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ENSAYO

Revista Inversa, Vol. 1, No. 1 (2005): 49-55.

La literatura de ficción y
la realidad histórica

Revista Inversa
Johanna Irene Wahanik Durán.
johairene@yahoo.com
Estudiante de sexto de Antropología
Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá
49

Vol. 1 No. 1 (2005)


Palabras claves Resumen
Literatura e historia, realismo en En este artículo se analiza la manera cómo la obra literaria, específicamente
la literatura, realidad y literatura. la novela, puede dar cuenta de una realidad que a veces es ambigua y
contradictoria de una forma distinta a como lo hace el análisis racional y
lógico, pues por medio de la trama en la que se desenvuelven unos personajes
y específicamente, en búsqueda de la unidad de ésta, es que se puede conocer
una época y lugar de modo diferente (no por ello ficticio), a la forma como
Key words se haría a partir de la teoría. Para ejemplificar esto, se parte de los análisis
Literature and History, realism in realizados por Pierre Vilar sobre el Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la
the literature, reality and literature. Mancha y la decadencia de España.

Abstract
In this article we analyze the way how a literary piece of work can show a
Recibido: reality that sometimes is ambiguous and contradictory, in one different
14/02/2005
En revisión desde:
manner from the one that the rational and logical analysis does it. Due to
20/02/2005 the plot in which certain characters are developed, and specifically looking
Aceptado para publicación: for its unit, it is possible to know an age and place in a different way from
03/04/2005 the one that would be done from the theory.
«Vengamos ahora a la citación de los autores que los
otros libros tienen, que en el vuestro os faltan.
El remedio que esto tiene es muy fácil, porque
no habéis de hacer otra cosa que buscar un
libro que los acote todos, desde la A hasta la Z,
La literatura de ficción y la realidad histórica. Pp.49-55.

como vos decís. Pues ese mismo abecedario


pondréis vos en vuestro libro; que, puesto que
a la clara se vea la mentira, por la poca necesidad
que vos teníades de aprovecharos dellos, no importa nada...»
(Cervantes Saavedra, 1990: 12)

E
n este fragmento tomado del prólogo de Don Quijote, se presenta
una de las características del arte y en este caso de la obra literaria:
la libertad de que lo narrado sea fantasía o ficción, y que lo que
es mentira pueda mostrar la verdad. ¿Existe en la obra maestra de un escritor,
la posibilidad de encontrar una referencia histórica fiel, de la que nos
podamos atener para conocer una época y lugar? En Don Quijote de la
Mancha se revela una realidad histórica confiable, no a pesar de su carácter
fantástico sino precisamente por él mismo.1
La literatura es y ha sido una fuente para conocer realidades pasadas y
50 presentes de los pueblos humanos. Las disciplinas de las ciencias humanas
y sociales acuden a fuentes literarias desde una perspectiva científica, como
objetos que se pueden analizar y que muestran realidades culturales, sociales,
políticas etc., y que se han abordado desde «afuera», asumiendo una posición
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racional de las mismas, ¿es posible que en estas ciencias se acceda al


conocimiento de un fenómeno viviendo la obra literaria, «metiéndose»
subjetivamente en la novela, dejando que exprese lo que quiere decir a
partir de sí misma? El presente ensayo muestra la manera en que la obra
literaria puede dar cuenta de una realidad ambigua y contradictoria de
forma distinta a como lo hace el análisis racional y lógico. Al interior de la
novela, en su búsqueda de darle unidad a la paradoja de unos personajes e
historia, no coherentes como la teoría, es que se puede conocer la realidad
de una época y lugar.
Para argumentar lo anterior, en este ensayo se toma a El ingenioso Hidalgo
Don Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra y su contexto,
el cual es estudiado por Pierre Vilar como escenario de paradojas y
contradicciones económicas, sociales, políticas y culturales. Adicionalmente,
también se toman los planteamientos de Eric Wolf de su libro Europa y la
gente sin historia, que servirán para enmarcar en un contexto histórico y
geográfico más general a Cervantes y a Vilar, así como algunas reflexiones
1
Expresión reiterativamente usada
por Ernesto Sábato en sus ensayos
realizadas por escritor Ernesto Sábato que servirán para pensar el carácter
y novelas. de la obra literaria.
Eric Wolf, en su libro Europa y la gente sin historia argumenta que una
historia que se supone lineal y encaminada al progreso, parte de la idea de
que no ha habido contradicciones en su interior y que los pueblos
supuestamente aislados y posteriormente descubiertos y colonizados no
han interactuado con los «herederos de la civilización». Esto supone una
concepción ideal de las dinámicas históricas, sociales y culturales pues,

