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OBJETIVO GENERAL
OBJETIVO ESPECIFICO
Conocer los aspectos básicos de seguridad que se deben tener en cuenta durante
la medición de las puestas a tierra.
Comprender las normas y el cumplimiento de los requisitos técnicos estipulados
por el Reglamento técnico de los sistemas de distribución
Entender como reacciona el sistema de puesta a tierra en los hilos de guarda tras
una descarga atmosférica en el sistema de distribución.
CRITERIO PARA EL CAMBIO DE SUELO PARA PUESTA DE TORRES DE
TRANSMISIÓN.
Todas las torres que constituyen una línea de transmisión tienen conexión de puesta a
tierra, conformadas por electrodos verticales (varillas), electrodo horizontal (conductor
concéntrico recubierto de cobre) y conectores hechos de material de baja resistencia
eléctrica para facilitar la conducción de la corriente de falla o de descarga atmosférica.
Para la conexión entre la puesta a tierra y la torre, conexión entre el electrodo horizontal
y electrodo vertical y entre electrodos horizontales se usa conectores para unir
rígidamente todo el sistema de puesta a tierra. En el diseño inicial considerar la
instalación mínimo de 2 electrodos verticales.
Ahora bien, para realizar adecuadamente estas funciones, una puesta a tierra debe
presentar las siguientes características:
En general se espera que una puesta a tierra tenga suficiente capacidad de dispersión de
corriente en el suelo, y que a su vez limite los potenciales en su superficie (control de
gradiente de potencial), de tal manera que no comprometan la seguridad de las personas
por causa de una falla a tierra.
Alrededor del electrodo de puesta a tierra, la resistencia del suelo es la suma de las
resistencias serie de las celdas o capas coaxiales circundantes del suelo,
localizadas progresivamente hacia fuera del electrodo. Como se ilustra en la figura 1, a
medida que aumenta la distancia, las capas del suelo presentan una mayor área
transversal a la corriente y por tanto una menor resistencia. Se sigue entonces que la
resistencia de puesta a tierra reside esencialmente en las capas de suelo
más próximas al electrodo. Normalmente para una varilla de 2.4 metros,
el 90% del valor de la resistencia de puesta a tierra se encuentra dentro de un radio de
3.0 metros.
Los valores de resistencia de puesta a tierra en las líneas de transmisión utilizados en los
proyectos de CELEC
Para líneas de transmisión de 138 kV considerar 10 [Ω] para líneas ubicadas entre 0 a
1000 msnm y 15 [Ω] para líneas ubicadas mayores a 1000 msnm.
Para líneas de transmisión de 230 kV considerar 5 [Ω] para líneas ubicadas entre 0 a
1000 msnm y 10 [Ω] para líneas ubicadas mayores a 1000 msnm.
Para líneas de transmisión de 500 kV considerar 10 [Ω] para todas las cotas.
Para los electrodos verticales (varillas) se tomará en cuenta las siguientes dimensiones:
Varillas recubiertas de cobre de 5/8" de diámetro por 3,0 m (10 pies), para
terrenos blandos
Varillas recubiertas de cobre de 3/4" de diámetro por 3.0 m (10 pies) para roca y
terrenos duros.
El método consiste en pasar una corriente entre el electrodo o sistema de puesta a tierra
a medir y un electrodo de corriente auxiliar (C) y medir la tensión entre la puesta a tierra
bajo prueba y un electrodo de potencial auxiliar (P) como muestra la figura 2. Para
minimizar la influencia entre electrodos, el electrodo de corriente, se coloca
generalmente a una sustancial distancia del sistema de puesta a tierra. Típicamente ésta
distancia debe ser mínimo 6.0 veces superior a la dimensión más grande de la
puesta a tierra bajo estudio.
El electrodo de potencial debe ser colocado en la misma dirección del electrodo de
corriente, pero también puede ser colocado en la dirección opuesta como se muestra en
la figura. En la práctica, la distancia “d” para el electrodo de potencial se elige
aproximadamente al 62% de la distancia del electrodo de corriente. Esta distancia está
basada en la posición teóricamente correcta (61.8%) para medir la resistencia exacta del
electrodo para un suelo de resistividad homogéneo.
