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La erosión

Juan Ruiz de la Torre

DESCRIPTORES
EROSIÓN
GESTIÓN DEL AGUA
REGULACIÓN
SEDIMENTACIÓN

Introducción
La amplitud del tema, la lógica limitación de espacio, tiempo Por los agentes o factores principales determinantes de la
y profundidad, junto con la escasez de información utilizable erosión (que pueden actuar en forma combinada), se diferen-
procedente de investigación y experimentación directas y de cian los climáticos, bióticos (vegetales y animales) y el hom-
fuentes técnicas, en especial sobre la función de diferentes es- bre. Entre los climáticos figuran la precipitación, el viento y los
tructuras de vegetación en nuestro país, obligan a una pre- cambios de temperatura y humedad ambiental. Los dos últi-
sentación esquemática y sintética, con sugerencia de vías de mos pueden preparar los materiales para la actuación de los
profundización. primeros. El agua de precipitación sigue luego caminos orien-
En este artículo se habla, en general, de aguas dulces, ap- tados por la gravedad combinada con el relieve. Se llega a di-
tas para bebida por el hombre, riego con fines agrícolas u or- ferenciar así la erosión hídrica, por el agua, de la eólica, por
namentales y utilizaciones industriales. Prescindiremos de los el viento. Se suele considerar la erosión, con una perspectiva
recursos obtenidos por desalación de agua por ser ajenos a más amplia, como resultado de la acción combinada de me-
problemas derivados del ciclo de la erosión de los terrenos. teorización (fragmentación, alteración y ablandamiento de ro-
Las aguas dulces proceden en último término de la preci- cas por acción de factores climáticos) y abrasión (arranque de
pitación atmosférica, pudiendo obtenerse directamente por materiales, o erosión propiamente dicha en sentido estricto).
acumulación en aljibes, por derivación de la red de drenaje En la erosión pueden establecerse diferencias por la in-
superficial o de lagos dulces, por toma de embalses de regu- tensidad del proceso o por su localización, por los materiales
lación, balsas, manantiales o pozos artesianos o por eleva- preferentemente afectados y por las formas de actuación de
ción en pozos desde niveles inferiores a los freáticos. los agentes erosivos.
La gestión del agua, tras la obtención, comprende regula- Por la intensidad y velocidad crecientes del proceso, se di-
ción, almacenamiento y distribución. Una parte del agua se ferencian erosión geológica, normal, activa, acelerada y ca-
consume en la primera utilización y otra puede ser reutiliza- tastrófica. La geológica es un proceso lento de efectos apre-
da tras depuración más o menos completa. ciables tras un largo plazo a escala geológica (desde dece-
nas de miles hasta millones de años). Erosión normal es con-
La erosión cepto estimativo, difícil de precisar. Las erosiones activa y
La erosión es un proceso de acción de los factores del medio acelerada son debidas generalmente a la acción del hombre.
ambiente sobre el terreno, al que atacan arrancándole ele- La erosión catastrófica es un proceso muy acelerado, afec-
mentos y arrastrándolos. Los materiales arrancados y arras- tando a grandes volúmenes.
trados por la erosión son transportados y depositados en La erosión eólica comprende arranque de materiales por
otros lugares, resultando así tres fases de un ciclo, que com- simple succión y desprendimiento y arrastre por golpeteo con
prende erosión, transporte y sedimentación, al que se puede granos de arena y subsiguiente succión. Los materiales succio-
llamar abreviadamente ciclo de erosión. nados son transportados en suspensión por el viento. La depo-

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Foto: J. RUIZ DE LA TORRE

Foto: J. RUIZ DE LA TORRE


Fig. 1. Erosión en regueros en un desmonte de carretera. Este de Talavera. Fig. 2. “Bad-land” arcilloso-salino en las cercanías de Alicún de Ortega
Febrero de 1999. (Granada), con erosión mixta intensa. Octubre de 1999.

