» ie ata aia i y iF &La construcctén profesional de conceptos de enfermedad sondiieta mas que en fas Di es Hisicas de fe condiicta mis ‘a. Ports naturaiera del caso, el esquema ha tenido que ser muy abstracto, puesto que la variscién en el tiempo, lugar y perspec- tiva implica variaciones én las conductas a Tas que se Jes asigna significado social, ast como vatiaciones en ¢l mismo significado social. Deveste modo, si bien en nuestros dfas no es probable que se haga responsable a Ia gente por manifestar sintomas de la ‘gripe, en otros das’sus,quejas podian haber sido tomadas como sintomes de castigo sobrenatural por sus transgresiones morales, En rigor, la prominencia relatva de un significado social tan par- cansa el poder de unn profesién, un fundamento que esiablece ¥ sostiene las proclamas de dignidad, sueldos y poder de Ia profe- sidn, ANN donde enfermedad sea la conspicua destenactén para Ia desviaci@a en ana etapa, Ta BIOTER ae ‘icin estard on atenso, ate & ‘examinar, primero, las fuentes sociales de Ja fuerza de Ins designaciones médicas en los Estados, Unidos Y, Segundo, Tas consecueneias de muestro hincapié sobre la salud Bara os slunlicados sociales que se adieren a fa conduc, des Vinda en’ miestros ‘tempos. Deseo, pues, presentar el cardeter del rl de Ja Medicina op la deiniién de enlermedad, She, 7 como una clase de roaceun de fs sede a deviation ¥ ¥' sugerir algunos de los determinantes del contenido y de la orga- nizacién de esa reaccién de Ia sociedad. Ei énfasis norteamiericano sobre ta salud En su articulo, Definitions of Health and Miness in the Light of American Vatues and Social Structure, Talcott Parsons propuso odPeper que los nociones de salud y enfermedad estin enfatizadas espe- clalmente por fos valores norteamericanos.! sta no es wha ob servacion original, dado que,aigmos aralistas Rabian echo co- mentarios . sobre tal énfasis,. pero esti elaborado en una resentacién organizada titilmente. Parsons sefiala que Ins) so- iedades pueden variar mucho en ia medida en que distintas ti pos de desviacién son diferenciades. En ef pasado, la tendencia ‘mds comin consistié en caracterizar la desviacién en térntinos religiosos, pero, graduaimente, con el paso del tiempo sumgieron otras caracterizaciones y legaron a diferenciarse. Donde ia dife- renciacién en los significados de fa desviacién tuvo Tugar, sin em- argo, hubo-una tendencia 2 dar mayor importancia 8 un ‘signif- cado'que a.otro. En la Tndia, por ejemplo, Parsons sostiene que el énfasis. principal en cl pasado: reciente estaba, puesto en los requisitos para la pureza del ritual. En la Unida Soviética, se dice que el. énfasis fundamental esta en el compromiso asumido por el ciudadano de realizar bien su trabajo para ef beneficio del Es; tado, En Inglaterra, se dice que lo que mis se acentiia es el com- promiso con la ley. Los Estados Unidos, sin embarg ‘¢ une ofenracion . aga ‘més que adaptarse a él, la tundanidad a Ia valoracién de objetivos seculares précticos en vez de gratificaciones misti- eas o estéticas; el instrumentalismo, a la ausencia de una mets ideal. definitiva por el sistema, de modo que el movimiento en Ix ‘direccidn correcta substitiye ef logro de tal meta. Para el indivi duo, eéte riiédelo de valores se centra en el logro juzgado univer- salmente. La silud es tan valorada pordise és una'condicién esco- Gial para tal logro, involuerande como To hace‘la capacidad imputada para deseripefiar tareas y roles adecuadamente. Parsons continga observandc que én tog Estedos Unidos ex mis probable que Ia desviacién de un individuo sea vista como una perturbacion de su capacidad, es decir, como enfermedad, de lo ‘que es probable en otras sociedades. Ademas, concordando con su. slash ea: coat ae ae 0} Mast and Hass te the 24sht of Ament racine, en TalsttPaRiONty Sockl Serccture and Per Tree iets of Glesoe, 1995, pp. 2881, Uniéet Sovidtica, en cambio donde'el logro de una mete colectiva "se acentta com mayor peso que Ja eapacidad individual para el Jog peronal Parsons l prob ‘mos sin intencin por su parte, el tratamiento cs, tin einbargo, considerablemente més protector que er Ios Estados Unidas y con- siderablemento’ menos ‘prescupado por lograr que el. individuo colabore para estar mejor. para que vuelva 2 la normalidad tan pronté como sea posible? Realmente, Parsons sostiene que mien- tras que la enfermedad es el principal tipo de desviacion en Jos Estados Unidos, no lo es en la Unién Soviética, donde, afirme, el ‘tual y en contecoencia‘conformidad improductiva’ las me- 1s del régimen es Jo principal. La desviaci6n institucional del trabajo para ta desviacién gist esvssisti, entomces. dene mayor probabilidad de ser con raga un problema We sation los Estados Unidos quota 180 Politico. Esto problema opus rial © (edi. berid! conal “ Gtenciéa mutator) “Fetonfas Enfermedad com amens- ta para la vides (conducts) (Priston) (Clospitaizacion) ‘origen religiogo, por ejemplo, desaprobaciéa del dlivorcio, viola ‘in det stbodo, 0 interrupcién deliberada del embarazo, ocasio. nalmente se reflejan en las leyes. No obstante, ls instituciones religiosas pueden contribulr meramente a la formacién y mante- niimiento.de Tas instituciones oficiales de control en los’ Estados de. Unidos, mas que ser ellas mismas oficiales. A diferenci de-la Medicina, la religion dei stl . “Sones tciates solo a Tniiueneia en Ta ible ‘Ga que moldea Ja ica, iano de eae Ts oe en ial ‘particular de ta religién los Estados Unidos, sin embargo, yo insistirfa en que @ Jo lar del titimo siglo, independientemente de su posicién legal, ‘una pérdida significative pricticamente en todos los paises indus- triales como una fuente de definiciones viables de desviacién. Lo mismo Te ocurrié, aungue ea menor grado, al derecho, Como Rieff, yo eroo que wel hospltal esta sucediendo a Ia j Jalansento en Tanto Httucne arguctgien ae ta cen ooo dentale-? ET hospital so est convirilendo en tal fastrclOn aque: ea en gran parte por el proceso mediante ol cual se seinterpre- 4, illp Rave, Freud: The Mind of the Moralist (Govden City: Doubleday y 6, 361), Bs 380 fa Ja conucta