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Kyou Kara Maou

La novela en español, es cortesía de…

 Traductora: Bleedingcarnation y Dannita.

http://chibi-chibi-fansub.foroactivo.com/

La fuente original para esta traducción al español es la versión oficial Alemana de la novela de
Kyou Kara Maou, publicada por la editorial Carlsen Manga. Hemos notado que esta versión presenta
leves diferencias con respecto a la japonesa, párrafos cambiados o algunas cosas que parecen haber
suprimido debido a la adaptación. Aunque por el momento es la única fuente que tiene la traductora,
también nos ayudamos teniendo en cuenta fragmentos en ingles publicados vía Livejournal como
referencias. Al menos así intentamos no dejar pasar ningún detalle por alto. La intención esta, pero
siempre tengan en cuenta que las traducciones de traducciones suelen perder muchas cosas en el
camino.

Como fans de KKM! Tenemos que pensar en positivo, esto es mucho mejor que nada, que era lo que
había hasta hace poco. Así que, una reverencia por Carlsen Manga, Bleedingcarnation y Dannita, que
nos ofrecen material de esta excelente historia de Takabayashi. ¡Banzai! Visiten el foro por favor.

 Correctora (beta reader) y diseñadora: Megu Sagara y Petula petunia (en


correcciones finales).
Quien les escribe en estos momentos. Y también la encargada de las notas al pie aclaratorias y
los aspectos generales de lo que están leyendo. Como no sé ni una palabra de alemán para hacer lo más
importante aquí, ayudar a traducir, me encargue de todo lo demás. Aunque yo no pertenezco a ningún
fansub, scanlation o grupo en particular; como fan también tengo mi página para subir mis aportes al
fandom de KKM! Como doujinshis, fanfics, fanarts y de vez en cuando alguna cosa rara mas que se me
haya ocurrido. Siéntanse libres de visitar mi Livejournal si les interesa alguna de esas cosas, me tomo la
libertad de dejar el link de mi database personal:

http://megusagara.livejorunal.com

Por favor:
Les pedimos encarecidamente que si desean compartir nuestro trabajo no le quiten los
créditos; modifiquen, sustraigan o agreguen nada; o se adueñen de los derechos totales o
parciales de este trabajo. Si les es posible agregar los links a nuestras páginas siempre que
puedan ¡Se los agradeceremos aun más!
¡Disfruten sanamente esta traducción hecha por y para fans!
Contacto: Bleedingcarnation@hotmail.com y/o megu_sagara@live.com.ar
Kyou Kara Maou!

“De la noche a la mañana, el Maou”

Novela 3

“La flauta mágica”


Capítulo 2

— ¿Qué hace el niño perdido aquí? — se dirigió Lord Gwendal Von Voltaire a sus dos medios hermanos,
castigándome abiertamente delante de todos. Él tiene el pelo largo grisáceo y muy oscuro; sus ojos son
azules, con un dejo de mal humor siempre en ellos. Veo a Gwendal como el que nació para ser el Maou,
más digno que cualquier otra persona. Su voz profunda es escalofriante.

Me alegro de que no sea mi hermano mayor, de lo contrario ya hace años que me habría escapado de
casa. En este punto, tengo que quitarme el sombrero ante Wolfram. Él profesa sincero afecto hacia este
hombre.

— Majestad, estaría bien que explicara por qué tenemos que salvar a los prisioneros de Suveria. — dijo
Conrad feliz, él me estaba ayudando. Por desgracia, me había enganchado un pie en la silla de montar y
quedé colgado retorciéndome contra el vientre del caballo.

— ¡Ah! ¿En serio? — gruñó Gwendal. Al sur de la frontera él había estado esperando por nosotros.

— ¡Exactamente!— dije precipitadamente. — Ellos ya habían perdido las esperanzas acerca de mi doble.
Pero bueno, mala suerte, aparecí ante ustedes y no voy a permitir que lo ejecuten, ¿está bien?

— Conrad, ¿es esto una broma de mal gusto?

