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B2 50°C Dorente=) THON -Ploee PRINUIPIOS ConsnTUCIONALEs DEL DeeetHs Peocesal Cywe Feenanoo Ractieer) aooy,, CAPITULO V AMALISIS DE LOS PRINCIPIOS PROCESALES 4. LAcONSTITUCION COMO NORREA 1.1, Normativided Ais, 4o., Bo., 85, 84, 85, y 241 de la C. P. 1.2. La Jurisprudencia carécter narmativa de le actual Canstinucién 2s un principio ‘ue la Corte Constituconal ha resenado en las sentencies T- oe/e2, T-401/9e, T-406/92, 7-441/92, 0-479/92, T-514/ 82, T-614/92 y C-131/93, asi como on ia 0-273/99, entre otras, De asos andlsis se destaca: 18} «Ls Posicién de supremacia de ia Constitucin sobre as res- {antes normas que integran el orden jrsica, extra en que ‘aquéla determina a estructura basics del Estado, insttuye las drganos @ través de los cuales se ejerce la eutorided faliica, atnbuye competencias para dictar normes, ejacu- teres y decidir conforme a ells ins controversies yligios 105 5 a ‘que se cusciten en la socieded, yal efectuar todo esto fur da el orden jurdico remo del Estado. La Constitucién se fsrige en el marco supremo y timo para determiner tanto ls partanencia al arden jurdica come la vaidez de cualquier ‘arma, raga 0 decisién que formulen o profieran los 6rga- ‘nos por sla instauradoe. & canjunte de los actos de 10s (Geganas canstitulsas Congreso, ejacutva yjueces- e ien- ‘fica con referencia ala Constitucién y no se reconace camo doracto si desoanace gus coverios de validez. La Constitu ‘ién como lex superior precise y regula es formas y mto- ‘dos de produccién de las normes que intagran al ordena: ‘mionta y es por ello stuente de fuentase, nor normaruths (008/32) sl valor normative de la Constituciin no ge fits @ que e Congreso, el ejeautva y le veces al ejeroer sus funciones y ‘expedirleyee y dacretoe y praferir sentences, observen ts ‘Consttusin. El valor normativa de la Constitucin expica ‘que a ella gualmente queden sometidos ios nacionsles yex- tanjeros y que sea un deber y une obigacion suyas acatar ' Constitycion(C.P., ert. 40, y 95) s0 pena de responder por suinfraccion (C.P., ert, 60}. (T-O06/82}. «£1 valor normativ dela Canstituctén adquiare mayor relie- ‘ye ctonda an alle 2 intracuicen contenides materiales nue ves destinadas a informar en profundided tado el ordena- ‘miento, a caracterizar la misién rrisma del Estedo y sus futordedes y serve de marco de la convivencia cudadana. {Us Constizucon Poitce colombiana na se ha rtad a regu lar la estructure y conformacién del poder pibiico. Aicionsimenta 8 les normas de «tipo orgénicas, se encuen- tran oteas que utllzanda une lesneie verbal sa podrian d&- 108 a ominar de «tipo material y que definen y desarrolen os Caracteristices del Estado Colombiano (social de derecho, Uitario, cescentrelzado, con autonomia de sus entidades escentralzedas, democrstico, participative, plurast, fur {dada en el respato dela dignidad humana, wn el trabajo ya solidaridad de las personas y en la prevalencia del interés (general), consagran los fines esenciaies del Estado y los valores y prineipias que ingpiran el ocdenamiento consti ‘ional (servicio # fe cornunidad, prornacion ee la prospered (general, garantia y efecivided de los derechos y deberes, juncamentales, particpacion en la vida politica, dofensa de la independencie nacional y de a intagridad tecritorial,con- vencia pacica, justia, guakiad, conocirvento, iberter y ‘bez) y establecen los derechos, las garantiss y los debe ess. [ -006/22} Tanta el conteria. eorgénicos como el nuevo contenido “enateri de a Consttucén, uenen valor normati, Le Cons- ‘utuciin en esta parte no prevende tener sentido purement ‘exhartatoria 0 de proclame, Su pretension es eminente- ‘mente preceptiva.Y esto es lo que se afirma de manera rotunda y ein enguinces en el erticulo do.» [T-COS/SE } «Si bien Ia Conetitucén es norme normarum, fundamento de todo o andenarmieneo estate, elo peradjcarente la hace ‘ms frégi. La norma constitucional ao tiene exisbencia pro- pia fuera de a reaiiad. Dado que su validez no puede ser fsuterrefensneis, eu tnca sentida se concreta en fevers 9 ‘realidad io estatuide par ela. B valor normative de la Cons- ‘kucién no significa por i mismo la ectusizacion del querer cconstixyente. Esa pretension de vigenca 8 la que se con ‘trae esenciamente el valor normativa precisa tao su acep- 107 -08e rwaacowaunee Gower tacién coma eu efective realizacion mediante sctos huna- ros de volunted y hechos concretos de ordenacién de, ta Feaidad palace y Socal segin sus dictados.» (T-006/S2 La consttucionaldad de la leyno es dbice pars considerar que Su epleacion en una etuacion partoulr puede resutar, ater tides los especiales creunstancis presentes, nconstituco- fal y data prescindese de su apicacién. lo oourre cuando los efectos de a ey referidas @ una stuzcion sngule, prock ‘ean consecuencias contraras ala propia Constibucn, en un ‘mernento inicio postariormonte.(T-401/92}. «Este Corte, pore! contrario, estima indispensable reiving= ‘carla concepcign jridica, segin ls cual el Derecho no se lagota en las normas y, par ende, el Constitucional no esta Grourscrita a instade campo de las artlouls que integran una Cares Poltica 61 Preémbulo dela Constivucién incorpore, mucho mils 288 {e un simple mandato espectfic, los fines hacie las cuales tiende e! ordenamientojuridioa, los principio cue inspira~ fon el Conetituyante para cigefer de une determinada ma- here la estructura fundementsl del Estado; la mativecion poltica de toda le narmativded: tes valores que ese Consti- fucién agpioa © realizar y que trasciende la pure Rteraidad de cus artiouos. «Elpredmbulo da sentido @ los preceptos constituconales y ‘Sefala ol Estad lee metas hace las cusles dabe crentar su focidn, el runbe de ie insttucionss juricicase [C-479/82} En la sentencia 7.614 de 1992, la Corte Constitucional fdvrtié que el juez para hacer uso de la excepciin de 108 | 4 FRINCPIOS CONS TUCONRLE DE DERECHD FROCESAL ‘nconstitucianaidad, ol antayonismo entre el precepto infe- ror y lag mandate canstibicansles, debe ser ostansbl ‘manfiesta, que sate e a viste del ncérprete, esto es, que haga superfiua cualquier eaboracn juricice que busque su demastrecsin, porque sina se da esa oposicién flagrante ‘no obra la excapcion y debe astaree 9 lo que resuslva con efectos erga amines la Corte Constitucinal ‘Seqin el principio de intanpretecién conforma, la tataided de loa precentas jurdicas daban eer intergretadios de me ‘nore tal qua fu sentido 6a avenga ales cisposicones consti. ‘ucanalas. La interpretacién de une norma que cantrarie ‘este principio es simplemente intolerable an tr rgimen que parte dela supremaca formal material de la Constitucion Ante una norma ambigua, cantina la Corte, cuy interpre ‘ton razonable acrita, cuando menos, dos sentisos civer- 508, elpnncipi de interpretacdn conforme ordens alintér rete qua salocciona aquellainterpretacion que se edecus fle majar manera a ls ésposiciones constizucionaes. Pera puede acunnie que une de as dos interpretaciones origine tna norma inconstitucional. En este caso dobe abrirse un juicio constiniconal contra le norma ambigua, al cabo del {sl procederé una decision de exequibidad condicionsde 3 Ja expulsion del extrema inconstitucionsl de ls éspascion demendada, del ordenamientojurcico, Ahora bien, cusnda luna narma, aparentemente, admite une interpretaciin que pugn, de manera radical y evidante, con las disposiciones, onsttuctonales, pero sn embargo no ge trata de una inter pretacion natural y obvi, la mas razonable ole nics pos bie, debe sefalarse que la mencianade interpretacon es js Fidicamenta improcedente, En carsecuence, ls propasion inconetitucional que surge dela incerpretacién de un texto 109 ‘ormativo con pln descenocimiento del principio de inter- pretecién conforma, es inexstenta y cuslguiora qua la apt (ue estaris actuando al margen del derecho (C-273 de 1899), 1.3, Alcance del principio Le Constizucon coma norms 9 el cartctar normative de a Cons- tieucion que seria otre forma da norinar el princio, adquiere fen Colombia ia estipe de principio general con la sdopcign de Ie Carta Poltca de 1991 Este principio comprende dos principios que lo estructuran: ta ‘supremacia dela Coostitucin y la constitucionalzacion de todo ‘lordenamiento juricico. A partir de los se elabore una teoria {de derecho canforme ala Consutucién,radieando abel cardo- ter general que antes le atribuismos, en tanto ls cresciin, inter jpretacione integracion del ordenamientojuridica debe reatzar- '58 en armania con los principios constitucinales, porque els sn la base del ordeneriento, hecen la unided del misma, no ‘sélo formal sino material of hecer efectvos fs valores que la ‘misma Constitucién senate, ls cuales asi dejan de ser mere. ‘mante programaticns, La supremacia de la Conetivacién que es postulada aceptado por toda ls dogmtica constitucional al caficar la Cansitucén como ‘rma fundamental, os creacién del constitucionalema america- ho, segin nos dice Garcin de Enter, Es fades de un Funda- ‘mental Law, pero tambien del heigher faw ola idea de un dere- cho fundamental mas sit Abt la dosis usneturalsta de la te0- ria, para no la Unies, porque la inluencie de éste también se ‘ota en Constitucenes como la nuestra cuendo en ella aparecen norma particulares