‘Traduccién de Marit Caso DAVID HARVEY LOS LIMITES DEL CAPITALISMO Y LA TEORIA MARXISTA f FONDO DE CULTURA ECONOMICA MEXICOFINANCIERO Y SUS CONTRADICCIONES do —sobre el capital y os trabajadores, aunque generalmente ‘ho mas devastadores sobre estos rss abarean Ia eatructara legal ae jucién depende cada ver mas del de ciedad capitalista, y su sol del capitalismo, ya se nas y perspectivas para la transiciOn al socialismo cambian dramética sicado atin mas duro cuando desechamos la su pe eee mos los aspectos internacionales de la ido — y las complejas relacic leserivuelven a medida que los estados ri * pone diferentes stemas m0 : de Ja devaluacion. La h oe ae ean excedents, te, se converte ional. Los costos de la crisis se difunden 1 poder financiero, econdmi la capacidad produc tuna de las soluciones poten: XI, LA TEORIA DE LA RENTA un “anilisis cientifico de Ja renta del suel ica, independiente, de la propiedad terri Ja “forma econdmica espec eretetecd- Iced a, odo adi 3 382), No obstante uses cue publica poxumamente pach que no ceden confusion y una controversia inmensa y continuada sas que han tratado de encontrar su camino a través del campo minado de su escritos sobre este tema. La renta, en el analisis final, es simplemente un page hecho a los terratenien tes por el derecho a usar la tierra y sus accesorios (los recursos incrustados en su interior, los edificios colocados sobre ella, etc.) La tierra, concebida en estes tido muy amplio, evidentemente tiene un valor de uso y un valor de cat -Puede tener también entonces un. es asf, zcmo se puede reconcil existencia de ese valor con las teorfas del valor que descansan en el tiempo de trabaj‘TEORIADELA RENTA oi ca Ue gt chase ete pen eee aE Beate aiaeeseaneets tect otal ree Cana buscar respuestas a esta pregunta, pero no pudo encontrar la forma de supeaz fa, y estaba muy $n del capital a interés no produce valor | pefo ayuda a coordinar la produecién de plusvalia (con todas sus yet recone ead ele Ss peledac ome caine eta ole ra, Empero, ese 8 de Marx, y éste parece ss superfluos y par fo, como consunidoresy va. ZEn dénde se podia colocar Marx Viamente no queria ponerse en el campo de de Ricardo sin parecer que teorce para in apropiacion condmuada Je teproducin tal de ana cae diva de propitaror de dra. Marx considers la propiedad de i aapeco,e ii TEORIA DE LARENTA 335 a conclusin de que la renta acazrea algo més que una simple rior o detras de ella existe algun tipo d incluso desde el punto ismo régimen capitalista de produccién” (El capital, II, p. 580). Detras del ambiguo verbo “aparece” esté Ia idea més afirmativa de que podrfa serlo realmente, y esta opinién cobra fuerza a medida que Marx va construyendo ss argumento, Sila relaci6n de clase dominante es la que existe entre el capi el wabaj 8 i we que ‘que ha capturado con una terce aa, son slo de importancia secundaria” (Teorias sobre es atin mds sorprendente, qi terratenientes, forman las tres grandes clases de ‘mo pensamiento esta expuesto en el capitulo Lil, “Clases”, que Engels colocé final de El capital, Parece sumamente extraiio que nos diga, al final de una obra que ha construido una interpretacion de la dinamica del capitalismo sobre la ba- se entre el capital y el trabajo, que en realidad las tres tuyen la “sociedad moderna”. la propiedad en tierras “producir valor” no es una fuente de valor? y ccudl es Ja exacta posicion de clase de los terratenientes dentro de un modo de produc- i ista despojado de todos s les poco imporcantes que deforman GEs que la renta pone a los terratenientes en contra de los eapitalis- tas, de los trabajadores 0 de ambos? En pocas palabras, dla apropiacién de la renta trae consigo la explotacién de qui La respuesta a estas preguntas son tai el mundo de las apariencias parece =latierra, los trabajadores y el c gue los hacen la fuente de val: bilidad e ironia al eratar sobre est gEn qué seni cuando la propia tierra, por defi d rar porque en diversos factores de la produccién ieran dotados de poderes magicos como podrfa esperarse, muestra gran ha sas fetichistas (Teorias sobre la plusvalia, ¥ Rey (1978, p. 24) planta el problema en esta forma336 ‘THORIADELA RENTA No obstante, también leniamente a gusto, cO- mo en su casa, i —" ferra-renta del suelo, trabajo-salarios, pues son