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TECNICA Y ARQUITECTURA en la ciudad contemporanea Meret bi) ee A aoa ustracién de cubierta:Torre Mixta en la bahia de Algeciras (1999), Abalos & Herreros 3* edicion: 2000 © Waki Abalos y juan Herreros, 1992 © Editorial Nerea, 1992 Juan de Laborda,° 2 20280 Hondarribia (Guipazcoa) Tel: 943 64 57 43 Fax: 943 64 60 27 nerea@nerea net Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro pueden reproducirse o transmitirse utlizando medias electrénicos © mecinices. por fotocopia. grabacién, informacién, anulado w otre sistema, sin permiso por escrito del editor. ISBN: 64-86763-74-6 Depésito tegal: M-38.604-2000 Fotomecinica e impresién: EFCA, S.A, indice Agradecimientos Introduccién .. Primera parte La construccién en altura y el movimiento moderno.. Capitulo I: La aportacién teérica de Le Corbusier (1920-1950) Segunda parte Evolucién técnica de la construccién en altura contempordnea Capitulo II: Evolucién estructural... Capitulo III; Evolucién constructiva del cerramiento de vidrio. Capitulo IV: Implicaciones constructivas de la mecanizacién del ambiente ... Tercera parte Evolucién tipolégica y urbana de la construc en altura contemporanea Capitulo V: Evolucién de la organizacién espacial del trabaj Capitulo VI: Evolucién de la organizacién topolégica de la construccién en altura: el rascacielos mixed-use Epilogo: El espacio contemporaneo.. 15 19 4B 49 95 133 169 173 207 259 ane: | in sei 2a5 Agradecimientos Este libro tiene su origen. ya lejano, en una serie de lecciones que pre- paramos e impartimos cuando éramos profesores de Construccién de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid. Por ello mantiene una deuda manifiesta con los profesores de aquella cdtedra de Construccin Ill de la Escuela de Arquitectura de Madrid —en par- ticular con su catedratico, Salvador Pérez Arroyo-, con quienes com- partimos durante los afios 1982 a 1987 una interesante aventura docente de la que nos beneficiamos tanto en los aspectos documen- tales como en los mas explicitamente criticos. El primer texto completo se redacté entre 1988 y 1990 como un trabajo académico, una tesis doctoral, que fue dirigida por Juan Nava- rro Baldeweg con entusiasmo y apoyo constantes. Puede decirse que en gran medida las ideas més originales que en él se defienden sur- gieron de comentarios y discusiones que a menudo se alejaban de los intereses comunes, adentrndose en terrenos y enfoques metodolé- gicos que obligaron a modificar y diluir algunas de las certezas que habian sido imprescindibles para comenzar el trabajo. Por ello nues- tra gratitud hacia Juan Navarro lo es tanto a su dedicacin como a la actitud con la que supo ofrecérnosla. Queremos también dejar constancia de nuestra deuda con Eduard Bru, Joan Busquets, Manuel de las Casas, Juan Antonio Cortés, José Ignacio Linazasoro, Javier Manterola, Simén Marchan, Rafael Moneo y Federico Soriano, que se tomaron la molestia de leer los primeros borradores, contribuyendo con sus consejos y criticas a su redaccion definitiva: ninguno de los errores o simpli- ficaciones que pueda contener este trabajo les son imputables, pero si buena parte de sus posibles aciertos. Fernando Villaverde y los responsables de la editorial Nerea creyeron en él y nos ayudaron con sus consejos y sugerencias a convertirlo en un libro titulado Técnica y Arquitectura en la Ciudad Contempordnea. 1950-1990, que en su version en castellano ha tenido hasta la fecha una gran acogida. Queremos expresar nues- tro agradecimiento a Juan Marquez y Lars Bjork, de Robertson Espafiola, sin cuyo apoyo técnico y financiero no hubieran podido realizarse algunas investigaciones contenidas en estas paginas, ni su primera edicion. TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 Los cuadros comparados que aparecen en el texto fueron verifica- dos y compuestos por Eduardo Delgado, Ramon Fafianas. Juan Manuel Fernandez, Angel Jaramillo, Javier Pefia y Alejandro Zaera a partir de unos primeros dibujos realizados por los alumnos de los autores duran- te el curso 1989-1990 en el Departamento de Proyectos de la Escuela de Arquitectura de Madrid. A todos ellos nuestro agradecimiento. Desde una perspectiva mas amplia el interés de este texto por la arqui- tectura americana y por la técnica de posguerra tiene su origen en el ejem- plo de arquitectos de Madrid como Corrales y Moleziin, Saenz de Oiza y Alejandro de la Sota, cuya obra y actitud profesional nos mostré qué tipo de arquitecto queriamos ser y a dénde debiamos mirar. Con ellos apren- dimos que nada es neutral en nuestro trabajo, sino que forma parte de un proyecto, el verdadero proyecto que un arquitecto debe saber construir. Para preparar su revision y edicién americana fue imprescindible el apoyo del Temple Hoyne Buell Center for the Study of American Ar- chitecture, de Columbia University, que nos ofrecié la posibilidad de revi- sar desde una posicién privilegiada las tesis iniciales. Este trabajo se reali- 26 fundamentalmente a través de un seminario impartido en el semestre de primavera de 1996, en el que la participacién activa de los alumnos fue un estimulo constante. Queremos agradecer el apoyo generoso recibido en Columbia University por parte de Mary McLeod, Kenneth Frampton, Bernard Tschumi y muy especialmente de Joan Ockman, Directora del Buell Center, cuya fe y entusiasmo ante una investigacion americana escrita por arquitectos europeos es la verdadera razén de que hoy pueda ser reali- dad este texto revisado en su versién en inglés. Una vez mas fue determinante para esta edicién el apoyo de Rafael Moneo y Juan Navarro, quienes, junto a Diana Agrest e Ignasi Solé-Mora- les, nos avalaron en todo momento, descargindonos del penoso trabajo de describir su contenido y convencer de su oportunidad en el actual contexto cultural y profesional americano. Este texto que se reedita ahora en castellano corresponde al prepa- rado para la edicién americana del libro, que contiene revisiones y actua- lizaciones importantes, especialmente referentes a los capitulos 3, 4 y 6. Queremos agradecer a la editorial Nerea, en especial a Marta Casares y Nerea Atxega, el interés y cuidado puestos en esta nueva edicién, afia- diendo nuevo material grifico, redisefiando por completo la maqueta del mismo y dindonos un apoyo entusiasta que esperamos se refleje en el contenido del texto, cuya revision y actualizacién consideramos definitivas. ‘Madrid, marzo de 2000 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. TECNICA ¥ ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 tiva aplicada no sdlo a los aspectos formales 0 compositivos, sino