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HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA España el coste económico del tratamien-

to médico de la HPB se ha incrementado


en el período comprendido entre 1992-
C. Olivier Gómeza, J.A. Carballido Rodríguezb, J.J. Gómiz Leóna 1998 en 36,47 millones de euros2.
y L.A. San José Mansoa Sorprendentemente a pesar de estas cir-
Servicios de Urología. aHospital Clínico Universitario San Carlos. bHospital Universitario Clínica Puerta de Hierro.
cunstancias, y de la práctica médica y qui-
Madrid. rúrgica habitual establecida en el trata-
miento de la HPB en el siglo pasado, no
fue hasta 1991 cuando se publicó el pri-
mer estudio con base poblacional3.
Desde la primera consulta internacional
Definición fermedad, también puede producirse por
de la OMS sobre HPB en 19914 en la que
otras causas que impidan un adecuado va-
se recomendó la realización de estudios
La hiperplasia prostática benigna (HPB) es ciamiento vesical, ya sea por obstrucción
epidemiológicos hasta la actualidad se han
una entidad histopatológica específica ca- mecánica o por disminución de la poten-
efectuado diferentes estudios sobre la pre-
racterizada por hiperplasia de células epi- cia contráctil del detrusor. Además hay
valencia de HPB pero, lamentablemente,
teliales y estromales. La HPB puede pro- que considerar que en las edades en las
no en todos ellos se utilizó la definición
vocar el aumento del tamaño de la que aparece la HPB pueden estar presen-
de la HPB propuesta por la OMS existien-
próstata (ATP) y una obstrucción (infrave- tes las alteraciones detrusorianas propias
do amplias diferencias entre los mismos,
sical) prostática benigna (OPB) demostra- del envejecimiento.
lo cual ha condicionado el poder estable-
da urodinámicamente y además ser la con- Por todas esta razones la Organización
cer, de manera precisa, la prevalencia de
secuencia de los síntomas que se incluyen Mundial de la Salud (OMS) recomendó que
la enfermedad.
dentro del cuadro clínico conocido de an- la definición de HBP se realizara basán-
taño como “prostatismo”. Recientemente, dose en estos tres criterios: tamaño, obs-
algunos autores han sugerido la utilización trucción y síntomas (HPB = ATP + BOO
del término ATP en lugar de HPB, ya que + LUTS)1 (fig.1).
Prevalencia de hiperplasia
no todas las próstatas grandes son verda- prostática benigna en estudios
deramente benignas sino que, en ocasio- de autopsia
nes, se puede enmascarar un cáncer pros- Epidemiología de la Los primeros estudios histológicos con ca-
tático simultáneo. hiperplasia prostática rácter epidemiológico de la HPB distribui-
Aunque, conceptualmente, el ATP se rela-
ciona con los hallazgos histológicos (HPB)
benigna dos por edades fueron realizados por Berry
et al5 en 1984 en población americana so-
de la enfermedad prostática, en la prácti-
La HPB es el tumor benigno más frecuente bre 1.075 autopsias en 5 series (tabla 1) y
ca clínica es habitual la existencia de prós-
en el varón mayor de 50 años, represen- por Gu et al6 en 1994 en población china.
tatas muy aumentadas de tamaño sin evi-
tando la segunda causa de ingreso para Posteriormente los hallazgos fueron con-
dencia de obstrucción urinaria e incluso
intervenciones quirúrgicas y la primera firmados por otros investigadores en dife-
sin síntomas y, por el contrario, próstatas
causa de consulta ambulatoria en servicios rentes regiones geográficas, demostrando
de pequeño tamaño con síntomas y/u obs-
de Urología de hospitales regionales. En en todos ellos el incremento de la preva-
trucción.
Los síntomas que configuran el síndrome
clínico de “prostatismo” tampoco son es-
pecíficos de la HPB, pudiendo ser conse-
cuencia de otras patologías urológicas o no
urológicas en ausencia de ATP y OPB; ade-
más estos síntomas también los pueden
padecer las mujeres. Estas circunstancias
abogaron para cambiar el término “prosta- Síntomas urinarios Obstrucción flujo
tismo” por otro mas genérico como es el de
síntomas del tramo urinario inferior LUTS
HBP
(del inglés, Lower Urinary Tract Symptoms),
para definir con más certeza el problema y
evitar así sacar conclusiones prematuras en
cuanto a la etiología de los síntomas.
La obstrucción al vaciamiento vesical BOO Crecimiento prostático
(del inglés, Bladder Outflow Obstruction),
que es la consecuencia última y motivo de
las complicaciones mas graves de esta en-

Medicine 2003; 8(113):6033-6045 Fig. 1. Definición de hiperplasia prostática benigna (HPB). Modificada de Hald T1.

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ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

TABLA 1 base poblacional, número y diseño, se ha y se correlacionan con la existencia de


Relación del tamaño prostático con la edad realizado en nuestro país en Andalucía por HPB histológica y la edad. Aunque la aso-
Edad Histología normal (g) HPB (g) Chicharro et al8. ciación entre volumen prostático y sinto-
41-50 20,5 ± 5,7 28,8 ± 5,6
matología está presente en la mayoría de
estudios, la correlación lineal es débil.
51-60 19,8 ± 4,3 27,3 ± 8,2
Estudios poblacionales en
61-70 20,6 ± 7,4 34,9 ± 18,8
hiperplasia prostática benigna Flujometría en los estudios de población
71->80 18,3 ± 5,5 40,5 ± 30,3
Berry SJ, Coffey OS, Walsh PC, Ewing LL. The development ot hu- Prevalencia de los síntomas El flujo urinario depende de la presión pro-
man benign prostatic hyperplasia with age. J Urol 1984;132:474-8.
en los estudios de población porcionada a la orina por el detrusor y de
HPB: hiperplasia prostática benigna.
la resistencia de salida por la uretra. El ín-
El estudio andaluz estableció la prevalencia dice de flujo urinario máximo (Qmax) es
de los síntomas, medidos por la escala IPSS la medida aislada más idónea para esta-
lencia de la HPB con la edad. Estos estu- (de International Prostatic Score Symptoms; blecer la obstrucción del tracto urinario in-
dios han sido también corroborados en al- para mayor información acudir al aparta- ferior. En la mayoría de los estudios se ob-
gunas series poblacionales que analizaron do de diagnóstico) en el 75% para el pros- serva una disminución progresiva del flujo
el tamaño prostático por ecografía trans- tatismo leve (IPSS < 7), el 21% para el máximo con la edad. En el estudio de Chi-
rectal, así Girman et al7 observaron que el prostatismo moderado (IPSS entre 8 y 19 charro et al8 se observó que más de la mi-
volumen prostático medio entre los 40-49 puntos) y en el 4% para la clínica intensa tad de los varones mayores de 50 años
años era de 23,5 cc y de 35,4 cc entre 70 (> 20 puntos); es decir, un 25% en total tienen flujos máximos por debajo del um-
y 79 años de edad, estimando estos in- para las puntuaciones moderadas y altas. bral de 15 ml/s lo cual presupone cierto
vestigadores un ATP de 6 cc por década. Si se compara con otros estudios que ana- grado de obstrucción. En todos los estu-
lizan la sintomatología (tabla 3 ) se puede dios la correlación existente entre flujo má-
observar que en todos ellos la proporción ximo y sintomatología o flujo máximo y
Prevalencia de hiperplasia de síntomas moderados y marcados se in- volumen prostático es muy débil. Por
prostática benigna en crementa con la edad aunque con dife- tanto parece evidente que el volumen
estudios epidemiológicos rencias notables. Por ejemplo, si se anali- prostático sólo contribuye parcialmente en
za el porcentaje de síntomas moderados o los complejos mecanismos que incremen-
Los estudios epidemiológicos, longitudi- graves en el período de edad comprendi- tan la resistencia uretral en la HPB y se-
nales o transversales, basados en amplias do ente los 60 y 69 años en diferentes po- gún algunas estimaciones no sobrepasaría
muestras poblacionales son indudable- blaciones se puede observar que en Fran- el 15%13.
mente el mejor camino para conocer la cia es del 14%9; en Escocia del 22%3; en
prevalencia de la HPB. Lamentablemente España, dependiendo de la región del 27%
Calidad de vida en los estudios
entre los estudios de cohortes poblacio- en Andalucía8 y del 30% en Madrid10; en
de población
nales realizados en la HPB existen va- Minnesota del 40%7 y en Japón del 52%11
riaciones numéricas, metodológicas y (tabla 4). En los estudios que utilizan el cuestiona-
conceptuales que hacen imposible su com- rio IPSS para establecer la escala de cali-
paración. La mayoría de los mismos sólo dad de vida en los pacientes con LUTS pa-
Tamaño prostático en los estudios
atiende a los síntomas, despreciando los rece manifiesto, en su mayoría, que existe
de población
conceptos de obstrucción y volumen (ta- una correlación entre la puntuación de los
bla 2). Afortunadamente uno de los estu- Los volúmenes prostáticos medios en es- mismos y el grado de deterioro de la ca-
dios epidemiológicos más importante, por tas series varían entre 26,6 g y 32,3g7,8,11,12 lidad de vida. No obstante, en una misma

