Professional Documents
Culture Documents
Carlos Montemayor
1938: El petrleo que fue de Mxico
El presente texto, del autor arriba mencionado, nos viene a resear a manera de guin
cinematogrfico la condicin y el contexto en el que se toma la decisin de llevar la
expropiacin petrolera, no por mero capricho del entonces presidente Lzaro
Crdenas, sino porque el pueblo mexicano lo necesitaba, adems de que este hombre
contaba con gran apoyo popular y sobre todo con el del lder sindical de la CTM,
Vicente Lombardo Toledano. A lo largo de la lectura podemos notar, con buena
apreciacin, las coyunturas por las que se tuvo que pasar para llevar a cabo la medida
que tomo Crdenas de expropiar el petrleo que se encontraba en manos de
extranjeros.
Cuando en el ao de 1938 el general Lzaro Crdenas toma la decisin de
impulsar la expropiacin petrolera, se dijo que Mxico no tendra la capacidad
financiera ni los elementos tecnolgicos; que los trabajadores, tcnicos, profesionistas
y obreros, llevaran a la industria a la quiebra, afirmando que solo las empresas
extranjeras podran salir avante en la extraccin, produccin, distribucin y
comercializacin del petrleo mexicano.
Hoy, el gobierno en turno repite los mismos argumentos trillados: PEMEX no
puede ni tiene la capacidad tcnica necesaria, afirmando que para fortalecer esta
empresa se requiere la participacin del sector privado, se nos insiste. Pero hasta qu
grado tienen veracidad estas argumentaciones? Si somos un poquito crticos y
observadores, adems de basarnos en lo que Carlos Montemayor nos expresa en el
texto, nos damos cuenta de que estos mismos argumentos sin calidad explicativa
suficiente fueron los mismos que utilizaron las empresas extranjeras cuando se les
confiscaron sus bienes en ese entonces. Qu significa esto? Podramos sentirnos en
la calidad moral de afligirnos con tan amarga prediccin, o es que el desarrollo
tecnolgico del pas sigue igualmente empobrecido, o bien, se ha llevado una mala
administracin de esa industria que la ha llevado a la corrupcin y que no logra su
desarrollo ntegramente, sea cual sea el motivo, no hace mal detenernos a pensar un