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Profesor:
Curso:
Alumno:
Jesús Escudero Nava
Monografía final:
El líder integral.
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Tabla de Contenido
Introducción……………………………………………………………3
Conclusión……………………………………………………………...14
Bibliografía…………………………………………………………….15
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Introducción.
Hoy más que nunca, la Iglesia esta sufriendo decadencia y crecimiento. Y todo es, debido al liderazgo
que se tenga y como se desenvuelva.
El tener un liderazgo visionario, creativo, pro activo, transparente, temerarario, competente y
comprometido entre muchas otras virtudes que veremos en las próximas páginas promueve el
crecimiento de la iglesia.
Contrario a ello es tener lideres (Sí se les puede llamar así) Posesivos, arrogantes o incluso tan solo
pasivos, gente sin iniciativa propia que estancan el crecimiento de la iglesia.
El liderazgo de hoy, necesita más que nunca estar abierto al cambio, a la innovación. (Aun cuando esta
realmente no existe) ya que no hay nada nuevo debajo del sol sin embargo, innovación es algo nuevo
en nuestra cultura, en nuestro contexto, en nuestra forma de hacer ministerio.
Innovación es: retomar el patrón bíblico e implementarlo en nuestro contexto, esto quiere decir que
innovar no es inventar algo inexistente sino mas bien es hacer cosas que no hemos hecho antes aun
cuando otros lo hayan hecho con anterioridad sin embargo innovación no es copiar sino contextualizar
los principios. Un ejemplo de ello lo tenemos en lo que hoy conocemos como el movimiento celular en
Corea bajo el liderazgo del pastor Cho y en Colombia bajo Castellanos (El citarlos no implica que
estoy de acuerdo en sus conceptos raros y heréticos de interpretación bíblica) ambos trabajan con el
sistema celular pero ambos difieren el estilo de implementación pero no en los principios y ninguno
de ellos fue inventor de los grupos celulares sino que es tan viejo como la diáspora y la iglesia
primitiva.
El liderazgo además de ser innovador debe ser visionario, por visionario me refiero al hecho de tener
sentido de dirección, de propósito, de convicciones ministeriales, de metas y estrategias.
Además de un liderazgo visionario el liderazgo debe ser contagioso.
Por contagioso me refiero al hecho de no solo ganar seguidores sino colaboradores, gente dispuesta a
trabajar con nosotros aun cuando sus habilidades excedan a las nuestras, no solo es de tener discípulos,
sino mentores y colaboradores.
Un líder además de ser contagioso debe ser temerario. Por temerario me refiero al hecho de tener
convicciones que lo empujan o le obligan a:
1. No Conformarse con el Pasado.
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Una de las cosas más comunes que permiten que se pierda nuestro liderazgo es vivir en la gloria
pasada.
Vivir en la gloria pasada nos lleva a ignorar el presente a manera de no buscar soluciones a los
problemas actuales o el hacer todo como lo hicimos en el pasado
2. No Conformarse con el Presente.
Uno de los mayores problemas que confrontamos en iglesias de potencial es el carácter de
complacencia.
Por complacencia quiero decir que se encierra un carácter de conformismo y pereza, nos llegamos a
sentir satisfechos con el numero de integrantes que la iglesia tiene debido a que ello ya nos reconoce
entre nuestros colegas como lideres “exitosos” y/o debido a que ello sufraga nuestros gastos y por
consiguiente el enfoque en el crecimiento de la iglesia llega a carecer de importancia y nos
convertimos en una iglesia de manutención antes que una iglesia de reproducción que fue lo que el
Señor nos delego.
