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INTRODUCCIÓN
lá
d q
Para valorar la calidad de una lámpara de quirófano, se pueden considerar distintos aspectos y
características. En último caso estos aspectos serán los que determinen la decisión de un modelo
de luz de quirófano particular.
No obstante, no solamente es importante que el usuario tenga un concepto claro de sus propias
necesidades, al seleccionar una luz, sino que es interesante, también, que conozcan los criterios
por los que se ha regido el fabricante, al diseñar y fabricar el producto.
Cinco aspectos merecen especial atención:
xc écnica de iluminación
xc uigiene
xc ovilidad
xc £eguridad, y
xc Economía
Los trataremos a continuación, ya que constituyen, al mismo tiempo, la base para la valoración de
las lámparas de quirófano, y son los criterios de calidad, que han servido para fijar nuevos niveles
cualitativos.
Para poder identificar bien incluso los menores detalles, para la presentación rica en contrastes de
vías nerviosas, vasos, órganos y tejidos es decisiva la densidad luminosa en el campo operatorio.
La densidad luminosa depende directamente de la intensidad luminosa irradiada hacia el campo
operatorio. Es decir, la densidad luminosa es la intensidad luminosa total de la lámpara para
operaciones reflejada por el campo operatorio hacia el observador. Como valor de la densidad
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luminosa en el campo operatorio se toma por lo tanto la intensidad luminosa medida en el campo
operatorio.
Las indicaciones sobre la deseada intensidad luminosa en el campo operatorio no son uniformes.
£e mueven entre 10.000 lux y 100.000 lux, normalmente se exigen 100.000 lux. Este valor es
4muy alto comparado con la iluminación normal o de aproximadamente 1000 lux de un puesto de
trabajo. La razón principal de este alto valor de intensidad luminosa es la alta absorción de luz y
con ello el reducido grado de reflexión del tejido; gran parte de la luz que llega es absorbida por el
tejido.
º
d part sombradas
Para mantener la suficiente densidad luminosa en el campo operatorio deben mantenerse muy
reducidas las zonas sombreadas de los haces de luz que llega al campo operatorio producidas por
la cabeza o la mano del cirujano o por instrumentos. La disolución de zonas sombreadas se puede
realizar mejor con un ángulo especial lo suficientemente grande, desde el cual la luz llega al campo
operatorio.
La luz de la fuente luminosa se proyecta al campo operatorio a través de un reflector polígono.
º d prof a
Una buena lámpara para operaciones debe garantizar la suficiente iluminación de huecos
corporales y profundas heridas de una operación. 9l igual que la gran ausencia de sombras,
también la calidad de la luz de profundidad depende de una múltiple superposición de los niveles
luminosos en el campo de trabajo. Con el efecto de los reflectores polígonos convergen los haces
de luz que entran oblicua y verticalmente en el campo operatorio en diferentes niveles y facilitan la
iluminación máxima de profundas heridas cavitarias.
1.3 c uEE
Una superficie lisa, exenta de bordes o tornillos sobresalientes, permite limpiar y desinfectar las
lámparas a fondo y con rapidez requisito imprescindible para evitar la acumulación de gérmenes en
la lámpara de quirófano y sus dispositivos de suspensión.
Las lámparas de quirófano deben llevar un recubrimiento de alta calidad al tratarse de una pintura
tipo-polvo, libre de de disolventes, su aplicación no contamina el medio ambiente, pero, sobre
todo, produce una superficie lisa, de alto brillo, totalmente exenta de poros y de elevada
resistencia a productos desinfectantes.
Por otra parte, la gran elasticidad del recubrimiento impide que, cuando algún objeto choque con
la lámpara, se desprendan y caigan partículas sueltas de pintura.
La empuñadura esterilizable de la lámpara debe encentrarse en un lugar muy cómodo, para que el
cirujano pueda regular la posición de la lámpara con suma facilidad.
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1.4 c ML9
£e debe mantener el peso bajo y reducir el momento de inercia, lo cual facilita el movimiento de la
lámpara. Otro factor importante es el menor peso de carga a soportar por el techo. La suspensión
debe permitir una libertad de movimiento ilimitada, en tres dimensiones, permitiendo el
desplazamiento de la luz a posiciones incluso extremas como se precisen p.e, en intervenciones
ortopédicas, ginecológicas etc.
1.5 c £E9
odo sistema eléctrico y electrónico estar diseñado en conformidad con las Normas IEC 601-1, VpE
y UL, y cumplir todas las normas de seguridad internacionales comunes.
Las piezas de repuesto deben de poder ser adquiridas en la forma usual y segura, a través de una
red de centros de servicio de asistencia.
1.6 c EMÍ9
La lámpara de construcción modular ahorra en tiempo y, por tanto costes. £i se prevé ya en la
planificación del sistema de iluminación un eje convenientemente preparado, la lámpara podrá
posteriormente ser equipada con uno o dos satélites, adicionales, en forma de cuerpos de lámpara
adicionales, brazos de soporte, brazos equipados con cámara fotográfica, etc.