principialas y ne prinopales, que parmiten 110 Hdeducroinducir prinpios que antes de este reconaciiento exph- ‘tamenta positnn, yal propugnadares del derecho natural re Sontaban como terertas ala persona y dgnded hurranas. [sl se forja, dice Garcia de Enters, ela doctrina de a supee- ‘acia normative de le Constitucién y la instruentacion en st ‘eavor del principio de a judicial review, que reconocera el poder de los trbunales de declarer nus, a efectos de su inapscacién las loyes que cantradigan a la Constiticiéne, Esta doctrine, ‘agrege, es enunciads por el Tribunal Suprema en la santencie de 41803 en el asunto Marbury Ve. Matison, obra det gran juez ‘Marshal, quan eancreta defritivamente que The Constitution is superior to any ordinary act of the legislature. “La Supeemacia dle la Constinuciin sobre todas las normas y Su Ccardcter cantrel en la construccién y en la vaidez del ordana- frien en su conjunto, obigan a interpreter éste en cuslquior ‘momento de su epicecion-por operadores pubicos 0 por opers- ‘ores privados, por Tribunales 0 par Srganios legisativos 0 ad- rministretos -en el sentido que resulta de fos princpios yreglas Constiuiionstes tanto los ganersles coma los espacificos raf Fentes ela materia de que se trates! La supremacia dela Constitucién se finea en su cualdad norma tive, porque sla Canstieucion na ela es une norma, sina precise ‘mente la primera de las normas del ordenaimiento entero, la rrorma fundamental, ex superiors®. «La norma normerun, fe fuonte de las fuentes». Es ells, segin se do, un principia gane- Ose Feng Rane? OMe ral en cuanto su carter normatvo impregns el ardenamienta iurco, consttucionelizérvdole taco. Tene un cardcter vincuante ‘beneral, emnediato y Grecta, Vincuia @ autoridades y ciudada- ‘hos por igual farts, 40. y Bo. 6.) Una constinucon normativa, lo hemos dicho varias veoes, ests ‘eanformade por princes que son narmas destinadas 8 la orea- '89n, interpretaciéne integracién de todo ol ordenarriento, que todos lve juscas deben tener en cuenta coma operedares direc- tos ermadiatos, al se trate de preseptas programaticas Comoe! ue? e8t6 abigada ea apcacién directa de a Cansttu- on, si all esta Ie norma sustancial que decide el conficto, debe hacérla operar dejanda de lado la ly, bien aor encornpstbsiidad ‘om la Conetitucén o poe viewud dela Supremacia consetucionl Por supuesta que date mas se note este priviego constituce ral y eu apicacién directa e inmediata es en el campo de Ins ‘derechos fundamentales, porque su reguacién consttucionel impize la derogacien de normas anteriores ave los contrarien, escanazoan o desvirtien, Coma facto de la constitucionalizacin del ordenamiento, le inaplcecén por inconsttusonaied manifesta se entrega camo facited 2 cuskier operadorjuréco, incyendo, deste luego, 2 todos los érganos juisles, que en su préctic cara someten la ley aun central ndrecto de constiucanalied, lo cul trae camo ‘consecuencis pacar daria allay sun alcance yin sentido fenen- {2s a que quso el lagisiador dot que ermnarcn, en itd del pring io de nterpretacién de fs ley conforme a la Constincon® PRICFOSCONSTIUGENLES HL DEREEHO PROCES. Esta principio, asi concetid, da cabida al control dfuso de la Consttucién, proponiandose fa seupstién de constizucionatdade onde éste existe, ol iaplcacion de la nfrenorma entre nse~ tras Por supuesto, que un sisterna de estos, como lo coments la ‘doctrine, encierre riesgos por el xeubjetivirmas y eal aczvigmo judicial, porque al conerania de tas Constituciones Pragramsticas ‘que eran pers e! legis, no para el ciudadano (la de 188), las normatives la de 1994}, invierten los Tectores. Mientras quo en aquelias era el legsidor quien daba vida a ls valores, fnciies y derechos, enigéndase sen duete ebeoluta de le con {enidos sustantivos de la Consttuciénst; en estas, los dre ‘chos fundamentalesy itertades plblicas no estan en al dmbita dela ire cisposicn del legisledor, sino que éste ests somnetido ‘2 su contanido asencial.. es por tanto, un émbito de ibertad y de derechos indisponible para el legisador, que se ve iitado or esos contenidos materiales que figuren en le Constitucion, evitando la tentacién de mayerias acasionalos de abysar del po” ‘er pars dejer sin efecto los conteridos materiales de ia Const tucidn contrariendo el esprit constitucona® 2, EXCLUSIVIDAD Y OBLIGATORIEDAD DE LA ADMINISTRAGION be susticin 2:1, Normatividad ‘Arts. 20. ne. 20., 30., 23, 116 y 228 CP, {Gr Us oar Tome Gps oh 89 4 00 aaa Tomi prc 8p 8 2.2. La Jurisprudencia ‘Alunque la Corte se ha referdo on infinidad de casos a la furcion Juice, no ha analzedo expresarnente el present principio. En las sentoncias 0-226 de 17 de junio de 1993 y C-024 de 27 de fener de 1904, erat el ejerecio do la funcén judi an torno flare. 116 de IC. P., para dejar por sentadalavabitdad do los lomados equivslentes jurissicconales. En la sentencia T-547 ide 1893, exguso en relacion cone funcibn de adrinistrr jst cia sLe Constitucion de 1886 en el artouo 58, establecis que tio justicia es un servicio pibico a cargo de ia Necién®. La CConstitucion do 1981 consagra que la administracion de pusticia ces une funeién pabsea. “La diferencia radica en que las funciones dal Estado, como tal, eon la Ejectiva, la Legislative y la Judicial, exctiendo ade~ ‘mi elgunos Segancs que eurplen funciones de contra y otros ‘que 82 coupon de adelantar actos propios dela funcién electo- al La Carta de 1991 modernizé el concepto en el sentido que Administer justice ya no es un servica mds prestade par el Fstodo, sino que la nocian de furcién es propia de la rezén de ‘ser dl Esta; ya que al tarmine servicio pic niié gu erisis| ‘a portirdo ia segunda posguerra, Oe otro lado le Constitucin fen al articua 265 establece que los servicios pubicos pueden ‘ser preatados por el Estado Greota o indrectsmente, por co: ‘munidedes orgenizedas 0 por particdares. Asi el concepto de ‘service publica no puede ser aplicdo @ la administracion de |usti6, pues @ poser que en casos excepcianales los particus- es pueden admnistrar justica, ésta es una funciin que slo puede ser prestade por ol Estado dractamente como estable- (2 a articulo 116 de la Constitucén Pottica» Este principio tarnbin lo traté la Corte Consttucional en la sen- tencie C-097 de 1936, dicendo al respecto: "Una de los presu- puestos esencieles de todo Estada, ¥ en especial del Estado Sociale derecho, es l de contar con una debida edmingtracion e justcia. A través de ello, se prategen y se hacen efectives los derechos, a ibertades ylas garantias el poblactin ente- +, y se definen iquaiments lae obigaciones y los deberes que le asiaten a la administracion y alos asociados. Se trata, comma bien fo anata la disposicon que se revise, del compromica gene ral en aleanar la convivencis, social y paciica, de mantener la Concordia nacional y de asequrar I intogridas de un orden poi. 0, econémica y sotial justo. Para e!logro de esas cometidos, ‘no sobra ecarario, resulta indispensable lo coleborscién y Io Cconflenze de los particulares en sus insttuciones y por lo ris ‘a, la demostracin de parta de dstas de que pueden estar aia ‘altura de su grave compeomise con le sociedad.” 2.3. Aleance del principio Este principio adem de toner una explicacin histérce, 2 plan- tea como fundamento de argarizacion poltica del Estado, por- ‘que cuando éste proscribe la utiizacdn de la fuerza pried y ‘excapciona ia autocempasicion de i confictoe, 28 ve cormpeido ‘crear los érganos {rama judicial) y # establacer las instrurner- ‘os (proceso] parala heterocomposicion del coficto, como algo ‘excusivo, permanenta y obigatoro, E postulado tiene una naturslezabifronte: dogmética y ongén- cc. Por Is primers es un derecho fundamental de ls justiciable, Porque frante al derecho de acsin atargada ale persona exist 21 dober del Estado de ejercer la funcién pub de admiatrar justice, con su implicecién dela cosa juagada, y con ésta, fa feficaca 0 fuerza vinclante dela decision, pues te obigatoredas M5 296 emuno Rae cone que snuncie fa denorrinacién debe ser vista como da dobla vio {de un lado coma deber del Estado, y del otro, come poder coer- Cito frente al particular. Por la Segunda, e! principio, como inciolmente se anots, exige el estableceniento parmanente de ln engane encargedo de ejercer la func jurisiccional, que & Su vee queda insert ana dobienatucaleza del deber-podar. principio que tembién se daducia de la Consttucion de 1886, txcliria ls exstencia de ts lamados pa Carneluti eequivalen- ts juriscicconalessy «érganos parsjuticslesy* sino fuera por- que el ert. 116 C. P,, express y excepcionalmente los autorize Cuando establece qué le ey puede etrbuirle funciin jurscicco- fal a las autoridades edrministratives y alos pariculares en su ‘eondison de arbiters y conciiadores habitados por las partes pera proferir fllos on darecha y en equidad Coma lo indice le norma la ley puede investr de ls funcién juris- ‘dcclonal ale autaridades acministraties pore amaterias prac ‘586, que no sea inctruireumarioe ojuager deltas, Por su lado, los particalares pueden ejercer Ie funcion en los términos de la lay, habitados por las partes en su condcién de arbitros 0 ccenciladores, De manera que con las partes quiones pueden ‘decinar ol darecho alla uriediccion permanente dol Estado