You are on page 1of 4

Schelling, Ensayo sobre la esencia de la libertad

La verdadera oposición en la filosofía es entre naturaleza y libertad.


336. Las investigaciones sobre la esencia de la libertad humana pueden en parte apuntar al
concepto correcto de la misma, desde el momento en que, por muy inmediatamente grabado que
esté el sentimiento del hecho real de la libertad en cada cual, tampoco lo está a un nivel tan
superficial como para no exigir, aunque sólo sea para expresarlo con palabras, una pureza y
hondura de espíritu mucho mayores de lo habitual, y en parte, pueden concernir a la relación de
este concepto con la totalidad de una concepción científica del mundo.
Se dice que el concepto de libertad es incompatible al sistema.
346-347: Dios no es un Dios de los muertos, sino de los vivos. No se puede comprender cómo el
más perfecto de todos los seres podría encontrar su deleite aun en la más perfecta de las
máquinas posibles. Sea cual sea el tipo de consecuencia que podamos concebir de los seres
respecto a Dios, en todo caso, no puede ser nunca de tipo mecánico, ningún mero producir o
disponer en el que lo producido no sea nada por sí mismo; tampoco puede ser emanación en la
que lo que mana permanezca lo mismo que aquello de donde ha emanado, esto es, nada propio ni
autónomo.
Dios sólo se puede revelar a sí mismo a partir de los seres humanos, de seres que actúan por sí
mismos, o sea que son libres. El fundamento de estos seres es Dios. La imaginación divina es la
causa de la especificación de los seres del mundo, le da sus creaciones una realidad real y no
meramente ideal.
347. Dios intuye las cosas en sí. Sólo lo eterno, lo que reposa sobre sí mismo, la voluntad, la
libertad, es en sí.
La inmanencia en dios y la libertad, no son conceptos contradictorios.
347. La inmanencia en Dios y la libertad se contradicen tan poco, que precisamente sólo el ser
libre, y hasta donde es libre, es en Dios, y el no libre, y hasta donde no es libre, es necesariamente
fuera de Dios.

You might also like