Hola la melancolía que siento al no verte escrito una carta hace

mucho rato, me naufraga en un mar tormentoso que se apodera de mi,

y resulta en una respuesta indignante la cual la descifras como una sentido malo,

de que no correspondo a tu amor que siempre me das. A pesar de ello quiero

decirte el aquel caaballero que juró peliar por Ti, sigue…sigue peliando por ti aunque

no sientas el esfuerzo que hace para llegar a ti, mi dulcinea

He batallado con la mas mortíferas y devastadoras criaturas de este infame

mundo mortal las cuales se convierten en pecados capitales,

que en ocaciones no me dejan avanzar y me encierran en un laberinto

de desconcierto y fragilidad humana; en el cual en situaciones pierdo

la batalla pero no la guerra. Dulcinea mia gracias por aquellos

momentos tan hermosos adornados perfunes y aromas elegantes que

me hacen enloquecer. Gracias por ser aquel lucerito que siempre me

acompaña en las buenas y las malas las verdes y las maduras,

en la salud y la enfermedad. Agradezco a Dios por ponerte en mi camino

para que cambiara el futuro de mi destino gracias te doy gracias. Amor de mi vida

ACUERDATE

que siempre voy a estar para ti, a pesar del tiempo y la distancia.

Amor mío, esta carta es para decirte todolo que sieno por ti…a pesar del tiempo que hemos
compartido juntos sigue aquí en mi corazón esa llama calórica, que me mantiene vivo, que me
implulsa a ser una gran persona.