Con la ceja ligeramente levantada, Gwendal clavó la vista agudamente en sus hermanos, supongo que
por lo menos así es como debería poner la cara un guerrero.

— ¡Hazme el favor de conseguir que los dos se vayan a casa! —gruñó por último vez.

— ¡¿Qué?! ¡¿Yo también?! — exclamó Wolfram, indignado.

El hermano menor no parece encajar conmigo en la misma olla.

— Yo sólo obedezco órdenes de su Majestad. — dijo Conrad.

— Muy bien, ¡hagan lo que quieran! — gruñó Gwendal, y volvió su caballo hacia el rio que corría a lo
largo de la frontera. Los hombres de su tropa lo siguieron.

Tuve el honor de sentarme detrás de un joven increíblemente hermoso en el caballo y levanté mis ojos
1
hacia el cielo. Todos llevaban un traje como en Lawrence de Arabia , sábanas blancas para protegernos
del sol abrasador, ya que el viaje era a través de dunas de arena.

— ¡Inconcebible! ¡Usted podría sufrir un golpe de calor! — Günter me tenía agachado, tratando de
contener las lágrimas.

— Y no es sólo el calor. Hasta hace unos años Conashia estuvo en guerra civil. Debido a la brecha entre
ricos y pobres el alma de la gente es completamente vulgar, y la seguridad pública está en un estado

1
Lawrence de Arabia es una película muy famosa de los años 60, ganadora de 7 premios Oscar y 4 premios de La
Academia. Narra la historia de Tomas Edward Lawrence, un soldado inglés que durante la Segunda Guerra Mundial
fue enviado a Arabia, y allí ayuda a armar la rebelión contra los Turcos por la independencia. A lo que Yuuri se
refiere es a la típica vestimenta árabe con turbante y el cuerpo cubierto de túnicas.
miserable. Por otro lado, en estos últimos dos años se ha dado una sequia sin precedentes, las peleas
por los alimentos se dan en todos lados. ¡Por favor quédese aquí, Majestad! ¡Gwendal se hará cargo de
la flauta mágica! En su lugar, vaya conmigo, su fiel Günter, a la playa para disfrutar del verano.

Pero finalmente lo logré y lo convencí que me dejara ir.

En cuanto a este último viaje, me había teñido el cabello y usado lentes de contactos de color para
ocultar el negro al igual que la anterior vez.

Habíamos llegado al borde de un río marchito, que separaba el gran imperio de Mazoku del país de
Conashia, y le haría el honor al nombre “record en sequia”. El agrietado lecho del río tenía como un
2
kilómetro de ancho. No hay comparación con el río Tone cerca de mi casa...

— Lo que falta es agua — dije yo.

— Durante la Guerra Civil, las pilas de cadáveres deberían haber sido arrastradas por el agua a tierra.
Pero como los humanos están asustados de poner un pie en nuestros territorios, hubo algunos
problemas, así que nadie venía a recoger a los muertos. — explicó Wolfram.

Cuando cruzamos el lecho del río, llegamos a una simple cerca de estacas. Allí habían soldados, su
número al rodearnos era considerablemente mayor al nuestro.

Era comprensible que las fronteras estuvieran bien resguardadas, pero ya que los mazokus todavía no
habían invadido Suveria, encontré el comportamiento hostil un poco exagerado. Las lanzas de los
soldados apuntaban sin duda hacia nosotros. Algunos en las filas de la parte trasera apretaban el dorso
de su mano contra sus barbillas.

— ¿Qué hacen? — me pregunté.

Wolfram chasqueó la lengua. — Un gesto malicioso contra los demonios. Aunque los humanos en
realidad casi se hacen en los pantalones por miedo, se vuelven insolentes en cuanto se sienten fuertes
en grupo. ¡Criaturas desagradables!

— No todos los humanos son así. — murmuré.

— ¡Deja de sentirte aludido! ¡Tú no eres humano sino un mazoku! ¡Entiéndelo de una vez!

