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ADVIENTO
1. Ayunar en Adviento
Incluso si las cuatro semanas previas a la Navidad tienen un carcter ms
alegre que la penitencia previa a la Pascua, nosotros debemos esperar hasta
el cumpleaos de Jess para celebrar en la cena navidea.
No solo es un sacrificio que tiene valor espiritual, pero s uno que genera ms
gusto y expectativa a la Navidad.
5. Visitar a Jess
La Navidad no es de Santa Claus, sino del pequeo nio en el pesebre. Aqu
es el Hijo de Dios quien nos alimenta verdaderamente, tan pequeo y, que sin
pretensiones, est presente en todos los tabernculos.
La Navidad es la celebracin del "pan vivo" que ha llegado del cielo como
nuestro alimento. Beln significa "casa del pan".
Todos los das se puede visitar la iglesia aunque sea solo unos minutos. Asistir
a Misa es una forma de devocin.
6. Confesarse
Jess nace en un establo, en pobreza y modestia, lejos del bullicio de los
albergues. Sin embargo ciertamente San Jos tuvo que remover las telaraas y
la suciedad alrededor; mientras que Nuestra Seora desempaquet ropa de
cama limpia para preparar un buen lugar al recin nacido. Por encima de todo,
tenan un corazn lleno de amor puro.
Sin confesin no hay una buena Navidad para los catlicos. La paja vieja o
podrida debe ser barrida del corazn; otras veces limpiar el polvo es suficiente,
pero Jess siempre quiere encontrar una morada donde pueda reposar.
7. Devocin a Mara
Sin Mara no existira Jess. Sin Mara no podramos celebrar la Navidad
porque el Hijo de Dios no se habra convertido en hombre. Por lo tanto, el
camino a Beln es el de la madre de Jess, que es nuestro tambin.
Todos los das se debe rezar el Rosario. Debemos orar a la Virgen Mara todos
los das de Adviento para recibir a Jess y no solo en la vspera de Navidad.
Tambin debemos orar por la maternidad de todas las mujeres que esperan o
han perdido un hijo en esos das.
Es menester dirigirnos a nuestra Madre, a quien le pedimos su intercesin en
nuestras necesidades, para darle gracias por su s en Nazareth, por el cuidado
y la crianza de Jess, por su ayuda maternal a l y a nosotros, por su lealtad a
la Cruz.
Podemos obsequiarle flores, una oracin especial o una pequea peregrinacin
una iglesia. Tambin, podemos darle todos los das una nueva alegra, quiz
reconcilindonos con antiguos enemigos, renunciado a malos hbitos u
ofreciendo nuestro trabajo por ms difcil que sea.
Por qu todo esto? Solo para hacerla feliz. Para darle algo a cambio del mejor
regalo de todos: Jess!