«Al convertir los nombres en cosas creamos falsos modelos de realidad. Al


atribuir a las naciones, sociedades o culturas, la calidad de objetos
internamente homogéneos y externamente diferenciados y limitados, creamos
un modelo del mundo similar a una gran mesa de pool en la cual las
entidades giran una alrededor de la otra como si fueran bolas de billar duras
y redondas» (Wolf, 1987: 19).

El autor ejemplifica lo dicho argumentando que el nacimiento de


Estados Unidos de Norteamérica no fue producto de una «esencia

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intemporal» sino de una compleja conjunción de «fuerzas antagónicas» y
de «relaciones contradictorias». Así, muestra como las «categorías abstractas»2
han sido un instrumento intelectual utilizado en la historia, y pone el
ejemplo de su implementación durante la Guerra Fría (Wolf, 1987: 18-19),
que se usó y se sigue usando para satanizar al enemigo a partir de un
discurso absolutizador que con las generalizaciones vela la realidad la cual
tiene más de una sola dimensión. Igualmente, sobre las ciencias sociales,
expone que la creación de las mismas y la especialización de las materias 51
que se tratan en cada una de ellas, es una forma de justificar las razones
ideológicas de intereses políticos y económicos (Wolf, 1987: 20).
Así, el discurso histórico que critica Wolf es, como él lo dice, idealista,

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pues al volver los nombres cosas, «estos esquemas proporcionan respuestas
autorrealizantes, dado que eliminan del discurso especializado los
fenómenos que no estén cubiertos por el modelo» (Wolf, 1987: 24).
Adicionalmente, el hecho de autoatribuirse la verdad objetiva sobre los
acontecimientos lo hace aún más engañoso.
Al tener en cuenta lo anterior y poniendo énfasis en la manera en que
los discursos absolutizan al nombrar, se puede decir que las diferentes
disciplinas de las ciencias sociales y humanas, abordan lo humano desde
diferentes perspectivas lo que no es reprochable, el problema comienza
cuando en la búsqueda de ser científicas racionalizan la percepción de los
fenómenos históricos. En contraposición la literatura tiene una ventaja, y 2
Cuando Eric Wolf se refiere a
es que las narraciones tienen en su interior una riqueza emotiva y de categorías abstractas critica la creación
significados que sólo se pueden comprender «metiéndose» en la leyenda, de disciplinas especializadas como la
sociología, la economía y la economía
mito, narración, novela, etc., pues de lo contrario perderían su capacidad política, que al fragmentar el
de hablar de un misterio o de lo inexplicable, que es de lo que justamente conocimiento de los fenómenos
quieren dar cuenta. termina por limitar las cosas a los
nombres utilizados en cada disciplina,
Por otra parte, la manera poética que tienen los pueblos de transmitir sus perdiendo el sentido de totalidad de lo
tradiciones y valores, tiene la intensidad de lo que resulta inexplicable o real.
sorpresivo y nos permite conocer de un solo vistazo o intuitivamente un
fenómeno para captar su complejidad, totalidad e inclusive incoherencia.
Los fenómenos, en su ambigüedad y como totalidades únicas no se pueden
entonces tratar de nombrar sólo lógicamente, pues las generalizaciones pueden
perder de vista matices y contradicciones, además de que pueden caer en la
trampa de confirmar lo que quieren argumentar pues de antemano, han
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limitado el marco de estudio, sesgando la manera en que se perciben los