precisamente las form: ‘apariencia en que ellos se mueven y con la que conviven diariamente”. Los productores individuales se pueden dar el Iujo de preocuparse Gnicamente de {ue su ganancia sobrepase a lo que pagan en salarios, interés, renta y capital Til, pp. 768-772). La renta que pagan es suficientemente 'y su respuesta a lo que de hecho puede ser una clasificacién ferichista js suficrentemente Fales que hay que tomar en cuenta, Armados com I va de la propia tcoria del valor. Es Me ope del problnapor tapas, comers sits, Pode pencarse que este es un punco de partida Pereigpor doc enende bien que ls cualdades ma topes weal, Luegoexaminar€ el papel de a propiedad se capitation, a hn de trata dekdentfcar la forma ver: as primeras dos secciones sent rin me eta a io de la propiedad t jo el modo de produccibn ex Recta ditrbucionales que surgen entre el capi sec inal considers I propiedad Sera en oe mercados de errs, yt eign a la exsencia de Ia renta de la general, 1. EL VALOR DE USO DE LA TIERRA : . p. 424). En estado virgen, la tierra es “el objeto general se er tay tte rns oe eee ae oo ne area ae ‘TEORIA DE LA RENTA planeta como esferas privativas de su voluntad privada con exclusién de todos demas” (EI capital, 1, p. 574). Puesto que la tierra es monopolizable y en: nable, se puede rentar 0 vender como mercancia. Bajo ciertas circunstancias, derechos de propiedad privada son dificiles de establecer, como por ejemplo, aire, el agua en movimiento y los peces que nadan en ella, No consideraremo aqui ese tipo de problemas, La propia tierra es, asimismo, un bien no reproducible. Por contraste, algu 1nos (pero no todos) valores de uso cristalizados en ella no sélo son reproducible sino que se les puede crear a través de la produccién de mercancias (fabricas, di ques, casas, tiendas, etc.). La calidad de la tierra en un estado apropiado par ciertos tipos de actividad humana se puede modificar por medio de de valores de uso en el ambiente construido, pero la cantidad sobre la superficie del globo no se puede aumentar o disminuir en forma si cativa por la accion de los seres humanos (aunque la tierra que se le roba al mai puede ser importante localmente). de estos puntos muy gens sutiles, por ejemplo, la di centre los valores de uso totalmente “naturales” y los creados por la accién - 8€l uso activo de Ja tierra para la produccion y la extraccién en comparacién con la tierra que se usa simplemente como espacio (El capital, II1, pp. 717-718). Marx argumenta que la propiedad territorial “demanda su tributo” en todos esos sentidos, pero como tenemos que comenzar por alguna parte, comenzaremos con la ‘nos encontrames a) La tierra como la base para la reproduccién y la extraccién Los valores de uso que contiene la tierra se puede extraer (como los minerales), se pueden movilizar en la produccién como “fuerzas de la naturaleza" (por ejemplo, la energia del viento y del agua), 0 usarse como bas cién continuada (como en la agricultura y la ingenierfa forestal). En los primeros ar los valores de uso como condiciones 0 elementos de tura es algo especial. La tierra no s6lo proporcis aguf wna reserva de sustancias nutritivas que se han i en diversas materias primas por reproduccién de los animales, sino que tam! © medio de produccién. El proceso de produc dentro de la propia tierra.>‘TEORIADELA RENTA, Ja tierra no estan sometidas a Ia de son del equipo antiguo. Las mejoras aaa oe ee evama forma, La terra, "see le ata de un modo adecuado, faamente”(p: 724), Por tant, las Greunatancias que detent a oa asc a err noson comparables con las que einan cals Seana (pr. 752-1 we segunda pe manente de un ote de ad surge porque la mejor per . en renee Pee gaia que hay que creat lay “culidades que pote Cer ere irra on our lugar’ El capital, IT, p. 682), El capital era en TaNMfar ims condiciones de produceion que son donc gr ono pute liner es el smeres be ently Tent 1 ace Figo Boron hava que se amoral inversin, ciando¢ 5 ne wwierte en un bien fe pe S5SFfovna auenta i ent,” Sobre exis Des, Mar refura L Featdo te quel renta coun pag por las fuerza originales Bicarge oe ae car furzas an producto de ia historia tanto como de la na vuraleza srico por medio el eual la economia polica (de cualquier iat problema de la organi acion expacia ‘ona una base para