sición de materiales más pesados (arenas) puede dar lugar a con cámaras de acumulación, que constituyen el karst, kars o
arenales incoherentes y dunas. A efectos de los recursos de kras. En los sustratos blandos, la erosión forma los paisajes de
agua, estos arenales son permeables, dejando pasar el agua a tierras malas o “bad-lands”, donde se combinan las erosiones
capas inferiores, pudiendo mantener, por su porosidad, agua laminares con las longitudinales y verticales y con el arrastre
en apreciables cantidades y tiempos y evitando, por su estruc- de grandes volúmenes de arcillas en suspensión, a más de im-
tura, la evaporación desde el sustrato mojado o empapado. portantes soluciones de sales haloideas que limitan o impiden
Refiriéndonos ya sólo a la erosión hídrica, se diferencian la la utilización del agua para cualquier tipo de finalidad.
erosión marina litoral y la continental. Por el estado del agua La erosión longitudinal tiene manifestaciones progresivas
se separa la acción como sólido, en los glaciares, de los efec- desde la reunión del agua en pequeñas alineaciones de con-
tos del agua líquida, actuando en las precipitaciones y por las centración, a partir de la lámina de escurrimiento en ladera.
escorrentías superficiales y subterráneas. En todos los casos la Al incrementarse la erosión longitudinal primaria se producen
actuación se debe a la gravedad, salvo los procesos de frag- sucesivamente las regueras, las barranqueras y las cárcavas,
mentación de rocas por helada del agua que rellena diaclasas. con incremento de profundidad, arrastre de tierras y rapidez
Los materiales a que puede afectar la erosión son genéri- de evacuación. Otras formas de erosión longitudinal son la
cos: suelo, tierra, arena, grava, cascajo, canto rodado, pie- tangencial de márgenes de canales y la del fondo de cauces.
dras gruesas, bloques y rocas de fondo de cauce, más o me- La erosión superficial o la longitudinal pueden afectar a
nos compactas. Específicamente se pueden diferenciar tipos de los suelos descubiertos aportando nutrientes a las escorrentías
roca por su naturaleza y compacidad. Muchas de las rocas resultantes y contribuyendo a los problemas de eutrofización.
magmáticas dan suelos eutróficos y, por erosión, aguas muy Las erosiones por movimiento de grandes volúmenes se
fertilizadas. La denudación se refiere a destrucción de la cu- producen por resbalamiento de capas superficiales del terre-
bierta vegetal y erosión más o menos intensa de suelo y tierras. no, a veces de notable espesor, como ocurre en las margas
El arrasamiento es una forma de erosión geológica activa que arcillosas neógenas del sureste peninsular y fondos de la gran
termina por reducir el relieve, acercando la superficie a un depresión del Ebro. Hay que considerar también los grandes
plano de escasa inclinación o a ondulaciones menores, dando corrimientos de fondo. Las erosiones de mayor importancia
glacis, páramos, parameras, campiñas y “campos” (llanuras). volumétrica se producen en los grandes episodios de lluvias
Por su localización, la erosión hídrica continental puede torrenciales prolongadas, de cuantías superiores a los 300 o
ser superficial, vertical y longitudinal. La erosión superficial 500 mm en dos o tres días, desaguando grandes caudales en
comprende la de salpicadura producida al llegar al terreno régimen turbillonario, con series de enormes olas en los ríos
las gotas de lluvia, que dispersan materiales y modifican la principales. En estas ocasiones se producen graves erosiones
estructura del suelo, haciéndolo menos coherente, y la erosión masivas, con problemas de desagüe, daños en vegas y már-
laminar, por resbalamiento de una capa de agua sobre la su- genes, inundaciones, cortes de vías de comunicación y pérdi-
perficie del terreno, que da lugar a la pérdida de una capa das de cosechas y vidas humanas.
de materiales sensiblemente homogénea. La siguiente fase del ciclo de erosión es la del transporte, que
La erosión vertical tiene diferente carácter sobre sustratos puede realizarse en solución, pudiendo afectar notablemente a
compactos o blandos. Entre los más o menos compactos se la calidad del agua para diferentes usos, en suspensión, como
pueden diferenciar los calcáreos, los yesosos y los volcánicos. acontece con los limos y elementos más finos de arcillas, tierras
El agua se infiltra a zonas subsuperficiales por diaclasas, hue- y arenas, hasta que la reducción de velocidad del desagüe da
cos o zonas de menor impermeabilidad, disolviendo o ero- lugar a su deposición. Los materiales mayores son transporta-
sionando materiales o aprovechando caminos libres, hasta dos por el fondo de la corriente, pudiendo concurrir o alternar,
formar una red de pozos y túneles de diversas pendientes, para dimensiones crecientes, el salto, la rodadura y el arrastre.

