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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE ENTRE RÍOS

Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales – Sede: Concepción del Uruguay


Cátedra: Análisis Institucional
Las Representaciones Sociales Daniel Carbone

LOS PROYECTOS DE AULA1


Por Daniel Carbone

En una escuela podemos encontrar diversos tipos de proyectos, a saber: Proyecto


Educativo Institucional (P.E.I.); Proyecto Curricular Institucional (P.C.I.); Proyectos
Específicos (P.E.) y Proyectos de Aula (P.A.). Aquí nos ocuparemos de estos últimos.

LA ESCUELA LA ESCUELA
QUE TENEMOS QUE QUEREMOS

EVALUACIÓN
DIAGNÓSTICA P.C.I.
VISIÓN

FORTALEZAS

DEBILIDADES
P.A.

P.E.

CUADRO Nº 1

Los Proyectos de Aula tienen por finalidad llevar al aula las decisiones curriculares y se
elaboran con el objetivo de cubrir una demanda, a la vez que ofrecen una solución
específica para un problema concreto que se haya detectado en el Análisis Institucional, o
en la Evaluación Diagnóstica que realice el docente. En principio no se mantienen por
mucho tiempo y es probable que no se repitan, aunque puede ocurrir que se desarrollen
durante todo el ciclo lectivo, con los ajustes que se consideren necesarios, hasta llegar,
incluso, a integrarse como parte de la propuesta curricular.
Otra característica de estos proyectos es su versatilidad, puesto que tienen pocos
elementos fijos, lo que les permite adoptar diferentes formas y modalidades, dependiendo
éstas tanto de la problemática que se intente abordar, como de la creatividad de los
actores involucrados.
También está previsto que, para su ejecución, se integren diferentes personas, aún
cuando no sean personal estable de la escuela. Asumiendo cada uno las tareas y
responsabilidades que le competan. Esta característica es muy importante ya que permite
el aporte de los propios padres y familiares de los alumnos, tanto como de personas de la
comunidad educativa que, por su formación u oficio, puedan brindar conocimientos
específicos requeridos para el normal desenvolvimiento del proyecto en cuestión.
De este modo se favorece el aprendizaje colaborativo, el diálogo y la integración escuela-
sociedad.
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Para abordar este tema, seguiremos, principalmente, las recomendaciones de Cecilia Bixio en “Cómo
construir proyectos en la E.G.B.”, Homo Sapiens, Rosario, 1998.

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“Es importante destacar que los proyectos dan, a su vez, la posibilidad de implementar
estrategias didáctico–metodológicas novedosas que luego, y con los ajustes pertinentes,
pueden pasar a formar parte del trabajo habitual del aula.” (Bixio, Cecilia, 1998)

Una vez adoptada la decisión de elaborar un Proyecto de Aula, conviene trabajar sobre la
base de alguna estructura o diseño predeterminado, que sirva de guía tentativa, es decir
que oriente pero que no encasille, a efectos de lograr la coherencia interna de la
propuesta. Lo que se buscará al respecto será que, tanto el problema que se aborde,
como los objetivos, los contenidos, las actividades y la evaluación, sean lógicamente
coherentes.
A continuación presentamos el Diseño que propone Cecilia Bixio:

EL DISEÑO: (no es una receta, es un instrumento para reelaborar)

El problema ϖ Pertinencia en relación con las características


del grupo de alumnos.
ϖ Antecedentes del problema.
ϖ Amplitud del mismo.
ϖ Relevancia.
Los objetivos ϖ Qué nos proponemos en términos de
aprendizajes a lograr y de aplicaciones a realizar.
Los contenidos: Red articulada ϖ A partir de los cuales vamos a trabajar.
de contenidos conceptuales ϖ A los cuales vamos a arribar.
La bibliografía de consulta ϖ Que seleccionaremos para los alumnos.
ϖ Que utilizaremos los docentes.
Las estrategias en tanto ϖ De abordaje documental.
contenidos procedimentales ϖ De abordaje empírico.
Los recursos ϖ Materiales, humanos y servicios.
El tiempo de desarrollo ϖ Del que podemos disponer.
Estrategias a partir de las ϖ Del docente.
cuales se van a lograr los ϖ De los alumnos.
objetivos:
La distribución de tareas ϖ Dentro y fuera de la escuela.
ϖ Dentro y fuera del horario.
Los criterios y modalidades ϖ De seguimiento.
que utilizaremos ϖ De evaluación.
La participación ϖ Que tendrá cada uno de los involucrados en el
proyecto.
El impacto que esperamos ϖ Procesos.
obtener en términos de ϖ Resultados.
CUADRO Nº 2

No debemos olvidar que se trata sólo de una diseño guía que, al igual que cualquier
diseño, habrá de adecuarse a las condiciones reales en los que se plantea el proyecto
concreto.
Veamos ahora uno por uno los puntos que debemos tener en cuenta:

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¿QUÉ TRATAR EN UN PROYECTO?