Gradientes de Potencial
Método de la pendiente
𝜇 = (𝑅3 − 𝑅2 )/(𝑅2 − 𝑅1 )
Los rayos que nos interesan por su efecto, son los de nube a tierra, y en éstos se pueden
encontrar 4 tipos: 2 iniciados en las nubes, y 2 iniciados en tierra, ya que pueden ser
positivos o negativos. Los más comunes, siendo el 90 % de los rayos detectados, son de
una nube negativa hacia tierra. Los rayos que inician en tierra son relativamente raros y
ocurren normalmente en montañas o en estructuras altas, por lo que no los tomaremos
en cuenta en lo subsiguiente.
Los rayos iniciados en las nubes negativas, normalmente aparecen en nubes de tormenta
del tipo cumulonimbus convectivas que usualmente miden de 3 a más de 50 km de
largo, y son consecuencia de un rompimiento dieléctrico atmosférico.
Este rompimiento una vez iniciado, avanza en zigzag a razón de unos 50 metros por
microsegundo con descansos de 50 microsegundos.
Una vez que el rompimiento creó una columna de plasma en el aire, la descarga
eléctrica surgirá inmediatamente dentro de un hemisferio de unos 50 m de radio del
punto de potencial más alto. Y, cualquier objeto puede ser el foco de esta descarga hacia
arriba de partículas positivas, aún desde una parte metálica debajo de una torre.
La figura muestra el rayo producido por una nube cargada negativamente contra tierra
según el modelo de Hasbrouk.
Los rayos consisten usualmente de descargas múltiples, con intervalos entre descargas
de decenas a centenas de milisegundos. La primera descarga es la que tiene mayor
amplitud, mientras que las subsecuentes tienen tiempos de ataque más rápidos, aunque
la velocidad de las descargas se ha encontrado que depende del lugar geográfico. La
primera descarga está entre 6 y 15 x 10E7 m/s y la segunda entre 11 y 13 x 10E7 m/s.
Una nube de tormenta promedio podría contener unos 140 MWh de energía con voltajes
hasta de 100 MV, con una carga en movimiento intranube de unos 40 Coulombs. Esta
energía es la que se disipa mediante los rayos, con corrientes pico que van de unos
cuantos kiloamperes a unos 200 kA con un percentil (50) de 20 kA, de acuerdo con los
datos del Sr. R. B. Bent. El Electric Power Research Institute (EPRI) en
su Transmission Line Reference Book, 345 kV and above. 2da. Edición, Págs. 545-552,
maneja una magnitud promedio de una descarga negativa de 31 kA, con una pendiente
promedio máxima de 24.3 kV/us. Y para las descargas que siguen a la primera, una
magnitud menor aunque más rápidas, con un promedio de 39.9 kV/us, y hasta 70 kV/us
ha sido registrado.
Los rayos de una nube positiva hacia tierra contienen más carga que sus contrapartes
negativas, por lo que son muy estudiados. En general no exhiben el mismo
comportamiento de pasos de los negativos, y suceden más frecuentemente en tormentas
invernales con nieve y en latitudes altas.
Para la colocación del terminal aéreo debe tenerse en consideración conceptos como
“cono o ángulo de protección”, “jaula de Faraday”, “modelos electrogeométricos”,
“modelos físicos de campos eléctricos” y el factor de intensificación de campo eléctrico,
tensión de ruptura del dieléctrico (aire), y las características del conductor de descarga.
Los siguientes son los sistemas utilizados en la actualidad para la protección externa
contra el rayo:
Para realizar una correcta protección debemos dotar nuestra estructura de dos sistemas
de protección: protección externa contra impactos directos de rayo (pararrayos, tendido
o jaula de Faraday), y protección interna contra sobretensiones provocadas por la caída
del rayo en cualquier tendido de cable (limitadores de tensión). Tanto el sistema de
protección externo como interno estarán apoyados por un buen sistema de toma de
tierra, para la evacuación de las corrientes del rayo, así como una adecuada
equipotencialidad entre todos los sistemas de tierra, tanto de los sistemas de protección
como de los circuitos eléctricos y telefónicos del espacio a proteger.