TABLA 2
Diferencias metodológicas en los estudios poblacionales epidemiológicos de la hiperplasia prostática benigna

Base poblacional (Bp) Cuestionario


Estudios Referencias Edad (años) Flujometría Ecografía
Muestra (M) síntomas

Escocés (Reino Unido) Garraway WM et al. Lancet 1991 > 40 Bp: 5.500 Sí Sí Sólo al 23,9%
Condado de Olmsted, Minnesota (EEUU) Chute CG et al. J Urol 1993 40 - 79 M: 2.115 IPSS relacionado Sí Sólo a 475
Francés Sagnier PP et al. J Uro11994 50 - 79 M: 2.011 IPSS Boyarisky No No
Japonés Tsukamoto T. J Urol 1995 40 - 79 M: 682 IPSS Sí No
Comunidad de Madrid (España) Hunter DJW et al. J Urol 1996 > 50 M: 2.002 IPSS modificado No No
Singapur Tan HY et al. J Urol 1997 > 40 M: 216 IPPS No No
Andaluz (España) Chicharro JA et al J Urol 1998 > 40 M: 1.106 IPSS Boyarisky Sí Sí
Noruego Overland GB et al Eur Urol 2001 55 - 70 M: 611 IPPS Sí Sí
Michigan (EEUU) Wey JT et al. J Urol 2001 40 - 79 M: 364 AUA modificado Sí Sí
IPSS: International Prostatic Score Symptoms; AUA: American Urological Association.

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HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA

TABLA 3 clasificar a los pacientes en grupos de ries-


Prevalencia de los síntomas del tracto urinario inferior en la hiperplasia prostática benigna según go para la prevención de las posibles com-
diferentes estudios (en porcentajes)
plicaciones de la HPB. En 1997 Barry et
40-49 años 50-59 años 60-69 años + 70 años al comunicaron los resultados del segui-
IPSS L M S L M S L M S L M S miento por un período de 4 años de un
estudio observacional de LUTS relaciona-
Andaluz 89,39 8,74 1,87 78,99 16,65 4,36 71,52 24,68 3,8 55,01 37,38 7,61
dos con HPB (mediante un cuestionario de
Olmsted 74 25 1 68 30 2 60 37 3 55 42 3
síntomas), objetivando que la cirugía fue
Francia NE NE NE 92 7 1 86 13 1 73 25 2 necesaria en el 10% con síntomas leves,
Madrid NE NE NE 81,1 16,4 2,5 69,4 25,8 4,8 59,8 29,1 11,1 el 24% con síntomas moderados y el 66%
Singapur 94 6 O 91 8 1 82 17 1 72 21 6 con síntomas intensos15.
Japonés 53 45 2 56 36 8 48 45 7 37 57 6
En la actualidad se están realizando dife-
rentes estudios de seguimiento con la fi-
L: leve; M: moderado; S: severo; NE: no estimado; IPSS: International Prostatic Score Symptoms.
nalidad de establecer aquellos grupos de
riesgo.
escala sintomática, los individuos más jó- años5,7. Pero lo realmente interesante es
venes muestran una peor tolerancia a los saber cuándo y cómo la HPB histológica
mismos. Por ejemplo LUTS moderados se transforma en HPB sintomática y cuál
Anatomía de la próstata
(IPSS entre 8 y 19) se perciben como mala será su evolución una vez que los sínto-
calidad de vida para los sujetos más jóve- mas han comenzado. Lamentablemente la Estructura de la próstata
nes, mientras que los sujetos mayores los historia natural de la HPB clínica, a pesar
La descripción clásica de la próstata se ha
puntúan en el rango de buena calidad de de su alta prevalencia, está por establecer.
relacionado con la morfología de las pie-
vida8. En la mayoría de las ocasiones el pacien-
zas quirúrgicas y con su apariencia en-
Aunque al analizar los resultados hasta te acude a la consulta por la presencia de
doscópica. Así, la estructura de la prósta-
ahora publicados no se puede llegar a una LUTS, pero como ya se ha mencionado la
ta quedó concebida en lóbulos prostáticos,
conclusión consistente que permita esta- hiperplasia tisular no siempre da síntomas
nomenclatura que se difundió amplia-
blecer los parámetros objetivos fiables que o éstos pueden no ser debidos a la obs-
mente y que hoy en día se sigue utilizan-
nos permitan estandarizar la definición de trucción. Curiosamente los escasos datos
do, si bien funcionalmente la anatomía
HPB y conocer su prevalencia, la defini- disponibles a este respecto (recopilados de
prostática no se corresponde.
ción más extendida actualmente establece diferentes estudios) parecen demostrar
un tamaño prostático > 30 cc, un IPSS mo- que aunque los síntomas sufren altibajos
derado o alto (> 7) y un flujo máximo < las complicaciones graves de la HPB sin-
15 ml/sg. En España, y en función de es- tomática, como son la retención urinaria,
Anatomía funcional
tos parámetros, la prevalencia total de HPB la insuficiencia renal obstructiva o la sep- de la próstata
sería del 12%, y oscilaría entre el 0,75% sis, son menores de lo que cabría esperar.
La próstata es un órgano heterogéneo en
entre los 40-49 años y el 30% por enci- Lamentablemente, en el momento actual,
el que podemos diferenciar dos compar-
ma de los 70. no se puede predecir la evolución de los
timentos diferentes: el glandular, consti-
síntomas iniciales de la HPB y cómo afec-
tuido por 20-40 glándulas y que com-
tarán a la calidad de vida, lo cual impide
prende el 33% del órgano y el no
Historia natural glandular que completa el 66% restante.
La historia natural de la HPB histológica Durante el desarrollo prostático el seno
TABLA 4
está bien establecida. Desde la pubertad Prevalencia de los síntomas del tracto urinario urogenital, procedente del endodermo em-
hasta la edad de 30 años la próstata cre- inferior relacionados con la hipereplasia brionario, se diferencia bajo la influencia
ce a un ritmo de 1,6 g al año, con lo que prostática benigna de la dihidrotestosterona (DHT) en las
su volumen se duplica cada 3 años. Du- zonas periférica, transicional (ZT) y fibro-
Cuestionarios: IPSS, Boyarisky, AUA
rante este período, la relación estroma/epi- Estudios muscular anterior. A su vez parte del con-
telio es de 2:1. A partir de los 30 años de Leve Moderada/alta ducto de Wolff, procedente del mesoder-
edad el crecimiento del tejido prostático España mo, se introduce entre las zonas periférica
sano desciende a 0,4 g al año indefinida- Andalucía8 75% 25% y transicional y bajo la influencia de la tes-
mente. Se estima que el peso medio de Madrid10 70% 30%
tosterona se diferencia en la zona central
una próstata adulta a partir de la tercera 9
de la próstata. Basándose en estos estu-
Francia 86% 14%
década de la vida y con histología normal dios en 1981 McNeal estableció la des-
Noruega 71% 28%
es de sólo 20 ± 6 g14. Cuando se desa- cripción anatómica funcional zonal actual
rrolla HPB la tasa de crecimiento aumen- EE.UU. (fig. 2). Según ésta, la próstata no glan-
ta: desde los 31 a los 50 años el volumen Michigan7 60% 40% dular estaría constituida por los sistemas
del tejido hiperplásico se duplica cada 4,5 Minnesota12 66% 33% esfinterianos y la zona fibromuscular an-
años; desde los 55 a los 70 años cada 10 Comentarios en el texto. IPPS: International Prostatic Score Symptoms;
terior y la próstata glandular por la zona
años, y a partir de los 70 años cada 100 AUA: American Urological Association. central (cono de base vesical y vértice en

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ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

diferentes enzimas como el PSA y la fos-


fatasa ácida (FA) que acumulan en los grá-
nulos citoplasmáticos y excretan al líqui-
do seminal18,19.