9l usuario apenas se le deben de originar otros gastos de mantenimiento, que la sustitución de una
bombilla o, eventualmente, un reajuste de los frenos mecánicos.
xc Intensidad de luz
xc espacio de acción
xc Los satélites
xc equipo periférico
TIPOS D¦ º99R9S.
-ásicamente las lámparas pueden dividirse en los siguientes grupos:
º99R9S D¦ ¦ºOR9CION¦S :
xc |odables.
xc pe pared.
xc pe techo
º99R9S 9U. D¦ QUIROF9NO :
xc |odables (con o sin equipo de emergencia).
xc pe techo (con o sin equipo de emergencia).
º99R9S QUIRURGIC9S:
xc Para pequeña y mediana cirugía (pe 30.000 a 50.000 LUX).
xc Para cirugía mayor (de 60.000 a 100.000 LUX). Con ò sin satélite.
1.c LÁMP99£
equilibrado instantáneo de las cúpulas en todas las posiciones normales de empleo, sea cual sea la
disciplina operatoria.
Las lámparas quirúrgicas deben cumplir unos requisitos generales que son:
xc ipo Cialítico.
xc ipo picroico.
1.c -ombilla
2.c ´iltro Katatérmico
3.c Condensador
4.c Espejos múltiples
5.c uaces lumínicos
El funcionamiento es el siguiente:
uay una variante de este sistema que consiste en que la luz no es reflejada mediante espejos
múltiples, sino que es refractada por medio de prismas múltiples. El aparato utiliza como fuente
luminosa lámparas tipo halógeno asociadas a las lentes troncocónicas. Cada una de estas lentes
emite un haz de rayos luminosos comprendidos entre dos cono de revolución.
El filamento de estas lámparas emite un flujo que comprende pocos rayos infrarrojos. La variación
de color es despreciable, incluso en caso de variación importante de la iluminación del campo
operatorio. Este punto adquiere todo su valor con la utilización de cámaras tricromales.
c
Las lentes restituyen la mayor parte del flujo luminoso de las lámparas y el rendimiento queda
aumentado por la adicción de espejos esféricos que recogen la luz emitida hacia arriba. Un tubo de
vidrio filtrante, en el trayecto de los rayos luminosos limita el infrarrojo. 9cto seguido los rayos se
enfocan sobre el campo operatorio mediante sectores prismáticos con reflexión total, que
proporciona un reparto óptimo de la iluminación.
Los prismas tienen ángulos de reflexión diferentes, calculados de modo que se enfoque la luz a
una distancia variable con relación a la placa básica, los rayos interceptados por la cabeza o manos
del cirujano (ó asistentes) sólo representan un reducido porcentaje de flujo luminoso, lo que
explica la atenuación de los esbatimentos.
1.c -ombilla
2.c |eflector con tratamiento dicroico
3.c uaces lumínicos
4.c Infrarrojos
El funcionamiento es el siguiente:
£i bien ambos tipos de reflexión y filtración son válidos, el sistema cialítico tiene las siguientes
ventajas:
ROFUNDID9D D¦ IºUIN9CION
Una buena lámpara de quirófano debe ser capaz de iluminar heridas operatorias profundas y
cavidades corporales.
T¦¦R9TUR9 CRO9TIC9
Cuando un "cuerpo negro" se calienta a elevada temperatura, la luz irradiada está en relación
directa con dicha temperatura. Esta se utiliza para comparar luces diferentes. La temperatura
cromática más próxima de una luz produce una impresión semejante a la correspondiente al
"cuerpo negro" calentado. Para el cirujano es muy importante distinguir los diferentes tejidos con
claridad. £olo es posible un correcto diagnóstico cuando los colores se reproducen adecuadamente.
La temperatura cromática óptima se sitúa entre 4.000 y 5.000 k. Las normas pIN 5035 Parte 3
exigen una temperatura cromática en el área operatoria de al menos 4.000 K. Estos valores se
aproximan suficientemente a la temperatura cromática de la luz diurna (aproximadamente 5.800
K.) y permiten una exacta reproducción de los colores que se consideran naturales por el cirujano
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cuando trabaja con luz artificial. Las desviaciones de la temperatura cromática alteran el aspecto
subjetivo de un color determinado. las lámparas tienen una temperatura crinática de 4.300 K. lo
que proporciona una "reproducción natural del color".
El halógeno o las bombillas especiales se utilizan como fuentes luminosas en las lámparas de
quirófano. £in embargo estas bombillas convierten menos de un 10% de la electricidad en luz
visible y más de un 90% en radiación térmica no deseada.
Para prevenir a los tejidos del área operatoria de un posible secado y para proteger al equipo
operatorio contra ese calor se han incorporado a las lámparas unos sistemas de filtro altamente
efectivos. Estos reducen la radiación térmica en gran medida.
9 una intensidad de iluminación de 100.000 lux, es posible, en teoría, una temperatura de 12ºC si
únicamente la luz visible (400-800nm) se proyecta sobre el área operatoria. El calor se puede
medir con gran efectividad con una placa de cobre ennegrecida. Las lámparas de quirófano
producen 14-20ºC de calor a una intensidad de iluminación de 100.000 lux.
pe esta forma proporciona una "luz fría" óptima y una temperatura cromática ideal.