diversas Como veremos posteriormente, Prop ol socal tbre la organizacion expacal ye desarrollo del capita saa nau arta sve no so como un medio de prod Sonne eae aan“ sentro lo¢ no también como una "base, como sto, como c ihacio er un elemento necesario en toda produccion y apa, MH, p. 117-718, 72 yas que vienen meron, gu cased ‘omer Ine tagonismos entre os ategonis epacials, como TEORIA DE LA RENTA a fa mano si regres: los con *gresamos a los conceptos basics del valor de uso, el v bio y el val Un valor de uso, recordemos, “no es una cosa d por las “propiedades fisicas ubicaciOn, situaci6n, forma, ta Irn de cl et fain, eo no aden eo social de los valores duro bajo el captasmo seeped tercambio y de la formacién de valores. a , entonees, que las mercancfas “tienen que ser traidas al mercado’ -rcambio (aunque el intercambio de ar), y que esto eventualmente abarca un {kimo es esencial para la formacién de los ‘cambio se vuelve general y se perfecciona, Pe con todas las restrieciones en cuanto Po. de los precios refleja las condiciones de produecién en diversas ul diferentes condiciones de trabajo conereto. El proceso de intercam! Palabras, se sustrae perpetuamente de los datos especificos de ubicaci de la formacion dé precios. Esto prepara el cambio para conceptualizar los libres de lugar. El trabajo abstracto eristalizado en determi nadas ubicaciones bajo c tomado a trav yudiera hacer a un ‘con seguridad, pero la acumulacién, despojada de su punto de re- ‘en valores de uso y dinero, s6lo se podrfa representar en forma El ¢je sobre el cual gira siempre el andlisis, como vimos relacién entre ida tertitorial confiere poder exclusive a las personas privadas ones del planeta. Esto trae consigo una conce} del espacio, una de cuyas propiedades mas importantes es un principio de indivi. dualizaciOn establecido por medio de la exclusividad de ocupacion de cierta por. (pemanccendo constant Tatas, iar las coments fara de aliments pretioe dela eta de pr pi fren la der aes pte gu nse a G21 822), El cements epeclavo sempre end prom sctie de dees tn npetneia de eg te aba que cabietcer ane ee ee era epecniacn ee nce. eee pelea abiogae Los cambios previstos en las rent ly al trabajo fucuro, afect ro, Is ganancia qua se obtiae Pa stung salen de as ubidas de tears, la casa, ese jee ra EL cai, HL, pp. 718-720, Th, p. 238) de lo expecladores dela construc ‘0, nen terrence no omen de ninguna manera tn acid paiva espe permiten apropiarse de clon del rabaj eu presen ye Marx aparentementecrey6. Al fre, le duefion de Uerras pueden on sobre Ia terra, ¢ incluso forza i Tir nuevas configuraciones aa produccin en a Bruen de plvala cua eels y'con ws iteidad que is 0 nen olfa forma, Claro ext que al hacerlo conden ao fara ‘ fn en nombre dela propia opera sabre Ta er ‘THORIA DE LARENTA a ortantes de coordinaci6n y ast legitima y justifica I Gentro de la logica global del modo de produccién capitalist La cireulaci6n del capital a interés a través de los mercados de tierras coordina ¢l uso de la tierra con la produccién de plusvalia en la misma forma en que ay {2.2 coordinar las asignaciones de fuerza de trabajo ya igualar la tasa de ganan- través de diferentes Iineas de produccién en general. Las peculiatidedes de tra afladen algunas nuevas a este proceso. En la prictica se necesita poco para obligar a los capitalistas a remunciar a las ventajasrelativamente per. manentes (de fertilidad o situaci6n) que disfrutan en determinado lote de tierra mente si ¢n prevision de la produecién de plusvaliafutura. Los duefios de tierras qui fratan como un bien financiero puro realizan exactamente una tarea de est Po. Coaccionan al capital (elevando las rentas, por ejemplo) o cooperan con él in de rentas mas altas d alianza activista entre el terr tas incrementadas pesan mucho ‘mis que la ganancia que se puede obtener de la inversion directa Al esforzarse perpetuamente por dar a la ticrra su “uso mas alto y mejor”, los duefios de tierras crean un mecanismno de seleccién que escoge los usos i 9, Cosa que quiz no ocurriria de fambien inyectan al uso de la tierra una tierras y més se ajustaré el uso de caso, la acumulacién de capi ‘Ahora podemos crazar un circulo completo con el papel de los terratenientesy 4s apropiacin de la renta bajo el capitalismo, La apropiacién de