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Finalmente, la sedimentación es la fase que más visibles azudes de derivación el aterramiento disminuye la eficacia,
efectos tiene sobre los dispositivos de regulación artificial y de perdiéndose volúmenes de agua por desbordamiento, a la
distribución de las aguas. La deposición de materiales trans- vez que pasan sólidos a los canales.
portados puede tener lugar en los cauces, riberas, meandros, En las conducciones cerradas no deben entrar sólidos y
aguas arriba de cadenas, diques, presas y otros obstáculos, pueden causar problemas aun los nutrientes disueltos en el
pudiendo contribuir al desarrollo de mejanas o islas centrales. agua, siendo conocidas las colonizaciones de los álabes de
En los valles amplios, la sedimentación en unas márgenes, las turbinas por moluscos de ciertas especies.
combinada con el ataque a las contrarias, da lugar a la ines- En los canales y acequias la sedimentación de limos, tie-
tabilidad de los cauces, con los consiguientes problemas para rras y arenas reduce las secciones útiles y puede ofrecer sus-
la utilización de las vegas, hasta para edificaciones y otras trato para el establecimiento y desarrollo de plantas enrai-
instalaciones ubicadas en los terrenos marginales. En los co- zantes bajo la superficie del agua. El desarrollo de vegeta-
nos de deyección y tramos finales de los ríos, la sedimentación ción en canales tiene varios efectos: reduce la sección hi-
tiende a elevar el cauce sobre una arista de pirámide, hacien- dráulica, constituye obstáculo que reduce la velocidad y, por
do cada vez más frecuentes los desbordamientos o derrama- ambas circunstancias, el caudal, produciendo además un
mientos marginales sobre los terrenos laterales, que habitual- gasto consuntivo directo derivado de la transpiración.
mente sustentan cultivos agrícolas de elevada productividad. En las redes de distribución de menores secciones los pro-
blemas pueden ser análogos a los anteriores, pero de menor
cuantía.
Implicaciones de la erosión En los terrenos agrícolas, los sólidos en suspensión o arras-
en las diferentes fases tre pueden tener un papel beneficioso como fertilizantes, que
de la gestión del agua ha sido reconocido por los cultivadores desde la antigüedad.
La erosión, en formas y cuantías, se halla en relación directa Los problemas de calidad se pueden solucionar mediante
con el grado de descubrimiento de suelos y tierras. Para te- depuración, si bien las aguas de escorrentía de áreas muy ero-
rrenos sin cubierta vegetal o de escasa tasa y densidad de cu- sionables suelen encarecer todas las fases de los tratamientos.
bierta, la erosión puede ser activa y suponer la pérdida anual
de apreciables volúmenes sólidos, sobre todo si las tierras se
encuentran removidas. Las condiciones de baja cubierta pro- Parámetros de la erosión
pician la falta de regulación, ocurriendo desagües muy rápi- Pasamos revista a continuación a los principales parámetros
dos seguidos de periodos con caudales reducidos que pueden de la erosión.
ser largos y, en zonas semiáridas o áridas, ocurrencia de es- En primer lugar, el grupo del relieve, que comprende pen-
tiajes prolongados. El desagüe rápido con arrastre de mate- dientes, longitudes de impluvio, complicación de propio relie-
riales del terreno contribuye de varias formas a la degrada- ve y altitud y disposición de las montañas.
ción de la calidad de las aguas de escorrentía. En el grupo del clima destaca la precipitación total media
Vamos a ir pasando revista a las diferentes fases de la anual de agua, que influye en el tipo y densidad potencial de
gestión del agua, apuntando las influencias o consecuencias la vegetación, estando relacionada directamente con la regu-
de los procesos comprendidos en el ciclo de erosión. laridad de precipitaciones en espacio y tiempo. De mayor im-
La cuantía de la erosión en las cuencas receptoras está di- portancia es la distribución y cuantías de intensidades máxi-
rectamente correlacionada con la pérdida de regulación del mas, que tienen lugar en los grandes aguaceros productores
desagüe, con las consecuencias de reducción de los caudales de erosiones más cuantiosas, de crecidas extraordinarias, de
mínimos o residuales, acentuación de los estiajes hasta extin- transportes de sólidos en tramos más largos y de deposicio-
ción parcial y temporal de los recursos superficiales, pérdida nes más voluminosas en los embalses. El régimen de tempe-
de recarga de acuíferos y disminución de los recursos hídri- raturas tiene relación con la erosión, por la influencia en la
cos subterráneos. dispersión de las tierras y por la correlación entre amplitud de
En embalses de regulación, la sedimentación produce una oscilaciones térmicas diarias y anuales y régimen de hume-
pérdida progresiva del volumen útil, de tal forma que la ca- dad relativa del aire, efecto de la continentalidad, que influ-
pacidad real va disminuyendo y los problemas derivados de ye en los tipos de estructura de las vegetaciones naturales. Los
la escasez de agua en los estiajes se van presentando y cre- tipos sintéticos de clima, en cuanto a aridez o humedad, ca-
ciendo, de manera que cuando se ha aterrado una cierta ta- lor o frío y continentalidad o litoralidad, están correlaciona-
sa de capacidad regulable, se ha perdido también la posibi- dos con los tipos óptimos de cubierta vegetal, que es la más
lidad de atender un porcentaje de demanda, con repercusio- efectiva defensa frente a la erosión.
nes económicas y sociales. Problemas parecidos se presentan La litofacies influye en la erosionabilidad y cuantía de la
en depósitos de menores capacidades, si bien a veces se so- erosión real, por su naturaleza, posible esquistosidad y bu-
lucionan extrayendo los materiales depositados, que en los zamiento, higroscopicidad, viscosidad y resistencia a la abra-
numerosos embalses canarios de vaso reducido dan lugar a sión. Según las experiencias de nuestro profesor, J. M. Gar-
un aprovechamiento de tierras que son vendidas como sus- cía Nájera, el desgaste de un tipo de roca es proporcional al
trato fertilizante para cultivos de elevada producción. En los talud natural de las tierras derivadas empapadas en agua.

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Foto: J. RUIZ DE LA TORRE

Foto: J. RUIZ DE LA TORRE


Fig. 3. Desierto de erosión con sustrato tóxico (sales de cobre), Fig. 4. Matorral de Ononis tridentata, de bajas cubierta y protección,
cerca de Alicún de las Torres (Granada). Octubre de 1999. en yesares del entorno de Narboneta (Cuenca). Mayo de 1996.

