Pero as fue. Quiz no debera haberlo llamado, porque esto no es de su incumbencia, pero necesito q ue me aconseje. Sobre qu?

La vea como si la tuviera justo delante de l la piel muy plida, el pelo negro, los grandes ojos inocentes inquietos y sus piernas. Sus piernas tambin le vi nieron a la cabeza. No tiene nada que ver con lo que ocurri ayer. Es un poco complicado, y no se me oc urra nadie a quien llamar, y entonces, esta maana he visto ese extenso artculo en el He rald, y he pensado recurrir a usted. Sigo teniendo su tarjeta. Hasta que he ledo el peridico esta maana, no tena ni idea de que era usted el mismo agente que vi en televisin bajando a cuesta s a aquel refugiado de lo alto de un mstil. Y el ngel cantaba! Espere un momento dijo Nestor. Tapando el telfono con la otra mano, se dirigi a sus compaeros : Tengo que atender esta llamada. Vuelvo enseguida. Diciendo eso, se levant del reservado, sali por la puerta y, ya en la acera, dijo por el mvil: Voy a buscar un sitio ms tranquilo. Ah dentro hay mucho ruido. Un sitio era la farmacia CVS, un poco ms abajo de la calle. La entrada eran dos p uertas automticas correderas, de cristal. A unos dos metros haba otras dos, formando una especie de vestbulo. Nestor se apoy en una pared lateral y dijo a Ghislaine Lantier: Siento haberla hecho esperar, pero aqu hablaremos mucho mejor. Mejor no tena nada que ver con el ruido, sin embargo. Mejor se refera al modo en el qu e la llamada de aquella chica lo haba sacado de la indagacin de Hernandez sobre su rela cin con John Smith. Era intil mentir descaradamente, afirmando que ni siquiera lo conoca. Quin sa ba si no lo haba visto alguien con John Smith la noche en la que fueron al Isla de Capri y se qued a dormir en su apartamento? De pronto tuvo una somb