3. Ser Creadores del Futuro.
Por ser creadores del futuro no quiero que se entienda como una violación a la soberanía de Dios sino
como un cumplimiento de nuestro ministerio, con ello quiero decir: que nosotros creamos el futuro que
Dios nos llama a vivir, es nuestra respuesta a Dios, lo que determina nuestra vida y ministerio. Esto
significa que nuestra respuesta a Dios cambia nuestro futuro y el de los que nos rodean, es por ello que
el desarrollo ministerial se debe considerar como una respuesta activa y no pasiva, por tanto, el crear el
futuro realmente es lo que el Apóstol Pablo le dijere a Timoteo: Cumple tu ministerio 2Tim 4:5 he
acabado la carrera v.7 estos versos indican que tenemos expectativas divinas y es un acto voluntario
el desarrollarlo en su máxima expresión por tanto es Divinamente recompensado v. 8 por lo demás
me esta reservada la corona.... Así que es nuestra respuesta positiva a Dios lo que crea el futuro que
Dios tiene para nosotros. El futuro no es algo que debe esperarse en términos ministeriales ya que
esperar el futuro indica pasividad y un líder pasivo carece de un liderazgo integral.
El futuro sin embargo no debe temerse ya que el temor al futuro denota nuestra falta de carácter y
nuestra falta de habilidad para manejar conflictos y por consiguiente la falta de un liderazgo integral.
En esta monografía pretendemos mostrar algunos principios para desarrollar un liderazgo integral
espero poder exponer mis ideas con claridad
Jesús Escudero.
Junio del 2009
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El Liderazgo Integral
(Una definición)
El liderazgo debe se integro pero por integro, no solo me refiero al carácter de integridad en cuestiones
morales sino a integridad en cuestiones de ser completo.
El liderazgo no puede ser incompleto, el líder debe ser tanto un buen comunicador como un buen
hacedor Santiago 1:22 debe ser alguien digno de imitar y seguro de sí mismo, sin caer en la arrogancia
sino más bien seguro de su relación con Cristo 1Cor. 11:1 Debe ser alguien que no busca aplausos por
su labor ministerial, sino el crecimiento espiritual de aquellos a los que sirve, debe ser alguien que no
se revela a la autoridad establecida por Dios aun cuando no haya un mutuo acuerdo, ejemplo de ello lo
tenemos en la vida de David y el rey Saúl, ya que aun cuando no había un liderazgo digno de seguir en
Saúl, David no intento usurpar el trono aun cuando tuvo oportunidades de hacerlo y no lo hizo debido
a que sabia respetar la autoridad establecida por Dios.
Por tanto cuando Absalon intento usurpar el trono de David, Dios se encargo de guardarlo en el poder.
El líder integral es:
1. Alguien lleno de convicciones ministeriales
Una de las cosas que mas tristeza me ha causado es el observar una gran falta de convicciones en el
liderazgo de la iglesia, tenemos pastores, evangelistas, lideres departamentales que a pesar de que están
desarrollando un ministerio en la iglesia local dudan que Dios los ha llamado a hacerlo. Por
consiguiente los resultados son catastróficos para los que están bajo su liderazgo por que hay una falta
de visión y sentido de dirección en ellos, y nadie, esta bajo tales condiciones dispuesto a seguirlos. Sin
embargo, los resultados catastróficos no solo son para los que están bajo su liderazgo, sino también
para sus lideres debido a que esto traiciona la confianza que se les delego y ello, debido a que ellos no
esta llenando las expectativas ministeriales de su llamado.
Pero, lo peor de todo es que la mayor catástrofe es para el mismo líder falto de convicciones ya que
siente el peso de la ineptitud y la vergüenza y es cuando contempla el suicidio ministerial (esto es
renunciar a su cargo.)
El panorama antes descrito es un panorama que continuamente se repite en la iglesia y cuyas
consecuencias son mortales para su crecimiento e impacto en la comunidad por tanto, es nuestra
responsabilidad como lideres entender y creer en nuestro llamado y ministerio. El liderazgo integral es
un liderazgo de convicciones y los primeros que deben creer en nuestro ministerio somos nosotros
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ejemplo de ello se encuentra en el apóstol Pablo quien defendía su apostolado basado en dos criterios
básicos:
a. Su experiencia con Dios.