humana, La conducts désaprobada recibe, cada vez en mayor medida, inés el significado de enfermedsd que re. quiere tratamiento que de crimen que Tequiere castigo, fa. victi- mizacion requiere compensacién 9 el pecado requiere paciencla * Ripenas en el siglo xm, ia Medicina era una intitucién relate vamente de poca imporisncla, humilde ante 1a majestuosidad de la religion y del derecho, Pero con eb crecimiento de la ciencia médica, cada ver més -a conducta humana comenz6 a parecer coriginarse en «causas» éspecificas sobre las que el clérigo, Ia elec- cién humana y el deseo tenian escaso control. Y los. descubri- mientos médicos permitieron el tratamiento con éxito de tales problemas. A partir de este niicleo. de descubrimiento ciemtifico sxeclé ‘up a al a e-atlfe xter siplia exten- ‘sign de Tab definiciones médicas. eh ia eon acid ue ante altos aban anes por is elo eT ‘staban mane} d Partiendo. de cosas talss como siflis, tuberculosis, febre tifoides, carcinomas y fricturas unos creado ls’ ase senferiedade. Al a ‘aise se apart de cate eiterio'y comemss a cenirarte eo cable, en In inhatlitncin yl sutimlest. como naeves enterica de seer: ston" De-exte mol, al coming lentamente, esse tales como la Historia, Nipocondray neurosis obsesta compulkfmy depresion fue Ton agiepadas. It categoria ae enfermedad, Liego, con create So, ion meluos yexpecameate los plguatras comeazron lamar Senfermedads {31a eualgsier cosa y's to en lo que clos padieran deveotarcustglcr leu do mal unclonamiento, sin tportar fa nora Git quctee bustsnse Boswil que in agorafos ce enlrtnedad poraue ton abr sane aoe sblerce a Remorse i enfermedad porgue la Meteroweualidad es In norma soci divorcio ¢s una Giermedea ‘porque es Signo de fracaso en el matri snontas Bl énfasis creciente en a designacin de enfermedad, enton- ges, a sido a costa de as dos desimaclones, crimen _peeado, y fue disminayendo Tos limites cuando no debilifando la jurisdice a as otras, imtituelones fu abvotu . porque el empuje de Ia expansién de la aplicacién de designacio- 5. Thomas 8, Suse, The Myth of Mental ness (Nuor® York: Hamper y Rov, Wet), pp. HS.Gf @ su control) dejandp a las otras instiruciones um residuo de ‘transgresiones esencialmente triviales. Jas_inanos_d . responsable y dies ‘suprimid gnaciones de Frc y cimen-c probable que i den ue is ae oe race _ ‘por propio bien, para ayuidario més que para cas tigarlo, aun cuando el tratamiento en el mismo ‘constifuye una privacién bajo circunstancias ordinatias. Sue. propis opiniones sobre su tratamiento no son consideradas, porque se dice que cles ‘un profano que carece del conocimfento expecial y de la inde. pendencia que lo calificarian para que su vou fuera ofda. Este movimiento para reinierpretar la desviacion humana como venfermedad arranca del hurnanitarismo. Como observe Wooton! Sia ninguna duda, en consccuencia, en 1a actitud contemporinoa ‘bacia ‘ta conductn antisocial ta pelgulaela ye humanities soar , ¥ el «aleoholis: ‘mo» se converte en unr enfermedad que debicra’ser tratada por un médico y no por los trfbunales o par Ia iglesia, Tal jurisdic. gion se_establece gun evande el cooccimiento de ia etfologia y a : Bb ana Mean conn cee Fe Ser Soest vce nla a aot reenact a gaia sole slag efecto y marae J seca ‘Thoms 8. Seas, Lav, Liberty and Psychiatry (ueva York: The Wace owt Hav Hine Pres, Wi) pI ¥ ver Thana Sess, Acooton: Scotties ersooer sihbats Law Jourtalss VE G0, Dye.pericina eé trafada con sispatie mis que con fepreas{én, pero so fspcra que se libere’ del atributo 0 de Ia conducta condenade. De este. ien_(idealmente) 1a persona ng ser juz ada, si-cuiuhd Guauaie gas Por ese 3d Glerlamente enfermedad 6 sindrome y ser inmortalizado hecho de que st nombre se use pera idcutiica tel enfermedad, of puss Ja Medicina ex orlenrada’ a bu a define come algo ihalo, tenido, In Medicina desempedia et rol l ‘una ia médica a-sintomas que los profanos ya particu- resario morale.” La actividad medica larizaron como indeseables. Claramente, en ocasiones -el_ médi- co es un empresario verdadero cuando descubre enfermedad dé la que el hombre profane ‘no es consciente, pero esencialmente: : ca ‘néeico con tanoi, refonmadores y otto: que son aas Obviamonte eure sarios morales, EI nabajo det medica no es visto geastalanc como'moral; se supone gue trata ia enferincded in fergie lay, sin embargo, un jlcio moral irreductibte en lo designcon oe enfermedad en si misma, un juiclo cuyo cartcter frecuentemente 5 pasa por alto debido al consensp virtualmente Ualversal ee exist alrededor de Ia indeseabiidad de gran parte de 10 qs oe esiana cafermedad, H cdncer ex ta cbviamieute tndescable pare, todo of unde qe su States como enfermeded purses Sie ¥ evidente por sf mismo mds de lo que et tna vAloreiée Fock Sobce ta que iui gente coinede, Aun Guano Yeconorca esto, Sin embargo, se debe observar que fa palabra senfermodads os te 4 inenudo explicitamente con el propeste de evar cottons tee zal, puesto que el bumanitaisina persigue adoptar este propoalio, Para que la gente no so inline a castiger al desvade, Al desgmae 3 algo como eh aleoholismo senfermedade y al decarar que wa Gonstemado y stcio:delionente es tn enfermo, Ia invencon altar Ta condena moral De todos modos, «i signacion de enter rece realmente funcioner para desanimer reacciones “punilivas: 3S 20, Nec Howard &, Bree, Outsiders (ier York: Pres of Glew: ' 00 98D, ape a, Mee (Sure Yorks The Ere Frets of Gh rales en Medicina son aquellos que persiguen ifluenciar ta opiniGn’ piblica y Jos planes de aecién politicas, y de éstos parece haber fees clades. Hstén, ante todo 1s portoes publicas de In pro- fesién organizada 0 de sus especialidades, Bllos se proponen ale tar al publico de los imperrantes peligros de una enfermedad de- ferminada, 0 de las virtudes de una determinada clase de selud, dental, mental o de otro tipo. Sus actividades tienden a ser ver: daderamente serias y ser apelaciones técnicas para que el publico adopte las pricticas de salud preventivas, incluyenda a consulta ‘8 sus médicos. Segundo, estén los principales empresarios mora les de fa Medicina misma, algunos