Professional Documents
Culture Documents
MARCOS OTERO
Los últimos días de exposición pública del plan general estuvieron
protagonizados por el aluvión de alegaciones que recibió el Ayuntamiento
para protestar contra la ordenanza redactada para establecer el límite de
altura de los edificios. De todos esos miles de recursos entregados a los
funcionarios municipales en la Casa del Agua y el resto de registros oficiales
donde era posible presentar las alegaciones, existen casos particulares,
casos concretos sobre los efectos que esta norma incorporada al
planeamiento para fomentar la rehabilitación de edificios ha tenido sobre los
vecinos. Casos como el de Josefina Calvo.
Los recursos de estas dos vecinas representan, sin embargo, una pequeña
parte del volumen recibido por el Ayuntamiento durante los dos meses de
exposición pública del ordenamiento, que suponen el máximo establecido
legalmente.
Entre los vecinos de las calles y barrios más afectados por la normativa no
escasean las voces que critican las fechas escogidas por el Ayuntamiento
para someter al examen de la ciudadanía el documento urbanístico
elaborado por el arquitecto catalán Joan Busquets.
A las quejas hay que contraponer las opiniones de aquellos que consideran
que los efectos de la ordenanza sobre los vecinos se han magnificado en
exceso. Este punto de vista abunda en el barrio de Os Castros, uno de los
más afectados por la aplicación de la ordenanza y por consiguiente donde
más edificios quedarían fuera de ordenación con la aprobación final del
planeamiento tal y como ahora está diseñado.
M. OTERO
Hace apenas un mes, Jesús Varela tenía apalabrada la venta del piso en el
que reside con su madre y su hermana en la calle Alcalde Lens. El papeleo
estaba hecho y prácticamente tan sólo faltaba la firma del comprador. Tan
avanzada estaba la operación, que Jesús y su familia ya habían comenzado
a preparar la mudanza. Entonces, el comprador se echó atrás.
Este vecino del barrio del Agra todavía recuerda con cierta resignación cómo
antes de que explotara la polémica en torno a la normativa de las alturas
recibía "cada dos o tres días" llamadas de inmobiliarias y particulares que se
interesaban por su inmueble. Después el teléfono dejó de sonar y las
ofertas por su vivienda se esfumaron. Con su caso ha ocurrido algo similar a
lo que denunció hace unos días el gerente de la Asociación de Promotores
Inmobiliarios de A Coruña (Aproinco), Juan José Yáñez, quien apuntó que
muchas personas que habían adelantado la entrada de una vivienda estaban
exigiendo ahora a las promotoras que les devolvieran el dinero debido a
que los inmuebles recién adquiridos quedaban fuera de ordenación en el
nuevo plan.