Células proliferantes o amplificadora


transitoria (amplifying/transiently
proliferating cell)
Descritas recientemente, se localizan en-
tre las basales y las secretoras y se ca-
racterizan fenotípicamente por presentar
un patrón de citoqueratinas intermedio
entre la célula basal y la secretora. Se pien-
sa que son las precursoras de las célu-
las secretoras y muestran actividad
andrógeno-independiente. Presentan mar-
cadores moleculares proliferativos y ca-
racterísticamente déficit de expresión de
Fig. 2. Anatomía funcional zonal de la próstata. McNeal JE16. ZT: zona transicional; ZP: zona periférica; ZC: zona central; ZA: zona
p27. Se localizan en mayor proporción
anterior. en la ZT20.

Células neuroendocrinas
uretra) que representaría el 25% del com- Epitelio
ponente glandular; la zona de transición Las células neuroendocrinas (NE) se en-
(localizada alrededor de la uretra) que Células basales cuentran intercaladas entre las células ba-
comprendería únicamente el 5%-10% y sales y secretoras y se caracterizan por la
Las células basales se encuentran por de-
sobre la que se desarrolla la HPB y la zona producción de gran cantidad de hormonas
bajo de la membrana basal (constituida por
periférica, donde se localizaría la mayor polipeptídicas (serotonina, tirotrofina, cal-
colágeno tipos IV y V, glucosaminogluca-
concentración glandular, hasta 70%. En citonina y somatostatina entre otras). Cada
nos, polisacáridos complejos y glucolípi-
esta última zona se origina el 80% de los vez existen mayores evidencias que mues-
dos) y se caracterizan morfológicamente
cánceres de próstata y es la única parte tran a las células neuroendocrinas como
por tener un núcleo grande y escaso cito-
de la próstata a la que podemos acceder el puente de unión entre la actividad se-
plasma, fenotípicamente la expresan las ci-
en la exploración física mediante el tacto cretora/proliferativa de la próstata y la es-
toqueratinas 5 y 14 (filamentos interme-
rectal16,17. timulación neurovegetativa a través de los
dios de la citomatriz) y bioquímicamente
Según esta concepción zonal, la próstata receptores adrenérgicos y colinérgicos.
muestran una actividad ATPasa. Son célu-
tendría un origen embriológico doble, en- Existe un alto grado de evidencia de que
las que muestran molecularmente marca-
dodérmico y mesodérmico, bajo diferente los 4 tipos celulares están directamente
dores proliferativos (telomerasa, Ki 65) y
influencia hormonal: testosterona y DHT. relacionados y no son sino los diferentes
antiapoptoicos (bcl-2) y no expresan el re-
En las zonas derivadas del mesodermo estadios de diferenciación de una célula
ceptor androgénico ni sintetizan antígeno
(zona central de la próstata junto con las madre19,21.
prostático específico (PSA)18,19.
vesículas seminales, el conducto deferente
y el epidídimo) que se encuentran bajo la
influencia de la testosterona no se desa- Células secretoras Estroma
rrollarían las patologías hiperplásica y ne-
Las células secretoras, a diferencia de las El estroma está constituido por una ma-
oplásica, mientras que en las zonas perifé-
células basales, muestran un citoplasma triz extracelular estructural, una sustancia
rica y transicional, ambas procedentes del
amplio y estructura cilíndrica. Fenotípica- fundamental y las células estromales.
endodermo y por lo tanto bajo la influen-
mente expresan las citoqueratinas 8 y 18.
cia de la DHT, se desarrollan respectiva-
Son células que no muestran actividad mi-
mente el cáncer prostático y la HPB17. Células estromales
tótica y expresan la p27 (proteína cuyo pa-
pel es impedir que las células entren en El componente celular del estroma prostá-
la fase proliferativa del ciclo) y el recep- tico está constituido fundamentalmente por
Histología de la próstata tor androgénico (RA). Se disponen per- fibroblastos y células musculares lisas (ML).
Histológicamente las glándulas prostáticas pendicularmente a la membrana basal y Las células ML se agrupan en torno a las
adultas tienen aspecto racimoso y se or- se mantienen unidas entre sí por diferen- glándulas acinares y se concentran cerca
ganizan tridimensionalmente dentro del tes moléculas de adhesividad celular y a de la cápsula prostática participando en la
estroma prostático y están constituidas por la membrana basal por el sistema de in- expresión mecánica del contenido glandu-
una doble hilera celular compuesta por los tegrinas y laminina. Según indica su nom- lar. Aparte de los fibroblastos y las células
siguientes tipos celulares18: bre son células secretoras que sintetizan ML como en otros tejidos mesenquimato-

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HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA

sos existen células endoteliales, del siste- mente en los nódulos hiperplásicos mix- cionados en su desarrollo: la edad, la pre-
ma inmune, axones nerviosos, etc. tos de pequeño tamaño17,18. sencia de andrógenos y su ubicación en
la ZT.
Desde hace muchos años, diferentes hi-
Matriz tisular
Predisposición genética pótesis aceptan que una alteración del me-
La matriz tisular está constituida por los de la hiperplasia prostática tabolismo de los andrógenos o un dese-
colágenos intersticiales: tipo I y III; por los quilibrio entre los niveles circulantes de
glucosaminoglucanos: dermatán sulfato
benigna andrógenos y estrógenos serían los res-
(40%), heparina, condroitina (20%), y áci- ponsables del desarrollo de la HPB. Pero
Aunque no se ha establecido la importan-
do hialurónico (20%), y por una amplia aunque es cierto que los andrógenos son
cia de la asociación familiar y de la he-
red de túbulos que según su grosor se cla- necesarios para el desarrollo normal de la
rencia en el desarrollo de la HPB es muy
sifican en microtúbulos (20 nm), filamen- próstata y para que se produzca la HPB,
probable que exista un factor genético en
tos intermedios (l0 nm) y microfilamen- se duda del papel de los andrógenos en el
algunos casos, especialmente cuando la
tos (6 nm). origen de la misma basándose en tres evi-
HPB aparece en pacientes jóvenes23.
La matriz tisular, aparte de proporcionar dencias: su inicio focal (no difuso en toda
Entre las evidencias en las que se funda-
una estructura biológica de soporte para la glándula) en el área periuretral de la ZT,
menta esta afirmación, se encuentra la re-
la correcta organización de la histología su presencia a una edad en la que sólo
ciprocidad que existe entre gemelos a la
prostática y gracias a las interconexiones existe una disminución paulatina de los
hora de desarrollar HPB, la frecuente de-
de las estructuras de la matriz extracelu- andrógenos y el hecho de que aunque la
tección de alteraciones genómicas en la
lar con el citoesqueleto y la matriz nu- testosterona es necesaria para que la prós-
HPB y la posibilidad de inducir genética-
clear, forma parte importante del sistema tata crezca, el aumento de los niveles de
mente la HPB mediante la activación de los
de transmisión de señales entre el epite- andrógenos no induce un incremento del
genes int-2 e int-1, a través de la familia
lio y el estroma22. tejido prostático.
de factores de crecimiento fibroblástico
Desde los trabajos de Cunha et al27 cono-
(FGF), al menos en ratones transgénicos24,25.
cemos la importancia que tienen las inte-
Desde el punto de vista citogenético el ha-
Histología de la hiperplasia llazgo cromosómico más consistente en
racciones recíprocas entre el epitelio y el
prostática benigna estroma en el crecimiento prostático. El
pacientes con HBP es la pérdida del cro-
mesénquima induce diferenciación epite-
mosoma Y. En los estudios inmunohisto-
Al inicio del proceso de HPB se observa lial y a su vez el epitelio induce que el me-
químicos se localiza la pérdida del cro-
una proliferación difusa de pequeños nó- sénquima se diferencie a células muscu-
mosoma Y en los fibroblastos y no en
dulos en la ZT que progresivamente van lares lisas. Los mediadores de estas
células epiteliales, lo que corrobora la in-
incrementando de tamaño. La aparición acciones paracrinas reguladas por andró-
dependencia citogenética entre la HPB y
de estos nódulos ya se puede constatar en genos son los factores de crecimiento (FC)
el adenocarcinoma prostático26.
individuos de 31 a 40 años. Durante el de- (fig. 3). Durante la morfogénesis prostáti-
Se ha sugerido que la mayoría de los pa-
sarrollo de la HPB, tanto el componente ca los andrógenos inducen la proliferación
cientes que necesitan cirugía antes de
estromal como el epitelial van a experi- y la diferenciación del mesénquima uro-
cumplir 60 años son portadores del gen
mentar cambios. La relación entre el es- genital mediante la producción de dife-
de alto riesgo para padecer HPB. No obs-
troma y el epitelio que en una próstata rentes FC, la mayoría de los cuales actúan
tante, hasta hoy no se han caracterizado
adulta sin HPB, es de 11/5 en la HPB se para incrementar la expresión génica a ex-
los posibles genes implicados23.
transforma en 49/9. Estas evidencias su- cepción de la familia del factor de creci-
No obstante, el resto de factores epigené-
gieren que es en el estroma donde se ori- miento transformante β (TGFβ) que pro-
ticos, entre los que destacan los factores
gina la patología y que el epitelio glandu- duce inhibición del crecimiento28.
de exposición dietética, ambiental y su re-
lar se ve afectado secundariamente18. En la próstata adulta, tanto las células epi-
lación con mecanismos endocrinológicos
La lesión diagnóstica de la HPB se esta- teliales como las estromales contienen 5α-
y el control del crecimiento prostático, pa-
blece por la configuración en nódulos de reductasa y receptores androgénicos. En
recen tener, a partir de las evidencias de
la ZT. Estos nódulos pueden ser estroma- el epitelio, el complejo de transcripción
las que hoy disponemos y de los estudios
les puros o más frecuentemente mixtos DHT-RA actúa a nivel nuclear para indu-
epidemiológicos, un mayor peso en la gé-
(estromales y epiteliales). Las células se- cir la actividad glandular de la próstata y
nesis de la HPB.
cretoras de las glándulas se disponen en en el estroma, el DHT-RA induce la sínte-
múltiples capas pero con un bajo índice sis de los FC29. Los FC son proteínas co-
mitótico, lo que explica que el componente dificadas desde protooncogenes que ejer-
glandular es el que menos prolifera en la
Patogénesis de la cen su acción sobre receptores específicos,
HPB aun en fases más avanzadas de la en- hiperplasia prostática que pueden estar en la membrana, en el
fermedad en las que el componente glan- benigna citoplasma o en el núcleo. Su interacción
dular es más patente. Los nódulos estro- con el receptor induce a la célula a entrar
males están constituidos por fibroblastos, Aunque los avances en el esclarecimiento en el ciclo celular y la posibilidad de di-
ML y vasos de gruesas paredes hialinas de la patogenia de la HPB son notables, ferenciarse, dividirse o morir.
con ausencia de fibras elásticas. Las célu- en la actualidad únicamente conocemos La interacción entre estroma y epitelio es
las NE se encuentran más abundante- tres factores que están directamente rela- la responsable última del crecimiento nor-