Una puesta a tierra efectiva significa que está conectada a tierra a través de una
conexión, o conexiones de suficiente baja impedancia y capacidad de conducción de
corriente, para impedir los aumentos de voltaje que podrían resultar en peligros o
riesgos indebidos y excesivos a personas o al equipo conectado. Debe entenderse que la
“impedancia” total del sistema de puesta a tierra, y no su resistencia únicamente, tenga
valores bajos que permitan disipar tanto los elementos de baja frecuencia como los de
alta generalmente contenidos en la descarga En los sistemas de puesta a tierra, se
pueden utilizar los electrodos fabricados especificados en los numerales (a) y (b)
indicados a continuación. Donde sea práctico, los electrodos fabricados se incrustarán
debajo del nivel permanente de humedad. Los electrodos fabricados estarán libres de
capas o revestimientos no conductores, tales como pinturas o esmaltes. Donde se use
más de un electrodo, cada electrodo de un sistema de puesta a tierra (incluyendo los
utilizados como varillas de pararrayos), no estará a menos de 1.83 metros (6 pies) de
cualquier otro electrodo de otros sistemas de puesta a tierra. No se requerirá que el
calibre del conductor de cobre del electrodo de puesta a tierra fabricado sea mayor que
No. 6 AWG.
Dos o más electrodos que estén ligados entre sí en forma efectiva, se considera como un
solo sistema de electrodo.
La "puesta a tierra" en la instalación eléctrica del cliente se hace, no sólo para proteger
a la instalación eléctrica, sino también para proteger a las personas contra el peligro de
choques eléctricos, accidentes y como prevención contra incendio. Esta puesta a tierra
se efectúa en el conductor neutral de la acometida y por consiguiente, al conductor
neutral de la red interna, el cual también estará puesto a tierra extendiendo así, la
protección a toda la instalación eléctrica interna de la residencia, comercio o industria.
No deben instalarse fusibles o interruptores en el neutral; tampoco se admiten
conexiones entre el neutral y las partes metálicas. Esta conexión es la que se llama
"Puesta a Tierra del Sistema" Cada servicio eléctrico individual o acometida, deberá
tener una puesta a tierra, la cual se unirá al neutral de la red, a su llegada a la caja del
medidor o en el Interruptor Principal o equivalente. Las cubiertas protectoras de los
cables eléctricos, tales como hilos o cintas de cobre, plomo, acero, etc., se conectarán a
tierra, para evitar en tales materiales la presencia de un potencial superior al de tierra. 6
La conexión de puesta a tierra será permanente, continua y tendrá capacidad suficiente
para conducir cualquiera de las corrientes que le puedan ser impuestas y será de
impedancia suficientemente baja, tanto para limitar el potencial sobre tierra, como para
facilitar el funcionamiento de los dispositivos de sobrecorriente del circuito.
Los electrodos deberán tener una resistencia a tierra que no exceda 25 ohm. Cuando no
se pueda lograr esta resistencia a tierra con un solo electrodo, se instalarán otros
electrodos hasta conseguir la resistencia indicada. Se recomienda probar la resistencia
de las tierras al instalarse el sistema y repetir la prueba periódicamente cuando esté
instalado.
Conductores
Aisladores
Soportes
Postes
Se designan con este nombre los soportes de poca altura, de cuerpo vertical único; tales
como los postes de madera y hormigón, y algunas veces también a los postes metálicos
de gruesos perfiles no ensamblados, destinados a las líneas de media tensión.
Su habilitación.
El tipo de fundación utilizada.
Su amplitud para resistir los esfuerzo longitudinales
1.3 Suspensión del Montaje El trabajo de montaje de las estructuras será suspendido si
el viento en el sitio alcanza una velocidad tal que los esfuerzos impuestos a las
estructuras sobrepasan a los esfuerzos correspondientes a la condición de la carga
normal. El Contratista tomará las medidas para evitar perjuicios a la obra durante tales
suspensiones.
EJECUCIÓN DEL MONTAJE
Comienzo del Montaje.- Para cada sección de la línea, el montaje de las torres
en las fundaciones comenzará solamente después de la autorización escrita de la
Supervisión.
Manipulación de los Elementos.- Precauciones convenientes serán tomadas
para asegurar que ninguna parte de las torres serán forzadas o dañadas en
cualquier forma durante el transporte, almacenamiento y montaje. No será
permitido arrastrar elementos o secciones ensambladas sobre el suelo o sobre
otras piezas. La manipulación de los elementos será hecho sobre madera.
Posición de los Pernos.- En el montaje de la torre, los pernos de posición
vertical deberán ponerse con la cabeza hacia arriba. Los pernos de posición
horizontal deberán ponerse con la cabeza hacia el interior de la estructura.
Alineamiento de las Perforaciones.- El empleo de los pasadores ensanchadores
para llevar las perforaciones forzadamente al alineamiento será prohibido si esta
práctica daña la galvanización, ensancha las perforaciones, raya el metal,
produce un desbalance de esfuerzos en los elementos de la estructuras o produce
excesivos esfuerzos.