Dice Cecilia Bixio que todo proyecto se inicia con un problema. Pero no olvidemos que
estando los Proyectos de Aula en la línea de concreción del Currículo, se trata de
problemas cognitivos, no de cualquier tipo de problema. Aquellos problemas (Debilidades)
que afecten a la escuela, pero que no sean de índole cognitiva, habrán de abordarse con
un Proyecto Específico que, si bien responden a una matriz similar, se diferencian
básicamente de los de aula, en que no incluyen contenidos curriculares ni actividades de
aprendizaje en forma explícita, aun cuando no podemos negar el hecho de que toda
actividad desarrollada en el ámbito escolar conlleva un sentido educativo.
Aclarado este punto, continuemos. Tenemos que ser capaces de transformar el tema del
proyecto en un problema, es decir que debemos problematizarnos al respecto.
Por ejemplo: queremos trabajar con los alumnos sobre la cuestión del SIDA. Este puede
ser un tema interesante para desarrollar un proyecto de aula.
Pero: ¿Por qué hemos elegido este tema?. ¿Qué sabemos al respecto? ¿Para qué nos
puede servir abordar esta temática?
Cuando podamos problematizar la cuestión habremos iniciado el proyecto.
Al tomar como referencia para la elaboración del proyecto un problema, nos
encontramos con que estos proyectos pueden atravesar a las diferentes áreas y pueden
apoyar el trabajo de los llamados contenidos transversales: Educación para la Salud,
Educación para la Paz, Educación Vial, etc.
Podemos elaborar proyectos integrados que aborden una determinada problemática y la
analicen desde diferentes ángulos y con aportes de diferentes áreas, claro que sin perder
de vista a los destinatarios de la propuesta. Si este es el caso conviene tener en cuenta la
propuesta de Tomás Sánchez Iniesta en “La construcción del aprendizaje en el aula” 2 ,
donde aborda la aplicación del enfoque globalizador a la enseñanza.
Por otra parte dado que los Proyectos de Aula son modos posibles de concretar el
Proyecto curricular, no sólo han de estar articulados con los contenidos curriculares,
sino que además, es importante que se articulen con los proyectos específicos del P.E.I.

La selección del problema

A la hora de seleccionar el problema, conviene tener presente algunas condiciones.


Veamos cuáles:

Significatividad psicológica del problema

Sabemos que para aprender algo debemos querer y poder hacerlo. De modo que la
temática seleccionada tiene que, por un lado, resultar interesante para los alumnos y
además, ha de ser significativa desde el punto de vista cognitivo, esto es, que esté al
alcance de las posibilidades cognitivas de aquellos.
De nada o muy poco sirve que tratemos de abarcar los grandes problemas de la
humanidad si a los destinatarios de la propuesta no les interesa o no están en condiciones
de aprenderlos por carecer de los conocimientos previos necesarios.

2
Sánchez Iniesta, Tomás, La construcción del aprendizaje en el aula, Magisterio, Bs. As., 1999.

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Significatividad institucional de la problemática

Cuando se realiza la Evaluación Diagnóstica Institucional para determinar la Escuela que


Tenemos, y se contrasta el resultado con la Visión, surgen las Fortalezas y Debilidades.
Estas últimas constituyen los problemas que la escuela debe solucionar a través de los
Proyectos Específicos, sin olvidar que al hacerlo ayudan a mejorar la calidad de la
educación que se brinda, puesto que la escuela es una Unidad. Como todos los actores
deben comprometerse con la resolución de los problemas de la institución, éstos han ser
tenidos en cuenta como temáticas a abordar en los Proyectos de Aula.

Significación social de la problemática

La escuela ha de trabajar en la construcción de conocimientos socialmente significativos.


En este sentido es importante que el problema que se seleccione tenga algún valor social
destacado, esto es, que esté instalado en el interés de los actores sociales y en especial
de los destinatarios del proyecto.

Actualidad y repercusión del problema

Tanto el punto anterior como éste, son muy importantes de tener en cuenta, puesto que
ayudan a cumplir con el requisito de significatividad psicológica que debe reunir todo
proyecto áulico. Cuando hay una determinada situación social, política, religiosa,
económica, etc., que por diferentes motivos produce un gran impacto en la comunidad,
puede ser utilizada como fuente de un problema para comenzar a construir un proyecto.