también y de forma mas intensa a las técnicas y los modelos urba- nos que los sustentan. Mediante esta eleccin, el libro enlaza forzosamente con cues- tiones estrechamente ligadas a la pregunta inicial sobre el sentido de la tecnificacién: las relaciones entre creacion y conocimiento positivo, evolucién de los modos de produccién y definicién tipo- logica, evolucion de los sistemas tecnicos y representacién simbé- lica, constituyen la trama principal de intereses que desarrolla dicha pregunta con contenidos concretos. Cuestiones ligadas a los ori- genes conceptuales de la modernidad, que obligan a aceptar en ulti- ma instancia que plantear una vinculacion estrecha entre técnica y proyecto es ya un acto necesariamente historicista; que esta refle- xion ha adquirido hoy, fatalmente, memoria y perspectiva de si misma. De forma intencionada, el texto reproduce formalmente los pasos sucesivos del pensamiento moderno —estableciendo prime- ro una revision critica de! periodo precedente; estudiando a conti nuacién los efectos de los cambios tecnoldgicos, proponiendo por Ultimo nuevas concepciones del proyecto y el espacio urbano— legitimandose ahora esta adopcién precisamente por la identifica- cién entre método y fin que proporciona: como una técnica inves- tigadora eficaz para el conocimiento de la permanencia del pro- yecto moderno. Asi, la primera parte, centrada en la figura y la obra de Le Corbusier, tiene por objeto acotar el grado de complejidad alcan- zado por las distintas y sucesivas formulaciones modernas del ras- cacielos, estudiando de qué forma éste fue para los arquitectos europeos un paradigma en el que podian individualizar los ideales de su arquitectura. Otras experiencias modernas también signifi- cativas, como la de Mies van der Rohe, aparecen aqui casi siempre con cardcter referencial, aun cuando la influencia de Mies en la arquitectura americana de posguerra sea indudablemente mas decisiva que la de Le Corbusier. Pero nos parece que, en lineas generales, su obra, especialmente la construccin en altura, ha sido suficientemente analizada y divulgada, y que el lector interesado en estas cuestiones dominara previsiblemente dicha bibliografia, por lo que se ha entendido que ahondar en su trabajo seria redun- dante, alargando innecesariamente el texto. No es el caso de Le Corbusier, cuyos proyectos de rascacielos, a pesar de la impor- tancia que tienen en su propia concepcién de la arquitectura, y a a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. La experiencia americana de finales del siglo xix (Chicago, Boston, Nueva York}, recogida puntualmente por Giedion en Espacio, Tiempo y Arqui- tectura, fue sin duda decisiva para la formacién de lo que ha dado en de- nominarse, con mayor 0 menor precisin, “Movimiento Moderno”’. La acti- tud con la que tal influencia fue recibida y reelaborada esta sin embargo estrechamente vinculada a la formacién de una idea positivista de la dis- ciplina, desarrollada en Francia e Inglaterra al menos desde finales del siglo xvii, s6lo confluyente con la ciudad americana y sus tipos comerciales al iniciarse el siglo xx. Desde el contexto europeo, los edificios destinados a oficinas y comer- cio en el Loop de Chicago posibilitaron el cierre de un arco abierto por la “Querelle des Anciens et Modernes” desde 1687 hasta el inicio del siglo xx, trasladando el significado de la “invencion” desde la abstraccién con que se desarrollaba a lo largo de! periodo ilustrado el cardcter artificial del lenguaje arquitecténico y sus derivaciones en lo pintoresco, lo sublime y lo genial’-, hasta la concrecién que significoba un nuevo modelo tipolé- gico surgido de la confluencia simulténea de varias tecnologias:a través de la experiencia americana, la invencién pasa a tener un contenido y una definicién proximas a las establecidas para otras técnicas, un procedi- miento creativo y cognoscitivo basado en Ia transferencia tecnolégica y en la elaboracién de prototipos sometidos a rutinas experimentales (elabora- cidn, puesta en servicio, fallo, andilisis, modificacién y creacién de nuevos modelos). Como nada en este procedimiento era ajeno al positivismo aca- démico, puede afirmarse que el referente técnico industrial estaba implici- to o predeterminado en fa génesis del Movimiento Moderno, que la tradi- cidn académica era de hecho el comienzo de una revolucion mas que el final de un periado de decadencia. Sin embargo, tan sélo la presencia de facto del rascacielos permitio romper con Ia dificultad para entender hasta qué punto la tecnologia industrial podia proporcionar modelos signi- ficativos en arquitectura. EI rascacielos americano fue para arquitectos como Mies y Le Corbusier un primer modelo que materializaba el lugar donde indivi- dualizar los principios que dotaban de significado arquitectonico a las técnicas industriales, Originado por la tecnificacién, podia aspirar a poseer las claves para una interpretacién simbélica de la maquina, tenia en su a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. LA APORTACION TEORICA DE Le CORBUSIER Viario y rascacielos conforman una unidad proyectual que deter- mina el plano de la ciudad. En el beauxartiano universo de Le Cor- busier y en su experiencia metropolitana Paris, concentracién centralidad y movilidad estan estrechamente interrelacionadas: son imprescindibles en su imbricacién, pues de ellas surge la ciudad tal y como ésta es conocida, aceptada y valorada. Los problemas que de- bian resolverse eran los planteados por su modelacin con técnicas tradicionales, y la tipologia estallada del rascacielos entendido como ciudad-torre los resolvia. La Ciudad Contemporanea para Tres Millones de Habitantes no implica, por tanto, un juicio moral sobre la ciudad heredada; proviene de la ciudad decimonénica,"haussman- niana”,en su cruce con la city americana a través de una extrapola- cién de las potencias técnicas y topolégicas del rascacielos. Este se construye haciendo confluyentes las técnicas industria- les con los instrumentos tradicionales académicos: técnica, mate- matica y geometria encuentran en el rascacielos cruciforme un objeto comin de experimentacién. Su forma en cruz responde simulténeamente a su naturaleza mecanica estructural y al lengua- je cartesiano que lo conforma. Pero si la geometria de la planta tiene un preciso cardcter simbélico, es en la repeticion vertical donde el rascacielos obtiene su sentido: es la manifestacién ultima del acuerdo positivista geométrico-mecanico capaz de suscitar las nuevas emociones del “objeto-tipo”. Ademas, a la repeticién verti- cal de pisos se superpone su reproduccién en el espacio, esto es, su