Discover millions of ebooks, audiobooks, and so much more with a free trial

Only $11.99/month after trial. Cancel anytime.

Finanzas personales en prácticos sobrecitos: 2a edición
Finanzas personales en prácticos sobrecitos: 2a edición
Finanzas personales en prácticos sobrecitos: 2a edición
Ebook265 pages3 hours

Finanzas personales en prácticos sobrecitos: 2a edición

Rating: 5 out of 5 stars

5/5

()

Read preview

About this ebook

¿Tienes dificultades para llegar a fin de mes? ¿vives de préstamo en préstamo? ¿tiras de la tarjeta de crédito cuando surge algún imprevisto? ¿sientes culpa cuando vuelves de tus vacaciones o después de darte algún gusto? ¿te sientes esclavo de tu trabajo? ¿crees que la única manera de solucionar tus problemas financieros sería ganando la lotería o consiguiendo un aumento de sueldo? ¿has intentado ahorrar miles de veces sin éxito? ¿crees que las inversiones son solo para la gente que tiene dinero de sobra? ¿te suena de algo eso de la libertad financiera y los ingresos pasivos, pero piensas que eso no es para las personas normales y corrientes?

Hay otra manera.

Alejandra P. Rodríguez, una persona normal, con un sueldo normal como tú, te enseñará cómo se ha puesto en camino hacia la independencia financiera y cómo tú también puedes hacerlo. Te mostrará cómo cualquier persona, por poco que sepa de números, puede y debe hacerse cargo de sus propias finanzas. A través de este práctico libro y los ejercicios que te propone conseguirás:

- Descubrir cómo influyen tus emociones en tus finanzas y porqué debes darles la importancia que se merecen
- Establecer tus objetivos financieros
- Armar tu presupuesto
- Organizar tus finanzas con el sistema de sobres para que siempre tengas dinero disponible cuando lo necesites
- Crear un plan para eliminar las deudas
- Perder el miedo a invertir

Así como cada uno de nosotros es una persona única e irrepetible, nuestra forma de ganar, administrar y gastar nuestro dinero también lo es, porque nuestras prioridades y valores no son los mismos, al final del día tú eres quien decide sobre tu dinero. Este libro te guiará en tu viaje hacia la libertad financiera y te dará las pautas para que puedas crear tu propio plan financiero, tu mapa de ruta, el que funcione para ti, para tu familia y para tu estilo de vida.

LanguageEspañol
Release dateDec 27, 2017
ISBN9781370199907
Finanzas personales en prácticos sobrecitos: 2a edición
Author

Alejandra P. Rodríguez

Alejandra P. Rodríguez nació en Buenos Aires, Argentina y se ha dedicado a la docencia y a la aviación gran parte de su vida. Aventurera y viajera, a los 27 años se mudó a Palma de Mallorca, España, donde reside actualmente. Práctica y creativa, enamorada de los artículos de papelería y loca por la organización, al no encontrar artículos que fueran prácticos y bonitos a la vez, comenzó a fabricar sus propias agendas, organizadores de viaje, sistemas de sobres y agendas financieras para uso personal. Al notar interés entre amigos y familiares por sus creaciones y su método de organización financiera, comenzó a desarrollar estos productos para su comercialización creando Raitit. Conciente de la falta de educación financiera generalizada ha desarrollado su método adaptando el tradicional sistema de sobres de efectivo a los tiempos que corren dando origen a su primer libro sobre finanzas personales.

Related to Finanzas personales en prácticos sobrecitos

Related ebooks

Personal Finance For You

View More

Related articles

Reviews for Finanzas personales en prácticos sobrecitos

Rating: 4.8 out of 5 stars
5/5

10 ratings2 reviews

What did you think?