pac- tando clausulas compromiseries 0 compromisas conforme ea Joy, 0 autorizando al conciiader nara ejercer Ia funeién mesisdo- f2:y la jurisdiciend, caso en el cual estariamos frente @ un ‘Sega parausicial en las voces de Carnet En deserrol dela norma constnicional el Congreso dela Ropi- bica spraba ia ley 448 del 7 62 jue de 1998 y en cumpleniento 116 Prec CENSTTUIONLES DL CREDO PROCES die lo cispuesta por el art. 166 de le ctada ley, et Gobierno ‘exptié 0! Decreto 1818 de 1998, cuyo contenica correspande ‘al famado Estetuto de las Mecenisros Alternativas de Soluctn {de Confictos, destacandose acemas da le concisacén y el arbi- tweje, que son mecanismes expresamente idenbficados por el fort 1165 de la Constitucion, la amigable composicén, definds ‘come un mecanigma de saluciin de confictos, por media do! ‘ua dos o ms particalares delegan en un tercera, denominado ‘Amigable Componedor, Ia Facultad de precisar can fuerz9 \vnculente para elas, sabre et estado ya forma de cumplimiento de un negocio, y las competencias stribuidas a las ‘Superintendencias de Sociedades. Valores, de industria y Co- rmereie y Bancaria, para conocer a prevencon parqua a se ‘lima la cornpetencia de los jueces para conocer de los mis roa asuntos Cuando le persone interesaca aslo decid, de Iss ‘controversies que expresemente ls ley determine, De menere ‘que en este tema propone Ia ey una desjudicializacin asignsn- dole 9 autoridades administrativas, como son les Superintendencas,furciones jursdiccionales, pero cuando tire- ‘mente las partes interesadas renuncian e 8cceso ante Ios jue es naturales, pues ste, segtn se viene de expicar, es un de recha fundamental de ios asociodos, De elguna menere este princpio resulta excepcionado por las jurisciecones eclesiésticas que reconoce el art. 42 C.P. y la ‘ndigena de! ert. 246, En cama la consulta la netitucén de las jsces de paz que consagra el art. 247, porque frenta a alos y ‘segin le experiencia de otros palses fo que sa excepciona es & ‘upa de juez técnica, pars pasar al de uno lago, tal camo Io cetablecs la ley 497 de 10 de febrero de 1989, que al crear las jusces de paz y reglamantar au orgarizacién yfancionamien- to, atrnuyo a esta juricocion especial ine siguientes caracta- ristioas: a] las dadisiones deberdn ser en equidad, conforme @ los criterios de justia propios de la comuridad (art. 2): b) ‘todas ns eetuncones que se reaicen ante le urisdiccién 6e paz serén yerbsles, salvo les excepciones que Is propia ley sefals| [are 4°}; cla ustcis de paz es indepentsente y autonome (art. 5°.) ia ustcia de paz sera gratuita (ort. 6°]; e) los ueces de paz dentro del marce de competencia que detarminan los arts. Sty 10° Ge laley, “conoceran da los confictas que las personas comunidad, en forma voluntaria yde comin acuerdo, sorne- tan a su conocimienta, que versen sobre asuntos susceptbies e transsccién, concieciin 0 desistimiento y que no seen suje- tos @ solermnidades de ecuerdo con le ey"; fos ueces de paz y {2 reconsideracion sarénelegidos mediante vatecon popular por los ciudadenos ce las comunidades ubicedes en la crcunscrip- ‘én electoral [art 11); g las jueces de paz y de reconsideracin Sserdn elagidos para un periedo de cinco aries, redlegbles en forma indefinida (art. 13); h) los jueces de paz y de reconsideraciin son particulares que administran justicis con fequdad, de acuerdo fon la Conetitucn y lai (art. 1.4; (la sentencia decisoria del conficen, deberd constar por escrito [art 28) j todas ins controversias que finalcen mediante fato en fequdad proferide por un juez de pez, sersn suscepribles del recurso de reconsideracion a petiién de fa parte inveresada propuesta en ls oportunidad legal (rt. 22). Enrelacin oon el ert, 245 de la Constitucin Paltice, que es el gu reconoce ls lamada Junsdiccion Especial indigena, cuando Facute 2 "Las autoridades de los puables indiganas" para “ojer- cer fanciones juriedicoinalos dentro de su ambito verstoral, de onforeided con sus propias narinasy praedmientas, sempre {que no sean cantrarios a la Constitucion y layes de a FepLol- C2", la Carte Constitutional en sendes peovidencias ha tenido ‘oportunidad de ocuparse del alcance de fa dispascidn constitu- ‘ional, para justifiaria y determiar el bito de compatencia teeritorsl y personal del fuera indigene, asi: el principio de la luersiced Gtr y cultural, y del respeto debido @ esas ciferen- Gs, se nvoca come la razén de ser de este [ursciccion espe- al, pocque “E Estado Social de Derecho y le demacracia participativa se hanide canstruyende baja la idea de que al raino Se la generailed no s60 no puede eer levado ala practice en todas les circunstanciss, sino que, ademés, elo no siempre es \eseable; [aides de! respeto a la dversidad, al reconocimiento {da las nacesidades especticas de grupos sociales diferenciedos por razones de cuftura,localzacién, edad, sexo, trabajo, etc tha sido un elemento esencial para la determinacion de los dare- ‘chos sociales, econémicos y cutraies y en térmings ganeraies, pare ol logro dele justia” ‘Gon respecto al fuera fs Corte ensenb que no obstante el reco ‘nocirriento dela jurisclecion especial, ela no significa que sier- [pre que estéinvolucrado un aborigen en una conducta reprocha- bie, see ésta la competente para conocer del hecho, porque festa fuero “bene limites que se concsetorén dependiondo de las ‘ireunstancias de cade caso". Por shora, dice le Corte, debe Sefialarse que en la noc de fuero inciyens se conjugan Hos factoras: ol personal qua procure determiner el indvisuo que debe ser jzgado de acuorda con las nermasy autoridades de su propia comunidad, ye! geogratica a territorial, “que permite que ‘cada comunidad pueda juzgar las conductas, que tengan Oca rrencia dentro de su terntorio™ Por supuasto, se anota, que les factores senalados pueden ser ‘ono concurrentes, porque algunas veces se habré de atender ‘al fuera personal al terrtanal, “indisentamente para deters 0s ero RANREZ COME rar la competencia™. En efecto, expres lo Corte, “le selveiin puede vanar sila accin tipica es cometide por risimbras de pueblos incigonas dentra da eu teritano, 0 si un indigena, de Fronera individu, incurre en ela sfectando a quien no es rriem= bra ce su comunided por fuers del émbito geagrafico dal res {uardo. Enel primer caso, en virtud de considersciones territo- isles y personales, las gutoridades rnsigenas sons lammadas @ tjercer fa funcén jriiccional: paro en el segundo, el juez pue- de cnirentar mites stuaciones no sokcionabies razonable- ‘mente mediante una regia genersl de terrtcraidad”, Vésse los ‘ejemplos que propane la Cort |A. Cuando la conducta del indlgene sélo es sancionada por el Cidenamiento nacions, en principin, fos jueces de Republica Som los compatentes para conocer del caso; pero coma se en: ‘uentra ante un indivioue de aera comunidad cutural. tienen eb ‘eben de determinar si el sujeto agresor antendla, a! memento ‘de cometer a ilza, que su conducta era resimenta negative, para efectos de recanacarle, 0 no, el derecho a fusro. En este {den de dees, as autordades rconeles pueden encantrarse ante in indgene que de mnere accidental nerd en reacién con una [persone de otra muni, y que po particular cosmovisin, ra le tro dable entender que sv Conducta en etre ordenamienta era ‘oneidenada reprochabe; ©, por el contraro, enfrentar un sujeto ‘que por su especial relacién con a corurided mayritaria conocle {6 caractar perjdcial dal hecho, sanconedo por el ardenamento jurdica nacional. Ene! primer caso, el intérprete debera conside- Far devolve at indviduo a Su entoro cukural, en aras de prest ‘var eu especial concencia étnic; en el segundo, is sana, en Principio, estaré determinada por sisters jurisico nacional. B, En el caso en que la conducts sea sancionada en ambos ondenemiants, af claro que ia diferencia de raconsldades no 120 cs ConsMUCOMLES DBL CERECIOPROGESAL inflye an fa comprensién de tal actuar como perjudicil. Sin ‘embargo, el intérprete debers tomer an cuanta la concioncia| ‘unica del cujata ye grado de aislarionto de fa cukura 8 ls que pertenece, pare determinar si es convensente que el incigens Seo juzgedo y sancionado de acuerdo can el sistem juriéico national, o i debe eer develo a sy comunidad para que sea juegada por eus propies eutoridades, de ecuarde 2 sus norma y procedimientos. (BT, 62 16 de sep. de 1836 y 15 de octubre 2 1997), “Tarpaca entenclemos come otros lo consideran que las juries jones intarnaconeles,excepcionen el principio dela exclusiv- fad,” no slo porque la jursticién es une emanacon dels sobe- ranfa que se ejerce hesta donde Laga ésta, sno porque l efica- ‘ia interna de las decssiones de los Tribunales extranjeros e528 sujeta a trarmite de exequatur, que es control de nuestre propia iumisdecion Precisamente, la coberaniay el limite que ela implica para el ‘jerccio de Ia funcidn jursdiccional, hace qua en el campo del ‘derecho internacional se manejen dos tpos de smunidedes: unas absolutas yatras relativas. Dela primera inmanidad jusdicio- nal gozan los Estados extrenjares, quienes nunca pueden ser Sujetos pasivos de une pretension en Triunal @ Carte extranje- ra. De la segunda inmnidadjunsticcional prtcipan los egen- tes dplamatiens conforme a la convenci¢n de Viena sobre rela Cones dilomaticas (ley Bo, de 1972), que en su ert. 81 asta- blece pare el agente cplomético en matana pehal unainmunidad Sree agh aso ors ent os 1, To, 421 i absolite de uriediccion, y en el campo ciily adrrinisteativo un inrmunided relative, porque exceptia dela inrrunidad los siier- tae casas: a} De ine ateida real sabre bens inmuebies parti Culeres radicedos en el territorio del Estado receptor,» menos: ‘que el Agente Diplomatica los nosea por cuenta del Estedo boreditante paralos fves de la misién, b} do una accion sucesoris| fen que al Agenta Diplomtica figure, a tite privedo y no en ambre del Estado aereditante, come ejecutor testementario, ‘edminstrador, neredero olegaterio;c) de une accion referent ‘2 ouslquan activa profesional o comercial ejrcida pe el Agen- te Diplomstica en el Estado receptor, fuera de sus funciones: oficiales © "Soetoro Satna emma onto ‘Porat at sei na Ema ars ten apa ceria ‘he can aes ho sn pou, Send u pro ala Stra os ‘eee nu oe eeuan corse cena Pet 122 3, INDEPENDENGIA JUDICIAL 3.4. Normatividad ets, 4o,, 113, 125, 298, 290 y 256 ond. 1 dela. P, 3.2, La Jurisprudoncia Le Corte Constitucional ha examinado este principio en las en- tencias T-006/92, T-490/92, (543/92, T-290/83, 0-41 7/93, 7147/99, 0-486/98, T-035/94, T-245/95 y C-037/98. Acer cade su aicence ha Scho: ‘mao stooge, t's Imes ao pure ero area os oo eee em 9 erm aeaes ge ne eeeeee 123 a 4 3 o Este principio sbusce evitar que as decisions jials sean {1 resutado de mnandatos o presiones sobre al funcionario ‘que as adopt. Inpide que «el superior erérquco imparta drdenes & su n= {erior respacto al sentido del fala. De magn modo se podria reservar la autenemia e independencia funcional de Un jue? de la Replica sila sentercia por él proferida en un caso espectico quedara expuesta aa interferencia prove siante de 6rdene's impartas por atrojuezajeno al proceso correspondiente... En alte principio encaja lo distrioucon de la compstencia entre sriediciones auténernas y separadas» dapuestas por 6! Sonsuitayente, Sickon eo, engenerainerpoernreairson 6) Blas 29 wen al vero inpugner. qu es genrico,y ros refine au forme do impgarenpetn COM fempoco enone rerurs guns 1h) Otro medio de impugnar las santencias condenatorias, con- Site ena ulideds 1) Sderscho a rgugnar i sentonia condenatoihace parte del ndckeo esencial del debido praceso. * 11.2. Aleance dt pin Tembinexprinco ganeral del dara proces cj cor ‘Te sn ne tornados ‘neds de rpugnacn owe los reatsos Fides, entendendo por tales os nstnvertos que el dere. Sho pracasel confer alos suetos procession pera que ora ‘bs dal oesaran de eeocheion fel dstevorete seen tendon oe errres on quo so hoya naira al proferra 168 PaNcIOS CONETTUCONLES DEL REO PDEA Conforme @ las normas consagrstorias del prncipia la determi ‘asin sal ndmero y clase de recursos correspond ol desarra- {lo eget, Ertre nosotros la ey idencics fs recursas ordnarios Fepostidn,apelacion, suplica y quje ohecho, ylas extracrdina- Res easaen, revsiin y anuacién del laudo erbitrl. También om recursos fa impugnacion en le accion de tutela is eloga- flones incidentales de nulidad procesal, asi como la Fosoneideracion con ocasién de las decisiones de los jueces de paz ‘Aunque el derecho de impugnacion es un derecho subjetivo cue te Deadves en la focueed de recurre, en el peooeso penal el Serecho a mpugnar la eontencie condenatarsa se entiende com parte avencal del debido proceso. Adems, como # proposito| Gel derecho de defenea se die, la Impugnacion es une de las fenifestoviones de écte, pues mediante [a intarposicin do los Fecurses logales el juice atsca Is decisin judicial que Io [esiona dentro del ddiogo eraurnentativo que correspande afro Tere Ee este un devecha garantista Ge la egaliad y de la justicie del proceso, 42. DOBLE INSTANCIA JUDICIAL 42.1. Normatividad ‘Art, 91 ino. to. ©. P. 12,2, La jurispradencia Enlas sentencias T-008/92, T-550/92, 6-019/99, C-345/83 {7 C-150/82, 051 came en a SE2IS7, aparece le doczrina const {usiona! sobre este principio. De ella se resalta: 189 a 4 a ose erweo aur coe 1 principio de le dobleinstancia esta establecido «come de- rrecho eonetitucional fundamental, y con carScterindispen- sable y obigatorio, pero referido sbo al caso de la senten- Ga condenateriae Conforine @ lo anterior, en materie de autos a ley puede soefalar un régimen general y las excepcionas que corres pondans. Luego advieree: «La Corte no enouentre que exis- fa obsticuloalguno de cardcter constitucionel, que imide al logiledor prover sabre la materia en certas hipétesis fcerea de la improcedencie de recursos contra providen- as listintas de las santencias condenatarias; en esto sen tido se tiene en cuertalo dispuesto por el citadoinciso ouarto el erticula 28 de la Carta, en concardancia can 2 inciso “10, del artiada 31 dele C.N., en la parte que indica que quien sea sindicado tiene derecho a impugnar la sentencia condenatoria, y @ no ser juzgado dos veces por ef misma hecho La dobie instancia a través de la apeacién y la consutta no hace parte del debido proceso, we manera ebstracta y go- néricee, como si hace parte de su ndcleo esencial ela posibi- lida de impugnar las sentencias conéenatorias. «£5 otros ‘érmines, une norma que impide erougnar las sentencies condenatorias sera inconstitucional pr volacién del debico proceso. En todos les dems casos, fs doble instancia 6s lun principio constitucionalcuyas excepciones pueden ester sametides en Ia ey La excepcién de le dabe instancia «se encuentra en cabeza el lepsiador para que sea 4! quien las determine, desde luego, eon abervancia de las derechos, valores y postal 170 os srioligicos que cansagra a Carta, paroularmente con ‘observencia del principio da igualdad, que no permite conte "ir un tratamiento desigual cuando no sea rezonable 0 justor. 42.3. Aleance del principio Blart. 81 de le C. P. acoge el sistema procesal de la doble instenci, pro dejande shierts la posbildad lage de was excep- Cones, os dacir, de casos consagrados por la ley que no fsdmitan el recurso de apelacén, ri el grade jurisdictional de onus El art. 31 no adite otra intenpretecién aqualla que emerge Gu clara vonor Lit, 0 Sea que toda sentencia jucical podrés [carge-acutad de le parts] ser apalaca 0 consuiteda (grado Dficioso), salve que la ley expresamente consagre lanegacion dal recurso, sin que sea posible hacer escisiones entre es normas ‘que antes consagraban le negativa y las que posteriormente Io Ragen, porque las normas que antes regulabor el punts racultan perfectamente compathies con el art. 31 de lo Canstituczn, fue 6 decr verdad, e= nueva norma an cuanto 8 su raigambre ‘Cansttuconal, pera ne en relacsbn con su contenido, ya quo el ‘Setema da I dobleinstencia como principio lege ya esta con- ‘Sagrado en ioe dstintos codigos de procedimiento: articulo So del C. de P. C. y artieulo 15 del C. de P. P. anterior. Por ‘supussto que amos dendo margen a las excepciones legeles. ‘come ahora lo hace ls Canstitucion Politica, im 15. PROHIBICION DE LA REFORINA EW PEAJUICIO DEL GwcO APELANTE 29.4. La Normatividad Art, 31.6. P. 13.2, La jurisprudencia La doctrine de Ia Corte Constitucional sabre el principio que prohibe la reformeto in pejus, habla sido expuesta en las sen- fencias 7-41.92, T-474/92, C-055/93, 7-237/93, T-575/93, T.596/93, T-099/04, T-289/94, C-885/94, T-140/96, T-185/ 95 y C1Bs/S3. £n todas estas sentencias, con excepcién de a T-148/95 y T- 155/95, se habia establecido une doctrine uniforme acerca del princi en comentario, segin le cual «sila apelacén y las pre Yensiones que ela involucra, suscitan y mitan la competencie (el superior (sentenciae T-474/S2 y 265/84), ysielsistome facusetorio y la na reformat in pojus imponen al superior 1a prohibicin de actuar ex ofiio ye cirounsanben s hacerlo sélo fon cardcter dispositive (sentencie T-474/92), entonces éste fs incampetente para prorunciarse sobre la legaidad dela pena impuesta al spelarte nico, cuando el punto no ha sido objeto det recurso (véase también la sentence T-413/82)>, (SU-S27 66 jue 27 de 1995, M.P. Corlos Gavia Diez) Esta dactrng, se rete, habia sido contrariada por las senten- as T-148 y 7-185 de 1895, al considarar que asi se tretars do la apeecién exclusiva del condenado, wsu interés en ls revaca- '86n 0 dominucién dela pena debe ceder ante el del Estado en ls we PREPS CONSTTUCONNES OL ERED PROCES, ‘eqravaciin de la miamer, Eota interpretacén, en sentir dela ‘rapa Corte anulaba os limites impuestos por ef Constituyente {de 1991 al poder punitive dol Estado con le consegracién de la 10 reformation pejusy enon isin idem, En a sertencia SU-327, antas citada, con ponencia del Magi ‘redo Carlos Gaviia Diaz, expresemente la Carte deseché ls ‘doctrine contenida en laa Sertencias T-146 y 1-155 de 1995, para coger como siya la qua all se expone en torno a los siguientes crteris: 15] Elprincpia de legaldad constituye wde un lado, una gorentia de libertad y Segurided para el cudadand y, de otro, corre Jativamente, une auzatimitacién del poder punitive que el ES tado ejerce par medio de sus leisladores y ueces. 