Al sur del gran imperio de los mazokus se situaba Karbelnikoff. El área era una zona de recreación,
famosa por sus playas de arena blanca y clima seco. Muchos turistas de las regiones del norte del gran
imperio saciaban aquí sus necesidades de sol.

2
El río Tone es el más ancho de Japón (16.840 km²), y el segundo más largo de ese país con 322 km de longitud.
Al otro lado del río, Conashia había sufrido graves pérdidas en la agricultura debido a la sequía. Pero
para Karbelnikoff, cuya principal fuente de ingresos era el turismo, el lema era: Más sol, más clientes.

En la villa vacacional del Maou se encontraba Lord Günter Von Christ completamente agotado, como si
el calor también hubiera acabado con él.

— Se ha marchado. — suspiró.

El cabello color gris hielo que caía desordenadamente sobre la espalda había perdido su brillo, y los ojos
violetas se veían desolados y vacíos. Con un mechón perdido pegado a su mejilla, la figura trágica de
Günter parecía la vista de un ama de casa agotada después de entregarse a la limpieza. Él miraba
ausentemente a través de la ventana abierta hacia el cielo y el mar.

— ¿Por qué Su Majestad me dejó atrás aquí solo? ¿Acaso al fin y al cabo odia a su fiel Günter?

— Eso es completamente posible.

Sobresaltado, Lord von Christ levantó la cabeza.

Ante él estaba el cuerpo de una mujer, rebosante de exuberancia, envuelto en un apretado vestido de
verano, ¿o tal vez era solo un traje de baño?

Los rizos dorados que llegaban a la cadera estaban atados y revelaban generosamente al aire de verano
una erótica línea cervical. Una vez uno se abstenía de ésta vista tan deslumbrantemente sexy, los labios
de sonrisa inocente, la piel blanca, los ojos verde esmeralda y las largas pestañas recordaban a los de su
hijo más joven.

Aunque no parecía tener más de treinta años, en realidad ella había vivido más que las hermanas Kin y
3
Gin , la pareja de gemelas más longevas en Japón.

Lady Cecilie von Spitzberg era la madre de los tres hermanos demonios más singular de todos los
tiempos y la antigua reina regente. No solo en asuntos de Sex-appeal era ella la reina. Madame Cheri era
una genuina reina certificada.

— ¡Su Antigua Real Majestad! ¡Tan atrevido atuendo…!

— ¿Que dices en contra mía, mi querido Gunter? Al final, nuestro rey debería haber estado presente. Si
hubiera anticipado que solo te iba a encontrar a ti, hubiera mantenido mis muslos cubiertos.

— Madame Cheri, le pido humildemente que se abstenga de estos constantes intentos de seducción a
su Majestad.

— Pero Günter, tú mismo sin embargo quedas rendido con solo el olor de la ropa de su Majestad.

— B... Bueno, eso es...

Madame Cheri arrebató de Lord Von Christ una camiseta en la que él había apoyado los brazos.

— Es muy maleducado de tu parte quedarte con todos los premios para ti.

Ella sostuvo la tela de algodón húmeda y la olfateó.

3
Kin Narita y Gin Kanie, fueron las gemelas más longevas, las cuales vivieron 107 años. Sus nombres significa ‘Oro y
Plata’ respectivamente.
— ¿Realmente es este el olor de su majestad? ¿No te sorprende Günter? Él es sin embargo una persona
pulcra.

— Su olor es justamente como corresponde a un hombre joven. Un distintivo aroma de… ¿cómo
decirlo?... aire marino.

Delfín... Seguro pensó más probablemente.

Desde la caliente silla de montar,


Gotea el sudor.
No es solo el sol.
Un caballo, dos cuerpos…muy juntos.

No, las rimas tampoco ayudaban mucho contra el calor.


Estábamos en el medio del desierto, sin destino reconocible a la vista.

Traté de que mi cuerpo se alejara lo más que pude de la persona frente a mí para dejar pasar algo de
brisa entre nosotros. Sin embargo, en el ambiente solo había aire caliente, no existía nada que
realmente pudiera llamarse viento.