de los cuales pueden ser ejer* lentes individuales cuyo pasatierapo es hacer eampatias por cues- tones relacionadas con la salud, pero muchos de los cuales no ‘sdn en absoluto ejercientes con dedicacién completa; en cambio, estén asocindos con establecimientos sanitaries piblicos, como hhospitales, elinicas, escue.as médicas y departamentos de salud. Estas som los consejeros técnicos qué son entrevistados mas co- satinmente por Ja prensa piblica sobre problemas de Ia’ politica de salud y que son Damidos para dar iestimonio ante los cuer- pos Iegisiativos. El empuic de su actividad se dirige hacia el po- ‘der politico para implementar las medidas destinadas a mejorar + Jo que ellos consideran que es Ia salud ptilice. Asociados con representantes de intereses médicos organizados, y reforzados [Por cuerpos profanos interesados, también fueron responssbles Jos que los anim: tratan_ entre ellos, ~ Gases aon a dua dt Eee RARE a su tarea es modesia y. humilde. Los principales empresarios, no tplde gran parte de te legislacién quo, en nombre del humanitapis: iedades ‘tates. como el’ alccholistuo, rogadicclon,, enfermedad mental y deficlencia mental de la Jit fisdiceidn de los sributales para ponerias bajo la jurisdiecion sie as profesiones de la salud, Finalmente s¢ deben mencionar los grupos: de intereses espe- Giales profanos-a veces conducidos por médicos pero ineluyesrig ‘Siompre at menos un médico importante, cada tino de los cuales hhace campafias.contia la amenaza de Is enfermedad clegida co pecialmente, invatide o agente presumiblemente inductor dela enfermedad! Agui, sin trabas por la dignidad profesional, estds! los euipresarios morales eti salud mas extravagantes, cada uno » dedicado a incitar at pablico a prestar la atencién y los recdssoe que sélo-se pueden obtener: rath asi consideradas (como en el ¢aso del alcaholisins), otros, a suprimir el estigma de algunas enfermedades (como lepza) cane biendo sus designactones (a enfermedad de Hansen) y otros 9 Te: definr Ia enfermedad (como epilepsia) como para cammbiat la ima: gen piiblica de la categorie de cronica, grave 0 incurable enfermedad menor o al menos curable 0 controtable, “ Coa! le siete idiano, que pasa ta mayor paFte de su tiempo de trabajo con padecimicntos taenores ¥ de rutina, y que tlene ls oportunidad de relevar a sus pacientes wpacidn (y ee aliviarse éI mismo ae los pacietiles que la preeupan) lamentando sus sintomas y enfatizando, su’ salud, ‘de la salud es r 10d Ba a ia stag Papen nde ser ai eats oar geerta “emule mine (por patie de og profane) ex tn Srobiewa tis predominanee que le excep eoiRecldnes to SY, hase She 256 La predisposicion hacit 1a enfermedad en-la prictica cotidiana Esta predisposicidn earacterstica hacia Ja eafermedad n0 se manifesta adlo por el empresario ioral active de lz sald, sino bjga por el sh & ° ars a ee “Re se au ep cor perc gue ura erora cele ga duede libre que‘condener equivocadamente a un inocente. En 2 sumen, la norma de ci Ia actividad médica de los ¢ see eas eee ae te tt ameter Sree eee eee (codec Hay alguna evidencle interesante que apoya la especifieacién de. Sche acerea de 1s engrma de decisis taractetotca de a ‘Medicing, En-un estudio de saterpretaclones de rayos X para tuber- ‘culosis citado por Schefl, por ejemplo, de 14867 radiograffas, 1216 fueron interpreraaas come proporcionando indicacion positiva de tuberculosis que posterionmente se interpretaron come negatives {Glendo defnidos éstos como «falso positive»), en tanto que s6lo 24 de los interpretados vonio negatives fueron declarados posit ‘ys posteriormente (defnidos como «falsos negativos>).®, Clara- mente, ia tendencia presente en este caso se inclinaba inds 4 lpi far enfermedad que silud. Se ha. escrit0 mucho. acerca de He Com, Heath Behavior Mess Behavior end Slek Role Rehwvior,ebrchves of Hele, NIL (BEG, p. BS. "KPa uO anilnis etcvocndor cei cabuera consiitar Robert A. Scott, he Making, Bld Men (Reeve York. Ruste Sepe Foundations 19). 36. Ver thomas 1. Sena, Being Mentally Th A Soictopla? Theory (Cheagor ine Puslishing Go 1968), pp. 10812. GSS Lede Gthans, Seid 'on the corey of Diaosle Procedures, «dave eam Tournal of Reenigeaneg, Radom Therapy, oad Neclear Medicines, OTT (so), pp. 2558, evade en Seer, op af, BED . 287ferson y otros observaron, dada la en 1a que faltan descubrimie munca esti seguro de si una i se debe a signos objetives perceptibles Zo pars ott. se debe, como sugiere ‘POF otros médicos, y 174 fueron seleccionados para la amigdalectomia, Esto dejaba’213 ami ‘aparentemente eran normales, Ot "ae dese fae aac ciones * ralig Edoy Gletes jemnlos: &L- Cacunoe eb ck, Observers Enors in Tektg Masa! Harr, Slaten, COLX (isl) "Fe LaHTON Wi, Coes YEH Goma Obrien Eran tie inerpreblit Ge Rik: Qo tonal Compan stance, CURIE (OSH) pp SS 0. has, yee arto te ert ti Haat Joule MVMT 8, 5 Bt G, Raney, ewer Bron br Meche Wonca eae ae Fito, VMTN po. HG, kero Seas, “Covers aah ele BR" Plans Fria Pract, ural Ot ah So eae BS 7, ag Out". Psa a A Study Himinary Report, eJournal of Mediech a A pattir del elemplo, de Bakwin’aébevia giédar' clare ngcion de In norma de deci ‘siete ta é = due slo Zisién implicada en tales practicas. Primero, s¢ puede obscrvar que aun cuando Bukwin sostiene que sl moti ig ezondmica no podia estar involucrado ent el estudio de ania’ porque casi todos los nifios habjan sido operados en clinicas gratuftas, es dificil negar que los motie ‘vos econémicos oportunamente estimularon diasndsticos y trata: mizntos que de otro medo podian no haber tenido lugar. Ademés, ‘os deseos de_los, misms pacientes no pueden ser subcctimados, Conse silo Foye las anietectosis wiverah oe Fie do pono Jaridad en los comfenzos de 1930, una popularidad compartida por bos padres de los ar, jo'sea para san ies que To apre- ian a hacer algo cusndo ellos tienen dolor. En este contexto se puede mencionar el informe de Peterson, Barsamian y Rden de que cuando se diagnostica el sindrome’ de SteinLeventbal, cast siempre se trata de wr error. Fse diagnéstico errado es tan popu lar porque el sindrome se refiere al tinico tipo de esterilidad