hechos. Es en este sentido en que Wolf nos da luces para darle crédito a la
literatura.
«La obra literaria puede dar cuenta de una Para abordar esa historia no lineal y
realidad ambigua y contradictoria de forma contradictoria que defiende Wolf, pero en
distinta a como lo hace el análisis racional y referencia al caso español, se recurrirá a
Pierre Vilar. El autor plantea en su artículo
lógico.Al interior de la novela, en su
búsqueda de darle unidad a la paradoja de «El tiempo del Quijote» del libro Crecimiento
unos personajes e historia, no coherentes ydinámicas desarrollo, este tipo de contradicciones y
tratadas por Eric Wolf. Todo su
como la teoría, es que puede conocerse texto muestra los contrastes españoles en
también la realidad de una época y lugar» los tiempos en que fue escrita la obra del
Quijote (1605 y 1615), y nos describe la
crisis del poderío español (1598-1620) tratando sus diferentes etapas.
En todas ellas son reiterativos los antagonismos y más aún por tratarse de
la crisis de un imperio. En el periodo de 1598 a 1620 se presenta el desenlace
dramático de una cadena de hechos causados por el auge de la plata americana.
52 A la gran alza de los precios de 1600, se contrapone un sector productivo
afectado por esa misma carestía; demográficamente, el hambre y la peste
terminan por acentuar el contraste de ciudades superpobladas y campos
yermos y desolados; a la vez que los salarios de los trabajadores del campo
Johanna Irene Wahanik Durán

suben, no existen asalariados y hay escasez de mano de obra; la plata de las


Indias, paradójicamente cada vez llega más cara y, adicionalmente, se fuga al
resto de Europa, ya que los señores, acostumbrados a lujos y riquezas siguen
comprando mercancías extranjeras y produciendo poco, acuñando monedas
de cobre y promoviendo la inflación (Vilar, 1974: 433-435).
Es así como el imperialismo español, que contribuye a la gestación del
estado moderno europeo, no está preparado para generar un tipo de economía
capitalista. El motor de la expansión española se encontraba en el comercio
y en su orden feudal predominante, constituido por relaciones personales
de servidumbre o vasallaje y basado en una economía de subsistencia, tributo
y pastoreo. Este orden le daba importancia a las conquistas y cruzadas religiosas
y a la aristocracia la alimentaba con la posesión de tierras y riquezas, justamente
conquistadas por esta nobleza. El hecho de que este grupo social no tuviera
una tradición productiva, de que las riquezas extraídas de América se
mercantilizaran y de que no hubiera un sistema de acumulación para la
producción, ocasionó el despilfarro.
Pierre Vilar interpreta lo anterior desde la teoría de Marx: los moros
han sido expulsados de la península, y los señores al verse sin mano de
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Paola Andrea Zubiría

obra buscan que se les perdonen sus deudas, viéndose afectado no el tipo
53
de economía feudal sino la basada en el capital productivo. De este modo,
llegan mercancías abundantes con la posibilidad de convertirse en el capital
acumulado originariamente y con la posibilidad de que se transformen los
medios de producción (según el materialismo histórico); sin embargo, las

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relaciones de producción permanecen intactas pues para el imperialismo
motivado por conquistas de privilegios, la importancia radica en los tesoros,
los territorios y la mano de obra servil (Vilar, 1974: 439):

«Así el imperialismo español ha sido en realidad «la etapa suprema» de la


sociedad que él mismo ha contribuido a destruir. Pero, en su propio solar, en
Castilla y hacia 1600, el feudalismo entra en agonía sin que exista
nada a punto para reemplazarle. Y este drama durará. Dura todavía,
y por eso don Quijote sigue siendo un símbolo» (Vilar, 1974 :441).

Así pues, Don Quijote es fiel reflejo de las contradicciones de su época.

«Cervantes ha dicho el adiós irónico, cruel y tierno, a aquel modo de vivir, a


aquellos valores feudales, cuya muerte en el mundo han preparado sin quererlo
los conquistadores españoles. Pero, paradójicamente y al precio de la ruina
de España, los conquistadores prepararon también la supervivencia del
feudalismo en su país. El secreto del Quijote está en esta dialéctica original
del imperialismo español» (Vilar, 1974 :438).
En esta dialéctica es donde la obra muestra el clima de la época, en
donde la aristocracia se convierte en un grupo parasitario e improductivo
por falta de capital y el exceso de títulos reemplazan la plata real. Todo es
muestra de la miseria de España: señores que viven de la renta, burgueses
que despilfarran su dinero en banquetes desproporcionados, banqueros
que quieren abarcarlo todo, hambre y al mismo tiempo hartura, servidores
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que están llamados a servir a un decadente señor, ricos que dan


generosamente y pobres que mendigan y pícaros que roban a sus señores
(Vilar, 1974: 444-445).
Pero también habría qué preguntarse cómo una obra literaria expresa
estas contradicciones, que de otra manera se plantearían haciendo una
argumentación como la realizada por Wolf o Vilar. La literatura muestra
estas paradojas a partir del contraste y es en la irrealidad que puede intuir
las dimensiones del desastre. A propósito, Sábato escribe sobre la objetividad
en la novela:

«La paradoja de la creación novelística consiste en que el escritor debe dar


en una obra que es forzosamente finita una realidad que es fatalmente
infinita. Para lograrlo, no puede recurrir al corte sino a la recreación; y debe
proceder con aquella carta de amor de modo parecido a las falsas perspectivas
que usan los escenógrafos: que son falsas precisamente para dar la sensación
de la verdad». (Sábato, 1997: 94).