Tap to rate

Review must be at least 10 words

  • Rating: 5 out of 5 stars
    5/5
    Me encantó! El libro es super práctico y contiene ejercicios simples de hacer. Recomiendo totalmente. Gracias!
  • Rating: 5 out of 5 stars
    5/5
    Me ha gustado mucho. Claro, sencillo, muy bien explicado y con muchas ideas que poner en práctica

Book preview

Finanzas personales en prácticos sobrecitos - Alejandra P. Rodríguez

Finanzas Personales en prácticos sobrecitos - 2da edición

Alejandra P. Rodríguez

Smashwords Edition Copyright © 2018 Alejandra P. Rodríguez

(Reservados todos los derechos)

Diseño y fotografía de cubierta, edición, gráficos, ilustraciones y maquetación por Alejandra P. Rodríguez

Reservados todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación incluido el diseño de la cubierta, puede ser reproducida, almacenada, transmitida, o utilizada en manera alguna por ningún medio, ya sea electrónico, químico, mecánico, óptico, de grabación o electrográfico, sin el previo consentimiento por escrito del autor.

Dirijase a

www.raitit.es

si necesita autorización para reproducir algún fragmento de esta obra.

Dedico este libro a todas aquellas personas que aportaron valor a mi vida, ya sea con sus experiencias, sus conocimientos, su apoyo, su amistad o su amor incondicional.

índice

Finanzas Personales en prácticos sobrecitos - 2da edición

índice

Prólogo

Mi historia

1ªParte: Darse cuenta

Cambiar de filosofía

Ser - Hacer - Tener

Connotación negativa

Egoísmo y autoestima

Envidia y comparaciones

Zona de confort

Ejercicio nº1: Mis motivos

¿Qué diferencia a un rico de un pobre?

Rompe tus paradigmas

Gratificación postergada

Emoción vs Razón

Balance y equilibrio

Estrategia

Si X entonces Y

Etiquetas

Ejercicio nº2: Rétate

Tiempo

Educación y comunicación

Nivel de dificultad

Resumen de la primera parte

2ª Parte: Acción

¿Sabes a dónde vas?

Etapa I: Preparativos

Conceptos básicos

Mini glosario financiero (solo para ir empezando)

Mapa de ruta

Percepción

Ejercicio nº3: Percepción - prueba diagnóstico

A dónde vamos

Ejercicio nº4: Objetivo financiero

El secreto

Ejercicio nº5: Tu gran porqué

Dónde estamos

Ejercicio nº6: Patrimonio neto

Ejercicio nº7: Inventario

Cómo trazar el camino

Ejercicio nº8: Fija tus metas

Dirección - Modelos de flujo de dinero

Ejercicio nº9: Ingresos vs. Egresos - Flujo de dinero

Combustible

Registro de gastos

Digitales:

Ejercicio nº10: Registro de gastos

Revisión periódica y puesta a punto

Ejercicio nº11: Día D 1ª etapa

Resumen etapa I

Etapa II: Organización

Dinero en efectivo, nuestro gran aliado

Sistema de sobres

Problemas y soluciones

Sobres mensuales y semanales

Situaciones incómodas

Cantidad de semanas en el mes

Monedas

Compras al paso

Categorías

Importancia de algunas categorías

Categoría Otros

Categoría Ocio o diversión

Categoría Educación

Categoría Dar

Ejercicio nº 12: Determina tus categorías

Orden y estética

Ejercicio nº 13: Monta tu propio sistema de sobres

Cómo estimar el presupuesto

Qué son los gastos hormiga

Calendario de pagos

Ejercicio nº 14: Crea tu calendario de pagos

Cómo calcular el presupuesto

Ejercicio nº15: Arma tu presupuesto

Resumen etapa II

Etapa III: Crea tu plan

Pisa el acelerador

Ahorro

Cómo ahorrar con bajos ingresos

Tipos de ahorro

Ahorros para disfrutar

Ahorros para prevenir

Fondo de emergencias

Obsolescencia

Distribución de ahorros

Efecto calesita

Ejercicio nº16: Distribución de ahorros

Inversión

Interés compuesto

Interés compuesto mental

La bolsa

¿Y si cae la bolsa?

Tiempo y rentabilidad

Ejercicio nº17: Inversión

Deudas

Efecto bola de nieve

Presupuesta tus deudas

¿Invierto o pago mis deudas?