qué . puede beneficiarse com la cirugia. Diagnosticando el médico puede Ihacer algo y anima al zaciente a sentir que se esta haciendo todo. Para ayudarlo. ‘De este modo, parecesia plausible predecir que|el" fienen mayor probal Bela condiciones: @) i 10. Pam un colune de tics senate, of ben de pcoparsita cam a toy caer Mra L. Gang The Bostore Clueeh Yor Bal Raby i i OB Yee fat foe AF oe od lr Ray Nese, Bee Ma Joga (88), pe ae. ° : : Sir nfo de a investi que ecurata gue usa resin print TeAn fad SPU» sintomas pieseniss. Las tres condiciones uo neceiian ine 3 ie para tal conducta, dadg quo encontramos Ja tendencia a ssobredingnosticars apendicits agiida nun om el » Servicio Nacional de Salud inglés, donde la ganancia ‘écondémica Aperentemente no es importante en principio. Del mismo modo, ‘en las Estados’ Unidos, donde las gantancies de los médieos ho de, Penden de la venta dé medicamentos, la venalidad no puede cx Pllcar adecuadamente los habitos notoriamente volumiuosos y & Yeees Yatrogénicos de prescripéién de los medicos norteamenca: hhos® Ademds deberia notarse que la norma de decision medion nno siempre es operativa, Verdaderamente, 2 voces se rovieste ara crear esubdiagnésticos. Bajo las condiciones de In practice €0 la era de postguerra stalinista en In Unioa Sovietica® come de la préctica de la psiquiatria (# ho de Ie Medicina ex general) en los militares” la presion sistematice Ge 4a situacién desalienta los disgnésticos. deal menos algunas ene feriedades, mentales de otre tipo, Similarmente, cutie los ane. dicas generates y entre otros constltores de primera linea que 00 cesidn en posicién de enajenar a sus clientes, podriamos stvonee subdiagnéstico de una enfermodad tan estigmatizada como cs ia spsicosiss, Estas excepeiones a la norma de decistin meilica no deberdn lamentarse, aunque sélo facra porque se pucden tomar era ilustrar nuevamente gino los. ambientes de trabajo, sobre. S orlenacloaes 46 valot pool 9 Tas me Son efcepcionet Te notina geveial con pane depioradae que Wl Tae onaaTCS po ae tes de la profesion: En el curso de la discusién sobre 1a evidencia ‘que apoya la nocién de que hay por parte de'los médicos una inchinaclon ma Yor a imputur (9 diagnosticar) enfermedad antes que salad, he Sugerido algunos de low fherares que pusden eustentar io ace ie Profesion misma ama sobrediagnéstico y sobretratamiento, De hos factores pueden ser vistos como vatlables que estinlaa’ condicionan ls norma de decision de la profesién. La ‘pregunta orsiste aim: gentonecs, qué? Cudles sonlas eonsecuensiage 22. Ver ete ado extort en FEB. Muncy, Prva and the Vere ‘rig Append. foul ef es sud Hime kere Ui Udy ONG 2h a. A Cosma 7 D. C. MEHaN, Aewe Appendits, Brisa Widical hoor, su Tp AES 2s, Nes Mok Pit Doctor end Belen be Soviet Rass: (Cambige! Har. voit Ualvrelty Pres 195 Ge RSS Sle he tata Wart ‘Hlaaan Orpotaions, EV (90), bye ‘eeciaimenta et ‘ner mai sobre la algutee miller por‘ARese ie Das a preferencia disonéstica de Ia Medicina flaye sin confrantais | se ton'ma nse ein de descabrinientoy tatamonno de ane forma de. desvjacién cura objetividad es incuestionable, Debido a que el status biofisico de fos slgnos médicos se confunde con el status moral y social del significado de enfermedad, no se discu- fe seramente fa Medica, como sf ocurre rtinariamente acerca de os teibunales que se couran del peligro social y moral, de, de Sigmar (© diagnosticax) crréneamente. La inguictud de la Nf 0th cas 8 soe. See fasidn y baja presién sanguinea (en y fucra de si mismas, Gesvincién primazia) puede sospecharse que tiene la enfermedad CS MERP as als Sar) esa ee Conn ee eae ct choosy see Chet t svarena oncano aoe nt fe Se rere puede drat gu, come a gente que esta en 1 limite mis bajo de ia presién sanguinea Soa SS SATUS no's ovo eatematad SerRa on cnc srr on ent gure al Hee ee eo eS cease foe lara tt pie ton estos 9 banca | ae ee ge ee naar cacti See ee edn Saroal al Settee Sot Acts y el snome Sf ‘pretacién de Réntgen, son fuentes comunes para los falsos po- Bc eel keene) SE AS Tn ec cae te una wo ‘alos. Dey mele Pe S, ses, oNew Erland ire , % aswog, The At ana Soles of News, oN alt Wide, CCEA WHS), pp 909%,descitido, ignorancia 9 accident ‘temporalmente. Lo que se olvida, sin el ser liberado de und enfermedad estisinatica, suuplemente que se haya sospechige Ge-ela < e ia Caio 25 a de Ja, norma de decision habitual de la Medi ina, aunque ia motivacién para su uso pueda ser humanitaria, Variacién, médica en ta designacid y ta conducta iit Sefalado que la tniea, verdaderamente la ‘misién, del mé ico es encontrar enfermedad. Esto quiete decir que la taréa es de- signer autoritariamente como enfermedad To. que una persona gue sufre sospecha que cs una enfermedad, y también se trata de desginar como enfermedad lo que previamente 10 habia sido designado en absoluto, o estaba desiguado de alguna otra mane. ra bajo Ia jurisdiccién de alguna otra institucién. Si bien es vere dad que parte de la teren médica es minimizer la reagsiéa de 1a sociedad contra clertas formas de desviacién, desaprobando {a se- Hiedad de las respuestas profanas a algunas y suavizando Ia fero. + sidad de las respuestas a otras, puesta sobre la balanza parece Preciso decir que la. primera consecuencia de la actividad medion 6 aumeptar Ja cantidad total de enfermedades por las cuales se puede caracterizar Ia desviacién, ya medida que se hace esto, intentar aumentar la intensidad de Ia reaveién de la sociedad ¢ tele» eufermedades subrayando su gravedad pars la salud indivi deal o néblics Por lo lato stl comprometide « can, presio cen efecto por la proliferacién de situaciones determinantes, roles de erifermetiades desviados. oe ‘Para evaluar esta importante consccuencia social de Ia activi dad médica es necesario comprender el fundamento del conccie ‘miento.y de la prictica sobre la que ésia se apoya, Ant! todo, S¢_puede observar el hecho totalmente obvio de que para una ‘ra caida oF Cc, fay weet au respec ie sevionaion 6 te Ia protestoney detrei, tor de salud. Otro modo do apunt at reconogintlento de distintas_« interpretdeion y del manejo a2 