54 La ficción en ese caso haría las veces de lupa; el arte acerca a la realidad
en la medida que la disfraza para hacerla más visible pues la ficción es la
forma en que la novela muestra lo cotidiano. En Don Quijote se ve un ser
con una contradicción tan honda que su vacío da la sensación de un hombre
Johanna Irene Wahanik Durán

de carne y hueso como el español de su época.


Si la irrealidad y el encantamiento de la España decadente consistía en
mantener un orden feudal en medio de unas condiciones de crisis, los
paisajes donde ocurren las aventuras al Quijote son muestra de eso. Pues en
el hecho de expresar dicha realidad, es que está su validez, pues siendo una
historia particular no generaliza como lo hace la historia oficial de la que
habla Wolf y siendo una historia concreta no cae en las abstracciones que
condenan en función de intereses políticos y a través de ideologías a los
pueblos enemigos o rebeldes: la contradicción es interna al personaje y a
España, pues si hay algo que es curioso y repetitivo es que las personas y
pueblos ven reflejados sus defectos en los otros y esa es su razón para
desaprobarlos; así, quien aplica las críticas para sí mismo, puede darse cuenta
que en todo pueblo y ser humano existen paradojas profundas, que se
muestran en ejemplos de la historia.
En este sentido, en la historia de los pueblos existe un movimiento
interno, una parte que tiende a conservar y otro que tiende a hacer las
veces de una vanguardia, así en el Qujote puede verse a un caballero que
Nora Maritza Díaz todavía practica la justicia privada en medio de campos aparentemente
tranquilos y despoblados. El Quijote es una manifestación o ejemplo de la
España que conserva privilegios aristócratas y órdenes feudales, pero que
con los tesoros americanos ha llenado a Europa de capital acumulable.
Esta novela muestra una historia dinámica y dialéctica; a fuerza de ser
grotesca y falsear las dimensiones de lo real, lo encarna y lo hace vivo al
darle movimiento. Cuando Hamlet indica a los actores cómo representar
la muerte de su padre, agranda de tal forma las proporciones que es capaz
de alarmar a la corte sobre lo insospechado. La ironía resalta los contrastes
al interior de los sucesos así como Marx, ilustraba contradicciones de fuerzas
al interior de las sociedades. Si se permite la comparación, la manera
diferente en que la novela y la lucha armada le dan fin a los conflictos,
consiste en que en la primera, el conflicto se presenta como hilo dramático
y finalmente se resuelve con humor, horror, etc., y en la lucha se finaliza
con muertes y destrucción, o en el mejor de los casos con diálogo.
Cervantes de lo contrario opta por que a la «clara se vea la mentira»,

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para que por contraste se diga la verdad. Mentira visible, que en últimas es
fiel a una realidad completa, compleja y contradictoria en sí misma. No es
a pesar de su carácter fantástico que Don Quijote es referencia fiel de la
historia si no precisamente por él, porque qué mejor manera de mostrar la
decadencia de España si no a través de un caballero andante, que en medio
de la miseria, aún cree en su heroísmo y grandeza; tal vez no a pesar, si no
precisamente por ella misma, como diría Ernesto Sábato.

BIBLIOGRAFÍA 55

CERVANTES SAAVEDRA, MIGUEL DE. 1990. Don Quijote de la Mancha.


México: Editorial Porrúa.

Vol. 1 No. 1 (2005)


SÁBATO, ERNESTO.1997. El escritor y sus fantasmas. Barcelona: Seix Barral.

VILAR, PIERRE. 1974. Crecimiento y desarrollo. Barcelona: Ediciones Ariel.

WOLF, ERIC. 1987. Europa y la gente sin historia. México: Fondo de Cultura
Económica.

Nora Maritza Díaz

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