You are on page 1of 2

Si te sala muy caro separarte de tu

mujer, podas venderla


COMPARTE:

Javier Sanz 7 marzo 2012

Lo siento chicas, otra vez, y no s cuntas van ya, vais a salir mal paradas en este
artculo la historia no ha sido muy benvola con vosotras.

Hoy en da la legislacin sobre las separaciones y divorcios est ms que estipulada y


regulada, pero en la Inglaterra del siglo XVIII y XIX era un lujo que slo los ricos y
poderosos se podan permitir. Cuando un matrimonio de gente humilde se rompa o
simplemente eran infelices, slo haba dos soluciones: aguantar y hacer de tripas
corazn o vender a la esposa. Esta costumbre britnica no tena ninguna base legal,
incluso a partir de mediados del siglo XIX comenz a perseguirse. An as, como la
actitud de las autoridades era equvoca, se segua practicando (entre 1780 y 1850
quedaron registradas las ventas de ms de 300 esposas, que no significa que fueran las
nicas).

Esta costumbre llevaba parejo un ritual: el marido slo tena que traer a su esposa a la
plaza del mercado con una soga alrededor del cuello, el brazo o la cintura. El marido
intentaba a su esposa sus virtudes y ocultando sus defectos, y tras una subasta pblica
se adjudicaba el mejor postor entregndole un documento como prueba de propiedad.
En este grabado de 1820 una vaca situada en el lugar exacto deja claro los motivos de la
venta de la esposa
No se ha registrado casos de ninguna esposa que hubiese sido subastada ms de una vez
por distintos maridos, pero s algunos en los que el marido tuvo que volver a la plaza
porque en su primera subasta no encontr pujadores. Respecto a los precios varan
mucho y en muchas ocasiones adems del dinero se aada a la puja algn barril de
cerveza. Lo que est claro es que muchas mujeres que tuvieron que pasar por este
mezquino y miserable trance ganaron con el cambio dejaban atrs un matrimonio roto
y a un marido que las haba vendido.

Fuentes e imgenes: Forbes, Wife Sales, Neatorama

You might also like