Ejercicio nº18: Plan para eliminar deudas

Creatividad

Cómo reducir gastos

La compra

Electricidad

Gastos hormiga

Gasolina

Seguros y servicios

Ejercicio nº 19: Plan para reducir gastos

Diversificación de ingresos

Ejercicio nº 20: Plan para aumentar ingresos

Prorrateos

Ley de Parkinson

Ejercicio nº 21: Prorrateos

Presupuesto anual

Ejercicio nº 22: Presupuesto 0

Distribución de ingresos

Ejercicio nº 23:Check list día D

Ejercicio nº 24: Plan de ahorro e inversión

Resumen etapa III

Sigue tu camino

Sobre el autor

Soy un Raiter

Prólogo

Cada uno de nosotros es particularmente bueno en algo. Todos tenemos alguna virtud, un don especial que nos identifica, nos hace únicos, ese algo que nos da satisfacción y que nos hace brillar. Imagínate un mundo en el que todas las personas pudieran compartir con el resto ese don.

Desgraciadamente no siempre podemos dedicarnos a hacer lo que nos gusta y muchas veces terminamos haciendo cosas que ni nos gustan ni nos satisfacen porque necesitamos el dinero para subsistir. La rutina diaria nos arrastra y es muy fácil dejarse llevar, pero cambiar es posible, no necesariamente fácil, pero es posible y depende de nosotros mucho más de lo que creemos.

La educación financiera es un punto muy importante en nuestro camino hacia la realización personal ya que consiguiendo independencia financiera podremos quitarnos los miedos de encima para vivir libres haciendo lo que nos gusta y compartiendo lo mejor de nosotros mismos.

Aunque los números no sean tu fuerte, hay algunos números que no puedes evitar, sobre todo los que vienen acompañados de un símbolo monetario. Vivimos en una sociedad donde la moneda de cambio es el dinero (valga la redundancia), por lo tanto tenemos que entender algunos conceptos básicos y debemos aprender cómo ganarlo, cómo guardarlo, cómo gastarlo y cómo invertirlo para lograr que el dinero nos sirva a nosotros en vez de terminar siendo su esclavo.

En general la educación financiera que tenemos la mayoría de nosotros la fuimos aprendiendo como pudimos y de dónde pudimos y basta con mirar a nuestro alrededor para ver que no somos muy buenos gestionando y administrando nuestro propio dinero. Seguimos el modelo que sigue la mayoría, o bien hacemos lo que hacían nuestros padres, si creemos que lo que hacían les funcionaba, o hacemos todo lo contrario, si pensamos que no son buenos gestionando su dinero. Lo que no nos damos cuenta es que el mundo ha cambiado, y las reglas del juego ya no son las mismas. Lo que era bueno o malo antes, no necesariamente lo sigue siendo ahora. Pero no solo nos guiamos por las experiencias de nuestros padres, también tomamos como referencia lo que hace la gente que nos rodea e imitamos muchas de sus conductas. Gastamos todo lo que ganamos e incluso más, comprando cosas que no siempre necesitamos con dinero que no tenemos y así nos endeudamos y entramos en la famosa rueda de hámster de la cual es tan difícil salir. Difícil, no imposible, siempre se puede mejorar, y para hacerlo necesitamos aprender, entender y saber administrar, tomar las riendas para ir hacia dónde queremos ir en vez de dejarnos llevar por la corriente.

Si estás leyendo esto vas por buen camino, no porque yo te vaya a dar la fórmula mágica que solucione todos tus problemas financieros, sino porque quiere decir que ya estás haciendo algo para cambiar tú situación y ese ya es un gran paso. Tú eres quien decide sobre tu dinero, puedes escuchar consejos o seguir distintos métodos, pero así como cada uno de nosotros es una persona única e irrepetible, nuestra forma de ganar, administrar y gastar nuestro dinero también lo es, porque nuestras situaciones y circunstancias son distintas, nuestras prioridades y valores no son los mismos, por esto nadie podrá darte un método perfecto.

En este libro compartiré contigo mi experiencia personal y las cosas que he aprendido y espero que te sirvan como guía, o inspiración para que tú crees tu propio plan, el que funcione para ti, para tu familia y para tu estilo de vida.

