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Primera Iglesia Unitaria

Bruno Nicolás Arancibia Alberro


Mesa de Trabajo 3
jueves 19 de agosto de 2010

Louis Kahn
Bruno Nicolás Arancibia Alberro jueves 19 de agosto de 2010
Mesa de Trabajo 3

Primera Iglesia Unitaria de Louis Kahn


Frecuentemente, o por lo menos en México, la arquitectura de las Iglesias está asociada
íntimamente a la tradición heredada desde hace varios siglos, formas y cánones aprobados
hace ya mucho tiempo no dan mucha flexibilidad en cuanto a la disposición arquitectónica de
un templo se refiere. No obstante, este no es el caso de la Primera Iglesia Unitaria de
Rochester, NY.
A mitades del siglo XX, la iglesia que entonces ocupaba esta congregación tuvo que ser
demolida a causa de obras de desarrollo en la zona céntrica de la ciudad; siendo que la
anterior iglesia había sido diseñada en 1859 por el célebre arquitecto Richard Upjohn,
fundador del Instituto Americano de Arquitectos (AIA, por sus siglas en inglés), la
congregación decidió comisionar la construcción del nuevo complejo religioso a un arquitecto
actual y renombrado, fue así que después de indagar dieron con el celeberrimo Louis Kahn.
Después de la primera entrevista, los líderes de la congregación se sorprendieron al
darse cuenta de que el arquitecto compartía muchos valores con su religión, lo que los motivó
aún más a darle el proyecto.
Finalmente llego el momento de la primera reunión para discutir el proyecto, y fue así
que Louis Kahn trazó en el pizarrón un signo de interrogación, explicando que desde su punto
de vista el eje medular de la disciplina religiosa unitaria era la interrogante, por lo que el
templo ocuparía la parte central de esta arbitraria disposición mientras que la escuela estaría
dispuesta al rededor de ella, como “abrazando” la interrogante. Hacía sentido, al centro la
interrogante, la inquietud del espíritu, y al rededor los espacios de respuesta y de
explicación… la sed de conocimiento saciada.

Ahora bien esta idea genial no era suficiente, debían resolverse aún un sinúmero de detalles,
uno de ellos fundamental para Kahn: ¿Cómo iluminar con luz natural la iglesia siendo que
esta se encontraba cegada en el centro del conjunto. Fue así que se contemplaron cuatro
torres en las esquinas de este espacio, que se inundaría pues con una luz cargada de atmósfera
y personalidad, dependiente del exterior, algo a lo que Kahn se refería como el “cáliz
plateado”.
Creo pues que es fundamental atender a las soluciones y puntos esenciales en el diseño
de Kahn en este proyecto, y es que nos sirve de referencia para nuestro propio ejercicio: ¿No
son acaso las iglesias como los memoriales espacios cargados de una densa espiritualidad, en
los que el arquitecto debe prestar una profunda atención a la condición sensorial y emocional
del visitante? y, ¿No era Kahn uno de los maestros en el manejo de la luz natural, tema central
de este proyecto? Así creo que el Templo Unitario es una excelente referencia.
Bruno Nicolás Arancibia Alberro jueves 19 de agosto de 2010
Mesa de Trabajo 3

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