Dificultades advertidas en el grupo de alumnos

Las dificultades detectadas en las Evaluaciones, constituyen un buen punto de partida


para Proyectos de Aula, en especial si el docente logra hacer tomar conciencia a los
alumnos de tales problemas. En este caso, y siguiendo a Piaget, podemos decir que el
proyecto surgirá a partir de un conflicto cognitivo, tendrá como objetivos la solución de
dichos problemas y es muy probable que dé pié a seguir trabajando con otras
problemáticas de aprendizaje.

Posibilidades de articulación con otras áreas

Al seleccionar el problema es importante que tengamos en cuenta qué posibilidades


tenemos de articular diferentes áreas. Claro que no debemos forzar tales articulaciones,
sino favorecerlas, de modo que el alumno pueda tomar conciencia de que el conocimiento
científico tiene un carácter sistemático. Este aspecto nos remite al tema de el enfoque
globalizador antes mencionado.

¿CUÁNDO INICIAR UN PROYECTO?

Determinar el momento oportuno para iniciar un Proyecto de Aula, es un punto importante


a tener en cuenta. Hay diferentes aspectos que nos pueden servir de guía para detectar

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cuándo estamos en condiciones óptimas de comenzar con él. Veamos a continuación


algunos de ellos:

Cuando sucede algún hecho particular en el aula o en la escuela

Tomar como referencia la vida escolar para identificar situaciones problemáticas para la
elaboración de proyectos, permite conectar las propuestas áulicas con un contexto más
amplio. Pueden abordarse desde pequeñas discusiones entre compañeros, dificultades
en la resolución de algún ejercicio en clase, hasta problemas que afecten a cualquiera de
las dimensiones de la escuela (Recursos, Estructura, Cultura, etc.). En este caso son
proyectos cuyo contenido se justifica por las dificultades advertidas en el aula; o por la
significatividad institucional de la problemática.

Cuando los alumnos lo demandan porque se han interesado por un tema

Dijimos anteriormente que un punto muy importante a tener en cuenta es la


significatividad psicológica, de modo que cuando notemos que el grupo de alumnos
demuestra un interés particular por algún tema que se esté trabajando en una de las
áreas, podemos aprovechar para problematizarlo, con lo que estaremos dando inicio al
proyecto. En este caso, se trataría de proyectos cuyo contenido se justifica por la
significatividad psicológica del problema.

Cuando los medios de comunicación informan acerca de algún hecho o problema

Mucho se ha debatido acerca de la relación Escuela – Medios Masivos de Comunicación.


No nos interesa ahora incluirnos en este debate, sino destacar el hecho de que nuestros
alumnos suelen pasar muchas horas frente a la televisión, por ejemplo. Este fenómeno
determinaría que la mayoría tiene información respecto a muchos temas de actualidad.
Utilizar ésto para interesar al grupo por un tema, comenzar a debatir y discutirlo, nos
colocaría en la primera etapa de planteo del problema. Es de importancia pedagógica que
sepamos encontrar los aspectos del tema que permiten transformar el interés
circunstancial en contenido sustantivo. Aquí estaríamos en presencia de proyectos cuyo
contenido se justifica por la actualidad y repercusión del problema.

Cuando se conmemora una fecha especial

Las Efemérides pueden constituirse en un buen disparador para iniciar un debate de


donde surja un proyecto. Por ejemplo: el Día de la Independencia, el Día Internacional de
la Mujer, de los Derechos del Niño, el Día de la Constitución Nacional etc. En este caso
son proyectos cuyo contenido se justifica por la significación social de la problemática. Si
bien el día en que se conmemora puede ser el momento para iniciarlo o finalizarlo, la
duración del mismo dependerá del interés que mantengan los alumnos sobre el tema y de
las posibles derivaciones que se hayan realizado.

Cuando se realizan reuniones de docentes

El momento de reuniones de equipos de ciclo o de personal no sólo puede ser fructífero


para que cada docente piense problemas interesantes para trabajar con sus alumnos,
sino que incluso puede ser la ocasión para comenzar un proyecto articulado con otro u

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otros docentes. Éstos son proyectos cuyo contenido se justifica por la posibilidad de
articulación con otras áreas, años, ciclos, etc.

¿CÓMO ELABORAR UN PROYECTO?