Verás el proceso que seguí en la búsqueda de un sistema económico personal que pudiera poner en práctica y que realmente funcionara. Encontrarás los problemas que me fui encontrando por el camino y las ideas que se me ocurrieron para solucionarlos, aprenderás conceptos financieros básicos que necesitas entender para poder organizar tu dinero, descubrirás cómo has estado administrando el dinero hasta ahora y los cambios que deberás hacer para mejorar, aprenderás cómo hacer para fijar tus objetivos financieros, descubrirás cómo influye tu parte emocional en tus decisiones económicas y con los ejercicios que te propongo, serás capaz de hacer tus propios cálculos y podrás tomar el control de tu dinero, descubrirás a dónde quieres ir, en dónde estás ahora y cómo trazar el camino entre ambos puntos, verás en detalle cómo funciona el sistema de sobres de dinero y cuál es la mejor manera de ponerlo en práctica, aprenderás a crear tu presupuesto y a organizar tus finanzas, ganarás tranquilidad y seguridad, descubrirás formas de hacer crecer tu dinero quitándote el miedo a invertir y estarás en camino hacia tu independencia financiera.

En mi búsqueda por la superación personal he leído a muchos expertos y no expertos y he aprendido mucho de ellos, pero no encontré ninguno con el que me sintiera identificada, porque casi todas las personas que escriben libros son las que ya han llegado, y si bien te cuentan brevemente como empezaron, la distancia entre nuestras realidades era tan abismal que no me creía capaz de seguir sus pasos. Aunque no siempre estuve de acuerdo con todo lo que decían estos expertos, de todos y cada uno de ellos he aprendido algo, y eso fue lo que hizo que me decidiera a escribir este libro. Yo soy una persona normal, que ha empezado este camino con un sueldo normal y corriente, y si yo puedo administrar mi dinero, vivir sin deudas, ahorrar, invertir, y generar ingresos pasivos, cualquiera puede hacerlo. Cada uno de nosotros tiene mucho para dar y nuestras experiencias personales ya sean positivas o negativas, pueden afectar a otras personas. Hoy vengo a compartir mi historia y lo que fui aprendiendo por el camino contigo, y espero que, al ser mi realidad más cercana a la tuya, mis aciertos y desaciertos te sirvan como motivación e inspiración para que encuentres tu propio camino.

Mi deseo es que mi humilde aporte te ayude y que tú también puedas brillar y puedas a su vez devolverle a la sociedad haciendo tu humilde aporte.

Pay it foward!

Mi historia

Voy a empezar por contarte mi historia, la financiera.

Mi primer recuerdo monetario, por así llamarlo, se remonta a mi tierna infancia, yo tendría unos tres años aproximadamente. Recuerdo que mi padre cada semana nos daba a mi hermana y a mí, diez monedas de diez céntimos, cada semana esperábamos ansiosas la paga que nos duraba en los bolsillos lo que tardábamos en llegar a la tienda de chuches más cercana. Mi padre se esmeró en enseñarnos la importancia del ahorro y nos hizo ver que podíamos comprar cosas más caras si en vez de gastarnos todas las monedas juntas ahorrábamos algunas cada semana. Así fue como nos convertimos en ahorradoras desde muy pequeñas.

También recuerdo, por esa misma época, mi primera desilusión con el dinero, la primera vez que me sentí estafada y traicionada y lo peor de todo, el que me estafaba ¡era mi propio padre! Sí, desgraciadamente un día mi padre se quedó sin cambio y desconociendo en absoluto la psicología evolutiva de un niño de tres años, no tuvo mejor idea que darme dos monedas de cincuenta en vez de diez monedas de diez. Recuerdo la angustia y el llanto y a mi padre intentando desesperadamente y por todos los medios explicarme que era la misma cantidad de dinero, pero ¡cómo iba a ser la misma cantidad si estaba viendo con mis propios ojos que eran menos monedas! Él insistía en que eran solo dos monedas pero eran más grandes y valían más, me puso ejemplos, me hizo dibujitos explicativos pero a pesar de sus mejores intentos no tuvo más remedio que salir a la calle a buscar quien le diera cambio de cincuenta céntimos.

En casa, mis padres administraban de manera muy diferente el dinero, eran polos opuestos. Él conservador, ahorrador, siempre tenía todo bajo control, y ella dadivosa, soñadora e impulsiva, si se pasaba con sus gastos luego se restringía al máximo para compensarlo. De mi padre aprendí a ahorrar, a comparar precios, y a tomar decisiones de forma analítica. Y mi madre me enseñó que también hay que vivir la vida, que hay que soñar en grande, comprar siempre cosas de calidad y luchar por lo que uno quiere. Por suerte trabajaban los dos, por lo que cada uno podía respaldar monetariamente sus decisiones, aunque debo admitir que solían discutir a menudo por sus diferencias de modelos económicos.