33 6037
ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

Teoría del “despertar


embrionario”
Paracrina
Célula Autocrina La teoría del despertar embrionario se
epitelial FC FC
basa en dos evidencias indiscutibles sobre
FC
Citoplasma An
dró
la patogenia de la HPB como son: su de-
ge Intracrina sarrollo sobre la ZT (zona que contiene la
no
s
menor cantidad de componente glandu-
FC
lar) y en el hecho de que en la hiper-
hsp 90 A T plasia prostática, aun siendo mixta (epite-
Translación lio-estromal), es cuantitativamente más
importante el estroma. Por tanto, parece-
AR

DHT DHT 5α R (1,2) ría razonable pensar que en la patogéne-


sis de la HPB deberían estar implicados
Transcripción
en un principio los micronódulos de es-
AR

DHT
troma que se observan en las etapas ini-
Núcleo ciales de la enfermedad en la ZT para des-
ARNm
pués producirse la proliferación epitelial.
Pero además se ha observado que em-
briológicamente la ZT es la zona que se
desarrolla más tarde, que presenta una
Fig. 3. Interacción estroma/epitelio. DHT: dihidrotestosterona; FC: factores de crecimiento. mayor concentración de células NE y que
curiosamente, estas últimas se localizan
en mayores concentraciones en los nódu-
mal de la próstata, por lo que una altera- ceptores (tipos I y II) y 6 proteínas de unión los proliferativos iniciales. Si a todas estas
ción de dicha interacción parece ser la res- diferentes (IGFBP 1-6). Tanto las células es- evidencias añadimos el hecho de que el
ponsable del inicio de los micronódulos tromales como las epiteliales pueden ser FGF-2 (a diferencia que otros FC que es-
hiperplásicos en la HPB. estimuladas por los tres factores de creci- tán presentes en el desarrollo de la prós-
En la actualidad se conoce que algunos miento insulínicos al poseer el receptor tipo tata) parece que desempeña un papel cla-
miembros de las familias de factores de I, pero además las células estromales son ve en la formación de los micronódulos
crecimiento epidémico (EGF), insulínico capaces de sintetizar el IGF-II29. hiperplásicos, se podría pensar en un “des-
(IGF), o fibroblástico (TGF) modulan la ho- El TGFβ es el factor de crecimiento inhi- pertar embrionario” de la glándula adulta
meostasis prostática28. bitorio de la próstata más importante30. El como origen del desarrollo de la HPB, asu-
Dos miembros de la familia del factor de TGFβ puede actuar como inhibidor o esti- miendo, no obstante, que las células epi-
crecimiento epidérmico están implicados mulador, pero generalmente resulta inhi- teliales de la ZT mantienen su capacidad
en el crecimiento prostático: el EGFy el bitorio para las células epiteliales y esti- embriológica de respuesta a la estimula-
factor transformador alfa (FCTα). Ambos mulador para las células estromales, al ción del estroma27.
estimulan el crecimiento de las células epi- igual que para la angiogénesis y la for-
dérmicas. El TGF-α se expresa en prósta- mación de la matriz extracelular31.
tas prenatales y el EGF en próstata adul- En la próstata humana existe un equili-
Fisiopatología de la
ta. Pero ninguno de ellos tiene un papel brio entre factores: el FGF-7 estimula y el hiperplasia prostática
dominante en la génesis de la HPB29. TGF-β inhibe las células epiteliales, al igual benigna
De la familia del FGF se conoce que al me- que el FGF-2 estimula y el TGFβ inhibe las
nos dos de sus miembros: el FGF básico o células estromales. En la HPB el estímulo No existe una explicación clara que rela-
2 (FGF-2) y el KGF (factor de crecimiento de los FGF-2 y el KGF-7 dominan sobre el cione todos los signos y síntomas de HPB
queratinocítico o FGF-7) están directamen- del TGFβ, induciendo la proliferación epi- con el ATP. Existen diversos mecanismos
te implicados en la homeostasis del tejido telial/estromal y un incremento en la ac- por los que la HPB podría provocar obs-
prostático. El FGF-2 tiene acción intracrina tivación de los componentes de la matriz trucción y éstos se suelen clasificar en
y autocrina proliferativa sobre las células extracelular. Así pues los FC predominan- mecánicos y dinámicos. Es obvio que el
estromales y estimula la angiogénesis. Se temente activos durante la vida adulta pa- aumento del tamaño de la próstata puede
ha demostrado una mayor concentración recen no intervenir en el desarrollo de la disminuir el flujo urinario de forma me-
de FGF-2 en la ZT de la próstata. El FGF-7 HPB. cánica y que la hiperactividad de la mus-
actúa de forma paracrina sobre las células Aunque no se conoce con exactitud el de- culatura lisa prostática puede hacer lo pro-
del epitelio. En circunstancias fisiológicas, sencadenante de estos cambios, el hecho pio de forma dinámica, pero la obstrucción
la actividad del EGF y FGTα están presen- de haber identificado fibroblastos en fase urinaria se puede producir en ausencia de
tes durante la vida adulta, mientras que el de diferenciación en los micronódulos hi- próstata como lo demuestra la existencia
FGF-2 lo hace durante la vida fetal28,29. perplásicos abogaría en otorgar al FGF-2 de mujeres que sufren retención de orina
La familia de los IGF está compuesta por el un importante papel en el desarrollo de la en ausencia de otra patología distinta a
IGF-I, el IGF-II y la propia insulina, dos re- HPB. una infección del tracto urinario. Existe