En repetidas ocasiones el apóstol hace referencia a su encuentro con Cristo en el camino a Damasco
como el inicio de su apostolado y declara estar convencido de su llamamiento basado en la experiencia
espiritual que ello le trajo.
Con esto, no quiero decir, que al menos que contemos con una experiencia como la de ser arrebatados
al tercer cielo no podemos estar seguros de nuestro llamamiento, sino mas bien quiero decir, que
nuestra vida espiritual debe ser tan profunda que debe desarrollar convicciones espirituales debido a
nuestra relación con Dios.
b. Los frutos ministeriales.
El apóstol Pablo les declara a los corintios que la prueba de su apostolado eran ellos mismos, Jesucristo
afirma que le árbol se conoce por sus frutos, no por su sombra ni por su apariencia sino por sus frutos,
es sorprendente mirar ministerios frondosos pero sin frutos de espiritualidad, de humildad y genuina
preocupación por el prójimo, el apóstol Pablo confronto con este problema declarando que algunos
predicaban a Cristo por diferentes razonas a la del genuino interés de la salvación del alma de sus
oyentes Filipenses 1:15
Algunos, a la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda; pero otros de buena voluntad.
Jesucristo en su parábola del buen samaritano refleja como uno puede tener un liderazgo publico como
el sacerdocio o el levítico y carecer de preocupación por el prójimo, por tanto el liderazgo integral es el
que tiene una genuina preocupación por los demas y hace sacrificios personales para poder ayudar a
otros a salir de su infortunio.
Así que la relación con Dios y los frutos de nuestro ministerio deben producir en nosotros convicciones
ministeriales y algo importante de aclarar aquí es: No existe tal caso de decir; tengo una relación
saludable con Dios pero no tengo frutos, ya que todo lo que el hombre sembrare eso también segara.
Una relación enferma con Dios no es no orar, sino orar con un carácter egoísta, un estilo de oración
que solo tiene palabras para nosotros que desconoce las palabras como quebrantamiento,
transformación, moldéame y un clamor desgarrador que dice permíteme servirte.
Una relación enferma con Dios no es no leer la palabra, sino leerla y al darnos cuenta que hemos
aprendido más que otros, tomar una actitud de superioridad y criticismo hacia los demás.
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que donde este nuestro tesoro allí esta nuestro corazón, ello indica que en lo que gasto mi dinero es lo
que realmente me interesa entonces si mi corazón esta inclinado en la educación bíblica voy a invertir
dinero en ello, en libros, videos, seminarios y si fuere posible el instituto, la universidad o cualquier
centro de educación bíblica. No siempre hay los medios para ir a estudiar a algún lado, pero siempre
hay los medios para estudiar. Por tanto el liderazgo integral es educación.
Es triste saber de lideres que solo leen cuando van a predicar que solo ayunan cuando se les recuerda
en la iglesia que solo orar para comer y durante los servicios en el templo. Un liderazgo semejante
necesita ser sacudido para que despierte de su sueño y pueda responder delante de Dios con firmeza el
día que se pregunte por los talentos (liderazgo) que se le entrego.
Todo líder cristiano debe amar la lectura si pretende llegar a algún lado. Entender que el leer es
necesario para nuestro desarrollo ministerial es de vital importancia, muchas veces damos malos
consejos, leamos sobre consejeria y cuidado pastoral, muchas veces tenemos problemas con
matrimonios, leamos libros sobre la familia, muchas veces tenemos dificultades para entender las
escrituras leamos comentarios bíblicos, para todo hay libros ¿por que tenemos que seguir ignorantes en
saber como solucionar muchas cosas cuando hay libros al respecto? Creo que no tiene sentido, a ello se
le llama ignorancia voluntaria y Dios lo a de juzgar.