Al cumplir los 14 años mi padre nos abrió una cuenta bancaria a mi hermana y otra a mí, y cada mes nos hacía una transferencia desde su cuenta con el importe mensual de nuestra paga. Éramos libres de administrarla como quisiéramos, la única condición era que si se acababa el dinero nos teníamos que esperar hasta la siguiente paga, no valía llorar o patalear para conseguir más. Lo mejor del sistema bancario era que teníamos una tarjeta de débito y debíamos sacar nuestro dinero de los cajeros automáticos, como la gente grande, eso me hacía sentir muy importante y responsable. Mientras mis amigas iban a pedir dinero a mamá o a papá para comprar sus cosas yo compraba con mi tarjeta de débito y pagaba con mi dinero.

A los 15 años estaba esperando impaciente cumplir los 16, porque esa era la edad mínima para poder trabajar. El sistema de la paga estaba bien, pero yo estaba creciendo y mis gastos también. Ahora salía con mis amigas, íbamos al cine o a comer hamburguesas y jugar a los videojuegos, había ropa y CD's que me quería comprar y la paga no era suficiente. Intenté gestionar un aumento de sueldo en varias ocasiones, pero sin éxito, aunque sí logré que me dieran algunos extras de vez en cuando, siempre previa justificación: papá, mamá, ¿me das dinero para...? y sinceramente no me gustaba para nada, a esas alturas, cuando toda mi vida había sido económicamente independiente, tener que dar explicaciones de lo que hacía con mi dinero.

Finalmente llegaron los deseados 16 y lo primero que hice fue presentarme en Mc Donald's para rellenar una solicitud de empleo. Un par de días más tarde estaba trabajando y esta vez sí, generando MI propio dinero. Se cobraba por quincena, lo cual era un lujo para mí que estaba acostumbrada a la paga mensual de mis padres, que por cierto no dejaron de darme. Me convertí en millonaria de la noche a la mañana, con solo ir a trabajar 4 horitas al salir del colegio mi paga se había quintuplicado, no sabía en qué gastarme todo ese dinero.

Enseguida se me pasó la euforia y después de gastarme hasta el último céntimo de mis primeras dos pagas, retomé el hábito del ahorro. Decidí que el dinero que ganara con mi sueldo sería para gastar y la paga que aún me daban mis padres la ahorraría entera, y así lo hice hasta que cumplí la mayoría de edad y se me retiró la paga de mis padres. Para entonces había ahorrado lo que para mí era una cantidad importante de dinero, eso me hizo ver que ahorrar era bueno ya que me permitía comprar cosas caras sin necesidad de endeudarme, entonces decidí hacer un esfuerzo y un reajuste en mis gastos para poder continuar ahorrando la misma cantidad de dinero que me daban mis padres cada mes, solo que, a partir de ese momento, el dinero saldría de mi propio sueldo.

Así continué mi vida adulta, trabajando y ahorrando, y aunque tenía y sigo teniendo tarjetas de crédito, pocas veces me he endeudado. El sistema parecía funcionar y yo corría con ventaja ya que tenía en mi haber una cantidad de ahorros suficiente como para no tener que endeudarme, cosa que mucha gente de mi edad no tenía y veía a mis amigas comprar con sus tarjetas de crédito y después las escuchaba lamentarse cuando llegaba la hora de pagarlas, ya que si pagaban la tarjeta luego el dinero no alcanzaba hasta fin de mes y tenían que volver a usar la tarjeta. Al compararme con la gente que me rodeaba me sentía superada, yo no tenía esos problemas, yo contaba con mis ahorros.

Al dejar la casa de mis padres me volví aún más conservadora y ahorradora. No solo había cambiado de casa, también había cambiado de país y de continente, me había marchado con lo que cabe en una maleta y mis ahorros, hacia un destino incierto, a empezar de cero sin ningún tipo de apoyo en

Enjoying the preview?
Page 1 of 1