejado
tirada por accidente Pancha, la vecina de la casa de al lado en su extraña visita a esta casa.
engañándome y engañando a ese animal para trascenderse a sí misma y solo estoy siendo
separados.
Miro a la pared y la sangre me hierve de coraje, veo la lagartija con un rostro cínico y
Ahora sé que mis heridas sanarán, que me recuperaré y todo estará bien para
naturaleza, es como si la vida nos hubiese regalado mas vida de no sé donde, y que sea
como sea debemos agradecer y pagar a la madre tierra – Le digo a mi hermosa Pina
mientras mastico esa extraña planta que está desde que llegamos en una maceta junto al
sillón-.
97
Amores de Lagartija
El viento sopla con fuerza y se convierte en silbido que recorre la casa de un lado
cono. Lo tomo con las manos, lo extiendo y me doy cuenta que en él puedo escribir y
injusticias que de inmediato encuentran espejo en ese instante y en las palabras que se
—Hay que acomodarnos pronto, hay que tener las ofrendas y el toro- le dije
mientras espero paciente a que Pina termine de limpiar unos libros viejos que pertenecían
a su padre Jacinto y que hablan sobre la historia de sus tierras y las luchas que ha debido
librar.
Mientras no dejan de pasar esas preguntas desconcertantes por mi cabeza, ella solo
sonríe, se relaja con su belleza incalculable, deja el trapo con el que limpia los libros y
estira sus brazos sobre el viejo sillón, que está a su vez en un cuarto oscuro, donde el
viento llega y se regresa, en un cuarto donde el viento es mucho más que solo una ráfaga
fría o una ráfaga caliente, según sea la temporada del año. Ella fija su mirada al techo
- ¿Sabes?, ahora que te miro así me recuerdas a mi amigo el gringo, al que llamábamos el
hippie, me contó que un día estuvo así herido en la lucha y si no fuera porque su
compañera lo pudo ayudar se hubiese desangrado. De hecho me contó que ese día que
estaba herido le dio por matar a una lagartija que estaba en su casa.
98
Amores de Lagartija
Me quedo pensativo en sus palabras y- “como si no hubiera más en el mundo” – rezó una
- ¡Esa no chingado!- dijo Pina mientras con un control remoto adelantó un reproductor de
música y comenzó a tararear aquella canción interpretada por Mercedes Sosa que dice:
Y aprendió al comprender
Y comprendió al pensar
Y pensó al militar
Y militó al crecer.
¿Sabes Arthur?, hoy después de todo estoy convencida que es necesario crecer, y que solo
crecemos cuando estemos dispuestos a aprender, a saber con humildad y dignidad que no
Y creció al aprender…
99