6038 34
HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA

suficiente evidencia acumulada para su- vesical e incontinencia por rebosamiento. tersticial) presentan una presión intrave-
gerir la existencia de otros factores que Pero estos pasos evolutivos de la HPB pue- sical de llenado excesiva que podría ser la
podrían desempeñar un papel fundamen- den corresponder a entidades patológicas responsable del deterioro del tracto uri-
tal en el desarrollo de la obstrucción al flu- diferentes con sintomatología similar. De nario superior. En los casos de obstruc-
jo urinario en la HPB, como por ejemplo, hecho existen vejigas trabeculadas con ción con presión intravesical baja duran-
el infarto del tejido prostático, que ade- próstatas normales, pacientes con prós- te la fase de llenado, ésta sólo se eleva
más es un hallazgo frecuente en pacien- tatas normales que presentaban hipertro- durante la fase miccional, es decir, tan
tes con retención urinaria. También se fia del cuello vesical asociada a trabecu- sólo durante unos minutos al día. En los
sabe que la proporción estroma/epitelio es lación del detrusor, y es patente la alta casos de obstrucción con presión de lle-
menor en los pacientes con HPB sinto- incidencia de pacientes con HPB sin ure- nado elevada, la presión intravesical se en-
mática que no sufren retención que en los terohidronefrosis en comparación con la cuentra elevada durante la fase de mic-
pacientes que la padecen. Posiblemente el alta incidencia de pacientes con hiper- ción y durante la fase de llenado, es decir,
déficit de soporte vascular para suplir el trofia del cuello vesical con ureterohidro- durante las 24 horas del día. Este cons-
incremento glandular podría ser el res- nefrosis32,33. tante aumento de presión intravesical jun-
ponsable final del infarto. El edema e En la actualidad se acepta la existencia de to con la presencia de una vejiga hiper-
inflamación resultantes del infarto incre- dos patologías distintas. Por una parte, los trófica podría provocar una obstrucción
mentarían la presión intrauretral, lo que pacientes con HPB, en los que la obstruc- dinámica y mecánica a nivel del uréter in-
desencadenaría un arco reflejo sacro ción mecánica iría dilatando la pared ve- tramural que condicionaría la ureterohi-
que daría como resultado la retención uri- sical poco a poco y, por otro lado, los pa- dronefrosis bilateral33.
naria. cientes con hipertrofia del cuello vesical,
Los síntomas irritativos de inestabilidad en los que la falta de relajación del mis-
vesical son más molestos que los obs- mo cuando la vejiga se contrae provoca-
tructivos y frecuentemente representan el ría una obstrucción dinámica que resulta-
Manifestaciones clínicas
principal motivo de consulta. Aunque la ría en una vejiga trabeculada, similar a la de la hipertrofia prostática
inestabilidad vesical es manifiesta en mu- vejiga neurógena de la disinergia vesico- benigna: síntomas del
chos pacientes con HPB y tiende a mejo- esfinteriana. Además, la existencia simul- tracto urinario inferior
rar tras la resección transuretral de la prós- tánea de una obstrucción mecánica y una
tata (RTU) en la mayoría de los casos, no obstrucción dinámica explicaría los casos Los LUTS no son específicos del varón.
se debe olvidar que en ambos sexos el en- de HPB con vejiga trabeculada. Cualquier tipo de obstrucción permanen-
vejecimiento vesical incremente la inci- Hay evidencias que sugieren que la ure- te, mecánica o funcional, localizada dis-
dencia de síntomas irritativos, y por tan- terohidronefrosis se produce como con- talmente a la vejiga desarrollará una obs-
to la inestabilidad vesical en el varón no secuencia de la alteración en la propia trucción urinaria infravesical (tablas 5
tiene por qué ser siempre secundaria a la pared vesical. De hecho existen dos fenó- y 6). Además, no existe correlación entre
obstrucción. Asi pues en muchos casos, menos fisiopatológicos diferentes para ex- el tamaño de la próstata y la intensidad
HPB e inestabilidad son patologías sin- plicar la retención urinaria: enfermos en de los síntomas.
crónicas pero no necesariamente de etio- retención con presiones intravesicales ele- En cualquier caso los LUTS relacionados
logía relacionada. Posiblemente la mejo- vadas y enfermos en retención con pre- con la HPB son muy frecuentes. Chicha-
ría sintomática que se obtiene tras la RTU siones intravesicales bajas. A este respec- rro et al1, sobre 1.106 varones mayores
de la próstata podría estar justificada por to se ha objetivado que los pacientes en de 40 años, evidenciaron que hasta el 25%
la supresión de las aferencias nerviosas los que el aumento de la presión intrave- de los sujetos a estudio presentaba LUTS
prostáticas y no por la desobstrucción me- sical durante la fase de llenado es inferior moderados o intensos y que había un in-
cánica. Esta reflexión podría explicar la a 5 cmH2O no desarrollan hidronefrosis cremento en la prevalencia con la edad.
mejoría sintomática obtenida en algunos mientras que los pacientes con una dis- También, observaron que los sujetos jó-
pacientes tras la miocapsulotomía endos- minución de la acomodación vesical (no venes con síntomas moderados mostra-
cópica. sólo secundaria a HPB, sino también a ve- ban peor calidad de vida que los indivi-
Clásicamente se aceptaba que la reper- jiga neurógena, tuberculosis o cistitis in- duos de mayor edad.
cusión que sobre la vejiga y sobre el apa-
rato urinario superior condicionaba la obs- TABLA 5
trucción de la HPB se desarrollaba en tres Clasificación de los síntomas del tracto urinario inferior
fases consecutivas. En la primera fase el Síntomas de vaciado (obstructivos) Síntomas de llenado (irritativos)
incremento del tamaño de la próstata pro-
Chorro miccional fino Polaquiuria
ducía la obstrucción en la micción. En la
segunda fase, la vejiga compensaba la Retardo para iniciar micción Nicturia

obstrucción mediante la hipertrofia del de- Realización de prensa abdominal Urgencia


trusor que se manifestaba por: la tra- Chorro intermitente Incontinencia
beculación, los divertículos vesicales y la Vaciado vesical incompleto Dolor hipogástrico
ureterohidronefrosis bilateral. En la últi- Goteo terminal
ma fase, se produciría la descompensa-
Chorro vacilante
ción vesical con atonía, sobredistensión

35 6039
ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

Aunque tradicionalmente los síntomas TABLA 6


del tracto urinario inferior se han divi- Etiología de los síntomas del tracto urinario inferior
dido en obstructivos e irritativos, en la Funcionales Obstrucción anatómica
actualidad se opina que sería más co- Hiperplasia benigna de próstata Hiperplasia benigna de próstata
rrecto denominarlos como síntomas de
Disinergia de músculo liso o estriado Cáncer de próstata
vaciado y de llenado, respectivamente
(tabla 5). Prostatitis crónica Estenosis de uretra