3. Alguien lleno del poder de Dios.
Hemos hablado acerca de la importancia de las convicciones en el liderazgo integral pero ello no
quiere decir auto confianza, ello no quiere decir sentirnos seguros de nosotros mismos sino sentirnos
seguros de Dios, no quiere decir confiar en nuestros dones y nuestras habilidades (sí acaso podemos
decir que son nuestras)por que podemos vernos como Sansón que después de que perdió su relación
con Dios por el pecado creía que podría seguir triunfante como juez en Israel y solo descubrió que sus
talentos naturales le eran insuficientes ante la opresión enemiga y que confiar en uno mismo solo es
causa de vergüenza y te hace perder la visión y el plan de Dios para tu vida.
La historia de Sansón nos relata que el pecado aleja el poder de Dios en nosotros, tal vez en muchas
ocasiones nos enfrentemos al león y ganemos he incluso podemos triunfar antes los filisteos, pero
llegara el momento en que experimentaremos la miseria que causa el vivir en pecado cuando se tiene
cargo ministerial y en el momento que mas confiemos en nosotros, descubriremos cuan débiles somos,
cuan inútiles somos, cuan ingratos somos y si reaccionamos a tiempo talvez Dios nos usara una vez
mas, aun cuando que ella llegare a ser la ultima, y así poder morir en paz con Dios. ( de verdad que
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Dios es bueno) sin embargo ello no quiere decir que debemos vivir como Sansón sino como Pablo
quien expreso:
He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe 2 Timoteo 4:7
También hemos hablado de la importancia del conocimiento en el liderazgo integral pero nuestra
confianza no debe de reposar en lo que sabemos sino en Dios, el apóstol Pablo lo expresa así:
Y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con
demostración del Espiritu y de Poder de Dios 1Corintios 2:4
Muchas veces somos hábiles oradores o parlanchines y debido a ello no dedicamos el tiempo en
oración y lectura cuando nos toca predicar o enseñar y muchas veces como Sansón salimos victoriosos
( al menos eso creemos) pero llega un momento en que Dios nos muestra nuestro error y si somos
sensibles nos tornamos a el en lagrimas de arrepentimiento o sino solamente nos gozamos por lo
grande que somos y seguimos confiando en nosotros.
El problema que confrontamos ante tales clases y predicaciones es que no vemos que ellas causen un
impacto transformador en la audiencia de una manera permanente, talvez pasen al altar por que
apelamos a sus emociones, pero no cambian, porque su espíritu no recibió fortaleza.
Muchas veces debemos preguntarnos si lo que sentimos al predicar de tal manera es la unción del
Espíritu Santo o tan solo la autosatisfacción emocional que oculta nuestra alma al sentirse triunfante.
Lamentablemente semejante satisfacción es tan efímera que al terminar el servicio pareciera que nunca
hubiera pasado nada, ni para el predicador ni para los oyentes a pesar de que el predicador sigue
contemplando lo grande que es, se decepciona al mirar que a nadie le importa, y todo ello es debido a
que tal predicación careció del elemento más importante: el Poder De Dios.
Por tanto el poder de Dios, es de Dios no nuestro, el tratar de hacer lo de Dios sin su presencia es inútil
pero sobre todo ofensivo hacia el Señor. (¡Líbrame Señor!!!!!) Por tanto, es bueno saber y tener
convicciones pero nunca creernos suficientes, sino más bien, desarrollar un carácter de dependencia en
el Señor, entender que sin el Poder de Dios realmente nada podemos hacer.
El poder de Dios es algo que Dios tiene para transformar vidas si tu quieres saber que tanto poder de
Dios hay en ti, pregúntate que cambios Dios a hecho en tu vida y cuales son necesarios, ya que
conforme Dios obre en ti obrara en otros a través de tu persona el apóstol pablo lo presenta asi:
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Por que nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús para que
también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal.
De manera que la muerte actúa en nosotros y en vosotros la vida. 2 de corintios 4:11-12
El apóstol declara que el reflejar la vida de Cristo es el fruto de la consagración y que sin ella( la
muerte que actúa en nosotros) nuestra audiencia a no experimentara Vida.
