El da 31 de julio, en Uruguay, se aprob el proyecto de Ley de Regulacin de la marihuana en la Cmara de Representantes.

Antes a esta ley ya se haban dado pasos importantes en el marco de polticas sociales en Uruguay. Primero fue la despenalizacin del aborto, luego las leyes de respeto a la diversidad sexual y ahora una ley que regula el cultivo y venta de marihuana en la poblacin. Utilizamos este trmino poltica social porque eso es esta nueva ley que dio la repblica oriental: una poltica por un derecho, una poltica que permita realizar lo que ya sucede en una sociedad de manera organizada y amparada y regulada por el estado. As sucedi con el aborto, que hoy en da los estudios demuestran que no ha aumentado el nmero de abortos, y que nadie ha muerto (desde que se aprob la ley) por realizarlo clandestinamente; como tambin con la ley de matrimonio igualitario, la cual hizo llegar el debate a la sociedad nuevamente, y cada vez est ms cerca de entenderse que hay un sistema que explota a las minoras, y los homosexuales son una de ellas. Hacia un avance as va esta nueva ley, a evitar que haya personas que se aprovechen de que una droga es ilegal para lucrar muchsimo dinero con ellas, por un lado, y por otro desestigmatizar la droga para que se pueda realizar un consumo conciente de la misma. El proyecto de ley acumula las demandas del conjunto de organizaciones sociales, y cuenta con el apoyo de la Coordinadora Nacional por la Regulacin del Cannabis. La sancin de esta ley lleva detrs algunos aos de trabajo y el surgimiento a su paso de nuevas organizaciones a lo largo de todo el pas. Hoy Uruguay se planta por la regulacin del cannabis con un movimiento social fortalecido. De este lado del Ro de la Plata, seremos capaces como sociedad de reflejar las inquietudes populares en leyes y de esta manera regular el ejercicio con tutela del Estado, evitando as, la comercializacin clandestina, la crimilizacin del usuario (consumidor) y todas las consecuencias que esto significa? Desde el Sudaca, creemos y sostenemos que en nuestra sociedad, el proceso est en marcha. Y sostenemos que una de las maneras para que esto suceda, es, terminar con la hipocresa, con las estigmatizaciones, y los mitos en relacin con el cultivo y consumo de Cannabis. Una poltica represiva y de prohibicin, solo lleva al fracaso y a la clandestinidad.