1b) nese contexto se enmarca et princiio de la reformatio in pojus como «prince ganecal de derecho procesal y una farentia constizicional que hace parte del derecho funda- rantal dal debido proceso» ©). De acuarda con este princio, cuando el rezurso de opel ‘in saa interpussto exclusivamente por el procesado 0 su Sefencor, el uez de Segunda instancs na podr’ empeorar le stuacién del procesado, agravando la pena impuesta por el hea de primers instanci.» 1d) +E una menifestacién del principio de congruenca, sagin ol ‘ual las pretensianas del recurrente y su Youuntad de iter- poner el recurso, condiconan la competencia del juez que feenoce dal mismo», ©} La eapalacion siemere se entience interpuesta ena desfon vvorable, tanto que una slzada propuesta contra une decisén 173 |que de ringuna menere egravia, tendrla que ser dectarada esirta por falta de interés pare recurri 4] El eprincipio opere sélo en favor del imputedo, y no de los tdemés sujetos pracessles; por eso aunque al condensdo na racurra y la sentencia eélo com apelada por la parte ‘acusatona, ef Ministerio Publica o a parte civil, el juez de ‘Segundo prado debe dictar sentencia ebsalizora si encuen- ‘tra quo el hecho no canstituye deito 0 no existe cortez ‘sbora Ie axetencie del misma a sabre le responsabilded del rocesados 1) Esun principio congruente con ta adopcin del sisters pens! ‘scusatorio, ecuya esencie ragica en separer les furcones te ecusacin yjuzgamiento, para colocer en cabeza del Mi- ister Fisoal Ib titra de la primera art. 250 de ia Carta), y en esa matlda Convertir al uez en un tarcaro inde- pendinte, desigade de muchas de las fursionss qua oficosa- ‘mente debia cureir enol sister Inui arterors 13.2. Aleance dal principio Le protiticion de reforma en perjucio del rico apelante are un principio lage! consegrado por el art. 257 del. deP. Givi, que ‘qued constitutionalzado por el art. 31 de la C. P.. Adernis {ra un princisio especial, exclusiva dal C. de P. Civil y ios tibuta- Flos de éste, que edquiné el cardever de general al hecerse ‘extensivo ol campo processl penal, donde el Cécigo de Praced rienta también lo consagra coma norma rectora [ars. 17) Como su nombre to ince es un principio propio del recurso de ‘pelacién, pero no exchsive porque se hace extensivo 8 recur~ 08 andlogos camo el de casacin, donde hela un perfecta aco- 174 ‘modarnients por ef cardcter esencialmente dispositive de este recurso, por cuanto el principio se explica an un sistema acus~ store. ‘De otro lado el principio se igaintimamente oon los principio lagoles de lo personaided del recurso (se recurre Io Perjuciciel y ese agravio determina el interés para recurre) y or la congruencia de la sentencia, porque elles tambien son sdocuados al sistema dispositive 0 acusatore. CConsideramos que al principio rige @ toto lo largo del proceso y fen el grad jurtedionanal de la consulta, por la menos en el proceeo civ donde éuta ge curte en faver de les personas que Icentiica el art. 385 de. de P. Civ. En relacin can el primer ‘sspecto ciscrepamis de le doctrna de a sao de casscién penal te la Corte Supreme de Justicis que lolita @ ls sentencia, Dvidendo que en el decarrolle de! proceso se pueden dafrir in identas o wémites espacales, cuyas decsiones pueden ser ape ladas con vigencia dela restriccion en el eangcenento que ipl tl principio en comentario, vgr. el auto que decide el nciden- te de levantamienta de medidas cautalaree sn kmponee conden 8 page de peiuiias, evento en al cual el superior reschiendo a apolacién del peticionante de la medida, no putiera reformar la provensia condensndole al page de els, “14. LEGALIDAD Y LICITUD DE LA PRUEBA 14.1. Normatividad fete, 29°. P. 14.2. La jurisprudencia ‘Acta principio se ha referido tangenciakmenta ta Corte al abor- ‘dare! toma de! derecho fundamental del debida peeceso, prec 175 065 Feo POMPE? GOMEZ ‘samente por hacer perta del nico de ésue y del derecho de ‘dofence, la lagalded y icitud de as pruebas que han de eveluar- fe en el proceso judi Esta norma, refriéndege fa Corte Constitucionel el iciso final del atiouo 29, signifies que sobre toda prosba “abtenda” en teles condicsones 0 sducide par parte meeresada a adetida con Perici del debide proceso, pende I postilded de su declare ‘Son juciest de rulidad. El término de “pieno derecho" que utiliza lasnorma noimpiee que la nad abe ~autométicamente", sino ‘que 8 precisa, como se anot6, la daclaracién judicial, pues pars {Que puads haber una operancia auternitica ge cequeriria que SStuacin recayera sobre hechos y Crounstencias que no exigie- ren ta intarvencién de la voluntad humsne, que na es lo que ‘suceds con Ia instinicion de las nuldades pracasales 0 probeto- "is, que e6 la consecuencia da viios relavantes que no siempre fn de Tacs eprehensidn (C-372 de 1997). 14.3, Aleance dol principio Con este psincipia le Constitucién rechazs todo sstama de invest 986, juicial 9 extrajudcis, que impique acide a credios ag ‘ros corera el procesada o los testiges. Guedaron asi vededas formas thnicas de cbtanarinfornacin como elnarcorterragetar, latiprosis, ol detector de mentirss,y por supuest la tortura, los ‘rains orusies, ihumanas o dogradantes, proscrits por el ar V2.de\6C. P. yle ™ {Pats Uae ts tn. ooo Maa py. 179 4 Fano Rane? OOM 16, PRIMAGIA DE LOS DERECHOS INALIENABLES 15.1, Normatividad et, 50. ©. P. 45.2. La jurisprudoncia Es en la sentencia T-OO6/92 donde se verifica la priitive y ‘acaial idea que ls Corte Constitucional iene sobre al alcance de ‘este prncpio, 0 cual enmarca dentro de la consideracién dela persone humana y de su dignided como elemento central del ‘nuavo Estada de Derecho. Al respecta dice la Gorte, justice ‘doe! principio en comentario: ‘La persona hurnana en su marifestacién individual colctiva os Contempiada an le Conetitueidn como fuente supreme y Ltina te toda autoridad y titular de derechos inalensbies para cuye proteccién so erea ol Estado y se otorgan competancias a sus begentes. En efecto la eaberenis reside exclusvamento en et ppusba y de él emnane ol poder public (C. Pert. 3}: ef pueblo lo ‘onstituyen las personas en ejercicie da sus derechos politicos, «<0 Estado reconoce la primacia de los derechos inalienales {ela persona humana’ (C.P. ert. 5). Las autoridades de la Fepitiica estén instituidas tal es larezén del Estado- para pro- tegen a todas las personas residentes en Colombia, en su vids, hanra y tienes y demas darechos y lbertades y para asegurar el ccurnpimienta de los daberes del Estado y de los particulares. (CP. are. 204 ‘Los derachos y garantias de las personas consagradas en ls Constitusidn, ingpinadas en el respeto y promecién da la perso- 180 ra hurmena,eatiefacen necesidades subjetivas de os individuos y ‘orupos sociales frante al Estado y entre a (func subjecva, y, Se ctre parte, ntagren de manera abjetiva ol Estado de derecho {funcian betes)» De oteo ledo, en la centencia 0-279 de 1999, se aborda el tema dal princi est principio de primacta de los derechos (C.P. ort, 5°], indice loperedor del derecho que interpreta la totalidad de las spo- Siiones de le manera que mejor consute el ejerco pleno de las derechos reccnocios en el ordenemiento jurisico, Par es, for ejemplo, les normes que impanen sanciones o que estable” en ites los darachos son de nterpretacion restrictiva. Las Foglas que elintérprate pretends derwar de uns disposicin fur tice, el angen de este principie hermenéutic, carecerén de todo valor juridic, 415.2, Aleanee del principio CCusndo se trata de normas, princpios 0 derechos de aplicecion preferente 0 con primacia’ privloga, la labor hermenautica ‘Soma que a eit [a propia palabra porque alla pr se exprese ‘peso de Importancia que al principio quiso dare el constituyente [stares del intérprete toma la ruta dela justiicecién. Ocunre fsto oon esta prinspio, con el de prevalencia de los derechos de Ios nifas, dal interés general, da los trstedos internacionales sabre las derechos humanes, dela rested sobre las formas en fa relacionlaboral y da las narmes sustanciales. {5 recondcimiento dela primocia de los derechos inatenabies de la persone (ere. 50, coma fo ce ls jnsprudencia, consti Ui limite sustancial en el eeresco de [a autora y Se enerbola 181 0 Fun nex Cove ‘como principio sumo de iearpretacion, porque esa norm sigue sefilando como centro la persona humana. Hacer operaciones jurlécas que la contrarien ola dasvirton e& desconacer el pro- Pio Estado Social de Derecho. Por lo demés, la norma debe Verse como un mecanigma general de provecsion de las dere ‘hes humanes. 16, PREVALENGIA DE LOS DERECHOS DE LOS Milos 16.1. Normatividad het, 44. CP, 16.2, La jurisprudoncia Sobre este principio se identifican las sentencias T-402/92, T- 531/92, C-009/83, 0-019/89, T-189/83, F-329/03, SU-491/ 93, T-388/94, C.041/84, C-458/85, T-409/98 y SU256/99. Enestas sentencies se exponen los siguientes anterios para la interoratacion del principio: 4]. sComo garantia del desarralo integral dt nino, le Const cidn consagra derachos de proteccioa (C.P. art. 44) con los cusles lo ampara de la discrimnacion de las précticas Tesivas @ fa digided human y de cualquier tipo de indeten- ‘sién que coloque en poigro gu desarroi fisico y mental. 