capacidad para articular un sistema urbano desde las mismas leyes que generan el producto industrializado: el “objeto-tipo” como paradigma a un tiempo técnico y urbano. Isotropia y repeticién se reproponen en los tres momentos de concrecién del rascacielos:en la reticula estructural que soporta su posibilidad de ser ~isotropia y repeticién mecénica~ en su confor- macién tipolégica —isotropia y repeticion figurativa-, y en la orga- nizacién topolégica de la ciudad —isotropia y repeticién urbana-, convergiendo con la radicalidad de un principio universal y genera- lizable que es en ultima instancia la propuesta del “objeto-tipo” como monumento. Su tamafio se deduce también a partir de experiencias coeta- neas: la altura coincidiré con la del Woolworth Building (Cass Gilbert, 1913, Nueva York) y la anchura y disposicién en cuatro bra- zo con la Tour Eiffel (1887, Paris), lo que afianza el caracter “con- temporaneo” -posible, pero en el limite~ de tal investigacion. Asimismo, los sucesivos redientes de las alas estan ya presentes en 21 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. LA APORTACION TEORICA DE Le CORBUSIER blema de la circulacién no se logra mediante un aumento de las po- sibilidades del trafico, sino sélo haciéndolo, en lo posible, superfluo. La actual ciudad no muere por falta de geometria, como cree Le Corbusier, sino por el simple hecho de que no es orginica. Sin duda, el orden geo- métrico es un medio esencial para ordenar la ciudad, pero nada mas que un medio, Nunca un fin en si mismo Hilberseimer anuncia asi los limites que la segregacién del ter- ciario impondra sobre toda la ciudad moderna, tanto en la Carta de Atenas como en la ciudad real construida; el modelo corbusie- riano acepta y geometriza en clave purista fendémenos urbanos precedentes en el tiempo, tanto en el Paris barroco como en la ciudad americana; el rascacielos cruciforme, unifuncional, dedicado en exclusiva al trabajo organizado, no es sino una consecuencia acritica de los modelos histéricos heredados. La segregacién comporta en Le Corbusier la discontinuidad del territorio, que en la City de Paris se interpreta como platafor- ma monumental andloga a las del Campo de Marte y los Invalidos, incluso en su disposicién volcada hacia el Sena. Pero ahora el vacio es una ley general de toda la ciudad. Concentracién y movilidad transforman ésta en topografia discontinua, vacio que a los ojos de Le Corbusier iré apareciendo cada vez menos en forma de jardin inglés y mas de naturaleza “tal cual”, territorio puro como paisaje urbano. Y esta idea naturalista del vacio urbano formara parte de una inflexién de la fe tecnolégica del primer Le Corbusier, disminuida con el cambio de década por sus dificiles experiencias con cons- trucciones reales, pero también por una motivacién cultural mas amplia, presente también en su actividad pictorica y en sus afinida- des politicas‘. La naturaleza se entiende como un modelo comple- mentario al de la técnica, si bien filtrada desde la misma éptica posi- tivista: armonizar las leyes que las ciencias naturales revelan como presentes en todos los fenémenos naturales con la sintesis que de geometria e industrializacién habia planteado el rascacielos cruci- forme sera ahora un estimulo cada vez mis fuerte en los proyec- tos. El final de la década de los veinte vendra marcado por este emperio, que se legitima funcionalmente en clave higienista, pero se desarrolla también en un anilisis de la ciudad cada vez menos aca- démico y mas préximo a la concepcién territorial de la escuela de gedgrafos franceses (Marcel Poéte). Su viaje a Sudamérica (1929) sera de vital importancia para superar el modelo beauxartiano de 28 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. LA APORTACION TEORICA DE Le CORBUSIER [6] Le Corbusier: Lavi Ville Radieuse, 1929, vR Planta general wy viaria mas acusada. El centro neuralgico, la cabeza, es ahora la Ciudad de los Negocios. Tal y como estaba anunciado en Sudamé- rica, el centro no coincide ya con su traduccion geométrica, sino con su traduccién biolégica. Aunque en aVille Radieuse ain pervive el tipo cruciforme, éste no es ya el rascacielos que corresponde a los nuevos planteamien- tos. El rascacielos, al igual que los restantes tipos de la ciudad radiante, se plegara rapidamente a la nueva imposicion que es en Le Corbusier el eje heliotérmico, y se replanteara hasta encontrar en el rascacielos cartesiano, en “pata de pollo”, una configuracién que, respondiendo a la naturaleza mecanica del rascacielos ~su parti estructural es ahora el de un tripode-, permita una exposi- cién homogénea del edificio al sol. El rascacielos cartesiano supone, sin embargo, no una mera sus- titucién de la geometria euclidea del cruciforme, sino el inicio de 2 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. LA APORTACION TEORICA DE Le CORBUSIER 1938 la posibilidad de formularse a una escala viable y con unos mecanismos tecnicos experimentados. El idealismo de 1920 se traduce en Argel en una propuesta madura, concreta y factible. La eleccién del Cap de fa Marine que protege el puerto de Argel como ubicacion de su Centro de Negocios y la preparacion del territorio que lo acompajia, permitiran hacer nitida la se mentacién, la estratificacién topografica del “lugar de todas las proporciones”: el antiguo Pértico de los Ingleses, utilizado como plataforma sobre la que se levanta el rascacielos, los aparcamien- tos que salvan el desnivel como branquias entreabiertas, la plaza que jerarquiza el viario y da acceso al edificio, preparan el acon- tecimiento del rascacielos, haciéndolo doblemente necesario y singular. En su posicion en quilla, dramaticamente adelantado como una proa sobre la ciudad, se reflejara el deseo de activar todo el terri- torio urbano en torno suyo, pero también la reproposicién de la disposicién en quilla del RCA Building, del que tomara ademas su lobby, plaza y accesos. Asimismo, la disposicién general de la planta y la organizacién del trafico vertical del RCA habran influido en la reconsideracién del parti estitico (cruz, tripode) de anteriores proyectos y en el cuestionamiento de la repeticién indiferente de plantas, Frente a la manifestacién de la fragmentacién del nucleo de ascensores del RCA en forma de retranqueos sucesivos, Le Corbusier optara por hacer evidente la organizacin del mismo en tres grupos, fragmentando el brise-soleil en tres unidades super- puestas. Pero sera ahora un mecanismo mas complejo que el ame- ricano, pues, al ligar estratificacién interna y brise-soleil, el edificio queda sacudido y activado desde dentro, dando pie a una forma mas completa de