signos y ‘menos legftimas. En fos campos de arya y drmatoga, hay etculas do pen samiiento Dioguimico y_psicdlogistas, cuyas diferencias son Jares al cisma oryénicofuncional en psiquiatria. En ciragia gencral, omo en Tas especialidades qu 3S, hay eseuelas ecan- Servadoras» que evitan extraer un te fieren esperar un largo periodo de tiempo antes de”decldirse © hacerlo, y escuelas sraticales» que evan a ego» tan pronto como sea posible o que buscan nuevas i RE APES hy q To que nunca fue extreldo felizmente antes. ¥ en Medicina inter. zo, como en las especialidedes médicas, est To escuela de qui- ‘mioterepia, afin. con. los heroieas terapeutas del siglo xix, gus —% tinh mcdlnicanTbsimentey sexu vconee \\~ doras, afin a 10s hiposréticos, que es bastante relicente a usar ‘medicaments excepto chando es sbsolutamente necesario. Las divisiones més notables y complejas se encuentran eacl pre sente“en el area general de la salud mental. Como demostra. ron Strauss y sus asociados® si bien la dicotomia general pstco- [igico/somético puede organizar a grandes rasgos 1a salud mental, hay tna diferenciaciin slgnificativa en clerias ldealogtas», Estas opiniones estén organizadas ea escuclan libres ca vine ‘uid del deseo comprensible de un médico, que énvia sus pacientes 4 quienes trabajan con él y con qufenes comparte sa propia op ~B nign.sobre la enfermedad ¥ cémo levarla. Por lo tanto ellos ten. don a organlearse en sistemas de trabajo de ejercientes con con eepciones semejantes, quira colocedos en forma distinta en Ia Sivistém del trabajo entre especialistas, pezo tnides por habltor ~B 4 referencia de enferos. 2 A partis de la extslencia de tales escuetes se deduce, en més \/} casos! de lo que puede parcesr a primera vista, que ngsticado 9 tratado de cierta manera depende en parle Ge To gue ‘vost ce ll 7 pte de la putes le mal, en parte do, iS. iS pro ional que se

de nuestra atézcién el mimero ereciente Ge Wenirtiedades sobre las que hay unanimidad en el diagnéstico y tratamiento que, en virtud de tal consenso, podemos tomar coro duc son objetivas y cientificas para nuestro tiempo, atin peraste 1 problema de comprender ef fundamento indicctive de desig. naciones y modos de manejo para los cuales no existe consenso general. {Cémo puede el cjerciente estudiar un disgnéctico y un método de tratamiento determinados para los cusles hay inuf ciente evidencia de sustentacién como para forzar la unanimidad & todo Jo largo de la profesién? Como se sustentaa los distintos ‘conceptos de enfermedad (y desigmaciones) para la misma queja? ¢Cémo se sustentan las distintas flosofias de tratamiento? ¢0émo Se establecen y mantienen los diferentes roles de enferme? Las Fespusstas a estes preguntas, creo, residen en cl eacacter subjelh vo de la experiencia clinica personal del médico, La interpretacién de ta experiencia clinica personal caracteristica de la situacién que encoatramos cuan- te que busca ayuda interactia con un médico que trata de brindarla, es - EL_pacieate probablemen- te no busearla aya’ no-Greyers she Ge a algo por él, y el médico no se compromelerfa & ayudar sino sin. fiera que él puede hacer algo efectivo. Ambos confien en una me. Jorfa_o en la cura, y ambos interpretan su experiencia personal sobre 1h ise det eapBTTNI Pm ‘cena gs que aigb0s estan autoniotyados a Gee Sere Toes ol ibn," auc: se sente me- sintiendo y transmitiendo su mejoria. Los otros abandonan sin, se cree, ." Sin embargo, el creciente reconocimiento det pode 2 emy K, Ratan, Meroe of Sebecine Repose Onl He ions Uideeaty ree, BS) i ONE Nal Puiu, Fhe Sos Nature of Psychol! Research (aera eg aie Books, BSP. Heoso rol de las respiuestas subjetivas en el tmtarsiento médicd ilevé al desarrollo de disedos experimentales doblemente ciegos = ‘ue tratan de controlar no s6lo 2) el soomponente de la reaccions Subjctivo del paclente, sino también fo que no es Feconeetie ton comainmente,b) la contsbucién del eliico en la interpretsciin due hace al pacente de su eperinca y ¢) et components la Seooges fle at ‘Ans iso etance cae or tee ‘Estas tes variables, sugero, cicrta objetividad tolerante. Tomemos un médico. ‘egipcio del afio : 4500 a, que wiliza romadion registrados en los fabinse Geen Por qué habria de preseribir cinieamnte eascedl Re cosenng 5 no ereyera en su valor? Y godmo pueden falas gus ofes eo re fstrar su falls de valor? La feopuesia es simple: Bl geca, toe su confare rib Respects det iclentc, que responds Ie Sansa ta theo en su reredlo, fle demostende al eperar ton coer cee, SK fudins ert dass modemnas dhe en iar ee 10s ningtia motivo para pensar quc fos pacientes ettabad on {jets tal tnvenea en otros tempos. De ete moa Shen snlsng flue al paciente en in ntegpreicln de eee timista O_pesimistamente, dep ides. remedios probablemente To eve a cobservary mejorts a cura: zpor qué otro motivo ai no continusrfa ulilizando estiéteol de cocodrilo una y otra vez? Bi tratamiento sadieg 9 su evaluaciom elfnica cotidiana (de prim&Fa manO"y petaonaly MEE oesticee Rédeo V ocue- geome pectiva sea incvitablemente diferente a io aim cuando, WU persp: tia soa = stante tendlands, caine Fidir ns expen aE SOE a pees cern Pan ng ta de ey in, a acetates eet ee et Oe ee i a ee epee Sir, 1 aon tet ae se ee or eam as eam bee ee He cre San en le Meta ate, Or Ba, Re i la i SET DL Solita 266 J. Moray, (od), Medios Brean notién de placebo por supuesto es gentral'a estas observa. {ones Ti polabra te ula comunmente pare seferrse slo a esi Cireuinstancia en la gve un médico usa un método de tratamiento, ‘no porque crea on su valor terapéutico, sino porque considera que es tm méfodo inotensivo de complacer a un paciente exigente, Esta definicién asume que el médico es un cienisfico distinto que ‘conoce fo que srealmentes tiene valor terapéutico y quien a veces uiiliza otras coses simplemente para satisfacer sus pacientes. Sin embargo, es manifiestamente imposible imaginar que et m&- {ico del pasado no cteyese en la mayoria de sus remedios, tock yondo aguellos que ahora nosotros consideramos carentes ‘de va- Tor. ¥ es iguiatmente imposible creer que el médico de hoy en dia