Piezas Dañadas
Daños a la Galvanización
TOLERANCIAS Y AJUSTES
Todas las estructuras (torres) deberán estar verticales y bajo los esfuerzos producidos
por las líneas aéreas terminadas y las tolerancias siguientes no serán sobrepasadas en
una estructura completamente montada, antes y después del tendido de los conductores
y cable de guarda.
La verticalidad será medida respecto al eje que pasa por el centro geométrico de la
estructura. Además, tanto antes como después de estar tendido los conductores, la
desviación de las extremidades de las crucetas con respecto al eje transversal teórico de
la torre no deberán sobrepasar 1/200 de la distancia entre el extremo de la cruceta y el
eje de la torre. Además, dichas tolerancias se verificarán como máximas, tanto antes
como después de estar tendido los conductores y cable de guarda. Donde las tolerancias
indicadas más arriba no se cumplan, el Contratista desmontará y remontará
inmediatamente y correctamente las torres sin costo para EL PROPIETARIO.
Control final
Después del montaje, cada torre será revisada cuidadosamente con el fin de controlar
tanto el estado de la superficie de los perfiles, como el adecuado ajuste de las tuercas.
Además, se procederá a limpiar cuidadosamente los perfiles, conforme a las
instrucciones de la Supervisión.
SISTEMAS DE PARARRAYOS.
Los rayos ocurren con diferentes intensidades y un sistema que proteja contra su efecto
deberá ser diseñado tomando en cuenta los rayos promedio o mayores del área en
cuestión. Las descargas no pueden ser detenidas, pero la energía puede ser desviada en
una forma controlada. El intentar proteger contra descargas directas puede ser
excesivamente caro.
Capturar el rayo en el punto diseñado para tal propósito llamado terminal aérea.
Conducir la energía de la descarga a tierra, mediante un sistema de cables
conductores que transfiere la energía de la descarga mediante trayectorias de
baja impedancia, y;
Disipar la energía en un sistema de terminales (electrodos) en tierra.
a) Todas las estructuras metálicas excepto tanques u otras estructuras que contengan
materiales inflamables.
TERCERA CLASE.- Esta clase consiste de edificios con estructura metálica y cubierta
no conductora. Este tipo requiere de terminales aéreas conectadas a la estructura y fuera
de la cubierta para actuar como terminales pararrayos.
CUARTA CLASE.- Esta clase consiste de estructuras no metálicas, que requieren una
protección. Se incluyen en esta clase:
b) Chimeneas. Aún con elementos de refuerzo, éstas deben tener una gran protección
contra rayos, con terminales aéreas, cables de bajada y electrodos de aterrizado.
QUINTA CLASE.- Una quinta clase consiste de aquellas cosas cuya pérdida puede ser
de consecuencias, y que normalmente recibe un tratamiento pararrayos completo,
incluyendo terminales aéreas, cables de bajada y electrodos de aterrizado. Entre éstas
están:
f) Líneas de transmisión.
g) Subestaciones eléctricas.
Los edificios modernos con estructura de acero y con varillas embebidas en concreto se
acercan al concepto de la jaula de Faraday, y el riesgo de que un rayo que penetre en un
edificio protegido de esta manera es extremadamente pequeño. Aunque se debe notar
que los rieles de los elevadores no deben ser usados como el conductor de bajada de los
pararrayos, la NOM-001-SEDE-1999 permite que se unan al sistema de pararrayos
{620-37b}.
Para hacer más efectiva la protección de este sistema, se usan puntas del tipo Franklin o
del tipo "paraguas" (patentadas).
Las subestaciones de potencia son protegidas por puntas pararrayos colocadas sobre las
estructuras, y por los hilos de guarda de las líneas que rematan en la subestación. Los
hilos de guarda están conectados directamente a la malla de tierra de la subestación.
En el caso de las estructuras metálicas tipo rejilla (lattice), la mismas estructuras forman
una jaula de Faraday de protección.
Estructuras metálicas tipo rejilla
NORMA
Rocas.- En un suelo muy poco profundo, un cable en anillo se instala en una trinchera
alrededor de la estructura. Para mejorar aún el contacto, es posible colocar placas de al
menos 2 pies2.
Bibliografía
apuntes cientificos. (s.f.). Recuperado el 05 de 11 de 2017, de
http://apuntescientificos.org/redes.html
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https://www.celec.gob.ec/transelectric/images/stories/baners_home/LOTAIP_NEW/2017/08-
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