Un alarmista de la NASA sobre el calentamiento global respalda un

libro que llama al genocidio en masa

http://www.infowars.com/nasa-global-warming-alarmist-endorses-book-that-calls-for-
mass-genocide/

Paul Joseph Watson

Prisión Planet.com
Viernes, 22 de enero 2010

El prominente alarmista del calentamiento global de la NASA Dr. James Hansen ha

apoyado un libro eco-fascista que pide que las ciudades sean arrasadas, la civilización
industrial sea destruida y se tomen medidas de reducción de la población genocidas que
sean aplicadas en nombre de la prevención del cambio climático.

Hansen, que estaba de nuevo en las noticias hoy comentando un comunicado de la

NASA que afirma que la última década fue la más calurosa de la historia, dijo que Keith
Farnish, autor de un nuevo libro llamado Time's Up, tiene razón al pedir actos de
sabotaje y de terrorismo medioambiental con voladura de presas y demolición de
ciudades para devolver al planeta a la era agraria.

Hansen es una figura clave en el movimiento del calentamiento global, ya que fue en
1988 su testimonio ante un comité del Senado de los EE.UU., presidido por Al Gore, lo
que realmente echó el balón a rodar para la élite en su misión de secuestrar el
movimiento ambiental y promover los miedos apocalípticos al cambio climático como
medio de hacerse con el poder absoluto sobre la humanidad.

El autor Farnish "cree -como el Honorable Sir Jonathon Porritt- que la humanidad es
una mancha en el paisaje y que la reproducción (o igualmente la existencia) no es
aconsejable"escribe James Delingpole.

"La única manera de evitar el colapso ecológico global y con ello garantizar la
supervivencia de la humanidad es liberar al mundo de la civilización industrial", escribe
Farnish, añadiendo que "la gente va a morir en grandes cantidades cuando se derrumbe
la civilización".

Farnish se hace eco de conversaciones similares a las presentadas en el libro de texto del
zar de la ciencia de la Casa Blanca John Holdren sobre ecociencia, que aboga por un
"régimen planetario" que lleve a cabo abortos forzados y esterilizaciones obligatorias,
así como drogar el suministro de agua, en un esfuerzo para podar el excedente humano.

Farnish explica su deseo de ver una reducción feroz de la población en nombre de la

salvación del planeta.

"En resumen, el riesgo más inmediato para la población que vive en las condiciones
creadas por la civilización industrial es la propia población. La civilización ha creado
las condiciones perfectas para una terrible tragedia a un tipo de escala nunca antes vista
en la historia de la humanidad. Esa es una razón para que haya menos gente", escribe.
¿Y cómo se va a lograr el colapso de la civilización industrial? Mediante actos
indiscriminados de sabotaje y terrorismo ecológico.

"Descargar en esencia significa la eliminación de una carga existente: por ejemplo,

eliminar el pastoreo de animales domésticos, arrasar ciudades hasta los cimientos, la
voladura de las presas y apagar la máquina de las emisiones de gases de efecto
invernadero. El proceso de descarga ecológica es una acumulación de muchas de las
cosas que ya he explicado en este capítulo, junto con un (casi seguro necesario)
elemento de sabotaje ", escribe Farnish.

Pero sin duda los individuos respetados y con autoridad en que nos han dicho los
medios de comunicación que confiemos en lo que respecta a la ciencia tras el
calentamiento global ¿rechazarían esos métodos extravagantes, locos y extremos de
ocuparse del cambio climático?

"Keith Farnish tiene razón: el tiempo prácticamente se ha agotado, y el ‘sistema’ es el

problema", escribió el Dr. James Hansen en la web de Amazon. "Los gobiernos están
bajo el control de los intereses especiales de los combustibles fósiles, no se ocuparán de
nuestro planeta y nuestro bienestar hasta que les obliguemos a hacerlo, y eso va a
requerir un esfuerzo enorme.

También ha salido a la luz que a Hansen ni siquiera se le pidió que comentara el libro de
Farnish, él se ofreció libremente su opinión. "Sólo para poner la cita en su contexto, era
de hecho espontáneo por parte de James y me sorprendió un poco al principio", escribió
el autor Farnish en la web de Yahoo Respuestas.

"Es una cosa importante para recordar cuando hablamos de calentamiento global de
origen humano: muchos de los científicos-activistas que lo afirman con pasión quieren
que la tierra se esté calentando y que sea culpa en gran medida del hombre. Estas
sandios ciertamente no desean que lo contrario sea verdad, porque entonces no tendrían
la excusa que necesitan tan desesperadamente para destruir el sistema capitalista y
llevarnos a todos de nuevo a la era agraria ", comenta Delingpole.

Toda la toma de control justificada en el cambio climático está siendo encabezada por
psicóticos que se odian a sí mismos y que quieren imponer una política global de un
solo hijo en nombre de la reducción de la superpoblación. Como hemos demostrado con
vehemencia, el delirio de la superpoblación es un mito desacreditado sin ninguna base
real. La verdadera razón por la que los eugenistas mundiales quieren aplicar esas
políticas, junto con los impuestos sobre el vital gas dióxido de carbono, es porque les
daría el control absoluto de cada aspecto de nuestras vidas - la utopía de un obseso del
control.

El método propagandístico de representar a los humanos como el enemigo se ajusta

perfectamente a este programa, ya que provoca la respuesta de que la gente pida que su
propia especie sea regulada, controlada, e incluso asesinada bajo el pretexto inventado
de impedir un apocalipsis ecológico.

Este enfoque fue de nuevo evidente en una reciente campaña de carteles patrocinada por
las Naciones Unidas que presentaba a los seres humanos como malignos monstruos de
una película de terror intentando matar la vida silvestre y asesinar a la tierra.

La élite mundial decidió adoptar este enfoque en 1991 cuando el Club de Roma, una
poderosa ONG globalista, se comprometió a limitar el crecimiento y fomentar el
advenimiento de una sociedad post-industrial, ha declarado en su informe, “The First
Global Revolution” (la primera revolución global), "Buscando un nuevo enemigo que
nos uniera, se nos ocurrió la idea de que la contaminación, la amenaza del calentamiento
global, la escasez de agua, el hambre y similares encajarían... Todos estos peligros son
causados por la intervención humana... El enemigo real, entonces, es la propia
humanidad."

Psicópatas genocidas están tratando de obtener el poder para llevar a cabo el tipo de
plan nihilista de terrorismo que Farnish describe en su libro, para la consecución de la
"sociedad post-industrial". Lo que lo hace aún más irritante es que los eco-fascistas
presentan su locura en un tono tan razonable y sobrio. En realidad, a pesar de que
intentan presentar a la humanidad como un virus sobre el planeta, el único verdadero
cáncer en la tierra es su virulentamente neo-fascista doctrina del ecologismo adulterado
y el control de la población.

La única amenaza real para la supervivencia de la humanidad no es el cambio climático,

que ha ocurrido naturalmente durante millones de años desde la encarnación misma del
planeta Tierra, sino los locos, auto-destructivos y monstruosos planes para "resolver" el
tema propuesto por eco-fascistas como Farnish y respaldado por personas en posiciones
influyentes como Hansen.