cree tinleamente en remedios claramente eficaces. Aun hoy debe-’ ‘mos asumir que los médicos utilizan inconscientemente muchas medicinas y procedimentos sin valor porque su experiencia per- sonal les dice cquivozadamente que ellos «dan resultado». Para tener en cuenta tales circunstencias, la definicién de placebo de Shapiro pereceria més util que Ia definicién tradicional: «Cual. uier terapéutica (0 ese componente de cualquier terapéutica) que se usa deliberadamemte por sus efectos presumibles sobre un ps- Ciente, sintoma o enfermedad, pero que, sin que Io sepan el pacien- te y el terapenta, no tiene actividad especifica para Ia condicién ‘qué std siendg, 2s ‘Como dijo’ Shapiro’, «Una caracteristica notoria de Ia Mi na fue siempre ia de la investidura profunda intelectual y emocional del médizo en una teorfa y préctica, Los tratamien- tos frecuentemente eran claborados, detaliados, caros, Hevaban tiempo, estaban de moda, eran esotéricos y, a veces, peligrosos. La mayorfa fue juada posteriormente como inefectiva, Cuanto mayor es el intezés de un médico en una teorfa terapéutica, par ficularmente si proviene de su propia inventiva o si él es un ned fito reciente, mas cfectiva aparentard ser aquélla [...]. Una ma- yor investidura intelectual y emocional es inherente al médico {gue usa un nuovo medicamento o tratamiento, Esto puede expli- Car en parte los informs de In efectividad casi tiniversal que acom- ‘patian fa introduccién de nuevas terapéuticas.» # Como observa en otro fugar, con docurientacién: «La eficacia de un medicament puede aumentar un 3) por ciento 0 de 0 a 100 por ciento cuando se le dice al doctor que el agente es activo y no un placebo, La celcctividad de un placebo puede disminuir del 70 al 25 por ciento ‘cuando las actitudes [del personal] hacia [el] tratamiento cam- ‘ian de positivas a regativas.»™ Tal variacién no ocurre unica 15, annus Suara, 196 caztie Wee on Warm Pons of Peco sly aa I ey : SP ata Shae, eine Pate Met Bf, dearest oh patch Neat Rialto CEORVHE Oho. po Teeter el Salm rs Cotte 2 oe Peso Re, i co iota Rocha RM C606 f Te, inpade ae 8S Ehuuo delmente cuando se usan medicaments. Beecher, por eiemmpto‘ ‘tima que el efecto del placebo. de procedinientos auiaugicos ‘oscila alrededor del.35 por ciento® Realmente, la revision hecha Shaplto de ia lteratara basin 1960 deja poca dada sobre ta nportancia de las variables sociales y psicolégicas en la ereacion g imterpretgldn de In experiencia clic, ining ejerciente.® «cp Vale la pena setislar aqui que la literatura médica sobie el error gn el diagidstico y sobre Ja reaccidn al placebo tiene una curiosa . limitacion de avercamiomo que refleja la mentalidad peculiar de {a pyofesién. FE supuesto subyacente a la mayoria de dichas ine vestigaciones médicas parece ser que si bien el médico puede ncia o por falta de erick Citbos Pal ‘Sobre la percepcién te Tumauo® paréce claro que ainguna pervona puede evtar algo q idencia. La priméra pregunta Planteada por la investi ') gacion médica, si In preferencia existe o no existe en absoluto, es Up adie ertegns femenannoa SP ar intrrncin sobre el medion ye ambiente scien e que ta baja que permita poder explicar fas fuentes de su preferencia. La ‘pregunta puede plantearse en cierte cantidad de niveles. Un est. dio reciente sobre las sentoncias dadas por juczes a los efimineles convietos, por ejeinplo, pregunta como, influye la sentencia dada ‘on un eno gobre as sentencias. dadas en Tox raese siguicntue Las analoglas entre el julcio. médico y el legal no estin trazadas como. para impedir una exploracién de los mismos mecanisines ea.Medicina. En otro nivel de audlisis, uno debe preguntatse cier- tamente eémo Jas eafacteristicas sociales del médico mismo, sis aantecedentes rellglosos, étuicos, sexo, clase social entra entre : i pbatlamane aes a tovor Asa seco oe ae Se ae 38, teary, Bees, Surgery as Plecebo, a Quéntaive Stdy of Bias, sayran| of the Amerean Hedlea Asaciatons, CLAXVE Cl), fp TBA ‘Br Sarno, Contract, op. et OD eT: 4 Gram patie se evn raises reveada on o¢. Smamiry C. V, Homo, ‘Soci Fodgmens (Sucve Hen. Yale Uaneny Prost SL “Baars Gant, The differ of Siauie.Arsentioents on Korwarive Tad ment inthe Aiard af Penal Saxctonr, Sosiomctisy, CEL C5). op. LSI, 268 . : s i ‘preguntas apenas eoneEDIMES en torno al acer ‘caffliento. del médico a su trabajo, y riucho menos exploradas sistemfticamente, . | Orixenes do,ta construccién clinica de enfermedad Ademés de cualquier otra cosa, a partir del material-que revisé {quedaria claro que al menos una de fas variables que contribuyen al manteuimiento de la diversidad de diagndsticos y de practicas, ‘terapeuticas en la Medicina contemporanca reside en Ia dependen- cia de fd préctica clinica del optiniismo, pesimismo u otra prefe- reacla personal del midieo en su acereamicnto al paciente y en su interpretacién-de los signos y sintomas que se le presentan. Bl amédico-tiende a creer en Ja terapeutica que utiliza; al ereer, influ. ye para que el paciente responda favorablemente e influye sobre si al-ver ilna meJoria sino curacién, Lo que facilita esta Ta tendontia de todas las prdctins a tletionst ts Ecpuesto, ai menos dtsde fos hipocraices, Ios casos sdeshaucla dote fusion recharados, fn el elso de la terapentia del sfogue reals en tiempos: jposteriores, por ‘medio del cual un miembro de Ja featten curnba af pacente Mecca por un toque Soe 10 Que 6 Tlamo‘el dentono Gel rey, sabeitos que frecustiencate hacks tins cukiadosssclocion to pacientes, ey e010 so perma un tr tamiento por persona (disminuyendo ast Ia posibilidad de fraca- sar}s ¥ en nuestros propios dias, la selectividad de la practica ‘elauisrica © y do las nstvclone de servicio famine “ha sido Sovmva: Recegrements, la stencio sobs wlio macs las tendetr Glas de ott Insluctnes de aturieuto pare slecelonnr casos de grupos bastante limitados; como ejemplos se pueden citar lat observscones de Kravac sobre ls priceas de centro de tear Uiiealoe yin de Scot sobre i scleoion de casos pot natn clones para los ciegos# . 