entender el mecanismo nietzschiano, que se apo- dera tridimensionalmente del rascacielos. Este ahora conforma un artefacto solidificado en la légica repe- titiva del rascacielos: recoge de Ia estratificacién de la seccién, de los estimulos topogrificos, del rito de subir, alejarse y dominar, la energia capaz de contradecir la isotropia, la unidireccionalidad y la universalidad de sus anteriores prototipos. El brise-soleil proyecta todos estos estimulos al exterior, cristalizandose en él,como mani- festacion Ultima de la presencia fisica del rascacielos, cuantas inves- tigaciones -técnicas, geomeétricas, geograficas, biolégicas— han ido acumulandose a lo largo del tiempo. Toda la composicién del edificio se organiza sobre la base de una geometria de raiz aurea: el doble cuadrado. La dificultad del 33 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. LA APORTACION TEORICA DE LE CORBUSIER afios después, haran realidad, con desigual fortuna, su suefio ame- ricano, estableciendo entre si un didlogo, quizds altivo, que es ante todo un comentario sobre el rascacielos neoyorquine y su rela- cién con la trama de Manhattan: los tres mantendran una posicion singular que expresa la voluntad de transformar la ciudad a través del ideario moderno aplicado al rascacielos. Pero si bien es indis- cutible su carécter modélico para gran parte de la arquitectura que surgira en los sesenta, pronto se ira haciendo evidente lo limi- tado e inadecuado de estos modelos. Secretamente, las grandes oficinas de arquitectura americanas replantearan sus bases téc cas desde la practica, sin discutir jamais los conceptos. Otros lo harn desde el punto de vista ideolégico y otros, los operadores comerciales, desde la perspectiva de! negocio inmobiliario, cerran- dose asi un circulo que convertira estas obras-manifiesto en tes- tamentos conclusivos de un periodo que habia llegado a su fin. Desde el punto de vista técnico, la pertinencia de la estructu- ra reticular, cuya vinculacién con la idea de rascacielos era objeti- va para Le Corbusier, sera puesta en cuestion tedrica y practica- mente en la misma década de los cincuenta, dando paso a nuevas conformaciones estructurales. El clima artificial, que tanto habia interesado al Le Corbusier mas técnico, sobrepasara con creces sus previsiones y afectara profundamente tanto a la definicion de los elementos constructivos como a fa concepcién del espacio in- terior, aportando una profunda revision tipoldgica. El cerramiento de vidrio sera reelaborado en correspondencia con esta meca zacién del ambiente, a la biisqueda de conformaciones energética- mente congruentes. La actividad interior, el trabajo administrativo y de gestion, modificaré sus patrones organizativos, reclamando una modificacién paralela de las hipdtesis topoldgicas y de la dis- posicién urbana del rascacielos. El modelo de Le Corbusier, producto sublime del ideario moderno, sera entendido rapidamente como una investigacién ejemplar, pero no pertinente en las nuevas condiciones. La sede de la ONU sera asi un punto de inflexién en la concepcién de la construccién en altura: en gran medida, el primer y ultimo rasca- cielos moderno. 7 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. terial protegido por derechos de al ® Gemini q TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 4. RASCACIELOS EN "H”, OBUS C.ARGEL, 1934 Uso y NUMERO DE PLANTAS Sérano.Apareamiento - Planes bajas.Accesos (hotel. oficinas, aparcamientos) 5 Plantas ‘po 2 Cubierta «Hotel pa Helipuerto Terraza jardin ' Resaurante ' Total de plontas bajo rosante - Total de plontas sobre rosonte 35 Altura sobre rasante 140m ‘Atura de planta (piso-piso) 4m Modulo estructural 5.00 x 5.00 m Surearicis 1 totales construidos sobre rasante 178.608 mw 1 totales sobre rasante 710.784 ov 1 planta tipo (ofcinas 724%: servicios comunes 27.6 %) 5.028 mv 1 totales para ofcinas 145.812 me’ rv totales para servicios comunes 27.768 mw 1 torales para hotel-restaurante 8.760 mv Doncones Numero de plazas de aparcamiento 393 Numero de ascensores 36 Teansportes publicos - Numero de puestos de trabajo (10 r/persona) 1458 Davos uraanssnicos Area de influencia 52Ha Superfcie ocupada 96% Superfcie de viles y aparcamientos 17% Superfcie ajardinada 887% Ediicabiidad rm 3B vin Edificabiidad en? 13,66 rn Densidad de poblacion 2.804 hab Ha 5. RASCACIELOS LINEAL, OBUS AARGEL, 1937 Usos ¥ NUMERO De PLANTAS Sotano. Apareamiento 1 Planta bajas.Accesos (hotel, oficinas, aparcamientos) 2 Plana tipo ” Cubierta: Hotel 2 Helipuerto - Terraza jardin — Restaurante 2 Total de plantas bojo rosante 1 Total de plonts sobre rosonte a ‘Anura sobre rasante 150m ‘Antura de planta (piso-piso) 34m Modulo estructural a) 5.20 x 6.00 m » 5.20 x 9.00 m Sureances, sm torales construidos sobre easante 180.174 mv 1m totes sobre rasante 543.210 1m plana tipo (oficinas 67.2 %: servicios comunes 32.8 %) 3561 1m totales para ofcinas ‘ totales para servicios comunes 1 torales para hotel-estaurante Dotacions ‘Numero de plazas de aparcamiento Numero de ascensores ‘Teansportes publicos ‘Numero de puestos de trabajo (10 m'/persona) Datos umanisnicos ‘Area de inflencia Superficie ocupads Superficie de viles y aparcamientos Superficieajardinada Edsicabiidad mln’ Eaieabiidad mien Densidad de poblacion ‘6. RASCACIELOS LENTICULAR, CAP DE LA MARINE, UsOs¥ NURIERO DF RANTAS Sotano Apareamiento Plantas bajas Accesos (hotel. oficinas. aparcamientos) Plantas ipo Cublerta: Hotel Helipuerto, Terrazxjardin Restaurante Total de plantas ba resante Total de plantas sobre rosante ‘Acura sobre rasante ‘Attura de planta (piso-piso) Médulo estructural SureRnCs 1 touales construides sobre rasante 1m totals sobre rasante 1 planta tipo (ofcinas 64,1 %: servicios comunes 35.9 %) 1 totales para oficims 1 totals para servicios comunes. Dotaciones Nimero de plazas de aparcamiento Numero de ascensores Transportes publicos Nimero de puestos de trabajo (10 mipersona) Daros uranisticos Area de infuencia Superficie ocupada Superficie de vales y aparcamientos Edificios anexos Superficie ajrdinada Ediieabiidad eve Edifieablidad mi Densidad de poblacion 131.787 mi 3.600 m 7122 240 4 17s, 462 Ha 9% 48% B% 3.25 mii 1175 et 2.800 hab /Ha 38 33 172375 m 3.125 m 6.25 x 625 m 131.384 my! 410.575 om 2510 m' 105.420 m’ 18.935 om 2.763 habia a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. 