La estructura, forma y densidad de la red de drenaje es- erosión laminar, retraso de la concentración del agua en ca-
tán correlacionadas con el relieve general, con la litofacies y nales y alargamiento del plazo del desagüe, así como reduc-
con la cubierta vegetal, condicionantes todos ellos de la ero- ción de las puntas de caudal, es decir, aparición o incremen-
sión. Parámetros de la red de drenaje indicadores de la in- to de la regulación de la escorrentía. A consecuencia de lo
tensidad de erosión son también el grado de encajamiento, la anterior, hay reducción de las erosiones longitudinales, en ca-
pendiente y la anchura de canales. nales y márgenes. Se produce también un incremento de la
La cubierta vegetal tiene una influencia decisiva sobre el coherencia y consistencia del suelo, debida al desarrollo de
proceso erosivo. Es fácilmente constatable el hecho, conocido las raíces en número, profundidad y grosor, a la par que apa-
desde la antigüedad, de que una cubierta vegetal cerrada, rece la internalización de nutrientes, debida a la reducción de
densa y elevada puede llegar a impedir que se produzca ero- la erosión, al desarrollo de los coloides del suelo (que retie-
sión apreciable, corrigiendo sus causas en superficies extensas nen sales minerales), al aumento de los plazos de desagüe,
en razón de su estabilidad en el tiempo. La característica de la con reducción de las puntas y, como consecuencia de todo
vegetación más influyente en el proceso erosivo es la estructu- ello, mejora de las calidades de las aguas de escorrentía su-
ra, con sus parámetros de talla, estratificación, densidad, con- perficial, de infiltración y de recarga de acuíferos.
sistencia, rigidez, periodicidad, índice de recubrimiento y cu- El otro grupo de circunstancias modificables es el integra-
bierta global (porcentaje de terreno cubierto por vegetación). do en el bloque de los tratamientos, a los que ya hemos alu-
La estructura de la vegetación está condicionada por el tipo de dido antes. La restauración implicará reducción de unas for-
“tratamiento”, conjunto de formas e intensidades de acciones mas de actuación y cambios o supresiones de otras, con el
del hombre o de agentes y factores dirigidos o modificados por efecto global de reducción de la presión de explotación, sin
el hombre. Los principales grupos genéricos de tipos de trata- sobrepasar un umbral de estabilidad a investigar.
mientos están comprendidos en los epígrafes de agricultura,
selvicultura, ganadería, dehesa mixta, aprovechamientos me- Medidas de intensidad
nores, deportes, disfrute social, expansión urbana, industrial o de procesos en el ciclo de erosión
viaria y protección. Es claro que los tratamientos que implican Recientemente FAO ha publicado un manual que resume las di-
dejar al descubierto y remover frecuentemente las tierras son ferentes metodologías que pueden emplearse para efectuar me-
los que provocan mayores erosiones y los que conducen a cu- diciones de erosión y que ha sido elaborado por N. W. Hudson.1
biertas vegetales más densas son los de mayor valor protector. Para la fase de erosión, se pueden efectuar mediciones en
impluvios, márgenes y cauces. Los procedimientos son revisa-
Modificación por el hombre dos en el reciente manual de FAO.
de los parámetros de la erosión El deslizamiento de laderas se puede medir por fotogra-
Repasaremos los grupos de parámetros de la erosión para metría terrestre. El transporte y sedimentación aguas abajo de
ver la posibilidad de modificación por el hombre. los puntos de deslizamiento complican el cálculo aproximado
El relieve, el clima, la litofacies y la red de drenaje son ca- de los volúmenes movidos.
racterísticas poco modificables por acción directa. La erosión global se obtiene por integración de las ante-
La cubierta vegetal de las cuencas receptoras es lo más di- riores o por medios especiales, como pozos de sedimentación
rectamente modificable, mediante restauración, defensa y o balsas de malla que recogen por derivación aguas cargadas
medidas de conservación, con cambio de tratamientos que de acarreos. Una medida aproximada se puede obtener con
suponga reducción de la presión de explotación. La restaura- presas de retenida en gargantas o cerrando cárcavas para cu-
ción de la vegetación da lugar a los siguientes efectos: re- bicar los sólidos retenidos, teniendo en cuenta que sólo darán
ducción de la erosión por salpicadura, incremento de la infil- medidas por defecto por perderse parte del agua y que las
tración, reducción de la energía erosiva y reducción de la mediciones de tierras, limos y suspensiones son complicadas.