1b). Enese marco de proteccidn se enmarca la norma que hace provalecar los derechos de las ros esabre les derechos de fos cama. 182 ©) Le Gorte reconoce le titular de derechos fundamentales ‘dolnesciturus bon fundermanto en fa lay ylos trated inter nacionsles. Al respecto die: «Conetitucinelmente la proveccin del no nacido se encuer- tra en el preémoule y en el erticua 11 {del derecha 3 la Vida), por via directa én ericul 43 con la proteccion de lomujer enestada de embarazo, Ademée, el srticu 44 de la Cares estabiens coma pnmer derecho fundamental delos rides, el Gerecha a la vid, 8) Este principio ge entronce con da finalidad protectore que Caractere toda Ia legslacén relativa a ia infancla como Igiere que ela se inspira en el claro proptsita de asegurar Su felicded y desarrol intograt. 6). sles normas sustantves y procedimentales en materia de farriliay del derecho de ls enares eben intarpretarse en ‘consonancia can los derechas fundamentales de rio con- ssagradios en le Constitucions 4} artoulo constitucionel que consagra los derechos de los rina pasee ne especie fuerza narmativa en relacion con Tos demés derechos ecanémices, sociales y cuturales. El ‘constituyenta puso un énfasie especal en lo ansra coma teeta derecho vinoula @ todos los poderes del Estada. Blo se refleja en la redaccién delinciso segundo dal articuo 44 y, fen espacial, en las expresiones ala Tamia, le eociedad y el Estoda tienen le obigacion de asistirypratgor alrite para orentizer su desarrallo rménico e integral y sos dere: ‘hos de los rinos pravalecen sobre los derechos de los sdemase [T-586/83) 169 TE 0 FERN Rae? GONE 48.3. Aleonce del principio Es esta otra principio ganeral, por cuanto es faz yvélda por fuera del proceso familar: rige, entonces, en el proceso penal, ‘cul administrative, etc, donde se debatan derechos de los ni ‘hos en los terminas del art. 44 cela C. P. No se trete de ‘escanccer los derechos de Ins demas, sino que ante la dud azonable se deben priviogiar los de aquélas, siendo este un ‘mecanismo generel de proteceién, por a tanto de apoaciin de recta a nme, CConforme a la Corvencién sobre los derechos del rf, edoptadle por a Asernbies General de la ONL 2! 20 de noviembre de 18S { catiicada por la ley 12 de 1991, por rio ea dobe entender “todo manar de diez y ocho anes dé edad, principio en comentaria coma bien ha tenia oportunidad de sostenerio i Corte Constitucional(C-005/S3). 50 justice on ‘onsideracion ol estaco de inmadurez que se atrouye al menor y ‘estado de indefensicn que la propie normativided constitucio- fal prasurne (ar. 4]. Con todo, ome iguaimenta le he adverti- oa Corte Constivscional {C-041/94), la operancis del principio ‘ebe darse evtando al menar sacrifice de los derechos de los ddemés, cao en el cusl ef operador urtica debe hacar canside- raciones atinentes 8 la necesidad y proporcionalidad de dicho ‘scrifice, puss séle as! s@ le otorge razonabiided a ls apicacion dde-un principio do esta naturaleze. En otnes peladras, como ‘este principo, sepin se anoté con ocasion dal anaiss de priac fio de iguatiad, obra como ura especie de equitrio entre los rinos y las demas persones, el sacrifcio del derecho de éstas, {ue os la pravalencia dal derecho de fs nines, solo debe legar hasta lograr objetiva yrazonablemente el equitorie roto por fs ‘estadas de inmadurezo ndefension presunta rea FRIIS CORSTMUCIONALES CL ERECHO PROCESAL Por uitima, eanforme a la doctrina de la Corte Constituciona, ‘ig proteccién especial de los niftos y la. prevalencie dé sus derechos -consagradas ambes en fa Constituciin de 1881- fencaonan valores y principics que deven presidir tanto la inter pretocidny eplcacin de tades las norynas de justica aplicables| Sloe menores, eomola promocién de peltices ya reezacién de fcciones cancretas que eseguren su bienester” (C-019 de 25, Ge enera de 1993), 17. PREVALENCIA DEL INTERES GENERAL 47-4. Normatividad Prodmbulo, arts. 10. y20, CP. 17.2, La jurisprudencia La doctrina acerca de este principio 9e conforma por lo emues- oppor fa Corte Conetituconal en las santorcias T-55'1 de 1982, 58U-481 de 1899, C-309/97: 13]. Segin el ert. 10. en armania con ol Preémbuio dela Consti- tution, @8 esta «ina de las carectersticas esencioles de la orgenizecion politica 1b) Este principio se ratfica por varies praceptos constivucio- rales, especialmente por el ars. 58. ©}. Los éeganas que integran fas normas del poder publica y {ee demés dependences del Estada han de tener est pri ‘pio consttucional coma critario bdsico en ol ejercco de Sus etriouciones y competencias» 185 4d) La sctvidad do la adinistrecin pica tiene que curilir- se, entonces, dentre de uns perspective en fa cual na 8e Pierds de vista , por ol cantrario, se persige de rnenera Eanstante y prioritari el benefica colactiva, con la eptica Social que lo antepongs e invereses individuals o de grupoe. ©) a digndad humana, la soidarided yl prevalencia del interés {genersl son principios que ne pueden ser erulados xen fa _Spicacién de‘otro de kul jerarqula constitucional 1) si aras de a primsela del interde ganaral ae autoridades no pueden desconacer el principso de «nad humana ni \deducir dal debor da soldardad obigacones que rompen los Principios de equiibrio en las cargas pubiions (C.P. art. 13) (0 de reciprocidad on las relaciones entre al individu y Estado (C. P, arts. 20., 50, y Go.» 17.2, Aleance del principle Alconsagrar el art. 10. la prevalencie del interés generel coma uno de ls elementos del Estado Socal de Derecho, traja @ la CConstitutién una estegora flosaiee que ee acomadeta perfec tamante ala ides que sobre este concerto dal Estada ae maneié tele Asarnblea Nacional Constituyente, es decir, un Estado hur ‘manista, compromatida con el homie, pero privegienda au con tdcién social, 0 sea trascendlienda el interés privado a particular. Ese interés general es ol interés pibico porque se entiende que Estado es social y esta organizade para benetico dl hort Yyle sociedad. Pare ese interés genaral también ee ol inearés ‘Social conformné a las asimilaciones que heoe el art, 58 dela C. P. porque es uno dels fines del Estado la prosperides general |a prosperidad social. Teorias camo la del ebuso del derecho, 18 originata, como bien se sobe, al interior de las doctrines Lisprvatistas, adguiare su linajé constitucional en un principio como el que se coments, puss el mismo esteblece como imite ‘el derecho particule el interés genera y el propo interés so- (al, pare cuya proveccin adernas se establacieren sccones, Fecursos y procedimientos, como los sealades por los arts. 88 'y 89 de ia Constizucién. En ta sentencia 6-308 de 1997, la Corte Constivucional al oo parse del punto concemmiente 6 los derechos de terceros, la prevalencia del interés general y la autonoria individual, como factores reloventes en el exemien de constitucionaldad de la norma que dispuso la oblgatoriedad dol uso del cinturén de se {gurdad en los vehiclos autornatores terrestres, consider’ que an caso de confcta nrasoluble entre derechos consttucions- les fundamental, como la foertad ya autonors personales, y ls persecuciin de objetivas estatoles de interés general, coma 21 aumento de la produccicn nacional ola protaccion do la finan- ‘acide le segurided soci, debe eluez consttucional dar una prevelencis prime facie alos derechos de la persone, pues es la {nice forme de conferir un efecto interpretatva real a la Carta derechos”. No puede derse prefarsncis, agrege, als intere= 506 de ia mayoria yl benesta® colectivo siempre que entran en canfleto can un derecho canstitusonel de una persone, cone ‘ién de utele, porque el principio “en sirisme” na es “vaioso" ‘eomo dina Habermes, pugs as un principio de eficiencia que racionaimente debe cedar ente tes, e808 si “valiosos en si ‘rigmos", coma lo san el debido proceso ylatutla juts efec~ thva,@ ln cuales sive. Ow manera que este no 65 un principio basico 0 findacional, sino que e8 un pnacipio eminantemente vslitario, qua entre nosotros tuvo orien, como ya se explicd ‘came cansnovanca y con a fn de corregr disfuncionaliades de fp judiesture, Antes que principio, es sirelementa ol carécter instrumental y epcundaria del derecho process, inside como ya se djo, para ls efcacia del derecho sustancial Segin lo anterior, este postutado nunca puede entrar en confic- tb 0 colin con darachas fundamentalae came los de lbr@ ac- 200, debide proceso, defensa 0 tutela efectivs, porque 8 priri fe posible hacer une jererquizecioa que implica que ela escola Inferior quede el prio abjeta de ands. Por cansiguente, ‘ouando de accion de tutela se trata, su arpara resulta proce- 228 PRNCEIDECONSTTUCOARLES DEL OECD PROCES, dente en conexién con alguno de los derechos constituclonales fundementales atrds cenlados, Iqualmenta, la caracterizaciin que de al heros hecho, también permite conclu que no hay liger a conficta entre la normna sustancial ya procesel, pues la primera siempre debe privlegiarse en eu aplicacien siempre y ano no estén an entrediche 0 smenszados las dorectos fun- ‘damentales de cantenido pracesal (debida proceso, igualisd, defensa, etc). 3, EFICACIA DE LA TUTELR JURISDICCIONAL 92.1. Normatividad Predimbuto, arts, 20,, 228, 229 y 280 C. P. 32.2. La Jurisprudencia Este principio no aparece expreso en nuestra Constitucon, raztn por lacus, al var, la Carta Canstituconal aunce ss ha ocupado de 6, sin embargo, ele see he referido @ principios de eficacia y tfcienca de ia administracion publics en general. Eni otras sen- tenciag, estos priciios han Sido tratadns en la T-OOB/92 y T= 220/83, También at prncipio ede efectidad de los derechos y ‘garentisse. Can racpacta a eat timo he dicho que él as -consus- fencia! al concepta memo de estaco socal de darecho que se [Propane camo mision del Estado y ustfieacion de a autoridad por bea convert fs derechos formas en derechas reales. 