46 TECNICA ¥ ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 La distribucién de redes energéticas que alimentan la actividad del edificio ird aumentando su complejidad. Desde Louis Kahn, las redes energéticas configuran un edificio de las maquinas superpuesto al de las personas, conectados ambos entre si en el puesto de trabajo. Este otro edificio, inexistente en las formulaciones del rascacielos de oficinas moderna, resolverd fisicamente el orden virtual del espacio equipado contemporéneo. La expansién de fas luces estructurales determina la aparicién en los afios cincuenta de organizaciones implicadas en el espesor de la estructura secundaria de pisos y la distribucién horizon- tal de redes (Saarinen, Kahn). Si en la oficina climatizada —abierta 0 paisaje- de los sesenta estas formulaciones técnicas, estructurales y energéticas, dan origen al techo universal mecdnico, con fa automati- zacién del puesto de trabajo las redes pasan a exigir una conexién directa, determinando su traslado parcial al suelo técnico. Este ird ha- ciéndose en los ochenta ef protagonista energético de fa oficina, hasta ser objeto muy recientemente de los primeros estudios sobre sus posi- bilidades arquitecténicas. Suelo, techo técnico y estructura quedan implicados en un espesor que determina la flexibilidad del espacio. La seccién de ese espesor, su racionalidad y economia espacial, los grados de libertad que ofrece al trazado de las redes energéticas y su figura o presencia exterior, serén lugares explicitos de reflexion para el proyecto contempordneo. La con- cepcién del edificio como producto de la repeticién de “planchas que separan” el ideal Dominé~ da poso a una concepcin de los pisos como “oquedades tridimensionales que contienen”. En éstos, la estruc- tura conforma el elemento estable de su espesor, y se ofrece, desmate- rializados los muros de! edificio tradicional, como tinica figura posible de Ja verticalidad, resultado de {a identificacién entre sus estructuras por- tante, técnica y espacial. EI pan de verre, producto de la extrapolacién de la necesidad de ligereza y transparencia en el rascacielos de oficinas, es para Mies y Le Corbusier un ideal arquitectonico generalizable, paradigma de la cons- truccién moderna. Tiene sin embargo formulaciones contradictorias en todo el arco moderno que no resuelven su respuesta energética inerte frente al medio exterior. El muro neutralizante propuesto por Le Corbu- sier pide evoluciones tecnolégicas atin no disponibles. El brise-soleil re- suelve la adecuacién pasiva entre radiacién y vidrio e introduce una piel doble y sombreada a la que Le Corbusier hard hablar, transmutando el sistema técnico en recurso compositivo. Mies acepta la desnudez de la hoja unica luchando por establecer el lugar de Ia piel y Ia estructura en un conflicto que no resolverd. El vidrio expuesto e inerte reclama clima- EVOLUCION TECNICA DE LA CONSTRUCCION EN ALTURA CONTEMPORANEA tizacién artificial, y ésta exige hermeticidad. La generalizacién del clima artificial pondré de manifiesto la necesidad de desarrollar un programa de trabajo que marca la evolucién del pan de verre en las décadas de los 50 y 60: el cerramiento transparente como elemento de baja con- ductividad térmica, esto es, como expediente energético que sustituye la inercia de los muros masivos de forma congruente con las demandas de! clima artificial. Tanto la evolucion tecnologica del vidrie como las pro- puestas de muros dobles que conforman una piel pasiva y neutralizan- te avanzan en esta direccién. El espesor del cerramiento crece hasta generar los atrios con fos que las oficinas inician su implicacién urbana. La piel de vidrio moderna —necesaria, delgada, desmaterializada, Unica e inerte~ da paso en las ultimas décadas a una concepcién que es subjetiva, espesa, corporeizada como paisaje, doble y activa desde el punto de vista energético. Define asi un lugar que es simultaneamente ornamental y energético. Este espesor se revela con la automatizacién de los edificios y la aparicién de vidrios de respuesta energética variable, como el espacio que cierra tridimensionalmente las cavidades mecani- cas de los pisos: el lugar mediante el que vidrio, clima artificial y medio exterior adoptan posiciones congruentes € interactivas. Mediante estos procesos de transformacién, a mecdnica del pro- yecto moderno queda alterada en su positividad: la construccién en altu- ray el edificio terciario exigen asi una definicién tipolégica nueva desde los mismos procedimientos constructivos que se han puesto a punto. 47 Capitulo II EVOLUCION ESTRUCTURAL El fin de la reticula La estructura reticular fue asumida por los arquitectos de la moder- nidad como un principio ligado univocamente al rascacielos. Su tra- bajo se centré en dotar de significado simbélico a este instrumento entendido como modelo universal, indiferente a la escala y propor- cién de la construccién. Sin embargo, la estructura reticular pierde eficacia a partir de ciertas alturas y proporciones. Los edificios en altura, sometidos prioritariamente a la accién del viento, ven dismi- nuir las tensiones de trabajo de sus elementos portantes por la necesaria rigidizacion del conjunto para evitar molestas oscilaciones en punta. Para proporciones usuales, la construccién en altura entra en el entorno de las veinte plantas en un campo nuevo en el que las solicitaciones horizontales, tradicionalmente absorbidas por la masi- vidad e isostaticidad de los muros de fabrica, aparecen como princi- pal agente estructural (fig. 11). Los rascacielos reclaman un trata- miento que haga del momento de vuelco y el cortante los motivos centrales del comportamiento mecinico. La estructura reticular es sélo superficialmente una tipologia adecuada ante estas solicitaciones. Puede afirmarse que, en gran medida, los arquitectos modernos pensaron la reticula de pilotes en sus variantes de hormigén y acero sin someterla a una reconside- raci6n critica, sin estudiar hasta qué punto era cuestionable su uso a partir de una cierta altura: consecuencia mas de una rutina empi- rica que fruto de una razonamiento estructural profundo’. Pero si ciertamente insistieron en ella, otros constructores comenzaron a replantearla, formulando invenciones que han supuesto de hecho la superacion y la sustitucién de la isotropia reticular como paradigma universal. 