Cuando hayamos analizado y comprendido los puntos anteriores, es probable que nos
sigamos preguntando: ¿cómo lo hacemos? Para la realización de un proyecto, tenemos
que atender al Diseño y a la metodología.
Más arriba presentamos un Diseño a manera de guía y dijimos que no se trata de algo
rígido, sino que puede reelaborarse, adaptándolo a las circunstancias concretas en que se
implemente el proyecto. Respecto a la metodología a utilizar, hay un aspecto muy
importante a tener en cuenta y es la participación de los alumnos en el proyecto. Si
dijimos que la significatividad psicológica es un requisito esencial para producir
aprendizajes significativos, nos daremos cuenta que considerar el modo en que se
manifestará la participación de los alumnos en el proyecto, no es de poca importancia.
Aquí entendemos a la participación como el poder compartido en la toma de decisiones.
Esa participación puede darse de tres maneras:

• Espontánea o voluntaria: los alumnos proponen los


temas para el proyecto.
• Inducida: El docente la promueve, preguntando,
sugiriendo.
• Obligatoria: El docente impone la participación, indicando, por ejemplo,
que todos deben elaborar propuestas de temas o problemas para trabajar en
proyectos de aula.

Una vez acordada la forma en que se tomarán las decisiones, hay que iniciar el camino.
Así que veamos ahora algunas sugerencias para

La metodología

Recorte del problema: Seleccionar y acotar el problema es, quizás, el punto más difícil o,
al menos, el que más detenidamente debe considerarse, puesto que constituye el punto
de partida en el que se apoyarán todas las demás decisiones. Por ejemplo, a partir de la
problemática proponemos los objetivos, seleccionamos los contenidos, planteamos
actividades, etc.
Muchas veces el fracaso de un proyecto se debe a que, impelidos por el entusiasmo que
generó inicialmente la problemática abordada, nos embarcamos en una empresa que nos
supera y esto suele dejar una sensación de frustración a docentes y alumnos, que suele
hacer perder la confianza en este modo de abordar el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Cuando el problema que moviliza al grupo es muy amplio y no se quiere hacer recortes
muy limitados, puede adoptarse la estrategia de abordarlo por subtemas. Por ejemplo, si
deseamos trabajar sobre Las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TICs),
podemos hacer la siguiente diferenciación: Los avances tecnológicos en Informática en la
segunda mitad del Siglo XX, Las TICs y la Globalización, Las TICs y la Educación en la
Argentina en la actualidad , etc. Como cada uno de estos aspectos, a su vez, puede

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resultar amplio, debe tenerse en cuenta que a mayor recorte se logrará mayor
profundidad en el tratamiento del problema.

Planteo del problema: Una vez identificado el problema, conviene que pidamos a nuestros
alumnos que escriban lo que se saben al respecto. Identificar qué sabe el grupo respecto
de la problemática seleccionada, es de suma importancia puesto que nos orientará
respecto de los siguientes pasos, a la vez que pone de manifiesto el interés que despierta
en ellos este tema.

Los objetivos: Formular los objetivos con claridad es de vital importancia para asegurar el
éxito del proyecto. No es necesario una larga lista, basta que dos o tres objetivos estén
bien planteados, es decir con que sean posibles de cumplir y a su vez, ricos en su
potencialidad cognitiva. Podemos además distinguir entre Objetivos Generales y
Específicos.
Por ejemplo, si el tema es “Las TICs y la Globalización”, puede que nuestro Objetivo
General sea:
• Conocer cómo influyeron las TICs en el proceso de Globalización Cultural y
Económica que se produjo hacia fines del Siglo XX.

Como Objetivos Específicos, podemos formular los siguientes:


• Identificar cuáles fueron las principales TICs que operaron en este proceso.
• Conocer el impacto que produjeron las TICs en la Economía y en la Educación en
los países desarrollados y en nuestro país.
• Valorar la importancia de la adecuada capacitación de los ciudadanos de nuestro
país en el manejo de las TICs para acceder a las ventajas que éstas ofrecen y
evitar sus riesgos.

Contenidos conceptuales comprendidos: Para el abordaje del Problema y el logro de los


objetivos debemos recurrir a una serie de contenidos, tanto conceptuales, como
procedimentales y actitudinales. Necesitamos, entonces, elaborar un marco o encuadre
conceptual del problema. Conviene construir una red articulada de conceptos que nos
servirán de apoyo para trabajar. Las Redes Conceptuales tienen las ventajas de que no
sólo nos ponen de manifiesto los conceptos que necesitamos trabajar para el logro de los
objetivos, sino que además, nos muestran las relaciones posibles que podemos
establecer entre ellos, lo cual nos facilita el abordaje de algunos contenidos
procedimentales. Esto Implica la lectura de bibliografía especializada, discusión y
realización de síntesis, cuadros sinópticos, hasta la construcción final de redes
conceptuales.