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El establecimiento de parcelas de campo puede facilitar versal”, pero se ha concedido poca atención a los aspectos glo-
las medidas de pérdida de tierras y suelos, aunque tienen va- bales, de cuantificación necesaria para el ajuste de fórmulas.
rios inconvenientes, como no representar condiciones medias, Del mayor interés para la gestión del agua es mejorar la pre-
experimentar alteraciones debidas a cerramiento, sistema de dicción de la vida de los embalses de regulación prosiguiendo
recogida de muestras, etc. y no proporcionar cifras generali- en forma sistemática la cubicación periódica de los aterra-
zables, por la falta de representatividad. mientos. Si bien el aterramiento no da las cifras de erosión y
La medición del transporte se puede realizar en estaciones transporte de la cuenca, sí proporciona la parte que nos inte-
de aforos, obteniendo periódicamente muestras integradas de resa, que es la que reduce la capacidad de embalse útil.
los caudales con sólidos en verticales alineadas, mediante tur-
bisondas, peces de bronce u otro material pesado con tobe- Estimaciones globales de la erosión
ras de entrada de muestra y dispositivo para evitar o amino- Las estimaciones globales pueden efectuarse mediante siste-
rar rebose o sedimentación. La medición de los volúmenes mas de fórmulas, modelos y gráficos que permiten comparar
transportados por los fondos de cauce es muy complicada, la erosión global de una cuenca, de degradación medida o
pudiéndose recurrir a canastas o nasas especiales que fácil- apreciada con aceptable aproximación, con otras de pareci-
mente son ancladas en los fondos a causa de los torbellinos das condiciones de relieve, clima, litofacies, cubiertas vegeta-
que ellas mismas inducen, inutilizándolas. les, tratamientos y fenómenos de erosión que aparentan ser
La mejor medida de la sedimentación es la que propor- de iguales características cualitativas y cuantitativas. Vamos a
ciona la cubicación periódica de lagos o embalses, que se referirnos a dos métodos y mencionar otros intentos de esta-
puede obtener con aceptable precisión mediante el empleo de blecimiento de bases para inducción de cuantificaciones.
ecosonda combinado con localizadores y aplicación de pro- Einstein3 estudia las condiciones de arrastre para fraccio-
gramas informáticos diseñados para esa finalidad. nes de materiales transportados de diferentes granulometrías,
presentando unos ábacos que permiten calcular los volúme-
Valoración analítica de la erosión nes de sólidos transportados.
El método para esta valoración consiste en descomponer la Fournier,4 para cuencas de más de 500 km2 de extensión y
cuenca receptora en unidades homogéneas en cuanto a ero- con explotación moderada, que no incluya laboreo de impluvios
sionabilidad y, mediante fórmulas empíricas, deducidas por inclinados sin abancalar, da un “índice de agresividad climática”,
métodos estadísticos a partir de gran número de observacio- que es para cada estación pluviométrica la relación entre el cua-
nes, calcular la erosión de cada una de ellas y sumarlas to- drado de la precipitación en el mes más lluvioso y la total anual.
das. Las unidades elementales son cuencas o partes de cuen- La degradación específica se obtiene de un ábaco con cuatro
cas de canales de primer orden y parcelas directamente ver- rectas correspondientes a diferentes grupos de clima. También se
tientes a canales de órdenes superiores. introdujeron variaciones para mejorar la aproximación.
Entre las fórmulas que se ha empleado destacan las sucesi- Otros diversos autores han elaborado diagramas que per-
vas de Wischmeier2 a partir de la EUPS (Ecuación Universal de miten calcular la relación entre cuencas de degradación cono-
Pérdida de Suelo), con sucesivas correcciones y modificaciones. cida y la que se estudia, partiendo de las extensiones recepto-
La EUPS tiene, para cada parcela, la fórmula: A = R·K·L·S·C·P, ras y diferencias de clima, pendientes y cubiertas vegetales.
donde A es la pérdida anual de suelo y tierra en t/ha, R es una La reciente y monumental obra publicada por Tragsa,
medida de la potencia erosiva conjunta de la precipitación hí- Tragsatec y el Ministerio de Medio Ambiente y dirigida por el
drica y la escorrentía, es decir, suma de potenciales erosiones Profesor F. López Cadenas de Llano5 contiene detalles de to-
laminares y longitudinales primarias, K mide la erosionabilidad dos los métodos citados y otros muchos, con abundantes grá-
específica del tipo de terreno, L es la longitud media de reco- ficos utilizables para evaluar aproximadamente las degrada-
rrido del agua escurriendo por impluvios, S es factor de pen- ciones de las cuencas, basándose parcialmente en las fórmu-
diente del terreno, C es factor de tipo de cultivo y P es factor de las de Wischmeier.
prácticas de conservación de suelos. Esta fórmula, publicada
primero en 1962 y modificada varias veces en los años seten- Restauración hidrológica
ta, se basó en observaciones de más de 10.000 años/parcela, de cuencas receptoras
como resultado de un programa extenso, detallado, desarro- Acciones en impluvios
llado en un largo periodo y con una inversión económica muy La actuación básica es la implantación o cambio de cubierta
importante. Hoy se considera que “no es, en absoluto, univer- vegetal, con la menor alteración posible de la superficie del
sal”, ya que sólo es aplicable a la mitad oriental de los Estados terreno si es inclinado. El cierre de la cubierta vegetal hace
Unidos norteamericanos y adecuada a superficies de cultivo o inapreciable la erosión laminar, aun para vegetaciones her-
pastoreo. El obtener coeficientes aplicables a otras regiones del báceas de muy baja talla, incrementando la regulación, aun-
mundo, otras vegetaciones y diferentes tratamientos exigiría que ésta no llega a lograrse nunca íntegramente. No obstan-
disponer de gran número de parcelas y obtener información te, la regulación depende de la multiplicación y densificación
sistemática durante un plazo largo de tiempo. En España, co- de los obstáculos al descenso del agua por gravedad y del es-
mo en otros países, se ha trabajado considerablemente en la pesor y estabilidad de la cubierta muerta que reposa sobre el
aproximación de los coeficientes parciales de la ecuación “uni- terreno, por lo que la función reguladora es considerable-

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Foto: J. RUIZ DE LA TORRE
Foto: J. RUIZ DE LA TORRE

Fig. 5. Mosaico de matorrales de Genista hispanica y prado de diente denso, Fig. 6. Pinares densos de Pinus halepensis, de protección media,
de erosión muy reducida pero baja regulación, en el entorno de Soncillo en las gargantas del Turia al sur del Marquesado de Moya.
(Burgos). Junio de 1998. Mayo de 1996.