la renta ne colo ‘ socialmente necesaria, sino que ls terratenientes deben necesariamente tomas os ‘as. No hay nada incongruente en se trate a la renta simplemente icticio abierto a todos los inver- ‘onus. Cuanto ms libre esté el capital a interés para vagabundear por la pears ic busca de titulos que adquirr sobre futuras rentas dela terra, mor podra lenar su papel coordinador Al mismo tiempo, cuanto mas abierto esté el mercado de tierras, el ca * Lamarche dor desde una perspec a una dels mejores exposicionestedrcas de papela ‘TEORIADELA RENTA dinero excedente podra construir pirdmides de titulos de deudas con mis temeridad J tratar de realizar ous esperanzas exageradas por medio del pillaje y la destruc, tigm de Ta propia tierra. La inversién en apropiacion, tan necesaria para ¢l Gevempeno de estas funciones coordinadoras, es aqui, como en otras partes, “ fuente de toda clase de tActicas poco cuerdas” y la fuente de distorsiones pote Cialmente graves. La especulacién en tierras puede ser necesaria para el capita: Tismo, pero las orgias especulativas se convierten peri6dicamente en fuente de destruceién para el propio cay El significado de extos poderes de coordinacién, junto con sus consecuencias negativas, son particularmente evidentes cuando se llega al problema de la organi- zacién espacial, un t6pico que Marx también suele excluir de su campo de accion teorico, excepto como un interés periférico, El mercado de tierras da forma a la SsignaciOn de capital a la tierra y asf da forma a la estructura geogréfica de la produecion, intercambio y consumo, la divisién técnica del trabajo en el espa- Go, los espacios socioeconbmicos de reproducci6n, etc. Los precios de la tierra forman senalcs a las cuales pueden responder diversos agentes econdmicos. Bl mercado de tierras es una fuerza poderosa que sirve para racionalizar las estruc- tras geogrdficas en relaci6n con la competencia. ‘Los ducfios de tierras desempefian ademas un papel activo en el proceso de cestracturacién y reestructuracién geogréfica, siempre y cuando, naturalmente, traten a la tierra como un bien financiero puro. Consideremos las relaciones de transportacion, El estimulo para revolucionarlas surge de la necesidad de dismi- nnuir el tiempo de circulacién de las mercancfas, de extender geograficamente los mercados ¥ asf hacer posible que resulten mas baratas las materias primas, “ampliando la base dela realizacién al mismo tiempo que se acelera el tiempo de fotsci6n del capital. Sila renta depende de la ubicaci6n relativa, y la ubicacién ‘elativa se debe transformar con los adelantos en el transporte, entonces la inver~ sign en transportes est4 destinads proximas a él, Los duefios de tierras estan destinados a gar Piuerdo con esto. Tienen fuertes intereses creados respecto al lugar y al momen to de la inversién en transporte, Incluso pueden estar dispuestos a promoverlo con una pérdida (preferiblemente usando el dinero de otras personas 0 por medio Gel Estado) a fin de beneficiarse con rentas mis altas. Los terratenientes ingleses aprendieron este truco desde hace mucho tiempo y ha seguido siendo una faceta ‘basica del capitalismo desde entonces. ‘Los duefios de tierras generalmente se ven empujados a competir por oa ppauta particular de desarrollo, ese manojo particular de inversiones y actividades, ue tiene mas probabilidades de incrementar las rentas futuras. La forma dela ‘pauta geografica del uso de la tierra de acuerdo con la competencia depende de Ta competencia entre los terratenientes por rentas més altas. Las coordinaciones que se vuelven posibles por Ia existencia de mercados ysefales de precios son, en este aspecto, de vital importancia. ‘sin embargo, el cardcter andrquico de esa competencia puede tener fuertes rencias negativas. Los capitalstas excedentes sc pueden poner a trabajar con a Tos terratenientes individuales, actuando segén su egofsmo inme- diato y tratando de llevar al méximo la renta de la tierra que se pueden apro- ‘TEORIA DE LA RENTA piar, pueden obligar a que se asign al terra un tipo de inversion qu {envio deel punto de ita des requeimientosglobalee dela acum ‘Seta version dentro de las eras delat fuereas que crea el ral bajo el c 10 (véase el cay the tas pariculares que sorgen de las nteractiones comple Enras aveguran que