32.3, Aleance del principio {lardinal 10, del ericulo 24 de la Constitucién espaflaestablece: ‘Tada las parsones tienen derecho acbtener la tuteleefeciva de 228 los ueces y Wiburalas en el eercico de sus derechos @ intereses legitenes, sin que, en ringist aso pueda producrse ndefensién» Este procepta consagre coro derecho constitsconl fundamental le tutelajurscicconal afective. No existe en la Constitucion ruesira, articulo con contenido normative srrlar; pero éste pusiera construirse a partir del Preérrolo cuando dectara como Valo y fn la justices, el articulo 20., al senalar como fin del Estado: ela efeecivided de las princpios, derechos y deberes con: ‘sogrados on la Gonstitucins,ylos arvculos 228, 229 y 230 al estatur coco prncipos la prevalencia del derecho sustancial, ol bre acceso ala administracién de usticia y el snperia dela ey (Desde iuego que e! deracho asl sstemiticamente concebido no {ene valor absolito, porque esa efcacia dela tule jursciecional 1261065 concebible por ratio de un nstrumenta vido formaknonte y-ecaz jriécarente, es decir, un proceso debido con iguales ‘rantes de defensa para ambas partes. La vaidaz formal del Principio no parece orignar duds, pero su sfcaca, qua etre otras ‘0585 0s desafio pera juicaturs, no sblo depende dela labor del iuezen el proceso, sino del ocorgamiento de nstrumentos legates, ho previstos hoy que permitan sancar y superar os impediments ¥ deficencias deforma que anonasan @! proceso, ye atorguen al juz ol poder sufcierce para ejecucén dela sentence, como bien '5e consagré en el daccato 2581 de 151 can respecto ala san- ‘tenia que concede la tutela Siniar interpratacion ha dado al arccuo 24 de ia Constitucion lespanola, la doctrinay urisprudencia de ese pas, inclayenda al ‘mismo Trbunal Canetitucions. As ee le en santencia de 21 de ‘marzo de 1981: «El derecho aa tutes efeciva no eomprende “obviamente- el de obtener une decisiénjudisl acorde Gon las ‘pretensions que se formuian, sino el derecho a que se dicte 290 tune resciucon en Derecho, siempre que se cumplan os requis- tos pracacales para els or au parte, la doctrine particular aspaficla rezone en igual santa! eEn definitive, el derecha que ol rticulo 24 de le Cons- ‘utucién reconace no a= otra qua el derecho de acceso a proce 50 sea 9 un proceso no desnaturelzado que pueda curl su Imisin de sotitener las pretensiones que se formmuon. Lo que ‘ho supona en modo algun un derecho e abtener una sentencia ‘evorabl, ni siguera una sentencia en cusnto al fondo». ‘Segin o!Tibunal Canstitucional, este derecho, que alé se reco- nove expresamente, comma antes se anot6, se integra con los ‘igulentes princpios y subprinepis: el derecho do acceso, el ‘derecho @ Una sentencia fundade en derecho, el derecho 8 la bfectiided o ejecucién de la rasaluciones judiciales y el derecho ‘los recursas lagalmente prevstos. 38, CELERIDAD PROCESAL 33.1. Normatividad evs. 28 y 228 Cs 93.2. Le Jurisprudoncia Feiteradamente [a jurisprudence de la Corte Constivuclonal se rofiere ale ooleided en los pracesos, no sélo pera advertir que tia hace parte det detido proceso, sino también para mostrer eat ETE van injusta es una docisién tarcia. Esta docirna le sient @ partir de a sentencia T-008/S2, cuando express: eLas dlscio- Fes ndabides an el curso de os diferentes procesos desvirtian la efcacia dela Justicia y quebrentarse el daber do diigancia y 29lided que el articulo 228 impane alos juaces que deen tri= ‘ar las pesciones de justicia de las personas dentro de unos plazes razonables. Sopesando factores inherentes sla Arinis- trecién de Justicia que exige cierto tiempo pare el procasarson- 1 de los petcianes y que estan vineados con un sano criteria le cegunie juridioa, eonuntaenante con otros de orden exter~ ‘ho praps del madioy de as condiciones materiales del fucio~ ‘amianto de reapectivo despacho judi, punden determiners etnasos no justificedas que, por apartarse del rendimiento me- dio de tos funcionarios juicales, vlan el correlatvo derecho fundamental delas personas a tener un races Sly sinresra- s0¢ indebidoss. Véase, entre otras, las sentencies T-150/93, (6-117/83, C-857/96 y C-248 de 1999, Enla sentencia 037 de 1986, acerca de principio de celeried se expuso: 2). “al derecho fundamental da accader a a administracion do justicia implica necesariamente que el juez resvelva en for~ ‘a imparcal, efectiva y prudente ls diversas stuaciones {que las personas someten su conocimiento. Pere lograr Ib anterior, es requisto indispensable qua al juez propugne le vigencia det principio de ia eegurdad juridice, £8 deci, ‘que asirna el compromiso de resolver en forme dgente y ‘portuna os canfictas a él sametidos dentro de ios plazes ‘ue define el legisledor. Por alo, este Corporacion ha calil- ado, come parte integrante del deracho al debi proceso y de acceder a la adminstraciin de justice, el "derecho 292 PRNCPIOSCONETTUCONALES DL OERECHO ROCESAL ‘fundamental de las persones @ tener un proceso dgily sin retrasosindebidos" 1b) “Consecuencia de los argurnentos precedentes fue la con- ‘segracién en el articulo 228 superior del deber dal juez do bserver con dligencia fs términas processes y, principal ‘nent, de aencionar su incumpemienta, Por ell, 1 norms bajo exemen esteblece que de darse esta situacion, eres pective uncionario pods see sarcionado.con causal da mela enducta 33.8; Aleance del prin La celeriad es econo process. Ta vz aqusa es corolrio de tao arbes une misma cuestén. Sin erbergn, pensamos que el aringpo consttucional es la primers y la segunda, porque es [a celended la que reconoce axplcitements ls norma princi. El proceso judicial slempce se ha enfrentado con el deme de sepunded 0 celeridad, Entre la recta y la curd justica, to ida! ee lograr a primera con le segunda, porque la morosidad, tl retardo inustificade “contiene une gran dosis dé injsticia, Con razsn Cauture duplicaba el Yempo come ore del proceso. La paranterided des plazos legales 0 judiciles es Carrelato dé la-celerided, aligual que le precusin, ls concentracion, fe facu- tod parle renuncia de términos, la prescindencie de prustas ‘cuend el tama asta verificado, na sentencies antcipadas, at. La caleridad no 9s un probleme de simple operativided de Is Justicia. Ela toca con lo més hondo dela digidad humane, pues eda sitve @ esta una justicia tarda; maginemos una declara- ‘ion de inoceneia af cabo de las aos, tal vez cuando ya se ha 293 sufrdo af escario pablico y a propia céroel, De shi que le cele- Fidad ola na discon injusificada haga parte del rdclen esencial de derechos como el debide proneso, pero tembign del libra 2c- 280 y sin dul elguna del derecho a une tutela usical efectiva Ciaro esta, que come toda derecho no es absoluto, pues la mis- ‘me Carta Poltice, astablece un factar do relativzacién cuando faifica al retardo como “injustificedo", porque pueden darse rs- Zonas abjetivas que impidan el desarroto narmal del praceso, incluyendo su decision, piznsese en el exceso de trabajo, le can- ‘duota dlatori de las partes, las caussies legaes de suspansion ‘interrupcisn, ete 34, OPORTUNIDAD PROCESAL 34.1, Normetivided Arts, Bo, 28 y 228 6. P. 34.2, La Jurisprudoncia Eta princsio no ha sido analizado por la Corte Constitucional, funque si Se he referido en multiples ceasianas al fend:neno troqoldgico del proceso judicial al tretar la larmeda celeridad process, 34.3. Alcance del principio Hemos utiizado al calfieativo de sopartunidads por el de ‘prectusiéns 0 seventuaideds, no slo por precision en ellengua- jp, ino porque el acagido es el que sabre entiende la Cansuitu- ‘any estd mis acorde. con la cronologi del praceso ylacbliga- iin 0 facultad de los sujetos pracessles de someterse a eto, Cuslquiere sea a denaminacién que se acepte su significado es idence: el principio westé representada par el acho de que Iss ‘iversas tapas dol proceso se desarrollen en forma sucasive, ‘mediante la ciausura definite de cada una de wes, impiciéndose fel ragreso a atapas y momentos procesales ye extinguidos ‘anstimedos. 1 proceso per se y gor su fnalsmo debe estar regido por un Principio come este, cies que se quiere garantizar au effcacia. El proceeo, por contrariar todo su sentid, entra en crisis cuando Se paralza poraue el pencipio no opers; ahi la terminecion anormal for perencion que es cansecuencia de ls eplcacn del principio, 0 los efectos que en la prescripcén de la eonkn tiene en el proceso Penal, elgunas veces, oan los derechos de libertad en otras, Entonces, el desenvoviriento, deserraley evoluciin del proce- 50 esta garantizado por la orgenizetion que de 4 se hace to- ‘manda camo parémetro el tiempa para la reaizacign de los dis ‘intos actos proceseles. Los términas ypazos establecidos para fl érgano jucivil yen general para tos Sujetos procesales con- Sultan este principio, pero no todos curplen igus misién porque hay ave distinguir entre Lérminos ordenadores y términos Draclsivos, siapareian one la adrdida de le oporsunided. Gene- Falmente ioe trminos que nuestra legisicion astatuye pare el jez gon de la primere clase, mientras ol vencimiento el vérmi= ‘ha no tenga consecuencies qua implquen la pércida de la com- petencia pore producirla decsion. Esta utima, otre rezén para ‘optar por un concepto diferente al de preclusin. 