mente mayor para las cubiertas arbóreas que para las frutes- Acciones en la red de drenaje y tramos de depósito
centes o herbáceas y, al lograrse menor regulación, la reduc- Las acciones indicadas en cauces y tramos de depósito con-
ción de la erosión longitudinal es también menor. Por ello, es- sisten en general en obras de fábrica, diques o pequeñas pre-
timamos que el actual entusiasmo por las implantaciones de sas para escalonamiento del perfil longitudinal y retención de
matorral puede tener justificación en el mantenimiento de la sólidos, y muros de encauzamiento ayudados con rastrillos
diversidad biológica o paisajística, pero no en la función pro- transversales. Se recordará que el estrechamiento da lugar a
tectora. Para mejorar las condiciones hidrológicas, siempre erosión de cauce, con rebaje de la pendiente longitudinal, y
que sea posible, se tratará de implantar o conservar cubier- el ensanche produce deposición de sólidos y aumento de la
tas densas arbóreas o, al menos, arbustivas, evitando, salvo pendiente. Las obras de cauce originan transferencias de só-
por necesidades conservacionistas, la expansión de cubiertas lidos entre tramos, con efectos limitados sobre la aportación
frutescentes o herbáceas, que ya se establecen naturalmente final a las zonas bajas, debiendo estar sincronizadas con las
sin necesidad de intervención humana. actuaciones de restauración de cabeceras.
En terrenos descubiertos, degradados, bajo clima más o
menos árido, tendremos suficiente energía y fuerte escasez de Sobre la restauración de la vegetación
agua (baja precipitación y muy elevada tasa de escorrentía) En la implantación o modificación de la cubierta vegetal se
con escasez de nutrientes o imposibilidad de aprovecharlos. habrán de tener en cuenta una serie de directrices, como la
Para obtener éxito, las especies a implantar han de ser helió- de favorecer siempre el nivel de madurez, que va aparejado
filas (resistentes y exigentes en insolación directa), xerófilas de retardo evolutivo o estabilidad, capacidad de cicatrización
(resistentes a la sequía), frugales, colonizadoras (capaces de de daños y capacidad de reconstrucción espontánea tras des-
“toma de tierra” muy rápida), fuertemente arraigantes, de trucciones. Debe primarse así mismo la conservación de la
crecimiento rápido, resistentes a calamidades (sequías, calo- biodiversidad, mediante la defensa o estímulo de expansión
res, vientos, heladas, etc.), expansivas, arbóreas y producto- de estirpes endémicas y relícticas (escasas, o exclusivas, en
ras de cubierta muerta gruesa, esponjosa y estable. Todas es- peligro de extinción local o regional) y de sus combinaciones
tas condiciones apuntan directamente a los pinos como solu- (agrupaciones), los sistemas en que se integran y los paisajes
ción óptima, especies que, desde tiempos de los romanos, se originales, tanto naturales como humanizados.
han empleado preferentemente para recubrimiento de terre- La conservación de la diversidad cultural aconsejará de-
nos con fines protectores. Cuando aun los pinos no resisten fender la presencia del hombre y sus actividades tradiciona-
las condiciones de vida o no son viables, nos encontramos en les (en cuanto sean compatibles con la mejor gestión hidroló-
las que hemos llamado “áreas críticas”, que requieren trata- gica), incluyendo las aplicaciones ancestrales de los entes na-
miento especial (Cf. Ruiz de la Torre, 6). turales (plantas medicinales o de otras aplicaciones, aguas,
La secuencia de implantación de cubiertas sobre un suelo etc.), según se expone por Ruiz de la Torre.8
desprovisto o escasamente cubierto debe ser: establecimiento La política de espacios naturales protegidos, muy activa
rápido de especies arbóreas (pinos), agregación de especies en los últimos años, debe tener repercusiones favorables so-
de enriquecimiento (preferentemente leguminosas, gramíneas bre los ciclos hidrológicos.
y ciperáceas), agregación de especies para diversificación La gestión de las cubiertas vegetales debe tener en cuen-
(otras especies arbóreas de mayor estabilidad y propias de ta el papel de las diferentes especies abundantes o dominan-
vegetaciones de mayor madurez ecológica). Al agregar es- tes en los ciclos con incendio. Del problema del fuego forestal
pecies habrán de tenerse en cuenta las variaciones de gasto interesan incidencia, frecuencia, reiteración, intensidad y
consuntivo de agua por transpiración (mayores en frondosas efectos, todo lo cual presenta una estrecha relación con la na-
caducifolias higrófilas) y variaciones estacionales de esco- turaleza de la cubierta vegetal. Grupos de plantas más ca-
rrentías superficiales (mayores también para frondosas defo- racterísticos por su adaptación al fuego periódico son los de
liadas con las hojas muertas formando capa continua sobre los pinos, leguminosas y cistáceas leñosas (con muy rica va-
el terreno). El orden de recurso a las diferentes especies debe riedad de representación española) y gramíneas subxerófilas
seguir secuencia de madurez progresiva (Ruiz de la Torre, 7). (sobre todo las de tipo “lastón”).

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Foto: CÉSAR LÓPEZ LEIVA

Foto: J. RUIZ DE LA TORRE


Fig. 7. Paisaje de pinares densos de Pinus nigra, en el Solsonés. Fig. 8. Encinar denso en montaña caliza, con acusada protección,
Baja erosión y apreciable regulación. Febrero de 1995. entre el valle de Soba y Ramales (Cantabria). Septiembre de 1999.