— Si te deslizas aún más hacia atrás, te vas a caer. — Me advirtió Wolfram.

— ¡Me muero de calor! — me quejé.

Wolfram obviamente disfrutaba de esta situación.

Sí, gracias. Muy divertido. Si tan solo hubiera sido una chica la que se sentara delante de mí, entonces yo
también hubiera tenido mi diversión.

Esta interminable región color siena supuestamente no era tan grande como un verdadero desierto.
4
Nacido en Boston y habiendo crecido en Saitama , no tenía noción
de cuál era la diferencia entre un desierto y dunas de arena.
5
Y en Tottori , en ese mini desierto, tampoco había estado nunca.

Gwendal cabalgaba a distancia frente a nosotros. Su espalda ondulaba en el aire brilloso como las algas
marinas en un lago. Me volteé lamentándome hacia Conrad.

4
Boston está ubicada en la costa Este de Estados Unidos, una de las ciudades más antiguas del país, y al día de hoy
una de las más pobladas, y con alta calidad de vida en el mundo. En cuanto a Saitama es una prefectura de Japón
ubicada al Norte de Tokyo, más o menos en el centro del país.

5
Tottori es otra prefectura de Japón, es la menos poblada del país y se ubica hacia el sudoeste. El pequeño desierto
que nombra Yuuri se trata de un sistema arenoso desértico de 2km de ancho por 16 de largo, que cuenta hasta con
un pequeño oasis en medio.
— Maldición, ¿por qué solo soy yo el que tiene tanto calor?

— Probablemente sea debido a nuestro entrenamiento. — Contestó Conrad con apariencia


excesivamente fresca y relajada.

Ni siquiera transpiraba apropiadamente.

Eso podía ser así naturalmente. Al final, todo era más fácil para soldados bien entrenados, estaba
asumido que ellos asistían diariamente a duros entrenamientos bajo el control de un diabólico sargento.

Como las fuerzas armadas de autodefensa japonesas. Ellos presumiblemente vagaron a través de
bosques y montañas, atravesaron pantanos y construyeron iglús en la nieve. Tal vez incluso saltaban
todos los días en bosques donde los arboles nacen súbitamente del suelo esquivándolos. Pero esto era
más bien un componente de una formación Ninja.

En todo caso, de todos los viajeros, yo era el único al cual el calor estaba matando. Y luego incluso me
vinieron alucinaciones.

— ¿Ustedes también ven por allá un pequeño animal en el medio de la arena que levanta los brazos?”

— ¿Qué? ¿Dónde? ¿Cuál pequeño animal? No puedo ver nada. — dijo Wolfram.

En un hoyo unos diez metros más allá, salía la cabeza de un animal no desconocido para mí. Pero que sin
embargo uno no se espera encontrar en el medio del desierto.

Un soldado con su caballo marrón oscuro desapareció justo delante de mi nariz. El caballo gris sobre el
que Wolfram y yo íbamos de pronto se flexionó, perdió el equilibrio y se hundió.

— Maldición, ¡¿qué está pasando ahora?! — exclamé.

— ¡Un oso de arena!

¡¿Un oso de arena?! Todo se volvió borroso alrededor mío, el mundo cambió completamente a color
ocre. Cascos, o la parte de un antebrazo, aparecían aquí y allá en mi campo de visión. Nos hundimos
más y más profundamente en la arena suave, no había escape, estábamos siendo completamente
absorbidos.

— ¡¿Qu... qué sucede?! ¡¿Qué puede ser esto?!

Cuando abrí mi boca conseguí que la arena se metiera entre mis dientes. Intenté sujetar a Wolfram por
el extremo de sus ropas, pero sus brazos, piernas, manos y también su cara desaparecieron. Yo apenas
pude escapar.

¡¿Qué especie animal podía ser esta?! En mis pupilas, que se volvían borrosas, se reflejaba un enorme
panda de dos tonos, que en el centro del remolino movía sus brazos hacia arriba y hacia abajo.