Los síntomas de llenado (frecuencia, ur- Prostatodinia Patología del cuello vesical
gencia y nicturia) suelen ser más moles- Infección urinaria Válvulas de uretra posterior
tos y frecuentes que los de vaciado. Sin Tumor vesical Tumor vesical
embargo hay pacientes que comienzan Litiasis vesical, etc. Litiasis uretral, etc.
con retención aguda de orina (RAO) sin
síntomas previos aparentes e incluso pa-
cientes que presentan insuficiencia renal
crónica en el momento del diagnóstico. Síntomas de llenado (irritativos) años 41.276 varones, todos ellos profe-
Además en algunos pacientes la HPB se sionales de la salud entre 45 y 83 años de
asocia a infecciones recurrentes, sangra- La evaluación urodinámica de los pacien- edad, mostró que la incidencia de RAO
do uretral y litiasis vesica134,35. tes con HPB ha demostrado la disminu- aumentaba con la edad y la intensidad de
ción de distensibilidad vesical y la pre- los síntomas (incidencia ajustada a la edad:
sencia de contracciones involuntarias del 13,7/1.000 personas-años). Los mejores
Síntomas de vaciado detrusor en casi el 70% de los casos; lo síntomas predictores independientes de
(obstructivos) que puede explicar la presencia de pola- RAO fueron la sensación de micción in-
quiuria, urgencia e incontinencia35,37. completa, la necesidad de orinar nueva-
Posiblemente uno de los síntomas más El levantarse a orinar más de una vez por mente antes de las dos horas de la mic-
característicos de la obstrucción sea la noche es considerado como anormal y se ción previa y el chorro fino39.
disminución del calibre miccional (cho- denomina nicturia. Se denomina pola-
rro fino). En general el chorro fino se quiuria el orinar más de 8 veces durante
acompaña de retardo para iniciar la mic- las horas del día y con un intervalo de me- Diagnóstico de la
ción, suele ser más intenso durante la pri- nos de 3 horas entre las micciones. La po- hiperplasia prostática
mera micción de la mañana y varía du- laquiuria y nicturia son los síntomas que
rante el resto del día. El resto de los molestan más a los pacientes con HPB.
benigna
síntomas de vaciado vesical pueden ma- Otras patologías que pueden producir es- Historia clínica
nifestarse también en patologías no obs- tos síntomas son: diabetes, insuficiencia
tructivas 34,35. La necesidad de realizar cardíaca, cistitis, vejiga neurógena y, ade- La historia clínica y la exploración física
prensa abdominal durante la micción más, la ingesta de grandes cantidades de clínica son los dos procedimientos que han
para vencer la resistencia uretral aumen- agua. demostrado una mayor rentabilidad en la
tada se observa en pacientes con vejiga evaluación de los LUTS. Evidentemente
neurógena. El goteo terminal puede ser una correcta anamnesis es prioritaria en
ocasionado tanto por la orina retenida en Evolución de los síntomas el diagnóstico de la HPB. Aparte de los as-
la uretra bulbar como por la imposibilidad pectos generales de la salud, el enfoque
del detrusor para mantener un flujo mic- Diferentes estudios han puesto de mani- debe estar dirigido hacia:
cional continuo, de hecho el goteo termi- fiesto que, aunque los síntomas del trac- 1. Características y duración de los LUTS
nal también se observa en ancianos sin to urinario inferior presentaban oscilacio- de llenado y vaciado.
HPB. Muchos pacientes presentan necesi- nes importantes con el tiempo, los 2. Intervenciones quirúrgicas previas (en
dad de orinar poco tiempo después de ha- pacientes diagnosticados de HPB no tra- especial las que puedan afectar al apara-
ber finalizado la micción o presentan mo- tados no presentaban un deterioro signi- to genitourinario).
lestias hipogástricas tras la micción, pues ficativo en el grado de obstrucción infra- 3. Función sexual.
bien, la sensación de micción incompleta vesical. El empeoramiento de los síntomas 4. Medicación que el paciente toma ac-
tampoco se ha podido correlacionar con la miccionales ocurre casi siempre a expen- tualmente y que puede afectar potencial-
presencia de orina residual postmiccional. sas de los síntomas de llenado debido a mente a la función vesical.
Aunque la RAO es, generalmente, el re- un incremento en la incidencia de inesta- 5. Historia clínica sugerente de enferme-
sultado final en la progresión de los sín- bilidad del detrusor37. dad neurológica, diabetes mellitus mal
tomas miccionales obstructivos en los Los estudios efectuados con la finasterida controlada o neuropatía diabética y ante-
pacientes con HPB, puede ser desencade- (inhibidor de la 5α-reductasa) en pacien- cedentes de traumatismo o cirugía pel-
nada también por la ingestión de alcohol, tes seguidos durante 4 años mostraron que viana
la sedestación prolongada o la demora ex- solamente el 7% de los pacientes tratados 6. Antecedentes de enfermedades de
cesiva en orinar. La RAO es la indicación con placebo presentaban RAO38. El Health transmisión sexual.
de cirugía en el 25%-30% de los pacien- Professionals Follow up Study, realizado en 7. Idoneidad del paciente para una posi-
tes36. EE.UU. y en el que se siguieron durante 3 ble intervención quirúrgica.

6040 36
HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA

Existen variaciones sustanciales en la uti- pio paciente sin intervención del médico. TABLA 8
lidad y prioridad del resto de los méto- Debe quedar claro que estos cuestiona- Recomendaciones del Comité Científico
Internacional sobre la evaluación y tratamiento
dos diagnósticos necesarios recomenda- rios no sirven para diferenciar a los pa-
de los síntomas del tracto urinario inferior
dos por las diferentes asociaciones cientes con obstrucción prostática benig- sugerentes de hiperplasia prostática benigna
urológicas europeas, americanas y la pro- na de los pacientes con otras patologías
Pruebas muy recomendadas durante la evaluación
pia OMS tanto para caracterizar la HPB que afectan al tramo urinario inferior. Las inicial
como para seguimiento, como se puede 7 preguntas del IPSS hacen referencia a
Historia clínica
observar en la revisión efectuada por Ro- los distintos síntomas de obstrucción del
Cuantificación de los síntomas
ehrborn et al40 (tabla 7). A continuación tracto urinario inferior: sensación de re-
vamos a reseñar brevemente todas aque- siduo postmiccional, polaquiuria, inte- Puntuación internacional de síntomas prostáticos
(I-PSS) y valoración de la calidad de vida (QOL)
llas pruebas diagnósticas que pueden ser rrupción de la micción, chorro débil, di-
Exploración física y tacto rectal (TR)
utilizadas en la evaluación de los LUTS suria y nicturia.
Análisis de orina (tira reactiva)
sugestivos de HPB haciendo referencia a Se asignan puntuaciones del 0 al 5 para
las recomendaciones del Comité Inter- cada una de las respuestas. Cada pregun- Pruebas recomendadas

nacional de Expertos de la OMS para la ta permite al paciente escoger 1 entre 6 Valoración de la función renal
evaluación de los LUTS sugerentes de posibles respuestas que indican una in- Antígeno prostático específico (PSA)
HPB41,42 (tabla 8). tensidad creciente de cada síntoma. La Registro del índice de flujo
puntuación total se establece entre 0 (asin- Residuo postmiccional
tomático) a 35 (con muchos síntomas). Los
Diario miccional (gráfica frecuencia-volumen)
Cuantificación de los síntomas pacientes pueden clasificarse como sigue:
Pruebas opcionales
0-7 puntos, paciente levemente sintomá-
Estudios de presión-flujo
Existe unanimidad en la consideración de tico; 8-19 puntos, paciente moderada-
los cuestionarios de síntomas como prue- mente sintomático, 20-35 puntos, pacien- Estudios de imagen de la próstata mediante
ecografía transabdominal o transrectal (ETR)
bas altamente recomendadas en la eva- te muy sintomático.
Estudios de imagen de la vía urinaria superior
luación de la HPB. La evidencia de la sub- La valoración de la calidad de vida (CV) se mediante ecografía o urografía intravenosa
jetividad de los LUTS y la necesidad de usa junto con el IPSS, preguntando al pa- (UIV)
documentar correctamente el estado ba- ciente cómo se sentiría si tuviera que to- Endoscopia del tramo urinario inferior
sal del enfermo así como su monitoriza- lerar el nivel actual de síntomas durante Pruebas no recomendadas para la evaluación
ción a lo largo del tiempo (con o sin el resto de su vida. Las respuestas a esta habitual de los síntomas del tracto urinario
inferior
tratamiento) abogan por establecer reali- pregunta van desde “encantado” (0 pun-
dades objetivas. El cuestionario de sínto- tos) hasta “terrible” (6 puntos). (Esta pun- Uretografía retrógrada

mas más utilizado en España es el Inter- tuación es independiente y no debe su- Medición del perfil de presiones uretrales (PPU)
national Prostatic Score Symptoms-Quality marse al total del IPSS). Este cuestionario Cistouretrografía miccional (CUGM)
of Life (IPSS-QL) (Escala Internacional de pretende objetivar los síntomas que refie- Electromiografía (EMG) del esfínter urinario
Síntomas Prostáticos [I-PSS] y calidad re el enfermo, el estado sintomático del externo

de vida) (tabla 9). El cuestionario IPSS se paciente puede expresarse de la siguien- Cistometría (CMG) de llenado
diseñó para ser cumplimentado por el pro- te forma: IPSS = 0-35, CV = 0-6. El I-PSS Tomada de 4th International Consultation on HPB. 199741.