Actividades a realizar: Tanto el problema seleccionado como los objetivos formulados


determinarán las actividades que vayamos a realizar. Cuando en el cuadro de “Diseño”
diferenciamos las estrategias de abordaje empírico y las de abordaje documental, lo
hacemos para indicar que las actividades se organizarán según se trate de una
problemática que puede trabajarse en los dos niveles o sólo en uno.
Puesto que estas estrategias implican contenidos procedimentales y, por lo tanto,
significan procesos de aprendizaje significativos, no debemos olvidarnos de ello y sólo
hacer hincapié en los contenidos conceptuales, recordemos que las propuestas áulicas
han de considerar a los contenidos en sentido amplio, es decir: Conceptuales,
Procedimentales y Actitudinales.

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Cuando el proyecto se extiende a lo largo de un período considerable de tiempo e incluye


variadas actividades, es conveniente sólo nombrarlas en el Diseño general del proyecto y
planificarlas de a una cada vez que vayamos a realizarlas y con alguna anticipación. Más
abajo en el cuadro Nº 3 mostramos una matriz que puede servir de guía para la
planificación de actividades. Éste diseño, al igual que cualquiera, puede ser adaptado
según las circunstancias y la intencionalidad de quien lo implemente.

Cronograma: En este apartado no sólo consignaremos el tiempo total de duración del


proyecto, también indicaremos en qué momento del año realizaremos cada actividad.
Esto se realiza a efectos de organizar la tarea y facilitar el monitoreo de la marcha del
proyecto respecto del logro de los objetivos propuestos en el tiempo acordado. También
resulta de utilidad, dejar constancia de quién será el responsable de cada actividad, en
especial si en el proyecto intervienen varias personas.

Cierre del proyecto: Cerrar los proyectos con alguna actividad de integración o síntesis,
que permita darle unidad de sentido a lo realizado hasta el momento, no sólo es
conveniente desde el punto de vista del aprendizaje, sino que además permite que los
alumnos puedan advertir su trabajo como un todo que se traduce en un producto
concreto.
Si a su vez, a este cierre se le otorga una alta significatividad social compartiéndolo con la
comunidad educativa (familiares, alumnos de otros cursos e incluso otras escuelas,
docentes, etc.) se estará ayudando a vivenciar las actividades escolares como
socialmente significativas. “De lo contrario, la escuela suele quedarse en un “como si” y
los alumnos no le reconocen valor a las tareas que allí se desarrollan” (Bixio, Cecilia, Op.
Cit.).

Nuevos problemas y preguntas que se abren: Que los alumnos puedan percibir la
construcción del conocimiento como una tarea que no tiene fin, que es posible darle
continuidad al problema que se trabajó, en una secuencia que puede abarcar incluso
diferentes años, que todo proyecto puede abrirse hacia otras áreas o especializarlo en un
aspecto particular, es un aspecto que no debe descuidarse, por el contrario es deseable
que se lo trabaje explícitamente en cada proyecto.

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Planificación de Actividades

Unidad de Objetivos Contenidos Actividades y Tiempo Recursos o Producto o


trabajo modalidad estimado insumos resultado
operativa esperado
Propiciar la Conceptuales: Proyección del Vídeo
transferencia Valores: vídeo 1era. 20´ cassette.
de Compartidos, Parte. Reproductora. Que el grupo
valoraciones, controvertidos, TV. tome
a partir de la contravalores Entrega y Cuestionario conciencia de la
observación (Autonomía – resolución del 20´ guía importancia del
del vídeo Honradez - cuestionario Pizarrón diálogo racional
Dilemas “¡Qué difícil Responsabilidad – guía . Tiza en la resolución
Morales se me Franqueza - Debate en Borrador de dilemas
hace!”, a Solidaridad - pequeños morales y
efectos de Tolerancia - grupos de pueda
significar sus Respeto – discusión comprometerse,
propias Honestidad – Puesta en con postura
vivencias Justicia – común 20´ valorativa, en
frente a Pluralismo) situaciones
situaciones Dilemas Morales. Proyección del conflictivas en
dilemáticas. Diálogo Racional. vídeo 2da. 10´ las que está en
Procedimentales: Parte. juego la toma
Estimular la Observación del de decisiones.
reflexión vídeo.
moral del Debate grupal Reflexión
grupo, a según guía grupal y
través del propuesta. propuesta de
diálogo Diálogo racional. trabajo para la 10´
racional, Reflexión crítica próxima clase.
para de las posiciones
favorecer la ante los valores.
toma de Puesta en común.
conciencia Actitudinales:
de sus Postura crítica
posiciones ante el mensaje
ante los del vídeo.
valores. Respeto y escucha
de las opiniones
del otro.

CUADRO Nº 3

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