— ¡Eso es un jodido panda! — grité.

Un panda en verano, en el desierto. Con una nueva variación de color, su pelaje era beige y marrón.
¿Dónde dejó su bambú?

De pronto alguien me agarró firmemente del brazo.

— Conra...
No, no podía ser Conrad. Mi indestructible protector aguantaba mis piernas desde abajo con sus
hombros.

Cuando alcé la cabeza, vi que Gwendal apenas se sostenía sobre el borde del hoyo. Wolfram y los otros
soldados fueron arrastrados por la succión. Yo reconocí solo unas cuantas piernas de caballo y manos
que no podía asignar a nadie. La espiral descendía en el centro del remolino.

— ¡¿Qué pasa con Wolfram?! ¡Se ha caído delante mío en la arena! Pero él no va a morir ¡¿Verdad?! —
exclame y lloriqueé gritando.

— Si tiene mala suerte… — dijo Gwendal por encima mío.

— No se preocupe, mientras no se sofoque intentará encontrar una salida a la superficie. — me


tranquilizó Conrad. — ¡Majestad, suba rápido!

— ¡Pero tenemos que volver atrás a ayudarlo! ¡Tampoco sabemos si es que tendrá una oportunidad
contra ese oso! — intenté protestar.

Traté de deslizarme por la pendiente, pero Gwendal no me dejó ir, sosteniendo mi brazo.

— ¡Tú no puedes ayudarlo! — me reprochó.

— ¡Pero no puedo simplemente abandonarlo! ¡Entonces sálvalo tú por lo menos, él es tu hermano!

Me volví hacia Conrad. — Oye, ¿tú puedes acabar con estos osos? ¡Tú eres un maestro de la espada!

— La Prioridad principal en este momento es su seguridad. — alcanzó a jadear, aún tratando de


empujarme hacia arriba.

— Pero yo estoy bien, así que...

— ¡Nada está bien!

Durante una fracción de segundo me miró severamente con sus ojos marrones con motas de plata.
Conrad se mordió los labios, juntó las cejas con la cicatriz apenas perceptible y habló con voz
atormentada.

— Majestad, Wolfram estaría de acuerdo conmigo inmediatamente. El es también un guerrero adulto y


sabe que cosas como estas pueden suceder. ¡Su seguridad es primero!

¡Qué tonterías! Veinte vidas pesan sin duda con toda claridad más que una. Incluso si concierne también
a mi vida. Nadie debería ser sacrificado, ¡ni siquiera por un rey!

— Conrad, yo no podría soportar si dejaras a tu propio hermano abandonado. — dije al final.

— Majestad... debemos irnos inmediatamente de aquí. En cualquier momento todo puede colapsar.

Llegué hasta arriba y entré en terreno seguro. Bajo mis pies la arena, finalmente, se sentía firme y
accesible. Me volteé hacia Conrad:

—Tú has dicho que actuabas según mis órdenes. — le dije.

— Si, pero eso era...

— Entonces te ordeno que salves a Wolfram. ¡Por favor! Yo estoy bien, no hay razón para preocuparse.
Después de todo yo todavía tengo un fuerte guardián aquí.
Conrad se veía sorprendido y nos miraba alternativamente a Gwendal y a mí.

— ¿Una orden? — Murmuró él asegurándose. — Muy bien. ¡Pero tú cuida de él!

— Mhmmm. — gruñó Gwendal.

El estaba parado detrás de mí así que no pude ver su cara, pero me pareció como si hubiera oído un
poco de alivio en su voz. En mí creció la confianza de que mi decisión no podía haber estado equivocada.

Conrad se deslizo hacia abajo por la pendiente resbaladiza.

— ¡¿Sabes cómo encontrar el túnel oculto de esa bestia?! — Gritó Gwendal después.

— No hay de qué preocuparse, ¡esta es la tercera vez que tengo que vérmelas con un oso de arena!
¡Nos vemos en la capital!

Sí, mi decisión fue la correcta. Al menos eso pensé.

Continuara…

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