Para la mejor conservación de las cubiertas vegetales de Como ejemplos de embalses de esta demarcación con di-
las cuencas, como para otros varios aspectos de la gestión te- ferentes condiciones de aterramiento están, en Asturias, el de
rritorial, es preciso no descuidar la necesidad de suministrar Alfilorios, para el que las cifras de cubicación del CEDEX-CEH
información seria e imparcial, que logre incrementar el cono- dan una vida total útil de 38 años, de los que restan ahora
cimiento de los procesos naturales y el respeto a paisajes, sis- 29, y el de Peñarrubia, con 104 años de vida total de los que
temas y componentes. Una información ecológica, socioeco- faltan 66. En las cuencas de ambos embalses hay proporción
nómica e hidrológica adecuada debe servir para estimular la notable de cubiertas vegetales densas, más en el primero, pe-
defensa de la Naturaleza y evitar la desinhibición ante la po- ro las explotaciones mineras e industriales originan mayores
sibilidad de daños o desastres. aportaciones sólidas retenibles en el caso del primero.
La Iberia Parda abarca aproximadamente el 80 % de la
Estado actual del problema España peninsular. La creación del Servicio Hidrológico-Fo-
de la erosión en España restal en 1901, el contenido del Plan Nacional de Obras Hi-
Para considerar las modalidades e intensidades de erosión en dráulicas de 1933, el Plan Nacional de Repoblación Forestal
España, se puede distribuir el territorio nacional en cuatro de 1940 y la realización parcial de su primera fase, han da-
unidades, dos peninsulares, correspondientes a las zonas con do lugar a extensos trabajos de restauración de cuencas, con-
apreciables lluvias en verano (Iberia Verde o Atlántica) y con ducentes a reducir la erosión y mejorar la regulación y cali-
sequía estival (Iberia Parda o Mediterránea), y otras dos in- dad de las aguas de las escorrentías. A medida que progre-
sulares, con los archipiélagos de Baleares y Canarias. saba la realización del Plan de Repoblación Forestal se fue-
En la Iberia Verde, coincidiendo aproximadamente con el ron incorporando procedimientos de preparación mecánica
conjunto de vertientes al Cantábrico y litoral gallego al norte de del terreno, generalizándose en la década de los setenta el
La Guardia, es decir, con la demarcación hidrográfica del nor- aterrazado, pronto objeto de fuerte contestación ecologista.
te de España, destacan el relieve duro, con laderas de fuerte El aterrazado, ideado en países semiáridos, tiene por ob-
pendiente y grandes desniveles entre las cabeceras de las cuen- jeto facilitar el enraizamiento de los nuevos pies implantados y
cas y las desembocaduras de los ríos. La abundancia de pre- poner a su disposición el incremento, en cantidad y tiempo, del
cipitaciones va aparejada con su regularidad, no faltando oca- agua que puede retenerse en el considerable volumen de po-
sionalmente lluvias extraordinarias, como las que produjeron rosidad y huecos en terraplenes y explanaciones subsoladas.
las crecidas desastrosas en el litoral vascongado en agosto de Hubo abusos, al incrementarse los porcentajes de terreno
1983. La vegetación es densa y rápidamente se autorrecons- trabajado, aproximar o ensanchar las terrazas, al aplicar el
truye tras incendios u otros daños. En esta región no se han método en regiones de fuerte tempestuosidad o al aterrazar
efectuado restauraciones de cubierta vegetal de finalidad hi- terrenos inadecuados, como margas o arcillas muy plastifica-
drológica, aunque abundan las plantaciones de arbolado pa- bles. En conjunto, el resultado ha sido positivo, por una baja
ra producción de madera en turno corto. Hasta hace poco, las coincidencia de lluvias extraordinarias tras los trabajos y por-
plantaciones de ladera se hacían por hoyos, con distribución que normalmente el escalonamiento de las pendientes se bo-
semirregular o siguiendo líneas de nivel. Recientemente se está rra en un par de décadas.
generalizando la plantación en surcos siguiendo líneas de má- Desafortunadamente, las críticas al aterrazado han facili-
xima pendiente, con lo que la preparación del terreno se aba- tado el que ahora se haya extendido el laboreo en líneas de
rata por la gratuita cooperación de la fuerza gravitatoria, aun- máxima pendiente, favorecedor de intensas erosiones, aun-
que el precio que podría pagarse, si hay lluvias intensas antes que, por no figurar en los elencos de actividades dignas de
de cerrarse la espesura del arbolado, será el de la transforma- oposición, está pasando inadvertido incluso para los más ac-
ción de las laderas en campos de barranqueras y cárcavas. tivos críticos.