F9CIº 9NIOBR9BIºID9D
Las manillas esterilizables, las barras para ajuste no estéril y la compensación por muelle permiten
ajustar con facilidad las lámparas de operación en cada tipo de operación. Los anillos colectores
vienen incorporados para conducir la corriente cuando las lámparas giran radialmente. Estos
contactos posibilitan un giro sin restricciones. Unos sistemas de freno ajustables y fácilmente
accesibles aseguran la estabilidad de la lámpara en la posición deseada sin que se produzcan
deslizamientos.
El montaje central del techo con arrastre circular y amplio radio de acción- permite posicionar
correctamente a las lámparas de quirófano en cada tipo de operación.
Esta suspensión "de cardan" de la cabeza de la lámpara asegura una adecuada iluminación así
como el ángulo deseado incluso en la posición más baja.
las superficies lisas y herméticas, de las lámparas de operación son fáciles de limpiar. Previenen la
entrada de polvo y gérmenes patógenos. odas las superficies tienen un acabado de esmalte
endurecido. La pintura utilizada es resistente a los desinfectantes químicos.
Las lámparas de operación siguen las especificaciones nacionales e internacionales (VpE, IEC 601-
1 etc.) y están sometidas a constante supervisión.
c
Esta es la luz que asegura una buena visión por debajo de las manos del cirujano y de los
instrumentos quirúrgicos.
Una primera medida determina la intensidad de la luz recibida directamente por el tubo. Para la
segunda medición se interpone en el rayo luminoso un disco opaco; en este caso la intensidad
luminosa medida es la recibida por la célula de medición del fondo del tubo a través de la reflexión
dentro del tubo ennegrecido. Cualquier luz que alcance el tubo desde un ángulo amplio producirá
una buena iluminación (de la herida)
Las luces de espejo grande o los sistemas similares con lentes o espejos tienen normalmente
valores £IE alrededor del 40%. Esto significa que para la cirugía normal, en el fondo de la herida
quirúrgica debe existir todavía una iluminación de 40 a 400 lux.
- temperatura cromática
- incremento de temperatura en el campo debido al impacto de la luz
- índice de interpretación de color.
T¦¦R9TUR9 CRO9TIC9
Nos gustaría explicar el término "tmprat ra romáta" y la interacción que existe con el
incremento de temperatura del campo operatorio.
£i un CU¦RO N¦GRO se calienta emitirá luz con una temperatura del de 550ºC. Con el
INCR¦¦NTO D¦ T¦¦R9TUR9 este cuerpo se convertirá en rojo, amarillo y finalmente en
incandescente. la temperatura de este cuerpo (medida en Kelvin = ºC + 273,15) se corresponde
con su temperatura cromática. Cuanto más elevada sea la temperatura cromática más cerca nos
encontraremos del rango espectral de la luz visible.
9quí el punto crucial es que "blanco" no es igual a "blanco", pero la distribución espectral de la luz
se corresponde con la de la luz diurna.
ºU FRI9
Con la producción de una luz artificial similar a una luz diurna, alrededor del 90% de la energía
tiene que ser filtrada por los filtros de corrección de color ya que en este momento es
fundamentalmente luz infrarroja (radiación térmica).
Cuanto más elevada sea la temperatura acromática menor será el infrarrojo que quede. En otras
palabras: cuanto más elevada sea la temperatura cromática mas "fría" será la luz, pero también
más cara será su producción. Naturalmente la temperatura no se puede incrementar
indefinidamente, ya que se vería afectada la interpretación del color (estos colores no serían
naturales). Cuando evaluamos el efecto térmico de la luz, su distribución espectral adquiere una
importancia decisiva: cuanto más elevado sea el porcentaje de luz roja e infrarroja (radiación
térmica) más se calentará la herida operatoria. En otras palabras: cuanto más baja sea la
temperatura cromática, más elevado será el porcentaje de rojo (con la misma iluminancia de 100
Klux), y por tanto más templada será la luz.
Con la disminución de la temperatura cromática la herida operatoria muestra una tendencia a
incrementar su temperatura. Esto provoca una serie de desventajas cruciales, como una rápida
desecación de la herida lo que trae consigo una mala cicatrización o bien - en el caso de la cirugía
cardiaca- un incremento no deseado de la temperatura del corazón.
DISTRIBUCION ¦S¦CTR9º
odo esto, sin embargo, es sólo un aspecto de la evaluación del efecto térmico de la luz. Otro es la
distribución espectral de la luz visible a una temperatura cromática constante. Por medio de filtros,
el espectro (ver diagrama) puede ser interrumpido (curva 2) o bien modificado (curva 1). Las luces
están equipadas con filtros, previstos para una distribución espectral como la de la curva 1.
xc cuanto mejor sea la correspondencia de la distribución espectral con la luz diurna natural,
y cuanto mejor sea la disipación térmica, más baja será la energía transmitida por la luz lo
que dará como resultado un incremento de la temperatura en el campo operatorio.