42, Brian, Gru 9, 9. Mh SERRA 2 Rai et cue ant Manel est va Sal Bin Uy AE URINE SELES ae nim, res Sect ees soe ets fa tee any sity ae ae "Gi Gol Wir Isis ets Ye is Sa, PP ge ptiot A. Knauss, Mier the Rekabittation Center, «Socal Problems», XIV ns pe BECP san, te Sean of Clits 8 Sa ars Sel: Ths cP aI cn ea a toe ke: 269Estos ejemplos de selectividad no son ‘inioamente instancias| de injusticia social, Para mis propésitos presentes son mejor vis: de Sl ab tetas as area res para Las categortas de diagnéstico, los pronésticos ee raat erm es toss cuss IERIE, Ge ge coal Seems, etn cone fre une, ore le con toe ae She tr ge tatty eee sts ema ta tener 6 ne Sal ade pommel os ae ae ep 9 de su alcance. (Bn rigor, él impone este punto de vista sobre el om ei eer eho Ge mnt de Ta eo op eeror) Ee wile ar Se pueden, citar algunos ejemplos. Schmideberg observe que uranic un largo periodo se a erect B = Lin Jago periodo se pensé que eh mal de, Buerger pre Iebido a que las,contactos de Buerger con pacientes estaban ammllamente retringhgor af Hospial Sones hea ta sheet de Nueva York, que atendia predominantemente a pacientes itt fon En el caso de a epresion sanguinea alta» se descubsis con sorpresa que una proporcién importante de ls pobl several de fuera de les sales de consiia ‘masiseste ee sone sin quojas apatentes 0 efectos nocivos.® El gran medica’ Sy. ‘denham tuvo la impresién que la escarlatina era una enfermedad $28 Dai Meu, Reems rey na 1 Say of ie lit Bi, at St Se ea i ts "te TE tio vow fas pn et vo Sie gute a Ae 2. Melitta Scrrunameo, Social Factors Aifecting Diagnostic Concepis, sinter ‘national Journal of Social Psychiatrys, ViT (1961), p. 222. . SA Sy NENT leve, sin complicaciones graves, una impresiGn que apdrentemen Ae se origina én que sus contactos principales eran con pacientes: ‘acomodados y no con pacientes pobres. Antes de finalizar los afios 1540, ase pensaba que Ja histoplasmosis era una rara enfere- dad ‘tropical, con un resaltado uniforme fatal. Recientemente, sin ‘embargo, sedescubrié que ésta es ampliamente prevalente, y que yaramenie tiene resultados © lesiones fataless Bel mismo modo, Jn experieaicia limitada y preferencial de la sala de consulta fue proyectada a Ia poblackin goneral en el caso'de- enfermedades Sel corazén, pars toparse rapidamente con el descubrimiento de gue Jos Ismados cardiacos latentes aparentemente funciona ‘ban como personas normales @ pesar de Ja presencia de los signos de enfermedad. Verdadcramente, yo sospecho que el cum dro de «inadaptabilidad» general, tanto fisica como psicolégica, que cmersié de las exploraciones médieas_masivas de is. Se gunda Guerra Mundial y Ia perviveicia subsiguiente’ del Servicio Givi, foe una funeién de una concepcién de enfermedad © ina- daptabilidad construida por Ja comparacién de los signos, pre- sentados en las salas de consulta en una designacién, y aplicar do luego tal designaciéa a signos éncontrados en cualquier otro lugar, olvidando que aquellos que legan a la consulta con de terminados sigaos no feneionan necesariamente del mismo modo: como ‘aquellos que tienen los mismos .siguos pero no buscan consulta. Puede ser inadecuado designar como senfermedadess © econdiciones serias» aquellos signos y sintomas que incapact fan_o preocupan solo a quienes buscan consulta y no a otros. Couiparar los informs tle enfermedad con los de delitos® puc- de servir como una ayuda instructiva para explotar Jos factores ‘gue, subyaciendo en el acto de buscar ayuda profesional, forman el cardcter de los casos que verd el clitico y, consecuentemente, da imagen de enfermedad que obtendré. En el primer momento Dareseré que la experiencia de cates médicosplantca landline Froblemas olga diferentes que la experiencia de casos poli Ex parte ponte cuaaco Ta gene se considera enforma siende més a areplogarce en s{ misma que la gente que se considera ‘autora de un crimen. Pero éste es un paralelo impreciso. El die rectamente andlogo al enfermo no es el criminal sino 1a victima, La analogta es particalermente interesante en cuanto que Is vvictima, como la persona enferma, no siempre informa del de 5S, Georpe Roses, People, Desate ond Pmatin: Some Newer. Problems. for eserch be Media! Ristry, taletin of the History of Medicines, SLY 90), Dp. BIG, Ver tambitn L- ©, Surman, New Disasel dn the Sovenisenih Cente Py, ables o€ tho Hictory af Bodies, SOCKIN (1868) p>. 2. ‘Sh Pseniwaees 9... Bau, The ivory of Mistopasmals, New England Sournal of Medicines, CCLVE (85D, pp. 25428, cltaéo en Somer, op. et, Py HT. ‘Sr Var i divcurgn eh toe 1, Kiowa ¥ Aaron W. Cicalm, A Note om the Uses of Offical Stanaries, «Social Peoblemen, 4 (9),.pp, LBELD. Ys sobre el ‘hucidi, ver Jack D, Doth, The Sool Maaring of Sucite (Pineton, NO Felecia University Pres, 6D). * mtits sien base ‘ Comunicadas al médico a menos que-el paciente crea que lite a la poticla, no sierupre trata de buscar 1a reparacién. EF sae coe ‘con la enfermedad por 1a que busca ayuda, eas mis ‘obvio ‘es el delito de hurto insignificante. Como las ‘estén. relacionadas con 1a ent por la at #80 his abvie es el Ev umdt, ou ln pracien guitrice eta sou la acvideded gue ‘ictimas de dichos delitos, los enfermos que consideran que pir jentes tienden a ocultar, 0 sobre las que se inclinan a econ enfermedades menures ei poco provable que busduce ape dos pacientes ti da profesional. White y otros estimaron que dos de cada tres Berdonas que se slentod cafcrna 90 nus ates ds Ge tt mck deteraaade wa o propecia’ dos de las variables que probablemente com diuan'a ir icocruticnon de ented Por lee Bresuntos a cleato de cousecuentemente, a restsiceiones en la precisién. de Comunican estar enfermos serd internado, segin una investign: In informétion que tanta el médica como su profesion tendran - iin realizada en'hogares.