Nombres: Gisella Cabrera y Denisse Farfán.

La Agresión

¿Qué es la agresión?

La agresión tien varios significados. Claramente, los thugs originales, miembros de una
fraternidad criminal en el norte de la India, fueron agresivos cuando entre 1550 y 1850
estrangularon más de 2 millones de personas y declararon haberlo hecho en servicio de una
diosa. Pero cuando “agresivo” describe a un vendedor dinámico, adquiere un significado
diferente. ¿Cuál es la diferencia? Los psicólogos sociales debaten cómo definir la agresión,
pero están de acuerdo en esto: haríamos más nítido nuestro vocabulario al fistnguir entre
conducta segura de sí mismo, enérgetica, ambiciosa y la conducta que hiere, daña o destruye.
La primera es asertividad la última, clara y seguramente en agresión.
Agresión lo definimos cono una conducta física o verbal que pretende herir a alguien. Esto
excluye los accidentes automovilísticos, los tratamientos dentales y las colisiones en la hacer.
Incluye acciones que tienen la intención de herir a alguien –bofetadas, insultos directos,
incluso “meterse con alguien” coon chismorreos–. Los invetsigadores típicamente miden la
agresión haciendo que las personas decida cuánto herir a alguien, como por ejemplo,
haciéndolos aligir la intensidad de un choque eléctrico a imponer.

Nuestra definición cubre dos tipos de agresión. Los animales exhiben agresión sociales,
caracterizada por demostraciones de furia, y agresión sileciosa, como cuando un depredador
acecha a su presa. Peter Marler (1974) reporta que estos dos tipos de agresión animal
implican regiones cerebrales separadas. En los humanos, los psicólogicos denominan a los dos
tipos “agresión hostil” y “agresión instrumental”. La agresión hostil surge del enojo. Su
objetivo es dañar. La agresión instrumental también se girige a hacer daño, pero sólo como
un medio para lograr otro fin. En 1990, los líderes políticos justificaron la guerras del golfo
Pérsico no como un esfuerzo hhostil para matar a 100 000 iraquíes, sino como un medio para
la liberación de Kuwait. La agresión hostil es “caliente”, la agresión instrumental es “fría”.

Distinguir entre agresión hostil e instrumental en ocasiones es difícil. Lo que comienza como
un acto frío y calculado encender la hostilidad. Aún así, los psicólogos sociales encuentran útil
la distinción. La mayoría de los asesinatos, por ejemplo, son hostiles. Son arranques
impulsivos, emocionales –lo cual explica por qué los datos de 110 naciones muestran que
imponer la pena de muerte no ha disminuido los homicidios (Wilkes, 1987)–. Pero algunos
asesinatos son instrumentales. La mayoría de los más de 1000 asesinayos de Chicago desde
1919 por los “agitadores” de muchedumbres fueron calculados para alcanzar objetivos
específicos.