ningga eae de los planes que elo incohe : jerencia y orgias periddicas de especulacion, que obligan al trab: ‘entrar dentro de configuraciones insostenibles (desde el punto de jo. del capital o de ambos). El problema esta en imp ‘mo tiempo que se preserva el mercado de tierras como ui dor basico. Incas de defensa en eas stuaciones el monopot control estatal. Ninguna de las dos soluciones esta libre de contr =i El monopolio del proceso de desarrollo de fs gran ecala de propiedad teritoraies permite un proces coherent de desa fn que los diversosefecos dnergistico de ls inversion wentajosamente, Inidentalmente tar alos dueios de eras con dad de que se apropie de mn general es adver para ta parcialmente esta tendencia actuando por sa cu structura el mercadc oe capital 2 interés. El problema con esta sol pit a m esta solucién es que, aunque los mercad tars pueden tar mejor coortnads, pueden queda exposes mas ‘odos los problemas inherentes del propi nt a todos los problemas inl propio sistema de crédito. ra iulnes final de dfesn eel Eado, que pordeadoptnr divert poder y, finalmente, estructuras geografic: amente el uso de I capval 1, p. 618)‘TEORIADELA RENTA ponga en tela de juicio toda la validez de los derechos de propiedad sobre los me. dios de producci6n en general as{ como sobre la tierra. El capitalismo no puede desenvolverse sin precios para la tierra y sin mercados de éstas como mecanismos coordinadores basicos en la asignaci6n de sus usos. Se puede esforzar meramente en restringir sus operaciones para hacerlos menos in- ‘coherentes y menos vulnerables Jérdenes especulativos de esta conclusion nopolio de la propiedad privada t y la capacidad de apropiacién de las rentas que le confiere exe poder. Tanto la renta como la propiedad privada terri- torial son socialmente necesarias para la permanencia del capitalismo. La necesidad de la reproduccién social de la propiedad de tierras y de la apropiacién de la renta han quedado definidas plenamente. Las preguntas con que comenzamos este capitulo han quedado bien resueltas. Este argumento requiere una advertencia importante. Sélo sirve aquella pro- piedad territorial que las trata como un bien financiero puro. Todas las dems formas de propiedad territorial deben hacerse a un lado. La tierra debe convertir- se en una forma de capital ficticio y tratarse como un campo abierto a la circula- ley del valor y la existencia de la renta sobre la tierra. Es @ la investigacién historica a quien le corresponde averiguar hasta donde han Ile _gado las formaciones sociales capitalistas por ese camino. Es indiscutible que la ley del valor bajo el modo de produccién capitalista provoca ese proceso de transformacién, ‘La segunda jon es que el precio de a tierra capta simulténeamente el cardcter temporal de la acumulaci6n (registrada por movimientos en la taxa de interés) y el cardcter especifico de los valores de uso materiales distribuidos en el espacio y, por tanto, une las consideraciones temporales y espaciales dentro de tuna sola estructura definida por la ley del valor. Empero, no hace todo esto en una forma pasiva o neutral. El precio de la tierra se debe realizar a través de la apro- piacién de la renta futura, que descansa sobre el trabajo futuro, Por ago que da el capital por el precio de la tierra condena al trabajo a uy expecificas en determinadas ubicaciones a través de 0 de tiempo fi- a de interés, para que no se devalie el capi ra. Aqui vemos una ver més cémo restringe al trabajo vivo la or. de tierras del capital a interés desempeia un papel andlogo al del capi fen general. Indica los caminos por los que se ubica Ja acumulacién fatura, y actéa como un catalizador que reorganiza la configu- ide la acumulacién de acuerdo con los imperativos fundamentales . El hecho de que algunas veces presiona demasiado (mas de lo que 1eden soportar el capital o los trabajadores) o en direcciones erréneas (por las sions que surgen inevitablemente cuando la circulacién de ca alos privilegios de monopolio que van ligados a la propiedad privada de tierras) simplemente establece que el mercado de tierras necesariamente absorbe todas las contradicciones fundamentales del modo de produccién capitalis- ‘THORIA DE LA RENTA Bee ee ee : eet pense Ae Sl ae elena geeeetlea ete Gar reer Seecus eo ease