# Zola presenta estimaciones similares 4 acciea de los sigmos y, siaionnas implicados. St la profesion de- ‘¥,alin mms contundentes, © inclusive presenta materiales de otras finiera una enfermedad por signos y sintomas que la poblaciéo. Salturas. Sefiala que'la'gento no\pedité atencién para saber rneval considera que sca triviales y sin importancia, © vergon- Clones» que ella no considére inusuales o graves; como cjemplos - rosy despreciables, la concepciéa de la profesion de tal en- | Fermedad probablemente sea distorsionada y parcial, baséndose br 2 ‘tacoma, lumbago, en un conocimieato y en usa experiencia con sus attibutos ves~ | alucinaciones y\disimenorrea La fsta podria oviament Gaderamente limitados, yen estadisticas incorrectas ‘de inciden- extenderse haste incluir ejemplos que ya he tnsnoionado antes fa, prevalencia y significacién. Fn estos casos, el médico esté Gee eed tomas emis Suaves> dela histoplasmosis, pero lo ‘menos informado y menos caliicado para evaluar la «infermio- que queda claro es que las instilueones de practiea médica oe ads que’ aquellos que’ pueden intsodacirse em la comunidad y Fecen de cuaiguior contacto sistematico resentative con S ost onductas y las respucstas relevantes que realmente sina Sone ms sepa erate 9 enti ia Proporcionada por las" victimas de A roel crimenes también incluye otra variable de importancia, como : se cjemplificé a través del crimen de violacién. La violacion, $ ~ sestatecipe get, Pa ome fa na Hi tate mi eportn een cue ce. hace posible eugie do este crimen, Del mismd modo, si una persona esta com lag circunstancias bajo las cuales lis {peldeucla. tienen ‘probabi- ‘rometida en tna activida Higa! o.com iy ee e'la enfermedad on s{ misma, y su incidents, tenen probabl ducts homosexual, por ejemplo— en el momento de ser victicnn Cdretastanclas donde la coneepelon de enfermedad de la persona de un asalto 0 de una extorsién, es ;poco probable que informe sireanstancias la de la profesion, alli donde fa ex del crimen. Existcn paralelos directos con enfermedac profana se corresponds con rol wiriendo inmediata - Shion tee eas ies ona nfordad come Femed se cmmierad aa,» pave, rete neti able Uceuen ala consulta médica que lar. enfermedades aten te it jarrera significativa im, (ERR ig prey ala cna men en mfr esr Ranimete, donde niogna barter teat 1 SSRN ome SE cies aos meester [hinds nor same, se acon reketemene oan sao In prte faha Ne mtn ede ona Semen ee ee enfermesiades, por ejemplo, actos homosexuals, actos. hutero. sexuales imaginarios, onanismo, abortos ilegales 0 el uso ilegal de drogas como Ja marihuana,® tampoco es probable que éstas 34, Kerr L Wu, Paterns of Madea! Practice, en Duncan W. Cuatn y Bilan NocMEinax (eds), Preventive Medicine Boston’ Li, Brown Y C5, 190), jroo {| SS, Zou, op. it, ‘istogs tre ‘ecilogs © o-largo te yar mest, aun 36 aan C. Cans ot of, Currant Status of Venereol Disease tk Kow York $nas'or os pla, prog 7 xing fo tere ey ey, gue | ql GEL Sie of 80 Poni Ste Prec, acer Hosea Pe phe i epee damon as, Vos Harald Gaara, 5, HL a), p32 . agent ifs, Neti Jere " \ 7.6) aun "Shem, Cras Withont Vitis: Dost Benet and re - pe HSAs, 208208 : , n 8lacin de signee y sintomas Somparasivaments verdadera de Sa income, Say las, No se puede cucstoner Keane au oe a felament su at Jos requisitos especificados si se instituyera obligatariamente Ia arin is alarmados Por aguela cen be gue entian to contaco. de 40 que inplcala sa ae nase e aniento de casos sclectivos. Por Jo tanto, la experiencia de casos’ Poco representativa 'tiende a scr enfatizada por ia profesion: ‘Wiel Guo fos ofctales del masoo legal y attod ompteone on Zales onden a hablar e solas de crinneness sebie ie hese estauteassesgadas y poco feptesentatines, et sine segs Jos medicos tenden nolmunice? sopdersees fmm, mode Foomtiva parece cours especimetie cuando Gor pees cenducia vera, bastane dramatic, exit Is weoralsed: pubis ea: Como senalé Becker, cuando la marihuana atrajo por Pri- tosva vex In atencion publics, en los ates 13209 eosenees e183, os: medicos comensafon acide ented, es sciads con su uso informes que devapaecinon alrodeaoy oe {bso pero que pareten haber side relowndos's fies te bee, cuando la methuata. se vole: musraments: promaenee a 6 os del pablica” El andliss e Becker destacdal pacoste Const la fuente de tales nformes, pero es igualmente tosis gee iy 2 Mrs ty, att sai ring Sp ation of the Soctat, Bases inc iences, ou stl Satoru igs Poem en a a 7 . gue se despierte sea el'interés moral del médico® De un modo. similar, ef peso cugntitasivo de la opinién médica (desarrollads pesar del hecho que el médieo ests en una posicién muy in- ferior para entrar en conocimiento directo de une secciéa trans- versal verdadera. de, los usuarios) parece, ante Ia evidencia dis- porible, tender a olvidar ol sér conservadora,y sobreestimaré Jes peligros potenciales del uso. Estos comentarios estuvierea mds destinados 0 aeiglar que realmente a asir el problema de la naturaleza de = ‘Gujeroa af liso cada vex mayor de teen ‘para controfar Ia vision tendenciosa propia del ejerciente cuando ‘cvakia Ja coreccién de a1 diagndstico y la efectividad de su. tera ‘Péutica! Pero pasaré mucho tiempo antes que los experimentos fs clogas dobles y Jas deniostraciones completamente controladas hhayan analizado la mayorfa de las practicas de ia medicina com semporiines. ‘eos Nevaron a Ja_iniciaciOn de intentos ambi ion re abet yatta Prevaecenr cn emtes en a Bl rr ie ape ces noe i ae a2 ‘problema es si ¢ 0 0 convenioale ¥ Signe y sintomas enfermedades en el primer lugar y eaferme: fades graves en ef segundo lugar. Este problema se puede acle rar {o al menos debatir inteligentemente) determinando cdma, funciona la gestte en 1a comunidad aun cuando ellos manifiesten' tales signos y sintomas que hasta shora tan sido denominados enfermedades. Dada la tendencia de 1a profesién a imputar en- fermedad y a presionar para que se busque tratamiento profe- Seniesa aoa, hea ond ine Plier ef Pet, louoal of Heth ‘eed Soual Baustor, X08) np. 16. i, Ver Edgur P Rinarmta Research Problems Ju Evaluation of Health Ser- vice Demonattalon, con eterna Mints TastcioueTtente. EL Contenido de et ee resn_ex inmiedlatamente indvetdo © tmpucsto sobre Ia experi Eis def profano de la soctedad en la que ejerce el protestonal, En el piisimo capitulo me propongo ccuparme de te sespucsta fovial Get profane mismo a la, desvacion que’ el perce, 7 mos ‘trar cémo se le introduce en el uso de los servicios médicos. -