50 TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 La relacion entre arquitectura y conocimientos cientificos 0 técnicos se agudiza en el rascacielos al introducir parcialmente la construccién en el territorio analitico de la ingenieria civil, difumi: nando las barreras entre la tarea del arquitecto y la del ingeniero. Sera solo de la mano de éstos como de hecho se revise el com- portamiento mecinico del rascacielos, entendido desde sus condi- ciones de equilibrio como masa vertical sometida a la accién simul- tinea de la gravedad, el viento y los movimiento sismicos, esto es, como un problema mecanico de naturaleza tridimensional. Pero la busqueda de un sistema éptimo de acercamiento anali- tico a la naturaleza tridimensional del rascacielos queda mediatiza- da por el lento desarrollo histérico de las hipétesis de calcul, difi- cultando el acceso a un planteamiento cientifico préximo a la realidad. Es por ello que conviene recoger brevemente el paso de una metodologia analitica unidimensional a otra tridimensional, pues este proceso acota en el tiempo las posibilidades y modos de existencia de las estructuras repetitivas verticales’. Asi, en los primeros edificios reticulares de Chicago los de William Le Baron Jenney, por ejemplo— el viento como solicitacién estructural no tenia presencia analitica. Los cerramientos resis- tentes de fabrica se encargaban de rigidizar el conjunto, y el inte- rior se resolvia con un entramado metilico de soportes y vigas. Ello permitia calcular unidimensionalmente los distintos elementos sometidos a esfuerzos simples, considerando los soportes ménsu- las empotradas en ef terreno (fig. 12). Pero Viollet-le-Duc habia enunciado en sus Entretiens un principio mas perfecto, que era per- tinente para los ingenieros y arquitectos de Chicago:“Un arquitec- to practico no concibe como antinatural a idea de levantar un gran edificio cuyo armazén fuera enteramente de acero y revestir ese armazén, preservandolo, mediante una envolvente de fabrica’”. Esto es, disociar definitivamente el cerramiento del trabajo meca- nico. Esta idea hacia posibles los grandes huecos que pedian los ras- cacielos y abria nuevos limites a la construccién en altura, al inde- pendizar la fabrica de toda funcién estructural. Sin embargo, las estructuras metilicas presentaban el problema constructivo de la rigidez de sus nudos. Si se asumia ésta podia resolverse anali- ticamente el calculo, y asi se hacia a principios de siglo en Europa para construcciones mas bajas que las americanas, considerando que la deformacion de las barras frente a la accién horizontal pre- sentaba un punto de inflexién en su curvatura, asimilable a una junta i pera a a) Numero de plantas [11] Consumo de materat estructural para edificacion en altura {| I — +4 -+ * ~ ~ 4 [12] Hipotesis estructural ‘elemental Vigas y soportes analizados como elementos independientes sometidos a acciones simples: flexion y comprension, respectivamente. [13] Hipdcesis estructural asumiendo juntas flexibles en los puntos de inflexién. 15) Esquema estructural del ‘Woolworth Building Nueva York, 1913. EVOLUCION ESTRUCTURAL flexible, pues, de acuerdo con Navier, el momento alli era nulo. La estructura pasaba a ser aislable en elementos estaticamente deter- minados, resolubles por estatica simple (fig. 13). En Chicago, la rigidez de! nudo no fue considerada una hipote- sis congruente con las practicas constructivas, y se pasd a sustituir el muro exterior por sistemas bidimensionales, huecos, de rigidiza- cién del entramado metalic. Primero Burnham & Root, con rigidi- zaciones en cruz de los pérticos (Masonic Temple, 1892) y después Corydon T. Purdy y la firma Holabrid & Roche, con pérticos rigidos en la primera crujia del Old Colony Building (1893; fig. 14) dieron solucién a este problema con métodos ya conocidos en otras areas de la ingenieria civil que permanecieron inalterables largo tiempo y que se utilizaron en la construccién del Woolworth Building (1913) y del Empire State Building (1929; fig. 15). [14] Portico rigido de ba primera crujia del Old Colony Building Chicago, 1893. Si las primeras grandes construcciones verticales reproducian la accién rigidizadora del muro tradicional, oponiendo frente a la accién del viento pérticos rigidos en las crujias periféricas, pronto la necesidad de liberar de obstrucciones el espacio util trasladé al niicleo interior de comunicaciones el cometido de rigidizar la estructura, superponiendo un esquema apantallado al reticular convencional. Estos sistemas de compromiso extendieron la efica- st 52 TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 cia de la estructura al entorno de las cuarenta plantas (si bien se construyeron edificios notablemente més altos); mas alld de este entorno, se hacian progresivamente ineficaces El hormigén armado permitia aceptar la rigidez de los nudos, pero el desconocimiento de su naturaleza mecinica hacia mis complejo su anilisis. A pesar de su puesta a punto de finales del siglo xix con las dis- tintas aportaciones de Hooke, Navier y Musschenbroek, la teoria de la elasticidad sélo pudo tener aplicaciones concretas al edificio repetitive cuando Castigliano (1873), Mohr (1892) y después Cross (1930) ofrecieron instrumentos de anilisis que permitian calcular bidimensionalmente las estructuras, aislando pérticos completos y aceptando un comportamiento homogéneo del material (fig. 16). Hennebique habia simplificado en 1890 el problema del reparto del esfuerzo, tabulando los resultados mediante procedimientos empi- ricos, pero sdlo con la formulacién del método de Cross se esta- blecié una relativa unidad entre teoria de la elasticidad y proceso analitico que determiné su generalizacion como normativa casi universalmente aceptada hasta nuestros dias. La influencia de la accién horizontal pudo ser resuelta en tanto que se daba solucién al problema de la rigidez, pero estos métodos de anitisis eran esen- cialmente bidimensionales y se traducian en planteamientos es- tructurales igualmente bidimensionales, que se corresponden con la formulacién del rascacielos durante todo el arco moderno. Hasta fechas muy recientes, la posibilidad de analizar tridimen- sionalmente el comportamiento mecanico del rascacielos sélo pudo plantearse por aproximaciones experimentales basadas en la elaboracién de modelos o mediante razonamientos analégicos, que encontraron en la biomecanica una modelistica natural bajo cuya 6ptica se podia estudiar la influencia de los aspectos geomeétrico- formales en el comportamiento tensional. La modelistica permitia resolver estructuras estiticamente indeterminadas, midiendo experimentalmente los desplazamien- tos y aplicando la teoria de la elasticidad para determinar las reac- ciones. G. E. Beggs inicié este camino, desarrollando en 1922 el Deformeter, en la Universidad de Princeton; la primera estructura analizada completamente con la ayuda de estos instrumentos fue realizada por Pier Luigi Nervi con Guido Oberti en 1935 para los hangares de Orvieto, pero hasta la Segunda Guerra Mundial esta metodologia, por su imprecision, no se aplicé a estructuras verti- cales de miltiples nudos. Apareceran entonces los primeros mo- [16] Hipétesis de andlsis estructural aislando un piso de entramado vertical El resto de in estructura se sausituye por Ins acciones resultantes sobre el fragmento analizado. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. [19] Robert Le Ricolais: diversos prototipos aescalares:lineales, superficales y EVOLUCION ESTRUCTURAL Sin embargo, el caracter abierto de sus experiencias fue detec- tado no sélo por Louis Kahn, sino también, posteriormente, por otros autores como William Le Messurier, centrado en el trabajo sobre tipologias estructurales en altura, o por Ove Arup, Peter Rice y otros en sus investigaciones sobre estructuras tensadas. En cual- quier caso, puede afirmarse que, al abstraer las cuestiones mecani cas de la experiencia reticular y avanzar un conocimiento topolégi co de la estructura que adquiere concreciones muy diversificadas, su trabajo ejemplfica con sabiduria técnica y formal la apertura de un campo de reflexién en el que la técnica industrializada se diluye como experiencia limite a la que referir los contenidos simbdlicos Mies como ejemplo paradigmitico-, y aparecen otras aproxima- ciones analégicas en las que el sometimiento a las leyes de lo fisico —objetivo tan deseado por Le Corbusier y sélo resuelto metaféri- camente- se alcanza desde la mecanicidad de la forma. Los artefactos de Le Ricolais, suspendidos en el espacio y en el tiempo, se muestran a si mismos como objetos puros de la refle- xién, puentes ellos mismos entre disciplinas dispares ~arquitectura, ingenieria, topologia, escultura-, ideas cristalizadas en un ambiguo estatuto fisico, el de la tridimensionalidad de lo mecanico'' (fig. 19). El rascacielos como estructura sometida a flexin, ménsula empotrada en el terreno, exigira también ser estudiado desde los 55 56 TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 aspectos topolégicos de la flexién, entendiendo la optimizacién mecinica como un ideal doblemente estructural y formal. Tal cues- tién sera abordada en dos proyectos realizados a principios de los cincuenta por Louis Kahn y Myron Goldsmith. El primero, junto a Ann Tyng, recogera en su proyecto la influencia de las investigacio- nes sobre estructuras espaciales que coetineamente desarrollan Buckminster Fuller y Le Ricolais. El segundo, arquitecto e ingenie- ro civil, lo hara en estrecha colaboracién con Mies van der Rohe, bajo Ia influencia de Pier Luigi Nervi, con quien trabajaré pos- teriormente. El proyecto de rascacielos de hormigén (1952-1957) que reali- zan Louis Kahn y Ann Tyng contiene coincidencias profundas con el de Goldsmith en el plano metodolégico, y diferencias de desarro- llo que sefialan distintas direcciones de transformacién en el pro- ceso de depuracién tipolégica. El mismo Kahn nos enuncia su com- promiso: En tiempos goticos, los arquitectos construian con piedras macizas. Hoy podemos construir con piedras huecas. (...) El deseo de expresar vacios positivamente en el disefio de una estructura queda en evidencia por el interés y el trabajo crecientes en el desarrollo de espacios-marco. Las formas con las que se experimenta proceden de un conocimiento mas intimo de la naturaleza y del incremento en la busqueda constante de orden.’ La referencia al pensamiento de Le Ricolais no podia ser mas explicita; el eco de su trabajo conjunto se pondra de manifiesto en las relaciones entre forma y esfuerzo, en la valoracion de los vaci os y en la referencia a las estructuras naturales que forman el nucleo conceptual del proyecto. El rascacielos de L. Kahn, desde el punto de vista estructural, es una experimentacién de a pertinencia de las conformaciones tridimensionales en el terreno de la construccién vertical. Si la solicitacién principal en el rascacielos es el viento, la flexion es la respuesta que, en su deformacién, caracteriza a su estructura. Pero la naturaleza explica como hacerle frente mediante organi- zaciones espaciales indeformables, huecas, que descomponen los esfuerzos en compresiones y tracciones simples mediante una geometria tetraédrica (fig. 20). El edificio extiende a la estructura principal la configuracién tetraédrica que ya se habia experimen- tado en los pisos de la Yale Art Gallery, transformando aquel ele- EVOLUCION ESTRUCTURAL [20] Louis Kahn: rascacielos de hormigén. 1952-1957. mento en una expresion tridimensional de todo el edificio. La altura dada al tetraedro compuesto por los elementos principa- les de la estructura (veinte metros) permite fragmentar la sec- cin en unidades superpuestas de cinco plantas. Capiteles huecos tetraédricos realizan la transicion armonica de la escala del piso a la de Ia estructura principal. Nada queda de la repeticién de pilotes y pisos ni de la presencia laminar del rascacielos miesiano o de Le Corbusier. Kahn y Tyng encuentran en el recurso a la geo- metria espacial el mecanismo adecuado para contrarrestar su deformacién, abriendo la posibilidad de alterar el tipo prismatico que la estructura reticular habia segregado desde Chicago. No obstante, esta deformacién de la geometria euclidea sera también una de las mayores limitaciones en el plano operativo del rascacielos de Kahn y Tyng, marcando su condicién épica y singu- lar. La inadecuacion entre su belleza monumental y el uso con- vencional del espacio, ya manifestada en la seccién por la contra- cién_ impli movimiento de la estructura, sera reiteradamente subrayada, determinando en gran medida su marginalidad en la evolucion del rascacielos. Kahn rechazara la generalizacin del modelo, renunciando a estas investigaciones en proyectos posteriores. Sin embargo, los limites entre la coherencia estructural de la triangulacién espacial y la geometria rectangular convencional del espacio de uso daran lugar a una dialéctica especifica del tipo de la que rodeara al desa- rrollo posterior del rascacielos. ita entre los sistemas de transporte vertical y el 58 TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 La propuesta de Goldsmith, aceptando la presencia de flexio- nes en las barras y momentos en los nudos, mantiene una adecua- cién entre estructura espacial y topos funcional que dar lugar a una generalizacion mas répida de su modelo a partir de la puesta en practica de variantes simplificadas. La tesis de Goldsmith, realizada en 1953 en el IIT de Chicago y titulada Los efectos de la escala, desa- rrolla esta concepcién estructural, llegando a unas conclusiones que seran mas tarde convertidas en programa de trabajo en la firma Skidmore, Owings & Merrill’. La obra de D'Arcy Thompson titulada On Growth and Form, que Mies admiraba y recomendaba a sus alumnos, est en el origen de! trabajo de Goldsmith. Este texto recoge los