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De los 38 embalses actualmente en cubicación periódica energética, en las superficies no cultivadas se observa hoy
por el CEDEX-Centro de Estudios Hidrográficos, cuatro pre- una evolución hacia cubiertas vegetales más extensas, densas
sentan vida total igual o inferior a 53 años, que son los de y elevadas, con colonizaciones por matorral de terrenos
Embarcaderos, Estanca de Alcañiz, Guajaraz y Ríosequillo. abandonados por el secano de bajo rendimiento. Las áreas
Vida útil entre 53 y 150 años dan los de Argos, Cazalegas, de matorral están siendo invadidas, con apreciable intensi-
Guadalest, Las Torcas, Sant Ponç y Taibilla. Con vida entre dad y rapidez, por especies arbóreas. Ambos procesos hacen
150 y 250 años resultan los de Águeda, Alfonso XIII, Aruis, incrementarse el área forestal española. El aumento del área
Barasona, Beniarrés, Burgomillodo, El Torcón, Foix, Galli- forestal produce visiblemente reducciones de erosión y mejo-
puén, Gérgal, La Bolera, La Cierva, La Toba, Moneva, Olia- ras de la regulación de escorrentías superficiales, aparte de
na, Puentes, Renegado, Ribarroja, San Juan, Valuengo, Val- la mejora de las recargas de acuíferos.
deinfierno y Zújar. La vida más larga calculada resulta para Por otro lado, se ha producido en los últimos años un in-
los embalses de Aracena, Cueva Foradada, Guadalmellato, cremento de las superficies dedicadas a cultivo intensivo en
Mequinenza, Talarn-Tremp y Torre de Abraham. Otros dos varias regiones. Una parte de ellas corresponde a regadíos
embalses que se sondaron en años anteriores son los de Do- en llanos o en laderas suaves y abancaladas, lo que supone
ña Aldonza y Pedro Marín, en el Guadalquivir medio, con escaso problema erosivo. Como contrapartida, se extiende la
aterramiento completo ya prácticamente, funcionando como puesta en cultivo de terrenos inclinados, en secano o con rie-
azudes de derivación, donde los sólidos aportados por el río go por goteo, con laboreo intenso, lo que da notable incre-
pasan en buena parte aguas abajo, son derivados o contri- mento de la erosión y del consumo de agua, a la par que re-
buyen a la elevación del cauce aguas arriba. La vida útil de duce la regulación de las escorrentías.
estos dos embalses ha sido algo superior a los veinte años, Se advierte la necesidad urgente de considerar la cuenca
mitad de su edad actual, en razón a que no hay deposición hidrográfica como un “sistema de interacción”, en el sentido de
de una gran parte de los sólidos que bajan por el río. Sachsse, Naveh y Lieberman,9 e integrar complejos de cuencas
En el grupo de embalses para cubicación periódica se dio que deben ser objeto de ordenación integral de actividades.
cabida a variados tipos de cuenca en cuanto a erosionabili- La gestión del agua, como elemento interactivo integrado, de-
dad, con preferencia a los de evidente rapidez de aterra- be reconsiderar el problema de la erosión y la reducción y
miento y atendiendo las sugerencias o necesidades de las control de sus efectos. Dentro de los programas de organiza-
Confederaciones Hidrográficas y Comisarías de Aguas. En la ción de la gestión del agua es indispensable y urgente que se
velocidad de aterramiento, aparte de la influencia de relieve, acometan programas de experimentación y mediciones direc-
litofacies, cubierta vegetal y actividades del hombre, se ad- tas encaminadas a la obtención o mejora del conocimiento
vierte una correlación estrecha con la cercanía de la presa al cuantitativo de los procesos erosivos en nuestro país, papel
origen del río, lo que parece confirmar que, en régimen ordi- protector y regulador de diferentes estructuras de vegetación y
nario, los sólidos son objeto en su mayoría de transferencias efectos de las posibles medidas correctoras. ■
parciales, no haciendo recorridos largos sino los elementos
más finos o los acarreos de las crecidas más extraordinarias.
En Baleares, el embalse más importante es el mallorquín Juan Ruiz de la Torre
Profesor Emérito de la Universidad Politécnica de Madrid
de Gorg Blau, con cuenca de montaña de vegetación en pro-
gresión tras la limitación del intenso pastoreo anterior a su es-
tablecimiento. La expansión de poblaciones densas de “cá-
rritx” (Ampelodesma mauritanica) propicia escorrentías bas-
tante reguladas y de aguas limpias. No hay cubicación re-
Bibliografía
ciente del vaso, estimándose por el estado de la cuenca que
1. Hudson, N.W., “Medición sobre el terreno de la erosión del suelo y de la escorren-
la vida previsible es larga. tía”, Bol. de Suelos FAO, nº 68, Roma, FAO, 1997, total.
En Canarias hay profusión de pequeños embalses en cabe- 2. Wischmeier, W.H. & Smith, D.D., “Predicting rainfall erosion losses. A guide to con-
servation planning”, Agricultural Handbook, nº 537, USDA, Washington DC, U.S.
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típica la extracción periódica de las tierras depositadas, que son 3. Einstein, H.A., “The bed-load function for sediment transportation in open channel
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gran rendimiento económico. Las cuencas son de fuertes pen- 4. Fournier, F., Climat et Erosion, Paris, Presses Universitaires de France, 1960, total.
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dientes y están vestidas en su mayoría de matorrales claros o pi-
control de la erosión, 2ª ed., Madrid, Tragsa, Ministerio de Medio Ambiente & Ed.
nares (caso del embalse de Soria, el principal del archipiélago). Mundi-Prensa, 1998, total.
Los trabajos de restauración han tenido, en conjunto, un 6. Ruiz de la Torre, J. (Dir.), Manual de la flora para la restauración de áreas críticas
y diversificación en masas forestales, Sevilla, Junta de Andalucía, Consejería de
papel beneficioso, estabilizando las tierras de las cabeceras Medio Ambiente, 1996, total.
y prolongando las vidas previsibles para los embalses en las 7. Ruiz de la Torre, J., Mapa forestal de España. Memoria general, Madrid, ICONA,
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condiciones de partida. 8. Ruiz de la Torre, J., “Conservation of plant species within their native ecosystems”,
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áreas rurales y forestales, con abandono de agricultura mar- 9. Naveh, Z. & Lieberman, A.S., Landscape Ecology, Springer-Verlag, New York, Ber-
ginal, ganadería extensiva y aprovechamientos de finalidad lin, Heidelberg & Tokyo, 1984, pp. 26-99.

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