Este texto bíblico es leído
ENERO DE 2018
Lectura bíblica para cada día
1 Lc 2,16-21
lu Los pastores fueron a toda
prisa, y encontraron a María ,
a José y al niño acostado en el
pesebre. Al verlo, dieron a conocer lo
que les habían dicho acerca de aquel
niño. Los pastores se volvieron
glorificando y alabando a Dios.
2 25
Gal 1,11-24
ma Pablo escribe: Desde el antes que yo.
seno de mi madre Dios me
escogió por su gracia, y se dignó
revelarme a su Hijo.
3 Jn 1,9-18
mi La Palabra se hizo carne dónde vives?» El les dice: «Venid y lo
y habitó entre nosotros. Y
hemos contemplado su gloria.
4 1 Jn 3,16-20
ju C risto Jesús dio su vida
por nosotros, y nosotros
debemos ofrecer nuestras vidas por los favor; el Señor te muestre su rostro y
hermanos.
5 Sal 55,17-19
vi Invoco a Dios y el Señor
me salva: a la tarde, a la
mañana, al mediodía; su paz rescata
mi alma, porque escucha mi voz.
6 Dt 31,1-8
sa EPIFANIA El Señor, tu
Dios, camina contigo: no te
dejará ni te abandonará.
7 Mt 2,1-12
DOM Al ver la estrella, los
magos se llenaron de inmensa
alegría. Entraron en la casa; vieron al Nombre! Proclamad día tras día su
niño con María su madre y,
postrándose, le rindieron homenaje.
8 Sab 10,9-14
lu La sabiduría de Dios libró
a los fieles de sus fatigas,
condujo a los justos por caminos rectos
y les hizo conocer las realidades del
Reino de Dios.
9 Sal 37,27-40
ma La salvación de los
justos viene del Señor; él es en Dios.
su refugio en los tiempos de angustia.
El Señor los salva, porque se acogen a
él.
10 Hch 10,34-43
mi Pedro dice: Dios nos ha
enviado su mensaje
anunciando la buena noticia de la paz
que traéría Jesús: El es el Señor de
todos.
11 Jn 3,22-36
ju Aquel a quien Dios ha
enviado, Jesucristo, habla las
palabras de Dios, porque da el Espíritu
sin medida.
hoy durante la oración de la
communidad de Taizé.
12 Jn 1,14-18
vi A Dios nadie lo ha visto
jamás; sólo el Hijo único de
23 Sal 119,49-56
ma Tu voluntad es para mí
un canto; en la noche
Dios que está al lado del Padre, lo ha recuerdo tu nombre.
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dado a conocer.
1 C or 9,16-23
13
Jn 1,29-34 mi Pablo escribe: Para mí
sa Juan el Bautista decía de anunciar el Evangelio no es un
Jesús: Detrás de mí viene uno motivo de orgullo, es una necesidad.
que es superior a mí porque existía
Jn 3,13-17
ju Tanto amó Dios al mundo,
14
Jn 1,35-42 que no dudó en entregarle a
DOM Jesús pregunta a los su Hijo único, para que todo el que
primeros discípulos: «¿Qué crea en él no perezca, sino que tenga
buscáis?». Ellos responden: «¿Señor, vida eterna.
26
Is 49,13-15
veréis.»
vi ¿Puede una madre
15
Nm 6,22-27 olvidarse de su criatura, dejar
lu El Señor te bendiga y te de querer al hijo de sus entrañas? Pues
guarde; el Señor haga brillar aunque ella se olvide, yo no te
su rostro sobre ti y te conceda tu olvidaré, dice el Señor,
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2 Sm 22,1-20
te dé la paz.
sa El Señor es mi roca y mi
16 Mt 9,18-26
ma Jesús dice a la mujer
salvación. Él es digno de
alabanza. Lo invoco y estoy a salvo.
28
que había curado: Ánimo, hija,
Mc 1,21-28
tu fe te ha salvado.
DOM Jesús enseñaba en la
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Is 53,1-5 sinagoga, y los que le
mi El Siervo del Señor escuchaban estaban atónitos de su
llevaba nuestros sufrimientos. enseñanza porque él les hablaba no
Por medio de sus heridas hemos sido como los escribas sino como aquél que
curados. tiene autoridad.
18 Sal 96
ju ¡C antad al Señor un
cántico nuevo! ¡Bendecid su
29 Zac 8,11-17
lu El Señor dijo: Yo os
salvaré para que seáis una
bendición. No temáis.
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salvación y contad a todas las naciones
Is 63,16b—64,3-7
su gloria.
ma Señor, tú eres nuestro
19 1 C or 6,12-20 padre, nuestro redentor.
vi El que se une al Señor se Actúas en favor de los que se confían
hace un solo espíritu con él. en ti. Acoges a los que practican la
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justicia.
1 Pe 1,13-21
31
sa Pedro escribe: Por C risto Sal 138
confiáis en Dios que lo mi Dios mío, te doy gracias
resucitó de la muerte y lo glorificó; así por tu amor y tu verdad;
vuestra fe y esperanza están puestas aumentaste la fuerza de mi alma.
21
Mc 1,16-20
DOM Pasando Jesús junto al
lago de Galilea, vió a Simón y
a su hermano Andrés que estaban
echando las redes en el lago, pues
eran pescadores y les dijo: «Venid
conmigo y os haré pescadores de
hombres.»
22
1 C or 12,12-27
lu Pablo escribe: C risto es
como un cuerpo formado por
muchas partes. Tiene muchos
miembros, y los miembros, siendo
muchos, forman un solo cuerpo. Todos
nosotros hemos bautizado para formar
un solo cuerpo, y hemos bebido un solo
Espíritu.