El dependiente sentimental aprende a mentir y a mentirse como una

respuesta adaptativa a sus propios vnculos desadaptativos

(chantajes, desprecios e idealizaciones, enganches emocionales,
craving, juegos de poder, etc.). El pretendido ardid adquiere visos de
realidad creble y, al igual que en el caso de un actor atrapado en la
representacin de su personaje, se adoptan tales mecanismos como
recreacin de vnculos relacionales viciados por el (auto) engao y la
negacin. Baste citar la metfora del Thetrum Mundi en el animal
symbolicum (21) o las controvertidas tesis foucaultianas sobre poder,
control y las tecnologas del yo (22-24). La tentacin de lo irreal es
sugerente, de modo que nos seduce lo posible pero no real, con el
riesgo de caer en un especie de (re)creacin psicolgica
(des)adaptativa de huida de la realidad.
La psicopatologa constituye una forma de ser en el mundo
(Heidegger), una forma de presentarse ante los dems (y ante uno
mismo) en la vida cotidiana (Goffman), una de tantas caras-mscaras
que tenemos. El sujeto queda atrapado en su interpretacin-rol
psicopatolgico. Por extensin, al describir la psicopatologa como
autoengao, sostenemos que el sujeto se engaa a s mismo,
adoptando una ficcin til, en palabras de Sartre.