TABLA 7
Recomendaciones para la evaluación de la hiperplasia prostática benigna por diferentes asociaciones urológicas

Historia TR Orina Creatinina PSA Cuestionario Flujometría Exploración UCG Uretrocistoscopia RPM EPF
clínica elemental sérica de síntomas
AHCPR (EE.UU.) R R R R OP R OP NR NR OP OP OP
Australia R R R OP NR R OP OP NC OP OP OP
Brasil O O O O O R R R NC OP R OP
Dinamarca O O O O OP O R OP NC OP R OP
EAU (Europa) NC R NC R R R R OP NC OP R OP
Finlandia R R R R R R R R NC OP R OP
Francia R R R R NR R OP OP NC OP NC OP
Alemania R R R R R R R O OP OP OP OP
Islandia R R R R R R OP OP OP OP OP OP
IC BPH (OMS) R R R NC R R OP OP NC OP OP OP
Lituania O O O NC R O R R OP OP NC OP
Portugal O R O O R R R R OP OP NC OP
Suecia R R R R R R R OP OP OP R OP
TC: tacto rectal; PSA: antígeno prostático específico; UCG: uretrocistografía; EPF: estudios de presión flujo; RPM: medición del residuo urinario; R: recomendado; OP: opcional; NR: no recomendado; NC: no comentado;
O: obligatorio. Modificada de Roehrborn CG et al40.

37 6041
ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

TABLA 9
Puntuación Internacional de Síntomas Prostáticos (I-PSS)

Ninguna Menos de 1 Menos de Alrededor de Mas de la Casi


vez cada la mitad de la mitad de mitad de siempre
5 veces las veces las veces las veces

Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha tenido 0 1 2 3 4 5


la sensación de no vaciar su vejiga completamente?
Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha tenido 0 1 2 3 4 5
que orinar antes de las 2 horas de haber orinado
por última vez?
Durante el pasado mes ¿cuántas veces le ha sucedido 0 1 2 3 4 5
que se le interrumpa o cortara el chorro
mientras orinaba?
Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha tenido 0 1 2 3 4 5
dificultad para aguantarse las ganas de orinar?
Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha 0 1 2 3 4 5
observado que el chorro de orina era débil?
Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha tenido 0 1 2 3 4 5
que “esforzarse” o “apretar” para empezar a orinar?
Ninguna 1 vez 2 veces 3 veces 4 veces 5 veces
o más

Durante el pasado mes ¿cuántas veces ha tenido que 0 1 2 3 4 5


orinar cada noche, desde que se acuesta hasta
que se levanta por la mañana?
Calidad de vida Encantado Aceptable Bastante Igual de Bastante Desgraciado Terrible
satisfecho satisfecho que insatisfecho
insatisfecho

Si tuviera que vivir toda la vida con los problemas 0 1 2 3 4 5 6


urinarios que sufre actualmente, ¿cómo se sentiría?

precisa que el enfermo comprenda sin pro- ca tiene una causa urológica. Suele ser la Valoración del tamaño prostático
blemas todas las cuestiones, si existe un consecuencia de la poliuria nocturna (pro-
bajo nivel de formación puede, en algu- ducción de más del 30% de la orina de Para la evaluación inicial de la HPB se con-
nos casos, dificultar la correcta compren- todo el día durante las horas del sueño sidera al tacto rectal como una prueba re-
sión e invalidar los resultados obtenidos41. asumiendo que sean 8 horas) y de la na- comendable por la totalidad de las aso-
Al igual que sucede con la historia clínica, triuresis más que por cambios vesicales43. ciaciones urológicas.
la exploración nos aporta información útil Las causas fundamentales de la poliuria
para el diagnóstico diferencial con otras nocturna son una ingesta líquida elevada Tacto rectal. La accesibilidad de la prós-
patologías distintas de la HPB. durante las últimas horas de la tarde-no- tata mediante el tacto rectal permite la va-
che y/o un régimen alimenticio rico en ve- loración inicial del tamaño prostático en
getales y frutas durante la cena y la insu- los pacientes estudiados por LUTS, ade-
Diario de micciones ficiencia cardíaca en sus diferentes grados. más también es posible detectar altera-
(tabla frecuencia-volumen) Las alteraciones de la regulación de la hor- ciones en su superficie y consistencia que
mona antidiurética (ADH) y su efecto so- nos hagan sospechar un cáncer de prós-
Los diarios de micción son especialmente bre el ritmo circadiano reflejan cambios tata, ya que la mayoría de los cánceres de
útiles cuando la nicturia es el síntoma do- fisiológicos relacionados con el envejeci- próstata asientan en la zona periférica de
minante. El diario de micciones comple- miento. la glándula.
tado durante varios períodos de 24 horas Un diario urinario que mida los volúme- No obstante el tacto rectal sólo nos da in-
ayudará a identificar a los pacientes con nes miccionales y la hora de la micción formación de la superficie posterior de la
poliuria nocturna o ingestión excesiva de durante un período de al menos 3 días glándula por lo cual la estimación del vo-
líquidos, que son frecuentes entre los va- aporta excelentes evidencias objetivas lumen prostático mediante este procedi-
rones mayores. sobre los hábitos miccionales de los pa- miento no es exacta y las variaciones son
Como ya se ha mencionado los LUTS son cientes. muy importantes dependiendo del explo-
la expresión de diferentes patologías que rador. Este manifiesto margen de error
pueden tener su origen en el tracto uri- nos obligará a realizar una ecografía si
nario o fuera del mismo, por lo cual la dis- Exploración física existe la necesidad de realizar un trata-
criminación de los pacientes que los pa- miento quirúrgico para tomar la decisión
decen, sobre todo los de mayor edad, debe La exploración orientada se debe iniciar del tipo de técnica quirúrgica a utilizar.
ser muy rigurosa. La nicturia no tiene re- con la palpación hipogástrica para des- Posiblemente la evaluación de la próstata
lación con las horas de sueño y casi nun- cartar una sobredistensión vesical. mediante ecografía transrectal sea la

