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UNIVERSIDAD YACAMBÚ

VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS GENERALES
DERECHO LABORAL COLECTIVO

TRABAJO DE LA SEMANA 6

FUERO SINDICAL

Realice un ensayo sobre la importancia del Fuero Sindical para la inamovilidad laboral.

Profesor: Pablo Leal


Alumno: Gerardo García Rangel
CI: 11.246.886
Expediente: CJP-111-00047V
Sección: “B”
Correo: gerardogarciarangel@gmail.com

Barquisimeto, 03 de marzo de 2013

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IMPORTANCIA DEL FUERO SINDICAL PARA LA INAMOVILIDAD LABORAL

El artículo 418 de la reciente Ley Orgánica del Trabajo, los


Trabajadores y las Trabajadoras establece que los trabajadores
que gocen de fuero sindical o inamovilidad laboral no pueden ser
despedidos, trasladados, ni desmejorados en sus condiciones de
trabajo, sin justa causa previamente calificada por el Inspector del
Trabajo. Se abre el presente ensayo con este artículo como marco
de referencia para el análisis de una figura que protege la libertad
sindical colectiva como un derecho no solo en nuestro país, sino en
la mayoría de los países del mundo que se acogen a los preceptos y normas de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT).
De acuerdo con la misma ley, “la protección especial del Estado consagrada en
virtud del fuero sindical se otorga para garantizar la defensa del interés colectivo y la
autonomía en el ejercicio de las funciones sindicales”. Este es uno de los derechos
contenidos en los Convenios 98 y 151 de la OIT, derecho desarrollado en América
Latina como parte de la libertad sindical a través de reglamentaciones especificas
laborales en cada uno de los países, limitando así como la posibilidad de una actitud
hostil por parte de los empresarios y patronos hacia los trabajadores y hacia los
sindicatos.
Como ya hemos visto a lo largo de la asignatura, las organizaciones sindicales
tienen su razón de ser en la defensa de los derechos de los trabajadores ante los
empleadores y patronos. Por esta razón, la relación que los sindicatos establecen con
los empleadores tiene un alto carácter conflictivo, donde la parte más vulnerable está
representada por la organización sindical y los trabajadores. En este sentido, la libertad
sindical busca proteger la acción sindical a través de dos mecanismos: el fuero sindical
y la prohibición de prácticas desleales.
Considero importante citar el Artículo 1 del Convenio 98 de la OIT (Ginebra,
Suiza, 8 junio 1949), que trata sobre el derecho de sindicación y de negociación
colectiva, según sigue:

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1. Los trabajadores deberán gozar de adecuada protección contra todo
acto de discriminación tendiente a menoscabar la libertad sindical en
relación con su empleo.

2. Dicha protección deberá ejercerse especialmente contra todo acto que


tenga por objeto:

a) sujetar el empleo de un trabajador a la condición de que no se afilie a


un sindicato o a la de dejar de ser miembro de un sindicato;

b) despedir a un trabajador o perjudicarlo en cualquier otra forma a causa


de su afiliación sindical o de su participación en actividades sindicales
fuera de las horas de trabajo o, con el consentimiento del empleador,
durante las horas de trabajo.

Como se puede observar, la libertad


sindical está reconocida en las normas de
derecho internacional como un derecho
fundamental, y de allí que toda persona sea
titular de la libertad sindical, tal como se
encuentra consagrado en el precitado Convenio 98 de la OIT, y además en otras
normas que pueden ser revisadas en la bibliografía disponible, tales como la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de los
Derechos Económicos, Sociales y Culturales, el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, la Carta de la Organización de Estados Americanos, la Declaración
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la Carta Internacional Americana
de Garantías Sociales, entre otros instrumentos internacionales.
Ante esta protección internacional, los países que se ratifican estas normas (y es
el caso venezolano) pierden la potestad de otorgar o negar el reconocimiento de la
libertad sindical como un derecho fundamental, por lo que la legislación nacional debe
limitarse a regular su ejercicio, porque aún cuando el legislador nacional no lo regule ni
lo reconozca, el derecho igual existe. En el caso de Venezuela, el derecho interno lo
reconoce y lo protege, y solo faltaría implementar con mayor precisión los mecanismos
idóneos que garanticen el ejercicio eficaz de este derecho, mediante instrumentos
prácticos que permitan además una tutela judicial efectiva. Nuestra Constitución
Nacional consagra de forma suprema la libertad sindical como un reconocimiento de

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los derechos colectivos, y queda al legislador la responsabilidad de desarrollar los
preceptos constitucionales para su ejercicio práctico, y a los intérpretes aplicar al caso
concreto el contenido de las normas.
En mi opinión, nuestros constituyentes entendieron que la libertad sindical debía
ser protegida para garantizar su eficaz ejercicio, y no solo establecieron el denominado
fuero sindical en sentido estricto con la protección en el empleo de los promotores y
dirigentes sindicales, sino también incorporaron el reconocimiento del derecho a
establecer la cláusula sindical en la convención colectiva de trabajo como un medio
más de protección y promoción de la libertad sindical, lo que podría encuadrarse en el
fuero sindical en sentido amplio. Es así como nuestra Constitución lleva un paso
adelante en comparación con las Constituciones de otros países al consagrar los
contenidos esenciales de la libertad sindical.
Creo que el fuero sindical es un acierto de la
moderna legislación laboral no solo en Venezuela sino
a nivel mundial, ya que se entendió, después de
muchos años de abuso y desigualdad en la relación
laboral, que los derechos colectivos de los
trabajadores deben ser protegidos, pero también
deben ser protegidos los líderes de estos trabajadores
quienes constantemente se exponen al presentar reclamos ante los patronos y
empleadores en representación de sus compañeros de trabajo, lo que se constituye,
como ya se dijo, en una relación caracterizada por el conflicto, donde quedan los
dirigentes sindicales bastante expuestos a medidas de discriminación y abuso.
Para finalizar, es importante entender que los titulares de la libertad sindical en
nuestro País, los trabajadores y los patronos, deben buscar, a través de las respectivas
organizaciones y en ejercicio de ese derecho, una participación más activa una en la
relación laboral, con la intención de obtener condiciones más favorables y así aumentar
el nivel de bienestar en todos los ámbitos a quienes representan, logrando así un
mayor progreso económico para la sociedad y un mayor grado de felicidad para todos
los venezolanos.

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