Pueden emocionarse pero no tienen Vida, pueden aprender en términos informativos pero no en
términos transformativos. Para poder mirar cambios en nuestras congregaciones, en nuestros discípulos
y seguidores es necesario por demanda bíblica que haya cambios en nuestra persona.
Hay un dicho que dice:
Sino puedes cambiar tu, ¿como esperas ver cambios en otros?
El poder de Dios no es algo que se compra con ayuno y oración no ore y ayune queriendo recibir el
poder de Dios por que se visualiza así mismo como la próxima maravilla ministerial que llena los
estadios.
Ore y ayune con un carácter de consagración desinteresada si Dios desea hacer algo similar Gloria a su
nombre por ello, pero que su oración y ayuno carezca de ese elemento de vanagloria en de vital
importancia.
Nuestra vida de consagración como lideres de la iglesia debe de presentar un elemento de gratitud y
compromiso, nuestra consagración es una vida de entrega mas que una vida de expectativas, tiene que
tener un carácter de despojamiento mas que de demandas, la búsqueda genuina de Dios por amor a el
sin lugar a duda será una vida que nunca nos hará sentirnos vacíos o insatisfecho.
La visión, es sin lugar a dudas un tema controversial, para algunos esta palabra es el todo para el
desarrollo ministerial, para otros esta palabra es herética y ocultista. Para los primeros la visión es la
visualización del futuro deseado y pero los segundos, eso viola la soberanía de Dios y usa un lenguaje
ocultista por ejemplo:
1. Visión, palabra de donde se deriva: vidente, que ha sido nombre común a través de la historia
para los brujos y adivinos.
2. Visualización, es mirar el futuro deseado o simplemente el futuro.
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Mi problema para aceptar estos argumentos estriban en el hecho de que los profetas de Israel también
eran llamados videntes en las lenguas originales.1 Lo cual demuestra que la palabra en si no es la que
determina lo que es malo o lo que es de Dios, sino que es solo una palabra que identifica el carácter
futurista del que la usa.
La diferencia entre el vidente ocultista y el vidente (profeta) bíblico se encuentra en la fuente de la
visión una viene de Dios y la otra de si mismo o del mismo infierno.
Sin embargo no nos detendremos en un análisis exhaustivo de la diferencia de ambos usos debido al
tiempo y espacio destinado para este libro, así que basados en la creencia de que la visión es de
carácter divino me gustaría indicar que es una visión divina.
Visión y Llamamiento.
Y habiendo caído todos nosotros en tierra, oí una voz en lengua hebrea: Saulo,Saulo, ¿Por qué me
persigues? Dura cosa te es dar de coses contra el aguijón.
Yo entonces dije: ¿Quién eres Señor? Y el Señor dijo: yo soy Jesús, a quien tu persigues.
Pero levántate, y ponte sobre tus pies; Porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro
y testigo de las cosas que as visto, y de aquellas en que me apareceré a ti.
Librándote de tu pueblo y de los gentiles, a quienes ahora té envió.
Para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a
Dios; para que reciban por la fe que es en mi, perdón de pecados y herencia entre los santificados.
Por lo cual oh rey Agripa, no fui rebelde a la Visión celestial. Hech. 26:14-19
Este pasaje revela varios elementos de lo que constituye la visión entre ellos:
a. Que la visión es de origen Divino.
Nosotros vemos que Saulo no escogió el ser Apóstol, no visualizó lo que quería ser, él fue escogido y
le fue dicho lo que iba a ser en su ministerio.
Uno de los mayores problemas es que atribuimos a nuestros sueños y deseos y metas personales el
nombre de visión cuando lejos esta de serlo debido a que la visión es de origen divino.
b. Que la visión demanda una respuesta.
La visión a pesar de ser divina demanda una respuesta y es allí donde surge la misión la cual es la
respuesta humana.