anilisis mecanicos de Galileo sobre relaciones entre forma y creci za, concluyendo en la imposibilidad de un crecimiento ilimitado de las formas “del arte o la naturaleza” sin cambios en la tensién de trabajo de la estructura © la proporcion de la misma, Pero D'Arcy Thompson, al recoger ampliamente este pasaje, matiza y aflade: nto en la naturale- Por los ejemplos citados (torre Eiffel y diversas clases de arboles) pare- ceria que cada aumento de tamaiio va acompafiado de una pérdida de efi- cacia. Esto no siempre es verdad, y hay muchas estructuras en las que el aumento de eficacia debido a incrementos de volumen con disminucio- nes proporcionales de superficie se mantiene en ascenso hasta el limite resistente de los materiales. Si consideramos el caso de dos obeliscos similares pero de diferente tamafio, se puede demostrar que, mientras no se exceda la resistencia del material, ef mayor resistira vientos que derri- baran al pequefio. En estos casos, las fuerzas de vuelco son proporciona- les a las dreas expuestas al viento, mientras que las fuerzas estabilizado- ras son proporcionales a los volimenes; si cada aumento de tamario se ve acompafiado de un aumento mayor no proporcional de volumen que de area, estas estructuras seran mas estables segtin aumente su tamafio."* Goldsmith planteara reconsiderar estaticamente los prismas miesianos utilizando, como en el obelisco, toda la inercia y peso pro- pio que colaboran en el equilibrio tensional. Para ello, la estructura resistente destinada a contraponerse a la accién del viento se tras- lada a la periferia del edificio, conformando una macroestructura de trabéculas de hormigén armado,a modo de ménsula hueca empo- trada en el suelo, formada por pisos y soportes perimetrales conec- tados entre si rigidamente (fig. 21). Cortante y momento de vuelco son absorbidos por esta estructura, mientras en el interior una [21] Myron Goldsmith: rascacielos de hormigén. 1953. Axonometrica EVOLUCION ESTRUCTURAL construccién metilica ligera resuelve la formacién de pisos y la transmisién de cargas gravitatorias a las bandejas de hormigon de la macroestructura. El peso propio se traslada a través de éstas a los soportes perimetrales, colaborando a la accién estabilizadora del rascacielos. La estructura metilica, apoyada y colgada en las bandejas de hormigon, deja plantas didfanas en el centro de cada uno de los edificios superpuestos que conforman el rascacielos. Este puede asi alcanzar las ochenta plantas sin que la altura ~como en los edificios reticulares con nucleo apantallado de mas de cuarenta plantas determine un mal aprovechamiento del material debido a las bajas tensiones de trabajo. Con ello, partiendo de! arqueti- po del sdlido platénico miesiano, Goldsmith procede a una trans- formacién sutil pero profunda del rascacielos: descomposicion estructural en funcion de las distintas solicitaciones, ubicacién periférica frente a viento, adecuacién escalar, especializacion del trabajo y material estructural son operaciones de aparente ino- cuidad que, sin embargo, abren el camino a desarrollos corrobo- rados en las siguientes décadas. Frente a la expresion neutra del muro, la descomposicién de la estructura en dos tipologias com- plementarias replantea la cuestién del tamaiio tanto técnica como formalmente; la posicién de la estructura principal en la periferia edificada contradice la universalidad del pan de verre como expresién légica de! rascacielos; el cardcter tecténico y escalar de la construccién se manifiesta también en el estilizado ascenso de la estructura hacia su coronacion. Las plantas didfa- nas intermedias y la minima presencia de la reticula estructural en las restantes plantas inician el camino hacia su disolucién, mostrando de qué forma, cuanto mas alta sea la construccién, 59 a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book. 62 TECNICA Y ARQUITECTURA EN LA CIUDAD CONTEMPORANEA. 1950-2000 oscile continuamente alrededor de una posicién intermedia obte- nida por flexién ante la presién media del viento. Esta oscilacién, segun se ha comprobado, es muy semejante a la correspondiente al periodo fundamental de vibracién del edificio, por lo que su res- puesta es la del primer modo de vibracién, es decir, aquél en que todos los puntos del edifico se desplazan hacia el mismo lado res- pecto de la posicién inicial (fig. 23) Frente a la energia del viento, la capacidad de la estructura como amortiguador es de gran importancia para evitar la amplitud creciente de la oscilacion, Pero el viento no es la unica accién, aun- que si la mas continua. Los sismos producen movimientos vibra- torios y desplazamientos a través de las cimentaciones que in- troducen esfuerzos variables de dificil anélisis. Distintas formas de oscilacién, “efecto latigo”, etc., se superponen, exigiendo tratamien- tos que derivan en la necesidad de una mayor o menor rigidez de fa estructura. Frente a la accion del viento, ejercida sobre las caras exteriores, la respuesta mas conveniente es un conjunto rigid, pero frente a los sismos es la inercia de la masa sometida a vibracion la que da lugar a la aparicion de acciones exteriores, por lo que son deseables una cierta flexibilidad y ligereza. El compromiso entre ambas necesidades determina la eleccién del periodo de vibracion del edificio. Pero en esta eleccién influyen otros factores, pues el movimiento del edificio puede producir distintas formas de inco- modidad en funcién del desplazamiento, la velocidad del movimien- to, la aceleracién y, especialmente, el jerk (variacion en el tiempo de la aceleracién). Actualmente, se limita el desplazamiento entre H/500 y H/600, habiéndose disminuido desde los afos treinta (H/380). El conjunto de decisiones iniciales incluye aspectos gene- rales como la forma del conjunto —la simetria reduce la incidencia de la torsién, facilitando el cilculo~ y particulares, como la eleccion del sistema de cimentacién, en funcién del tipo de terreno" Este apunte indica la complejidad de hipotesis y variables a introducir, asi como de métodos analiticos y experimentales a ensayar, Si bien es posible un procedimiento simplificador -y no otro es el camino légico utilizado por Fazlur Khan, Myron Golds- mith y tantos otros-, el conocimiento derivado de experiencias sucesivas ha permitido un perfeccionamiento progresivo que esti implicito en la evolucién de las construcciones actuales, reprodu- ciendo un proceso que desde el siglo xvii se prolonga hasta hoy: de la verificacién experimental al analisis cientifico, como procedi- miento heuristico general. [23] Modos de vibracion.

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