2 Gane, Comes, Opn a a 8 235 z En otras palabras, se reitera, como e proceso se consttuye por un canjunto de actos dirigdos aun fin, culquiara su nature- feza 0 estructura, sa caracterize por el dnarismo que de sigh- ‘na manere garentizan ia croncloglay la teloologis que forge Esa. entonoas, donde cobra razin de sere! principio de opor- ‘unidad o eventualded, pues al canformerse el proceso por fe- ‘Ses 0 estadios, 22 al al que posite su avolicon, ya que al fbrirse una nusva etapa, ee clousura defiisvamente la prece- dente. De manere que ademas del punto culminante de lo preclusién, cual es lo casa juzgada, estas definiiones también Eperecen Gurente el eurso del proceso © medida que se van fgotendo lee fanaa 0 etapes, pero sin que estas preciisionss internas tangen nada que ver con la dal uegamiento definite, ‘Como execs Ghiovenda, quien entre otras cosas es el promotor ‘ce concept “preclusion®. Aguelas, dice el autor italana, sin Gude sigue procuren “un dessrrolo ordeneda" del proceso con ‘fectos coneretaa yrelativos can elerioma proceso, porque “la ‘precision durante el jucio ro exclue sin la determinads cuss- tion resuelea, asi como todas las Subcuestiones en que ésta puede diicrsa". 436, RESPONSABILIDAD OEL JUEZ 95.1. Normatividad Arts. 10,, 20.,40,, 80., 83, 88 y 80. P. 35.2, La Jurisprudencia {Le responesbilded del juez:_ penal, dsciptnaria y patrimonisl. ‘coma principio constitutional que es, noha sida objeto de end Sis sistemétice por la Corte Constitucional. En algunas ovasio- 238 FaNoPIs CONSTTUGONALES DL DERECHD PROCES nes indractamente he sbordedo o tema al estudiar a femads “razarva morale en torno al norbremianto de fos funcionarios ludieeies (1-591 7-602 de 1982). Pero es ena sentencia C- ‘417 6e 23 de agosto de 1883, donde empieze 8 confarmar Is ‘doctrine sobre el punta al dajar on clero que sLa respansabiided tlscipinaria de juaces y magistrados no puede abercar el campo funcional, esto es, el que atone @ is autonomia en la interpret cién y aplicacion del darecho segin gus competencias. Por con Siguiente, et hecho de praferir una sentence judical an cump- ‘oento de a nein de administrar justia na da lugar a acuse- ‘ion i pracasa diecipineric alguna. Ahora bien, si se Comnprucba la comisiin de un dei a ejercer tales ateibuciones, la comgetente para imponer la sencién es a Justicia penal en los teemino constitucionals y no la autoridad Cscipinarae. Esta dactrina fue ratifcade en is sentencie T-249 de 10, de june do 1985, nla sentencia C-087 de 1996, al ansizsr el tama en tome ele ley Estatuteria dela Administracion de Justicia y cancretemen- te l ert. GE sobre el error junsdccional,tacé al principio cusr- ‘do expos: En segundo lugar, debe deciree que el error juristic- ‘ional na puede ser enalizodo Unicarnente desde una perspactva ‘egarica dora parece pretendario la norma bajo examen. Por 2 ‘contrars, la posible camisén do una fala por parte dol adminis {radon de justin que canlove la responsabilidad patrimonial del Estero, debe ear ested desde una perspective funcional, esto fs, bajo el entendido de que al juez. por mandato de fa Carta Poitiea, eo le otonge une autonoria y una ibertad parainterore- tar los hachos que ea sematen @ au Conocimianta y asiniemo, 237 ‘aplcar las normas consttucionals 0 gales que juzaue apropia- dos para la resoliciin del respective conficto jurcico (Art. 228 CP}. Dentro de este orden de ideas, se iniste, es necesario tentonces que la apicabiad dal error junsdioconsl parte de ese raspeta hacia la autonerria funcional de! juez. Por ello, Ie situe- ‘8m daserita no puede corresponder a una simple equivocacion ‘desaciorta derivado de lelibre inenpretacion juica dela que 8 titulor todo edministredor de justcie, Por el cantrari, la ‘omision del error jurssicional debe enmarcorse dentro de une ‘sctuscién subjetiva, caprichosa, arbitraria y flagrantemente violatora de debido proceso, que damuestre, sin ingin asomo ‘de dude, que se ha desconacide el prinoipio de que al jusz le ‘orrespande pronunciarse judicalmente de acuerdo con la natux ralaza misma del proceso y las pruebas aportades ~segtn los Criterios que establezca la ley-y na de conformidad con su pro- 0 arbitro" 35.3. Alcance del principio Con elracenacmianta dl principle hemos querido mostrar ls otra {ara del poder confer por ls nuevs Consbtucin el jucicatur. Hasta abora heros hablado de protagorismo judicial, pere habia. ‘mas orga la Contrapartde, que oes otra ques carga de la egponseblidad en toda gu extencién, [a cua tiara un canton gsrantsta de is efcacis y efcencis jul, dentro de una drbita funcional regia por los mas estrictos princes toos. Desi la Constitucién de 1886 el juez ha sido genstedo como sujoto de imputaoian de responsabiidedes pensles, patrimoric- les y discipinerias. Nunca conté con inmunidades, mes si con fupres de compatensia que aun subsisten. Sin embargo, lo que debe reelzarse de fa nueva Constitucon son éos casas: el yor campromiso y grata de responsebiided que implica ia nueva 238 Preece consrTucONALES Ce DERECHO PROCESAL Cconcepcién funcional y at mandato dl ar. 80 que inclae entre las causas de responsabilidad del Estado, como se entendié en la Constituyente y lo comprende el legsledor al hacer el dase roils legal en le ey estatutaria dela justia, el error judi Aci l princpia ge debe entender como una pauta étice dol uae tn el sjerciva de su funeién, entrelazdndole eon ol principio de buens fey moraided proces. Pero mds allé de 8586 response biidades clsicss se debe lansr a atencién sobre a response bd social det jez, que hoy en dia se da coma secuela ds ese protagarisme y se axprasa vlidamente en ela sujecién de las Fosaluciones judeisles a Ia critica de la opinion pibicas, que ‘dabe entanderse coma un derecho de ésta en el marca dele ‘dernoceecia participativa, ‘36. GRATUIDAD DELA JUSTICIA 36.1. Normatividad Preémbulo, arts. 10., 20., 25 y 530. P. 96.2. La jurisprud Este principio fo reconace la Corte Constitucianel en fs senten= is T-522 de 22 de noviembre de 1884, asi coma en le C-158 dde 1988, concbiendole ssi 1] No obstante no existir norma expresa consagréndolo, se infiare ede la circunstancia de que la justia consttuye uno de los pllares o undamentos eeenciale para lograr Is con ‘enc, ln paz yun orden justo que hage read le iqualded eae jusides y material, enmarcando dentra dee flosafia y el Fealema dal Estado Sacial de derecho, justicie cwya apica- (én, operativided y eficacia se hace efectva cuando las ins- ‘Stuclones procesales oreedas como instruments pare ase= ‘guar eu vigenca, arbitran los mecanismos idéneds para {que puedan accader a elas tadas las personas en concicio- es deigueliac. 1b] Este princni wen mataria labore! tone un arvaigo mis acen- ‘ruada, porque la Constitucién considera el trabaja carno un valor un derecho fundernantal, consustancial al Estada ‘Social de derecha (oredmbulo, arts. 10., 25 53), ] Enis relaciones laborales es donde «con mis intensidad se produce el cantraste entre Ie igualded |urica como ideal y Is desiqualdad econémica coma realidad, imponiendo al Es- tiado la obigocién de stenuer o elimina los efectos de ésta para eloanzor equel. |B principio de grated, acaté en le sentancia 037 de 1998, 26.3, Aleance del principio Como la Corte Consttucional le exprese este principio ne spare ‘ce explciza ante normatividad constizuconal, pere ce obtione por induccion de normes particulares. Oo ahi que al at. 6°. de laley Estauntaria dela Admintraciin de Justeia [270 de 1996), lp hays poside recanacer expresamente y la Corte Constitucio ‘nal lo haya homolagado en la sentencis C-097 de 1996. Fs esta un derecho de eminente contenide prestacional que se intrelaza neecindiblemente con el derecho da bre accoso a la 240 } PRNcO10S CORETTUCONALES DEL REND PROCES dmiistracién de justice, pare cua reaizacién la legistecion prov fo cancerriante alos errperos 6e pobreza las dofensorias ‘dblcas, asi coma otro tipo de asistencias judisles, que se Fopite, estén destinadas a hacer realidad le gerantia del aoceso pare aquelias personas qua par ausencia de recursos econém- ‘G08 na pusden obtener Ia assstenciejngica dentro de un marco de libre contratacion. Por manere que 85 el leisledar quien no {dobe desconacer el princi, previendo dispositvas logales des tinados a reconocer la gratuidad dela justicia frente a aquolas jpersonas que no estén en condiciones ecandrmicss de sulrager fos gastos que evertusimente demande el proceso judicial. ‘Le gratuidad de la justicia es elemento intagrante del principio de economia procesal, que se repite no aparece expreso en la CConsttucién, pera sf sus componentes: Ie celerdad (economia de oportunidad] ylegretied [economia de costos), este atmo descubirto por la Corte Cansttucional. En todo caso, lo claro fs que na hay norma que establezca la anarasidad, mionires que la gratuidad del accoso es compatible con al Estado Social de derecho y le naturaleza de funcién (no servicio), asignada a la iunsticcin.

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