Así que la misión es la repuesta humana a la visión, pero por ello no quiero decir que es una obra que
depende totalmente del hombre, pero donde el factor humano juega un componente de voluntad y
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León Wood. Los Profetas de Israel. Editorial Portavoz.
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disposición, sin embargo, ello no indica la ausencia capacitadora del Espíritu Santo, sino más bien la
obediencia humana a la guianza del Espíritu Santo.
c. Que la visión puede ser rechazada.
El apóstol Pablo declara que no fue rebelde, indicando así que tenia posibilidades de hacerlo, por tanto
la visión es algo que podemos rechazar, ignorar e incluso atacar.
d. Que la visión divina es clara definida.
El tercer elemento es el elemento de claridad, Jesucristo le indica a Pablo la claridad del ministerio
que le esperaba y el contexto para su desarrollo, Ello nos indica que la visión es específica y muy clara.
2. Visión y Misión
Como lo hemos indicado con anterioridad, la misión es: La responsabilidad humana ante el llamado
divino, nuestra misión como creyentes esta basado en nuestro llamado, en los decretos divinos en lo
que Dios espera de nosotros como una demanda hacia nosotros, la misión por tanto es la respuesta a
nuestra responsabilidad ante Dios.
La importancia de la visión
La escritura declara que sin visión el pueblo perece y me gustaría aclarar la razón.
1. La visión no es lo que tu deseas hacer, es lo que Dios te manda a hacer.
Basados en este principio podemos tomar la historia de Abraham:
Pero Jehová dijo a Abraham: Vete de tu tierra y tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que
yo te mostrare.
Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás de bendición. .(Gen.
12:1-2)
Nosotros podemos decir que un llamado a dejar tu familia es un llamado que encierra muchas
emociones. Ello nos indica que para que Abraham pudiera cumplir el llamado de Dios basado en la
visión que Dios le dio de llegar a convertirlo en padre de multitudes tenia que sufrir un auto
despojamiento emocional, lo cual estoy seguro que no es algo que fue fácil para Abraham debido a que
tomo consigo a su sobrino Lot, pero interesantemente fue Lot una causa de conflicto en su primer etapa
hacia el cumplimiento de lo que Dios le había pedido, lo cual nos enseña que:
a. A fin de que el propósito de Dios se cumpla en nuestra vida y ministerio tiene que haber
plena obediencia a Dios.
b. La más mínima desobediencia trae consecuencias, aflicción emocional y conflictos
ministeriales.
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Conclusión.
Esta monografía es basada en la reflexión personal que a través de los años hemos tenido en lo que
debe de ser un liderazgo integral y lo que consideramos algunos elementos fundamentales de la vision
para el desarrollo de un liderazgo saludable. Me hubiere gustado poder escribir mas que 15 paginas
sobre esta temática pues siempre he querido escribir un libro sobre liderazgo pues a pesar de ser un
área sobre lo que se ha escrito mucho creo que sigue siendo un área que se debe continuar escribiendo
porque cada día hay nuevos retos a confrontar y definitivamente se necesita mas entrenamiento
bíblico-teológico y ministerial sobre el tema.
Por otro lado, fue un buen tiempo el que tuve en este curso y me ayudo a reflexionar y trabajar en
efectuar cambios, y análisis de mi liderazgo para el engrandecimiento del reino. Gracias FATELA por
hacer posible estos estudios a nivel maestría por la Internet pues a pesar de que existen muchas
escuelas ustedes son una bíblicamente, teológicamente y ministerialmente saludable. Muchas
bendiciones.
Jesús Escudero
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Bibliografía.
Hiram Almirudis. El Desarrollo Integral del Ministro y su Ministerio. Auto publicado. 2008.
John C. Maxwell. Líder de 360 Grados. Editorial Líder Latino / Grupo Nelson. 2005
Wilfredo Calderón. Liderazgo Cristiano (Nueve elementos esenciales) Gospel Press 2003