6042 38
HIPERTROFIA PROSTÁTICA BENIGNA

evaluación por imágenes más exacta en la posibles complicaciones de una biopsia En pacientes con PSA elevado, la ecogra-
determinación del volumen prostático. dirigida mediante ecografía transrectal. Se fía transrectal es el método de elección
La palpación prostática especialmente do- puede disminuir el número de falsos po- para evaluar la próstata y guiar una aguja
lorosa y con reflejo miccional presente su- sitivos analizando la relación PSA-volu- de biopsia a la zona sospechosa, o para
giere un proceso inflamatorio prostático. men prostático, PSA-edad, velocidad de ayudar a planificar una biopsia-mapeo
La evaluación del tono anal, la función sen- aumento del PSA (PSA-v) y por la cuanti- (biopsias sextantes) de la próstata en ca-
sitiva y motora de las extremidades infe- ficación de las formas moleculares del PSA sos seleccionados.
riores y el reflejo bulbocavernoso reflejan (PSA libre, PSA-ACT). En la actualidad el
el estado del plexo pélvico. cociente PSA total/PSA libre es el de ma-
Ecografía del tramo urinario superior
yor rendimiento diagnóstico. Dada la in-
certidumbre que rodea la detección del Se recomienda el estudio por imagen del
Exploraciones analíticas cáncer de próstata, los médicos deben tramo urinario superior en pacientes que
utilizar el criterio clínico para decidir qué se presentan con uno o más de los si-
Análisis de orina
pacientes deberán someterse a una eco- guientes síntomas: historia de infecciones
Aunque las alteraciones observadas en el grafía transrectal y a una biopsia prostá- urinarias de repetición, hematuria (macro
estudio de orina elemental y sedimento tica en respuesta a un valor determinado o microscópica), historia de litiasis urina-
de orina (hematuria, proteinuria, piuria, del PSA. ria e insuficiencia renal (en este caso la
cristaluria, glucosuria, etc.) tienen escasa ecografía es el método diagnóstico de elec-
utilidad en el diagnostico de la HPB, sir- ción).
ven para caracterizar los LUTS o para ini- Pruebas de diagnóstico No se recomienda el estudio del tramo su-
ciar un diagnóstico diferencial con otras por imagen de la próstata perior con ecografía o urografía endove-
patologías urológicas o enfermedades con- nosa en un paciente sin otras enfermeda-
comitantes. Estas pruebas sólo se recomiendan en pa- des que tiene una evaluación inicial
cientes seleccionados. La ecografía ha sus- consistente con una obstrucción prostáti-
tituido a la urografía intravenosa que fue ca benigna no complicada.
Función renal
durante décadas una exploración impres- La rentabilidad de la ecografía del apara-
El análisis del nivel sérico de creatinina es cindible en el paciente con patología pros- to urinario superior en la búsqueda de ade-
muy importante en la valoración de los tática. La información que nos aporta res- nocarcinomas renales incidentales en los
LUTS sugestivos de HPB. A pesar de que pecto a la HPB es limitada, y a veces varones mayores de 60 años es muy baja,
sólo del 1% al 14% de los enfermos con confusa, por lo que su relación coste-efi- entre el 0,18% y el 0,56%.
HPB tiene elevada la creatininemia, un cacia es mínima.
diagnóstico precoz de insuficiencia renal La uretrocistografía no tiene valor alguno
Residuo postmiccional
nos aportará importantes beneficios en en el diagnóstico de patología prostática.
comparación con los bajos costes de un Su realización está justificada únicamente Se recomienda la determinación del resi-
simple análisis sanguíneo. ante la sospecha de estenosis uretral. duo postmiccional en la valoración diag-
Exploraciones más complejas como la to- nóstica inicial del paciente y durante la vi-
mografía axial computarizada (TAC) o la gilancia posterior como parámetro de
Antígeno específico prostático
resonancia magnética (RMN) carecen de seguridad. El mejor medio para realizar la
Aunque no se ha demostrado relación en- utilidad en el paciente con síntomas del determinación es con ecografía transab-
tre la HPB y el cáncer de próstata, los pa- tramo urinario inferior, y su realización dominal no invasiva. Debido a la variabi-
cientes en el grupo de edad de HPB tam- dependerá únicamente de la sospecha de lidad intraindividual marcada del volumen
bién tienen riesgo de cáncer de próstata. cáncer en el área pélvica. de orina residual, la prueba debe repetir-
La medición del PSA en suero añadida al se para mejorar su precisión si el primer
tacto rectal aumenta de forma evidente la volumen de orina residual es importante
Ecografia hipogástrica o transrectal
tasa de detección de cáncer de próstata y sugiere un cambio en el plan de trata-
en comparación con el tacto rectal aisla- La ecografía es el método más rápido, me- miento.
do. Se recomienda la determinación del nos invasivo y más económico para estu-
PSA en todos los pacientes con una ex- diar el tracto urinario. Nos aporta infor-
pectativa de vida superior a 10 años y en mación muy significativa sobre la existencia Estudios urodinámicos
los que el diagnóstico de cáncer de prós- de hidronefrosis, cálculos, quistes, tumo-
Flujometría
tata, una vez establecido, podría cambiar res, morfología y tamaño prostático, resi-
el plan terapéutico. duo postmiccional, etc. No obstante el Co- El flujo urinario depende de la presión pro-
Sin embargo, la elevación del PSA ligada mité Internacional de Expertos de la OMS y porcionada a la orina por el detrusor y de
al crecimiento epitelial glandular com- la mayoría de las asociaciones urológicas la resistencia de salida por la uretra. A su
porta un alto porcentaje de falsos positi- no recomiendan la realización de ecogra- vez, la presión del detrusor viene deter-
vos y deben discutirse con el paciente los fía hipogástrica o transrectal para determi- minada por el trabajo desarrollado por éste
riesgos y beneficios de una determinación nar el volumen, forma y tamaño de la prós- y el volumen de orina.
del PSA, incluyendo la posibilidad de re- tata en la evaluación rutinaria de pacientes Se recomienda la medición del índice de
sultados falsos positivos y negativos y las con LUTS sugerentes de obstrucción. flujo urinario en la valoración diagnóstica

39 6043
ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (IV)

inicial y durante o después del tratamien- tiva, sobre todo si hay antecedentes de en- rentabiliza restringiendo sus indicaciones
to para evaluar la respuesta al mismo. De- fermedad neurológica. La identificación de a pacientes con f!ujos bajos en los que por
bido a la naturaleza no invasiva de la prue- contracciones involuntarias, máxime si se sus antecedentes sospechemos una dis-
ba y a su valor clínico debería realizarse asocia con flujos urinarios altos, implica minución de la capacidad contráctil vesi-
antes de iniciar cualquier tipo de trata- peores resultados postoperatorios. La ines- cal (síntomas irritativos o de llenado, an-
miento activo. tabilidad sin obstrucción no debe operar- tecedentes neurológicos y fallo de cirugía
El Qmax es la medida aislada más idónea, se. Por otra parte, ante la presencia de sín- prostática previa).
aunque un Qmax basal bajo no permite tomas irritativos sin inestabilidad vesical El perfil de presión uretral y electromio-
diferenciar la obstrucción de un aumento se debe descartar la existencia de patolo- grafía (EMG) no tienen inicialmente papel
de la contractilidad de la vejiga. gía orgánica subyacente que obligará a la alguno en estos pacientes, lo mismo ocu-
Debido a la gran variabilidad intraindivi- práctica de exploraciones endoscópicas. rre con la videocistouretrografía y video-
dual y a la dependencia del flujo máximo Otro factor de mal pronóstico postopera- ecocistomanometría, pues están limitadas
deben obtenerse al menos dos índices de torio, es la presencia de una acomodación a diagnósticos diferenciales complejos.
flujo, ambos con un volumen ideal supe- disminuida secundaria a la obstrucción44.
rior a 150 ml de orina. Si el paciente no Los parámetros más importantes en un es-
puede conseguir una micción de este vo- tudio presión-flujo son la presión del de- Endoscopia del tramo
lumen a pesar de realizar varios registros, trusor en el flujo máximo y el flujo máxi- urinario inferior
deben considerarse los resultados de mo. El resultado del estudio presión-flujo
Qmax con los volúmenes de micción dis- se expresa como PDet en cmH20 y Qmax La uretrocistoscopia aporta información
ponibles. en ml/s. sobre: el aumento del tamaño prostático
Un flujo máximo disminuido puede ser se- y la presencia de lóbulo medio; la apari-
cundario a un problema obstructivo in- ción de trabéculas, celdas, divertículos y
Pruebas de presión/flujo
fravesical o bien a una disminución de la cálculos vesicales; la coincidencia de tu-
contractilidad vesical. La flujometría no es El estudio presión-flujo es la única explo- mores vesicales, y la valoración del resi-
capaz de diferenciar ambos procesos, por ración que puede diferenciar a los varo- duo postmiccional. Pero todos estos ha-
lo que para realizar el diagnóstico dife- nes con un flujo máximo bajo entre los llazgos se pueden obtener con ecografía.
rencial sería necesario un estudio de pre- que tienen una obstrucción infravesical y Por tanto no se recomienda la evaluación
sión/flujo. Aunque la utilidad de la morfo- los que tienen una disminución de la ca- endoscópica del tramo urinario inferior si
logía de la curva flujométrica es limitada, pacidad contráctil de la vejiga (detrusor hi- el paciente no padece otra enfermedad y
algunas son orientativas de determinadas pocontráctil). Se estima que entre el 20% la valoración inicial es consistente con
patologías. A pesar de las limitaciones des- y el 30% de los pacientes sometidos a RTU HPB.
critas, parece razonable adoptar el crite- prostática no están obstruidos. Se consi- No obstante es recomendable realizar una
rio de que flujos máximos menores de 15 dera que existe obstrucción del tracto uri- endoscopia en el momento de la inter-
ml/seg, con volumen miccional superior a nario inferior cuando la presión máxima vención quirúrgica para determinar si el
150 ml son sugestivos de obstrucción. La del detrusor es superior a 45 cmH2O con paciente es candidato a adenomectomía
flujometría también puede ser utilizada en un flujo máximo inferior a 12 ml/seg. Se por vía abierta, RTU o prostatotomía (in-
la monitorización de la respuesta tera- han elaborado nomogramas de referencia cisión transuretral de próstata), basándo-
péutica44. con las curvas de presión/flujo, siendo los se en el tamaño y forma de la próstata.
más utilizados los de Abrams y Griffiths y Fuera de estas circunstancias su práctica
los de Schaefer44. debe restringirse a establecer diagnósticos
Cistomanometría
El estudio presión-flujo tiene un valor pro- diferenciales con patologías orgánicas que
La cistomanometría se utiliza para cono- bado en la evaluación de pacientes antes sospechamos en el proceso evaluativo del
cer la capacidad vesical, su acomodación de un tratamiento invasivo o cuando es enfermo con HPB: tumor vesical, esclero-
y la presencia de contracciones involun- importante un diagnóstico preciso de la sis cervical, estenosis de uretra, etc.
tarias. La capacidad vesical puede estar obstrucción infravesical.
disminuida en la HPB, habitualmente por Si no se demuestra que un paciente pa-
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la presencia de contracciones no inhibi- dece obstrucción infravesical, aunque ten-
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cirse una disminución de la acomodación sean tratados de la manera adecuada. Di- 3. Garraway WM, Collins GN, Lee RJ. High prevalence of
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